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POESIAS
D E
ANOTACIONES INÉDITAS
DE
MADRID
T i p o g r a f í a de Archivos. Olózaga, i.
1928
P O E S i i .S
F.2ÀY LUIS
DE LEON
TOMO I
PQ6410
. L3
1928
f
POESÍAS
POESÍAS
D E
DE
Biblioteca Universitaria
MADRID
Tipografía de Archivos. Olózaga, I.
1928
I Ü 3 R E R ! A 1 J
II F R A N C E S A
I 8, BUBU CENTRO 1
I B A R C E L O N A ]
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VALVERDE Y TELLEZ
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ODA VII.
y A ^ i t ó de la Torre y Mota,
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todo, y este es el valor principal de la Antología,
en medio de las aguas afligidos ^
7 escribió para ella prólogos extensos, con los cua-
De sgd está: ( 3 ) y mas dura
la suerte es del mezquino, que sin tasa les se ha formado la preciosa H i s t o r i a de la poe-
^ M M r sía castellana en la E d a d M e d i a en la edición
ri „ 1, c 0 (r) Imo. dulce gozo de tronco.
1 / ^ f V (2) Imp./Ww de sus O b r a s completas. Después del estudio so-
bre Boscán, que forma el volumen XIII de la
Antología, pensaba publicar don Marcelino el
siguiente, dedicado a Garcilaso, y ocupado an-
daba en el acopio de los materiales y en las con-
sultas previas cuando le sorprendió la muerte.
El tomo XV hubiera correspondido segura-
mente a fray Luis de León. Sabemos que era
no por excelencia; pensemos qué prólogo, qué de León en una forma secreta y oficiosa: "Hay
libro nos arrebató la Implacable con impedir que que llevar ese trabajo en silencio —nos dijo—,
llegase la hora, tan deseada sin duda por don porque el encargado oficialmente de él es el se-
Marcelino, de comenzar a redactarlo. Porque el ñor Menéndes y Pelayo; pero todos sabemos que
libro ya estaba pensado y compuesto in mente, él no lo hará, porque sus actividades (las que le
a la mano, todos los elementos necesarios; en le llevan por ahí. Pero el trabajo urge, y si bien
ñola y en la Historia de las ideas estéticas en quebrantada salud, es también un deber no des-
España, había tratado ya con alguna extensión cuidar la edición crítica de obras tan importan-
había leído y releído los documentos exhumados Y, sin embargo, la preparación del tomo de
fray Luis era para Menéndes y Pelayo un tra-
en los últimos años; faltaba sólo que llegase el
bajo continuo desde hacía mucho tiempo: me-
momento de dejar correr libre la pluma por los
jor sería decir un ocio gratísimo, un regalado
amplios folios del papel.
descanso de otros trabajos. Junto a la mesa del
Amigas y discípulos, que veían desmoronarse
despacho de su Biblioteca de Santander, en un
poco a poco aquella robusta naturaleza, agotada
estante pequeño, estaba, y está, un tomo bas-
por el trabajo, y que le veían tan lleno de ocupa-
tante deteriorado de las poesías de fray Luis de
ciones y preocupaciones literarias, no esperaban
León, en la edición del padre Merino. Unas ve-
ya que llegase ni a comenzar esta tarea. Nos lo
ces, antes de comenzar la tarea de seis largas ho-
contaba no hace mucho, en un artículo publica-
ras de trabajo, para vencer los primeros momen-
do en L a Ciencia T o m i s t a , uno de los escrito-
tos de indecisión y de pereza fisiológica; otras,
res que más se han ocupado de fray Luis de
en intervalos de descanso, para recrear el áni-
León, el padre Getino: "Allá por los años
mo fatigado y orearle con brisas frescas que le
de ipio nos encargó, don Ramón Menéndes Pi-
traían olor de juventud, alargaría la mano al Alfonso XIII, encareciéndole, como él sabía ha-
olvidaba nunca el trabajo que sobre fray Luis te- Se acercaba la fecha del centenario de fray
nía que escribir, y en cada nueva lectura de una Luis de León, se esperaban grandes novedades
lio u Horacio, con su original, al revolver en su ido pasando el tiempo y forzoso -es confesar
que a las esperanzas no han correspondido los
prodigiosa memoria las lecturas de los clásicos
sucesos; se han publicado muchos artículos, se
latinos, no interrumpidas desde los años de la
han pronunciado muchísimos discursos; pero
niñez, los márgenes del ejemplar de las poe-
no hemos visto ni la edición crítica esperada, ni
sías de fray Luis iban llenándose de versos la-
estudios fundamentales y básicos sobre la vida
tinos; tal vez corregía una errata evidente;
y la obra del Maestro León.
otro día aventuraba, en pocas palabras, un jui-
cio sobre la autenticidad de ciertas composicio- Claro es que los trabajos lentos y fatigantes
nes que el padre Merino atribuía al poeta. Poco de la erudición no se pueden improvisar, y es
a poco el libro se fué convirtiendo en archivo de difícil hacerlos marchar de acuerdo con el cua-
drante de una fecha y de unos festejos. Ven-
fuentes, de notas críticas, de comparaciones de
drán sin duda las ediciones y los estudios de
fidelidad y acierto en el traductor; varios capí-
fuentes y los comentarios críticos; pero cuando
tulos del volumen no escrito de fray Luis están
estén maduros, a su tiempo.
condensados en aquella profusión de anotacio-
nes, difíciles de leer y más difíciles, a veces, de Mientras tanto, la j o y a de Menéndez y Pe-
layo ¿había de quedar siempre en el estuche
referir con exactitud a los pasajes del texto im-
de su despacho, para ponerla de cuando en cuan-
preso.
do delante de los ojos de algunos visitantes dis-
De j o y a inapreciable, por su valor real lite-
tinguidos ?
rario, y por su valor sugerente, calificó este
volumen don Antonio Maura la primera vez Don Emilio Cotarelo, cuya autoridad y com-
que lo tuvo en sus manos. La segunda lo co- petencia en materias literarias no hay para qué
encarecer, ha creído llegada la hora de que el
gió para ponerlo en las de Su Majestad don
una prueba más de la veneración que siente por
libro de fray Luis, con las notas de Menéndez
el autor de la A n t o l o g í a de poetas líricos, reco-
y Pelayo, con todas las notas de Menéndez
giendo, con respeto sagrado, hasta sus breves
y ' Pelayo, se publique. A propuesta de su Se-
anotaciones marginales, escritas al correr de la
cretario perpetuo, la Real Academia Españo-
pluma y al vuelo de los recuerdos.
la decidió, complacida, tomar a su cargo esta
Queda indicado que la presente, es la edición
empresa. Cree el señor Cotarelo que con esta
del padre Merino reproducida fielmente, en-
publicación han de conseguirse varios fines, to-
mendados los yerros que el editor anotó en la
dos muy importantes. Se pondrá, en manos del
f e de e r r a t a s y corregidas otras que advirtió y
público, al reproducirla, la edición más comple-
enmendó, en su ejemplar, Menéndez y Pelayo.
ta de las obras del poeta, edición que muy raras
Se podrán discutir, se discuten con aguda
veces sale ya al mercado.
crítica los desaciertos del padre Merino, cuan-
Verán la luz las fuentes e imitaciones que
do prefiere, en algunos versos, la lectura de los
Menéndez y Pelayo había ido anotando en su
manuscritos y no sigue la versión de Quevedo.
ejemplar, con más las observaciones críticas de
Pero es injusto a todas luces querer rebajar
todo género que abundan en estas apostillas
el mérito de esta edición, el esf uerzo grande que
manuscritas. La difusión, el conocimiento de
representa para llegar al conocimiento del ver-
estos materiales podrán servir de ayuda y esti-
dadero texto de las poesías de fray Luis. Que-
mulo a cuantos se ocupan del poeta y de sus
vedo vio un manuscrito y lo publicó con todo el
versos, para activar sus trabajos, para comple-
primor crítico que se quiera reconocer en al-
tar lo que falta y dar cima a la edición crítica
gunas de sus enmiendas; llamemos erratas a los
que tanto se desea.
yerros que se leen en su edición; censuremos
La Real Academia tributa con esto su ho- las equivocaciones que tuvo el padre Merino al
menaje a fray Luis, homenaje muy en armonía aceptar ciertas variantes; no reconozcamos en
con la tradición de la Casa, y Menéndez y Pe- él erratas sino equivocaciones, y a pesar de todo,
layo sigue así, colaborando, aun después de aun colocándonos frente a su labor como fisca-
muerto, en las tareas de la Acadeinia, la cual, les implacables, ahí está el texto que, con las
al honrarse con esta aportación postuma, da
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MMWeca V:;verde y Tellei
notas puestas al pie, nos da además de la edi- de fray Luis o a él atribuidas, la única que pre-
ción de Quevedo corregida,en evidentes yerros, senta un texto correcto. Puede perfeccionarse
nuscritos de las poesías de fray Luis; sin con- El rigor crítico de las ediciones no había lle-
gado, en los días del padre Merino, a la meti-
tar con que esta edición del padre agustino en-
culosidad y esmero que afortunadamente alcan-
riqueció el caudal poético del autor de la N o c h e
za en los nuestros.
serena con gran número de composiciones des-
conocidas y dejó entregadas a las disputas de Repasen los censores ediciones de clásicos
castellanos contemporáneas a la de fray Lilis
los críticos muchas que se tienen como dudosas.
