CONOCIENDO A LOS ÁNGELES DE LUZ

Bienvenidos

Esperamos que reciban con mucho amor este cuadernillo an-

gelical. Aquí compartimos, de una manera sencilla, las nociones
básicas y más relevantes para un primer encuentro con los án-
geles. Nos parece oportuno aclarar que toda gloria, honor y re-
conocimiento se debe a Dios padre, ya que gracias a él
podemos transitar esta maravillosa experiencia y conectar con
estos hermosos intermediarios de luz. Gracias por apoyar a
nuestra querida Asociación Argentina de Angelología.

Con mucho amor.

Carolina Campos
Presidente de la Asociación
Argentina de Angelología
DPPJ 219.048

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¿Qué es un Ángel?

Los ángeles son seres de luz. Son espíritus puros e inocentes

que no poseen sexo y son inmortales. Ellos son los mensajeros
de nuestro Padre y el más claro símbolo de la luz. Podemos
considerarlos nuestros amigos del alma. Siempre están dis-
puestos a brindarnos su guía y ayuda, solo esperan que nos
acerquemos y así trabajan con nosotros a través del don de la
intuición. Los ángeles son una manera de recibir la esencia y
presencia de Dios, llevan luz y energía a quien lo necesite. Se
encuentran en varios lugares a la vez y pueden desplazarse en
el tiempo (pasado, presente y futuro). No poseen un cuerpo pro-
pio, pero pueden encarnar y tomar forma de humano si así lo
desean. También pueden manifestarse en forma de luces, per-
fumes o sonidos. Es muy importante estar abiertos a la comu-
nicación y asistencia angélica, ya que ellos se encuentran en
todas partes. Podemos recibir sus mensajes en la televisión, la
radio, una revista, un libro, un cartel o simplemente de la mano
de un amigo, un familiar o un desconocido que nos dé la palabra
justa en el momento indicado. La organización de estos her-
mosos seres de luz se divide en tres grupos formados por tres
coros angelicales cada uno, de acuerdo a su función y su nivel
de vibración.

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 CONOCIENDO A LOS ÁNGELES DE LUZ

Jerarquías Angélicas:
“Organización Angelical”

Todos los ángeles responden a una jerarquía angelical. Según

su vibración y misión es donde se ubican. Cada uno posee una
instrucción específica para mantener el equilibrio, tanto en el
reino angelical como en el terrenal. El orden de los serafines
corresponde a una mayor emanación ya que se encuentran más
cerca del trono de Dios, nuestro Padre. Los arcángeles y ánge-
les son los que se encuentran más cerca del hombre. Poseen
una vibración más suave para que podamos comunicarnos y
acceder a su energía de una forma más fácil y sutil para nos-
otros. Se dividen en tres grandes grupos de acuerdo a su jerar-
quía. El primer grupo lo forman los serafines, querubines y
tronos. El segundo grupo lo forman las dominaciones, virtudes
y potestades. Y el tercer grupo lo forman los principados, ar-
cángeles y ángeles.

Serafines: Los que arden Ellos son los más próximos a Dios.
Lucen un rostro y seis alas, con millones de ojos para admirar
la luz y belleza de nuestro Padre. Están junto a Dios cantando
constantemente alabanzas. Nos traen paz, esperanza y amor.
Protegen los lugares sagrados y nos purifican con su fuego y
su luz divina.

Querubines: Los que interceden Son representados como pe-

queños niños alados y traen con ellos toda la inocencia y ter-

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nura. Ellos custodian el Sol, la Luna y las estrellas e irradian
esta energía hacia nosotros. Son los ángeles de la sabiduría. Es
ideal convocarlos cuando rendimos algún examen, tenemos que
tomar alguna decisión difícil o necesitamos entendernos con
alguien.

Tronos: Justicia de Dios Ellos siempre se encuentran en pre-

sencia de Dios. Protegen y rigen los planetas. Se los representa
como grandes remolinos o ruedas con muchos ojos y poseen
los colores del arcoíris. Nos traen fuerza de voluntad, valor y
coraje. Los podemos invocar para desafíos difíciles o para re-
cuperar nuestra energía. Ellos imparten justicia divina.

