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Conclusión
•
Al filo del sístema

El objeto de la indagacion en este libro es el filo del s:istema, La

principal dinñmiCll al filo dtl sistema C'5 I• expulsión de los di\'er•
ro• sis1emas en juego: económico, rocial, biosffrico. F.se filo<$
fund;unen1almrn1c dist into de la fron1cn1 goognlfic:a e,~ ~1sistcma
ln1etes1,11al. 1:.1 foco en el filo proviene de la hip61e•ls central qué
org.1niza este libro; que el paso del keynesianisn10 a I> era global,
de privatizaciones, desregufaci6n y fronierasabkm,s pan algw1os,
implicabn un pasnj~ de uno din~mica que íltrnfo genllc hncia d
lntcrior .t 01ra din.imicn que t:mpujo gente liada o(ucra. Ese pasaj~
de la inoorpon,ción a la expulsión podrí• Cl'tor iniciándo~e t.arnbién
en Chi,,a y la Indio; Cblna, e,pedalmente, ha visto una incorpo-
rndón masiva de gente .i economias monetizadas, pero ahon está
experimentando también de,igualdades codo vn más marcada.•,
01,evas fonnas deconcenrroción económi<:'3 ('ti la cumbre y b11Uymg
corporativo.
(',,ad" uno de los principale,; campo.<1iene su propio ñlosi<1émioo
di)tinLÍ\ o: e.~e ñlo ~Lá conslituiJo dt difc.-renle mJ.ntta pílta la tto-
nomfa que para la l>iosfera y lo social. Uno de los supuestos que
organizan tstc libro es que el 610 del sistema es el lugar en que las
conclidones generales adoptan formas extremas precisamente por-
que es el lugar de fa expulsión o la incorpon,cióo. Adcinis, el e•·
nktcr ex·trcmo de las condiciones al filo hace ,1isible~ ecndend~s
mayorc~ que son mel1i)) rxtrC'míL~ y pc)r e:ou~iguiente más dj flci1c;S
de captar. Yo lmaglno es:as tendencia$ mayores como concepmal-
nwntt subterr:lncas porque no podemos hacerlos visibles f.lcilmcn1e

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median le nui:stras talegorías de pensamiento .u:tuales- Oe aB1f la
1mport.anei;i de ublaar mi indag¡tción 111 filo dd siitlt"m11.
Para ilustrar eso ton refe.r~nda a un.a era anterior, hubo un pe-
riodo en que en la superlicie, en uno visión o vuelo de pájaro, l 11-
glaterra aparecía como una economía predominantemen te rural.
P<ro en reuliclad lo lógiClt domimmtc de la cconomfa políticn y;1 era
el capit.,lismo industrial. Las ovejas en el campo ahora estiban oli-
mrnumJo las má11uinas de lll.• íábrica5 de la ciudad. Tanto las ,ove-
jas como las máquinas estaban al filo del slstenta: est.a.hui movifn.
<lose hada w 10 nueva era industrial urbano aunque el orden visual
mayor era el de una economia rurnl.
Hoy veo nuevos lógicos sistémiC1'$ surgiendo de la dc-scompo-
sición de la cconomla politic.t del siglo XX. Es• druomposkióo
se inició en la dk:•dn ,le 1980, Para cntoncct. los cstado& de bicn-
e~1ar in!s fu.crtcs y los si11dicali~mO!, obrero~ <.-st.ablecidos en buc11J
p•rte de Occidente, incluidos vnrios ¡,afses lolinoa,>icric:anos, ho-
blan sido devostodos o se encontrobnn bojo pres ion"~ graves, Hasta
cier10 p11mo los proyectos esta1ales con politicas de bienestar
orientadas bada la población hablan sido rasgos íuertes cn otras
parles del mundo, cnlrc los qur $C contaban, a su momera, p.tí~ri
coinunisl;).) y otros con ,•aricdndcs del nadon31ismo $OdJ1 is1a,
como por ejemplo las p(lliticas de Est;ido de bienestar de Na~er
en Egipto, los sistemas desarroDodos después de la independencia
en varios pnfse.~ africanos y la fom1a hindú de socialismo e,tatal.
Tombifo en esos palses la descomposición se inició en las décadas
de 1980 y 1990.