que tan mala les parece, y aun posteriores, las
Era preciso escribir estas líneas porque pa-
de Quintana, las mismas de la Biblioteca de A u -
rece que se quiere ahora reprochar a Menéndez
tores españoles de R i v a d e n e y r a , y vean si otros
y Pelayo los elogios que hiciera de la edición
editores se tomaban el trabajo de anotar, aun-
del padre Merino, elogios justos; pero que dis-
que sea de un modo poco preciso e incompleto,
tan mucho de declarar que la tal edición sea
las variantes de la edición príncipe y de diez ma-
inmejorable. Sabía muy bien Menéndez y Pe-
nuscritos.
layo que el texto se podía mejorar y aclarar a
Por lo demás, como uno de los principales
la luz de nuevos manuscritos y aun de algunos
objetos de la presente publicación es el sacar a
utilizados muy a la ligera por el padre Merino.
luz las notas marginales de Menéndez y Pela-
En su Biblioteca guardaba y se guarda uno muy
yo y éstas están hechas sobre el texto del padre
interesante, ya descrito y analizado por el pa-
Merino, era absolutamente necesario reprodu-
dre Villada, del cual no se podrá prescindir en
cir su edición hasta con las variantes, pues a.
adelante cuando se trate de depurar críticamen-
a ellas hacen referencia algunas de las aposti-
te el texto de estas poesías. Y tan no pensaba
llas manuscritas.
en la perfección absoluta del trabajo del pa-
Si alguien se decide a publicar una edición crí-
dre Merino, que en la guarda de su ejemplar
tica de las poesías de fray de León, ésta de la-
tiene escritas estas palabras: "Edición muy es-
Academia ha de ahorrarle, sin duda, muchas fa-
casa y la única que contiene todas las poesías
Desgraciadamente, ya su autor no pintará el
tigas, y le servirá de guia y de norma en algu-
cuadro; guardemos, pues, con respeto estos ras-
nos puntos difíciles de su labor.
gos, perpetuándolos por la Imprenta para en-
Ha parecido oportuno poner cil frente delas
señanza de todos y con el fin de libertarlos de
toesías fragmentos de dos traba,os de Me
una posible e irreparable pérdida.
n Z y P layo gue se refieren al poeta, y gue
MIGUEL ARTIGAS.
£ £ L * r * P r ^ o s ^ r n o c o n e l H
del tadre Merino y la Noticia de los Códices. Biblioteca de Menéndez y Pelayo. Diciem-
Se Z copiado con toda exactitud las notas bre, 1928.
marginales, se han cotejado las gue son copras
7 e "to con los de buenas ediciones impresas
Ve han fijado puntualmente las atas y llama-
las y col la lectura comparada del texto cas-
Z'aZo y de las apostillas ^
precisado el pasaje, las frases y las palabras
cue las anotaciones se refieren.
Para mayor comodidad de los lectores se ha
„eído conveniente insertar a continuación d
Z Z poesía las notas gue con ella se relación^
viamente numerados.
No estará demás advertir gue nadie debe con
siderar estas notos como trabajo definitivo y
omito Son simplemente esto, algunas notas
escritas en los márgenes de un libro impreso, en
Z nales ni está agotado el estibo e fuen
Vi Siguiera apuntadas muchas cuestiones este-
ticas y criticas. Son algunos trazos de un esbozo
E x c u s a d o sería detenerme en encarecimientos
y alabanzas a las poesías originales de nuestro
primer lírico, pues ni quiero repetir lo sabido,
ni hallo palabras dignas de su gloria, ni es este
l u g a r oportuno c o m o no sea para repetir una
vez más
originales, el segundo las traducciones de poetas "Obras propias y traducciones Latinas, Grie-
pletas y llenas aún de erratas, no podían sa- purar las producciones de su ilustre compañero
de hábito, para lo cual reconoció g r a n n ú m e r o
(1) Hay una edición antigua y muy rara de esta de códices, separó con diligencia las obras le-
poesía (Salamanca, 1607) en pliego suelto. gítimas de las de autenticidad controvertible y
(2) Imprimióse anónima en Madrid, 161S, y a dió a luz una excelente colección, h o y h a r t o ol-
nombre de fray Luis en Madrid, 1727, y Valencia,
1757.
v i d a d a , c o n s e r l a única c o m p l e t a , l a tínica que XIX. Mater saeva cupidinum.
Argensolas.
Donde traduce f r a y L u i s de L e ó n :
E n cuanto a las veintitrés o veinticuatro, que
sin género d e d u d a pertenecen a f r a y Luis " T o m a n d o v a s a todos
tus v a s a l l o s la t i e r r a que h a n comprado,
de L e ó n , h a y que concederles el primer l u g a r
Y por todos los m o d o s
entre las nuestras. ¿ Y c ó m o n o , si f r a y Luis
Q u e puedes, en sus t i e r r a s t e . h a s entrado,
es nuestro g r a n poeta h o r a c i a n o ? C i e r t o quq Y de sal avariento,
lo es t o d a v í a más cuando imita que cuan- S o l o a r o b a r lo a j e n o estás a t e n t o . "
do traduce: cierto que en sus versiones, propia-
•
Rendirme, que estoy cano
I n a d v e r t e n c i a notable f u é t o m a r l a segunda Y duro para amar: vete en buen hora:
Revuelve allá tu llama
p e r s o n a del v e r b o salió por é g e n i t i v o de » t
Sobre la gente moza que te llama."
^ P e r o así y todo, ¡ c u á n t a s v e r s . o n e s m u y a
(Lib. IV, oda i. a )
m i d a s y m u y peinadas de elegantes i —
¡ C u á n t a poesía h a y e n cualquiera de sus au-
a l o B u r g o s (que con t a n t o desden s u e l e *
d a c i a s de l e n g u a j e ! ¡ Q u é m a j e s t a d a n t i g u a en
de ellas) p u e d e n darse p o r u n o solo d e esos
m e d i o de su aparente l l a n e z a ! ¡ Q u é vulgaris-
r a s g u ñ o s t a n i n f o r m e s y a veces tan d e s m a n a -
m o s tan poderosos y t a n empapados e n l a r e a -
d o bien sé, por e j e m p l o , que ta trata-
lidad! Léase con especial atención el Beatus
c i ó n del Mater sueva mpidmum es de l a s peo
ille. P a r a quien tiene o j o s y alma, c a d a p a l a -
res h a s t a el punto de tener u n a e s t r o a casi
b r a del t r a d u c t o r es una revelación. O t r o cuen-
i n i n t e l i g i b l e ; <pero sé t a m b i é n q u e el ^ ^
te los versos d u r o s y las r i m a s . , f a l s a s ; p o r m i
miu,n lubricus áspid n u n c a se t r a d u c i r a m e j o r parte, a s e g u r o q u e n u n c a llegaremos los espa-
q u e diciendo, c o m o d i j o n u e s t r o p o e t a : ñoles a penetrarnos del sabor de lo antiguo,
"Grande deslizadero a quien le mira." hasta que rompamos con la t r a d i c i ó n altiso-
nante y a c a d é m i c a del siglo pasado, de los Q u i n -
N o h a y que j u z g a r l a s traducciones d e f r a y
tanas y Gallegos, y a p r e n d a m o s a estimar el
L u i s de L e ó n con c r i t e r i o de escuela o de a c a -
tesoro que tenemos e n t e r r a d o en n u e s t r o m á s
demia F r a y L u i s de tón es u n g r a n poeta,
g r a n d e y m e n o s entendido poeta. Y o bien s é
Interpreta a o t r o poeta, e n m u c h a , cosas
q u e a oídos a c o s t u m b r a d o s a la trompa de Ma-
d e su temple ( a f í n en el estro lírico aunque en
vorte y a la esposa dócil del celoso toro h a n de
las f u e n t e s de inspiración h a y a d i f e r e n c i a ) ' ^
sonarles a cosa plebeya y a h u m i l d e aquellas di-
v i e r t e e i n f u n d e s u p r o p i a alma en l o m i s m o
vinas estrofas:
q ue imita y traduce, dándole vida y colorido
propios. P o r eso, c u a n d o - a c i e r t a , acierta c o m o " Y a poda el ramo inútil, y ya enxiere
nadie e n precisión y e n f u e r z a : En su vez el extraño;
O castra sus colm.enas, o si quiere,
" N o trates más en vano, Tresquila su rebaño.
j Oh de amor dulce, cruda engendradora.
