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(1, 1 – 4, 3)
8
El luteranismo español, según se pudo obtener de los interrogatorios en los conocidos procesos iniciales de Valladolid
y Sevilla, está en lo siguiente: la centralidad en la fe, la justificación sin ella para las obras, negación del purgatorio,
indulgencias, culto a las imágenes, a misa y su valor como sacrificio propiciatorio. La teología eucarística era
abiertamente luterana: no hay transubstanciación; es el cristiano quien hace presente a Cristo por la fe, ya que no está
corporalmente en la Eucaristía. Uno de los temas de santa Teresa recurrente sobre los luteranos es la Eucaristía: las
profanaciones, los desacatos que se hacen a este Santísimo Sacramento la conmueven en su más honda interioridad (C.
34-35). Por eso, siente gran alegría interior cuando se pone el Santísimo en cada una de sus fundaciones, con la que ella
quiere compensar la destrucción de las iglesias por los herejes (F. 18, 15) (ALVAREZ, Tomás, Diccionario de santa
Teresa, Voz: Protestantismo, Editorial Monte Carmelo, pp. 1104-1105.)
9
1, 2
10
3, 1
11
F. 1
12
V. 32, 10
22 | P á g i n a
que sería una estrella que diese de sí gran resplandor... , que dijese a mi confesor esto que
me mandaba... Fueron muchas veces las que el Señor me tornó a hablar en ello... y que era
su voluntad, que ya no osé hacer otra cosa sino decirlo a mi confesor, y dile por escrito todo
lo que pasaba…13 14
¿Qué es lo que Teresa de Jesús, desde su sensibilidad por la Iglesia y la humanidad, plantea a sus
descalzas para que sean buenas amigas de Jesús?
13
V. 32, 11-12
14
ALVAREZ, Tomás, 100 fichas sobre Teresa de Jesús, ficha 32: El carisma del Carmelo Teresiano, Editorial Monte
Carmelo, Burgos España, pp. 76-77
15
La santa, tres veces usará la expresión consejos evangélicos (V. 31, 22; 35, 2.4). En un solo caso señalará
mandamientos y consejos (6M 7,10). Y otras tres veces usará la expresión genérica votos religiosos (C. 33,1; F 23, 10;
CC. 47)
16
F. 5, 10
17
C. 1, 2
18
Ibidem, Diccionario de santa Teresa, Voz: consejos evangélicos, pp. 164-166
19
F. 5, 17
20
F. 5,5.
21
18, 7
23 | P á g i n a
monasterio…22 La afirmación abarca la amplia gama de prácticas ascéticas, piadosas y
orantes23. En todas ellas la obediencia será el criterio de discernimiento24
Para progresar en el camino oracional es estudiar mucho en la prontitud de la obediencia…25
… se contenta –Dios- más con la obediencia que con el sacrificio… 26
22
18, 8
23
39, 3; F. 6, 12
24
F. 8, 5
25
3M 2, 12
26
F. 5, 13; 6,22
27
2, 9
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V. 35, 2-6; 36, 15
29
V. 10, 7
30
V. 36, 6
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F. 9, 3; 24, 17
32
2, 8
33
V. 38, 21
34
11, 3
35
2, 7
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19, 4
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2, 3.4.10
38
2, 8
24 | P á g i n a
La Santa analizará el amor de unas con otras, donde puede haber actitudes inmaduras39. Ella
aboga por una madurez y libertad de corazón de personas que han entregado su afectividad a
Dios con un amor preferencial. Sus monjas son esposas biencasadas con Cristo40 cuyo trato
es de amor puro y casto41 Este ha de ser el criterio de acción en todo. En sus monasterios
todas han de ser amigas, todas se han de amar, todas se han de querer, todas se han de
ayudar…42
39
4, 4-11
40
11, 3; 22, 7; 26, 4
41
V. 28, 19
42
4, 7
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1, 2
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3, 2
45
3, 3
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3, 5
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3, 5
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3, 6
49
3, 6
25 | P á g i n a
En definitiva, es AYUDAR y APOYAR al Buen Jesús, nuestro Rey50, para ser tales51, para que
sea conocido y amado y pueda la humanidad reconocerlo como el Hijo de Dios, camino, verdad y
vida hacia el Padre. La descalza no debe centrarse en quien comunica esta verdad, sino en que se dé
a luz esta verdad, experimentada y vivida por ella misma. Así, la descalza atenta a su Esposo, en el
Buen Jesús, pueda AYUDAR a que Él tenga donde reclinar la cabeza.52
El ideal teresiano es contentar a su Majestad… pues es para gloria suya y bien de su Iglesia, que
aquí van mis deseos…53 Por lo tanto, Teresa sentirá confianza en que sus hijas no quieren otra cosa
ni la pretenden, sino contentaros…54 en la oración de una descalza estará bien clara la convicción y
la unión con los sentimientos y deseos de la santa. Por eso, Teresa le dirá a Dios poniendo la
confianza en la práctica de oración de sus hijas: cuando os pidiéremos honras, no nos oigáis, o
rentas, o dineros, o cosa que sepa a mundo; más para honra de vuestro Hijo ¿Por qué no habéis de
oír….?55
Últimas recomendaciones que la santa hará en torno a esta conciencia de la oración: cuando
vuestras oraciones y deseos y disciplinas y ayunos no se emplearen por esto que he dicho, pensad
que no hacéis ni cumplís el fin para que aquí os juntó el Señor.56
Y también Teresa hace hincapié de la práctica de la Regla primitiva donde se nos invita a orar
sin cesar57 de aquí se desprende la necesidad de cuidar y guardar la Regla y la Constituciones con
todos los valores esenciales, principalmente la tarea constante de la oración, que Teresa la tendrá en
un lugar especial.