Dominaciones: Misericordia de Dios Ellos equilibran cuerpo,

mente y alma. Son custodios celestiales y protegen a los sana-
dores. Regulan a las demás jerarquías angélicas y equilibran el
mundo material con el plano espiritual. Ellos protegen todas las
actividades que se realicen en grupo (especialmente las espi-
rituales). Nos comparten la cualidad angélica de la misericor-
dia.

Virtudes: Los que brillan Ellos emanan un gran caudal de ener-

gía celestial. Poseen rostro y alas, pero no tienen un cuerpo.
Son tan resplandecientes como el Sol y muy veloces. Traen mi-
lagros a nuestras vidas y a la de nuestros hermanos. Evitan ac-
cidentes y grandes catástrofes. Nos llenan de valor y coraje y
comparten con nosotros el don de la Gracia Divina.

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 CONOCIENDO A LOS ÁNGELES DE LUZ

Potestades: Soldados de Dios Miden más de dos metros de al-

tura y son de un color rojo intenso. Se encuentran vestidos con
armaduras, usan escudos y en sus cabezas lucen cascos. Nos
defienden de fuerzas oscuras y del mal. Traen energía extra y
nos ayudan a clarificarnos. De este coro angélico salen el ángel
del nacimiento y el ángel de la muerte. Nos acompañan ante
grandes desafíos.

Principados: Naturaleza de Dios Rigen todo lo relacionado con

la naturaleza. De ellos dependen todos los espíritus elementales
(hadas, duendes, gnomos, etc.) y también la ecología. Se los
puede ver rodeados de plantas y animales y posando con flores
en su cabeza. También protegen naciones, países y ciudades.
Nos traen optimismo y verdad a nuestras vidas.

Arcángeles: Representantes de Dios Se encuentran a cargo de

los ángeles y llevan a todos la voluntad de Dios. Son también
considerados guías, por la ayuda que siempre están dispuestos
a darnos. Ellos lo pueden controlar y armonizar todo en el universo.
Rigen los planetas y las energías que bajan hacia nosotros.
También son responsables de los animales aquí en la Tierra.

Ángeles: Mensajeros de Dios Se ocupan de la evolución espi-

ritual. Son los más cercanos al hombre y están al servicio de la
humanidad. Nos aman profundamente y nuestras energías se
transforman cuando conectamos con su luz. Dentro de este
grupo angélico se encuentra nuestro ángel de la Guarda. Es
nuestro custodio personal y amigo del alma.
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¿Cómo trabajar con Ángeles?
- El silencio es muy importante ya que estos bellísimos seres
se sienten muy a gusto con él. Si se utiliza música de fondo,
esta debe ser muy suave y armoniosa. Es importante tratar de
aislar los ruidos externos (timbres, celulares, etcétera).

- Mantener una actitud abierta y receptiva con la mente calma.

Estar atento a los pequeños detalles y señales. Estas se pueden
manifestar de muchas maneras, a través de un amigo, un libro,
una película, un cartel, etcétera.

- Tener pensamientos armoniosos y ser positivos. Es muy im-

portante ya que, si queremos contactarnos con ellos y recibir
su luz, es necesario mantener una corriente de vibración lo más
pura posible para que puedan introducirse en nuestra aura más
fácilmente y así recibir sus bendiciones.

- Se recomienda realizar meditaciones, ejercicios o invocacio-

nes sentados y con la espalda derecha ya que nos activan ener-
gías de alta vibración desde la columna vertebral, despertando
la información que habita en nuestro ADN espiritual.

- También es importante tener las plantas de los pies bien apo-

yadas sobre el suelo y, en lo posible, estar descalzos para recibir
energía de nuestra Madre Tierra y así nutrirnos de todo su amor.

- Si tenemos campana o cuenco, es ideal tocarlos minutos

antes de meditar, ya que limpian y energizan el ambiente y tam-
bién atraen a los seres de luz.
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 CONOCIENDO A LOS ÁNGELES DE LUZ

Conociendo a tu Ángel Guardián:

El divino Ángel Guardián o Ángel de la Guarda es reconocido

en todas las religiones. Siempre aparece representado como
un gran aliado o compañero de camino. Es quien mejor nos co-
noce y es otorgado por Dios nuestro padre de luz en nuestra
primera encarnación, acompañándonos perpetuamente. Su
energía se manifiesta en momentos de peligro, indecisión o an-
gustias. Este divino ser nos brinda su amor total y juntos evo-
lucionamos según la voluntad divina.