¡ P u e s cuando el padre Otoño muestra f u e r a ba como un poeta antiguo, sino como a alguien
L a su frente galana,
de su f a m i l i a y de su casa. L e m o d i f i c a con-
C o n cuánto g o z o coge la alta pera,
L a s uvas, como g r a n a !
f o r m e a su índole; le da rusticidad y le quita
aliño. L e í d o en f r a y L u i s de L e ó n , Horacio
oveja disanto degollada". Cuando fray Luis- tores místicos, y de ellos tomó la alteza del
ayos se meten frayles, ansí estas mis mocedades que se le habían juntado, y emendándole de otros
teniéndose como por desechadas de mí, se pu- tantos malos siniestros que había cobrado con el
sieron, según parece, en religión, y tomaron nom- .andar vagueando, le vuelvo a mi casa, y le re-
bre y hábito m u y más honrado del que ellas me- •cibo por mío. Y porque no se queje de que le
recían; y han andado debajo dél muchos días he sacado de la iglesia adonde él se tenía por
en los ojos y en las manos de muchas gentes, seguro, envióle a Vmd. para que le ampare como
haciendo agravio a una persona religiosa y bien cosa suya, pues y o lo soy: que con tal trueque bien
conocida de V m d . a quien se allegaron, con la s é que perderá la queja y se tendrá por dichoso.
qual y o en los años pasados'tuve estrecha amis- S o n tres partes las de este libro. E n la una van
tad, y no la nombro aquí por no agraviaba ( i ) las cosas que y o compuse mías. E n las dos pos-
más. L a ocasión de este error V m d . la sabe, y treras, las que traduxe de otras lenguas de auto-
porque es para pocos, y decilla aquí sería comu- res así profanos como sagrados. L o profano va
nicaba con muchos, no la digo. Basta saber que en la segunda parte, y lo sagrado, que son algu-
la persona que he dicho, por condescender con mi nos salmos y capítulos de Job, van en la tercera.
gusto, que era vivir desconocido, disimuló, hasta D e lo que yo compuse juzgará cada uno a su
-voluntad: de lo que es traducido el que quisiere
(i) El impreso, agravialla. Mas la.
n i o i § Í
ser juez, pruebe primero qué cosa es traducir
poesías elegantes de una lengua extraña en la suya
sin añadir ni quitar sentencia, y ( i ) guardar quan-
t o es posible las figuras de su original y su do-
naire, y hacer que hablen en castellano y no como
extrangeras y advenedizas, sino como nacidas en PARTE PRIMERA
él y naturales. L o qual no digo que he hecho yo,
ni soy tan arrogante, mas helo pretendido hacer
y así lo confieso. Y el que dixere que no lo he ODA I
alcanzado, haga prueba de sí, y entonces podrá
V I D A RETIRADA (I).
ser que estime más mi trabajo. A l qual yo m e
incliné sólo por mostrar que nuestra lengua reci- ¡ Qué descansada vida
be bien todo lo que se le encomienda, y que no la del que huye el mundanal ruido,
es dura ni pobre, como algunos dicen, sino de y sigue la escondida
cera y abundante para los que la saben tratar. senda por donde han ido
Mas esto caiga como cayere, que yo no curo mu- 5 los pocos sabios que en el mundo han sido?
cho de ello; sólo deseo agradar a V m d . a quien
siempre pretendo servir; y el que no me conocie- Que no le enturbia el pecho
re por mi nombre, conózcame por esto, que es so- de los soberbios grandes el estado,
lamente de lo que me precio, y lo que, si en mí ni del dorado techo
hay cosa buena, tiene algún valor (2). se admira fabricado
10 del sabio moro en jaspes sustentado.
(1) Imp., y con.
N o cura si la fama
(2) Imp., lugar.
canta con voz su nombre pregonera,
ni cura si encarama
la lengua lisonjera
15 lo que condena la verdad sincera.
apenas declinando,
70 a l z ó n u e v a b a n d e r a , 1-8 Divis orte bonis, optimae Romulae
mostró bien claramente Custos gentis, abes jam nimium diu :
del v a l o r n o v e n c i b l e l o e x c e l e n t e . Maturimi reditum poUicitus patrum
Sancto concilio redi,
E l pues relumbre claro Lucevi redde tuae, dux bone, patriae
Instar veris enim vultus ubi tiius
s o b r e sus claros p a d r e s ; m a s t ú e n t a n t o
Affulsit, populo gratior it dies
75 d e c h a d o d e bien r a r o Et soles melius nitent.
abraza el o c i o santo, (Hor. Carni. I V , 5- v. 1-8.)
q u e m u c h o son m e j o r e s
19-24 Confr. Pindaro. Olimpiada I.
los f r u t o s d e la p a z y m u y mayores.
26-40 Guerra de los moriscos-
• 55-60 Qualemve laetis caprea pascuis
Intenta fulvae matris ab téere
lam lacte depulsum leonem
Dente novo peritura vidit :
Videre Rhaetio bella sub Alpibus
Drusum gerentem Vindelici.
(Hor. Carni. I V , 4- v. 13-18.)
F
65-66 Lateque victrices catervae
Consiliis juvenis revictae...
(Hor. Carm. I V , 4- v. 23, 24.)
\
y contra el claro día
las alas escurísimas extiende,
no alcanza lo que emprehende
20 al fin, y desparece;
y el sol puro en el cielo resplandece.
ODA IV
N o pudo ser vencida,
A L MISMO (*).
ni lo será jamás, ni la llaneza,
ni la inocente vida,
N o siempre es poderosa,
25 ni la fe sin error, ni la pureza,
Carrero, la maldad, ni siempre atina ( i )
por más que la fiereza
la envidia ponzoñosa:
del tigre ciña un lado,
y la fuerza sin ley que más se empina
y el otro el basilisco emponzoñado.
5 al fin la frente inclina,
que quien se opone al cielo, Por más que se conjuren
quando más alto sube viene al suelo. 30 el odio, y el poder, y el falso engaño,
y ciegos de ira apuren
Testigo es manifiesto
lo propio y lo diverso, ageno, extraño,
el parto de la tierra mal osado,
jamás le harán daño;
10 que quando tuvo puesto
antes cual fino oro
un monte encima de otro y levantado,
35 recobra del crisol nuevo tesoro.
al hondo derrocado
sin esperanza, gime El ánimo constante
debaxo su edificio que le oprime. armado de verdad, mil aceradas,
mil puntas de diamante
15 Si y a la niebla f r í a
embota y enflaquece, y desplegadas
al rayo que amanece odiosa ofende,
40 las fuerzas encerradas
(*) Está sin epígrafe en los M s s . ; pero parece que sobre el opuesto bando
le convendría el de Triunfo de la inocencia; pues sin con poderoso pie se ensalza hollando.
duda fray Luis quiso celebrar su triunfo y la confusión
y vergüenza de sus acusadores. Y con cien voces suena
(1) Imp., Portocarrero la maldad ni atina.
i
la f a m a , q u e a l a s i e r p r e , al t i g r e f i e r o
45 vencidos los condena
al d a ñ o n o j a m á s perecedero;
y con vuelo ligero
viniendo ( i ) la victoria NOTAS
c o r o n a al v e n c e d o r d e g o z o y g l o r i a .
4-7 Vis consilii expers mole ruit sua :
(i) Imp., venciendo. Vini temperatemi Dì quoque provehunt
In majus; idem ödere vires
Omne nefas animo movent es.
(Hör. III. V . v. 65-68.)
/
i
V
y oye allí otro modo
de no perecedera
20 música, que es de todas ( i ) la primera.
¡ O ! suene de contino,
26-30 Hic est... qui intervallis conjunctus imparibus,
Salinas, vuestro son. en mis oídos, sed lamen, pro rata parte, ratione distinctis, impulsa et
por quien al bien divino motu ipsorum orbium efficitur... Qui números rerum
despiertan los sentidos, omnium nodiis est. (Cic. Sorrmium Scipionis. Cap. VI.)
50 quedando a lo demás amortecidos (3).
l.
A l m a divina, en velo
de femeniles miembros encerrada,
quando veniste al suelo
y
robaste de pasada
20 la celestial riquísima morada.
• ODA VI
Diéronte bien sin cuento
E N EL NACIMIENTO D E DOÑA TOMASINA, HIJA DEL con voluntad concorde y amorosa
MARQUÉS DE ALCAÑICES D . ALVARO DE BORJA, quien rige el movimiento
Y DOÑA E L V I R A ENRIQUEZ ( * ) .
sexto, con la diosa
25 que en la tercera rueda es poderosa.
Inspira nuevo canto,
Calíope, en mi pecho en este día, De tu belleza rara
que de los B o r j a s canto el envidioso viejo mal pagado
y Enriquez la alegría, torció el paso y la cara;
5 y el rico don que el cielo les envía. y el fiero Marte ayrado
30 el camino dexó desocupado.
Hermoso sol luciente,
que el día traes y llevas rodeado Y el roxo y crespo Apolo,
de luz resplandeciente que tus pasos guiando descendía
más de lo acostumbrado, contigo al baxo polo,
i o sal' ya, verás nacido tu traslado. la cítara hería,
/ 35 y con divino canto así decía:
O si te place agora
Desciende en punto bueno,
en la región contraria hacer manida,
espíritu real, al cuerpo hermoso,
detente allá en buen hora,
que en el ilustre seno
que con la luz nacida
está ya deseoso
15 podrá ser nuestra esfera esclarecida.
40 de dar a tu valor digno reposo.
(*) Falta este titulo en el impreso pág. 7, la
El te dará la gloria,
misma Oda, repetida en la pág. 70, se cUce: C « c * * £
nacimiento de una hija del Marqués de Mcamces. La que en el terreno cerco es más tenida
de la pág. 70 está más conforme a los Mss.
de abuelos larga ( i ) historia, Con todas cuantas precio
por quien la no sumida (2) de gracia gentileza ' (1) han ya tenido,
45 nave, por quien (3) la España f u é regida. serán por ti en desprecio,
y puestas en olvido
T ú dale (4) en cambio de esto
70 qual hace la verdad con lo fingido.
de los eternos bienes la nobleza,
deseo alto, honesto, ' ¡ A y tristes! ¡ay dichosos
generosa grandeza, los ojos que te vieren! huyan luego,
50 claro saber, f é llena de pureza. si fueren poderosos,
antes que prenda el fuego
E n su rostro se vean 75 contra quien no valdrá ni oro ni ruego. 1
de tu beldad sin par vivas señales,
los sus dos o j o s sean Ilustre y tierna planta,
dos luces celestiales, gozo (2) del claro tronco generoso,
55 que guíen al bien sumo a los mortales. creciendo te levanta
a estado el más dichoso,
E l cuerpo delicado 80 de cuantos dió ya el cielo venturoso.
como cristal lucido y trasparente
tu gracia y bien sagrado, (1) Imp., y de belleza, = y hermosura — hayan.
(2) Imp., dulce gozo de tronco...
tu luz, tu continente,
60 a sus dichosos siglos represente.
