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LA DEMOCRACIA PARTICIPATIVA

A PARTIR DE LA CONSTITUCIÓN DE 1991

CARLOS AURELIO HIGGINS ECHEVERRÍA*

RESUMEN

Desde hace más de un siglo Colombia ha tenido una inestabilidad constitucional. Ello se puede
palpar –por así decirlo– en las ocho grandes reformas que tuvo la centenaria constitución de 1886
del presidente Núñez. Y no se habla de inestabilidad constitucional, a pesar de los tantos hechos
violentos que la estremecieron, incluido un golpe de estado, ni porque se haya visto amenazado el
establecimiento, sino porque la constitución sufre de manera constante enmiendas, que cambian su
rumbo y le hacen perder la esencia. En este orden de ideas, nació la constitución de 1991, frente a
la cual cabe preguntar ¿existe una verdadera democracia participativa en nuestro país, que permita
que la gente del común participe en la toma de sus propias decisiones?

Palabras clave
Colombia, Democracia participativa, Desarrollo, Historia, Asamblea Nacional.

ABSTRACT

Colombia has had a constitutional instability for more than a century. This is palpable –so to speak–
in the eight major reforms that had the 1886 constitution centennial of president Núñez. And we do
not talk about constitutional instability, despite the many violent events that shooked, including a
coup d’etat, nor because they have been threatened the establishment, but because the constitution
constantly suffers amendments, which change their direction and they lose the essence. In this vein,
the 1991 constitution was born, against which we must ask is there a true participatory democracy
in our country, which allow ordinary people participate in making their own decisions?

Keywords
Colombia, Participatory democracy, Development, History, National Assembly.

Recibido: Febrero 19 de 2013 Aceptado: Abril 17 de 2013


* Abogado y docente escritor, Universidad del Atlántico.

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A pesar de que la constitución de Co- Hay que plantar la semilla. El cami-


lombia ya tiene 20 años de vigencia, no es duro, pero no imposible aun-
los mecanismos, diferentes al voto, que haya más enemigos que adeptos
como el plebiscito, el referendo, la en estos nobles propósitos. No más
consulta popular, el cabildo abierto, basta con conversar con cualquier pa-
la iniciativa legislativa y la revocato- rroquiano para comprobar esta dura
ria del mandato, y la constitución de realidad. De ahí que los amantes de
nuevos partidos, movimientos y agru- la democracia en todas sus manifesta-
paciones políticas sin limitación algu- ciones debamos defender con claridad
na, sin lugar a dudas, le proporcionan e inteligencia la libre determinación
al conglomerado social colombiano de los pueblos.
nuevos retos y caminos en su búsque-
da constante por encontrar un mejor Es de nuestro parecer que Colombia
mañana en la férrea defensa de sus desde hace más de un siglo ha tenido
intereses. Todos estos matices, más
una inestabilidad constitucional. Ello
nuestro pensamiento en torno al tema
se puede palpar –por así decirlo– en
de la democracia participativa, van
las ocho grandes reformas que tuvo
a permitir a las personas estudiosas
la centenaria constitución de 1886 del
del quehacer político y de la historia
presidente Núñez. Y no se habla de
plantearse nuevas inquietudes investi-
inestabilidad constitucional, a pesar
gativas a partir de los desarrollos con-
ceptuales de la investigación. de los tantos hechos violentos que la
estremecieron, incluido un golpe de
La democracia participativa en Co- estado, ni porque se haya visto ame-
lombia merece este y todos los estu- nazado el establecimiento, sino por-
dios posibles más, cuando somos de que la constitución sufre de manera
la posición que en el país es solo for- constante enmiendas, que cambian su
malidad, antes que realidad social. Por rumbo y le hacen perder la esencia.
eso, estamos en pañales y lejos de va- En este orden de ideas, nació la cons-
lidar logros significativos en este as- titución de 1991, luego de una época
pecto vital del trasegar de los pueblos violenta –fines de los años 80– donde
modernos. La realidad nos desborda los diferentes actores armados como
posiblemente por falta de conciencia guerrilla, paramilitares y carteles nar-
social de la clase dirigente, o por la coterroristas marcaron la sangrien-
simple posición que históricamente ta senda, que de una u otra forma,
tomamos los ciudadanos del común, desembocó en la realización de una
los académicos y los cuasi líderes de Asamblea Nacional Constituyente, y
estómago que son los que más daño la posterior redacción de una nueva
le hacen a la democracia participativa norma de normas, donde se tuvo en
del deber ser, no a la participativa con cuenta el pluralismo en todas sus for-
intereses mezquinos que es la que pu- mas, la diversidad étnica, la libertad
lula en el medio. de cultos, el libre desarrollo de la per-

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sonalidad, y donde además se fijaron M-19 fue el protagonista del robo de