Si hablo de e.o descomposición no es p•ra cl•r un• visi<ln rom.111-
1ica del sigl-0 XX, época caracteri>.ada por guerras de,'lllltlldor•s.
genocidio e iJC<llogla. extn,1rn,_s tanto dedel'<Cha como de i1.quierda.
l'ero el mundo que- emp,e7..amos a construir al o tro d fa de la devas-
tación, empezando l'D Ocddeme tll particular ol ·término de lo
Segunda Guerra Mundial. era un mundo impulsado por una lógka
de inclusión, por un csíucrzo conccrt•do por crocr a los pobre. y
lo, marginados a lo corriente politic:11 y económica principal, Los
su¡,,~tos keyne,i,,nos, igu•litarios )' de base nacionaJ que suby;1dan
a ese proye<to de construir una sociedad justa empezaron 2 des.
moronorsc hacia cl final dtl siglo, Hemos tordJJ o mucho en con,.
pn:nder y dar nombre a la'i fuerzas)' las dinámicns que h,.1n S'-lrgid<)
del polvo.
•
Lo que afirmo aquí es que hemos caldo bajo el u1Rujo de una
concepción peligrosamenwcstrocha dcl crecim~nto ecouómko. E.I
crecimiento. desde luego, ern esencial para el pro)'e<:to del Estado
de bicncstu, pero también ero un medio de impulsar el interés
püblico~de aumentar una prosperidad que seria c:omparlida por
muchos. ;;iunquc p()ralguno) mucho más qucporo1ros. En contra.sic:
con e-so, ho)' nuestras instílucione.s y nuestros supues1os estin cada
vci más ni sc..rvkio del crtcimiento económico corporativo. E.s:1 e:s
la nueva lógica sistémica. Tal ve-L 110 todas, pero sufi<ientes corpo-
rocioncs han buscJdo libcrMse de toda constricción, incluidas la$
del interés público local, que interfiera ron su búsqued(l de lucro.
Cualquier cosa o cualquirr pc~na, ya ,;:a, una IC"y Q un csfucrw
dvico., que c.lific:uhe el lucro, (Orrc d riesgo dC" que la h~g..t1t a un
lado, de que lo expulsen. E.se cambio en lll lógica económica es una
lendenda sistémica importante que las ex¡,licacione, a,ctuales no
captan del todo.
Como ht-mos visto, l•scorpomdo11es tienen notables bcrramiro-
121; nuevas n su disposición: matcmñticas y cQmunicacioncs avan-
i.adas~ rnáquinas que litci-.1hncn1e mu<:'·cn mont.-il\as, l.ibertad de
movimientos y de mnniohra global que les permite ignorar o inti-
midar a gobierno. nadonalts, y cada vez más instituciones fotet-
nncionales que imponen a todo el mundo el cumplimiento de sus
•sendas. Los gobiernos ocddrot•les, los bancos cc1males. el FMJ e
instituciones internacionales afines ahora hablan de la necesidad
de reducir IM dcud•s gubcmamcmalcs excesivas, los programas de
bienes1ar socio! excesivos. la regulación excesh'"a. Ese es <l lenguaje
de bs pr-incipalci l11.s1i1ucio11~ que ponen orden c:n Occidente y
cada ve2 más en todas panes. Contiene la promesa implkha de que
si pudiéramos reducir ~sos excesos volverfomos a h1 normnlid•d, a
los días fáciles de la posguerra. Pero esa promesa oculta la medida
en que ese mundo se ha ido de ,·rrdad, y 1• medida en que, ~pt1nc
de lo que puedan decir 10< gobiernos nacional<!$, demasiados acto-
res económicos corporativos no quitrt.'n que vutlva. Quierm un
mundo en el que los gobierno.s gasten muc:ho menos en servicios
sociales o en los nec<Sidadcs dé las economfus de barrio o fas p,,-
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« Salir Expu ls iones, Brutalidad y complejidad en la econom ía g loba l - Saskia , Sassen
c1ueña$ empresas. r m11(:hO más en las dC"sregu1aciumi:s e: iníra.es-
1ruc1unas <luc tos s«t0rcs económicos quieren.
En realidad es el suyo un proyecto de contrae1' el espacio de la
economia dt wi pals, ptro no la remabilidnd tconómic• del k.'CIOr
corporati,·o. En su sencilla bnitalidad, la iransfonnación de Gr ecia
ilustrn bien eso: lo expulsióo rápida y masiva d e las doses medias
modcslas y no tan m0<l~tas de empleos. servicios sociales y médi-
cos. y c.iiti vc1, mis rnmbién dcsus casos. Es;i "limpit,a cconómicn •
ha sido tJ.n efectiva que para enero de 1013 el Banco Central Euro--
peo pudo ununcinr que l., economla grieg.1 esi;,ba en vlas de rc<u,
perarse y Moody's pudo elevar la calificación m,diocia de la deuda
gubernamental gri<'gO, l.o que no se dijo fue que CS3 recu¡wrn ción
se basaba en el hecho de que alrededor de un tercio dela fueru de
tr.th•jo cid país íuc cx¡,ulsada no 5-010 de sus cm plc:<.>S sino tnmbién
de ;ervicios bi,;icos. Depend ía de decisiones qu,e cau;aro11 un ¡¡nin
cr«:imicnlo del hambre, del número de niñOs at>ando,.ados por
parientes demasiado pobre.~ para alime11t.c1.rlos )' de J:is tasas de sui-
cidio. Este tipo de proceso cmi ocurriendo en muchos paiS<?s curo·
peos. desde Espllfia y Portugal bastt1 Holanda, aunqu e no tan clnls-
tia,mcnlc ni con un comando Ion fuerte dd ~neo Central Europeo.