L a soberana abuela
dechado de virtud y de hermosura,
la tía, de quien vuela
la fama, en quien la dura
65 muerte mostró lo poco que el bien dura
)
se cansa así, y endura
el o r o , y la m a r pasa
20 osado, y no osa abrir la mano escasa.
¿ Q u é v a l e el n o t o c a d o
NOTAS
t e s o r o , si c o r r o m p e e l d u l c e s u e ñ o ,
si e s t r e c h a e l ñ u d o d a d o ,
si m á s e n t u r b i a e l c e ñ o , Título. Hay de él una oda latina en la Explanatio
, Psalmum XXVI, de fray Luis de León (1582).
25 y d e j a e n l a r i q u e z a p o b r e al dueño?
6-10 Crescentem sequitur cura pecuniam
Majarumque fames--.
(Hor. Carm. III, 16. v. 17, 18.)
Genus coercet...
Nulla certior tamen
Rapacis Orci sede destinata
Aula divitem monet
Iierum...
(Hor. Carni. II, 18. v. 36-38 y 29-32.)
A L MISMO.
...Congestis undique saccis
Indormis inhians...
( H o r t Saty. I, x- v. 41, 42 y 70, 7 L ) ¿Quándo será que pueda
...scilicet improbae libre de esta prisión volar al cielo,
Crescimi divitiae, tamen Felipe, y en la rueda
Curiae nescio quid semper abest rei.
que huye más del suelo,
(Hor. Carm. I l i , 24. v- 62-64.)
5 contemplar la verdad pura sin velo.? (1)
Magnas inter opes inops.
Allí a mi vida junto
(Hor. Carm. H I , 16. v. 28.)
en luz resplandeciente convertido
veré distinto y junto,
lo que es, y lo que ha sido,
10 y su principio propio y escondido.
ODA IX
NOTAS
A L MISMO.
11-15 Quae molitio, quae ferramenta, qui vectes, quae
macliinae, qui ministri tanti operis fuerunt (Cic. De Na- Del moderado y constante (1).
tur. Deo. I, 8.)
16-21 Quae mare compescant causae; quid temperet ¿ Q u é vale quanto vée
[annum. d ó n a c e y d ó s e p o n e e l sol l u c i e n t e ,
Stellae sponte sua jussaeve vagentur et errent, l o q u e el i n d i o p o s é e ,
Quid premat obscurum lume, quid proferat orbem
l o q u e n o s d a el ( 2 ) oriente
Quid velit et possit rerum concordia discors.
5 c o n t o d o l o q u e a f a n a la v i l gente?
(Hor. Epxst. I, 12. v. 16-19.)
E l uno mientras cura
34 ( C f r . Salmo 32, v. 4.)
d e j a r r i c o d e s c a n s o a su h e r e d e r o ,
36-50 ( C f r . Salmo 17.)
vive e n po'breza dura,
3650 . . . m i arduus aether,
y perdona al dinero,
Et pluvia ingenti sata laeta boumque labores
Diluit, implentur fossae, et cava flumina crescunt 10 y c o n t r a sí s e m u e s t r a c r u e l (3) y fiero.
Cum sonitu : ferz/etque fretis spirantibus aequor.
Ipse Pater, media nimborum in node, corusca E l o t r o q u e sediento
Fulmina molitur dextra'. quo maxima motu a n h e l a al s e ñ o r í o , s i r v e c i e g o ,
Terra tremit, fugere ferae, et mortalia corda y (4) p o r s u b i r su a s i e n t o ,
Per gentes humilis stravit pavor.
abájase a vil ruego,
(Virg. Georg. I, v. 324-331-) 15 y d e la l i b e r t a d v a h a c i e n d o entrego.
A l a r g a el bien guiado
ODA X
paso, y la cuesta vence, y solo gana
AL LICENCIADO JUAN DE GRIAL. la cumbre del collado;
y dó más pura mana
Recoge ya en el seno 25 la fuente, satisfaz tu ardiente gana.
el campo su hermosura, el cielo aoja ( i >
con luz triste el ameno N o cures si el perdido
verdor, y hoja a hoja error admira el oro, y va sediento
5 las cimas de los árboles despoja. en pos de un bien fingido (i),
que no ansí vuela el viento,
Y a Phebo inclina el paso 30 quanto es fugaz y vano aquel contento.
al resplandor E g e o ; ya del día
las horas corta escaso: t Escribe lo que Phebo
ya el malo' (2) medio día te dicta favorable, que lo antiguo
10 soplando espesas nubes nos envía. iguala, y vence (2) el nuevo
estilo; y, caro amigo,
Y a el ave vengadora
35 no esperes que podré atener contigo.
del Ibico navega los nublados,
y con voz ronca llora; Que yo de un torbellino
y el cuello al (3) yugo atados traidor acometido y derrocado (3)
15 los bueyes van rompiendo los sembrados- de en medio del camino
al hondo, el plectro amado,
E1 tiempo nos convida
40 y del vuelo las alas He quebrado.
a los estudios nobles; y la fama,
E l furibundo M a r t e
cinco luces las haces desordena,
igual a cada parte,
la sexta a y ! te condena,
80 o cara patria, a bárbara cadena.
¿ Q u é mortal desatino
de la verdad aleja así el sentido,
que d e tu bien divino
olvidado, perdido
20 sigue la vana sombra, el bien fingido?
ODA XII
El hombre está entregado
NOCHE SERENA (I). al sueño, de su suerte no cuidando,
y con paso callado
Quando contemplo el cielo el cielo vueltas dando
de innumerables luces adornado, 25 las horas del vivir le va hurtando ( i ) .
y miro acia el suelo
de noche rodeado, A y ! despertad mortales;
5 en sueño y en olvido sepultado: mirad con atención en vuestro daño;
¿las almas inmortales
E l amor y la pena hechas a bien tamaño
despiertan en mi pecho una ansia ardiente; 30 podrán vivir de sombra, y solo engaño? (2)
despiden larga vena
los ojos hechos fuente; A y ! levantad los ojos
10 la lengua (2) dice al fin con voz doliente: a aquesta celestial eterna esfera,
burlaréis los antojos
Morada de grandeza,
de aquesa (3) lisongera
templo de claridad y hermosura,
35 vida, con quanto .teme y quanto espera. .
mi alma (3) que a tu alteza
nació, ¿qué desventura ¿ E s más que un breve punto
15 la tiene en esta cárcel baxa obscura? el baxo y torpe suelo, comparado
a aqueste (4) gran trasumpto,
(1) El imp. añade: A don Oloarte, y tal vez diría
mejor: A Diego Loarte, arcediano de Ledesma, y ami- (1) Imp., Ms. de Añ., cortando.
go del autor. Pero los Mss. nada más dicen. (2) Imp., de sombras y de engaño?
(2) Imp., Oloarte, y digo. (3) Imp., aquesta.
(3) Imp., el alma. (4) Imp., con ese.
dó vive mejorado 65 el alma, y de estos bienes la destierra?
40 lo que es, lo que será, lo que ha pasado.
Aquí vive el contento,
Quien mira el gran concierto aquí reyna la paz; aquí asentado
de aquestos resplandores eternales, en rico y alto asiento
su movimiento cierto, está el amor sagrado
sus pasos desiguales, 70 de honra (1) y de deleytes rodeado.
45 y en proporción concorde tan iguales:
Inmensa hermosura
L a luna como mueve aquí se muestra toda; y resplandece
3a plateada rueda, y va en pos de ella clarísima luz pura,
la luz do el saber llueve, que jamás anochece;
y la graciosa estrella 7 5 eterna primavera aquí florece.
50 de amor le sigue reluciente y bella:
¡ O campos verdaderos!
Y como otro camino
¡ o prados con verdad frescos y amenos!
prosigue el sanguinoso Marte ayrado,
¡riquísimos mineros!
y el Júpiter benino
¡o deleitosos senos!
de bienes mil cercado
80 ¡repuestos (2) valles de mil bienes llenos!
55 serena el cielo con su rayo amado:
i! (0 Imp., vestida.
(2) Imp., escucharás.
(3) Imp., el.
M
penetrará jamás, ni la Megera
con llamas infernales
20 con serpentino azote la alta y fiera
NOTAS
Y diestra mano armada,
saldrá de tu aposento sola Un hora; 1-2 Intactis opulentior
a y ! (i) ni tendrás clavada Thesauris trabum et divitis Indice-••
la rueda, aunque más puedas, voladora
-28 Si figit adamantinos
25 Del tiempo hambriento y crudo, Summis verticibus dira Nécessitas
que viene con la muerte conjurado, Clavos, non anhnum metu,
Non mortis laqneis expedies caput.
a dexarte desnudo
(Hor. III, 24. v.
del oro y quanto tienes más amado;
y quedarás sumido
en males no finibles, y en olvido.
Y de su esfera quando
la cumbre toca altísimo subido NOTAS
el sol, él sesteando
de su hato ceñido Cfr. Nombres de Cristo, I, 6. "Llámase Cristo Pastor;
25 con dulce son deleyta el santo oído. porque le conviene este nombre y cual -es el oficio de
pastor."
Toca el rabel sonoro,
y el inmortal dulzor al alma pasa,
con que envilece el oro,
y ardiendo se traspasa
30 y lanza en aquel bien libre de tasa.
¡ O son, o v o z ! siquiera
pequeña parte alguna descendiese
en mi sentido, y f u e r a
de sí el alma pusiese
35 y toda en ti ¡ o amor, la convirtiese!
Conocería donde
sesteas, dulce Esposo, y desatada
de esta prisión adonde
padece, a tu manada
40 junta, no ya andará perdida, errada (1).
