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Arquidiócesis de Bogotá 99

SIGLAS
DA V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano, Documento de
Aparecida, 2007.
DP III Conferencia General del Episcopado Latinoamericano, Documento de
Puebla, 1979
EG Francisco, Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium, 2013
EN Pablo VI, Exhortación Apostólica Evangelii nuntiandi, 1975
GS Concilio Vaticano II, Constitución Gaudium et Spes, 1965
NMI Juan Pablo II, Carta Apostólica Novo Millennio Ineunte, 2001
PE Arquidiócesis de Bogotá, Plan de Evangelización 2013-2022, mayo 19 de 2013
ORACIÓN POR EL
PLAN DE EVANGELIZACIÓN

Primera Etapa

Dios Padre Nuestro


te damos gracias porque,
por medio de tu Hijo Jesucristo,
sigues haciendo camino con nosotros
y vas dando un nuevo rumbo
a nuestra Arquidiócesis de Bogotá.

Te pedimos que, bajo el impulso del Espíritu,


salgamos a tu encuentro en nuestro mundo
y como discípulos misioneros
anunciemos a todos la alegría del Evangelio
sirviendo misericordiosamente a los que sufren,
para ser sal de la tierra y luz del mundo,
fermento de una nueva sociedad.
Amén.

María, Estrella de la evangelización,


ruega por nosotros
© Arquidiócesis de Bogotá, 2014
PLAN DE EVANGELIZACIÓN
Orientaciones Generales

Texto:
Vicaria de Evangelización.
Arquidiócesis de Bogotá

Fotografías:
Archivo de la Arquidiócesis de Bogotá
Juan Carlos Ramos Hendez

Diseño, diagramación:
Juan Carlos Ramos Hendez
www.voxstudio.org

Impresión:
ISPA. Instituto San Pablo Apóstol
www.ispaeducación.edu.co

© Todos los derechos reservados.


¿CÓMO LEER ESTE
DOCUMENTO?
Al tener este documento en nuestras manos, sintámonos
invitados por el Espíritu Santo a ponernos en camino y sumar-
nos a la puesta en marcha del Plan E. En efecto, este documento presenta
los primeros pasos del esfuerzo que como Arquidiócesis de Bogotá estamos
haciendo desde hace un par de años para acercarnos cada vez más a la Iglesia
que Dios quiere y la región capital necesita.

El documento contiene la explicitación de la primera etapa del Plan E lla-


mada El Gran Giro que busca sensibilizarnos frente a un nuevo paradigma
decididamente misionero para que impregne nuestro ser y nuestro quehacer
como evangelizadores. Por lo tanto, este escrito aclara y concretiza lo expre-
sado en el documento del Plan E y con seguridad su lectura permitirá obtener
aún más provecho del anterior y nos ubicará en lo que nos corresponde vivir,
durante estos primeros años, como bautizados de la Arquidiócesis.

Esperamos que este documento sea un aporte para nuestra propia conver-
sión de manera que podamos seguir siendo una Iglesia evangelizada y evan-
gelizadora.

A continuación algunas sugerencias para sacar mayor provecho de la


lectura de este documento.

A nivel personal:

• Comenzar a leerlo sin afanes, tomando un tiempo cada día para leer uno o
dos apartes del mismo.

• Pedir al Señor fe y sabiduría para encontrar allí su voluntad para nuestra


Arquidiócesis, y docilidad y esperanza para querer adherir siempre a su pro-
yecto.

• Tener a la mano el documento anterior a éste, titulado “Plan de Evangeli-


zación”. Es posible que allí se encuentren ampliaciones, precisiones o explica-
ciones pertinentes. Adicionalmente, revisar el Anexo No. 1 del presente do-
cumento, donde encontrará una síntesis del nuevo Plan de Evangelización.
• Subrayar y tomar nota de las inquietudes, dudas, preguntas que se sus-
citen a lo largo de la lectura del texto, así como de las posibles respuestas
halladas en el documento del Plan E o en otras fuentes. Estas notas serán de
gran utilidad para el trabajo posterior, en comunidad, con otros miembros
del espacio eclesial al que pertenecemos.

• Escuchar los llamados del espíritu para atender las invitaciones que allí se
nos hacen.

• Revisar la agenda personal para ir tomando nota de las actividades bási-


cas en las que participaremos (fecha, lugar, etc.) y disponer los medios para
hacerlo.

A nivel Comunitario:

• Proponer una fecha de encuentro con el grupo o comunidad (apostólica,


de servicio, de trabajo parroquial, arciprestazgo, etc.).

• Comenzar la reunión con la oración propuesta en el Itinerario de Oración


del Discipulado Misionero, propuesto por la Arquidiócesis para fortalecer
nuestra condición bautismal.

• Distribuir previamente los capítulos entre los miembros (se pueden tomar
2 ó 3 capítulos en cada encuentro).

• Definir una metodología para compartir y reflexionar sobre el contenido.


Unos 3 encuentros pueden ser suficientes.

• Las notas tomadas por cada uno en la lectura personal serán aquí de gran
ayuda para, entre todos, sacar del documento el mayor provecho para nues-
tra participación en esta etapa del Plan E.

Autodiagnóstico frente al paradigma misionero de Evangelización

Una vez leído el documento, realizar el ejercicio de autoreflexión propuesto


en el Anexo No. 3 para valorar su aproximación, conocimiento, comprensión
y acogida del Plan E y así determinar las necesidades a trabajar y las activida-
des a desarrollar para alcanzar la meta de la Etapa del Gran Giro.

Emprendamos este camino en actitud orante, para que a ejemplo de la San-


tísima Virgen, sigamos viviendo nuestro Plan E en humildad, confianza y con
la esperanza de que el Señor está actuando y hace posible el cambio.
«La conversión pastoral
de nuestras comunidades
exige que se pase de
una pastoral de mera
conservación a una
pastoral decididamente
misionera.
Así será posible que
“el único programa
del Evangelio siga
introduciéndose en
la historia de cada
comunidad eclesial”
(NMI 12) con nuevo ardor
misionero, haciendo que
la Iglesia se manifieste
como una madre que sale
al encuentro, una casa
acogedora, una escuela
permanente de comunión
misionera.» DA 370

El Papa Francisco se presentó por


sorpresa en el comedor del Vaticano,
tomó personalmente sus alimentos
y se sentó en medio de un grupo de
empleados con quienes compartió el
almuerzo. 25.07.2014.
«A la beata Madre Teresa le preguntaron una vez cuál
sería, según ella, lo primero que se debería cambiar en
la Iglesia. Su respuesta fue: Usted y yo.»
Benedicto XVI
CONT NIDO
MENSAJE DEL SEÑOR ARZOBISPO DE BOGOTÁ 12
1. EL GRAN GIRO, PRIMERA ETAPA DE NUESTRO
PLAN DE EVANGELIZACIÓN 17
2. ¿QUÉ ES LO QUE BUSCAMOS EN ESTA PRIMERA
ETAPA DEL PLAN? 22
3. ¿POR QUÉ HABLAMOS DE LA NECESIDAD DE UN
GRAN GIRO? 23
4. ¿CUÁL ES EL ESPÍRITU CON EL QUE QUEREMOS
DAR EL GRAN GIRO? 27
5. ¿CUÁL ES EL NUEVO ESTILO O PARADIGMA
EVANGELIZADOR QUE QUEREMOS ASUMIR? 34
6. ¿POR QUÉ ASUMIR ESTE NUEVO PARADIGMA
MISIONERO? 53
7. ¿CÓMO VAMOS A EMPEZAR A TRABAJAR POR ESE
GRAN GIRO? 55
8. Y ¿QUÉ HACER MIENTRAS LLEGA EL
MOMENTO DE PARTICIPAR EN LAS ACTIVIDADES
PROGRAMADAS? 67
9. MARÍA, ESTRELLA DE LA EVANGELIZACIÓN 70

ANEXO 1: SÍNTESIS DEL NUEVO PLAN DE


EVANGELIZACIÓN DE LA ARQUIDIÓCESIS DE
BOGOTÁ (PLAN E) 72
ANEXO 2: ACTIVIDADES BÁSICAS 78
ANEXO 3: AUTODIAGNÓSTICO FRENTE AL
PARADIGMA MISIONERO DE EVANGELIZACIÓN 90
DATOS DE CONTACTO 94
Cardenal Rubén Salazar Gómez
Arzobispo de Bogotá

Apreciados hermanos y amigos:

Con esperanza y alegría hemos iniciado la primera etapa del itinerario que
vamos a recorrer como miembros de la Arquidiócesis de Bogotá para relanzar
nuestra tarea evangelizadora en las nuevas circunstancias que vive nuestra
sociedad, y ponernos en camino hacia los ideales que discernimos como la
voluntad del Señor Jesucristo para su Iglesia en esta región capital.

Comenzamos este proceso con las gracias recibidas durante la celebración


del jubileo por los 450 años de nuestra Arquidiócesis de Bogotá, y con la
decisión de ser fieles a la voluntad del Señor Jesucristo que hemos discernido
durante el proceso de construcción de nuestro Plan de Evangelización.

Con sencillez y realismo reconocemos que este propósito de renovación co-


mienza por el desafío de promover un re-encuentro de todos con la persona
de Jesucristo, y de suscitar un cambio de mentalidad y de actitud entre todos
los católicos, que nos lleve a un cambio en la manera de vivir la dimensión
misionera de nuestro bautismo y de asumir nuestra tarea evangelizadora en
estos nuevos tiempos. Nos reconocemos, por tanto, como una “comunidad
de aprendizaje” que, unida a Jesucristo, está dispuesta a desaprender muchas
cosas para poder re-comprender su identidad y su misión en las nuevas cir-
cunstancias que vive el mundo, viviendo un tiempo de conversión pastoral
decididamente misionera, como nos lo ha propuesto el Papa Francisco y el
documento de Aparecida.

Los invito, entonces, queridos presbíteros y diáconos, consagrados y consa-


gradas, laicos y laicas, miembros todos de esta Arquidiócesis, a trabajar juntos
para dar este “Gran Giro” que nos hemos propuesto como comunidad ecle-
sial; esforzándonos, con la ayuda del Espíritu Santo, por hacer nuestras las
actitudes del Señor Jesucristo, primer evangelizador, particularmente las tres
expresadas en el nuevo paradigma misionero y arquidiocesano de evangeli-
Arquidiócesis de Bogotá 13

zación y que consideramos fundamentales para servir hoy al Reinado de Dios


en medio de las circunstancias de desigualdades sociales, transición cultural
y pluralismo en que vive nuestra ciudad y municipios, asumiendo más plena-
mente nuestra condición como comunidad evangelizada y evangelizadora,
sacramento de salvación.

En el presente documento, que les pido el favor de leer, profundizar y difun-


dir, se han recogido las orientaciones generales para vivir esta primera etapa
de nuestro Plan de Evangelización, el programa, los proyectos y actividades
que vamos a realizar, de tal manera que podamos tener una visión de con-
junto del proceso.

Quiero agradecerles de corazón, una vez más, su oración, su compromiso,


sus esfuerzos y su paciencia, durante el proceso de construcción del Plan; y
exhortarlos a pedir al Señor el don de la esperanza para reconocer el valor de
los pequeños cambios que debemos hacer para alcanzar las grandes trans-
formaciones; el valor de la fidelidad en lo poco para llegar a ser fieles en lo
mucho; la sabiduría para reconocer que nuestro futuro lo empezamos a cons-
truir desde las pequeñas decisiones que tomamos en nuestro presente en el
cual ya está actuando el mismo Señor.

Que Jesucristo nos haga partícipes de la fuerza de su Espíritu para que sea-
mos auténticos evangelizadores en medio de la región capital y la Santísima
Virgen María sea la estrella que guíe nuestro caminar, para que la alegría del
Evangelio llegue hasta los confines de la tierra y ninguna periferia se prive de
su luz.

+ Rubén Salazar Gómez


Cardenal Arzobispo de Bogotá
14

EL PROBLEMA FOCAL QUE


BUSCAMOS SUPERAR
La Arquidiócesis de Bogotá, como Pueblo
de Dios que peregrina en medio de esta re-
gión capital, muestra una débil adhesión a
la persona de Jesucristo y a su proyecto del
Reino que le impide leer e interpretar, en las
circunstancias actuales de pluriculturalidad,
cambios permanentes e injusticias sociales,
los signos de la presencia salvadora de Dios
para ponerse a su servicio. Consecuentemen-
te, a pesar de los esfuerzos evangelizadores,
prevalece un modo de ser Iglesia caracte-
rizado por una pastoral de conservación,
sin ímpetu misionero, de simple gestión de
prácticas religiosas, poca participación, ac-
tivismo individualista y asistencialismo; así
nuestra Iglesia continúa recorriendo un ca-
mino paralelo a la vida y preocupaciones de
la gente. (PE 22)
EL IDEAL QUE NOS UNE
Y COMPROMETE
La Arquidiócesis de Bogotá, como Pueblo de
Dios que peregrina en medio de esta región ca-
pital, vive y celebra intensamente su adhesión
a la persona de Jesucristo y a su proyecto del
Reino, y la expresa en su vida de comunidad,
mediante la participación dinámica y orgánica
de todos sus miembros y la renovación cons-
tante de todos sus procesos de formación y es-
tructuras de comunión y de servicio; conscien-
te de su misión evangelizadora, como sal de la
tierra y luz del mundo, con actitud dialogante,
profética y propositiva, discierne y secunda la
acción del Espíritu Santo para anunciar a Jesu-
cristo en medio de la pluralidad cultural y par-
ticipar en la construcción de una sociedad mi-
sericordiosa: más justa, reconciliada, solidaria y
que cuida la creación. (PE 31)
16
Arquidiócesis de Bogotá 17

1. EL GRAN GIRO, PRIMERA


ETAPA DE NUESTRO PLAN
DE EVANGELIZACIÓN
1. Como católicos de la Arquidiócesis de Bogotá y presi-
didos por nuestro arzobispo el Cardenal Rubén Salazar Gó-
mez, hemos emprendido un camino de nueve años con el
propósito de «promover en todos los miembros del pue-
blo de Dios, de la Arquidiócesis de Bogotá, un proceso de
conversión personal y pastoral, decididamente misione-
Esta gran
ra, por la apropiación y cultivo de la condición misione-
tarea quiere
ra inherente a todo bautizado y del nuevo paradigma de
ser el primer
evangelización discernido y asumido por el Plan de Evan- paso en la
gelización, de tal manera que se inicie un proceso de reno- respuesta a
vación tanto de la vida de comunión y participación en la lo que hemos
arquidiócesis, como de sus procesos de evangelización» 1 . reconocido
Esta gran tarea quiere ser el primer paso en la respuesta a lo como la
que hemos reconocido como la voluntad de Dios hoy para voluntad de
nuestra Iglesia Particular y que hemos plasmado en nuestro Dios hoy para
Plan Arquidiocesano de Evangelización. nuestra Iglesia
Particular y
2. Se trata por tanto de promover un gran primer momen- que hemos
to de conversión personal y de la comunidad eclesial arqui- plasmado en
diocesana hacia un nuevo estilo de evangelización más mi- nuestro Plan
sionero, en sintonía con lo que propuso el Documento de Arquidioce-
Aparecida al convocar a una Misión Continental 2 y como sano de
Evangeli-
hoy lo está pidiendo el Papa Francisco para toda la Iglesia 3.
zación.
3. Para llevar a cabo este objetivo, vemos la necesidad
de trabajar en tres metas previas: dar “un giro” en nuestra
manera de mirar, comprender y asumir la evangelización y

1. Cf. Plan de Evangelización (PE) 55 conversión pastoral y misionera, que no


2. Cf. Documento de Aparecida (DA) 370 puede dejar las cosas como están… Cons-
tituyámonos en todas las regiones de la
3. Cf. S.S. Francisco, Evangelii Gaudium tierra en estado permanente de misión …
(EG) 25 y 30: «Espero que todas las comu- exhorto a cada Iglesia particular a entrar
nidades procuren poner los medios nece- en un proceso decidido de discernimiento,
sarios para avanzar en el camino de una purificación y reforma.»
18

nuestra propia condición misionera, 5. Todos los católicos - ministros


de acuerdo con el nuevo paradigma ordenados, consagrados, consagra-
de evangelización discernido; asu- das, laicos y laicas- estamos llama-
mir un “nuevo rumbo”, de acuerdo dos a participar en este Gran Giro,
con el paradigma, en la manera de comprendiendo que para alcanzar
vivir la comunión, la participación y la meta que nos hemos propuesto
en general en toda la acción evan- para estos tres primeros años será
gelizadora; adquirir un “nuevo rit- necesario el compromiso de cada
mo” en la vida arquidiocesana que le uno de nosotros y la integración
permita proyectarse de un modo re- de todos los pequeños y grandes
novado en medio de las condiciones esfuerzos que debemos hacer para
de cambio que vive nuestra región responder a lo que el Señor nos
capital. está pidiendo en este momento. Por
esto, se ha escogido como uno de
De ahí que se ha diseñado un iti- los mensajes que acompaña estos
nerario en tres etapas, de tres años primeros pasos: «¿Por dónde em-
cada una: 1ª. Etapa: el Gran Giro pezamos? Primero cambiemos tú y
(2013-2016), 2ª. Etapa: el Nuevo yo», y se ha plasmado en un primer
Rumbo (2016-2019) y 3ª. Etapa: un afiche que vemos puesto en nues-
Nuevo Ritmo (2019-2022). tras parroquias y otros espacios de
4. El pasado primero de diciembre, la vida eclesial.
con el inicio del año litúrgico, y muy 6. Participar en la puesta en mar-
solemnemente con la clausura del cha de este dinamismo que nos
año Jubilar por los 450 años de la Ar- lleva a un Gran Giro requiere tener
quidiócesis, hemos dado comienzo presente varios aspectos que vamos
a la 1ª. Etapa de nuestro itinerario, a presentar a continuación para que
llamada el Gran Giro, con el obje- todos estemos en sintonía sobre lo
tivo de que todos los miembros del que estamos buscando juntos y la
pueblo de Dios, y especialmente los manera como podemos contribuir
animadores de la evangelización, se al proceso desde nuestros espacios
sensibilicen con el nuevo paradigma de vida.
de evangelización asumido, y entren
así en un proceso pedagógico de
revisión crítica de la práctica evan-
gelizadora y de cambio de mentali-
dad sobre la forma de vivir la propia
condición bautismal, la comunión y
la misión4.
4. Las metas para cada una de las etapas las
encontramos en el PE 55
Arquidiócesis de Bogotá 19

MAPA DE LA ARQUIDIÓCESIS
DE BOGOTÁ
20
Arquidiócesis de Bogotá 21
22

2. ¿QUÉ ES LO QUE
BUSCAMOS EN ESTA
PRIMERA ETAPA DEL PLAN?
7. Reflexionando sobre la meta definida para esta primera
etapa, durante estos primeros tres años buscaremos juntos:

a) Que los católicos más comprometidos y luego, con


su ayuda, el mayor número posible de católicos de la ar-
quidiócesis, entren en una actitud de revisión crítica de
la propia vida de fe y de la dimensión misionera de su
bautismo, de acuerdo con los criterios señalados por el
nuevo paradigma misionero de evangelización que he-
mos discernido, para iniciar así un proceso de cambio de
mentalidad, de conversión hacia un modo renovado de
entendernos como discípulos misioneros en medio de la
transformación cultural que vivimos, hacia un modo más
misionero de ser Iglesia y de evangelizar en las nuevas ...se enteren
circunstancias que vivimos en nuestra región capital; del propósito
que tenemos
b) Que todos los católicos de la Arquidiócesis de Bogo- de trabajar
tá, vinculados activamente o alejados, practicantes o no, por la
niños, jóvenes y adultos, se enteren del propósito que renovación de
nuestra Iglesia
tenemos de trabajar por la renovación de nuestra Iglesia
y de nuestro
y de nuestro compromiso evangelizador con esta región
compromiso
capital, así como de la invitación que se hace a todos a evangelizador
participar con esperanza en este proceso; con esta
región
c) Que los demás ciudadanos, no católicos, que habitan
capital,así
esta región capital se enteren de nuestro propósito y esto como de la
contribuya a generar un ambiente de diálogo y cercanía invitación
con ellos. que se hace
a todos para
8. Se trata, entonces, de generar y cultivar un espíritu de participar en
renovación que nos capacite para diseñar y desarrollar más este proceso.
adelante, con visión y criterios renovados, una acción evan-
gelizadora más profética, propositiva y dialogante dentro
del contexto plural actual y así promover una mayor inci-
Arquidiócesis de Bogotá 23

dencia de los católicos sobre nuestro contexto de desigual-


dades sociales y transición cultural. Por tanto, será necesario
seguir adelante con todas nuestras actividades eclesiales y
evangelizadoras cotidianas que veníamos haciendo, pero
dejando que poco a poco se vayan permeando de este es-
píritu renovador, hasta que con creatividad y sabiduría vaya-
mos generando una nueva mística evangelizadora misione-
ra, nuevos métodos y lenguajes, nuevas estructuras acordes
con los desafíos del momento.