Incluso pnbes donde el cmplc:<.> crece, como Est•dos Unido;, de
hc<ho hun reducido el espacio de ius s'Conomb$, corno es cvident<
~í induituo.s Ja abrupta d!!vadón de los número.s de Ios de-!M!mpJea..
dos a largo plazo y los encarcelados.
Quitto destacar una"'' mns que ése ,m¡eque nos ale-jo de una
fase de- cn•ciem<.' inclusión social y económica parn In persona pro--
medio ha 1cnido lugar también en j_rcas qué hoy vemos -como sin
espernn?.a, cuyos tiempos mtjoreS han sido olvidados por- mud,os
obser\'aJorescomosi C$.l 11U~end.i. de c.,peru11.1.a íu~ra una c.ondición
intrlns«a. En el África subsahariana, por debaJO de las guerras y las
sociedades demwnbrndas de hoy hay un pcrlodo prNio de monu-
focturas masivas. crecimiento de' clases medias:.. ciudades capit.Jles
y mcrcanúlcs prósperas, infr,,csLrucwrus dcsarrolb da$ por <1 go-
bierno y si,tcm,,s J.: ""lud y educación que íunéionah:in. Ante,s de
<1ue.br11.r, Somalia cr.1 un pah, b.lSt.anle próspero. bastante bien g<,...
bernado (aunque autocn1tico) y con una clase lnedi.a ir'kStrmda. O
pensamos en Rusio. En ~nos pasados, en fo URSS y Europa orieu
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t~I los regímenes comunistas h:nÍ:ln ,::,lados de bienes1~r f.¡u,e cW-
dnbon de sus ciudadano;. Pero hoy los enorme, c.intidadcs de per-
•
sonas sin ca.~al lo.~ ancianos aba11Jonados y los muy pobres sin acceso
a st.r, idos sociales son un asunto nuevo.
Una de las intencioní?'s de este libro era hacer visib.le el cruce
tincin el espacio de los expulsados: captar <I sitio o cl ,nonwllto vi•
s,ble de expulsión. ontesque lo olvidemos. lo,; aldeanos y pequeiio•
agricuhnrc,, expulsados de S11s tierras debido ni d=rrollo ele plan-
taciones de palmas pronto se materializan coioo habituttes deba-
rrios paupérrimos en vastas meg.aciudJdes, completllnd,o las upre .
sión de su pasado como pe-queftos agricultore.s. l!n CJ'ecia los
cmplrados del gobierno despojados de sus empleos co nombre de
las demandas de lo UE de rcdudr la deuda pronto pasaron a fomta r
parte de la mas;, de k>s desempleado<, dejaron de ser reconocidos
como antiguos empicados del gobierno. E,ucnsioncs de tierna
muer1n 1 cnventnada poremisiones tóxici.s de fübricas o mina..,. so11
expub.tdJs de la úerra trabajada y olvidadas.
Lo hipóiesis organizadora es que por debajo de las tSpecifid dalk":S
de cada uno de los grandes campos examinados en este libro hay
l("ndcnci.'lS-siS1émicas que ('Stán emergiendo. A pesar de ~U( órdcne..c.
\'Í~u.1lcs y sociales c11ormerncntc di\•trSt».- J.csdecl c-:rnpoder:unicnlO
de la corporación global hasta el d<bilitamicnto de la d emoá'acia
local, son conformado. por unas pocas dln:lmkas b.hicas de bús-
queda de lucro en libertad e indiferencia hacia el medio ambiente.
Esto significa 1ambién que la inveitigación emplrica y la recodi·
ñcadón concepmal deben nvaru;ar juntns:.st- necesitan mu1\1anwnte.
Visunlrocntc puede p:ircccr "ruso'' o "cstodouniJense". pero pode-
mos prq;unlarnos si t:$0Smarcadores googrjficos de un a era antc-
riC)r todilvfa son ú1Jles para entender t i cn.dcter J.c nuc.o,;trJ. époc:1.