T ú llevas el tesoro
E N LA ASCENSIÓN.
que solo a nuestra vida enriquecía,
que desterraba el lloro,
¡ Y dexas, Pastor santo,
que no resplandescía
tu grey en este valle hondo, escuro
30 mil veces más que el puro y claro día.
con soledad y llanto,
y tú rompiendo el puro ¿Qué lazo de diamante
5 ayre, te vas al inmortal seguro! (ay, alma!) te detiene y encadena
a no seguir tu amante?
¿ Los antes bien hadados,
a y ! rompe y sal de pena,
y los agora tristes y afligidos,
35 colócate ya libre en luz serena.
a tus pechos criados,
de ti desposeídos, ¿ Q u é temes la salida?
10 a dó convertirán y a sus sentidos? ¿podrá el terreno amor más que la ausencia
de tu querer y vida?
¿ Q u é mirarán los ojos
Sin cuerpo no es violencia
que vieren de tu rostro la hermosura,
40 vivir, mas es sin Cristo y su presencia.
que no les sea enojos?
quien oyó tu dulzura, Dulce Señor, y amigo,
15 ¿qué no tendrá por sordo y desventura? dulce padre y hermano, dulce esposo,
en pos de ti yo sigo
¿ Aqueste mar turbado
o puesto en tenebroso,
quién le pondrá ya freno? ¿quién concierto
45 o puesto en lugar claro y glorioso.
al viento fiero ayrado?
estando tú encubierto, (1) En el Ms. de Fuentelsol se añaden a estas cinco
20 ¿qué norte guiará la nave al puerto? estrofas la cuatro siguientes.
v
estábate ( i ) ordenada
20 la primera corona y consagrada.
ODA XIX
NOTAS
A TODOS LOS SANTOS.
Repetirá sonando
la imagen de la voz, en la manera
el ayre deleytando,
que el Ephrateo hiciera
15 del sacro y fresco (2) Hermón por la ladera?
I 11 (1)
(2)
Alcalá, al cielo.
Imp., verde.
, 11
i
A dó ceñido el oro Osado en la promesa,
crespo de verde hiedra, la montaña barquero de la barca no suftiida,
conduxo con sonoro a ti mi voz profesa;
laúd, con fuerza y maña y a ti que la lucida
20 del oso y del león domó la saña. 45 noche te traspasó de muerte a vida.
A donde la azucena
lucía, y el clavel, do el roxo trigo,
reyna agora la avena,
la granza, el enemigo
80 cardo, la sin razón (3), el falso amigo.
Convierte piadoso
tus ojos, y nos mira; y con tu mano
arranca poderoso
lo malo y lo tirano,
85 y planta aquello antiguo, santo (4) y llano.
x_4 Quem virum aut heroaUra vel acri A una Señora pasada la mocedad (1).
Tibia sumes celebrare, Clio.
E l i s a , y a el p r e c i a d o
10-20 ...cujus reci.net jocosa cabello q u e del oro escarnio hacia
nomen imago.
la nieve ha d e s m u d a d o ( 2 ) :
tt&ssm* o t f M -
a y ! ¿ y o n o te decía,
5 r e c o g e , E l i s a , -el p i e q u e ( 3 ) v u e l a e l d í a ?
x_4 Quem virum aut heroaUra vel acri A una Señora pasada la mocedad (1).
Tibia sumes celebrare, Clio.
E l i s a , y a el p r e c i a d o
10-20 ...cujus recinet jocosa cabello q u e del oro escarnio hacia
nomen imago.
la nieve ha d e s m u d a d o ( 2 ) :
a y ! ¿ y o n o te decía,
5 r e c o g e , E l i s a , -el p i e q u e ( 3 ) v u e l a e l d í a ?
A y ! Qué podrá ofrecer 1-10 Dicebam tibi, Galla, Senescimus, effugit actas.
quien todo lo perdió ? aquestas manos (Auson. Ep. XIII.)
osadas de ofenderte, Parcius junctas quatiunt fenestras.
aquestos ojos vanos (Hör. Carm. I, 25. v. 1.)
75 te ofrezco, y estos labios tan profanos.
Audivere, Lyce, DI mea vota Di
L o 1(1) que sudó en tu ofensa, Audivere, Lyce...
Et refugit te quia luridi
trabaje en tu servicio, y de mis males Dentes te quia rugae
proceda mi defensa; Turpant et capitis nives.
mis ojos dos mortales (Iior. Carm. I V , 13. v. 1, 2; 10-12.)
80 fraguas, dos fuentes sean manantiales. 26-30 lile virentis, et
Doctae psallcre Chiae,
Bañen tus pies mis ojos, Pulchris excubat in genis.
limpíenlos mis cabellos, de tormento Importunus cnim transz'olat
Aridas quercus...
mi boca, y red de enojos,
(Hör. Od. I V , 13. v. 6-9.)
les dé besos sin cuento;
85 y lo que me condena te presento.
Presentóte un sugeto
ten malamente (2) herido, qual conviene,
dó un médico per feto
de quanto saber tiene
90 dé muestra, que por siglos mil resuene.
Guardad vuestro destierro, que olvidados Que por las inocentes soledades,
de vuestro ser en mí seréis dolores; 50 recoge el pobre cuerpo en vil cabaña,
tal es la f u e r z a de mis duros hados. y el ánimo enriquece con verdades.
Los bienes más queridos y mejores (1) Quando la luz el ayre y tierras baña,
se mudan, y en mi daño se conjuran, levanta al puro sol las manos puras,
30 y son por ofenderme a sí traidores. sin que se las aplomen odio y saña.
11
c o n ley d u l c e eternamente,
¿ y pensáis ( i ) v o s ser valiente
c o n t r a él a c á e n el s u e l o ?
50 D a m o v i m i e n t o y v i v e z a
a belleza NOTAS
el a m o r , y e s d u l c e v i d a ;
y la suerte m á s valida, 9-18 Cfr. trad, de la Oda 13 del libro 4.0 de Ho-
racio.
sin él es t r i s t e (2) p o b r e z a .
Insperata cum veniet piuma superbiae
55 ¿ Q u é v a l e el b e b e r en o r o ?
Et quae nunc humeris involitant deciderint comae
el v e s t i r s e d a y b r o c a d o ? Nunc et qui color est punicae flore prior rosae
el t e c h o r i c o l a b r a d o ? Mutatus Ligurinum in faciem verterti hispidam.
Dices, lieu (quoties te in speculo videris alterimi)
l o s m o n t o n e s d e t e s o r o ? (3)
Quae m-ens est hodie, cur eadem non puero futi
¿ Y q u é v a l e , si a d e r e c h o Vel, cur his animis non redeunt incolumen geme.
60 o s d a p e d h o
(Hor. I V , 10. v. 2-8.)
el m u n d o t o d o y a d o r a ?
si a l a f i n d o r m i s , S e ñ o r a , ...et refugit te quia luridi
Denies, te quia rugae
e n el s o l o y f r í o l e c h o ?
Turpant et capitis nives.
M i trabajoso día
un poco hacia la tarde se inclinaba (1)
y libre ya del grave ardor (2) pasado
las fuerzas recogía,
5 quando sin entender quien me llevaba (3)
a la entrada me hallé de un verde prado
de flores mil sembrado,
obra dó se extremó naturaleza.
E l suave olor, la no vista belleza
10 me convidó a poner allí mi asiento.
¡ A y triste! que al momento
la flor quedó marchita
y mi gozo tornó (4) en pena infinita.
De labor peregrina
15 una casa Real vi, que labrada
ninguna fué jamás por sabio moro,
M i trabajoso día
un poco hacia la tarde se inclinaba (1)
y libre ya del grave ardor (2) pasado
las fuerzas recogía,
5 quando sin entender quien me llevaba (3)
a la entrada me hallé de un verde prado
de flores mil sembrado,
obra dó se extremó naturaleza.
E l suave olor, la no vista belleza
10 me convidó a poner allí mi asiento.
¡ A y triste! que al momento
la flor quedó marchita
y mi gozo tornó (4) en pena infinita.
De labor peregrina
15 una casa Real vi, que labrada
ninguna fué jamás por sabio moro,
(1) Imp., los campos con la escarcha. (1) Esta estrofa y la siguiente falta en los Mss. de
(2) Imp., ni a ti. J. y A.
.ODA X X V I I
(1) • Falta en J.
(2) Imp., El.
(3) Corregida por el Ms- de Al.
¿Por dicha h a b r á tesoro
2 0 que a su rico cabello se compare,
a u n q u e se j u n t e e l o r o
q u e el i n d i a n o s u e l o e n g e n d r a y pare, NOTAS
y quanta pedrería ,
O r m u z a Portugal y Persia envía? 6 ¿1571?
é
XXX XXXI
3-°
Agora vuelta al cielo pura y santa 5 ¡ O luces del amor querido asiento,
las manos y ojos bellos alza, y pudo o boca donde vive la hermosura,
dolerse agora de m i mal agudo; o habla suavísima, o figura
agora incomparable tañe, y canta. angelical, o mano, o sabio acento!
A n s í digo, y del dulce error llevado, Quien tiene en solo vos atesorado
10 su gozo, y vida alegre, y su consuelo,
presente ante mis ojos la imagino,
su bienaventurada y rica suerte:
y lleno de humildad y amor la adoro.
A LA PRIMERA PARTE
POESIAS IMPRESAS
Inocente cordero
en tu sangre bañado,
con que del mundo los pecados quitas,
del robusto madero
5 por los brazos- colgado
abiertos, que abrazarme solicitas:
ya que humilde marchitas
la color y hermosura
de ese rostro divino
i o a la muerte vecino;
2°
(1) Otro, qual lo requiere.
