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COMUNIDAD DE HOMBRES

Objetivo: Invitar a los caballeros a reflexionar sobre la importancia de tener una comunidad
entre ellos mismos.

Dinámica: Totito grupal.

Versículo principal:
- En fin, vivan en armonía los unos con los otros; compartan penas y
alegrías, practiquen el amor fraternal, sean compasivos y humildes 1 Pedro
3:8
o El apóstol Pedro nos llama a una vida en armonía.
 Vivir una vida es más que una reunión, es un estilo de vida en donde
se reconoce la necesidad de ser apoyado y apoyar al que tengo al
lado.
 Vivan en armonía: Relación de paz, concordia y entendimiento
entre dos o más personas. Ajustarse, Conectarse
o Ejemplo de los terromotos de Guatemala y México
o Compartan penas y alegrías
 La comunidad de hombres no es sólo para pasarla bien, sino para que
conversemos sobre las dificultades, momentos difíciles que estamos
pasadno.
o Practiquen el amor fraternal
 Pedro nos lleva no sólo a la reflexión sino a la acción
 Practicar el amor de hermanos.
o Sean compasivos y humildes
 Simpateía: Es ponerte en el lugar de otro para averiguar qué esta
sintiendo exactamente esa persona o qué esta pasando en un
momento dado.
 Sean humildes: Tener un concepto adecuado de sí mismo.
 Humilitas: Cualidad de ser y tierra. Es decir, cualidad de ser
un ser humano y no alguien más.
- Anécdota.
Había una pequeña aldea en medio de los árboles, al pie de una montaña. Allí
vivía un hombre paralítico de sus pies, que a penas se movía arrastrado sobre el
suelo.

Enfrente de su choza, vivía un hombre ciego y testarudo. Ambos se habían


enemistado por alguna razón desconocida. Lo cierto es que todos los días
encontraban una excusa para discutir acaloradamente. En más de alguna ocasión
se desearon la muerte el uno al otro.

Un día, hubo un incendio en el bosque y el fuego comenzó a devorar las chozas


de aquella aldea. La gente salió huyendo del lugar, pero nadie ayudó al hombre
ciego ni al paralítico.

Aquellos hombres gritaban pidiendo auxilio. El ciego daba vueltas en su patio


intentando escapar, pero no lograba discernir el camino que debía tomar. El
paralítico, en cambio, miraba que aún quedaba un espacio en medio del bosque
por donde huir, pero era escabroso y sabía que no iba a poder arrastrarse tan
rápido para salvarse.

No tardaron mucho en darse cuenta que la única forma de salvarse era uniendo
esfuerzos el uno con el otro.

En medio de la desesperación, el paralítico le ofreció ayuda al ciego para guiarlo


en el camino, a cambio de que lo cargara en su espalda y lo llevara con él. El
ciego aceptó gustosamente y así lograron salvarse de la muerte.

Después de esto, aquellos hombres comprendieron que su enemistad era inútil y


perjudicial. Se disculparon y llegaron a ser los mejores amigos.

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