Lo que argumento no es que las fuerzas desttucti,,as que examino
estén todos interco11ectadas: más bien es que esas fuerzas d<-struc •
tivas cortan tnmsversalmente nuestras fronteras conceptuales. lo:s
términos y l;u c,ategorfos que urilizamt1s pan, pensar )J cconomfa,
la p<llíticn, la diversidad de c,t,,do; naciúnalcs y de ideologfas. del
comuni~mo 31capitalisrno. Pero lo hac~n en íormrb que so1l invi-
sibles para nuestro OJO conceptual. Es en ese sentido~ entonces.. que
las describo como coneeptu~lmeote subterr:inl"JS. Aqul la comple-
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jicbd ts parle de la condkión. Cuanto más complejo es un siMema.
mái; dificil l':~ dL' entender, 1rnh dificil c.s si:ñalar con prc,c.i.i,ión lb
re5p0nsabfüdades y mi s dificil es que cualquier miembro dd sistema
se sknla obli¡¡;ado • rendir cuenia. Cuando l•s fuerzas des1ruccivas
hacen erupción y se vuelven v,sibles, el problema que su rge es de
iatcrprcl3ción. Las hcrromicntas que tenemos par., imee¡,rcmrhis
son .anticuadas, y c;acmos en las categorías fumiliílre..~: hablamos de
gobiernos c¡ue car«cn de rcsp<>nS41bilidad Ílscal, dc ho¡¡arcs que
adquieren ,ná• deuda <le La que pueden mane¡ar, de asignaciones
de capi1al que son inefidemes porque hay demasiada re,gulación.
etcéter.1, No niego que esos problemas pueden ser re,ales: hay exce-
lentes investig¡icioncs cmpíricllS que los documcnt~n. y }'O l•s uso
y en parte dependo de dlas, pero mi esfuerzo en esLe libro fue el de
explorar :si no hay .-aclcm:b OITI\$ dinimicai, ac:1i \"a.S, din.imicn.s quC'
corlan lransvcrsalmcnle C.!wlS fu miliares y bien C$IJbJccidas fronlcras
conceplu:ales/hi.s16riC1s. En cierto modo, los acapLir;in\ ientos de
tierras examlnados en el capitulo 2 son un caso concre-10 d~ otro
tipo de acaparamiento mucho mayor y máses<Juivo. En ese sentido.
ese capitulo no, permite acceder a uno historia más grande que no
siempre •dopta una fonna tan litcr.il como I• de In propia tierra. i.
¡,ropiil fon na desubsistead.1, la propi,, his111ria y el propio ser soci.J.
Dent ro del capitalismo 111isrno 1>odríamos d!escribir l:ls formas
de capiLollsmo emergemes en relación con atplulismos más u·adi·
cionales diciendo que secaractcril;.ln por lasexpulsio:nes, pero t3Jll
bifo por l.ellminación por incorporación. Decir que nuestra época
actual se caracteri7.a por la expansión de las economías dc mercado
es una d,~rip,ción dcm•si•do ·~~ y pardal, pu"5IO c1uc la mayol'io
de los mercadQ<son co111rolados porgr.1ndesernwes.iscorpor.11i,·~
l :1> ~mpresa.~ ma11ufoctureras, las planlnciones y las min.~• de ,Prl>-
pie<fad de capnalistas tr.idicionale,; con rafees en un solo país son
cada vez mJs destruida< o adquiridos por l:ts poderos,.. cmpres.tS
globales. lnch,so sector« en los que lo ganancia por unidad es mi·
nima hoy pueden volvc,rsccorpor;,ti,'05 porquc l• CSC'1fa-cl enorme
mimero de unidades implicadas- compensa el bajo lucn) por uni-
dad. Lle.sindolo al exll'cmo se pO<lría decir que la relación entre el
capitalismo avanzado de hoy y formas mi s trad:kionales de ca pita•
liimo de m«cado se car•ncriw por una acumulación cada v~z má<
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prlmiti,'a: la complejidad y d progreso 1éc11ko csl~n .ti servido dé
c.au,as de simplicidad brutnl,
•
Cada uno de los capítulo• cubrió uu• mezcla particular de ex,-
pulsiones en d filo del sistcm.1. Yo i111agino es,u tkpulsiones <orno
~ momento malerial de una din.árnica más compleja y esquiva: las
tendencias subterráneas conceptualmente im•isibks que cortan
tninsvcrsalmcntc l0$ significados )' <:cmceptos familiares con que
c~plicamo$ nu~,rn~ economías y n,1es1rn) soci<dnt.les. ~os re:.ul-
tado~ maLerial6 5..0n deterrni11aJ& en p.lrte por ÜlSlrw nento.s M-
pedficos y con frccuend,i complejos, incluso para ~pulsiones
elemmtald:. finalmente las e:cpulsiones y los lnstrumen tos que la:s
pcrmi1en pasan o ser parte ele una trayectoria interconectada y g
menudo se refuerz..m mutuamente apanándonos cada v.•e"t m.is de
nué'Str.1 cl.apa ontc-rior de incorpornción y ,rccimicnto de la cll\SC
media. Podrl.1mos decir que cada capftuk, "'1pturnba una de c,a;
tn,yectorias.