las pautas para el tránsito de una de- la espada de Bolívar en la toma a la
mocracia representativa a una demo- Quinta de Bolívar (enero 17 de 1974);
cracia participativa. del secuestro de José Raquel Merca-
do (febrero de 1976), presidente de
Sin embargo, vale la pena preguntar- la Confederación de Trabajadores de
se, si existe una verdadera democra- Colombia, y de su muerte el día 19 de
cia participativa en nuestro país, y si abril del mismo año; del robo de las
de algo ha servido para que la gente armas del Cantón Norte en Usaquén
del común participe en la toma de sus (diciembre 31 de 1978); de la toma
propias decisiones. Pues bien, es aquí por 61 días a la Embajada de Repúbli-
donde nos detendremos para anali- ca Dominicana (febrero 27 de 1980);
zar el fenómeno y tratar de dar ex- del secuestro del líder conservador y
plicaciones al respecto. Por eso, nos candidato a la presidencia Álvaro Gó-
preguntamos si ¿existe realmente en mez Hurtado (mayo 29 de 1988); de
Colombia democracia participativa la sangrienta toma al Palacio de Jus-
desde su inclusión en la constitución ticia (noviembre 6 de 1985), donde
política de 1991? murieron 98 personas, incluidos, ma-
gistrados, consejeros de estado, servi-
Contexto histórico y recorrido de la dores judiciales, empleados y visitan-
democracia participativa tes del Palacio de Justicia. Los crueles
hechos culminaron 27 horas después
El periodo de tiempo comprendido con la denominada retoma del Pala-
entre 1970 y 1990 (dos décadas) es- cio, es decir, el 7 de noviembre, de-
tuvo plagado, como otrora años, por jando una estela de sangre, llanto,
el síndrome trágico de la violencia. luto, fuego y una herida irrestañable.
La multiplicidad de actores armados
–guerrilla (EPL, M-19, ELN, FARC y Por su parte, el Cartel de Medellín,
otras), grupos de autodefensas o co- un grupo exportador de cocaína, con-
múnmente denominados paramilita- formado por Pablo Escobar Gaviria,
res, delincuencia organizada, y pode- Gonzalo Rodríguez Gacha, Carlos
rosos carteles de la droga de Medellín Lehder Rivas y los hermanos Jor-
y de Cali– marcó un hito negativo en ge Luis, Juan David y Fabio Ochoa
la reciente historia de nuestra Repú- Vásquez, sembró de terror el suelo
blica, y de paso, debilitó los cimien- colombiano en la década de los años
tos del establecimiento con acciones 80, buscando a toda costa presionar al
descarnadas y bárbaras, y mantuvo en gobierno para que aboliera la extradi-
estado de zozobra y pánico a la pobla- ción constitucional de colombianos
ción civil. rumbo a los Estados Unidos. Magni-
cidios como los del Ministro de Justi-
De los movimientos guerrilleros, el cia Rodrigo Lara Bonilla, del candi-

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dato a la presidencia Luis Carlos Ga- fue abrumador por el “Sí” en las elec-
lán Sarmiento; del director del diario ciones presidenciales del 27 de mayo
El Espectador Guillermo Cano Isaza; de 1990.
de los candidatos de la UP Jaime Par-
do Leal y Bernardo Jaramillo Ossa, y Al tocar, a nuestro juicio, los ante-
del candidato de la AD M-19 Carlos cedentes sociopolíticos de la Asam-
Pizarro; atentados como la bomba al blea Nacional Constituyente, que
avión de Avianca el 27 de noviembre finalmente dieron como resultado la
de 1989, que dejó 107 muertos; el constitución de 1991, necesariamente
de la bomba al DAS en Bogotá el 6 debemos hacer un análisis de consti-
de diciembre de 1989, que arrojó 70 tucionalidad de un histórico caso de
muertos; y homicidios a jueces, ma- la reciente vida política de Colombia,
gistrados, y miembros de la fuerza la cual ha estado signada por facto-
pública –un coronel y centenares de res perturbadores del orden público,
policías– son los hechos más relevan- como la violencia que siempre la ha
tes que se le atribuyen a este engendro azotado. El decreto 1038 de 1984
de la maldad que desestabilizó a toda declaró turbado el orden público na-
una nación. cional y por consiguiente implantó la
medida de estado de sitio en todo el
El lema del Cartel de Medellín o de territorio colombiano, consagrada en
los Extraditables –como se autode- la constitución nacional, vigente para
nominaron– era la preferencia de una la época, es decir la de 1986.
tumba en Colombia a un calabozo en
los Estados Unidos. De ahí la acome- La Séptima Papeleta convocaba a una
tida de toda suerte de actos ominosos, Asamblea Nacional Constituyente,
encaminados a abolir constitucional- con el apoyo de diversas fuerzas po-
mente la extradición de nacionales co- líticas y sociales, evento que se fijó
lombianos al país del Norte. Incluso, para el 9 de diciembre de 1990, pues
extraditado Lehder, y abatido Rodrí- esta facilitaría “la reincorporación
guez Gacha, dos de los más temidos de grupos alzados en armas a la vida
miembros del Cartel, era tan evidente civil”, básicamente el del M-19 que
la presión de Escobar, que un movi- esgrimía como elemento fundamental
miento nacional estudiantil, asfixiado la posible participación en una Asam-
por tanta violencia, ideó la Séptima blea Nacional Constituyente con el
Papeleta, que consistía en preguntar- ánimo de reincorporarse a la vida ci-
le al pueblo en forma de Plebiscito si vil y, por ende, deponer las armas.
estaba de acuerdo con votar para la
convocatoria de una Asamblea Na- A raíz de lo anterior, la Corte Suprema
cional Constituyente, y de este modo, de Justicia dijo que había una “clara
reformar la constitución política de relación de conexidad entre el decre-
Colombia. El resultado, lógicamente, to que se revisa y los motivos que de-