3. ¿POR QUÉ
HABLAMOS DE LA ...estamos
NECESIDAD DE UN ante el
desafío de

GRAN GIRO? aprender a


reconocer los
signos de la
9. Como se identificó a través de las consultas y el discer- presencia y
nimiento5 , estamos ante el desafío de aprender a reconocer de los planes
de Dios en
los signos de la presencia y de los planes de Dios en medio
medio de las
de las transformaciones culturales rápidas y profundas que
transforma-
está viviendo nuestra sociedad urbano-rural; para así, reno- ciones
var nuestro modo de ser Iglesia, que se ha llamado de “pas- culturales
toral de conservación” -sin ímpetu misionero, de simple ges-
tión de prácticas religiosas, poca participación, activismo

5. Cf. PE 22: «Junto a los signos de esperanza identificados, hemos po-


dido reconocer una serie de problemas parciales que reclaman nues-
tra atención, y en cuyo fondo se encuentra lo que hemos llamado “el
problema focal que debemos superar”; lo hemos formulado en los si-
guientes términos: La Arquidiócesis de Bogotá, como Pueblo de Dios
que peregrina en medio de esta región capital, muestra una débil adhe-
sión a la persona de Jesucristo y a su proyecto del Reino que le impide
leer e interpretar, en las circunstancias actuales de pluriculturalidad,
cambios permanentes e injusticias sociales, los signos de la presencia
salvadora de Dios para ponerse a su servicio. Consecuentemente, a pe-
sar de los esfuerzos evangelizadores, prevalece un modo de ser Iglesia
caracterizado por una pastoral de conservación: sin ímpetu misionero,
de simple gestión de prácticas religiosas, poca participación, activis-
mo individualista y asistencialismo; así nuestra Iglesia continúa re-
corriendo un camino paralelo a la vida y preocupaciones de la gente.»
24

individualista y asistencialismo– en que respondan a las necesidades de


un nuevo modo de ser Iglesia que evangelización que nos plantea el
evidencie, que manifieste mejor, su mundo presente.
condición esencialmente misionera,
de “salida”, y de servidora de la mise- 3.1 EL GRAN GIRO, COMO
ricordia divina presente en la ciudad CAMBIO DE MENTALIDAD
región, como el Papa Francisco lo ha HACIA UN PARADIGMA
señalado 6. EVANGELIZADOR MISIONERO
10. Existen muchas actividades e 12. Cambiar la mentalidad no es
iniciativas evangelizadoras que han fácil; es necesario hacer un gran giro,
funcionado pero que hoy se presen- puesto que normalmente tendemos
tan como insuficientes y a veces in- a pensar que sólo existe una mane-
apropiadas para llevar el Evangelio a ra de ver y de hacer las cosas, y que
todos los espacios de nuestra socie- no es necesario hacer cambios. Nos
dad plural y en transición. Pueden acostumbramos a suponer y a dar
seguir prestando su servicio, pero por hecho que “en Colombia todos
sus interlocutores serán cada vez nacemos y somos católicos” y que
menos, ante la diversidad de men- “la cultura colombiana transmite la
talidades y necesidades que hoy se fe por sí sola”, y esto nos llevó a cul-
presentan. De ahí la necesidad de tivar poco la condición misionera,
un cambio, de una diversificación y en muchas ocasiones a poner la
de nuestras acciones evangelizado- atención más en los medios de la
ras, de nuevos lenguajes, para que evangelización –la acción profética,
los instrumentos dados por el Señor litúrgica, social y de comunión-, que
para llevar a cabo la evangelización en los fines de la evangelización –el
sean significativos en los nuevos servicio al reinado de Dios en nues-
tiempos que vivimos. tro contexto urbano y rural actual–;
nos llevó a acompañar a los que ve-
11. Esto exige de nosotros en pri- nían al templo, más que a salir a bus-
mer lugar un proceso de cambio de car a los que se estaban alejando.
mentalidad, de apropiación de un
nuevo estilo de evangelizar, de un 13. Llegar pues a una renovación
nuevo paradigma, que nos permi- en las acciones e incluso de las es-
ta un nuevo planteamiento de los tructuras (dimensión programática
problemas pastorales, una nueva de la conversión pastoral), nos pide
interpretación y desarrollo de ac- trabajar fuertemente en un gran
ciones alternativas y diversificadas giro, en una transformación de la
mirada, de la mentalidad, de los
criterios, y del mismo corazón, para
6. Cf. S.S. Francisco, EG 20. que sean más misioneros (dimen-
Arquidiócesis de Bogotá 25

sión paradigmática de la conversión 3.2 SOBRE EL TRASFONDO DE


pastoral)7 . UNA MEMORIA AGRADECIDA
14. Por tanto, nos proponemos en 15. La mirada misionera que bus-
primer lugar asumir una renovada y camos cultivar en primer lugar es
contextualizada comprensión de lo una mirada agradecida con el pa-
que significa evangelizar la región sado; puesto que no entendemos
capital de Bogotá en las actuales la renovación que buscamos en la
circunstancias; una comprensión evangelización como un desarrai-
que nos lleve a asumir un nuevo go, ni como un olvido de la historia,
estilo como católicos, que nos im- ni como un desconocimiento de lo
pulse a salir y a proponer la alegría que se ha venido haciendo hasta
del Evangelio con renovado espíritu el momento presente en nuestra
misionero, con nuevos lenguajes, Iglesia9 .
nuevo ardor, nuevos métodos, y de
manera más adaptada (incultura- 16. Por el contrario, es necesario
da) a nuestra realidad diversa y en reconocer, con la Virgen María, que
transición; a asumir un nuevo estilo el Señor ha hecho obras grandes
decididamente misionero, que nos por nosotros y ha conducido a su
permita superar el «criterio pastoral pueblo a lo largo de los 450 años
del “siempre se ha hecho así”» 8 y la de existencia de la Arquidiócesis de
tentación de pensar que sólo exis- Bogotá. Jesucristo Resucitado ha es-
te una forma de evangelizar válida tado presente y se ha hecho cercano
para todos los tiempos y contextos. a la historia de miles de hombres y

7. Cf. S.S. Francisco, EG 27. Lo recordó re- núcleo del Evangelio, algunas muy arrai-
cientemente el Papa Francisco al referirse gadas a lo largo de la historia, que hoy ya
a las dimensiones por medio de las cuales no son interpretadas de la misma manera
debe desarrollarse la Misión Continental en y cuyo mensaje no suele ser percibido ade-
América Latina: una dimensión programá- cuadamente. Pueden ser bellas, pero ahora
tica (realizar actos de índole misionera), y, no prestan el mismo servicio en orden a la
sobre todo, una dimensión paradigmática, transmisión del Evangelio. No tengamos
entendida como asumir una nueva clave de miedo de revisarlas.»
comprensión permanente de todo el queha- 9. Cf. S.S. Francisco, EG 13: «Tampoco
cer de la Iglesia: su condición misionera, su deberíamos entender la novedad de esta
“misionariedad”. Cf. S.S. Francisco, Discur- misión como un desarraigo, como un olvi-
so al Comité de Coordinación del Celam, do de la historia viva que nos acoge y nos
Río de Janeiro, julio 28 de 2013, 3 lanza hacia adelante…Jesús nos deja la
8. S.S. Francisco, EG 33: «La pastoral en Eucaristía como memoria cotidiana de la
clave de misión pretende abandonar el Iglesia, que nos introduce cada vez más en
cómodo criterio pastoral del “siempre se la Pascua (cf. Lc 22,19). La alegría evange-
ha hecho así”»; además, dice en el No. 43: lizadora siempre brilla sobre el trasfondo
«En su constante discernimiento, la Iglesia de la memoria agradecida: es una gracia
también puede llegar a reconocer costum- que necesitamos pedir.»
bres propias no directamente ligadas al
26

mujeres que han participado en la ra de tantos laicos, laicas y familias,


construcción de nuestra sociedad, y que de acuerdo con sus carismas,
en medio de las luces y sombras, ha han sido, y son hoy, sal de la tierra y
hecho de la historia de nuestra ciu- luz del mundo, con su compromiso
dad región una historia de salvación. en la vida de la Iglesia y en el ejerci-
cio de sus responsabilidades en los
17. Somos herederos de una his- asuntos de la sociedad.
toria llena de iniciativas, de expe-
riencias evangelizadoras fructuosas, 19. Pero sobre todo queremos en-
que han sabido sembrar y cultivar trar en un proceso de renovación
el Evangelio en las distintas circuns- misionera reconociendo y agrade-
tancias por las que ha pasado la re- ciendo la labor evangelizadora de
gión capital, y hoy se constituyen en todos aquellos, ministros ordena-
un patrimonio del cual nos sentimos dos, laicos y consagrados, que hoy
responsables, y desde donde quere- con su entrega y servicio, con sus
mos asumir los desafíos que el tiem- iniciativas y esfuerzos, están sien-
po presente y futuro nos proponen do testigos de la presencia salvífica
como Iglesia Arquidiocesana 10. del Reino de Dios y están llevando a
otros al encuentro con el Señor Je-
18. Queremos dar el Gran Giro re- sucristo.
conociendo y agradeciendo el es-
fuerzo evangelizador de nuestros
anteriores arzobispos11 , de los pres-
bíteros y diáconos que han entrega-
do sus vidas por el Evangelio desde
el ejercicio de su ministerio apostó-
lico en medio de nosotros; agrade-
ciendo el trabajo de tantos religio-
sos, religiosas y demás consagrados,
que con su testimonio de vida evan-
gélica nos han ayudado a reconocer
el Reinado de Dios presente en esta
región capital. Además, reconocien-
do y agradeciendo la labor misione-

10. Cf. Rubén Salazar Gómez – Arzobispo 11. Entre otros, reconocemos especialmen-
de Bogotá, Carta Pastoral con ocasión de te el testimonio de la vida y ministerio de
la celebración jubilar de los 450 años de la Monseñor Ismael Perdomo, arzobispo de
Arquidiócesis de Bogotá, Bogotá, septiem- Bogotá entre 1928 y 1950, cuyas virtudes
bre 1 de 2012. heroicas han sido reconocidas y el proce-
so de canonización se adelanta en la Santa
Sede.
Arquidiócesis de Bogotá 27

4. ¿CUÁL ES EL
ESPÍRITU CON EL QUE
QUEREMOS DAR EL
GRAN GIRO?
4.1 ARRAIGADOS EN UN RENOVADO ENCUENTRO
CON JESUCRISTO
20. Reconocemos que la conversión pastoral -este cambio
de mentalidad y apropiación de un nuevo estilo misionero
de la evangelización capaz de responder a los desafíos que
Sólo un
el tiempo presente nos plantea- comienza por un proceso encuentro con
que cada uno de los católicos debemos vivir: un renova- Él, camino,
do encuentro con Jesucristo, primer evangelizador, en las verdad y
actuales condiciones que vive nuestra sociedad. Sólo un vida, puede
encuentro con Él, camino, verdad y vida, puede hacernos hacernos
comprender de manera renovada nuestra identidad como comprender
discípulos misioneros suyos en medio de las actuales cir- de manera
cunstancias de nuestra vida y puede llevarnos a asumir con renovada
alegría la tarea de ser los evangelizadores de estos nuevos nuestra
tiempos. identidad
como
21. Así se nos ha recordado en distintas ocasiones: discípulos
misioneros
«En un tiempo en el que Dios se ha vuelto para muchos el suyos en
gran desconocido y Jesús solamente un gran personaje del medio de
pasado, no habrá relanzamiento de la acción misionera sin las actuales
la renovación de la calidad de nuestra fe y de nuestra ora- circunstancias
ción; no seremos capaces de dar respuestas adecuadas sin de nuestra
vida
una nueva acogida del don de la gracia; no sabremos con-
quistar a los hombres para el Evangelio a no ser que noso-
tros mismos seamos los primeros en volver a una profunda
experiencia de Dios.» 12 S.S. Benedicto XVI

12. S.S. Benedicto XVI, Discurso a la Asamblea de la Conferencia Epis-


copal Italiana, mayo 24 de 2012
28

«Invito a cada cristiano, en cual- seguimiento a Él y el deseo de com-


quier lugar y situación en que se partir con otros la alegría de ser sus
encuentre, a renovar ahora mismo discípulos misioneros. Por eso pode-
su encuentro personal con Jesu- mos decir que el Gran Giro en primer
cristo o, al menos, a tomar la deci- lugar es un giro hacia Jesucristo.
sión de dejarse encontrar por Él, de
intentarlo cada día sin descanso. 4.2 CON LA ESPERANZA DE
No hay razón para que alguien QUE UNA NUEVA SOCIEDAD
piense que esta invitación no es Y UN NUEVO MODO DE
para él, porque “nadie queda ex- SER IGLESIA SON POSIBLES
cluido de la alegría reportada por GRACIAS AL REINADO DE DIOS
el Señor”.»13 S.S. Francisco
23. Esa nueva mirada y espíritu
«Se trata de confirmar, renovar y misioneros que buscamos alcanzar
revitalizar la novedad del Evan- encuentra su inspiración y su fuerza,
gelio arraigada en nuestra histo- tanto en el re-encuentro personal
ria, desde un encuentro personal con Jesucristo, como en la visión de
y comunitario con Jesucristo, que futuro que tenemos sobre nuestra
suscite discípulos y misioneros. arquidiócesis y nuestra región capi-
Ello no depende tanto de grandes tal, que hemos discernido como la
programas y estructuras, sino de voluntad de Dios y que llamamos “el
hombres y mujeres nuevos que en- ideal que nos une y compromete”.
carnen dicha tradición y novedad, No es solamente una idea del futuro
como discípulos de Jesucristo y mi- sino que es la promesa de Dios para
sioneros de su Reino, protagonis- nuestra Iglesia Particular que Él mis-
tas de vida nueva para una Amé- mo está ya haciendo posible por su
rica Latina que quiere reconocerse presencia actuante entre nosotros.
con la luz y la fuerza del Espíritu.» Es la esperanza que nos congrega
DA 11 como comunidad y de la cual quere-
mos ser signo e instrumento; por la
22. Por tanto, comprendemos el que queremos trabajar juntos y por
programa de esta primera etapa, la que estamos dispuestos a hacer
sus proyectos, actividades y tareas, muchos esfuerzos y sacrificios.
como el poner las condiciones para
que el mayor número posible de 24. Las dificultades que hoy re-
católicos de la arquidiócesis pueda conocemos dentro de la vida de
vivir una experiencia de renovado nuestra Iglesia Arquidiocesana, los
encuentro con Jesucristo que ani- antitestimonios y las limitaciones
me, despierte, revitalice nuestro que nos acompañan no son las que

13. S.S. Francisco, EG 3


Arquidiócesis de Bogotá 29

tienen la última palabra, porque el todos, como verdadero pueblo de


Señor de la historia, Jesucristo Re- Dios; y nos impulse a asumir nuestra
sucitado, está aquí presente y con tarea evangelizadora, dóciles al Es-
su amor misericordioso y la fuerza píritu Santo, con ímpetu misionero,
de su Espíritu nos conduce hacia la con actitud dialogante, profética y
vida, hacia el encuentro con la mise- propositiva, en medio de la transi-
ricordia del Padre, hacia el amor a los ción y pluralidad cultural que vivi-
hermanos, hacia la vida de comu- mos; y a participar, junto con otros,
nión desde nuestras diversidades, en la construcción de una sociedad
hacia la misión. De igual manera, las misericordiosa, es decir, justa, re-
dinámicas de indiferencia, de vio- conciliada, solidaria y que cuida de
lencia, de intolerancia, de injusticia la creación. Soñamos, por tanto, con
y de muerte que hay en nuestra re- una Iglesia que por su actitud mise-
gión capital, aunque sean las que ricordiosa vive su condición de ser
más percibimos todos los días, no luz del mundo y sal de la tierra en
son las que tienen la última palabra medio de nuestra región capital.
porque el Reinado de Dios está aquí
presente y su fuerza transformadora 26. Por esto, el Gran Giro es un
-por su dinámica de vida, de justicia, giro hacia la esperanza. Y todas las
de reconciliación, de solidaridad, de actividades que vamos a realizar
misericordia que se hace operativa buscan despertar y alimentar esa
a través de nosotros- nos lleva a la esperanza para que sea el motor de
esperanza y al compromiso con la nuestros esfuerzos y compromisos.
sociedad que anhelamos y que es Es el mismo Jesucristo, quien sale a
posible. nuestro paso, como a los discípulos
de Emaús, para interpelarnos y des-
25. Pero, ¿cuál es ese modo de ser pertar en nosotros la esperanza; una
Iglesia que hemos discernido como esperanza que nos permita inter-
la voluntad de Dios, y en el cual que- pretar, desde la fe, la historia y la si-
remos empezar a trabajar juntos? tuación que estamos viviendo y nos
Soñamos con una Iglesia en la cual anime a ponernos en camino hacia
todos sus miembros vivamos, cul- el cumplimiento de la misión.
tivemos y celebremos una intensa
y profunda adhesión al Señor Jesu- 4.3 CON LA ALEGRÍA DE SER
cristo y a su Reino de misericordia; MIEMBROS DEL PUEBLO
que nos haga ser alegres y coheren- DE DIOS, COMUNIDAD DE
tes discípulos misioneros en medio DISCÍPULOS MISIONEROS EN
de la región capital y que, por tanto, ESTA REGIÓN CAPITAL
nos haga vivir una auténtica vida
27. El Gran Giro hacia un estilo
de comunión entre nosotros y con
o paradigma más misionero de la
30
Arquidiócesis de Bogotá 31
32

evangelización implica una reno- difamaciones sobre la Iglesia, origi-


vación de nuestra relación con la nadas por muchas circunstancias,
Iglesia, de nuestro amor por ella y sean superadas, y que los antitesti-
de nuestro sentido de pertenencia monios al interior de la misma vida
y de participación en ella14. No es de comunión disminuyan significa-
posible ser auténtico discípulo mi- tivamente17. Por eso el cambio que
sionero del Señor Jesucristo, sin vi- buscamos es también un giro hacia
vir la comunión con el Padre, con el la comunidad, hacia la convicción
mismo Jesucristo y el Espíritu Santo, profunda de haber sido llamados a
en la Iglesia15. Ella es Pueblo de Dios, vivir como discípulos misioneros en
Cuerpo de Cristo y Templo del Espí- comunión y en comunidad, y que el
ritu Santo, comunidad de discípulos Espíritu Santo lo hace posible, des-
misioneros, cuya razón de ser y vo- de nuestro sincero y comprometi-
cación fundamental es la evangeli- do esfuerzo por cultivar y construir
zación 16. una auténtica vida comunitaria en
el amor, fundados en nuestra expe-
28. Sólo un compromiso decidido riencia de fe.
de creer y trabajar por la comunión,
don de Dios y tarea de los discípulos 29. Con fuerza nos lo reclama el
del Señor, hará que las prevenciones, Papa Francisco: “A los cristianos de
falsas imágenes, tergiversaciones, todas las comunidades del mundo

14. cf. S.S. Francisco, Mensaje al Comité de una dimensión constitutiva del aconteci-
Coordinación del CELAM, Río de Janeiro, miento cristiano es la pertenencia a una
julio 28 de 2013: «La Misión Continental, comunidad concreta, en la que podamos
sea programática, sea paradigmática, exi- vivir una experiencia permanente de disci-
ge generar la conciencia de una Iglesia que pulado y de comunión con los sucesores de
se organiza para servir a todos los bau- los Apóstoles y con el Papa.»
tizados y hombres de buena voluntad. El 16. Cf. S.S. Pablo VI, EN 14; S.S. Francisco,
discípulo de Cristo no es una persona ais- EG 111: «La evangelización es tarea de la
lada en una espiritualidad intimista, sino Iglesia. Pero este sujeto de la evangeliza-
una persona en comunidad, para darse a ción es más que una institución orgánica y
los demás. Misión Continental, por tanto, jerárquica, porque es ante todo un pueblo
implica pertenencia eclesial.». que peregrina hacia Dios. Es ciertamente
15. Cf. DA 156: «La vocación al discipulado un misterio que hunde sus raíces en la Tri-
misionero es con-vocación a la comunión nidad, pero tiene su concreción histórica
en su Iglesia. No hay discipulado sin comu- en un pueblo peregrino y evangelizador,
nión. Ante la tentación, muy presente en la lo cual siempre trasciende toda necesaria
cultura actual, de ser cristianos sin Iglesia expresión institucional. Propongo detener-
y las nuevas búsquedas espirituales indivi- nos un poco en esta forma de entender la
dualistas, afirmamos que la fe en Jesucris- Iglesia, que tiene su fundamento último en
to nos llegó a través de la comunidad ecle- la libre y gratuita iniciativa de Dios.»; cf.
sial y ella “nos da una familia, la familia Catequesis, audiencia general, enero 15 de
universal de Dios en la Iglesia Católica. La 2014.
fe nos libera del aislamiento del yo, porque 17. Cf. S.S. Francisco, EG 93-101
nos lleva a la comunión”. Esto significa que
Arquidiócesis de Bogotá 33

quiero pediros especialmente un tes- capital nos pone. Tenemos por tanto
timonio de comunión fraterna que la tarea de asumir ese estilo propio,
se vuelva atractivo y resplandecien- de acuerdo con el Evangelio y con el
te. Que todos puedan admirar cómo paradigma de evangelización que
os cuidáis unos a otros, cómo os nos presenta el Plan E.
dais aliento mutuamente, y cómo os
acompañáis…Me duele tanto com- 31. Con las actividades del Gran
probar cómo en algunas comunida- Giro buscamos además despertar o
des cristianas, y aun entre personas afianzar la condición misionera de
consagradas, consentimos diversas nuestra Iglesia, para que sea una
formas de odio, divisiones, calumnias, “Iglesia en salida”; una Iglesia que
difamaciones…¿A quién vamos a comparte una esperanza y se hace
evangelizar con esos comportamien- signo e instrumento de esa espe-
tos? Pidamos al Señor que nos haga ranza en medio de la ciudad y de los
entender la ley del amor. Cuánto bien municipios; una Iglesia que se hace
nos hace amarnos los unos a los otros comunidad alternativa frente a las
en contra de todo… No nos dejemos formas de relación y de asociación
robar el ideal del amor fraterno.” 18 que se promueven en medio de la
cultura urbana y se organiza entor-
30. La construcción de nuestra no a valores trascendentes e inte-
Iglesia Arquidiocesana implica la gralmente humanos; una Iglesia sa-
participación de todos los bautiza- maritana que incide positivamente
dos, puesto que todos somos miem- en la transformación de la realidad
bros del pueblo de Dios y estamos por la vivencia de la misericordia y
llamados a contribuir en su edifica- del cuidado de los demás; una Igle-
ción y misión desde el ejercicio de sia que vive la riqueza de la comu-
nuestra condición bautismal como nión, articulándose en sus distintos
discípulos misioneros, y desde la di- espacios como un organismo vivo,
versidad de formas de participación,
de acuerdo con nuestros estados 18. S.S. Francisco, EG 100-101
de vida, carismas y ministerios reci- 19. También el Papa Francisco nos lo re-
bidos, los oficios y responsabilida- cuerda en EG 120: «En virtud del bautismo
des asumidas19. Nuestra condición recibido, cada miembro del Pueblo de Dios
se ha convertido en discípulo misionero
como ministros ordenados, consa- (cf. Mt 28,19). Cada uno de los bautizados,
grados y laicos, está llamada a asu- cualquiera que sea su función en la Iglesia y
mir un estilo concreto en medio de el grado de ilustración de su fe, es un agente
evangelizador… Todo cristiano es misione-
nuestras circunstancias particulares, ro en la medida en que se ha encontrado
sin perder su carácter universal, pero con el amor de Dios en Cristo Jesús; ya no
respondiendo a los desafíos que la decimos que somos «discípulos» y «misio-
neros», sino que somos siempre “discípulos
evangelización de nuestra región misioneros”».
34

a pesar de la diversidad de sus miembros: las familias, las pe- ...que


queñas comunidades, los movimientos y asociaciones, las pa- Jesucristo
rroquias, el conjunto de toda la Arquidiócesis. sea encontrado,
conocido,
32. Particularmente, buscamos consolidar esa identidad ar- amado y
quidiocesana alrededor del arzobispo, del colegio presbiteral y seguido, para
diaconal, quienes, por su ministerio apostólico, están llamados vivir en Él
relaciones
a ser los primeros en promover, acompañar y trabajar por la co-
de comunión
munión y la unidad, desde un mismo proyecto misionero, que y, desde Él,
permita comunicar vida en abundancia a todos. 20 transformar la
historia hasta
20. Cf. DA 169
la venida de
la Jerusalén
5. ¿CUÁL ES EL NUEVO Celestial

ESTILO O PARADIGMA
EVANGELIZADOR QUE
QUEREMOS ASUMIR?