Y por último, dirá Teresa, que esto que está escribiendo cumpláis y leáis muchas veces de buena
gana…58
50
3, 2
51
3, 2
52
1, 3
53
3, 6
54
3, 7
55
3, 7
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3, 10
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4, 2
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4, 3
59
1, 5
26 | P á g i n a
centraran en buscar los medios para que se dé a conocer la verdad de Dios y de la Iglesia, no en
otras ocupaciones. La preocupación y el dolor de la santa será en la negación de Dios, por ello,
expresará su sentir quieren tornar a sentenciar a Cristo, pues le levantan mis testimonios, quieren
poner a su Iglesia por el suelo… ¿Y hemos de gastar tiempo en cosas por ventura….?60 ¿En qué
gastamos el tiempo…..?61
La oración despierta ser sensibles a los acontecimientos de la humanidad. El Carmelo detecta el
sentir de la humanidad desde la oración y descubre los diversos rasgos que están dañando el
anuncio de la verdad de Dios en la Iglesia.
El sentir de Teresa, es el sentir de la comunidad teresiana. Qué sufrimientos están ahora, en
nuestra Iglesia actual, causando daños a la unidad, a la misión, a la dignidad de la persona. En
nuestra oración, ¿está la preocupación de quiénes se están separando de la Iglesia o de los que no
conocen la verdad de Dios? ¿Qué estamos haciendo como Carmelo en el bien de la Iglesia? ¿Somos
dechados para los demás? ¿Hay credibilidad no en nuestras palabras, sino en nuestra vida?
Estos rasgos que Teresa centra como finalidad de un por qué y para qué nos juntó el Señor en las
comunidades teresianas, nos obligan a descubrir el verdadero rostro que se está proyectando en la
actualidad. El inicio de una búsqueda que Teres de Jesús realizan no es sólo personal, de ella
misma, sino descubre la necesidad de que otros palpiten como ella el dolor que se vive ante lo que
está experimentando en carne propia. La radicalidad y determinación por Dios no cobra sentido en
los cristianos actuales, por ello, pide refuerzos de estas poquitas para que hagan lo mismo que ella.
¿Podremos aventurarnos a realizar esta petición de refuerzos que la santa pide a sus hijas el bien del
anuncio de una verdad y por la unidad de la Iglesia?
60
1, 5
61
¿En qué gastamos el tiempo……………………..?????
En una formación donde es mi proceso personal…..
En trabajo, trabajo, trabajo…..
En intereses personales…..
En estar bien de salud… atención demasiada al cuerpo….
Es estar todo el tiempo pensando en el médico, psicólogo, etc.….
En situaciones egoístas que marcan el camino de la comunidad….
62
2, 2
63
2, 1
64
2, 1; 2, 6
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2, 1
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2, 1
27 | P á g i n a
el Señor de las rentas67 y renteros… y moverá a los deudos para que con naturalidad puedan ayudar
a las monjas de Teresa de Jesús a vivir con radicalidad su vocación. Recuerda Teresa que parte esta
confianza en la vocación que hemos recibido pues por su mandato venimos aquí; verdaderas son
sus palabras, no pueden faltar… por lo tanto, no le faltemos nosotras, que no hayáis miedo que
falte… este temor puede venir por varios factores que obstaculizarían la radicalidad de la pobreza
teresiana:
por el hecho de tener algunos cuidados demasiados de que den (los deudos) una vez u otra
se irán por la costumbre (o podrían ir) y pedir lo que no es menester 68 Una comunidad
teresiana, por su opción de vivir en la radicalidad de la pobreza no se hará dependiente a los
bienhechores a que les den o no. Las facturas son caras, como se dice, cuando una
comunidad sólo vive de los demás. De ahí radica el valor del trabajo manual.
