Reflexión sobre la película “Escritores de la libertad” de Hilary Swank

Al ver la película y centrarme en el tema de la problemática que se vivía en

esos tiempos, me causo mucha impresión y me agrado la valentía y entusiasmo
de la maestra al no dejarse vencer por el pesimismo de sus colegas. Vio en
sus alumnos la necesidad de aprender de diferente manera, de querer ser
tomados en cuenta, de sentir que están en un ambiente agradable, situación
que no se vivía en esos lugares, donde la lucha era constante entre las
pandillas que día a día se encontraban y mataban. Me pregunto a que se debía,
porque esa necedad de querer dominar el territorio, de sentirse superiores a
los demás.

Quiero comparar esta grandiosa película con el libro que recientemente

acabamos de leer, el cual se llama “más allá del esclavo” de Francisco J.
Ángel, cuando inicia la película aparece en escena una niña donde su papá le
enseña a golpear para que se pueda defender, con la lectura del libro vemos
como la gente que está a nuestro alrededor nos enseñan cosas, como lo que
debemos hacer, como defendernos, que pensar, a quien temer y en la película
sucede lo mismo desde pequeños ya saben que deben defenderse, con quienes
pelear, cuáles deben ser sus ideales.

La maestra lucho por unir al grupo y pese a ser nueva en la docencia logro su
cometido, los recursos empleados fueron diversos, quiso pedir libros
prestados en la biblioteca y aunque no le fueron autorizados, no se desanimó.
Compro libretas que utilizaron como diarios donde cada joven contaba su
historia, de esta manera ella comprendía la situación de cada alumno. Esta
película nos invita a ver más allá de lo que solo nos muestran nuestros ojos, a
profundizar en lo que quiere cada niño, todos son únicos y diferentes por lo
tanto necesitan atención especial. Muchas veces solo planeamos para todo el
grupo, sin tomar en cuenta las diferencias que pudieran existir y de las
cuales en algunas ocasiones, no nos percatamos de ello ya que estamos tan
absortos a nuestro ritmo de trabajo, a llevar la planeación tal cual. Sin
pensar en ellos, en que necesitan, de que carecen, si pueden se analíticos y
reflexivos por si solos. Enseñarles a vivir no solo a comprender porque la vida
les exigirá más.