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terminaron la declaratoria de estado ideas, mencionaremos al pueblo o na-


de sitio”. Además manifestó que la ción, como el constituyente primario,
lucha armada de los grupos guerrille- y del cual emanan los poderes consti-
ros y las fuerzas sociales marginadas tutivos o derivados (Art. 2 de la C.N.
desarrollan actos por fuera de la ley de 1886), de ahí que sea la voluntad
que conllevan a la anarquía y al caos del pueblo la que prime al momento
del país. En síntesis, se hace necesaria de tomarse una determinación.
una reforma estructural que les permi-
ta a los diversos actores del conflicto En el caso bajo estudio, la Corte de-
integrarse a la vida democrática insti- claró inexequibles un sinnúmero de
tucional y poder alcanzar la tan anhe- medidas que implican restricciones al
lada y esquiva paz. ejercicio pleno de la soberanía, menos
la que convoca a la realización de una
La medida tenía sustento en los cons- constituyente, porque el pueblo como
tantes hechos de violencia que con constituyente primario así lo clama, y
frecuencia sacudían al país y lo tenían en definitiva lo que se persigue con la
en delicada situación de inestabilidad. determinación es que se interpreten
Es por eso que había que “rediseñar “las necesidades y esperanzas de la
dichas instituciones para ponerlas Nación que tiene derecho a buscar
acordes con los tiempos modernos”. nuevos caminos que garanticen un
Asimismo, integrar los diversos gru- mejor proyecto de vida de normal
pos sociales a la vida civil y “con- convivencia, paz, libertad y justicia
ciliar intereses opuestos” en la bús- social”.
queda permanente del consenso, “el
restablecimiento del orden público, Las normas que expida la Asamblea
a la armonía social, la convivencia Nacional Constituyente tendrán ca-
ciudadana y sobre todo, la paz”, con rácter de permanentes, aunque sean el
todo lo que esta implica. Cabe señalar resultado de la declaratoria del estado
que la conservación de la integridad de sitio, y de ninguna manera violan
de la constitución incluye la de la pre- lo preceptuado en el inciso 7º del ar-
servación de los valores referentes a tículo 121 de la carta de 1986. Las
la organización política, con el fin de normas del decreto no violan ningún
evitar una ruptura del orden consti- precepto constitucional y por lo tanto,
tucional, es por eso, que por medios gozarán de pleno vigor, especialmen-
legales se permite la reforma de la te las relativas a la convocación, inte-
carta para que la sociedad se sienta gración y organización de una Asam-
complacida. Es necesario precisar que blea Nacional Constituyente. En el
hay tres elementos que configuran un caso objeto de análisis y estudio, la
estado: El territorio o país, el pueblo Corte no puede inhibirse y declarar
que lo habita o nación y el orden jurí- inexequible la norma, por no hallarse
dico que lo organiza. En este orden de frente a una demanda de inconstitu-

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cionalidad, sino de la revisión oficio- da de República Dominicana, el robo


sa o forzosa de un decreto expedido de la espada de Bolívar y de las ar-
en desarrollo del estado de sitio. Por mas del Cantón Norte en Usaquén, la
otra parte, el plurimencionado decre- muerte de su máximo jefe en combate
to no está reformando la constitución, en Cali, el asesinato de José Raquel
sino que la reforma va a resultar de Mercado, la toma sangrienta del Pa-
las votaciones del 9 de diciembre de lacio de Justicia y el secuestro de Ál-
1990 cuando el constituyente prima- varo Gómez Hurtado decidió dejar las
rio, es decir, el pueblo se manifieste armas y regresar a la vida civil, pero
abiertamente en las urnas y forme la en un marco más justo y equitativo.
Asamblea Nacional Constituyente, De ahí, que como ya se ha dicho an-
corporación que será la encargada de tes, condicionara su desmovilización
efectuar la reforma constitucional a la a la realización de una Asamblea Na-
que se refiere la sentencia 59 de mayo cional Constituyente que le permitie-
24 de 1990. ra reformar la vetusta constitución y
oxigenar el rumbo democrático de la
Según se desprende del análisis efec- nación.
tuado al documento objeto de estudio,
la determinación tomada –por decirlo De modo que la declaratoria de exe-
de alguna forma– obedeció al contex- quibilidad del decreto 1926 de 1990
to de la época. Colombia siempre ha se debió más que todo a razones de
sido un país sitiado por la violencia índole política, pues el país ansiaba
que tiñe su suelo con el rojo de la san- de corazón poner fin al derramamien-
gre de muchos inocentes. Ello debido to de sangre para transitar por sende-
a la inequidad social y a los galopan- ros de paz, sana convivencia, y sobre
tes problemas en materia de salud, todo, libertad. La Corte –saliéndose
educación, vivienda, agua potable y de sus esferas– tal vez, por eso, legisló
trabajo. Estos elementos, y la secula- a favor del clamor popular y desbordó
rización de la guerra entre liberales y su cauce constitucional hasta parir el
conservadores, recrudecieron el con- engendro que al final parió.
flicto, el que al compás de los años
echó cada vez más raigambre y se Sin embargo, el engendro no salió del
agudizó. Surgió la guerrilla marxista todo malo, pues se cambió la cente-
de las FARC, que desbordó sus idea- naria constitución de 1886 y con ella
les y se convirtió en un grupo peligro- nacieron a la vida jurídica nuevas ins-
so que secuestraba, mataba y traficaba tituciones como la Fiscalía General de
con el lucrativo negocio de la droga. la Nación y la Corte Constitucional, y
En todo este marco, nació el grupo se pasó de una democracia represen-
guerrillero M-19, el que después de tativa a una democracia participativa,
casi dos décadas de lucha armada, y la que al menos en su espíritu preser-
de protagonizar la toma de la Embaja- vaba el nuevo Estado Social de De-