Paradigma de la
evangelización
en la Arquidióccesis
de Bogotá
Arquidiócesis de Bogotá 35

5.1 ¿A QUÉ LLAMAMOS en la Arquidiócesis de Bogotá es lo


“PARADIGMA DE que llamamos el nuevo “paradigma
EVANGELIZACIÓN”? misionero de evangelización”; y sus
componentes son: a) los hechos sig-
33. La evangelización -en cuanto nificativos de la realidad que más
continuación de la misión de Cristo nos condicionan e interpelan: las
en la historia- tiene un único progra- desigualdades sociales, la transición
ma: que Jesucristo sea encontrado, socio-cultural y religiosa, y el plura-
conocido, amado y seguido, para vivir lismo; b) la Palabra de Dios que nos
en Él relaciones de comunión y, desde ilumina y nos llama a ser una Iglesia
Él, transformar la historia hasta la ve- sal de la tierra y luz del mundo en
nida de la Jerusalén Celestial; así nos medio de estas circunstancias de
lo recordó Juan Pablo II. 21 Sin em- la región capital; c) los dinamismos
bargo, este único programa, en cada que deben caracterizar toda la acti-
Iglesia Particular -como lo es la Ar- vidad evangelizadora para respon-
quidiócesis de Bogotá- debe asumir der a los desafíos que nos pone el
un rostro concreto, unos parámetros contexto y el llamado a una conver-
específicos, unos dinamismos pro- sión pastoral decididamente misio-
pios, de acuerdo con las condicio- nera: salir, hacernos compañeros de
nes históricas y culturales del lugar camino y fermentar; y d) el corazón
y como fruto de un discernimiento o fundamento del paradigma que
pastoral22. Este es el objetivo que se encuentra en la experiencia per-
ha orientado el proceso de cons- sonal y comunitaria de encuentro y
trucción de nuestro nuevo plan de seguimiento de Jesucristo, que lleva
evangelización, ayudándonos a re- a la vivencia de relaciones de comu-
conocer esos rasgos concretos, esos nión con todos, y al compromiso por
dinamismos que deben caracterizar la transformación evangélica de la
nuestra misión evangelizadora en historia hasta la llegada de la pleni-
las condiciones que vive actual- tud de los planes de Dios; experien-
mente nuestra sociedad: pluralismo, cia de fe, esperanza y caridad, que
transición cultural y desigualdades busca comunicarse a todos, por des-
sociales. borde de gratitud y de alegría.
34. Ese conjunto de elementos y No se trata sólo de unos elementos
dinamismos que se han discernido, puntuales, de estrategias, actitu-
que se correlacionan entre sí, y que des, o buenos consejos, sino de un
deben caracterizar la evangelización conjunto de componentes que nos
aportan un marco de análisis e inter-
21. Cf. S.S. Juan Pablo II, Novo Millenio pretación de lo que hoy compren-
Ineunte (NMI) 29c demos por evangelizar la región
22. Cf. NMI 29d
36

capital de Bogotá o, dicho de otra do por el Reino de Dios. Esto es lo


manera, lo que estamos llamados que expresamos bajo el título de
a vivir como discípulos misioneros “nuevo paradigma misionero arqui-
en la región capital actual. Y muy diocesano de evangelización” y que
especialmente configuran, desde buscamos asimilar, con prioridad, en
sus fundamentos bíblicos, teológi- los primeros años de implementa-
cos y pastorales, la espiritualidad ción de plan.
que debe inspirar y acompañar toda
nuestra labor evangelizadora para 5.2 ¿CUÁLES SON LOS
que sea encarnada y nos capacite DINAMISMOS QUE
para conducir la historia con Cris- COMPONEN EL NUEVO
to hacia la plenitud del Reino de la PARADIGMA MISIONERO
Vida, en el contexto de nuestra re- DE EVANGELIZACIÓN DE LA
gión capital. ARQUIDIÓCESIS?
35. A partir de la apropiación de 36. Los tres dinamismos que he-
este paradigma, y, particularmen- mos discernido como necesarios
te, de los dinamismos discernidos, para responder a los desafíos que
esperamos tener otra mirada sobre el tiempo presente y el contexto
nosotros mismos y sobre nuestra le pone a nuestra condición como
condición misionera y ciudadana discípulos misioneros, y que deben
como fieles cristianos; esperamos inspirar y caracterizar toda nuestra
impregnar y renovar todo lo que acción evangelizadora para llegar a
ya estamos haciendo con un nuevo ser una Iglesia sal de la tierra y luz
espíritu misionero; esperamos tener del mundo, en medio de la región
un horizonte distinto para plantear y capital, son23: a) Salir al encuen-
crear nuevos proyectos evangeliza- tro de Dios que vive en nuestra
dores que nos hagan ser una “Iglesia región capital, b) Hacernos com-
en salida” y nos encaminen con un pañeros de camino para cuidar y
estilo propio hacia el futuro que an- anunciar la obra de Dios en la vida
helamos con esperanza. Pero, sobre de todos, y c) Fermentar la socie-
todo, esperamos identificarnos más dad, desde el Reinado de Dios,
con Nuestro Señor Jesucristo, con su por la comunión y el servicio.
corazón misericordioso y misionero,
para brillar y dar sabor en medio de 37. Estos dinamismos, que espe-
nuestra región capital, como Buena ramos sean asumidos por todos los
Nueva, Sal y Luz, que inspira y hace fieles cristianos de la arquidiócesis,
posible una nueva forma de vivir y se fundamentan, como lo hemos
un compromiso misionero renova- dicho, en la vivencia personal y co-
munitaria de la experiencia de en-
23. Cf. PE 35-53. cuentro, amor y seguimiento del
Arquidiócesis de Bogotá 37

Señor Jesucristo, en el cultivo de las gelizador, origen y modelo de


relaciones de comunión que brotan nuestra acción evangelizadora, sa-
de este seguimiento, y en la cons- lió de sí mismo para ser fiel a la mi-
ciencia y compromiso de ser llama- sión del Padre y a su amor por los
dos por el Señor a participar en la hombres, sus hermanos: “siendo
transformación evangélica de la his- de condición divina, no hizo alarde
toria hasta la manifestación plena de su categoría divina, al contrario
del Reino de Dios, que la tradición se anonadó y tomó la condición de
bíblica llama la venida de la Jerusa- esclavo, y pasó por uno de tantos. Y
lén Celestial 24. en su condición de hombre se humi-
lló a sí mismo haciéndose obedien-
a. SALIR AL ENCUENTRO DE te hasta la muerte y una muerte de
DIOS QUE VIVE EN LA REGIÓN cruz.” (Fil 2,5ss). Este dinamismo de
CAPITAL salida misericordiosa, propio de la
38. El primer dinamismo que debe pedagogía divina, hoy más que
caracterizar la evangelización en la nunca debemos asumirlo como el
Arquidiócesis de Bogotá es un mo- corazón mismo de nuestra misión
vimiento de adentro hacia afuera, evangelizadora. El Misterio de la
un movimiento de salida, que se en- Encarnación es en primera ins-
tiende en varios sentidos: tancia un misterio de salida para
ir al encuentro de la humanidad.
• 39. Nuestra acción evangelizado- La vida entera de Jesús fue un
ra, en cuanto servicio al plan de la permanente movimiento de sali-
salvación que Dios sigue llevando da, de sí mismo, para ir al servicio
a cabo en la historia de la huma- de la voluntad salvífica del Padre,
nidad y en la historia particular de quien actúa en la historia en favor
esta región capital, debe caracteri- de toda la humanidad, como Él
zarse por un permanente dinamis- mismo lo dijo: «Jesús, pues, toman-
mo de salida; pues este plan tiene do la palabra, les decía: “En verdad,
su origen en la infinita sabiduría y en verdad les digo: el Hijo no puede
misericordia de Dios quien, por su hacer nada por su cuenta, sino lo
Hijo Jesucristo y el Espíritu Santo, que ve hacer al Padre: lo que hace
ha querido salir de sí para hacer a Él, eso también lo hace igualmente
todos los seres humanos partíci- el Hijo. Porque el Padre quiere al Hijo
pes de su vida de comunión, libe- y le muestra todo lo que él hace. Y
rándolos de todo aquello que les le mostrará obras aún mayores que
impide vivir en plenitud este don. estas, para que se asombren.”» (Jn
El mismo Jesucristo, primer evan- 5,19-20).

24. Cf. Ap 21
38
Arquidiócesis de Bogotá 39
40

• 40. Todos los miembros del pue- de la condición bautismal que


blo de Dios, en virtud de nuestro nos une a todos los católicos, y
bautismo, somos llamados a ser que hoy más que nunca debemos
evangelizadores. El bautismo nos cultivar, para que todos vivamos
hace a todos partícipes de esta intensamente nuestra misión y su-
tarea, puesto que nos inicia en peremos la tentación que muchos
una nueva identidad como discí- tienen de reducir el ser católico a
pulos misioneros de Jesucristo, la realización de ciertos ritos reli-
la cual nos pone en movimiento giosos, al margen de la vida con-
de salida hacia la trascendencia, creta que llevamos en la ciudad o
hacia la vida de comunión y ha- en los municipios. 25
cia la misión de comunicar vida a
los demás; por el bautismo somos • 41. El Señor Jesucristo ha con-
todos enviados a compartir con gregado a su Iglesia y la ha en-
la humanidad entera la alegría de viado al mundo, con la fuerza
nuestro encuentro con Jesucristo del Espíritu Santo, a evangelizar:
y la vida plena que Él nos comuni- «Vayan al mundo entero y hagan
ca, apartándonos así de la tenden- discípulos a todas las gentes, bau-
cia actual al encerramiento sobre tizándolas en el nombre del Padre
sí mismos, a buscar sólo el propio y del Hijo y del Espíritu Santo» (Mt
bienestar, al margen del bien de 28,19). Este es el mandato del Se-
los demás. La tarea evangelizado- ñor, un mandato para salir e ir al
ra nace en este dinamismo propio encuentro de los otros, no para
esperar a que los otros vengan26.

25. Cf. S.S. Francisco, Mensaje al Comité de tensionado hacia las periferias... incluso
Coordinación del Celam, Río de Janeiro, las de la eternidad en el encuentro con Je-
Julio 28 de 2013: «El discipulado misione- sucristo. En el anuncio evangélico, hablar
ro es vocación: llamado e invitación. Se da de “periferias existenciales” des-centra,
en un “hoy” pero “en tensión”. No existe el y habitualmente tenemos miedo a salir
discipulado misionero estático. El discípulo del centro. El discípulo-misionero es un
misionero no puede poseerse a sí mismo, su des-centrado: el centro es Jesucristo, que
inmanencia está en tensión hacia la tras- convoca y envía. El discípulo es enviado a
cendencia del discipulado y hacia la tras- las periferias existenciales.».
cendencia de la misión. No admite la auto- 26. Cf. S.S. Francisco, EG 20: «En la Pa-
rreferencialidad: o se refiere a Jesucristo o labra de Dios aparece permanentemente
se refiere al pueblo a quien se debe anun- este dinamismo de «salida» que Dios quie-
ciar. Sujeto que se trasciende. Sujeto pro- re provocar en los creyentes. Abraham
yectado hacia el encuentro: el encuentro aceptó el llamado a salir hacia una tierra
con el Maestro (que nos unge discípulos) y nueva (cf. Gn 12,1-3). Moisés escuchó el lla-
el encuentro con los hombres que esperan mado de Dios: «Ve, yo te envío» (Ex 3,10),
el anuncio. Por eso, me gusta decir que la e hizo salir al pueblo hacia la tierra de la
posición del discípulo misionero no es una promesa (cf. Ex 3,17). A Jeremías le dijo:
posición de centro sino de periferias: vive «Adondequiera que yo te envíe irás» (Jr
Arquidiócesis de Bogotá 41

Sin embargo, reconocemos que a para así redescubrir el valor de la


veces nos acostumbramos a en- Eucaristía y los demás sacramen-
contrarnos con Dios dentro de las tos como celebración que actua-
mediaciones eclesiales, olvidando liza el Misterio Pascual de Cristo
que es el Dios de la misericordia en la historia concreta que viven
en la historia, a quien le interesa hombres y mujeres de nuestra re-
lo que pasa en la vida concreta de gión capital. Salir implica por tan-
cada ser humano en medio de la to el desarrollo de la capacidad de
ciudad y de los municipios, y es allí contemplar 28, para reconocer en
donde en primer lugar quiere ser el cambio constante de la historia
reconocido, alabado y servido.27 la presencia actuante y misericor-
Promover entonces una Iglesia y diosa de Dios que no busca otra
una evangelización “en salida”, cosa que la libertad y la vida ple-
de acuerdo con el mandato misio- na para todos, y así ponernos a su
nero, implica en primer lugar para servicio, desde una espiritualidad
nosotros redescubrir a Dios en la encarnada y misericordiosa, con
historia concreta de los habitan- toda la riqueza de dones e instru-
tes de la ciudad y los municipios, mentos que el Señor le ha dado a
reconocer y salir al encuentro de su Iglesia.
Jesús presente en la vida de la so-
ciedad, en medio de sus luces y de • 42. Salir, como actitud y criterio
sus sombras; reconocerlo en las permanente de cualquier activi-
actividades cotidianas, en aque- dad evangelizadora que realice-
llos que sufren y en sus clamores, mos en la región capital, implica

1,7). Hoy, en este «id» de Jesús, están pre- que busquemos y contemplemos al Dios de
sentes los escenarios y los desafíos siempre la vida también en los ambientes urbanos.”
nuevos de la misión evangelizadora de 28. Cf. EG 71: «Necesitamos reconocer la
la Iglesia, y todos somos llamados a esta ciudad desde una mirada contemplativa,
nueva «salida» misionera. Cada cristiano esto es, una mirada de fe que descubra
y cada comunidad discernirá cuál es el ca- al Dios que habita en sus hogares, en sus
mino que el Señor le pide, pero todos somos calles, en sus plazas. La presencia de Dios
invitados a aceptar este llamado: salir de acompaña las búsquedas sinceras que per-
la propia comodidad y atreverse a llegar sonas y grupos realizan para encontrar
a todas las periferias que necesitan la luz apoyo y sentido a sus vidas. Él vive entre
del Evangelio.» los ciudadanos promoviendo la solidari-
27. Cf. DA 514ª: “La fe nos enseña que Dios dad, la fraternidad, el deseo de bien, de
vive en la ciudad, en medio de sus alegrías, verdad, de justicia. Esa presencia no debe
anhelos y esperanzas, como también en sus ser fabricada sino descubierta, develada.
dolores y sufrimientos. Las sombras que Dios no se oculta a aquellos que lo buscan
marcan lo cotidiano de las ciudades, como con un corazón sincero, aunque lo hagan
por ejemplo, violencia, pobreza, individua- a tientas, de manera imprecisa y difusa.»
lismo y exclusión, no pueden impedirnos
42

además asumir las consecuencias nernos en camino hacia las peri-


de estar afuera: dejar nuestras ferias del sufrimiento humano,
seguridades, bajándonos de pues es allí donde el Señor Jesús
nuestra cabalgadura, de nuestra quiere ser escuchado, reconocido,
comodidad, de nuestros vanos servido, con prontitud. Sólo pode-
orgullos e intolerancia, de nuestra mos corresponder a la iniciativa
“autoreferencialidad”, para vivir la de Dios que nos amó primero, sa-
cultura del encuentro desde la hu- liendo a amar primero a aquellos
mildad del Evangelio; para asumir que sufren, que están excluidos,
el riesgo de la inseguridad, de la que necesitan de nuestra ayuda;
persecución, del rechazo, de ser movimiento que el Papa Francis-
uno más en medio de otros; pero co llamó “primerear” 30 . Salida que
de igual manera, para abrirnos a asume en primer lugar el rostro y
las sorpresas de Dios, a su creati- las actitudes del buen samaritano,
vidad y novedad constantes. Salir, es decir, de la misericordia, que
despojándonos de nosotros mis- está atenta a lo que pasa al borde
mos, como Jesús lo hizo, para ha- del camino, se conmueve y actúa
cernos más capaces de amar y ser- hasta alcanzar la libertad, el bien,
vir. «Entre una Iglesia accidentada la vida plena para los otros.
por salir a la calle y una Iglesia en-
ferma de autorreferencialidad, pre- • 44. Afrontar el pluralismo y la
fiero sin duda la primera», ha dicho transición cultural que vivimos
explícitamente el Papa Francisco nos plantea el desafío de di-
en sus enseñanzas29. versificar nuestras formas de
evangelizar, nuestros lenguajes,
• 43. Salir, como dinamismo de nuestras actitudes, nuestras me-
nuestra evangelización, significa todologías; para poder así salir y
también la determinación de po- hacernos también presentes, con

29. S.S. Francisco, Mensaje para la 48ª. confines de la tierra» (Hch 1,8). Abrir las
Jornada Mundial de las Comunicaciones puertas de las iglesias significa abrirlas
(2014): «Lo repito a menudo: entre una asimismo en el mundo digital, tanto para
Iglesia accidentada por salir a la calle y que la gente entre, en cualquier condición
una Iglesia enferma de autorreferencia- de vida en la que se encuentre, como para
lidad, prefiero sin duda la primera. Y las que el Evangelio pueda cruzar el umbral
calles del mundo son el lugar donde la del templo y salir al encuentro de todos.»;
gente vive, donde es accesible efectiva y Cf. S.S. Francisco, Mensaje a los jóvenes
afectivamente. Entre estas calles también argentinos, Río de Janeiro, Julio 25 de
se encuentran las digitales, pobladas de 2013: «Quiero que la Iglesia salga a la calle»
humanidad, a menudo herida: hombres y 30. Cf. S.S. Francisco, EG 24 (“primerear”)
mujeres que buscan una salvación o una y 197-201 (El lugar privilegiado de los po-
esperanza. Gracias también a las redes, el bres en el pueblo de Dios)
mensaje cristiano puede viajar «hasta los
Arquidiócesis de Bogotá 43

una actitud dialogante, proféti- camino para asumir el compromi-


ca y propositiva, en los contextos so que nuestra opción de servicio
culturales modernos y posmoder- al Reino de Dios nos pide.
nos, en los mundos virtuales, en
las dinámicas de la globalización y Buscamos, por tanto que todos
en los procesos de transformación los católicos vivan en actitud de
de la experiencia religiosa, del plu- salida, que nuestros programas y
ralismo religioso actual. Necesi- proyectos evangelizadores sean
tamos salir de la creencia de que pensados y diseñados desde una
todos los colombianos somos ca- opción de salida.
tólicos y hemos nacido católicos,
b. HACERNOS COMPAÑEROS
para asumir el gran desafío de la
DE CAMINO PARA CUIDAR Y
acción misionera, de proponer
con creatividad el Evangelio, de ir ANUNCIAR
a buscar a los alejados, a los heri- 45. El segundo dinamismo que debe
dos, por causa de nuestros antites- caracterizar nuestra acción evange-
timonios, de ir a buscar a aquellos lizadora en la Arquidiócesis de Bo-
que estando en sintonía con el gotá, en medio del pluralismo, los
Evangelio, no hallan un lugar en la cambios culturales y las desigual-
Iglesia en el cual se sientan interlo- dades sociales, es el movimiento
cutores.31 De igual manera, las in- de hacernos cercanos y de caminar
justicias sociales, la necesidad pro- juntos para cuidar y anunciar la obra
funda de reconciliación y paz, de de Dios en cada uno, particularmen-
un diálogo social que fomente el te en aquellos que más sufren; un
bien común; así como el dolor de movimiento que hace referencia a
las víctimas, de los excluidos, de varios aspectos que debemos tener
quienes sufren en nuestra región en cuenta:
capital, son hechos que interpelan
nuestra condición como discípu- • 46. Los católicos de la Arquidió-
los misioneros y nos llaman a salir cesis de Bogotá estamos llama-
de la indiferencia y a ponernos en dos, hoy más que nunca, a asumir