No se ocupe en esto el pensamiento… Cuando la comunidad se centra en sólo pensar en
cómo adquirir bienes y se olvida de lo esencial de la confianza en Dios se va perdiendo el
valor de la pobreza…69
La pobreza es un bien que todos los bienes del mundo encierra en sí; es un señorío grande;
70
67
Renta: se llama lo que produce una herencia o un capital año tras año y permite al dueño vivir tranquilo, y erea
rentero el que tenía los bienes en renta. El fin de la renta era la paz y el recogimiento, en el pensamiento de la santa,
después de ver otras realidades donde se establecieron las fundaciones.
68
2, 3
69
2, 4
70
2, 5
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2, 8
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2, 9
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2, 9
28 | P á g i n a
determinándonos de pasarlo, es acabada la dificultad, que toda es la pena un poquito al
principio…75
Las descalza/os no se aferran a las cosas pasajeras, sino en cómo alcanzar día a día la vida eterna
dada por Dios por la contemplación; lo importante es garantizar el estilo de vida teresiano para
poder hacer real lo que por vocación se sienten llamadas, Teresa ve y se alegra…que en ningún
monasterio de los que el Señor ahora ha fundado de esta primera Regla no han pasado las monjas,
con mucha parte, tan grandes trabajos. Haylas allí tan buenas, por la misericordia de Dios, que
todo lo llevan con alegría. Plega a Su Majestad esto les lleve adelante, que en tener buena casa o
no la tener, va poco; antes es gran placer cuando nos vemos en casa que nos pueden echar de ella,
acordándonos cómo el Señor del mundo no tuvo ninguna. Esto de estar en casa no propia, como en
estas fundaciones se ve, nos ha acaecido algunas veces; y es verdad que jamás he visto a monja con
pena de ello. Plega a la divina Majestad que no nos falten las moradas eternas, por su infinita
bondad y misericordia. Amén, amén.76
Teresa intuye que debe actuar en el mundo y en la Iglesia, pero que lo tiene que hacer como
pobre. Sus monjas serán radicalmente pobres. El Espíritu le inspira esto, que no brota precisamente
de nosotros. Encuentra la pobreza en el Evangelio, contemplando a Jesús pobre. No podría valorar
la pobreza, si no descubriera en ella libertad, gozo, señorío. Si no encontramos gozo profundo en
todo lo que hacemos, nuestro estilo de vida será poco duradero. La pobreza le permite señorear
todos los bienes del mundo otra vez, a quien no se le da nada de ellos77. Y esto lo dice por
experiencia. Está contenta por estrenar pobreza en casa, en vestidos, en palabras, y mucho más en
el pensamiento78. Discreción de vida, sin ruido ni alardes; sin pretensiones de grandeza (cf Sal 131).
Los pobres verdaderos no hacen de hacer ruido79.
Teresa es una respuesta a las necesidades históricas de su tiempo. Los valores esenciales:
Los nn.7-11 de las Constituciones describen en apretada síntesis los valores o núcleos de valores
espirituales que constituyen el carisma teresiano en su primera formulación. Se trata de una primera
síntesis de los elementos del carisma que después se presenta en los sucesivos capítulos con más
precisión y detalle. Baste, pues, en este momento una breve descripción de estos valores esenciales
agrupados en torno a cinco núcleos principales.
75
14, 5
76
19, 12
77
C. 2, 5
78
C. 2, 8
79
C. 2, 10
29 | P á g i n a
la comunión espiritual y la continuidad con la estirpe de los grandes Padres del Carmelo,
considerados como modelo de soledad, de pobreza y de contemplación C 2,7; 11,4; M V 1,2; F
14,4.5; Cons. 32). Teresa repite con frecuencia la palabra que indica la "memoria" de los hechos
y personajes del principio de la Orden: "Acordémonos de nuestros Padres santos pasados" y se
considera "descendiente" de esta "casta" espiritual del Carmelo.
