Coronavirus: el problema es de todos

Actualmente nos estamos enfrentando a una pandemia con dimensiones nunca

antes vistas, un virus que se propaga con mucha facilidad y rapidez, lo cual
provoca un colapso de las enfermedades que genera y una letalidad a las
personas con enfermedades crónicas. Según la Word Health Organization
“alrededor del 80 porciento de las personas que mueren son víctimas de una
enfermedad crónica”, lo que quiere decir que gran parte de la población es
vulnerable a esta situación, por esta razón es indispensable acatar las medidas
preventivas a tiempo, como el confinamiento con responsabilidad y asertividad,
para poder disminuir la curva de contagiados y del mismo modo proteger a los
más vulnerables frente al virus.
Como dice Piedad Bonnett “la decisión de Duque de alargar el confinamiento
obligatorio es acertada” porque tiene como fin salvar las vidas de miles de
personas. este confinamiento no es con el fin de sentirnos asfixiados u
opresos, sino llegar a convertir nuestro hogar en un refugio donde nos sintamos
a salvo y a gusto, para así poder manejarla de la mejor manera, con
positivismo y esperanza, de tal manera que podamos abrir los ojos y la mente y
llegar a ver esta crisis como la oportunidad de tener un mejor planeta, más
consciente, empático y colectivo.
Mientras tanto hay que destacar el profesionalismo del gobierno y apoyarlo en
el esfuerzo de mantener el principio del confinamiento, hasta el final de la
emergencia sanitaria. Por esto es necesario propuestas de acción que
convoquen la solidaridad nacional y el apoyo general para que entre todos
podamos salir adelante. para lograr esto es indispensable resolver los
problemas asociados que van de la mano con la pandemia, como brindar una
mayor cobertura y calidad del seguro médico , resolver los problemas
asociados con las pruebas de detección del coronavirus , acelerar la adopción
de medidas que hagan fluir recursos a hogares que no tienen ingreso, ni
ahorros frente a la crisis , poner en marcha un programa anticorrupción para
que no se roben el dinero de los auxilios económicos y una mayor ejecución de
redes de prevención y reacción contra la violencia intrafamiliar con el fin de
sentirnos libres y seguros en casa.
Y con esta finalidad en un futuro viable, poder implementar un aislamiento
preventivo obligatorio colaborativo e inteligente que sustente en la prevalencia
de la vida y la salud, pero al mismo tiempo protegiendo la economía y el
empleo de nuestro país. El Presidente Duque afirmo “que a pesar de que haya
extendido el aislamiento preventivo obligatorio, buscara darle cabida a sectores
productivos que puedan participar en la economía con protocolos y
responsabilidad” como el caso del sector de la construcción y la industria
manufacturera y así poder operar bajo unas medidas estrictas. Bajo estas
circunstancias el gobierno realizara la respectiva evaluación de esta apertura, y
asimismo evaluara según los avances la cabida de otros sectores. pero el
gobierno debe ser claro, si no se llega a encontrar avances y en vez de ellos
afecta la capacidad del sistema de salud, se deben tomar medidas inmediatas
para frenar el posible riesgo.
Por último, hay que tener en cuenta que la valoración y el avance que
consigamos frente a la crisis, depende de todos nosotros, en que sigamos con
el distanciamiento social, en que cumplamos los protocolos de higiene y a sí
que todos respondamos, porque es con esa gradualidad como vamos
construyendo con inteligencia colectiva, el enderezamiento del camino que
necesita nuestro país.