El capitulo t examiuaba y contextuaUuba la reconstitución de
"la cconomla" e11 paises bien estabk>ddos alta111ente des:irroUados
romo uo espacio rncogiclo con relativamente nt('nos empres.is,. me-
nos tnooi•dores y menos ho¡;,r<'$ consumidor.'$, todo> indica dores
de u11 si,1cma oricnlado hado l., expulsión de todo tu ,,uc no encoje
con su lógica ..-n evolución. Los délicics guhern;men1ales en el
mundo d«arrollodo ~ han elevado bruscamente. en pane debido
a la e,1tac1ón de los unpucsros de las grandes empresas y sus exce·
sivas apropiaciones paro proyecto, dudosos que van desde guerras
y rescates de bancos hasta los acapar.1mien1os de elilcs predatorias.
ui mayoría de los gobiernos de las Améric.l y Europ,1, y en el pcnodu
inmediato po.scoloni"I de los ses.:nrn los dé buen~ parle de África,
no pod.rian hacer hoy lo que hicil!ron durunl~ la r«:01,~trucción
masiva y los desarrollos de infraestructura de los afios cincuenta y
M>5"llta, porque oltorn cstln dem.si.ido endeudados. Las ~ccpcio-
nes son varios países ashuicos.. Bra-sil r UllOS p<>(OS más en que Ja
c.ipaddad guberna1nen1"1 d• ol<ntar y emprender directamente el
desarrollo sigue 1eniendo mud1a li.ueo.a~ Si e\l'Ílarán Ja d~rÍV¡¡ hilcia
d modo de expulsión que enfrenlamos en Occidtme~ una cuestión
imponante: iodo parece 111dícar que no. En el extrfmo o pues lo del
espectro Je los gobiernos rcdeotemcntc endeucbdos csd, la enorme
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expansi(,n de la rk'IU<'l" y las ganancia; de las grnndes corporaciones.
un tc-re:t'r dcnu:n10 dt esa lógia. c:n t'\'olució11.
E5'1 lógica en evolución.,, el No,·te global tie,me un p•ralelo L'n el
Sur global con lo, pros,·•1n.i., dt r<'<\.<tructuroción del F~1J y el Banco
Mundial aplicados en numerosos paises durante lasd écadas de 1980
y 1990, CJ<Jmin,ados brcvcmcotc en el cnpilulo 2. En ambos c:,sos d
resultado final es un estrechamtento dcl significado de ;'economía"'
y tu expulsión do todo lo que no <'llcaja. Gr«i•. Espnña. Portugal,
Estados Unidos y W10S poco, palses desarroUados n1ás no Sún sino
los cosos in.is ex1remos en el Norte global Hacen visible lo que
posiblemente esta más intermediado en el Re1110 Umdo, Holanda
y otros paím ricos y dcsarroUados. Pero la dinámica gcncrnl tiende
nenc:ogrr el esp,lcio de la economía. cua.Jesquif:'rJ que se-.1.n l:is difi-
cultades. FIobjcti\'OC$$ic:mpre 11lcnnl.ílr 11nn rconomíu que funcione
perfcct4meote. Oc nuevo, para el Banco Ct:nt ral Europeo ahora
Grecia está en vfas de r~cu¡>eración. después de hal>er •~pul:iado
hasta el 30 por ciento de lo que antes fo miaba parte de su r<onoml.t.
Y lo mismo se ha dkho de diversos pa!ses am canos d~ pués qu•
rc<ortaron sus ..costos" de Mlud, sociales y de i1ifntcslJ'Ucturo y
dcxlicmvn una pu1c: s:ignifka1iv,1." ,·«es milyor, de las rC"n~s dd
E51ado .ti pago de interese. sobre l,1 deuda.
Podemos entender ese encogimiento como un debilitamiento y
una degradación del pro)~to del l:.stado de bienestar Ub.erol, en•
tendido en senrido a,mplio. Con todas $US defidencias y la fuerza
estructur.t dt"Sigual de sus diversas r.unas y organismos. un Estado
liberal que funcione puede obtener cierto grodo de redisuibu ción
~ociocconómiu. Es a1paz de hacerlo en parte pcrnliticndo o lo.
tntnO$ a,.:111,,jados luehar por sus derec-hQS y por justici3 social.