En la iglesia católica se reconoce a este popular ser de luz. Se

lo celebra con una misa especial el 2 de octubre. En el Islam
se reconoce a dos ángeles guardianes, uno escribe nuestras
acciones positivas y el otro las negativas para que nuestro ac-
cionar sea evaluado el día del juicio final. Los cristianos no re-
conocen puntualmente la existencia del ángel guardián, pero si
nombran y convocan en el nombre de Dios a los divinos ánge-
les, como en un mismo grupo. La civilización Celta nombraba a
los ángeles de la guarda “anamcara” o “anamchara” recono-
ciendo también a estos seres de luz.

Para conocer a nuestro divino Ángel Guardián, debemos prestar

atención a nuestros gustos personales y así descubriremos sus
preferencias y podremos realizarles ofrendas llenas de amor.
Recuerda que ellos siempre respetarán nuestro libre albedrío y
debes abrirle la puerta de tu vida para que comiencen a obrar
en ella.
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Ellos vibran con nuestras flores favoritas, y disfrutan del aroma
de nuestro perfume predilecto. Cuando tengamos ganas de
contactar con él de una manera especial podemos colocar en
nuestro altar flores silvestres o algún dulce que nos guste (re-
cuerda que las ofrendas angelicales siempre deben compartirse
o donarse para expandir esta maravillosa energía). Para con-
vocarlo con una vela, piensa en tu color favorito y así obtendrás
la que sea de su agrado. También puedes iluminarlo con luz de
color blanco o celeste, ya que el color blanco es un comodín y
el celeste representa al grupo del que proviene nuestro ángel,
el Rayo Azul.

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 CONOCIENDO A LOS ÁNGELES DE LUZ

Arcángeles principales:
Estos seres de luz son los encargados de comandar a los án-
geles y grupos angélicos que se encuentran al servicio de nues-
tro amado Padre. Son nuestros guías y siempre están
dispuestos a brindarnos su luz y asistencia. Es importante es-
tablecer con ellos una comunicación, aunque sea una oración
sencilla o unas simples palabras, para que ellos comiencen a
trabajar en nuestra vida. Los amados arcángeles nos comparten
su fuerza espiritual para que comencemos a utilizar y expandir
su energía aquí en la Tierra, para nosotros y para el bien de
todos nuestros hermanos. Recordemos que su bandera es la
unidad e igualdad para todos los seres del universo. Trabajar
con su energía eleva nuestras vibraciones y nos predispone
mejor para todos estos cambios que forman parte de nuestra
ascensión y de esta nueva era.

Arcángel Miguel:

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El divino San Miguel Arcángel es el príncipe de la milicia celeste.
Dirige a miles de ángeles protectores para contrarrestar las
fuerzas oscuras y así devolver el equilibrio y la armonía a nues-
tro planeta. Porta su espada de luz para combatir la oscuridad
y cortar todo lo que nos mantenga estancados en una frecuen-
cia inferior. Se lo considera custodio de los policías y soldados,
también protege a los extranjeros y a las personas que se en-
cuentran lejos de su hogar. Ayuda a contrarrestar la negatividad
y a reconectarnos con nuestra luz interior. Activa nuestro fuego
sagrado que arde en nuestro pecho para recuperar la fuerza y
la voluntad divinas. Estas son necesarias para ponernos en eje
nuevamente y así alcanzar metas y objetivos y estar al servicio
de todos nuestros hermanos. Nos acompaña el día del juicio
final y él evalúa nuestra evolución aquí en la Tierra. Comparte
su luz azul zafiro con todos nosotros. Podemos invocarlo para
resolver problemas o asuntos relacionados con papeles, trámi-
tes, juicios, compra y venta de propiedades o automóviles. Es
ideal para recuperar el equilibrio y el orden. También podemos
solicitar su ayuda para limpiar nuestra aura.