31. Cf. S.S. Francisco, Mensaje a los Obispo autorreferencial, prisionera de su propio
Brasileños, Río de Janeiro, julio 27 de 2013, lenguaje rígido; tal vez el mundo parece
No. 3: «Releamos una vez más el episodio haber convertido a la Iglesia en una reli-
de Emaús desde este punto de vista (Lc quia del pasado, insuficiente para las nue-
24, 13-15). … Es el misterio difícil de quien vas cuestiones; quizás la Iglesia tenía res-
abandona la Iglesia; …Tal vez la Iglesia se puestas para la infancia del hombre, pero
ha mostrado demasiado débil, demasia- no para su edad adulta.[4] El hecho es que
do lejana de sus necesidades, demasiado actualmente hay muchos como los dos dis-
pobre para responder a sus inquietudes, cípulos de Emaús.»
demasiado fría para con ellos, demasiado
44

en nuestra vida como evangeliza- constituyó a sus discípulos en el


dores la misma actitud de Dios, nuevo pueblo de Dios, entorno
quien para liberarnos y hacernos al grupo de los Doce Apóstoles,
partícipes de su vida de comunión haciéndolos a todos compañeros
en el amor ha querido no sólo dar- de camino y enviándolos a evan-
se a conocer, sino además, hacerse gelizar. Su cercanía y compromiso
cercano, solidario y compañero de de amor por todos llega hasta su
camino de la humanidad. Es Dios entrega total en la Cruz y la partici-
quien por su amor infinito ha to- pación del triunfo de su Resurrec-
mado la iniciativa de establecer ción, para hacernos partícipes de
un diálogo de salvación32 , una una vida nueva de comunión. Hoy
alianza, hasta el extremo de en- nuestra acción evangelizadora en
viar a su Hijo único para asumir la región capital de Bogotá debe
en todo nuestra condición huma- responder y ser expresión de esa
na, menos en el pecado; para po- voluntad de cercanía, encuentro,
der compadecerse de nosotros, diálogo y acompañamiento pro-
como verdadero hermano de los pios de la pedagogía divina a lo
hombres y hacernos partícipes largo de la historia de la salvación.
de la salvación 33. Jesús, con toda
su actividad evangelizadora, se • 47. La acción evangelizadora que
puso al servicio de la misericordia ya estamos llevando a cabo, así
del Padre Celestial, haciéndose como la que debemos crear, debe-
compañero de camino de todos, mos realizarla desde la actitud de
particularmente de los más débi- cercanía y solidaridad hacia todos
les. Compartió el camino, la mesa, los habitantes de la región capital;
la palabra; se hizo solidario con es decir, desde la iniciativa de ha-
los sufrimientos y necesidades cernos compañeros de camino de
de aquellos con quienes se en- los cercanos, de los lejanos, de los
contró y los hizo partícipes de la extraños, de los creyentes y no cre-
misericordia del Padre. Y para dar yentes; aprendiendo a escuchar
continuidad a su misión llamó y primero a los otros, a entablar el

32. Cf. S.S. Pablo VI, Ecclesiam Suam, 29: nos amó el primero; nos corresponderá a
29. «Hace falta que tengamos siempre nosotros tomar la iniciativa para extender
presente esta inefable y dialogal relación, a los hombres el mismo diálogo, sin espe-
ofrecida e instaurada con nosotros por rar a ser llamados. El diálogo de la salva-
Dios Padre, mediante Cristo en el Espíritu ción nació de la caridad, de la bondad divi-
Santo, para comprender qué relación de- na: De tal manera amó Dios al mundo que
bamos nosotros, esto es, la Iglesia, tratar le dio su Hijo unigénito; no otra cosa que
de establecer y promover con la humani- un ferviente y desinteresado amor deberá
dad. El diálogo de la salvación fue abierto impulsar el nuestro.»
espontáneamente por iniciativa divina: El 33. cf. Heb 5,1-14.
Arquidiócesis de Bogotá 45

diálogo respetuoso con otros, sin por las necesidades y sufrimientos


imponer, sin juzgar, cultivando de la gente nos hará ser testigos
así una cultura del encuentro34. coherentes, hará crecer la confian-
Hay que trabajar por hacernos so- za de los otros en nuestro anuncio
lidarios con todo lo humano que y se reconocerá el valor y la impor-
se teje en la región capital35 , para tancia de nuestra propuesta. Evan-
que caminando juntos podamos gelizar no es hacer proselitismo
hacernos capaces de identificar con el Evangelio sino compartir
las necesidades profundas de los con aquellos con quienes vamos
otros, sus inquietudes, sus aspi- caminando juntos la alegría de
raciones vitales, como Jesús en el nuestro encuentro con Jesucristo
camino de Emaús y, así, poder po- que nos lanza a ser profundamen-
nernos a su servicio, como el Buen te solidarios y comprometidos por
Samaritano, para sanar las heridas, amor con todos. 36
curar los dolores, atender a los
sufrimientos, especialmente de • 48. La cercanía respetuosa a los
quienes están en las periferias de que piensan distinto, la actitud
nuestra sociedad urbana y rural; y de encuentro y diálogo, el hacer
para anunciar de manera más en- camino juntos, el ser misericordio-
carnada la alegría del Evangelio. sos con los que sufren, es lo que
Esta actitud de acompañamiento, nos lleva a discernir y reconocer
de interés y solidaridad efectiva la obra de salvación que Dios

34. Cf. S.S. Francisco, Mensaje para la 48ª. 36. Cf. S.S. Francisco, EG 87: «Hoy, que las
Jornada Mundial de las Comunicaciones redes y los instrumentos de la comunica-
(2014): «Comunicaciones al servicio de una ción humana han alcanzado desarrollos
cultura del encuentro» inauditos, sentimos el desafío de descubrir
35. Cf. Concilio Vaticano II, GS 1: «Los y transmitir la mística de vivir juntos, de
gozos y las esperanzas, las tristezas y las mezclarnos, de encontrarnos, de tomarnos
angustias de los hombres de nuestro tiem- de los brazos, de apoyarnos, de participar
po, sobre todo de los pobres y de cuantos de esa marea algo caótica que puede con-
sufren, son a la vez gozos y esperanzas, vertirse en una verdadera experiencia de
tristezas y angustias de los discípulos de fraternidad, en una caravana solidaria,
Cristo. Nada hay verdaderamente huma- en una santa peregrinación. De este modo,
no que no encuentre eco en su corazón. La las mayores posibilidades de comunica-
comunidad cristiana está integrada por ción se traducirán en más posibilidades
hombres que, reunidos en Cristo, son guia- de encuentro y de solidaridad entre todos.
dos por el Espíritu Santo en su peregrinar Si pudiéramos seguir ese camino, ¡sería
hacia el reino del Padre y han recibido la algo tan bueno, tan sanador, tan libera-
buena nueva de la salvación para comuni- dor, tan esperanzador! Salir de sí mismo
carla a todos. La Iglesia por ello se siente para unirse a otros hace bien. Encerrarse
íntima y realmente solidaria del género en sí mismo es probar el amargo veneno
humano y de su historia». de la inmanencia, y la humanidad saldrá
perdiendo con cada opción egoísta que ha-
gamos.» y además en: 81-83; 87-92.
46

está haciendo en cada historia lo hacemos como discípulos mi-


personal, en la historia de familias sioneros llamados a vivir como
y comunidades, para ponernos a pueblo de Dios y a servir a la
su servicio, ayudando a cada uno comunión 37; por tanto, a la hora
a tomar consciencia de esa gra- de evangelizar debemos buscar
cia del Señor y de su reinado de siempre la edificación de una vida
misericordia y a ser dóciles a ella. en comunidad, por la participa-
Cultivar esta actitud de encuentro ción activa y orgánica de todos,
y discernimiento nos permite po- cada uno desde su estado de vida,
ner al servicio de la obra del Señor desde su ministerio o carisma pro-
en cada persona y comunidad los pio, venciendo la tentación del
maravillosos instrumentos que individualismo que contamina
hemos recibido del mismo Señor nuestra sociedad y actuando au-
para la evangelización y que son ténticamente como el Cuerpo de
signos del Reinado de Dios: el Cristo que somos. Hay que desa-
anuncio de la Palabra, la celebra- rrollar las habilidades comunica-
ción de los sacramentos, la acción tivas y comunitarias necesarias,
caritativa, la vida de comunidad. cultivar los lazos de fraternidad y
Cada uno de estos instrumentos el sentido de pertenencia de unos
de gracia debe adaptarse, incultu- hacia otros; de tal manera que nos
rarse, encarnarse en este contexto sintamos responsables unos de
de pluralismo y de transición cul- otros, atentos a sus necesidades y
tural, para servir eficazmente a esa comprometidos con ellos en una
presencia salvífica del Señor que caridad efectiva, particularmen-
quiere hacer de cada historia de te con los que más sufren 38. Se
los hombres y mujeres de nuestra trata entonces de caminar juntos
región capital una historia de sal- viviendo el don de la comunión
vación. como Iglesia, desde el ejercicio de
una ética del cuidado, de la mise-
• 49. Este dinamismo nos recuer- ricordia, del encuentro, que nos
da además que al evangelizar, permita conformar comunidades

37. S.S. Francisco, Mensaje al Comité de la autorreferencialidad: o se refiere a Je-


Coordinación del CELAM, Río de Janeiro, sucristo o se refiere al pueblo a quien se
julio 28 de 2013.: «El discipulado misione- debe anunciar. Sujeto que se trasciende.
ro es vocación: llamado e invitación. Se da Sujeto proyectado hacia el encuentro: el
en un “hoy” pero “en tensión”. No existe el encuentro con el Maestro (que nos unge
discipulado misionero estático. El discípu- discípulos) y el encuentro con los hombres
lo misionero no puede poseerse a sí mis- que esperan el anuncio».
mo, su inmanencia está en tensión hacia 38. Cf. S.S. Benedicto XVI, Mensaje para
la trascendencia del discipulado y hacia la cuaresma 2012 y 2013.
la trascendencia de la misión. No admite
Arquidiócesis de Bogotá 47

alternativas a los modelos actua- transición, así como la superación


les y ser fuente de esperanza para de la situación de desbordamien-
la vida de las relaciones humanas to de las actividades, nos exige
en el mundo. un verdadero trabajo eclesial
de conjunto, con unidad de cri-
• 50. Hacernos compañeros de terios, en el que se desarrolle
camino nos lleva a la compren- la complementariedad de los
sión de los múltiples procesos de carismas y ministerios, el lideraz-
primer anuncio, de iniciación cris- go de equipo; y por tanto, un tra-
tiana y de formación permanente bajo en el cual, como nos lo pide
de la fe, que realizamos dentro de el Papa Francisco, se superen las
la actividad evangelizadora, no actitudes contrarias al amor, entre
como un adoctrinamiento, o un ministros ordenados y laicos, en-
acto simple de transmisión de co- tre ministros ordenados y la vida
nocimientos, sino como el acom- consagrada, entre comunidades,
pañamiento y anuncio que la co- grupos o movimientos etc. 39 Hoy
munidad entera ofrece a cada uno más que nunca debemos trabajar
de sus miembros para que madure en la Arquidiócesis de Bogotá por
en su vida de fe, en su conversión una evangelización orgánica y de
al Señor Jesús, en el desarrollo de conjunto que congregue las diver-
sus carismas, en el ejercicio de su sidades, que articule las fuerzas vi-
compromiso misionero. Procesos vas eclesiales y nos permita actuar
de formación desde una peda- y caminar con un solo corazón y
gogía del cuidado, es decir, pen- una sola alma, de manera perti-
sados desde lo que los otros nece- nente, eficaz y que incida evangé-
sitan en su proceso de conversión, licamente sobre nuestra sociedad.
desde el discernimiento de la obra
de Dios en cada uno, poniendo así c. FERMENTAR LA SOCIEDAD
los medios al servicio del fin y no POR LA COMUNIÓN Y EL
al contrario. Entendiendo enton- SERVICIO
ces todo el servicio de la forma-
ción no como una instrucción que 52. El tercer dinamismo que debe
se imparte, sino como un camino caracterizar toda acción evangeliza-
que se comparte desde el testimo- dora en la Arquidiócesis de Bogotá,
nio de nuestra fe. y que es complementario a los dos
anteriores, es la referencia perma-
• 51. La complejidad de los desa- nente al proceso transformador y li-
fíos que implica la evangelización berador que el Reinado de Dios des-
de una sociedad urbana y rural en pliega en la región capital, en medio
de las desigualdades sociales, el plu-
39. Cf. S.S. Francisco, EG 81-83; 98-101 ralismo y la transición cultural, y al
48

servicio del cual debe ponerse toda • 54. La vida nueva que brota del
actividad eclesial. Este dinamismo encuentro con Cristo, nos recuer-
de ser fuente de transformación a dan los obispos en Aparecida,
modo de fermento nos lleva a tener «toca al ser humano entero y de-
presente varios aspectos: sarrolla en plenitud la existencia
humana en su dimensión personal,
• 53. Jesús describe el Reino de familiar, social y cultural…No po-
Dios como la levadura que hace demos concebir una oferta de vida
crecer la masa; discreta pero efec- en Cristo sin un dinamismo de libe-
tivamente, va haciendo que las ración integral, de humanización,
realidades humanas se vayan im- de reconciliación y de inserción so-
pregnando de la vida de comu- cial»43 ; de ahí que pueda enten-
nión divina y se transformen evan- derse la evangelización en térmi-
gélicamente conforme al plan de nos de un servicio a la Vida Plena
la salvación40 : «¿A qué compararé en Cristo para todos los seres hu-
el Reino de Dios? Es semejante a manos. Hoy la práctica evangeliza-
la levadura que tomó una mujer y dora en la región capital está lla-
la metió en tres medidas de hari- mada a ponerse al servicio de esa
na, hasta que fermentó todo.» (Lc Vida Plena, que genera una trans-
13,20-21) La evangelización en formación de todo el ser humano
cuanto servicio al Reino debe asu- y de todos los seres humanos, pro-
mir la misma forma: ser fermento moviendo el compromiso de cada
de la sociedad, desde el reconoci- bautizado, desde su estado de
miento y servicio a la obra de Dios vida, y de cada comunidad, por la
en cada persona, espacio y co- justicia, la reconciliación, la solida-
munidad en esta región capital 41. ridad y el cuidado de la creación.
Toda acción evangelizadora que
realicemos debe por tanto desa- • 55. Asumir este tercer dinamis-
rrollar esta dimensión transforma- mo implica además el reconoci-
dora de la cultura y de la sociedad, miento de nuestra ciudad y su
como lo enseñó el Papa Pablo VI 42. cultura en expansión, al igual que

40. Cf. S.S. Francisco, EG 180: «La pro- drá por añadidura” (Mt 6,33).»
puesta es el Reino de Dios (cf. Lc 4,43); se 41. Cf. DA 366: «La conversión personal
trata de amar a Dios que reina en el mun- despierta la capacidad de someterlo todo
do. En la medida en que Él logre reinar al servicio de la instauración del Reino de
entre nosotros, la vida social será ámbito Vida.»
de fraternidad, de justicia, de paz, de dig-
nidad para todos. Entonces, tanto el anun- 42. Cf. S.S. Pablo VI, EN 18-20; Arquidióce-
cio como la experiencia cristiana tienden sis de Bogotá, “El Plan E y su construcción”,
a provocar consecuencias sociales. Busca- Documento 2 del Plan de Evangelización,
mos su Reino: “Buscad ante todo el Reino 63-67
de Dios y su justicia, y todo lo demás ven- 43. DA 142
Arquidiócesis de Bogotá 49

de la sociedad rural, como una la escuela donde se eduquen hom-


obra humana, fruto del ingenio y bres capaces de hacer historia, para
de las capacidades humanas, que impulsar eficazmente con Cristo la
goza de una legítima autonomía, historia de nuestros pueblos hacia
sin por ello dejar de estar enrique- el Reino…. Para que América Latina
cida por la presencia creadora y sea capaz de convertir sus dolores
salvífica del misterio de la Pascua en crecimiento hacia una sociedad
de Cristo44. La consecuencia fun- verdaderamente participada y fra-
damental de esta convicción es ternal, necesita educar hombres
que la Iglesia y su acción evangeli- capaces de forjar la historia según
zadora están llamadas a reconocer la «praxis» de Jesús, entendida
el mundo urbano-rural, en toda como la hemos precisado a partir
su riqueza, complejidad y drama de la teología bíblica de la histo-
humano, como un interlocutor ria. El continente necesita hombres
con quien interactúa, dando y conscientes de que Dios los llama a
recibiendo mutuamente, desde la actuar en alianza con él. Hombres
riqueza del Evangelio. 45 de corazón dócil, capaces de hacer
suyos los caminos y el ritmo que la
• 56. También este dinamismo nos Providencia indique. Especialmente
invita al necesario reconocimiento capaces de asumir su propio dolor
de la capacidad transformadora y el de nuestros pueblos y conver-
del pueblo de Dios, llamado en tirlos, con espíritu pascual, en exi-
virtud de la alianza, a ser forjador gencias de conversión personal, en
de la historia, como lo recordaban fuente de solidaridad con todos los
los obispos en Puebla: «Para los que comparten este sufrimiento y en
mismos cristianos, la Iglesia debería desafío para la iniciativa y la imagi-
convertirse en el lugar donde apren- nación creadoras.»46 Hablamos de
den a vivir la fe experimentándola y un poder transformador, propio
descubriéndola encarnada en otros. del amor misericordioso de Dios,
Del modo más urgente, debería ser que es descrito por Jesús median-