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recho en medio de tantos desafueros El 9 de diciembre de 1990, con una


que a diario se cometen en un país abstención del 70%, se realizaron
ensombrecido por los constantes ca- las elecciones para la escogencia de
sos de aberrante corrupción. Además miembros con destino a la Asamblea
el mecanismo de la tutela sirvió de Nacional Constituyente, que final-
instrumento ágil y sumario para pro- mente se instaló el 5 de febrero de
teger los derechos fundamentales de 1991. El rechazo a la corrupción, el
las personas cuando se amenacen o hastío por la violencia secular y el
resulten vulnerados. narcoterrorismo fueron los detonan-
tes que desembocaron al final en una
El 8 de marzo de 1990, el Movimien- nueva constitución política para la
to Revolucionario M-19, en cabeza de República de Colombia. Una suma de
su comandante Carlos Pizarro León- voluntades, razas, diferentes criterios
Gómez, hizo entrega de las armas y y tendencias políticas dieron como
se incorporó a la vida civil, luego de resultado una constitución donde se
un breve proceso de negociación que pasa de un Estado de Derecho a un
se había iniciado en diciembre del Estado Social de Derecho (artículo
año anterior. Uno de sus principales 1°) , es decir, donde se protege a las
requisitos para firmar el armisticio era clases menos favorecidas sin perjui-
la creación de una Asamblea Nacio- cio de que las autoridades públicas
nal Constituyente para modificar la estén sometidas al imperio de la ley.
constitución, la que, a su juicio, no le En el mismo artículo 1° se pregona el
daba espacio ni representación a las tránsito de una democracia represen-
diversas minorías del país, ni permi- tativa a una democracia participativa
tía la creación y desarrollo de nuevos con “prevalencia del interés gene-
partidos. Entonces, se convirtió en el ral”.
grupo político Alianza Democrática
M-19. Pero, ¿qué es una democracia par-
ticipativa? Algunos especialistas en
A la par, el gobierno del presidente la materia han esbozado conceptos
Barco negaba la realización de una o aproximaciones en relación a este
consulta popular en las elecciones tema. Igor Ahedo Gurrutxaga y Pedro
del 11 de marzo de 1990. Ante esto, Ibarra Güell, en su obra Democracia
se generó un Movimiento Estudiantil participativa y desarrollo humano,
en todo el país, especialmente de las se refieren a la necesidad de que los
universidades públicas, para que la ciudadanos participen más en sus pro-
población tuviera la oportunidad de pias organizaciones o en los espacios
incluir una “Séptima Papeleta”, que le públicos a la hora de formular sus de-
ordenara al ejecutivo la conformación mandas a las instituciones políticas.
de una Asamblea Nacional Constitu-
yente. Wikipedia define a la democracia par-

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ticipativa como un modelo político democracia participativa es el mode-


que facilita a los ciudadanos su capa- lo democrático con el cual todos los
cidad de asociarse y organizarse de ciudadanos intentan justificar su lugar
tal modo que puedan ejercer una in- en el sistema como sujetos políticos,
fluencia directa en las decisiones pú- eliminando de este modo la exclusión
blicas. En la actualidad se manifiesta del ámbito político a las personas que
usualmente por medio de referendos o no ostentan ninguna representación
plebiscitos que los representantes ela- política. Dice que, 20 años después,
boran como iniciativas de consulta, la esperanza comienza a volverse te-
que luego los ciudadanos presentan a nue, porque los ciudadanos continúan
los representantes. excluidos de los procesos políticos
persistiendo el gobierno de las élites
Juan Fernando Londoño en su libro políticas.
Control social y democracia (Fescol,
1997) manifiesta que la democracia Por su parte, la Sentencia C-585/95
participativa… sería un proceso cre- reza que el principio de participación
ciente de devolución a los ciudadanos democrática expresa no solo un sis-
de su capacidad de tomar decisiones tema de toma de decisiones, sino un
por cuenta propia y no por interpuesta modelo de comportamiento social y
persona. político, fundamentado en los princi-
pios del pluralismo, la tolerancia. El
La Sentencia C-336/94 dice que el concepto de democracia participativa
principio constitucional de la demo- no comprende simplemente la consa-
cracia participativa tiene operancia no gración de mecanismos para que los
solo en el campo de lo estrictamente ciudadanos tomen decisiones en refe-
político (electoral), sino también en lo rendos, consultas populares, revoca-
económico, administrativo, cultural, ción del mandato de quienes han sido
social, educativo, sindical o gremial elegidos, sino que implica adicional-
del país, y en algunos aspectos de la mente que el ciudadano puede partici-
vida privada de las personas; y su ob- par permanentemente en los procesos
jetivo primordial es el de posibilitar y decisorios que incidirán significati-
estimular la intervención de los ciuda- vamente en el rumbo de su vida. Se
danos en actividades relacionadas con busca así fortalecer los canales de re-
la gestión pública y en todos aquellos presentación, democratizarlos y pro-
procesos decisorios incidentes en la mover un pluralismo más equilibrado
vida y en la orientación del estado y y menos desigual.
de la sociedad civil.
El sociólogo barranquillero Orlando
Para Alejandro Guzmán Rendón en Fals Borda, constituyente de 1991,
Democracia participativa en Colom- en el ensayo titulado La democracia
bia: un sueño veinte años después, la participativa como eje constitucional