La orientación contemplativa:
El n.10 de las Constituciones indica el carácter eminentemente contemplativo y teologal de la
vocación carmelitana. Aunque la oración es la base de la Regla y la insistencia en las virtudes
teologales es también característica de este precioso texto primitivo de la espiritualidad del
Carmelo, Teresa de Jesús ha dado a la oración todo el sentido de su propia experiencia
contemplativa y mística. Por eso hay que resaltar como núcleo central de valores:
la oración como amistad con Dios, abierta por lo tanto a todas las posibilidades y exigencias de
comunión con Dios; tal es el camino de oración que Santa Teresa traza en el Camino de
Perfección y en el Castillo interior como expresión de su propia vivencia espiritual (cf. V 8,5,
Camino y Castillo interior);
la dedicación al ejercicio de la oración como momento culminante de la vida personal y
comunitaria y valor supremo que jerarquiza y ordena todos los demás aspectos de la vida (C
17,1-2; 18,4; 21,10; Cons 2 y 7);
el sentido apostólico de la vida y del ejercicio de la oración como forma peculiar de servicio
contemplativo en la Iglesia (C 1 y 3).
El seguimiento de Cristo
La respuesta teresiana a las inspiraciones de Dios se traduce desde el principio en un fuerte
evangelismo: "seguir los consejos evangélicos con toda la perfección que yo pudiese" (C 1,2). Hay
una fuerte exigencia de seguimiento de Cristo que se traduce en el carisma teresiano con diversos
matices:
el sentido de la vida religiosa contemplativa como una experiencia semejante a la de los
apóstoles, en convivencia con Cristo; de ahí la fuerte expresión comunitaria: "pequeño Colegio
de Cristo" (CE 20,1), o la identificación evangélica con la casa de Betania donde se vive Cristo
(C 17,5-6);
la apertura a los valores evangélicos fundamentales en la vida religiosa: pobreza, amor de unas
con otras, desasimiento como abnegación evangélica, humildad, camino de la cruz; son los
puntales de la ascética teresiana como norma del seguimiento de Cristo;
la imitación de Cristo en su actitud fundamental de modelo y maestro de la oración (cf. C, 24,4)
en la soledad y la invitación a orar con El, como maestro a quien hay que escuchar y seguir, ya
que él instruye sin ruido de palabras (cf. C 24,5; 26,10; 27 y ss.).
El sentido eclesial
Como se ha podido apreciar al exponer el proceso fundacional, el sentido de la Iglesia es uno de
los trazos más vigorosos y originales del carisma, la razón de ser y de orar del Carmelo Teresiano.
Esta eclesialidad se traduce prácticamente en algunas actitudes de vida:
ser iglesia, ante todo como la mejor forma de servir a la Iglesia; Teresa ve sus conventos como
"castillitos de buenos cristianos" (C 3,1-2), como comunidades orantes entorno a la Eucaristía
(F 18,4-5);
sentir con la Iglesia; consejo teresiano que abarca la conciencia de ser y vivir en la Iglesia
concreta, conocer sus necesidades, llevarlas a una contemplación, es decir a una auténtica
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experiencia de oración, todos los acontecimientos de la vida eclesial. De aquí el sentido eclesial
que en la formación Teresa inculcaba a sus hijas (F 1,6);
servir a la Iglesia, con la oración y con la vida en una intercesión ardiente y en una irradiación
silenciosa con el testimonio de una vida cristiana comprometida (cf. C 3,5; 3,5.10).
80
F. 13, 5
81
Const. 21
82
3, 1-2
83
Const. 9.11.12.32
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Const. 30
85
Const. 21
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Const. 8
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Const. 28
88
V. 35, 12
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Const. 26-28
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Const. 2.7
91
ALVAREZ, Tomás, Diccionario de santa Teresa, voz: comunidad. Editorial Monte Carmelo, pp. 152-153.
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Tiempo de reflexión y compartir….
1. En mi comunidad teresiana, ¿Cómo expresamos el ser tales que la
santa fundamenta como una necesidad de expresión apostólica de
nuestro carisma en la Iglesia?
2. Los valores del ser con relación a poner los ojos en el Esposo….
Vivencia de los consejos evangélicos… la radicalidad de la pobreza…
la práctica cotidiana de la oración… ¿Cómo lo vives en tu comunidad
teresiana?
3. ¿Tiene una resonancia este ideal teresiano del carisma en tu proceso
de asimilación y apropiación como descalza?
4. ¿Qué necesitas y necesitan en tu comunidad para vivir con intensidad este modo y manera
de vivir que la santa propone?
5. ¿Tu comunidad vive con intensidad la pobreza teresiana de no preocuparse, sino de servir
con radicalidad a Dios, confiando en su Providencia? o ¿Se desviven en arduos trabajos y
se olvidan los elementos esenciales del carisma teresiano como lo es la oración, la
recreación, estudio, vida fraterna…?
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