Funcionaba cuando >ttlOr<> pod«osos 11ecesi1ab,n más y más tra·
bajadores y no podían simplernemc irnportar m:ano de obra barata
o U'asl3da1· lo producdón al otro lado dd mar. Pero cuando los
mecanismos para la acumulación de ganancias dejan de ser la ex-
pansión de manufurtur.ts m:,sivos y el dcoorrollo de infraestructura
esta1al y pasan a ser las inno\l';-1ciones finindera~ y el formato cor-
pOrnli\'Opost•l980. la base ¡,ara hacer afirmaciones de.ju~t..:it.'ia t it111-
bla y se con,;ierte en un tilo del s-istema. Eso es lo que es1á ocurriendo
hoy, eu patt~ ,JdJ vez más grandes del muJ>do. Los que ,reclunan
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tSÚn en d filó del siscema, y fácilmente putden acabnr- dcO ()tr-o
lado. expulsados. Yo vimos " mis y más pequeños negocios r ho-
•
gares urbanos deslizarse hasta el filo del sistema en el Sur global,
w butn• p>rtcgr.ciasa los prosrainasderecmumtrJciótl lanudo_~
por el l·Ml y el llaneo Mundial en los ochenta, y vemos el mismo
proceso empezando en fa década de 2000 en ,írcos runles • tr.w6
del gran aumento de las adquisiciones de tierras por gobiernos y
m1prcsas cxtr:mjcros. Lo csrnmos viendo m d Norte glo,bal, y Gre-
cfa nu es siuo un aso simpli: y acelerado de 1.->U reestruC1 u.radón,
que en otros lug.-ires solo esti más interrnOOiada y por consiguiente
es más lenta.
L., gcogrnfiJ global de fo extracción que por mucho ticm¡po ha
formado parte del des.irrollo económico, ahora ha ido naucho más
allá de su tradicional asoci.lción con pi:mH1ciones y minas. si bien
estas también><: estJn c"pandicndo. Se extiende par• cxlr,,er la,,
g.,noncias por 13, que los I rabajodores lucharon la mayor parte del
slglo XX, la tierra de los pequeños agricultores y los hogarns modes-
rosde muchas personas que confiadamente entregaron sus ahorros.
Con frecuencia tos mcc.inL,mos dc t'$ll$<'Xlrncdooes son muc:h,o ,oos
complejos que los resultndos, que suden ser bast~nte dcmcniaks.
En lo~ c.,phulo~ 1. 1 YJ$c pone en primi:r plano c:,..1 tensión entre
ins1rumentos complejos y resultados a menudo brutahnente ele-
m~tales. Esa tensión nunca es m.ls evidente ni m:l< poderosa que
en las finanzas, con el caso de las hipoteots wbprímc que se a,ializó
en eJ capitulo J como ejemplo clave. Hicieron falta hasta quJ,m,
pasos complejos poro tramformar esas hipotecas s11bprimtt en un
proyecto 6n:,ncicro orientado a satisfacer 1-'-' nccoid,1desdcl mundo
de la.~altas fman:,~s. J..o que en sus ongenes era un pro,·ecto es-t:.'llíl 1
pnrn pcm·1i1Jr n hogares de ing..i·ews modl'stos 1encr .su cw propia
fue rr.nsfornrndo en un prorecto financiero disei'lado para permi •
tir mayores lucros. Esa tr•nsformaci611 de un pro)'ecto estat.&I en
uno privado no fue una t.1rea senolla. Fue necesario reunir mate--
m~ticos aVll1m1dos, abogados y contodorcs brillantes. y complicados
ins1rumentos íiuancieros impene1rnblcs indnso paril "''uchus dd
ramo (que simplemcntc u tili,..iban el softw,tt). r:sos instn1mentos
son capaces de circular mucho más ali,\ de Estados Unidos (el Síli-
con Valleydc llll ln,10,•JciOnt'$ linancier.as), do11de fueron invenlll-
110-111 / 162 < >
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dos y d,,nde condujeron• la ej«:ución de las h ipolc-<as de más de
13 millones de ht)gore5. Est;imos cmpaando n ver can1i<Lldcs d,c.su·
sadamt nte grandes de eie-cudones en Ot tos pais:es. en particu.lar
Hungrfn y E.spallo, que =min.,mos en el capítulo ,,. El pote111dnl
global de esos instrumentos para creardevastación es eno.rme. Más
oUd de fos finmzns, esn 1cnsión entre iosrrumcnios complej os y
resuh.1do.s elementJlmcnte brutales esta presente t.m1bíén en 0 1ros
seerores «:onómicos. l;jemplos de ello son los 11ucvos tipos de mi·
nerfa, como la fractur.ación hidráulica (que vimos en el capítulo 4),
y 1;,,i cade1111S a menudo largas que implica lil oompr-• de 1ietn1 en
un pals soberano ex1ranjero (como se dijo en el capitulo 2).
