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La planta de la cubierta de la Villa Stein-de Monzie tiene una semejanza con la composición de la obra cubista sintética, "Guitarra y frutera" de 1921, del artista plástico Juan Gris. A
partir de esta posible inspiración, se pude suponer que Le Corbusier tenía una mayor afinidad con el pintor.Por esto podemos decir que, Le Corbusier empleaba en la elaboración de
sus proyectos el mismo procedimiento que Gris empleaba en la organización de sus pinturas: partiendo de lo general a lo particular, convertía en concreto lo abstracto,
transformando los elementos del intelecto, de la imaginación. Así partía de una abstracción para llegar a un resultado real. En el caso del pintor, su imaginación se concretó en un
lienzo. Este lienzo puede haber generado otras abstracciones que proporcionaron semejanzas en la composición de la cubierta de la Villa Stein-de Monzie. Pero la retícula, los ejes,
el ángulo recto, son los principales elementos abstractos que dirigieron las plantas, de la casa y del jardín, que posteriormente se materializan como obra concreta.
Al descomponer las formas de Les Terrasses podemos ver un diseño axonométrico significa captar rápidamente cómo cada uno de los niveles es diferente de los demás y cómo los
planos reales y los imaginados —los irreales—, se funden con objetos curvos para formar el equivalente a una naturaleza muerta purista, aunque en este caso habitable. Esta
abstracción puede ser apreciada en la obra de Le Corbusier, "Naturaleza muerta con una pila de platos y un libro" de 1920.
El contraste de las formas primarias y macizas con el volumen puro del fondo y de todos entre sí, se traduce en la inmediata identificación de los diferentes elementos. La
distribución prueba nuevamente que Le Corbusier creía en que la yuxtaposición de las formas primarias desempeña un papel esencial en la experiencia sensorial de la arquitectura.