Arcángel Gabriel:
El amado Gabriel es el arcángel del nacimiento y de la ascen-
sión. Él nos acompaña al venir y al partir de la Tierra. Fue él
quien le anunció a María la gran noticia. Nos brinda purificación
y abre nuestros caminos para que podamos alcanzar nuestros
deseos más puros. Agudiza la intuición y despierta la clarivi-
dencia. Protege a embarazadas, bebés y niños pequeños. Tam-
bién ayuda a concebir a mujeres con problemas ginecológicos.
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 CONOCIENDO A LOS ÁNGELES DE LUZ

Alivia los dolores de parto y menstruales. Se lo relaciona con la

Luna y las Estrellas. Pacifica el hogar y propicia las reconcilia-
ciones. Su día de regencia es el miércoles y su piedra es la pie-
dra de la Luna. Vibra con los colores blanco, plateado y celeste
claro; sus aromas son el jazmín y el azahar. Él nos invita a morir
y renacer en vida, dejando todo lo viejo y gastado atrás para
purificarnos y elevar nuestras vibraciones. Le podemos pedir
purificación, comunicación e iluminación.

Arcángel Rafael:
Este ser celestial es el gran médico; sana el cuerpo, la mente y
el alma. Se lo menciona en la Biblia, dentro del libro de Tobías.
Juntos dirigen a los ángeles verde esmeralda de sanación. Ra-
fael es el gran protector de médicos, enfermeros y trabajadores
de la salud, también de reikistas y sanadores. Podemos invocar
su luz para realizar viajes y traslados. Acompaña a todas las
personas que presenten enfermedades, cegueras o problemas
visuales. Se le puede pedir que nos alivie los malestares y do-
lores físicos. También trae verdad y optimismo. Se lo representa
vestido con túnica verde, con un caduceo de sanación (repre-
sentado por la serpiente) y peces con los que se simboliza la
«ceguera» de la humanidad. Él corre el velo para que nos co-
nectemos con lo que somos realmente: un espíritu evolucionado
transitando una experiencia humana para nuestro crecimiento
y el mayor bien. Su día de regencia es el jueves, su color es el
verde y le podemos pedir sanación, alivio, protección para viajes
y matrimonios bendecidos.

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Ejercicios de Luz

De la mano de los ejercicios de luz abrimos un puente de co-

nexión con nuestros amigos celestiales. Es un medio de comu-
nicación a través del cual podemos recibir sus bellos mensajes
y equilibrar nuestras emociones. Es importante abrir el corazón
y entregarse a la energía angelical. Tómate unos minutos,
aquieta tu mente y respira varias veces profundamente hasta
que estés en paz. Puedes leerlos varias veces y visualizarlos.
También puedes grabarlos y luego recostarte y escucharlos.
Estos ejercicios también pueden ser realizados en grupos y su-
marlos a clases de yoga, reiki o alguna otra disciplina. Espero
que los disfrutes y te llenes de luz angelical.

Ejercicio de luz para recibir

en nuestro corazón a los Ángeles.

Este ejercicio nos permite abrir el corazón a los divinos ángeles.

Es una amorosa manera de recibir a las fuerzas angelicales y
transformar nuestra vida.

1- Conectamos con la respiración. Permitimos que el elemento

aire renueve nuestra energía, y aclare nuestros pensamientos.

2- Ponemos la atención en el cuerpo físico. Y lo recorremos

mentalmente varias veces. Sentimos gratitud por poder vivir en
él.

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 CONOCIENDO A LOS ÁNGELES DE LUZ

3- Nos centramos en nuestro corazón. Sentimos la energía que

pulsa dentro de él. Desde allí convocamos a esta fuerza ange-
lical, que hoy se vuelve disponible para nosotros:

“Queridos Ángeles, los invito a mi vida. ¡En ustedes confío! Án-

geles hoy conscientemente les abro las puertas de mi corazón,
de mi realidad y de mis sentimientos. Ángeles, les pido que con
su poderosa fuerza espiritual, barran de mí ser todo lo que no
se encuentre en sintonía con mi esencia de luz. ¡Ángeles Ayú-
denme, en ustedes confío! Pido a Dios nuestro padre de luz,
que permita que sus benditos ángeles habiten en mi corazón
por toda la eternidad. Que así sea y así es. Hecho está. Amen.

4- Volvemos a conectarnos con la respiración y lentamente mo-

vemos el cuerpo. Volvemos al aquí y ahora.

Contacto de Ángel a Ángel

Este ejercicio es ideal para comunicarnos con personas que se

encuentran lejos física o espiritualmente de nosotros. Cuando
hace falta diálogo y no encontramos la manera de acercarnos.
Confiemos en el poder de nuestros ángeles y dejemos en sus
manos nuestros problemas para que con su ayuda amorosa po-
damos resolverlos.