(2) Imp., no canto más.
CANCIÓN A NUESTRA SEÑORA ( I ) .
6.°
40 y a s í el m i s m o t e m o r le dió osadía. 120 Hasta aquí llega la imitación de los doce primeros
versos de la Sátira de Horacio.
POESIAS INEDITAS
i.a
Escuela esclarescida,
gloria de todas quantas
alumbra el sol hermoso y cubre el cielo,
estás tan afligida,
5 y con lágrimas tantas
bañas tan 'tierna y tristemente el suelo,
que el más dulce consuelo
en rostro te daría,
y el más alto contento
10 en lágrimas amargas volvería;
y así mi ingenio y arte
Y andándole buscando
cansada se sentó junto a una fuente,
que la iba destilando
un risco mansamente,
15 regando el verde prado su corriente.
L a disciplina dura
de retorcido alambre le da gusto,
pues cura la locura
que en fuego no se enciende,
y queda enamorado
20 de quien ser tan hermoso fué criado?
Y de oloroso ungüento
cubriendo la cabeza delicada,
mostrando el sentimiento
en lágrimas bañada
20 del verse de su bien tan apartada.
Estaba ya deshecho
en la amorosa vista de su amante
el cristalino pecho,
más d u r o que diamante
35 producido del oro de levante.
Hágate piadosa
haberte amor sacado por su mano
de aquella temerosa
región del gran tirano,
45 de enmedio de este tráfago mundano.
de los que suben tanto,
20 que quieren habitar su monte santo.
16
a los reciennacidos
Parece un trigo hermoso
ioo cabritos entre lilios mantenidos.
cercado de mil flores muy amenas,
Más frescos son y hermosos, fértil, dulce, oloroso,
más blancos que el jazmín y armiño fino, con frescas azucenas,
más dulces y sabrosos 130 que alrededor le cercan como almenas.
que el esmerado vino, Vuestros pasos preciosos
105 y que el ambrosia, que es manjar divino. heredera del alto Principado,
Y si alguno ha notado ligeros son y hermosos,
que excedo en encumbrar vuestra hermosura, pues aun con el calzado
señal es que ha quedado 135 a dó llegó ninguno habéis llegado
tan corto de ventura, Y aunque en lo dicho todo
1 1 0 que no mereció ver vuestra figura. su mano poderosa ha Dios mostrado,
mas todo es como lodo,
Porque si éste alcanzara
si fuere comparado
a ver aunque de lejos vuestra alteza,
140 al Ser que a ser quien sois os ha encumbrado.
a voces pregonara,
absorto en tal belleza, ¿ Pues qué será este Ser ?
1 1 5 que echó su resto en vos naturaleza. ¿Quál la gracia y beldad que siempre dura,
¿Pues qué diré, Señora, el gozo y el placer,
de vuestro vientre puro? A vos me ofrezco, los dones y hermosura
guiad mi lengua ahora, 145 con que Dios enriquece esa alma pura?
que veis que ya enmudezco,
Mas baste ya con esto,
120 y en un vuelo tan alto desfallezco.
pues la pesada carne estorba el vuelo
Un vaso me parece dexando todo el resto
de marfil primamente fabricado, para quando sin velo
cuyo precio engrandece 150 conozca vuestra alteza allá en el cielo.
de perlas ser sembrado
125 y de finos safiros rodeado.
NOTAS
-ff
OTRA LYRA SOBRE LA CONVERSIÓN ( I ) .
imitación del Cantar de
41-135 Todo lo que sigue es
los Cantares. Por bosques y riberas
ando buscando siempre a mi querido,
135 Hasta aquí el Cantar de los Cantares.
mis voces lastimeras
resuenen en mi oído,
5 para que jamás tenga de mí olvido.
¡ O esperanza mía!
¡ o bien de mi vivir, gran Dios eterno!
dichoso fué aquel día
Lyra (1).
No hallo ya descanso
que los suspiros míos , adonde, Virgen pura, no te veo:
20 declaran por lugares muy sombríos. tu rostro claro y manso,
tu gracia y rico aseo
Iría yo, Señora,
50 alegran y acrecientan mi deseo.
con gran gozo a buscarte si pudiese;
mas ¡ a y de mí! que ahora, A ti, pues, Reyna, clamo
por mucho que anduviese _ con ansias y suspiros noche y día:
25 no había de llegar a dó quisiese. con lágrimas te llamo,
socorre al alma mía
A l alma ya vencida
55 con gozo, y regocijo, y alegría.
del grande amor que causa tu hermosura,
perder por ti la vida
le es poco, Virgen pura,
30 y estar sin t i ' l e causa pena dura.
2.°
2.°
Tu patulae.
TITIRO Y MELIBEO.
MELIBEO.
TITIRO.
MELIBEO.
Pensaba, Melibeo, neciamente,
No te envidio tu bien, mas grandemente pensaba yo que aquella que es llamada
me maravillo haberte sucedido Roma, no era en nada diferente
en tanta turbación tan felizmente.
40 (1) De aquesta villa nuestra acostumbrada,
Todos de nuestro patrio y dulce nido adonde las más veces los pastores
20 andamos alanzados; vesme agora llevamos ya la cría destetada.
aquí qual voy enfermo y afligido (1).
Ansí con los perrillos los mayores,
Y guío mis cabrillas, y esta que hora ansí con las ovejas los corderos,
en medio aquellos árboles parida, 45 y con las cosas grandes las menores
¡ a y ! con lo que el rebaño se mejora,
Solía comparar; mas los primeros
25 Dexó dos cabritillos dolorida lugares con aquélla comparados
encima de una losa, fatigado son como dos estremos verdaderos,
de mí sobre los hombros es traída. Que son de Roma ansí sobrepujados,
¡ A y triste!, que este mal y crudo hado, 50 qual suelen del ciprés alto y subido
a nuestro entendimiento no estar ciego, los baxos romerales ser sobrados.
30 mil veces nos estaba denunciado.
MELIBEO.
Los robles lo decían ya con fuego
tocados celestial, y lo decía Pues di: ¿qué fué la causa que movido
la siniestra corneja desde luego. a Roma te llevó?
Mas tú, si nó te ofende mi porfía,
(1) Imp., De aquella.
(1) Imp., dolorido.
Tú, Titiro, te habías ausentado,
TITIRO. los pinos y las fuentes te llamaban,
Fué el libertarme, 75 las yervas y las flores de este prado.
lo qual, aunque algo tarde, he conseguido.
TITIRO.
55 Que al fin la libertad quiso mirarme
¿Qué pude? que mil males me cercaban,
después de luengo tiempo, y ya sembrado
y allí para salir de servidumbre
de canas la cabeza pudo hallarme.
dos cielos más dispuestos se mostraban.
Después que Galatea me ha dexado,
Que allí vi, Melibeo, aquella cumbre,
y soy del Amarilis prisionero,
80 aquel divino mozo por quien uno
6o y vivo a su querer todo entregado.
mi altar en cada mes enciende lumbre.
Que en quanto duró aquel imperio fiero Allí primero dél que de otro alguno
en mí de Galatea, yo confieso oí: paced, baqueros, libremente,
que ni curé de mí, ni del dinero. ' paced como solía cada uno.
Llevaba yo a la villa mucho queso,
65 vendía al sacrificio algún cordero, MELIBEO.
mas no volvía rico ni ( 1 ) por eso.
85 Por manera que a ti perpetuamente
te queda tu heredad, ¡ o bien hadado!
MELIBEO.
aunque pequeña, pero suficiente.
Esto fué aquel semblante lastimero
Bastante para ti demasiado,
que tanto en Galatea me espantaba,
aunque de pedregal 'y de pantano
e9to porque decía ¡ay,'hado fiero! (2).
90 lo más de toda ella está ocupado.
70 Esto porque tristísima dexaba No dañará el vecino grey mal sano
la fruta sin coger en su cercado, con males pegadizos tu rebaño,
que Titiro su bien ausente estaba. dexando tu esperanza rica en vano (1).
(1) Imp, yo.
(2) Imp., esto porque llamaba al cielo fiero. (1) I m p , ni luirá que tu trabajo salga vano.
115 Primero, pues, que aquellas celestiales
No causará violencia el pasto estraño figuras ( 1 ) de aquel mozo de mi pecho
95 en lo preñado dél, ni en lo parido borradas desparezcan las señales.
las no usadas yervas harán daño (i).
—•
cuevas os veré lejos ir paciendo, 19 Esta frase es original de fray Luis y ha sido imitada
colgadas por las peñas altas frías. por otros.
Podrías esta noche aquí tendido 51 Por superados. Garcilaso lo usó en el mismo sen-
tido.
en blanda y verde oja dar reposo
150 al cuerpo flaco, al ánimo afligido; 55-57 Débil traducción de estos dos versos, realmente
difíciles:
Y cebaremos bien, que estoy copioso
de maduras manzanas, de castañas "Libertas quae sero tarnen respexit inertem,
Candidior postquam tondcnii barba cadebat."
enxertas, y de queso muy sabroso.
66 Infelizmente traducido este verso.
Y ya las sombras caen de las montañas
155 más largas, y convidan al sosiego, "Non unquam gravis aere domum mihi dextra redibat."