Lo que imcn1aba cnrocr de todos esos casos cs lo que veo como
una yuxtaposición fundacional en nuestras formas actuales dec,ons-
1i1uir espacio económico: un despliCb'Ue de ÍOTmas complejas de
conocimiento y c:r-eativid.1d que con dcm.i.~iadJ frcc:uc:nda 1r.1c con-
sigo, adenitis de rol>us1us ganancias, bru1alidades asombrosamente
elemen1ales. Una pregun1a que esto genero es si lo que todavtl en-
rendemos como se<:torcs económicos distintos y discre1os no sera
simpkmente las rnaniíestaciones en la superfid e de lo que en rea-
lidnd son unas po,;as capacidades 1é01ic,is y orgnnizacionalcs trans-
fornmiv:1s de gran envcr¡;.idun que subyocen , t<>da>~sas diferen-
ciaciones superficiales. ¿Har un;is pocas lógicas que impulsan lo que
en la sup~cie se hau presen1e como mw1dos enormemen1• d1fe-
remes: el mundo del fracking, el mundo de los finan.tas, el mundo
de fa loglstk• de la terceriz.1cióo! ¡Acaso toda cia variabilidad es-
pecializada visibk se reduce a unas pocas logias no tan visibles que
soo capaces de trag¡,rsc y reposicionar dh'ersos tipos de sab eres
especializados en unil.s pocas lógicas ()rganizadorn~? Sí. Lo veo en
la economía y en lo~ modos como JlgunO.!i d~ los J.cwres más po...
derosos de la economla utifüan a pueblos. gobiernos y los recursos
dcl mundo puro ascgul'at el crcci01iet1to económico de l;u cotpo·
raciones con el mioiruo absoluto de restricc,ones globales y las mi•
nima,¡ responsabilidades posibles. Digo esto sobre el c,p;,cio de 1•
ec:onomía corporat.Í\'a, no SQhrr espaci0$ cumn t::i~ uni,-er:id~de~
donde lo diftrcnrioción <S puue de 1.._., 1radiciones de lu en;cñunza
y el aprendi?.1je que pueden (1odn,1a) coexistire<>n la remodelación
del espado económico que he ex.un inado en es1e Iibl'o. Aun as!,
trncitns de conQCimicnu, académico en muchá$ fonn~ - por ,cjc:m-
plo ingenicrfa, bio logía, economía- se reposkionnn a.da ve'J rmí.$
•
aJ servicio de- la lógica domina,u e y dominadora que organ iza e-l
espado económico.
Est'á claro que esra es una formulación extrema, pero asi es ,como
se ven la, cosas desde d filo del sistema. lo formo más poderosn de
esa lógica organiz.ador.i se capla de modo analítico en el concepto
de form•ción prt-da1oria que in1roduje m el caphulo ,, c1ue in cluye
varios de los principales ca. .os ~xaminados en los principales. cuatro
capílulos empíricos del libro, F.SJs formadones wn agrupacion~
de ac1orcs podero,os. mercados, 1ecnologfas y gobiernos. Son mu-
cho m(ís que simplcmcmc los individuos mis ricos o las empresa~
más ricas o los gobiernos m-8.s poderosos. Esa.s fom1.:icione.s i ncor-
pornn solo clemcn1os de esos mundos. La lógica que los impu Isa no
~ M1metc fácihncntc a los mccani.smos de gobcm3n'l..a existentes.
En much1u forrnas ni siquiera los individuos o la.s tmpre~u rruis
poderos.,s ¡lueden controlar o dirigir esas osociacíones: oon dema-
siados los fragmeo1os de esos diversos mundos ins1imcion:iles que
se agrupan pata formar fuenes dimlmicas nuevas que oo es posib]o,
reducir a oingunn de la-; ins:1itucioncs limdtimcnt1I~: n i 1a «ono-
mfa, ni l, le)', ni el capital. La documentación histórico hace p<ns.1r
que las formaciones de e,te 1ipo no son nuevas, ¡>ero lo q ue podri,1
ser diferente hoy es la complejidad de algunos compone1lll'$ da>"e.
Un ejemplo en grande serían las innovacíones financíeras,3\"1ll7.idas
que son capn<cs de <onar transversolme111e un• va,·iedaJ de scc10-
res eco11ómícos y someierlos a su propia lógica, cualquiera que sea
su contcoido, desde dcudns intJ ngibl"" bns1a groodes <'<iificios. Un
segundo ejemplo en grande es el • umen10 • escaln slohal de nues1rn
de-struC'ción aml.,ic.ntaJ, qu~ vuelve c:oino l>Oc.)mernng a tm,1"61 del
mundo y afec1a a lugares y flujos que nunca con1 nbuyeron a esa
destrucción (y posíblcmen1e el coso mis mrcmo <'$ el derretimiento
del permarrosl del Anico. hoyamennado por el cambio dimárico>.