44. Cf. GS 41: «El Evangelio enuncia y pro- y Creador, e igualmente, también Señor
clama la libertad de los hijos de Dios, re- de la historia humana y de la historia de
chaza todas las esclavitudes, que derivan, la salvación, sin embargo, en esta misma
en última instancia, del pecado; respeta ordenación divina, la justa autonomía de
santamente la dignidad de la conciencia lo creado, y sobre todo del hombre, no se
y su libre decisión; advierte sin cesar que suprime, sino que más bien se restituye a
todo talento humano debe redundar en su propia dignidad y se ve en ella conso-
servicio de Dios y bien de la humanidad; lidada.»
encomienda, finalmente, a todos a la ca- 45. Cf. GS 40-45: Cap. IV Misión de la Igle-
ridad de todos. Esto corresponde a la ley sia en el mundo contemporáneo
fundamental de la economía cristiana.
Porque, aunque el mismo Dios es Salvador 46. DP 273-279
50

te las metáforas del “fermento”, de reacción: desear, buscar y cuidar el


la “semilla”, de la “sal” y de la “luz”, bien de los demás» .47
que desde una presencia discreta,
a veces vista, a veces no vista, pero • 58. La acción evangelizadora de
sentida, que crece y hace crecer, la arquidiócesis debe ser entonces
va comprometiendo las liberta- una actualización permanente del
des humanas en una opción por compromiso por el cuidado de los
comunicar la vida en abundancia otros, cercanos y lejanos, por la so-
que el mismo Dios quiere para to- lidaridad con el que sufre, con los
dos los seres humanos. pobres, con aquellos que están ex-
cluidos en medio de nuestra ciu-
• 57. Este tercer dinamismo nos dad y municipios, y que necesitan
mueve a tomarnos en serio el una ayuda concreta; debe llevar
mandamiento del amor al pró- a que todos trabajemos, personal
jimo, puesto que la caridad efec- y comunitariamente por ser ins-
tiva debe guiar e inspirar toda la trumentos de reconciliación, de
dimensión social de la evangeli- justicia, de inclusión social de los
zación. Como nos lo enseñó Jesús, pobres, de diálogo social; debe
es la vivencia del amor misericor- promover el trabajo, junto con
dioso del Padre en toda circuns- otros, por la construcción de una
tancia de la vida -particularmen- sociedad más en consonancia
te en la solidaridad y ayuda a los con el reino de la vida plena en
más pobres y a quienes sufren- lo Cristo, de una sociedad más justa,
que hace que se haga visible y se equitativa, respetuosa, promoto-
manifieste el Reinado de Dios y el ra de la dignidad humana y de la
proceso transformador y liberador creación, de una sociedad cuyos
que genera. Nos recuerda el Papa: valores y realizaciones sean anti-
«Desde el corazón del Evangelio cipo y preparación de la Jerusalén
reconocemos la íntima conexión celestial, que aguardamos de lo
que existe entre evangelización y alto, y de la cual somos germen y
promoción humana, que necesa- fermento.
riamente debe expresarse y desa-
rrollarse en toda acción evangeli- • 59. Pensarnos como católicos
zadora. La aceptación del primer que fermentan la sociedad urba-
anuncio, que invita a dejarse amar no-rural, desde nuestro servicio al
por Dios y a amarlo con el amor que reinado de Dios presente, nos lle-
Él mismo nos comunica, provoca va a reconocer nuestra condición
en la vida de la persona y en sus ac- como ciudadanos, como actores
ciones una primera y fundamental sociales junto a otros, y a trabajar
por asumir una actitud dialogan-
47. S.S. Francisco, EG 178 te, humilde, propositiva; a buscar
Arquidiócesis de Bogotá 51

participar en los debates sociales la irradiación que produce la vi-


propios de una sociedad demo- vencia gozosa de la comunión al
crática y plural, como la colombia- interior de las comunidades cris-
na, con los argumentos de la razón tianas, que se convierte en signo
iluminada por la fe y de la doctrina profético, en modelo alternativo
social de la Iglesia. Y por lo mismo de vida, en comunidad contraste
nos lleva a diseñar una evangeli- que señala nuevas comprensiones
zación que promueva desde todas de la vida social. Toda nuestra ac-
las instancias la participación de ción evangelizadora debe asumir
los laicos y el ejercicio de su res- este dinamismo, y debe reconocer
ponsabilidad profética, sacerdotal y potenciar su fuerza transforma-
y real en los asuntos del mundo, dora.
con el acompañamiento respe-
tuoso, competente y cercano de 61. Estos tres dinamismos confor-
los ministros ordenados. man entonces el estilo de evangeli-
zación, más claramente misionero,
• 60. La vida de comunidad que que queremos asumir para respon-
el pueblo de Dios busca asumir, der a los desafíos que nos plantea
como un don de la Trinidad y des- el nuevo contexto de nuestra socie-
de las diversidades de sus miem- dad. Ya sea a la hora de pensar en la
bros, también tiene el potencial organización de la arquidiócesis, o
para ser fuente de transforma- en el trabajo del arciprestazgo, en la
ción evangélica de nuestra so- catequesis de iniciación, en el plan
ciedad. Es el don que podemos de trabajo con un grupo apostólico,
comunicar a la humanidad y de o en el grupo de oración, o en un
la cual somos signo e instrumen- grupo de animación de la liturgia
to. El compromiso por la vivencia o de la pastoral social, en la asocia-
auténtica, en nuestra Iglesia ar- ción para la defensa de los derechos
quidiocesana, de la espiritualidad humanos, o en el proyecto vicarial
de comunión48 , de la fraternidad de pastoral familiar etc., se trata de
y de la solidaridad, puede contri- pensar, planear, organizar, realizar
buir mucho a la reconstrucción del todo esto y cualquier otra actividad
tejido social, a la reconciliación, al evangelizadora, teniendo en cuenta
fomento de una conciencia de la estos tres dinamismos y la mística
unidad humana, de la integración evangelizadora misionera que im-
social. Esta conciencia se genera pulsan.
no sólo mediante enunciados ver-
bales, sino sobre todo mediante 62. Es por esto que queremos du-
rante esta primera etapa de tres
años familiarizarnos, apropiarnos,
48. Cf. S.S. Juan Pablo II, NMI 43 comprender los fundamentos bíbli-
52

cos, teológicos y pastorales de estos zarán un sentido particular cuando


dinamismos y su correlación con sean vividos por el obispo, los pres-
los demás componentes del nuevo bíteros y diáconos, en virtud de su
paradigma, para hacernos capaces ordenación y de su ministerio apos-
de construir, con una nueva menta- tólico, cuando sean acogidos por los
lidad, con una nueva actitud misio- miembros de la vida consagrada en
nera, los grandes procesos evange- sus proyectos evangelizadores, en
lizadores que orientarán la vida de virtud de su vivencia de los consejos
nuestra Arquidiócesis: los procesos evangélicos; y cuando sean apro-
de cuidado y promoción de la vida piados por los hombres y mujeres
de comunión y participación (la laicos, por las familias cristianas, en
evangelización de la familia, de la el ejercicio de su condición misione-
vida parroquial, de la juventud, de la ra en los asuntos del mundo y en su
edad adulta, del ministerio ordena- servicio a la comunión eclesial.
do, la interacción con la vida consa-
grada, con las asociaciones de laicos, 64. No pensemos en los dinamis-
etc.), los que se refieren al anuncio, mos como si fueran una estrategia
formación en la fe y diálogo con las en tres pasos, o una secuencia obli-
culturas (animación bíblica, primer gatoria que debamos seguir, sino
anuncio, iniciación cristiana, vida li- como actitudes permanentes nece-
túrgica, evangelización de la cultura, sarias y complementarias que de-
la educación, la comunicación etc.), ben llevar a reflexiones, decisiones
y los que se refieren a la animación y acciones evangelizadoras más per-
de la dimensión social de la evange- tinentes y dialogantes con el con-
lización (promoción de la cultura de texto que vivimos. Más que ser un
la vida, la evangelización de la vida punto de llegada, son un punto de
económica, de la movilidad huma- partida para pensar, planear y vivir
na, la promoción de la cultura ciuda- nuestra condición evangelizadora
dana, de la justicia, la reconciliación en las nuevas circunstancias.
y la paz, etc.).

63. Reiteramos que estos dina-


mismos no se entienden como algo
externo o ajeno a nosotros que pre-
tendamos asumir, sino que se ori-
ginan y se fundamentan, como se
ha señalado49, en la propia vivencia
de la condición bautismal; y alcan-

49. Cf. PE 36: El corazón de todo paradig-


ma de evangelización
Arquidiócesis de Bogotá 53

6. ¿POR QUÉ ASUMIR


ESTE NUEVO PARADIGMA
MISIONERO?
65. En primer lugar porque creemos en la primacía y en la
eficacia de la gracia que está obrando y conduciendo a la
Iglesia Arquidiocesana hacia el cumplimiento de su misión
al servicio del Reino en esta nueva etapa de nuestra historia.
Esa gracia del Señor nos impulsa a transformarnos para ser
testigos del Reino, sacramento de su misericordia, mostran-
do la novedad y la actualidad permanente del Evangelio.
Por eso, al asumir el nuevo paradigma buscamos ser dóciles ...una
a esta acción del Espíritu en nuestra Iglesia. oportunidad
para renovar
66. También porque reconocemos las situaciones que ca-
nuestra propia
racterizan nuestra sociedad actualmente, particularmente condición
el pluralismo, la transición cultural y las desigualdades so- como
ciales, no como un obstáculo para la vivencia de nuestra fe discípulos
y de nuestro compromiso misionero, sino como una opor- misioneros,
tunidad para renovar nuestra propia condición como dis- re-encontrán-
cípulos misioneros, re-encontrándonos con Dios en medio donos con
de estas nuevas circunstancias, y asumiendo con creativi- Dios en
dad el mandato misionero que recibimos del Señor Jesús. medio de
El nuevo paradigma, apropiado por todos, nos capacitará estas nuevas
para asumir esta oportunidad este nuevo desafío para la circunstan-
cias, y
evangelización.
asumiendo
67. Además, porque como toda la Iglesia lo viene hacien- con
do desde hace algún tiempo, se hace necesario una renova- creatividad
el mandato
ción, una adaptación, una conversión, una inculturación de
misionero que
nuestra labor evangelizadora a las nuevas circunstancias, recibimos del
para hacernos verdaderos interlocutores, desde el Evange- Señor Jesús
lio, con este nuevo tiempo que vive nuestra sociedad. Este
proceso sólo será posible en la medida en que salgamos al
encuentro de Dios, presente y actuante en las nuevas cir-
cunstancias de cambio de esta sociedad, que nos hagamos
como Él compañeros de camino de hombres y mujeres
54

para reconocer sus inquietudes, sus que nos sirvieron durante años para
lenguajes, y aprender a anunciar el llevar el Evangelio a todos los rinco-
Evangelio y a cuidar de ellos en me- nes de la sociedad.
dio de estas nuevas circunstancias; y
que seamos instrumentos del creci- 69. Además no podemos desco-
miento de la obra que Dios está ha- nocer que ya hay entre nosotros
ciendo en esta sociedad, mediante muchos católicos que han asumi-
nuestro testimonio de amor, en la do la necesidad de este gran giro y
vida de comunión y de servicio mi- trabajan con creatividad -aunque
sericordioso a toda la sociedad. muchas veces de manera aislada-
por una nueva forma de evangelizar
68. De igual manera, el nuevo pa- en las actuales circunstancias. Y es
radigma nos ayudará para que las necesario reconocerlos y apoyar-
mediaciones que recibimos del mis- los, aprender de sus experiencias
mo Señor: la Palabra, la liturgia y los e integrarnos en un solo propósito
sacramentos, la vida de comunión y de renovación para que podamos
de servicio -signos e instrumentos alcanzar nuestros objetivos. Necesi-
de la presencia del Reino encomen- tamos dejar de caminar desarticu-
dados a la comunidad eclesial- se lados y trabajar por caminar con un
hagan significativos y entren en diá- solo corazón y una sola alma, como
logo con una sociedad urbana y ru- un solo cuerpo eclesial que somos,
ral que ha cambiado, que ya no es la y, con seguridad, el nuevo paradig-
misma de hace algunos años, y cu- ma de evangelización nos ayudará a
yos lenguajes, criterios, conceptos, lograr esto.
instrumentos, sistemas de acción,
imaginarios etc., son distintos a los
Arquidiócesis de Bogotá 55

7. ¿CÓMO VAMOS A
EMPEZAR A TRABAJAR POR
ESE GRAN GIRO?
7.1 CONVOCACIÓN A LOS CATÓLICOS DE LA
ARQUIDIÓCESIS A PARTICIPAR
70. De acuerdo con el objetivo definido para la primera
etapa quienes están convocados a vivir este proceso somos
todos los católicos de la Arquidiócesis de Bogotá, y espe-
cialmente los animadores de la evangelización. Entende- queremos
concentrar
mos por “animadores de la evangelización” (antes llamados
la atención
agentes de evangelización o de pastoral), a todas aquellas
en el nuevo
personas -ministros ordenados, miembros de la vida consa- paradigma
grada y laicos- vinculadas a algún grupo pastoral o actividad de evangeli-
apostólica, ya sea en la parroquia o en otro espacio de co- zación,
munión eclesial y que se sienten llamadas a ser testimonio propiciando
de la presencia del Reino de Dios y a comunicar a otros la una
alegría de su encuentro con Jesucristo. Los animadores no sensibilización
son sólo los líderes de grupos o comunidades católicas, sino hacia el
también las personas que participan activamente en ellos, cambio de
como laicos comprometidos. Puesto que somos muchos, mentalidad
será necesario generar distintos procesos de participación y de actitud,
que nos haga
en varios momentos, que como círculos concéntricos en
más capaces
el agua, se irán ampliando cada vez más durante estos tres de generar
años. con fidelidad
y creatividad
7.2 EL PROGRAMA DEL GRAN GIRO, SUS nuevos
PROYECTOS Y ACTIVIDADES procesos
71. Como se expresó en líneas anteriores, para alcanzar evangeliza-
los objetivos de esta primera etapa, queremos concentrar dores
la atención en el nuevo paradigma de evangelización, pro-
piciando una sensibilización hacia el cambio de mentalidad
y de actitud, que nos haga más capaces de generar con fi-
delidad y creatividad nuevos procesos evangelizadores en
el presente y hacia el futuro. Se ha diseñado por tanto un
PROGRAMA DE SENSIBILIZACIÓN AL GRAN GIRO que
56
Arquidiócesis de Bogotá 57
58

nos permita difundir este espíritu de condición misionera y sobre nues-


conversión decididamente misione- tras prácticas evangelizadoras a la
ra que nos hemos propuesto, una luz del plan y el paradigma, para
comprensión renovada de lo que generar una auténtica “conversión
significa evangelizar en la Arquidió- pastoral”.
cesis de Bogotá, de acuerdo con el
paradigma y sus fundamentos, una 73. A través de estos proyectos
apropiación personal y comunitaria buscamos poner las bases que nos
de este nuevo estilo evangelizador permitan más adelante desarrollar
y la motivación a una revisión crítica los procesos específicos de evange-
sobre nuestra práctica evangeliza- lización que será necesario imple-
dora, que nos abra a una renovación mentar en cada área de la evangeli-
de la misma, frente al nuevo contex- zación: la familia, la juventud, la vida
to que vivimos. parroquial, la iniciación cristiana, el
diálogo con la cultura, etc. y articular
72. Y para llevar a cabo el progra- en los diferentes espacios eclesiales
ma se han diseñado cuatro PRO- de la vida arquidiocesana: familias,
YECTOS, que son complementarios, pequeñas comunidades, parroquias,
pero no suponen necesariamente arciprestazgos, capellanías, etc.
una secuencia a seguir, dadas las
distintas posibilidades de puntos de 74. Son proyectos que se comple-
partida que existen: mentan entre sí, y cuyos objetivos
generales podremos alcanzar en
- El Proyecto DIFUSIÓN, que se la medida en que logremos unas
propone dar a conocer el Plan E y el metas específicas, a través de la
paradigma misionero y arquidioce- implementación de distintas AC-
sano de evangelización TIVIDADES que se han diseñado, y
que en su conjunto nos llevarán a lo
- El Proyecto COMPRENSIÓN, que que nos hemos propuesto para esta
busca el reconocimiento y entendi- primera etapa. Estas actividades se
miento de los fundamentos bíblicos, han organizado en dos grupos: unas
teológicos y pastorales del plan y de básicas y otras complementarias.
su paradigma “Actividades básicas” son aquellas
- El Proyecto ACOGIDA, cuyo pro- que se consideran fundamentales y
pósito es promover una acogida del necesarias para alcanzar el objetivo
plan y el paradigma con conciencia de la etapa, por ello, deben ser rea-
arquidiocesana lizadas por todos los animadores de
la evangelización y por todos los de-
- El Proyecto REVISIÓN CRÍTICA más católicos, en la medida en que
que quiere impulsar una autoeva- se vayan vinculando al proceso. “Ac-
luación sobre la vivencia de nuestra tividades complementarias” son
Arquidiócesis de Bogotá 59

aquellas que también contribuyen al logro del objetivo, pero


estarán orientadas a la participación abierta y masiva de los
católicos y a la ambientación de todo el proceso en la vida
arquidiocesana, o a metas específicas.

75. En los siguientes cuadros podremos identificar los pro-


yectos, y sus respectivas actividades, básicas y complemen-
tarias:

PROGRAMA DE SENSIBILIZACIÓN AL GRAN GIRO


PROYECTOS OBJETIVOS
Asegurar que el mayor número posible de per-
sonas de la Arquidiócesis de Bogotá conozcan
DIFUSIÓN DEL PLAN E
la existencia y los acentos fundamentales del
proceso de renovación de la evangelización
que se quiere implementar a partir del Plan E
Ofrecer a los animadores de la evangelización
COMPRENSIÓN DEL
PLAN E Y EL NUEVO
experiencias de encuentro con Jesucristo y es-
PARADIGMA MISIONERO pacios de formación que les ayuden a profun-
DE EVANGELIZACIÓN dizar en el espíritu y en los criterios de renova-
ción propuestos por el Plan E y especialmente
por el nuevo paradigma de evangelización.
ACOGIDA DEL PLAN E Desarrollar espacios y experiencias que fa-
Y DEL NUEVO vorezcan la acogida del espíritu del Plan E, el
PARADIGMA paradigma misionero y sus criterios, dentro de
MISIONERO DE un sentido comunitario y de pertenencia a la
EVANGELIZACIÓN Iglesia arquidiocesana.
Propiciar un espíritu de conversión personal y
REVISIÓN CRÍTICA
DE LA PRÁCTICA
pastoral a partir de experiencias de autorrevi-
EVANGELIZADORA sión de las prácticas evangelizadoras a la luz
ACTUAL del paradigma y los doce criterios contenidos
en el Plan E.
60

ACTIVIDADES BÁSICAS 2014-2016


No. ACTIVIDADES OBJETIVOS
Contar, mediante una encuesta, los actuales anima-
Conteo de animadores dores de la evangelización y conocer algunas de sus
características, para tener un perfil inicial de la situa-
ción de quienes son los primeros interlocutores y
destinatarios de las actividades de la primera etapa
del Plan E.
Promover un proceso de toma de consciencia de
cada animador de la evangelización, y de cada expe-
Autodiagnóstico riencia comunitaria eclesial, que les permita revisar,
frente al analizar y conocer su punto de partida con respecto
paradigma misionero a los propósitos de renovación del Plan E y el Para-
de digma misionero de Evangelización, y así poder de-
evangelización terminar las necesidades a trabajar y las actividades
a desarrollar para alcanzar la meta de la Etapa del
Gran Giro; esto, mediante un ejercicio de reflexión
con base en un cuestionario.
Alimentar nuestro sentido de pertenencia a la Ar-
Participación en la quidiócesis de Bogotá celebrando de manera so-
Clausura del Jubileo lemne y masiva la clausura del año de celebracio-
nes por sus 450 años de presencia evangelizadora.
Promover, mediante experiencias de salida a la ciu-
dad - municipios y visitas a instituciones sociales,
el acercamiento a estas realidades con una mirada
Encuentro con Jesucristo contemplativa, que permita el reconocimiento de
en la calle y en la acción los signos de la presencia de Dios y de sus planes en
misericordiosa ellas, lleve a la valoración de la realidad urbano-ru-
ral como lugar del encuentro con Jesucristo y a una
mayor comprensión del significado de los compo-
nentes del paradigma misionero de evangelización.
Promover un encuentro personal con Jesucristo,
mediante un retiro espiritual, que permita a los ani-
Encuentro con madores de la evangelización comprender el espí-
Jesucristo en un Retiro ritu de renovación del Plan E, y profundizar en los
Espiritual dinamismos y el espíritu del paradigma misionero
de evangelización: - salir, hacerse compañero de ca-
mino y fermentar-.
Arquidiócesis de Bogotá 61

No. ACTIVIDADES OBJETIVOS


Promover un encuentro personal y comunitario con
Jesucristo mediante un itinerario de oración, que
Encuentro con lleve a los animadores a revisar y renovar la riqueza
Jesucristo en la de su condición como discípulos misioneros del Se-
oración personal y ñor, guiados por su Espíritu, como fundamento para
comunitaria la comprensión y asimilación del espíritu de renova-
ción del Plan E y del nuevo paradigma misionero de
evangelización.
Promover que los animadores de la evangelización
Estudio básico de los comprendan los fundamentos bíblicos, teológicos y
fundamentos y pastorales del espíritu de renovación del Plan E, por
contenidos del Plan medio de una propuesta metodológica que permita
poner en juego los procesos de reflexión, análisis y
diálogo.
Fomentar entre los animadores de la evangelización
el espíritu de comunión y fraternidad, el reconoci-
Encuentro con los
hermanos en la vida miento mutuo, y el sentido de pertenencia a la Igle-
eclesial sia Arquidiocesana, por medio de encuentros entre
los miembros de diferentes comunidades, grupos,
servicios y estados de vida, para favorecer la acogida
comunitaria del Plan E y su nuevo paradigma.