„ 0 y nota. Aequore, dice el original, y por consiguien- En fuego Coridón pastor ardía
te, ninguna de las dos versiones es exacta. por el hermoso Alexo, que dulzura
era de su señor, y conocía
118 Nótese esta colocación del pero.
que toda su esperanza era locura:
127 Post aliquot aristas. 5 solo siempre que el sol amanecía
135 Mala traducción del discordia, que es lo que dice entrando de unas hayas la espesura
Virgilio. con los montes a solas razonaba,
139-140 Feliz empleo del ya por en otro tiempo, a la
y en mal formado verso así cantaba (1).
italiana. No curas de mi mal, ni das oído
146 H a de pronunciarse esdrújulo para que el verso 10 a mis querellas, crudo, lastimeras,
conste: cítkiso. ni de misericordia algún sentido.
154-157 Et iam summa procul villarum culmina fumant Alexi, en tus entrañas vive fieras;
Majoresque cadunt altis de monhbus umbrae. yo muero en viva llama consumido,
tú siempre en desamarme perseveras,
1 5 ni sientes mi dolor, ni yo te agrado,
por donde me será el morir forzado.
Ofrécente las nimphas oficiosas 105 Por las montañas la leona fiera
sus canastillos de azucenas llenos, al ya no osado lobo hambrienta sigue,
coge para ti Nais la blanca, rosas (2) el lobo carnicero a la ligera
la viola, los lirios, los amenos cabra de día y noche la persigue,
85 acanthos, y amapolas olorosas, en pos de la retama y cambronera
flores de anís, y los tomillos buenos, 1 1 0 la cabra golosísima prosigue,
y casia, y otras mil yerbas divinas, yo en pos de ti j o Alexi! y de consuno (1)
junto con el jazmín las clavellinas. en pos de sus deleytes cada uno
Pues yo te cogeré manzanas bellas Su obra ya los bueyes fenecida,
90 cubiertas de su flor, y las queridas y puesto sobre el yugo el lucio arado,
castañas de Amarilis, y con ellas 1 1 5 se tornan, y la sombra ya estendida
ciruelas que merecen ser cogidas; de Phebo, que se pone apresurado,
tú, mirto, y tú, laurel, iréis sobre ellas, huyendo alarga el paso, y la crecida
llama, que me arde el pecho, no ha menguado:,
(1) I m p , Tengo dos corsos que tina oveja cna - de mas ¿cómo menguará? ¿quién puso tasa?
pelo blanco a manchas variados; = agóianle las tetas
cada día = y fueron con peligro mío hallados. É) Imp., te importuno.
(2) Imp., las blancas rosas.
1 2 0 ¿quién limitó con ley de a m o r la b r a s a ?
MENALCAS.
DAMETA.
MENALCAS. PALEMÓN.
Las ovejas, zagal, recoge, que hora N o es mío el sentenciar contiendas tales,
140 si las coge el calor, después en vano 155 y tú mereces y éste la becerra,
se cansará la palma ordenadora. y quien canta de amor los dulces males,
y quien prueba de amor la amarga (1) guerra.
DAMETA.
(1) Imp., larga.
¡ A y en qiián buenos pastos, quán mal sano
V
° y T N ó t e s e la acentuación: Palhnon,
82-84 A love principimi Musae; Iovis omnia piena...
E n este vuestro, en este consulado,
20 Póllio, de nuestra edad gran hermosura,
tendrá principio el rico y alto hado.
U n poco más alcemos nuestro canto, , 25 L o que hay de la maldad nuestra primera
Musa, que no conviene a todo oído deshecho, quedarán ya los humanos
decir de las humildes (i) ramas tanto. libres de miedo eterno, de ansia fiera.
Conócela, que a quien no han a l a g a d o 42 El lobo, la onza, son adiciones del traductor. Virgi-
1 1 0 sus (3) padres con a m o r y a b r a z o estrecho, lio dice:
"Nec magnos metuent amienta leones."
ni a s u mesa los dioses le h a n sentado,
48 Assyrium amomum, dice más concretamente Vir-
ni le admiten las diosas a su lecho.
gilio.
(1) Imp., le da. 52 Paulatim.—De suyo. Nótese esta ingeniosa interpre-
(2) Imp., Col., tu gloria. tación.
(3) Imp., los. 57 Vestigia, Quizá traducido con demasiada literalidad.
62 No se indica con bastante claridad que Argos sea
una nave:
altera quae vehat Argo.
64 Bella. [Desafíos.]
EGLOGA V
66 Los hados es adición feliz del traductor.
75 Nótese el ritmo lento y pausado de este verso, y su
MENALCAS Y MOPSO.
rara acentuación.
"Robustas quoque iam tauris juga solyet arator. Cur non, Mopse.
76-78 Débil y prosaico.
82 Sponte. MENALCAS.
84 Verso superfluo, añadido para la rima.
89 Cara Deum soboles P u e s nos hallamos juntos, M o p s o , agora
91 Algo más que redondo dice el magnífico verso : m a e s t r o s , t u en t a ñ e r s u a v e m e n t e ,
T ú e r e s el m a y o r , a ti son d a d o s ,
M e n a l c a , los d e r e c h o s d e m a n d a r m e ,
y a m í el obedecer a tus m a n d a d o s .
10 Y p u e s q u e a n s í t e place, a q u í s e n t a r m e
a l a s o m b r a que e l c é f i r o m e n e a ,
o ( 1 ) quiero, y es m e j o r , allí l l e g a r m e
T ú e r e s el m a y o r , a ti son d a d o s ,
M e n a l c a , los d e r e c h o s d e m a n d a r m e ,
y a m í el obedecer a tus m a n d a d o s .
10 Y p u e s q u e a n s í t e place, a q u í s e n t a r m e
a l a s o m b r a que e l c é f i r o m e n e a ,
o ( 1 ) quiero, y es m e j o r , allí l l e g a r m e
MENALCAS.
MENALCAS.
Quanto es el blando sauz sobrepujado
Conmigo mismo estoy imaginando, de la amarilla oliva (i), y el espliego
que Aminta en nuestro campo es quien contigo del rosal es vencido colorado;
tan solo competir puede cantando.
Tan gran ventaja tú, si no estoy ciego,
MOPSO. 35 haces al mozo Amintas. Mas di agora,
que ya en la cueva estamos, di ahora luego.
¿Qué mucho es que compita aquél conmigo?
20 presumirá vencer al Dios de Délo. MOPSO.
Di (2) del amor de Phili, y del consuelo (3), 40 Testigos son los ríos qual estaban,
' o di en loor de Alcón, o de los fieros quando del miserable cuerpo asidos
de Codro; y de tu grey pierde el recelo: los padres las estrellas acusaban.
No hubo por quien fuesen conducidos
25 Pierde, que habrá quien guarde los corderos.
los bueyes a beber aquellos días,
45 ni fueron los ganados mantenidos.
MOPSO.
Aun los leones mismos en sus frías
Antes aquestos versos que he compuesto
cuevas tu muerte, Daphni, haber llorado,
quiero probar agora los primeros.
dicen las selvas bravas y sombrías.
(1) I m p , silvestre vid que en torno la hermosea.
(2) J . y C , Si. (1) J . C. y A , fértil oliva.
(3) I m p , desconsuelo.
70 Pues esparcid ya rosas, poned velo
Que por tu mano, Daphni, el yugo atado
a las fuentes de sombra, que servido
50 al cuello va el león y el tigre fiero,
así quiere ser Daphni desde el cielo.
tú é enramar las lanzas has mostrado.
Y con dolor, pastores, y gemido,
T ú diste a Baco el culto placentero, un túmulo poned, y en el lloroso
tú de tu campo todo y compañía 75 túmulo, aqueste verso esté esculpido:
la hermosura fuiste (1), y bien entero.
" Y o Daphni descansando aquí reposo,
55 Ansí como del olmo es alegría (2) "nombrado entre las selvas hasta el cielo
la vid, y de la vid son las colgadas "de hermosa grey pastor muy más hermoso."
uvas, y de la grey el toro es guía.
MENÁLCAS.
Qual hermosea el toro las vacadas,
como las mieses altas y abundosas Quanto al cansado el sueño en verde suelo,
60 adornan y enriquecen las aradas. 80 quanto el matar la sed en fresco río,
es causa de deleyte y de consuelo,
Y ansí luego que crudas y envidiosas
las Parcas te robaron, se partieron No menos dulce ha sido al gusto mío
Apolo y sus hermanas lagrimosas (3). •tu canto, y no tan solo en la poesía,
mas en la voz, si yo no desvarío,
Pallas y Phebo el campo aborrecieron, 85 Igualas tu maestro, y su armonía,
65 y los sulcos que ya llevaban trigo, dichoso, que por él serás tenido
de avena y grama estéril se cubrieron.
fuera de toda duda y de porfía.
- •
E n quanto por las cumbres ya paciere ni el río sonoroso a mí me agrada,
del monte el jabalí; en quanto amare que en valles pedregosos va, y camina.
135 el río, y en el agua el pez corriere,
MENALCAS.
Y en quanto de tomillo se apastare
la abeja, y ansimismo de rocío Primero pues por mí te será dada
la cigarra su pecho sustentare ( 1 ) : 155 esta flauta, con que el Alexi hermoso
de mí, y la Galatea fué cantada.
Tanto tu fama y nombre (yo confío)
140 irá más de continuo floreciendo MOPSO.
al yelo siempre el mismo, y al estío.
Y tú toma este báculo ñudoso,
Como a Ceres y a Baco a ti ofreciendo que Antino mereciendo ser amado,
irán sus sacrificios los pastores, nunca me le sacó, y es muy vistoso
y sus promesas les irás cumpliendo (2). 160 en ñudos, y con plomo bien chapado.