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dice que la Constitución de 1991 se políticos y regionales de la Asamblea


distingue de las otras de América La- Nacional Constituyente, cuya crea-
tina y del tercer mundo, como pionera ción fue finalmente la constitución de
en la búsqueda estratégica de un nue- 1991, el día 4 de julio.
vo tipo de sociedad, debido a la ideo-
logía de la participación democrática La democracia debe partir necesa-
de diferentes fuerzas políticas, socia- riamente de los ideales de libertad,
les y regionales. Y ello se reflejó en el igualdad y diversidad en todas sus
artículo 103, donde se establecen las formas, para estar a tono con los retos
“formas de participación del pueblo políticos, económicos y sociales que
en ejercicio de su soberanía”, lo mis- el mundo globalizado impone. De ahí
mo que el estímulo a la sociedad civil, que sea menester construir, para que
para el ejercicio de “participación, haya una verdadera democracia parti-
concertación, control y vigilancia de cipativa, sujetos dotados de una plena
la gestión pública”. De igual modo, conciencia ciudadana y con enormes
se garantizó el derecho a la fundación deseos de materializarla con su puesta
de nuevos partidos, movimientos po- en práctica. Pero los ciudadanos so-
líticos y organizaciones sociales. Se- beranos, capaces de orientar las de-
gún Fals Borda, el estado colombia- cisiones del quehacer diario, tienen
no, teniendo en cuenta la inclusión del pocas posibilidades de llevar a cabo
concepto de democracia participativa sus empresas en una sociedad política
en la constitución de 1991, es hoy en absorbente, capitalista y hasta egoísta.
día un ente descentralizado, más cer- Es poco o casi nada –por decirlo así–
cano al pueblo, donde este debe ejer- lo que pueden hacer ante el aparato
cer vigilancia y control sobre la ges- avasallador del estado.
tión gubernamental a todo nivel, para
castigar, revocar mandatos y estimu- Solo existe una igualdad retórica ante
lar la eficiencia y la honestidad. la ley, pero no en la realidad material,
como dijo El Tribuno del Pueblo Jor-
Pero una cosa es el texto y otra bien ge Eliécer Gaitán, un humanista de
diferente su concordancia con la reali- corte socialista, que defendía al hom-
dad. Es menester preguntarse si algu- bre por encima de todo, y quien partía
nos aspectos más trascendentales de de la realidad concreta de las cosas y
la vida política e institucional colom- no de los sueños ni de las quiméricas
biana de los últimos 20 años se le han especulaciones. Manifestaba que la
consultado al conglomerado que lo política “es la más noble de las expre-
conforma. La respuesta es no. Enton- siones de los hombres que viven en
ces, por qué lo de democracia partici- sociedad” y hacía una diferenciación
pativa. O tal vez, se denominó así a un entre el país político y el país nacio-
simple sofisma que complacía la he- nal. Concebía al país político como
terogeneidad de voces, etnias, grupos el conformado por politiqueros con

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fines clientelistas, inmediatos y elec- dos en la miseria, el atraso y el aban-


toreros, alejados en total forma de los dono, producto de la falta de ideales y
problemas que aquejan a la comuni- de iguales oportunidades en la esfera
dad. El país político o la oligarquía del Derecho. La gente con dinero es
eran la misma cosa, pues esta “es la la que tiene capacidad de decisión en
administración monopolizada por una todos los campos.
minoría en beneficio de sus propios
intereses y con la finalidad de su pro- Gaitán tenía como primordial obliga-
pia conservación de mando”. Al país ción “derrotar al país político porque
nacional lo concebía como el repre- devora nuestros poblados, los hunde,
sentado por una política en grande, los succiona y desata el sectarismo”.
encaminada a resolver de fondo los El anhelo de El Tribuno del Pueblo era
problemas sociales con “hombres de llegar al poder mediante el instrumen-
inteligencia, que no marchen, que no to del voto popular, establecido en la
se dobleguen” al envilecimiento mo- constitución nacional y en la ley, para
ral y la degradante corrupción. Este emprender una verdadera reforma de
país piensa en “su trabajo, en su salud, fondo de los más sentidos problemas
en su cultura”. Pues bien, las minorías y necesidades del pueblo colombiano,
clasistas –como dijo Gaitán– truncan maltratado y vilipendiado por la irre-
el desarrollo de las democracias y les flexiva corrupción del país político,
impiden el pleno ejercicio de sus de- que solo lo exprimía con el ánimo de
rechos, principios, conciencia, liber- satisfacer sus desmedidos apetitos de
tades y distintos tipos de diversidad. votos en épocas electorales. Después,
el pueblo, la irredenta mayoría, conti-
Por ello esbozaba que “los principios nuaba en el olvido.
jurídicos, esa complicada y noble
ciencia del Derecho, se relegan y ol- Los principios pregonados por la doc-
vidan cuando los intereses políticos lo trina liberal luego de la Revolución
requieren”. Vale más el interés mez- Francesa del siglo XVIII, como liber-
quino, el politiquero, el particular, que tad, igualdad y fraternidad los defien-
las normas establecidas como meca- de con la coraza de la objetividad. Se
nismo de equidad y justicia. “Nadie advierte el valor que les da tanto al
puede concebir la violencia como liberal como al conservador. Gaitán
camino para engendrar el Derecho” demostró no ser un agitador de masas
–decía–. El hombre de pretendidos como muchos detractores lo señala-
títulos nobiliarios o el usufructuario ron, sino un político humanista, de-
de cuantiosas riquezas, es decir, el no- fensor a ultranza de sus firmes ideas.
table continúa usando y abusando del “La oligarquía conjunta llamada libe-
poder. Demostraba que la clase rica ral o conservadora, que hace su agosto
utilizaba el poder en detrimento de los sobre la miseria y la desgracia de un
ignorados sectores populares, sumi- gran pueblo abandonado”. Para Gai-