Promover en los animadores de la evangelización la


conciencia de su pertenencia a la Iglesia arquidio-
Una Acción Social cesana, mediante el trabajo conjunto en una acción
Arquidiocesana social, que sea expresión, dentro del proceso de im-
plementación del Plan E, de la voluntad de la Iglesia
arquidiocesana de trabajar por una sociedad mise-
ricordiosa.
Promover una actitud de conversión pastoral, per-
sonal y comunitaria, decididamente misionera,
Realización de la mediante la realización de una experiencia de au-
revisión crítica sobre toevaluación y de co-evaluación, que les permita,
la propia condición a los animadores de la evangelización, reconocer y
misionera valorar sus fortalezas, así como los aspectos por me-
jorar, en la vivencia de su condición misionera y en
el ejercicio de sus prácticas evangelizadoras, a la luz
del nuevo paradigma misionero de evangelización.
62

ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS 2014


No. ACTIVIDADES OBJETIVOS
Difundir el espíritu de renovación que busca vi-
vir la Arquidiócesis de Bogotá con su nuevo Plan
Campeonato FUTSAL de Evangelización, mediante la realización de un
450 AÑOS campeonato arquidiocesano de futsal para niños y
niñas, que promueva la vivencia de los valores cris-
tianos y el fortalecimiento de la unidad familiar y
comunitaria a través del deporte.
Acto académico: Difundir la acción evangelizadora de la Arquidióce-
Lanzamiento del sis de Bogotá, durante 450 años de historia, median-
libro con ocasión de te la publicación de una compilación de artículos
los 450 años de la que dan a conocer la incidencia de la Iglesia en la
Arquidiócesis construcción de la sociedad bogotana.
Estrategia de Fortalecer los procesos comunicativos internos y
comunicación externos de la Arquidiócesis de Bogotá mediante el
(Medios virtuales, diseño e implementación de una estrategia de co-
audiovisuales y municación para difundir los contenidos y proyec-
escritos) tos del Plan de Evangelización.
Talleres sobre el Ayudar a que los animadores de la evangelización
ideal que nos une y comprendan la realidad eclesial de la Arquidiócesis
compromete y el para que asuman el ideal que nos une y nos compro-
problema focal mete; mediante la participación en talleres didácticos.
Propiciar, mediante la participación en talleres di-
Talleres sobre los 7 dácticos, en los animadores de la evangelización
giros del Gran Giro una comprensión sobre las conversiones necesarias
para entrar en el espíritu de renovación del Plan E.
Foro arquidiocesano: Proponer una reflexión sobre las distintas situaciones
¿Es posible encontrar de pobreza que existen en la región capital y los ca-
a Dios en las situa- minos para reconocer los signos de la presencia y de
ciones de pobreza los planes de Dios en medio de ellas, que nos inter-
de la región capital? pelan y comprometen a un trabajo conjunto por la
Claves de lectura de construcción de una sociedad más misericordiosa y
nuestro Plan E solidaria.
Promover en los animadores el Encuentro Personal
Conciertos, vigilias, con Jesucristo que facilite la comprensión del espí-
adoración eucarística ritu de renovación del Plan E, por medio de espacios
comunitarios de oración y adoración.
Animar entre los catequistas de las parroquias y de
otros espacios de vida eclesial el sentido de perte-
Celebración nencia a la Iglesia Arquidiocesana, para asumir el
Arquidiocesana del espíritu de comunión y participación expresado en
Día del Catequista el Plan de Evangelización, mediante un encuentro
arquidiocesano, festivo y fraterno, con ocasión del
día del catequista.
Arquidiócesis de Bogotá 63

ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS 2015


No. ACTIVIDADES OBJETIVOS
Difundir, mediante la realización de un festival ar-
quidiocesano de coros, el espíritu de renovación
Festival de Coros del Plan E con los animadores de la evangeliza-
Musicales ción que sirven al Evangelio desde sus carismas y
habilidades musicales y artísticas en los distintos
espacios de la vida eclesial, para integrarlos en el
proceso de evangelización de conjunto que se está
implementando.
Difundir, mediante la realización de un festival
arquidiocesano de teatro, el espíritu de renovación
del Plan E con los animadores de la evangelización
Festival de Teatro
que sirven al Evangelio desde sus carismas y habili-
Evangelizador
dades teatrales y artísticas en los distintos espacios
de la vida eclesial, para integrarlos en el proceso
de evangelización de conjunto que se está imple-
mentando.
Promover la memoria histórica y el sentido de per-
tenencia a la Iglesia arquidiocesana, mediante un
Ruta del Arte Sagrado proyecto de pastoral del turismo religioso, que for-
me en la valoración del patrimonio arquitectónico
y artístico de nuestra Iglesia, particularmente en el
centro histórico de la ciudad.
Difundir a través de material fotográfico itinerante
Foto Museo signos de la presencia de Dios a lo largo de la historia,
en el pasado y el presente de la ciudad.
Promover una mirada contemplativa sobre la vida
cotidiana de la ciudad, de acuerdo con el nuevo pa-
Concurso de
radigma de evangelización, mediante la realización
fotografía:
de un concurso de fotografía, que capte en imáge-
Dios en la ciudad
nes los signos, las huellas, de la presencia de Dios
en la ciudad.

Promover la comprensión y la participación en el


plan de evangelización, mediante un proceso de for-
Formación en mación en los valores de la cultura ciudadana, que
ciudadanía permitan, a todos los animadores y fieles cristianos
en general, desarrollar la dimensión social de la vida
cristiana y de la evangelización, y el cultivo de una
espiritualidad que anime toda la actividad humana.
64

No. ACTIVIDADES OBJETIVOS

Ofrecer a todos los animadores de la evangelización


Foros y otras personas interesadas, un espacio para pro-
(Cristo, Iglesia, Misión) fundizar en los fundamentos cristológicos, eclesio-
lógicos y misioneros del espíritu de renovación del
Plan E.

Ofrecer un espacio de formación sistemática para


los animadores de la evangelización, que los lleve a
una comprensión profunda del Plan E, del paradig-
Curso Virtual sobre
ma de evangelización, de sus fundamentos bíblicos
el Plan
y teológicos, de su espiritualidad y de las actitudes
y compromisos que es necesario desarrollar para su
implementación.
Ofrecer un espacio de formación que permita, a to-
Congreso de
dos los católicos interesados, profundizar en los fun-
profundización bíblica
damentos bíblicos del Plan E y el nuevo paradigma
del Plan
misionero de evangelización.

ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS 2016


Serán definidas durante el 2015

OTRAS ACTIVIDADES
No. ACTIVIDADES OBJETIVOS

Promover un espíritu de comunión arquidiocesana,


Subsidios litúrgicos mediante subsidios de animación litúrgica para las
celebraciones dominicales y tiempos fuertes, que
motiven a celebrar juntos la fe y el proceso de reno-
vación que se vive con el Plan E.

Promover, en el contexto del culto y las devociones


marianas, la acogida e imitación de la capacidad de
Mes de la Virgen la Virgen María para reconocer las huellas del Espí-
(may) ritu de Dios en los acontecimientos de la vida coti-
diana y hacerse servidora de la obra de Dios, virtud
fundamental para vivir el nuevo paradigma de evan-
gelización.
Arquidiócesis de Bogotá 65

No. ACTIVIDADES OBJETIVOS


Concientizar en la búsqueda y construcción de la
paz a miembros del pueblo de Dios por medio de
talleres de sensibilización con el tema Paz y Recon-
Semana por la Paz ciliación, que fomenten la reflexión sobre la im-
(sep) portancia del papel de la paz en la vida cotidiana y
brinden pautas para ser mejores cristianos y ciuda-
danos en medio de las situaciones de violencia que
se viven en nuestra región-capital.
Sensibilizar a los miembros del pueblo de Dios so-
bre la realidad de la población en situación de des-
Semana del Migrante plazamiento forzado y migración para ser más cons-
(sep) cientes de las implicaciones que esta situación trae
consigo por medio de actividades asociadas en esta
semana.
Hacernos sensibles y solidarios con las personas in-
Solidaridad con los ternas en las cárceles de la ciudad, mediante una do-
presos (sep) nación que permitirá entregarles elementos de aseo
personal, como signo de la cercanía de la Iglesia con
ellos y sus familias.
Promover la apropiación del primer criterio del Plan E:
Mes de la Biblia (oct) la primacía de la Palabra de Dios, en la vida cristiana y
en la acción evangelizadora, de acuerdo con los sub-
sidios diseñados por la Conferencia Episcopal.
Motivar a los fieles cristianos a vivir su condición
Mes de las misiones misionera y a ser solidarios, con la oración y con la
(oct) ofrenda económica, con quienes dedican su vida a
la acción misionera ad gentes para llevar el Evange-
lio a quienes no lo conocen o lo han olvidado.
Promover, mediante un subsidio, el crecimiento de la
Adviento Navidad fe, del compromiso misionero de los fieles cristianos,
(diciembre) y del sentido de pertenencia eclesial, por la participa-
ción consciente y fructuosa en las celebraciones litúr-
gicas y en las devociones del Adviento y la Navidad.

Una presentación más detallada de las actividades básicas la podemos en-


contrar al final del documento en el Anexo No. 2 .
66

7.3 LOS MOMENTOS QUE mera aproximación a esta experien-


VAMOS A VIVIR cia de renovación. Este momento
será desarrollado aproximadamente
PRIMER MOMENTO durante el 2016.
76. Primero vamos a realizar las
7.4 LOS ORGANISMOS
actividades básicas con los presbíte-
ros, diáconos permanentes y demás
QUE NOS APOYARÁN
animadores de la evangelización EN LA ORGANIZACIÓN Y
que son líderes de las comunidades REALIZACIÓN
parroquiales, de las actividades en 79. De acuerdo con los distintos
diversas áreas de la evangelización, espacios de la vida arquidiocesana
de las comunidades de vida consa- existen organismos que nos apoya-
grada y de los movimientos y aso- rán en la realización de los proyectos
ciaciones. Este momento será desa- y actividades.
rrollado aproximadamente durante
el 2014. A nivel del conjunto de la arqui-
diócesis está la Vicaría de Evangeli-
SEGUNDO MOMENTO zación y sus distintos organismos: el
Equipo permanente, los tres Centros
77. En segundo lugar, con la ayuda
Estratégicos (Comunión y Partici-
del primer grupo, realizaremos las
pación, Anuncio, formación en la fe
actividades básicas con los demás
y diálogo; y Dimensión social de la
animadores de la evangelización
Evangelización), el Observatorio de
que participan en todos los espa-
Evangelización, la Comisión Arqui-
cios de la vida eclesial: es decir con
diocesana de Evangelización. Estos
quienes participan en las pequeñas
organismos serán los directos res-
comunidades, en los grupos parro-
ponsables de la realización de las ac-
quiales, en los espacios de pastora-
tividades durante el primer momen-
les específicas, en las actividades de
to y, con la ayuda de los primeros
las comunidades religiosas, de los
animadores, acompañarán las ac-
movimientos y asociaciones. Este
tividades que se irán haciendo con
momento será desarrollado aproxi-
los demás animadores en el contex-
madamente durante el 2015.
to vicarial, arciprestal, parroquial,
TERCER MOMENTO y de pastorales específicas, con los
movimientos y asociaciones y con
78. En un tercer momento se hará los miembros de la vida consagrada,
una convocación a todos los demás durante el segundo momento.
católicos que quieran participar en
el proceso, cercanos o lejanos, de tal Este proceso nos permitirá más
manera que puedan tener una pri- adelante conformar lo que serán los
Arquidiócesis de Bogotá 67

Equipos Vicariales, Arciprestales y Parroquiales de Anima-


ción de la Evangelización, así como los que se consideren
oportunos para acompañar los demás espacios de la vida ar-
quidiocesana; los cuales serán fundamentales en la segunda
etapa de nuestro plan.

8. Y ¿QUÉ HACER MIENTRAS


LLEGA EL MOMENTO DE
PARTICIPAR EN
LAS ACTIVIDADES
PROGRAMADAS?
8.1 IMPREGNAR TODO LO QUE ESTAMOS
HACIENDO, Y DEBEMOS HACER, DEL ESPÍRITU DEL
NUEVO PARADIGMA buscamos
80. Mientras somos convocados a participar en las distin- despertar esa
tas actividades, estamos invitados a leer y profundizar en los condición
tres dinamismos del paradigma de evangelización, para ir misionera
que hay en
impregnando todo lo que estamos haciendo de este espíri-
cada uno de
tu de revisión y renovación. El nuevo paradigma nos remite nosotros, esa
a actitudes de la persona misma de Jesús en su acción evan- alegría de
gelizadora que debemos contemplar y apropiar; nos abre a reconocernos
la reflexión sobre nuestra identidad como católicos y la ma- discípulos
nera como estamos hoy viviendo nuestra condición de dis- del Señor y
cípulos y misioneros de Jesús, poniéndonos en sintonía con enviados a
las enseñanzas del Santo Padre Francisco. Los dinamismos compartir
además nos confrontan y abren a la creatividad en nuestras con otros
actividades apostólicas. Pensar la catequesis que estamos el don de la
haciendo desde la actitud de salir, de hacernos compañeros vida y de la
misericordia
de camino, de fermentar; pensar en el compromiso social
que hemos
que debemos animar desde las mismas actitudes. Como
recibido del
comunidad parroquial pensar en cómo ser una comunidad Señor.
de salida, que sepa acompañar a todos para cuidar y anun-
ciar, que sepa ser fermento del Reinado de Dios allí en me-
68

dio del contexto en que viven y sus do todas las actividades pastorales
necesidades. Y aquellos que no tie- de los distintos espacios de la vida
nen ningún compromiso aún, será la eclesial como lo veníamos hacien-
ocasión para pensar en cómo salir y do, y tomemos las iniciativas que
reconocer lo que el Señor está espe- veamos necesarias, mientras vamos
rando de sí mismos. trabajando, con las actividades bási-
cas y complementarias, durante esta
81. Este trabajo personal y comu- primera etapa, en el cambio interno
nitario es fundamental, pues el cam- de nuestros criterios y actitudes; que
bio que estamos buscando, el gran nos permitan, dentro de este camino
giro, no viene de afuera hacia aden- que hemos iniciado, ir replanteando,
tro. No esperamos cambiar inmedia- en el momento oportuno, esas mis-
tamente porque haya un documen- mas actividades e ir generando con
to que nos pide cambiar, o porque una renovada mentalidad y creati-
esperamos ciertas actividades que vidad, nuevos proyectos, lenguajes,
por sí mismas nos van a cambiar, métodos, actitudes evangelizado-
sino que buscamos despertar, en res que respondan a los desafíos de
primer lugar, esa condición misione- nuestro contexto, y en un espíritu de
ra que hay en cada uno de nosotros, conversión pastoral decididamente
esa alegría de reconocernos discípu- misionera.
los del Señor y enviados a compartir
con otros el don de la vida y de la 82. No se trata por tanto de una
misericordia que hemos recibido del espera pasiva, puesto que estare-
Señor. Movidos por esta renovada mos en un trabajo desde distintos
actitud, y acogiendo y viviendo las espacios: el ejercicio personal y co-
actividades básicas y complementa- munitario de apropiación de los
rias de la primera etapa, esperamos dinamismos del plan en todas las
ir generando poco a poco, como actividades que ya se vienen hacien-
fruto de discernimientos específi- do, el proceso formativo en el nuevo
cos, los nuevos programas y pro- paradigma que se propone a través
yectos en cada una de las áreas de de las actividades básicas, el trabajo
la evangelización, los programas de de ambientación y profundización
renovación de la vida parroquial, los que se propone a través de las ac-
nuevos programas de catequesis de tividades complementarias en dis-
iniciación cristiana, los nuevos pro- tintos espacios; y además, el trabajo
gramas de evangelización de la fa- de discernimientos globales y espe-
milia, de promoción de la cultura de cíficos que se realizarán desde los
la vida, etc. Es por esto necesario que organismos de la vicaría de evange-
tengamos paciencia con nosotros lización, para identificar, diseñar, ar-
mismos, que continuemos realizan- ticular y preparar la implementación
Arquidiócesis de Bogotá 69

de los programas desde los cuales 84. También es necesario mante-


se trabajará para alcanzar la meta de ner una visión de conjunto y de fu-
la segunda etapa: el nuevo rumbo; turo que permita hallarle sentido a
que según lo planeado iniciará en los esfuerzos que estamos haciendo,
diciembre de 2016, pero que pode- aunque aún no veamos los cambios
mos comenzar a desarrollar en la realizados; y que nos permita recor-
medida del avance de dichos discer- dar que lo más importante es el pro-
nimientos y las prioridades que se ceso que juntos vamos a ir haciendo,
establezcan. donde el pequeño aporte de cada
uno irá permitiendo que avancemos
8.2 ANIMARNOS LOS UNOS A
hacia nuestros ideales.
LOS OTROS
85. Por esto, es necesario, que nos
83. Iniciar una nueva etapa en la animemos los unos a los otros, que
vida de nuestra arquidiócesis pide seamos apoyo y estímulo para que
además, de todos nosotros, cultivar juntos avancemos, con la gracia de
una particular actitud de esperanza Dios, en nuestros propósitos y afron-
y fortaleza; puesto que los cambios temos las dificultades propias de un
no son fáciles, ya que exigen dejar camino de cambio, acogiendo las
la seguridad a la cual estamos acos- palabras del autor de la carta a los
tumbrados, pasar por la incertidum- Hebreos: “animémonos los unos a
bre sobre el valor de lo que estába- los otros mientras dura este hoy” (Hb
mos haciendo y dar unos primeros 3,13).
pasos sin la suficiente confianza en
el nuevo camino que recorremos.
70

9. MARÍA, ESTRELLA DE LA
EVANGELIZACIÓN
86. Como Iglesia Arquidiocesana queremos reconocer y
agradecer la presencia, el patrocinio y la intercesión mater-
nal de la Santísima Virgen María a lo largo de estos 450 años
de nuestra historia como comunidad evangelizadora. Y hoy
le pedimos a ella que siga intercediendo para que esta invi- Ella es
tación a una nueva etapa evangelizadora, a un gran giro, sea contem-
plativa del
acogida por toda la comunidad eclesial.50
misterio de
87. Queremos además fijar nuestra atención en lo que la Dios en el
Virgen María nos enseña sobre el estilo de la evangelización, mundo, en
la historia
tal como nos lo recuerda el Papa Francisco; particularmente,
y en la vida
su capacidad para «reconocer las huellas del Espíritu de Dios
cotidiana de
en los grandes acontecimientos y también en aquellos que cada uno y de
parecen imperceptibles. Ella es contemplativa del misterio de todos. Es la
Dios en el mundo, en la historia y en la vida cotidiana de cada mujer orante
uno y de todos. Es la mujer orante y trabajadora de Nazaret, y y trabajadora
también es Nuestra Señora de la Prontitud, la que sale de su de Nazaret,
pueblo para auxiliar a los demás “sin demora” (Lc 1,39). Esta y también
dinámica de justicia y ternura, de contemplar y caminar hacia es Nuestra
los demás, es lo que hace de ella un modelo eclesial para la Señora de la
evangelización.»51 Prontitud...
la que sale
88. Invoquémosla, entonces, en todos nuestros proyec- de su pueblo
tos para que Ella sea para nosotros un punto de referencia, para auxiliar
fuente de inspiración y fortaleza ante los desafíos que debe- a los demás
mos afrontar al buscar dar un giro hacia aquello que hemos “sin demora”
reconocido como la voluntad de Dios para nuestra Iglesia.
Hagamos de Ella la estrella de esta nueva etapa que hemos
iniciado en la vida evangelizadora de nuestra Arquidiócesis.

María, estrella de la evangelización, ruega por nosotros.

50. Cf. S.S. Francisco, EG 287.


51. S.S. Francisco, EG 288
Arquidiócesis de Bogotá 71
72

ANEXO 1
SÍNTESIS DEL NUEVO PLAN DE EVANGELIZACIÓN DE
LA ARQUIDIÓCESIS DE BOGOTÁ (PLAN E)
El Plan de Evangelización ha sido plasmado en el documento que fue pu-
blicado en la Solemnidad de Pentecostés del 2013 y que invitamos a tener
presente en todo momento. Pero como una ayuda para el proceso hemos
querido hacer una síntesis de dicho documento, que presentamos a conti-
nuación, como un anexo.

MIRADA SOBRE NUESTRO PRESENTE

Como fruto de las consultas realizadas pudimos reconocer que la situación


actual de los católicos y de la evangelización en la Arquidiócesis de Bogotá
está caracterizada por una débil adhesión al Señor Jesucristo que dificulta su
interacción con el contexto actual de la sociedad, marcado particularmen-
te por la transición sociocultural, el pluralismo y las desigualdades sociales
y por esto se ha generado, sin desconocer múltiples y valiosos esfuerzos, un
modo de ser Iglesia, de ser católicos y de evangelizar sin ímpetu misionero,
que tiende a quedarse en la simple gestión de prácticas religiosas, con poca
participación, que cae en el activismo individualista y se limita al asistencia-
lismo. Hemos llegado así a una situación en la cual, a pesar de la cantidad de
actividades evangelizadoras que se organizan y realizan seguimos marchan-
do por caminos paralelos y no suficientemente convergentes con la vida, pre-
ocupaciones, lenguajes o necesidades de la gente.

LO QUE HEMOS RECONOCIDO

El discernimiento realizado nos ha llevado a reconocer que debemos entrar


en un proceso de conversión personal y pastoral que nos permita reavivar la
condición misionera que tiene todo católico y la Iglesia Arquidiocesana en su
conjunto y así relanzar nuestra tarea evangelizadora en medio de las circuns-
tancias actuales de nuestra región capital. No es momento para lamentarnos
de los cambios que vive la sociedad sino que es el momento para vivir inten-
samente nuestra identidad como comunidad de discípulos misioneros del
Señor Jesucristo, enviados a anunciar y servir a la presencia de la acción mi-
sericordiosa de Dios en medio de nuestra ciudad y municipios, en medio de
Arquidiócesis de Bogotá 73

sus luces y de sus sombras, desarrollando la creatividad y la novedad perma-


nente que el misterio del amor del Señor y de su Espíritu Santo nos concede.

Todo lo que venimos haciendo debe renovarse desde este espíritu de con-
versión y todo lo que nos hace falta será necesario implementarlo, entrando
así en una nueva etapa de la vida de nuestra arquidiócesis.

¿CÓMO LO VAMOS A HACER?