1- Busca un lugar tranquilo y conéctate con tu respiración. Con-

voca a tu Ángel para que te asista en este ejercicio.

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2- Permite que tu ángel te guíe en este ejercicio y sigue su luz.
Piensa en la persona en cuestión y en el problema o situación
que los involucra.

3- Cuéntale mentalmente a tu ángel cómo te sientes y que quieres

expresarle a la otra persona. Recuerda ser claro y concreto así
el mensaje podrá ser entregado de una manera más sencilla.

4- Visualiza a la persona en cuestión y convoca a su divino

Ángel Guardián. Respira profundamente y visualízalos frente a ti.

5- Imagina como tu ángel entrega amorosamente al ángel de

la otra persona tu recado lleno de paz. Siente como lo recibe y
todo se calma.

6- Agradece a tu ángel por este trabajo de luz. Y suelta com-

pletamente la situación.

7- Gracias x3. Que así sea y así es. Hecho está. Amén.

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 CONOCIENDO A LOS ÁNGELES DE LUZ

Meditación con la espada de luz

del Arcángel Miguel

Este ejercicio de luz nos permite conectar con la bendita espada

del arcángel Miguel. Es un de las herramientas espirituales más
reconocidas y su principal función es cortar con las malas
energías.
1. Nos sentamos cómodamente con la espalda lo más derecha
posible y nos conectamos con la respiración.

2. Nos relajamos y, con cada respiración, vinculamos con los

reinos superiores.

3. Invocamos la divina presencia del amado arcángel Miguel,

príncipe de la milicia celestial, solicitamos su divina protección
y le pedimos que su luz y energía se expandan en todo el lugar.

4. Visualizamos que el arcángel Miguel nos guía hacia su sa-

grado templo de luz. En él observamos una gran escalera, im-
portantes columnas y bellas imágenes que adornan el lugar.
Todo se encuentra iluminado por una sutil luz azulada. Vemos
una importante puerta de color azul profundo con un gran pi-
caporte dorado. Entramos a esta habitación que se encuentra
llena de estanterías doradas. En ellas se pueden apreciar miles
y miles de espadas. Todas son distintas. Algunas doradas, otras
plateadas, adornadas con piedras, cristales o cintas. Todas son
únicas y perfectas.

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5. Tómate tu tiempo y elige con el corazón la espada que va a
acompañarte en este camino de luz. Cuando hayas recibido tu
espada, visualiza en ella el símbolo de limpieza divina sellando
de esta manera la conexión con el divino arcángel Miguel.

6. Volvemos a conectarnos con la respiración. Vamos volviendo

al aquí y ahora. Lentamente movemos nuestro cuerpo y abrimos
los ojos.

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Oraciones de Luz

Las oraciones son otra forma sencilla de convocar la ayuda an-

gelical en nuestra vida. Puedes realizar estas o simplemente
convocarlos con tus palabras que salgan desde tu corazón. Los
divinos ángeles esperan que los invites a tu vida para comenzar
a obrar milagros en ella.

“Cuando perdemos a un ser querido Amados ángeles de luz,

ayúdenme a comprender la voluntad divina de nuestro Creador.
Llénenme de energía y amor para poder transitar esta etapa de
duelo con integridad. Les pido alivio para mi corazón y fuerzas
para seguir adelante en este momento de tristeza y dolor. Gra-
cias, gracias, gracias. Que así sea y así será.”

“Cuando viajamos Amado arcángel Rafael y Santa María de

Luján, invoco su protección y su luz para que pueda tener un
viaje en paz y armonía. Pido que bendigan mi camino, vehículo
y acompañantes. También solicito protección para todas las per-
sonas que se crucen en mi traslado. Gracias, gracias, gracias.
Que así sea y así será.”

“Cuando necesitamos protección Amado arcángel Miguel y án-

geles azules de protección, les pido que protejan mi hogar y a
todos sus habitantes. Pido su amparo y luz en mi vehículo, tra-
bajo y finanzas. Gracias, gracias, gracias. Que así sea y así
será.”

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“Para mejorar la salud Amado arcángel Rafael y ángeles verdes
de sanación, les pido de todo corazón que me llenen de luz y
amor. Ruego que trabajen en mi aura, sanando todos mis cuer-
pos (mental, espiritual, emocional y físico) y despierten en mí
la perfecta salud divina. Gracias, gracias, gracias. Que así sea
y así será.”

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