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tán la oligarquía era la pequeña mino- facilitar la participación de todos en


ría monopolizadora de los medios y las decisiones que los afectan y en la
del poder, bien fuera liberal o conser- vida económica, política, administra-
vadora. No hacía distinción entre los tiva y cultural de la nación. Por otra
miembros de uno u otro partido, pues parte, el inciso segundo del citado ar-
ambos le hacían daño al país nacional, tículo manifiesta que las autoridades
ansioso de salud, educación, progreso están instituidas para proteger a todas
y desarrollo para sus habitantes. La las personas residentes en Colombia,
falta de estos fundamentales servicios en su vida, honra, bienes, creencias,
tornaba al pueblo misérrimo. y demás derechos y libertades, y para
asegurar el cumplimiento de los debe-
Ni durante la constitución de 1886 res sociales del estado y de los parti-
que pregonaba la democracia repre- culares.
sentativa, es decir, aquella en la que
el titular del poder político (soberano) El artículo 103 de la constitución po-
no lo ejercía por sí mismo sino por lítica de 1991 establece como meca-
medio de representantes que eran los nismos de participación del pueblo en
que desempeñaban las funciones de ejercicio de su soberanía los siguien-
soberanía, se enfrentaban a los pro- tes: el voto, el plebiscito, el referendo,
blemas públicos y ejercían los distin- la consulta popular, el cabildo abierto,
tos poderes del estado; ni en la actual, la iniciativa legislativa y la revocato-
es decir, la de 1991, que da cuenta de ria del mandato. Asimismo es parti-
la democracia participativa, se le ha daria que la ley los reglamente. Para
dado en la realidad la primacía que el el caso de las diferentes asociaciones
hombre merece, como eje central de profesionales, cívicas, sindicales, co-
la sociedad. Solo en el papel. munitarias, juveniles, benéficas o de
utilidad común no gubernamentales,
El espíritu de los constituyentes de el estado debe velar por su organiza-
1991 fue muy claro al plasmar desde ción, promoción y capacitación para
el mismo artículo 1° de la nueva cons- que constituyan mecanismos demo-
titución un Estado Social de Derecho, cráticos de representación en las di-
organizado en forma de República ferentes instancias de participación,
unitaria, descentralizada, con autono- concertación, control y vigilancia de
mía de sus entidades territoriales, de- la gestión pública que establezcan. No
mocrática, participativa y pluralista, obstante, el abogado Alejandro Guz-
fundada en el respeto de la dignidad mán Rendón se muestra en desacuer-
humana, en el trabajo y la solidari- do con el precepto constitucional, ya
dad de las personas que la integran y que los expertos constitucionalistas y
en la prevalencia del interés general. conocedores de la materia no deberían
Cabe señalar que el artículo 2 esbo- disfrazar, ni mucho menos maquillar
za como uno de los fines del estado un concepto para denominar algo con

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un término que no corresponde con la José Manuel Sabucedo, en su obra


realidad. Participación política define el tér-
mino “participación” como cual-
De igual forma el artículo 40 cons- quier tipo de acción realizada por un
titucional reza al tenor que todo ciu- individuo o grupo con la finalidad de
dadano tiene derecho a participar en incidir en otra medida en los asuntos
la conformación, ejercicio y control públicos. Y Fabio Velásquez, en Cri-
del poder político. Para hacer efectivo sis municipal y participación ciuda-
dana en Colombia, es del criterio que
este derecho puede:
la participación ciudadana puede ser
entendida como el proceso social en
1. Elegir y ser elegido.
el que distintas fuerzas sociales, en
2. Tomar parte en elecciones, plebis-
función de sus respectivos intereses
citos, referendos, consultas popu- (de clase, de género, de generación),
lares y otras formas de participa- intervienen directamente o por medio
ción democrática. de sus representantes en la marcha de
3. Constituir partidos, movimien- la vida colectiva con el fin de mante-
tos y agrupaciones políticas sin ner, reformar o transformar los siste-
limitación alguna: formar parte mas vigentes de organización social y
de ellos libremente y difundir sus política.
ideas y programas.
4. Revocar el mandato de los elegi- Gabriel Bustamante Peña, asesor jurí-
dos en los casos y en la forma que dico-político de la Corporación Viva
establecen la constitución y la ley. la Ciudadanía, en un ensayo titulado
5. Tener iniciativa en las corporacio- ¿Qué pasó con la democracia parti-
nes públicas. cipativa en Colombia?, dice que Co-
6. Interponer acciones públicas en lombia se convirtió desde la promul-
defensa de la constitución y de la gación de la constitución de 1991 en
ley. “uno de los países más democráticos
del mundo”. Y para ello desarrolló la
7. Acceder al desempeño de funcio-
ley 134 de 1994 (Mecanismos de Par-
nes y cargos públicos, salvo los
ticipación Ciudadana) que brindaba a
colombianos, por nacimiento o
los nacionales colombianos importan-
por adopción, que tengan doble
tes herramientas en el terreno jurídico
nacionalidad. La ley reglamentará para la intervención en aspectos de
esta excepción y determinará los carácter público y en la defensa de sus
casos a los cuales ha de aplicarse. derechos fundamentales.
Las autoridades garantizarán la
adecuada y efectiva participación Dice Bustamante Peña que con los
de la mujer en los niveles deciso- años apareció una serie de legislación
rios de la administración pública. especializada para promover la parti-