Para llevar a cabo esta conversión, esta renovación en la vida de nuestra ar-
quidiócesis, hemos discernido y construido, con base en las consultas y bajo
la luz de la Palabra de Dios y de las enseñanzas de la Iglesia, varios elementos
que conforman un plan o un proyecto de vida para todos los católicos que
integran el pueblo de Dios de la arquidiócesis. Estos elementos son: un ideal
que nos une y compromete, unos objetivos de trabajo, unos criterios, un pa-
radigma o estilo misionero de evangelización y un itinerario para recorrer.
Todos estamos llamados entonces a conocer estos elementos, comprender-
los, acogerlos y a ponernos en camino juntos de acuerdo con las distintas
programaciones que se organizarán y de acuerdo con los distintos espacios
de vida eclesial, para que lleguemos a tener un solo corazón y una sola alma,
como una sola familia arquidiocesana evangelizadora que somos en medio
de la región capital.

a) El ideal que nos une y compromete

Como ideal que buscamos alcanzar juntos y que hemos discernido como
la voluntad de Dios para nuestra Arquidiócesis de Bogotá y nuestra ciudad
región, soñamos con una Iglesia en la cual todos sus miembros vivamos, cul-
tivemos y celebremos una intensa y profunda adhesión al Señor Jesucristo
y a su Reino de misericordia, que nos haga ser alegres y coherentes discípu-
los misioneros en medio de la región capital, y que, por tanto, nos haga vivir
una auténtica vida de comunión entre nosotros y con todos, como verdadero
pueblo de Dios, y nos impulse a asumir nuestra tarea evangelizadora, dóciles
al Espíritu Santo, con ímpetu misionero, con actitud dialogante, profética y
propositiva, en medio de la transición y pluralidad cultural que vivimos, y a
participar, junto con otros, en la construcción de una sociedad misericordio-
sa, es decir, justa, reconciliada, solidaria y que cuida de la creación. Soñamos
por tanto con una Iglesia que por su actitud misericordiosa vive su condición
de ser luz del mundo y sal de la tierra en medio de nuestra región capital.
74

b) Unos objetivos que nos señalan el camino

Para alcanzar el ideal que nos hemos propuesto hay cuatro objetivos globa-
les en los cuales reconocemos que debemos trabajar juntos:

1. En la renovación de nuestro modo de ser católicos para llegar a ser ver-


daderos discípulos misioneros en las nuevas circunstancias que vivimos

2. En la renovación de nuestra vida comunitaria para llegar a ser una co-


munidad alternativa por su vida de comunión y participación en medio
de la sociedad

3. En la renovación de la presencia e incidencia de los católicos en me-


dio de la ciudad región para ser un sacramento de salvación, fermento de
transformación evangélica de la sociedad

4. En la renovación de la manera de entender y llevar a cabo la evangeli-


zación para vivir más intensamente nuestra condición misionera y adap-
tar (inculturar) nuestras prácticas evangelizadoras a los desafíos que nos
plantea el contexto urbano y rural de la Arquidiócesis.

Y para poner en práctica esto, será necesario cumplir con un objetivo opera-
tivo: que todos impulsemos procesos renovados de evangelización, origina-
dos en el diálogo con las culturas y el discernimiento de la presencia salvífica
de Dios en la región capital; de tal manera que nos lleven a vivir más intensa-
mente nuestra relación con el Señor Jesucristo y, como discípulos misioneros,
a participar en la vida de comunión, en la tarea de llevar el evangelio a todos
los ambientes de la sociedad y a ser signo de esperanza por el compromiso
en la realización del proyecto de Dios para esta región capital.

c) El nuevo paradigma misionero de evangelización que queremos


asumir

La Arquidiócesis de Bogotá existe para evangelizar, es decir, para servir al


reinado de la misericordia de Dios que está presente y actuante en medio
de nuestra ciudad región, de sus luces y de sus sombras. Llevar a cabo esta
misión en las actuales circunstancias de desigualdades sociales, pluralismo
y transición sociocultural, nos exige, como comunidad de discípulos misio-
neros, pensar y llevar a cabo nuestra acción evangelizadora desde tres di-
namismos, necesarios y complementarios, que conforman un paradigma, un
modelo, un estilo propio de evangelización.
Arquidiócesis de Bogotá 75

Estos dinamismos se han identificado a partir del discernimiento entre lo


que hemos reconocido como nuestra situación actual y lo que hemos vis-
to como el futuro que Dios quiere y espera de nosotros. Trabajar por asumir
estos tres dinamismos, inspirados en el mismo Jesús, primer evangelizador,
y que actúan como principios, criterios, actitudes, parámetros de interpreta-
ción, nos conducirá hacia esa renovación que anhelamos y hacia el horizonte
futuro que contemplamos como una promesa de Dios para nuestra Iglesia
Arquidiocesana.

Estos tres dinamismos son: a) salir al encuentro de Dios que habita en la re-
gión capital, b) hacernos compañeros de camino para testimoniar y anunciar
el Evangelio, y c) ser fermento de la sociedad, desde la presencia del reino de
Dios en la región capital, por la comunión y el servicio.

Todos los católicos estamos llamados a asumir estos tres dinamismos, que
deben ser criterio para el desarrollo de la actividad evangelizadora en las di-
ferentes áreas: la evangelización de la familia, de la infancia y la juventud, la
formación en el ministerio ordenado y en la acción conjunta con la vida reli-
giosa. Deben ser aplicados en el primer anuncio, en los procesos de iniciación
cristiana, en la vida litúrgica, en el diálogo con las religiones, con la cultura,
la educación y la comunicación social. Deben ser además asumidos en toda
la dimensión social de la evangelización: en la promoción de la cultura de la
vida y de la salud, en la evangelización del mundo político y económico, en
la acción solidaria, en la búsqueda de la justicia, la paz y la reconciliación, así
como en el trabajo con las víctimas del desplazamiento. Deben ser criterio
para la vida y acción evangelizadora de las parroquias, de los movimientos y
en todos los organismos de la vida arquidiocesana, como los arciprestazgos,
las vicarías, las capellanías etc.

d) Los criterios que vamos a tener presentes en toda acción evangeli-


zadora

Del paradigma se desprenden unos criterios que se convierten en nuestras


reglas de juego fundamentales y que debemos tener siempre presentes:

1. Reconocer la Palabra de Dios como la fuente de nuestra acción evan-


gelizadora;

2. Cultivar una lectura permanente de la realidad, el discernimiento e in-


culturación urbana de la evangelización;

3. Entender el bautismo como discipulado misionero;


76

4. Asumir como actitud permanente la conversión personal, comunitaria


y pastoral decididamente misionera;

5. Promover la vida y espiritualidad de la comunión, desde la participa-


ción activa y orgánica de todos;

6. Trabajar siempre en una “evangelización de conjunto”;

7. Aplicar siempre la pedagogía de Dios;

8. Tener presente la dimensión comunicativa de la evangelización y el uso


de los medios de comunicación;

9. Tener presente la dimensión social de la evangelización en todo;

10. Asumir las consecuencias de la opción preferencial por los pobres en


todas las áreas de la evangelización;

11. Hacernos presentes y desarrollar una evangelización en las nuevas te-


rritorialidades que genera la urbe;

12. Buscar la implementación de nuevas estructuras de comunión y de


servicio, consecuentes con el paradigma misionero de evangelización.

e) Las primeras etapas del camino

Poniendo la mirada en el ideal que nos une y compromete y en los objetivos


que nos señalan el camino, nos proponemos entonces comenzar por un pri-
mer itinerario de nueve años (diciembre de 2013 a diciembre de 2022), que
se ha llamado: “De la pastoral de conservación a la evangelización misionera”
y cuyo objetivo es: Promover en todos los católicos de la Arquidiócesis de
Bogotá, un proceso de conversión personal y pastoral, decididamente misio-
nera, por la apropiación y cultivo de la condición misionera propia de todo
bautizado y del nuevo paradigma misionero de evangelización discernido y
asumido por el Plan de Evangelización, de tal manera que se pongan las ba-
ses para una renovación tanto de la vida de comunión y participación, como
de los procesos de evangelización.

Este itinerario lo desarrollamos en tres etapas: el Gran Giro (2013-2016), el


Nuevo Rumbo (2016-2019) y el Nuevo Ritmo (2019-2022).

Entendemos estos primeros nueve años como un tiempo para poner las ba-
ses de una renovación de fondo de la vida evangelizadora de nuestra arqui-
diócesis, que nos vaya haciendo cada día más capaces de plantear y desarro-
Arquidiócesis de Bogotá 77

llar una presencia y una acción eclesial que entren en diálogo evangelizador
con la sociedad contemporánea en medio de sus transformaciones. No se
trata entonces de detener nuestros compromisos actuales en espera de las
nuevas tareas, que poco a poco se irán gestionando, sino en primer lugar de
continuar nuestras actividades evangelizadoras pero dejándolas impregnar y
enriquecer del nuevo espíritu, de los dinamismos del paradigma y articulán-
dolas con todos los procesos que estamos viviendo, conformando una verda-
dera red de evangelización.

Animémonos unos a otros en este tiempo presente y salgamos al encuentro


del Señor Jesucristo que quiere renovarnos, por la fuerza de su Espíritu, y ha-
cernos instrumentos eficaces de su amor misericordioso, germen y fermento
de una nueva sociedad en nuestra región capital.
78

ANEXO 2
ACTIVIDADES BÁSICAS
PROYECTO: PUNTOS DE PARTIDA
NOMBRE ACTIVIDAD 1.Conteo de Animadores
Observatorio Arquidiocesano de Evangelización.
¿QUIÉN COORDINA? Secretaria: Alejandra Martínez Tel. 3505511 Ext. 1102,
Responsable observatorio@arquibogota.org.co
A través de la aplicación de una encuesta en los diferen-
¿QUÉ? tes espacios eclesiales de la Arquidiócesis y el análisis de la
Descripción información obtenida se construirá un documento que dé
actividad cuenta de los animadores que están comprometidos en la
evangelización
Contar, mediante una encuesta, los actuales animadores de
la evangelización y conocer algunas de sus características,
¿PARA QUÉ? para tener un perfil inicial de la situación de quienes son los
Objetivo primeros interlocutores y destinatarios de las actividades de
la primera etapa del Plan E.
Se realizó una investigación cuantitativa exploratoria y des-
criptiva en el mayor número posible de espacios eclesiales
de la Arquidiócesis, valiéndose de una encuesta que se di-
fundió por redes sociales, correos electrónicos de laicos, co-
¿CÓMO? munidades religiosas y movimientos y entre el presbiterio.
Metodología Posteriormente, se adelantó un proceso de tabulación, cru-
ce de variables y elaboración de gráficos que facilitaron el
análisis de los datos y la elaboración de un documento de
presentación de los resultados y análisis de la información.
En un primer momento de producción de la información y
¿CON QUIÉNES? los datos, todos los animadores de la evangelización de la
Arquidiócesis de Bogotá. Es decir, todas las personas laicas,
DESTINATARIOS- consagradas y ministros ordenados que están involucrados
INTERLOCUTORES en las acciones de evangelización de los espacios eclesiales
(Especificidad de a los que pertenecen. A ellos se les devolverá un informe eje-
los interlocutores, cutivo de los resultados.
alcance)
Durante la presentación de los resultados se dialogará con
la Vicaría de Evangelización en general, las vicarías epis-
copales territoriales, coordinadores arquidiocesanos y sus
equipos, párrocos y capellanes.
Feb-May: Recolección de información
¿CUÁNDO?
Mayo-Junio: Ajuste y organización de la base de datos
CRONOGRAMA Julio: Análisis de la información
(Fechas de realización Agosto: Elaboración del informe del conteo
de la actividad) Septiembre: Revisión y ajuste del informe
Octubre: Socialización del informe
¿DÓNDE? Lugar De acuerdo con la programación específica
Arquidiócesis de Bogotá 79

NOMBRE ACTIVIDAD 2. Autodiagnóstico frente al paradigma


misionero de evangelización
Equipo permanente de la Vicaría de evangelización - Se-
¿QUIÉN COORDINA? cretaria Observatorio: Alejandra Martínez Tel. 3505511
Responsable Ext. 1102, observatorio@arquibogota.org.co
Comprendiendo la heterogeneidad en el acercamiento
y vivencia del paradigma misionero de evangelización,
¿QUÉ?
esta actividad ofrece un material que ayude a cada ani-
Descripción
mador de la evangelización a conocer su acercamiento,
actividad
comprensión y vivencia del paradigma misionero con-
tenido en el Plan E.
Promover un proceso de toma de consciencia de cada
animador de la evangelización, y de cada experiencia
comunitaria eclesial, que les permita revisar, analizar y
conocer su punto de partida con respecto a los propósi-
¿PARA QUÉ? tos de renovación del Plan E y el paradigma misionero de
Objetivo evangelización, y así poder determinar las necesidades
a trabajar y las actividades a desarrollar para alcanzar la
meta de la Etapa del Gran Giro; esto, mediante un ejerci-
cio de reflexión con base en un cuestionario.
Se invita a que cada animador, en un momento de ora-
¿CÓMO? ción personal, reflexione y se pregunte acerca de las afir-
Metodología maciones, contenidas en un formulario, que expresan
diferentes niveles de aproximación (conocimiento, com-
prensión, acogida) al paradigma misionero contenido en
el Plan E. Ver formulario en el anexo 3.
¿CON QUIÉNES?
DESTINATARIOS- Todos los animadores de la evangelización de la
INTERLOCUTORES Arquidiócesis de Bogotá
(Especificidad de
los interlocutores,
alcance)
¿CUÁNDO?
CRONOGRAMA
(Fechas de realización Julio – Diciembre: Aplicación
de la actividad)
¿DÓNDE?
De acuerdo con la programación específica
Lugar
80

ACTIVIDADES BÁSICAS
PROYECTO: DIFUNDIR
NOMBRE ACTIVIDAD 3. Participación en la Clausura del Jubileo
¿QUIÉN COORDINA? Comisión Clausura del Año Jubilar.
Responsable
Encuentro masivo de los católicos de la ciudad de Bo-
¿QUÉ? gotá en la Plaza de Bolívar el lunes festivo 24 de marzo,
Descripción para conmemorar los 450 años de la Arquidiócesis de
actividad Bogotá bajo el lema Testigos del Amor de Cristo.
Alimentar nuestro sentido de pertenencia a la Arquidió-
¿PARA QUÉ? cesis de Bogotá celebrando de manera solemne y masiva
Objetivo la clausura del año de celebraciones por sus 450 años de
presencia evangelizadora.
La Arquidiócesis de Bogotá celebró la clausura del Jubileo
bajo el lema: Testigos del Amor de Cristo.
La clausura inició el sábado 22 de marzo como Testigos del
Amor de Cristo que nos ama y reconcilia con Celebraciones
Penitenciales, Eucaristía, Vigilia de Oración y Visita al Señor
de Monserrate en la Catedral Primada de Colombia.
El domingo 23 de marzo como Testigos del Amor de Cristo
que nos convoca entorno a la Eucaristía, se celebraron Eu-
caristías en la Catedral Primada y en las parroquias de la
Arquidiocesis de Bogotá; Adoración al Santísimo y Visita al
¿CÓMO? Señor de Monserrate en la Catedral.
Metodología
El lunes festivo 24 de marzo como Testigos del Amor de
Cristo que nos envía a Evangelizar se celebró la Clausura del
Año Jubilar en la Plaza de Bolívar, una celebración enrique-
cida con manifestaciones artísticas musicales y teatrales,
donde se resaltaron hechos significativos de la presencia
de la Iglesia en la historia de la ciudad en el área social,
cultural, educativa y de la salud; los colegios parroquiales,
las asociaciones y movimientos de fieles participaron con
una procesión que destacó las devociones marianas en la
Arquidiócesis; y se finalizó con una Eucaristía Solemne en
la Plaza de Bolívar, presidida por el Señor Cardenal Rubén
Salazar, Arzobispo de Bogotá.
¿CON QUIÉNES?-
Destinatarios- Todos los católicos de Bogotá.
interlocutores
¿CUÁNDO?
Del 22 al 24 de marzo de 2014
CRONOGRAMA
¿DÓNDE? Parroquias de la Arquidiócesis de Bogotá, Catedral
Lugar Primada de Colombia y Plaza de Bolívar
Arquidiócesis de Bogotá 81

ACTIVIDADES BÁSICAS
PROYECTO: COMPRENDER

NOMBRE ACTIVIDAD 4. Encuentro con Jesucristo en la calle y en la


acción misericordiosa
Centro Estratégico de la Dimensión Social de la Evan-
gelización. Olga Monroy. Tel. 3505511 ext. 1106,
centrodse@arquibogota.org.co
Arciprestes y Representantes Vicariales del Centro Es-
tratégico de la Dimensión Social de la Evangelización:

¿QUIÉN COORDINA? Vicaria Territorial Inmaculada Concepción - Katerine Bo-


Responsable nilla, pasocialzpic@gmail.com. Tel. 5704860 ext. 115.
Vicaria Territorial Cristo Sacerdote - Jenny Rodríguez,
pasocialcristosacerdote@gmail.com. Tel. 6601537. Ext. 111
Vicaria Territorial San Pedro - Martha Morales,
psocialsanpedro@gmail.com. Tel. 5208223-5208224.
Vicaría Territorial Espíritu Santo - Ana Milena Aguilar,
milenaguilar@gmail.com. Tel. 2335100. Ext. 2.
Vicaria Territorial San Pablo - Alejandra Cely,
malejacely@gmail.com. Tel. 7692206.
Vicaria Territorial San José - P. Luis Alfredo Castellanos.
Tel. 2725330-2395778.

Mediante la participación en distintas experiencias de


encuentro con realidades de la vida de la ciudad, particu-
larmente en la calle y en instituciones de acción solidaria,
generar una actitud contemplativa que permita identifi-
car los signos y huellas de la presencia de Jesucristo en
estos contextos y vivir una experiencia de encuentro con
Él en ellos.
¿QUÉ? Experiencias:
Descripción * Experiencia de “Recorridos urbanos”, cada parroquia,
actividad cada arciprestazgo y cada vicaría planteará los recorri-
dos que vaya a realizar.
* Experiencia de “Construcción de mapas”. Se elabora-
rá y entregará una guía para construir el mapa a nivel
parroquial. Cada parroquia deberá hacer entrega de su
mapa en la Vicaría.
* Experiencias de “Cine – foro” (Sugerencias de películas.
La Primera Noche, La Estrategia del Caracol, Raíces de
Piedra. Videos o películas preferiblemente de la ciudad
de Bogotá).
* Experiencia “Visita solidaria” o visita a Instituciones
donde se visualice la acción solidaria
82

Promover, mediante experiencias de salida a la ciudad


- municipios y visitas a instituciones sociales, el acerca-
miento a estas realidades con una mirada contemplati-
va, que permita el reconocimiento de los signos de la
¿PARA QUÉ?
presencia de Dios y de sus planes en ellas, lleve a la va-
Objetivo loración de la realidad urbano-rural como lugar del en-
cuentro con Jesucristo y a una mayor comprensión del
significado de los componentes del paradigma misione-
ro de evangelización.
Esta actividad se fundamenta sobre los dinamismos del
Paradigma del Plan de Evangelización: la salida al encuen-
tro de Jesucristo y el hacernos compañeros de camino, es
¿CÓMO? por esto que se utilizarán experiencias para este encuentro.
Metodología Cada experiencia sea parroquial, arciprestal o Vicarial darán
el espacio para que este encuentro se dé y genere frutos de
compromiso. Se difundirán a través de medios de comuni-
cación masiva (radio, Tv y espacios virtuales)

¿CON QUIÉNES? Vicaria de Evangelización


DESTINATARIOS-
Ministros Ordenados por Arciprestazgos
INTERLOCUTORES
(Especificidad de Animadores de Evangelización a nivel Vicarial, por
los interlocutores, Arciprestazgos, por parroquias, con apoyo de los Arci-
alcance) prestes y para animadores de otras territorialidades.
¿CUÁNDO?
CRONOGRAMA A partir de septiembre de 2014
(Fechas de realización
de la actividad)

¿DÓNDE? De acuerdo con la programación específica


Lugar
Arquidiócesis de Bogotá 83

NOMBRE ACTIVIDAD 5. Encuentro con Jesucristo en un retiro


espiritual
¿QUIÉN COORDINA? Centro Estratégico de Anuncio, Formación en la Fe y
Diálogo con la Cultura. Zulma Castañeda Collazos -
Responsable
3184180028 centroaffd@arquibogota.org.co
Son espacios de tiempo (más o menos largos) diseñados
¿QUÉ? para el encuentro con el Señor, en un ambiente propicio
Descripción para la oración, a partir de orientaciones iniciales ofre-
actividad cidas por una persona que ha vivido y se ha preparado
para orientar la experiencia.
Promover un encuentro personal con Jesucristo, me-
diante un retiro espiritual, que permita a los animado-
¿PARA QUÉ? res de la evangelización comprender el espíritu de re-
Objetivo novación del Plan E, y profundizar en los dinamismos y
el espíritu del paradigma misionero de evangelización:
- salir, hacerse compañero de camino y fermentar-.