Es1a posibilidad ayuda a CJ<plieir lo ,¡uc está en el coro:,ón de este
libro: que hn)' dinámicas más grande~<1ue ~ ·,rtan transveTS:drnénte
form,u 1>rtvi3S de difercnci:1ción )' por eso son eapaces <le gené.ra r
expulsjone$ en diferente.~ mundos. E.'-lo es exponerlo en :forma m.is
bien b,·usca pura decirlo con dJrid•d, y no pmcnde neg;iI que
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« Salir Expu lsiones, Brutalidad y complejidad en la economía globa l - Saskia , Sassen

henH)$ hecho prog.resos en ,,tguna.s arca.~. com'1 en la extensión dé

los der<chos de las minorías, Pero c11cucn1ro c1uoe cs1nmos yendo en
hnccr v,.,ible la tier-ra muerta, ;i.osh:.uso c1uc dcl,eria ser cnlCl 1dida
como un:i j urisdicción informal. M:ís en g,nerul. los esp,,cios de los
•
esa dirección en demasiados lugares, t.mto en Estados Unidos romo expulsados daman por reconocimiento conceptual. Son muchos,
en Sudáfria, Ru;ia, China y otros. tstdn creciendo yse esijo diferenciando. Son condiciona co ricq,-
El filo del si>tem~ hoy es un espaáo de e,1'ulsiones, en co111raste tualmenle subterráneas que es necesario traer a la superficie. So111,
con lo época kcynesiona en que el filo del sistcrn• cr~ un espado de en potcnci.t, los nuevos <'Spacios par., hacer. hoccr cconomías lorn-
incorporación. no porque fuera un periodo ideal si no porqu,e 1as les. historias nuevas y nueva.s íonnas de mcmbresfo.
sistcmatkidadci. constltutivas incluían la producción mnsiv;¡¡ y d
ron.)umo mas.i\lO. Hoy ya no~ asf.
Lo que c•t.1 cu juego en iodos esos procesos es la cuenión dt la
membresia y 1-a partíclpación constitutiva. He examinado modos
y campos difcrcnles coo d ob¡eto de recordamos un espacio vitru
m.iyorque esta é-1 mismo amenazado. Lo hice centr3ndome en una
serie de dcmios microcsp.1.cio~ Cnd.Luno C'il'D en un:., condición
cx-1 rema, de hecho IJO e:<I rcm.l que nos pcrmit.e ver una c.tpaddad
do Jesirucci,\n que la de nosoiros 1odavla no nccc:iari:,men tt b
aprehende o la e1verunenta en su vida cotidiana. l\.1ás ..:oncept!ual-
mentc, quena captar la exis1cncia de grandes tendencias tran•vcr•
sales que apuntan a condiciones planetario,: expulS1ones de perso-
nas, cconomi:1.s, espacios vitJICS, Nu~tnas cliv isionci. en países y
sc:ctore,; 1oda,•fa son útile,; pnr:i cxpliar buen• parte ele lo que
OC'urre, pero no no$ ayud;an il (níren1ar grandes condiciones pJa.
1,e1arias t.nlél'gentes.
Quieroconduir con una pregunta: ¡cuáles :;o11 los espacios de los
expulsados? Pal'a lM mediciones estandar de nu.,;1ra5 cconom ias y
estados modernos son invisibles. Pero dcbeñamos hocc rlo< con•
«p1u,tl111cntc visiblrs. Cuando prolifmn l•s dinamia, de expul·
sión, ya sea en la forn1a de In economía encogida de Grecia. las
diles p1•eda1oñJS de Angola o el crecimiento de los desemple:wo;
a largo plazo o los enrurcefados en prisiones con fines de lucro en
Estados Unidos, el espacio de los expulsados se n:pande y se 1•a
haciendo cada vez más d1ferendado. No es sencillamente un :1g11jero
oscuro. Está pre:scnte. También los .,;pocios de lo$ <'XJ>ulsados ne·
ctsitan $er ooncéptuali:1,ados. fJaboré una argumen t:aci6n similar
en rt.laciún con l.a proHfer.ición Je atcn.)ioncs de I ie.rra mue:rt;i y
agua 1nuerta debido a nuestros modos tóxicos de desarrollo. Tam·
bién están presentes. As!, en una movida conceptual que apw1tn a

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