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cipación en diferentes campos como: ante los nuevos y mayores retos que
el juvenil (ley 375 de 1997), el ámbito le imprimió la carta del 91. Es más,
escolar (ley 115 de 1994), la agenda fluctúa entre realidades incoherentes:
de paz (ley 434 de 1998), la cultura la maravillosa realidad constitucional,
(ley 397 de 1997), la justicia (ley 294 la enredada realidad legal y la trágica
de 1996), entre otros. De este proce- realidad social.
so surgieron organismos novedosos
como los consejos de cultura, juven- Para Juan David Guevara Salamanca,
tud, los personeros estudiantiles, los en su monografía de grado La demo-
manuales de convivencia, consejos de cracia participativa como instrumento
paz, las veedurías ciudadanas, los jue- de dominación de la esfera pública.
ces de paz y los conciliadores en equi- Una mirada crítica a la realidad polí-
dad, los comités de vigilancia. Toda tica colombiana a partir de la Consti-
una serie de espacios, instituciones y tución de 1991, la democracia partici-
marcos legales dispuestos para facili- pativa se define como un modelo de
tar y promover la inclusión ciudadana ordenamiento social y político basado
y la cohesión social en la elaboración, en un imaginario, cuyos elementos
ejecución y control de las políticas centrales son el pluralismo, la tole-
públicas. rancia, el respeto por la diferencia, el
amparo de los derechos y libertades y
Pero a pesar de la revolución constitu- un alto sentido de responsabilidad co-
cional y legal, en la realidad se dieron lectiva, que implica que los asociados
pocos avances para frenar los vicios del conglomerado social tengan ple-
del clientelismo, el autoritarismo, la na conciencia de participación para
exclusión social y la violencia. Al el logro de sus objetivos personales y
tiempo, los poderosos grupos econó- colectivos.
micos –Santodomingo, Ardilla Lulle,
Sarmiento Angulo, Sindicato Antio- De igual modo, Gabriel Bustaman-
queño, Carvajal, Bolívar y otros no te Peña expresa que en Colombia, al
menos importantes– auspiciaban las establecerse el Estado Social de De-
campañas presidenciales en busca de recho en la constitución de 1991, la
la apertura económica y de la priva- participación se convirtió en la he-
tización de la banca, la industria y el rramienta idónea para materializar la
comercio, con el ánimo egoísta de se- justicia, la libertad y la igualdad.
guir reduciendo al estado y adueñarse
de él. Solo si participamos de manera activa
en las decisiones, podremos superar
Nuestra democracia no se ha forta- los desafueros del régimen y velar por
lecido, dice Bustamante Peña, como el respeto de los derechos humanos y
era la intención de la Constituyente, la dignidad humana. Por consiguien-
por el contrario luce más impotente te, la participación debe ser heterogé-

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nea, es decir, que incluya las diferen- cia, lo que acentúa cada vez más el
tes fuerzas vivas de la nación a saber: problema.
grupos étnicos, culturales, políticos y
religiosos, en un marco de tolerancia, La corrupción es un añejo fenómeno
respeto, igualdad y fraternidad. empotrado en las instituciones públi-
cas y un mal sin remedio. Abel Ávila,
Uno de los fenómenos que ha dado al sociólogo colombiano, es más severo
traste con el auténtico desarrollo de la y extremista en su apreciación y dice
democracia participativa ha sido la co- sin rodeos que el profesionalismo po-
rrupción en todos los niveles. Nadie, lítico se ha convertido en la gran es-
desde las más altas esferas: Presiden- cuela donde se forman los ladrones
cia de la República, Congreso, Altas públicos. Y no es mentira, pues la
Cortes, pasando por Institutos Des- llegada a los cargos públicos, donde
centralizados, Gobernaciones, Asam- hay manejo de exorbitantes cantida-
bleas y Consejos Distritales, hasta Al- des de dinero, produce el inmediato
caldías y Concejos Municipales, ha síndrome de la rapiña. Aquellos que
escapado a esta execrable práctica. un día asumieron un cargo humildes
La corrupción es la más grande de las y con ansias de servicio, una vez sa-
plagas que acaban con el estableci- borean las deliciosas mieles del poder
miento. Es el más ignominioso factor y de épocas bonancibles, olvidan todo
generador de violencia sobre el suelo y derrochan al garete los recursos
colombiano. A raíz de los destrozos de entidades sin dolientes. Entonces
financieros a las entidades públicas, comienza la danza de la corrupción,
muchas personas padecen los rigores acompañada de la arrogancia, el me-
del hambre, desempleo y la falta de nosprecio por los demás y el enva-
vivienda. Lo mismo que enfermeda- necimiento desmesurado. O como
des, problemas de educación, des- dijo sabiamente José Ingenieros, el
igualdad social y tantas otras necesi- moralista argentino, acerca del api-
dades básicas insatisfechas. O como ñamiento de los mediocres en torno
dice Ricardo Guardiola Barrios: “La de los manteles oficiales para alcan-
corrupción es un estorbo para cual- zar alguna migaja de la merienda. Es
quier tipo de sociedad”. Es en el pe- lo que este insigne escritor consideró
renne contubernio político de los par- en llamar el clima de la mediocridad,
tidos tradicionales y de los nuevos, pues nadie quiere ser excluido de la
donde ha estribado en gran parte el suculenta cena donde se reparten por
problema de la corrupción, debido a tajadas, jugosos contratos y el más ex-
los errátiles y grises manejos dados a quisito ágape dinerario.
las instituciones públicas. Asimismo,
el caracterizado sectarismo secular El cultivo de la mente es mirado con
–liberal o conservador– ha propiciado desdén y mandado al escondrijo más
odios, rencores e inestabilidad entre apartado. Solo se tienen en cuenta los
los miembros de una u otra militan- pobres conceptos de los lisonjeros