MOPSO.
el b i e n a v e n t u r a d o E u r o t a o í d o
h a b í a , y el oillo c o n t i n u a n d o
lo habían sus laureles aprendido,
S i l e n o l o cantaba, y resonando
1 5 0 los v a l l e s a los cielos v a el sonido NOTAS
h a s t a que y a la e s t r e l l a a p a r e c i e n d o
Egloga VI.
del p a s t o l a s o v e j a s f u é c o g i e n d o . 2 Ludere.
3 Erubuit.
6 Más expresivo y familiar en latín, "aurem vellit",
me tiró de la oreja.
10-16 Deductum discere carmen. L a traducción es algo
oscura. Nótese el uso del adjetivo pastora.
17 Non injussa cano. Felicísima traducción, más con-
cisa que el original.
18 Nótese esta aparición de la voz aficionado, que en
tal sentido, y con valor de sustantivo no parece antigua.
Acaso f r a y Luis escribió: alguno aficionado.
19 Uno por solo.
21 E l pino, el lauro y el pruno, son adiciones del tra-
ductor.
29-30 Cuán superior a esta prosaica llaneza el texto
virgiliano:
Serta procul, tantum capiti delapsa, jacebant,
Et gravis aittrita pendebat cantharus ansa.
38 Naiadum, dice Virgilio.
47-48 Huic aliud Hnercedis erit,
51-52 ...tum rígidas motare cacumina quercus.
57-58 Magnum per inane.
64 et ipse tener mundi concreverit orbis;
57-64 Muy bien entendido este difícil pasaje.
67 ...et rerum paulatim sumere formas.
71-72 Rara per ignaros errent animalia montes.
318 POESÍAS DE FR. LUIS DE LEÓN
CORIDÓN.
i Arguta ilice.
3 Falta el disientas lacte.
7 Falta el Arcades ambo.
io Parece que debe decir el mal (el mar).
17-20 Versos felices, sobre todo el 4-°. Que acaso excede
"•Cl! al original:
•WA
...eque sacra resonant examina quercu. •
Depulsos
> a lacte domi quae clauderet agnos.
I
J 65-72 Muy bien castellanizado este trozo. Cfr. Garcilaso,
Egloga tercera.
73 Sardoniis ...herbis.
BO 74 Rusco.
75 Projecta vilior alga.
81-84 Cuatro deliciosos versos, que conservan la suave
armonía de estos dos de Virgilio.
Mi/li
ml
in
ill'
recibe aquestos versos que te ofrece
20 la voz que tu querer cumplir desea:
al vencedor laurel que resplandece
en torno de tu frente, y la hermosea,
EGLOGA VIH consiente que allegada, y como asida
aquesta yedra (i) vaya entretexida.
Pastorum Musam.
25 Apenas de la noche el velo frío
DAMÓN Y ALPESIBEO. había el claro cielo desechado,
al tiempo que es dulcísimo el rocío
E l dulce y docto contender cantando
sobre las tiernas yerbas al ganado,
de Alpheo y de Damón que embebecida
vertiendo de los ojos largo río,
la novilla admiró, casi olvidando
30 al tronco de un (2) olivo recostado
la yerva y el pacer, por quien perdida
Damón tocó la flauta lastimero,
5 la presa tuvo el lince, y restañando
y comenzó a cantar así primero.
los ríos sosegaron su corrida,
digamos, pues, el canto y los amores
de Alpheo y de Damón, doctos pastores. DAMÓN.
¡ O tú que hora con reyno victorioso Procede ya, lucero, ante el sol bello,
10 o vences ( i ) el Timavo, o la vecina en tanto que de Nise fementida
costa, si jamás día tan dichoso 35 por vil amor trocado me querello,
veré, que me conceda con voz dina y notifico al cielo mi herida (1)
cantar tu pecho y brazo valeroso, (bien que nunca hallé provecho en ello)
cantar tu verso y musa peregrina, en esta hora prostrerà de mi vida,
15 a la qual sola dice justamente y notifico al cielo mi herida (3)
la magestad del trágico eloqüente! 40 zampoña, como en Menalo se canta.
n o m i r e s , A m a r i l i s , al echalla,
c o n estos t e n t a r é a q u e l l ' a l m a fiera:
1 9 0 m a s q u é canto, ¿ o q u e D i o s p o d r á a b l a n d a l l a . NOTAS
V e presto, mi c o n j u r o , y la m a r pasa,
3-4 hrtmemor herbarían.
y v u e l v e de l a v i l l a a D a p h n i a c a s a . 4-5 Stnpefactae carmine lynces.
¿ N o v e s q u e las cenizas a l z a n l l a m a 10-11 V a g a y débil traducción de los dos versos:
Talis amor Daphnim, qualis cum fessa iuvencum A que nos diga un malo apoderado
Per nemora atque altos querendo bocula lucos
d e n u e s t r a s h e r e d a d e s sin m e s u r a :
Propter aquae rivumviridi procumbit m ulva
Perdita nec serae merninit décedere nocti. I d f u e r a , q u e e s t o t o d o a m í m e es dado.
Talis amor Daphnim, qrnlis cum fessa iuvencut* A que nos diga un malo apoderado
Per nemora atque altos querendo bocula lucos
d e n u e s t r a s h e r e d a d e s sin m e s u r a :
Propter aquae rivumviridi procumbit m ulva
Perdita nec serae meminit décedere nocti. I d f u e r a , q u e e s t o t o d o a m í m e es dado.
LICIDAS.
porque cantemos yendo caminando. 69-70 Lentae texunt umbráculo vites. F r a y Luis traduce
dos veces esta frase: la segunda versión es mejor.
MOERIS
71-72 Insani feriant sine littora fluctus.
Pon, Licida, ya fin a este proceso, 73-74 Pura solum sub nocte canentem.
74-75 Muy bien traducido el
1 1 0 hagamos lo que hacemos de presente,
numeros menimi si verba tenerem.
que el tiempo y la sazón de todo eso
81 Ducerei apricis in collibus uva colorem.
es, quando aquel tornáre a estar presente.
\
85-93 En las ediciones modernas, los versos latinos
que corresponden a estos tres tercetos aparecen puestos
^en boca de Moeris. Los anteriores en boca de Licidas,
y así parece que lo reclama el sentido.
95-97 Et mine omite tibi stratum silet aequor el omites
EGLOGA X
Aspice, ventosi ceciderunt murmuris avrae.
EXTREMUM HUNC, ARETHUSA.
ni g u s t o p o r m o n t a ñ a s y l u g a r e s
á s p e r o s p e r s e g u i r al p u e r c o f i e r o ,
1 2 5 las s e l v a s no r e m e d i a n m i s pesares,
n i el m a l i n c o m p a r a b l e ( i ) d e q u e m u e r o ,
n i estudio m í o , o p e n a , o t r i s t e duelo
p u e d e n m u d a r a q u e l q u e a b r a s a el suelo. NOTAS
N o p u e d e n , n i si en m e d i o del i n v i e r n o
3 Entiéndase que este de equivale a para. El ori-
1 3 0 p u s i e s e d e n t r o el p e c h o el H e b r o helado, ginal está en dativo: meo Gallo.
ni si q u a n d o del o l m o el c u e r o i n t e r n o 12 Cum fluctus subterlabere Sicanos. F r a y Luis
s e seca en los G u i n e o s , su g a n a d o suprime, según costumbre, el adjetivo geográfico.
paciese cometido (2) a mi gobierno, 16 Mucho más poético y expresivo Virgilio:
Dum teñera attondent simae virgulta capellae,
y q u a n d o el S o l en C a n c r o e s t á e n c u m b r a d o :
17-18 y : está usado adverbialmente en el sentido
. 1 3 5 t o d o l o t i e n e a m o r p r e s o y r e n d i d o (3). de también (et). Latinismo osado y feliz.
r i n d á m o s l e t a m b i é n n u e s t r o sentido. Aquí la versión es superior al original, que dice sólo:
Non canimus surdis: respondent omnia silvae.
E s t o m e baste, M u s a , haber cantado,
en quanto u n canastillo estoy texiendo 23 Falta, y es muy esencial, el epíteto indigno,
que Virgilio aplica al amor de Galo.
al Galo, c u y o a m o r qual bien plantado
32 Faltan los hermosos epítetos pinifer, aplicado
1 4 0 á l a m o , en m í p o r h o r a s v a creciendo: al Ménalo, y gélido, al Lyceo:
alto, que y a a la sombra estar sentado
...et gelidi fleverunt saxa Lycaei.
d a ñ a de e n e b r o y m á s l a s o m b r a siendo,
y a u n a las m i e s e s c o n l a s s o m b r a s f r í a s : 45 E s errata grosera. Debe leerse Apolo, como lo
exige el texto latino. [La edición decía a pelo.]
i d h a r t a s , q u e a n o c h e c e , id, c a b r a s m í a s . ^
48 Débil traducción del verso latino:
Perque nives alium perqu-e hórrida castra secuta est.
(1) Imp., la cruel herida. 49-56 Octava pintoresca y felizmente ajustada a los
(2) Imp-, encomendado. detalles del original-
(3) Imp., y pues vencido amor iodo lo tiene, _ ren 66-67 Falta la repetición de A rcades, que conservó
dírnosle de fuerza nos conviene. con tan bellísimo efecto Garcilaso (Egloga 2. a ).
66-64 Todo este pasaje, admirable en el original, está
endeblemente traducido por fray Luis.
354 POESÍAS D E F R . D E LEÓN
PÁGS.
APÉNDICE SEGUNDO.
213
I. Escuela esclarescida
II. De tres soy la segunda hermosura...... 218
III. Mil varios pensamientos ^
IV. Quando la noche obscura 226
23
V. Si de mi bajo estilo ^
23
VI. No invocó aquel ñapeo °