Está en la página 1de 2

Universidad Nacional de Colombia

Maestría en Psicoanálisis Subjetividad y Cultura.


Seminario: Real simbólico e imaginario
Christiam André Bautista Gutiérrez
Relatoría
19/04/18

En un segundo momento, el seminario se centró principalmente sobre la discusión y


desarrollo del texto de Lacan, función creadora de la palabra de 1954, sobre el cual se
señaló en un primer momento como el lenguaje mantiene un carácter de dispositivo
exterior, directamente relacionado al gran Otro, con una función tacita de inmersión
vinculada a la transmisión de la ley, por lo cual, entonces el lenguaje sería lo que hace
sujeto, un sujeto de lenguaje, un sujeto el cual es hablado.
En este sentido, se señaló como a partir del dominio simbólico se inscribe al sujeto en un
orden establecido, delimitando así unas prohibiciones fundamentales, como lo es el incesto,
el parricidio y el canibalismo, junto a otros ordenamientos más particulares, afines a las
sistematizaciones jurídicas dependientes de las épocas, las sociedades y las instituciones
consolidadas en las culturas.
De modo que el registro simbólico y el asunto del lenguaje se encontró correlacionado con
el asunto de la determinación del sujeto y el establecimiento de la subjetividad, a través de
la organización simbólica, en conjunción al establecimiento del superyó, sobre el cual el
deseo toma forma de yo y constituye un ideal, -el ideal del yo- distinto del yo ideal, el cual
se encuentra perdido y es expresado como una línea asintótica la cual nunca se tocará con
su eje de referencia. En este punto se especificó como el ideal del yo corresponde a algo
que hala en una búsqueda constante, mientras que el superyó también hala, pero desde el
terreno de la prohibición y el castigo; expresando como al ideal se le ama y a la prohibición
se le teme.
Esto sería entonces lo que inscribiría la falta en el sujeto, por lo cual se mencionó un
ejemplo que enunciaba como el hombre se sostiene en una fantasía centrada en poseer a
todas las mujeres, aun sabiéndose en falta para lograr dicho objetivo, mientras que la mujer
desearía a un solo hombre para sí, siempre y cuando este sea el mejor hombre, de allí se
mencionó como es a partir de los mandatos superyoicos, que se establecen las posiciones
que sitúan al sujeto frente a sus particularidades, como lo sería asumir una posición, de
víctima, o una posición conflictiva, lo cual asentó la conversación sobre el tema del
análisis y la función del analista junto a la palabra.
De allí que se mencionara la importancia de la proyección y de la transferencia como
mecanismo presente en el lenguaje en su función que le permite hacer emerger algo que no
se encuentra presente en tiempo o espacio, por lo cual se mencionó que es por esto que el
analista no puede quedarse en la literalidad de las palabras, más sin embargo no se trata de
extenuarse en la búsqueda de referencias suplementarias.
Exponiéndose entonces una distancia fundamental entre la sobreinterpretación metafórica,
y la emergencia de significación en los enunciados, ya que es en este primer instante de
ocurrencia del enunciado, en el cual este se muestra infinitamente más rico de significación,
en comparación al momento de sobreinterpretación.
Fue entonces en este punto donde se realizó la diferenciación sobre el uso de las nociones
contenidas en la categoría de lenguaje, señalándose como la función simbólica mantiene
siempre un carácter de metáfora, lo cual le concede un carácter creativo a la palabra, y es
dicha función creadora la que permitiría conocer una relación entre enunciado y sujeto.
Entonces, al encontrarse la conversación instalada sobre la palabra y como esta determina
la realidad, se precisó ahora como esta mantiene una relación directa con el acto, en un
sentido creativo, expresado siempre sobre un carácter ambivalente que permite entender
como la palabra no puede sostener un solo sentido tautológico o cerrado, ya que es por otra
parte, su polisemia y multiplicidad de puntuación la que le concede su carácter
interpretativo y eminente de creación; es decir que la palabra en sus posibilidades, ofrece
desplazamientos, inhibiciones e inversiones de significado en la dialéctica. Lo anterior
aludió a hacia la precisión de la noción de significante especificado como una apertura de la
palabra, como algo que va más allá del significado, lo cual situaría al significante sobre el
orden de la enunciación, mientras que el significado permanecería únicamente al nivel del
orden del enunciado.
Finalmente, se habló sobre el inconsciente y como este posee carácter de real y de un Otro
que se organiza partir del anudamiento que permite el registro simbólico sobre lo
imaginario y lo real, por lo cual se habló de una posible definición del psicoanálisis como la
cura de lo real por lo simbólico en la transferencia.

También podría gustarte