Opción 1. Retiro espiritual de 2 días en silencio, con


orientaciones para la oración personal desde el texto de
los discípulos de Emaús. Esta actividad requiere dispo-
¿CÓMO? nibilidad de fin de semana (sábado y domingo) pernoc-
tando en la casa de retiros.
Metodología
Opción 2. Jornadas de retiro de una mañana comple-
ta cada mes, los días sábados durante 3 sábados, con
orientaciones para la oración desde el texto de los dis-
cípulos de Emaús
Opción 3. Jornadas por arciprestazgos.
¿CON QUIÉNES?
DESTINATARIOS-
INTERLOCUTORES Todos los animadores de la evangelización de la Arqui-
(Especificidad de diocesis de Bogotá que quieran acoger la invitación.
los interlocutores,
alcance)
Opción1 (3 fechas disponibles): septiembre 13 y 14 / no-
¿CUÁNDO? viembre 1 y 2 / noviembre 8 y 9
CRONOGRAMA
(Fechas de realización Opción 2 (3 sábados): septiembre 6 / octubre 4 / no-
de la actividad) viembre 8
Opción 3: De acuerdo a programación específica

Opción 1: Casa de Ejercicios Espirituales Emaús


¿DÓNDE? Opción 2: Vicarías Episcopales Territoriales
Lugar
Opción 3: De acuerdo a programación específica
84

NOMBRE ACTIVIDAD 6. Encuentro con Jesucristo en la oración


personal y comunitaria
Centro Estratégico de Anuncio, Formación en la Fe y
¿QUIÉN COORDINA? Diálogo con la Cultura. P. Alfonso Rincón 2328524
Responsable Alexandra Guerrero - 3132443730 gdilaalexandra@
hotmail.com
Se propone desarrollar un camino de 34 momentos de
oración distribuidos en 6 etapas. Se sugiere que cada
momento se viva en los encuentros periódicos de los
diferentes grupos de pastoral de las parroquias y en los
demás espacios de la vida eclesial de la Arquidiócesis o,
¿QUÉ? quien así lo desee, de manera personal. Cada encuentro
Descripción contiene uno o dos textos cortos del Evangelio, elegidos
actividad siguiendo el orden del ministerio del Señor en su vida
pública, desde su bautismo hasta la misión final y el en-
vío de los discípulos. Este itinerario, recorrido en su to-
talidad, permitirá, en la compañía del Señor, conocerlo
mejor y comprender el alcance y las consecuencias de
ser discípulos misioneros.
Promover un encuentro personal y comunitario con Je-
sucristo mediante un itinerario de oración, que lleve a
los animadores a revisar y renovar la riqueza de su con-
¿PARA QUÉ? dición como discípulos misioneros del Señor, guiados
Objetivo por su Espíritu, como fundamento para la comprensión
y asimilación del espíritu de renovación del Plan E y del
nuevo paradigma misionero de evangelización.
El presente itinerario de oración está basado en el mé-
todo de lectura orante de la Sagrada Escritura: la Lectio
Divina, como práctica muy propia de la Iglesia, que ha
¿CÓMO? permanecido invariable a través del tiempo, iluminando
Metodología diferentes espiritualidades eclesiales. El itinerario se de-
sarrolla en de 34 momentos de oración distribuidos en
6 etapas. Cada itinerario tiene una duración aprox de 25
minutos.
¿CON QUIÉNES?- Todos los católicos de la Arquidiocesis de Bogotá que
Destinatarios- quieran acoger la invitación.
interlocutores
El itinerario será implementado a partir del mes de julio de
¿CUÁNDO? 2014, y su duración y ejecución dependerá de la frecuen-
CRONOGRAMA cia de las reuniones que tenga el grupo que lo está llevan-
(Fechas de realización do a cabo. Si es a nivel personal, dependerá de la frecuen-
de la actividad) cia con que cada persona quiera realizar los encuentros de
oración. Proponemos que sea mínimo semanal.

¿DÓNDE? El sitio de encuentro de cada grupo o comunidad. El es-


Lugar pacio de oración de cada persona individualmente.
Arquidiócesis de Bogotá 85

7. Estudio básico de los fundamentos y


NOMBRE ACTIVIDAD contenidos del Plan E y del nuevo
paradigma misionero
Centro Estratégico de Anuncio,
¿QUIÉN COORDINA? Formación en la Fe y Diálogo con la Cultura
Responsable Alexandra Guerrero - 3132443730
gdilaalexandra@hotmail.com / Jorge Galindo 320 841
05 27 pastoraleducativasanjose@yahoo.es
¿QUÉ? Son jornadas formales de estudio y profundización, al-
Descripción rededor de los temas básicos del Plan E y el Nuevo Para-
actividad digma de Evangelización.
Promover que los animadores de la evangelización
¿PARA QUÉ? comprendan los fundamentos bíblicos, teológicos y
pastorales del espíritu de renovación del Plan E, por me-
Objetivo dio de una propuesta metodológica que permita poner
en juego los procesos de reflexión, análisis y diálogo.
Sesiones presenciales de formación, con metodologías
variadas (talleres, conferencias, seminarios, conversato-
¿CÓMO? rios) organizadas, en un primer momento, por todos y
Metodología para todos los miembros de la vicaría de evangelización.

Para el segundo momento se organizaran equipos


que continúen llevando la formación a los demás inter-
locutores.
¿CON QUIÉNES?
DESTINATARIOS- Todos los animadores de la evangelización de la Arqui-
INTERLOCUTORES diócesis de Bogotá.
(Especificidad de
los interlocutores,
alcance)
¿CUÁNDO?
CRONOGRAMA
(Fechas de realización A partir del mes de Septiembre de 2014
de la actividad)
¿DÓNDE? De acuerdo con la programación específica.
Lugar
86

ACTIVIDADES BÁSICAS
PROYECTO: ACOGER
NOMBRE ACTIVIDAD 8.Encuentro con los hermanos en la vida eclesial

¿QUIÉN COORDINA? Centro Estratégico de Comunión y Participación


Responsable Luis Fernando Chisco-315 361 48 24 /300 486 05 58,
centrocyp@arquibogota.org.co
Encuentros lúdicos entre integrantes de diferentes es-
¿QUÉ? pacios de la vida eclesial en los que comparten sus ex-
Descripción periencias de vida y de fe (por ejemplo catequistas, pas-
actividad toral juvenil y pastoral infantil, vida consagrada y entre
unos y otros).
Fomentar entre los animadores de la evangelización el
espíritu de comunión y fraternidad, el reconocimiento
mutuo, y el sentido de pertenencia a la Iglesia Arquidio-
¿PARA QUÉ? cesana, por medio de encuentros entre los miembros de
Objetivo diferentes comunidades, grupos, servicios y estados de
vida, para favorecer la acogida comunitaria del Plan E y
su nuevo paradigma.
Mediante encuentros heterogéneos, convocados terri-
torialmente, propiciar entre los animadores de diferen-
¿CÓMO? tes grupos espacios lúdicos que ayuden a que se reco-
Metodología nozcan como miembros de un mismo cuerpo, la Iglesia
Arquidiocesana, y cómo todos están llamados a aportar
en la transformación de la historia.

¿CON QUIÉNES? En primera instancia los animadores de la evangeliza-


DESTINATARIOS- ción, fieles de las parroquias que hacen partes de los
INTERLOCUTORES grupos; miembros de la vida consagrada -que más in-
(Especificidad de teractúan con la vida laical- e integrantes de los movi-
los interlocutores, mientos; en segunda instancia con los demás fieles que
alcance) mantienen vínculo parroquial.

¿CUÁNDO? Vicarial (Con los animadores de evangelización del pri-


CRONOGRAMA mer momento): Agosto.
(Fechas de realización Arciprestal: Agosto a Noviembre
de la actividad)
Otras territorialidades: Septiembre a Noviembre.
¿DÓNDE? De acuerdo con la programación específica
Lugar
Arquidiócesis de Bogotá 87

NOMBRE ACTIVIDAD 8A. Encuentros fraternos parroquiales: Ágapes

Centro Estratégico de Comunión y Participación


¿QUIÉN COORDINA? Omar Olaya, 315 926 1645; 6601537, ext. 110;
Responsable zpcsvidaencomunion@gmail.com
Como parte de la actividad de los encuentros fraternos,
¿QUÉ? se busca promover, que en cada reunión de los grupos
Descripción parroquiales se dé periódicamente un espacio para
actividad compartir un alimento y en ambiente fraterno expresar
particulares experiencias de la propia vida de fe.
Promover entre los animadores de la evangelización el
¿PARA QUÉ? espíritu fraterno, por medio de la experiencia del com-
partir los alimentos en los encuentros de los grupos pa-
Objetivo
rroquiales, para favorecer el sentido de pertenencia a la
comunidad parroquial y arquidiocesana.

Invitar a que los participantes de los grupos lleven cada


¿CÓMO? uno algún ligero alimento para compartir con sus her-
Metodología manos en un momento determinado del desarrollo de
la respectiva reunión. En algunas ocasiones puede ser
ofrecido por el párroco.

¿CON QUIÉNES?
Los animadores de la evangelización que periódicamen-
DESTINATARIOS- te se reúnen en espacios parroquiales para la ejecución
INTERLOCUTORES de su servicio, o para recibir formación concerniente al
(Especificidad de mismo, o al Plan E.
los interlocutores,
alcance)
¿CUÁNDO?
CRONOGRAMA
(Fechas de realización Reuniones a partir del mes de julio 2014
de la actividad)

¿DÓNDE? En cada parroquia


Lugar
88

NOMBRE ACTIVIDAD 9. Una Acción Social Arquidiocesana

¿QUIÉN COORDINA? Centro Estratégico de Dimensión social de la Evan-


Responsable gelización. / Olga Monroy. Tel. 3505511 ext. 1106,
centrodse@arquibogota.org.co
Viendo la necesidad de visibilizar las acciones sociales
¿QUÉ? que realiza la Iglesia Católica, en especial, la Arquidioce-
Descripción sana, se cree conveniente crear una Acción Social donde
actividad se aúnen esfuerzos, ideales y carismas en la atención al
más necesitado, al más vulnerable.
Promover en los animadores de la evangelización la
conciencia de su pertenencia a la Iglesia arquidiocesa-
¿PARA QUÉ? na, mediante el trabajo conjunto en una acción social,
Objetivo que sea expresión, dentro del proceso de implementa-
ción del Plan E, de la voluntad de la Iglesia arquidiocesa-
na de trabajar por una sociedad misericordiosa.

Viendo la necesidad de visibilizar las acciones sociales


que realiza la Iglesia Católica, en especial, la Arquidioce-
¿CÓMO? sana, se cree conveniente crear una Acción Social donde
Metodología se unifiquen esfuerzos, ideales y carismas en la atención
al más necesitado, al más vulnerable.
Se hará con la colaboración de todas las parroquias de
la Arquidiócesis de Bogotá, las comunidades religiosas y
demás organizaciones o fundaciones implicadas dentro
de la ejecución de la Acción Social.

¿CON QUIÉNES? Se realiza con todo el Pueblo de Dios: ministros ordena-


DESTINATARIOS- dos, los animadores, los fieles, no solo de las parroquias
INTERLOCUTORES sino de otras territorialidades.

¿CUÁNDO?
Junio de 2014 (Convocatoria), Octubre de 2014 (Presen-
CRONOGRAMA
tación proyecto), Noviembre de 2014 a Diciembre de
(Fechas de realización
2016 (Ejecución del proyecto)
de la actividad)

¿DÓNDE? De acuerdo con la programación específica


Lugar
Arquidiócesis de Bogotá 89

ACTIVIDADES BÁSICAS
PROYECTO: REVISAR CRITICAMENTE
NOMBRE ACTIVIDAD 10. Realización de la revisión crítica sobre la
propia condición misionera
¿QUIÉN COORDINA? Equipo permanente de la Vicaría de Evangelización.
Responsable Secretaria: Jeny Contreras- 315 648 41 81
Mediante un subsidio, didácticamente elaborado, pro-
poner a cada católico un ejercicio de autoevaluación
de su propia vivencia bautismal y particularmente de la
¿QUÉ? manera como está viviendo su condición misionera, a
Descripción la luz del paradigma misionero de evangelización que
actividad hemos discernido para la Arquidiócesis, y otro subsidio
para hacer una co-evaluación de la misma dentro del
contexto del grupo parroquial o eclesial en el cual se
encuentra.
Promover una actitud de conversión pastoral, personal
y comunitaria, decididamente misionera, mediante la
realización de una experiencia de autoevaluación y de
¿PARA QUÉ? co-evaluación, que les permita, a los animadores de la
Objetivo evangelización, reconocer y valorar sus fortalezas, así
como los aspectos por mejorar, en la vivencia de su con-
dición misionera y en el ejercicio de sus prácticas evan-
gelizadoras, a la luz del nuevo paradigma misionero de
evangelización.
La revisión crítica puede ser realizada de manera individual
o colectiva (grupo de oración, parroquia, catequistas, comi-
sión…) para valorar sus propias acciones evangelizadoras.
Se invita a que los animadores que van a hacer la auto-
revisión se aseguren de conocer, comprender y acoger el
¿CÓMO? paradigma misionero de evangelización que queremos
Metodología subsidio, se revisará la apropiación del paradigma a nivel
personal.
Paralelamente, habrá un equipo externo de animadores
competentes y disponibles que, como co-evaluadores,
acompañarán y retroalimentarán la revisión.

¿CON QUIÉNES?
DESTINATARIOS-
INTERLOCUTORES A todos los animadores que ya comprendan y acojan el
(Especificidad de nuevo paradigma de evangelización.
los interlocutores,
alcance)
¿CUÁNDO?
CRONOGRAMA Según requerimientos de cada espacio eclesial
(Fechas de realización
de la actividad)

¿DÓNDE? De acuerdo con la programación específica


Lugar
90

ANEXO 3
AUTODIAGNÓSTICO FRENTE
AL PARADIGMA MISIONERO DE
EVANGELIZACIÓN
El Autodiagnóstico es una de las actividades básicas de la etapa de sensibi-
lización al Gran Giro de nuestro Plan E. Se trata de que, cada presbítero, laico
o religioso, que quiera sumarse a este proceso, inicie valorando su aproxima-
ción, conocimiento, comprensión y acogida del Plan E. Esperamos que este
breve instrumento le permita a cada uno identificar en qué punto de partida
se encuentra de cara a este camino que, como Arquidiócesis, estamos em-
prendiendo.

Antes de diligenciar el formulario por favor lea cuidadosamente las siguien-


tes líneas:

• En ambiente de oración pida la luz del Espíritu Santo para mirar y conocer
su realidad frente al proceso de conocimiento, comprensión y acogida del
Plan E.

• Lea cada una de las afirmaciones y responda de corazón, si cada afirmación


está presente o no en su vivencia cotidiana como animador de la evangeliza-
ción.

• Tenga presente que cuando usted marque o señale una frase, quiere decir
que usted está viviendo lo que en ella se afirma; y cuando la deja en blanco,
acepta con sinceridad que lo que allí se afirma no está presente o no es cierto
en su caso.

Este formulario ha sido diseñado para que usted mismo realice un autoa-
nálisis de su realidad frente al Plan E y su paradigma misionero de evangeli-
zación, de manera que su participación en cada una de las actividades pro-
puestas para la primera etapa, El Gran Giro, se ajuste a sus necesidades de
conocimiento, comprensión y apropiación del Plan y el paradigma.
Arquidiócesis de Bogotá 91

¿CONOZCO EL PLAN E Y SU ESPÍRITU


DE CONVERSIÓN PASTORAL?
Percibo que la Iglesia Universal, en cabeza del Papa, está buscando
un cambio.

Entiendo que el Plan E materializa, en la Arquidiócesis de Bogotá, la


intención de cambio de la Iglesia en el mundo.

Creo que en la Arquidiócesis de Bogotá se hace todo lo que es po-


sible para acompañar y responder al sufrimiento de las personas.

Identifico la necesidad de hacer un cambio en nuestro modo de


evangelizar.

He leído sobre el Plan E.

Entiendo que, por las transformaciones sociales y culturales de la


actualidad, se requiere hacer cambios en la manera de Evangelizar.

He realizado una lectura reflexiva de los contenidos del Plan E, con


intención de estudiar y profundizar en ellos.

Entiendo que el Plan E es la respuesta de la Arquidiócesis de Bogotá


al desafío de generar una nueva evangelización y de llevar a cabo la
Misión Continental.

Conozco y entiendo el término “pastoral de conservación”.

Conozco y entiendo qué es una evangelización decididamente mi-


sionera.

Conozco el nuevo paradigma misionero de la evangelización pro-


puesto por el Plan E.

Confío en que Dios está suscitando los cambios que anhelamos.

Valoro con agradecimiento los grandes e importantes esfuerzos


evangelizadores que ha hecho la Iglesia Católica en la región capital
a lo largo de su historia.
92

¿COMPRENDO EL PLAN E?
Soy consciente de que las realidades sociales y culturales de la re-
gión capital son distintas a las de hace unos años.

Identifico las bondades y beneficios que vendrían del cambio de un


nuevo modo de evangelización.

Comprendo el Plan E como un instrumento para el proceso de reno-


vación que se quiere vivir.

Reconozco la necesidad de un reencuentro personal con Jesucristo,


en la vida concreta de la ciudad región, como camino para la reno-
vación de nuestra acción evangelizadora.

Comprendo que nuestra identidad como cristianos es la vivencia


del discipulado misionero.

Reconozco los signos de la obra de Dios en medio de las dificultades


por las que pasa nuestra sociedad.

Entiendo la diferencia entre los tres dinamismos del paradigma mi-


sionero de evangelización.

Reconozco los signos del reinado de Dios en la vida de las personas


y comunidades con quienes trabajo.

Entiendo a lo que se refiere el paradigma con la invitación a “salir”.

Entiendo lo que significa “hacerme compañero de camino para


anunciar y cuidar la obra de Dios”.

Entiendo qué es “fermentar la sociedad desde el Reinado de Dios”.

Reconozco que estoy llamado a aportar en el cambio hacia una


evangelización más misionera.

Reconozco con esperanza la pertinencia de los dinamismos del pa-


radigma para evangelizar en el momento actual.
Arquidiócesis de Bogotá 93

¿ACOJO EL PLAN E QUE ESTÁ


ASUMIENDO LA IGLESIA
ARQUIDIOCESANA?
Cuido y cultivo mi cercanía a Jesucristo por medio de la práctica
constante de la oración.

Cultivo una actitud de cercanía y cuidado de los demás.

Reconozco la necesidad urgente de una transformación en las prác-


ticas evangelizadoras para responder a la misión del Señor en el
mundo presente.

Identifico, por medio del discernimiento, el aporte que Dios espera


de mí para colaborar en la obra que Él está haciendo en la ciudad
región.

Estoy de acuerdo con la necesidad de una intensa adhesión a Jesu-


cristo como se plantea en el ideal que nos une y nos compromete.

Comparto los objetivos y búsquedas de cambio y renovación que se


encuentran plasmados en el Plan E.

Me siento animado a dar lo mejor de mí para aportar en la renova-


ción de nuestra iglesia arquidiocesana.

Estoy de acuerdo con la “actitud de salida” como una condición in-


dispensable para cumplir con la misión evangelizadora hoy.

Mis palabras y comentarios expresan esperanza en la renovación de


la Iglesia.

Oro por la buena marcha de las acciones que hemos asumido para
la conversión pastoral de la Arquidiócesis.

Me refiero a mi propio trabajo pastoral en relación con el proceso


arquidiocesano.

He empezado a orientar las actividades que están bajo mi responsa-


bilidad teniendo en cuenta el nuevo paradigma misionero de evan-
gelización.
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He empezado a orientar las actividades que están bajo mi responsabili-


dad con sentido de comunión arquidiocesana.

Me esfuerzo por cultivar la comunión con mis compañeros en la acción


evangelizadora.

Destino parte de mi tiempo para seguir comprendiendo el espíritu de


renovación que anima el Plan E.

Acojo el espíritu de renovación de la Arquidiócesis expresado en el Plan


E como el querer de Dios para la ciudad región.

Acojo el Plan E porque estoy comprometido con nuestra iglesia arqui-


diocesana.

En aquellos ítems que usted no marcó, se encuentran sus oportu-


nidades de reflexionar y acercarse a las actividades que se han dise-
ñado y construido para crecer juntos en esta primera etapa, El Gran
Giro, que busca que todos nos sensibilicemos con el nuevo paradig-
ma misionero de evangelización, e iniciemos una revisión de nuestras
prácticas evangelizadoras, mediante el conocimiento, comprensión y
acogida del plan E.

Con ctados
Se han creado varios espacios para mantener la comunicación entre
todos, por eso podemos acudir a los siguientes lugares o teléfonos:
Curia Arquidiocesana, Oficina de la Vicaría de Evangelización:
Carrera 7 No. 10-20. Tel: 350 5511 ext. 1105
Páginas de internet:
www.planebogota.com
www.arquibogota.org.co
Direcciones de correos electrónicos:
sec_evangelizacion@arquibogota.org.co
evangelizacionbogota@gmail.com
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Cristo resucitado y glorioso es la fuente profunda de nuestra esperanza,


y no nos faltará su ayuda para cumplir la misión que nos encomienda.
Su resurrección no es algo del pasado; entraña una fuerza de vida que
ha penetrado el mundo. Donde parece que todo ha muerto, por todas
partes vuelven a aparecer los brotes de la resurrección. Es una fuerza
imparable. Verdad que muchas veces parece que Dios no existiera: ve-
mos injusticias, maldades, indiferencias y crueldades que no ceden. Pero
también es cierto que en medio de la oscuridad siempre comienza a
brotar algo nuevo, que tarde o temprano produce un fruto. En un campo
arrasado vuelve a aparecer la vida, tozuda e invencible. Habrá muchas
cosas negras, pero el bien siempre tiende a volver a brotar y a difundirse.
Cada día en el mundo renace la belleza, que resucita transformada a tra-
vés de las tormentas de la historia. Los valores tienden siempre a reapa-
recer de nuevas maneras, y de hecho el ser humano ha renacido muchas
veces de lo que parecía irreversible. Ésa es la fuerza de la resurrección y
cada evangelizador es un instrumento de ese dinamismo… Creámosle
al Evangelio que dice que el Reino de Dios ya está presente en el mundo,
y está desarrollándose aquí y allá, de diversas maneras: como la semilla
pequeña que puede llegar a convertirse en un gran árbol (cf. Mt 13,31-
32), como el puñado de levadura, que fermenta una gran masa (cf. Mt
13,33), y como la buena semilla que crece en medio de la cizaña (cf. Mt
13,24-30), y siempre puede sorprendernos gratamente. Ahí está, viene
otra vez, lucha por florecer de nuevo. La resurrección de Cristo provoca
por todas partes gérmenes de ese mundo nuevo; y aunque se los corte,
vuelven a surgir, porque la resurrección del Señor ya ha penetrado la
trama oculta de esta historia, porque Jesús no ha resucitado en vano.
¡No nos quedemos al margen de esa marcha de la esperanza viva!

S.S. Francisco, EVANGELII GAUDIUM 276-278


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