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de turno que galopan con sus voces, lo ha puesto en el camino de empresas


faltas de total sindéresis, en el hipó- detestables en contra de sus semejan-
dromo de la mentira. En los gobier- tes y su propia familia. De ahí que la
nos mediocres pululan mendigos bu- disputa de un territorio, la supremacía
rócratas y con facilidad se ve desfilar por el mercado de las drogas, la reba-
en los cargos a funcionarios torpes y tiña por los tronos en las antiguas mo-
con escasa formación académica. El narquías y las ansias de figuración en
más exacto retrato del político me- la vida política actual han propiciado
diocre lo pintó con palabras José In- ambientes de pánico, zozobra, terror,
genieros. Los políticos sin vergüenza desconcierto, caos y desesperanza, en
han existido en toda época y en todos unos y otros casos.
los regímenes. El mejor clima para su
reproducción lo hallan fácilmente en En El príncipe de Maquiavelo se des-
los pueblos sin ideales. Allí muchas criben sanguinarios hechos siempre
cualidades se confunden: el ignoran- en pos de llegar al trono. Por eso, hay
te cree saber más que el estudioso; se personas que se valen de actos viles y
le llama distinción al amaricamiento; de una vía malvada y detestable como
cultura a la timidez y tolerancia a la son los casos de Agatocles, quien se
complicidad. A los políticos medio- hace amo y señor del trono de Sira-
cres solo les interesan las riquezas cusa luego de matar a todos los sena-
materiales que puedan arrebatarle dores y ricos ciudadanos reunidos en
al pueblo. Poca atención prestan al una asamblea; y de Oliverot, que hizo
enriquecimiento intelectual, porque degollar a su tío Juan Fogliani para
creen tener todo lo que la vida puede quedarse con el cetro de Fermo.
proporcionarles para alcanzar la feli-
cidad. Siempre viven haciendo daño Quien no padece las necesidades ni
con su mentalidad huidiza, ignorante las experimenta, jamás podrá pronun-
y promesera. Usurpan del pueblo la fe ciarse sobre ellas, ni mucho menos in-
y la confianza que este les depositó al tentará buscarles soluciones. “Quien
asumir posiciones maniqueístas, pues posee una inteligencia mediocre –dijo
un día están con Dios y otro con el José Luis González Álvarez– en vano
diablo. soñará con las posibilidades de inven-
ción propias del genio”, por la senci-
De las páginas de la historia, a me- lla razón de que su escasa capacidad
nudo, leemos que el hombre en lugar intelectual no se lo va a permitir. Los
de cambiar las instituciones, moder- políticos mediocres son autoritarios
nizarlas y ponerlas al servicio de sus y con frecuencia apelan a la mentira
semejantes, se dedica a utilizarlas con para aferrarse al trono, rodeados de
fines personalistas y familiares. Des- aduladores.
de tiempos remotos, en su afán de so-
brevivir, ha defendido sus intereses a El hombre, que hipoteca su concien-
ultranza. La sed por las cosas terrenas cia por el favor inmediato de un cargo,

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amarra al tronco del silencio cómpli- democracia participativa se basa en


ce su dignidad y la buena estimación la libertad del individuo para decidir
de sus conciudadanos. “Todo hombre sin engaños y coacciones a las con-
declina su personalidad al convertir- sideraciones para pronunciarse; en el
se en funcionario: no lleva visible la debido proceso y la legitimidad de los
cadena al pie, como el esclavo, pero procedimientos y decisiones que vin-
la arrastra amarrada en su destino”, culan a toda la sociedad y al estado”.
dijo Ingenieros. No obstante, el hom-
Un documento de La planeación en
bre, si se lo propone, puede romper
Colombia, editado por la Universidad
los incómodos eslabones que lo man-
Nacional, dice que el eje central de
tienen atado para alcanzar la libertad
la democracia participativa es la or-
y luchar por la verdadera igualdad en- ganización ciudadana, es decir, la ca-
tre sus semejantes. Solo así alcanzará pacidad que tenga la ciudadanía para
la tan esquiva felicidad. juntarse y organizarse de acuerdo con
sus intereses o aspiraciones. En ese
Los anteriores ingredientes han sazo- orden de ideas, la democracia de par-
nado de manera irregular nuestra de- ticipación supera la toma de decisión
mocracia y le han dado un mal sabor. y la delegación por el voto y reempla-
Quizás, por ello, el constituyente pri- za las actuaciones individuales por la
mario no ha tenido la oportunidad de acción colectiva en torno a intereses
participar de manera activa en la toma del mismo tipo.
de decisiones de aspectos preponde-
rantes para el bienestar de la nación. De ahí que, según Bustamante Peña,
la democracia participativa deba salir-
No obstante, Bárbara González, ase- se de las leyes y poblar las calles, las
sora jurídico-política de la Corpora- aulas escolares, las universidades, los
ción Viva la Ciudadanía, es más op- barrios y comunas, los municipios,
departamentos y el país, para per-
timista en sus apreciaciones en torno
mitir la participación de todos en las
a la democracia participativa. Ella
decisiones sobre asuntos regionales
asegura en un importante ensayo titu- o globales, como la firma de tratados
lado Por la vigencia de la democracia de libre comercio, o la suscripción de
participativa que consagra la constitu- tratados internacionales de protección
ción de 1991 que hubo un cambio sus- del medioambiente, la lucha mundial
tancial pues se pasó de una democra- antidrogas o el combate al terrorismo.
cia representativa a una participativa, Sin embargo, nada de lo anterior se ha
lo que implicó que los mecanismos de consultado al pueblo.
participación ciudadana se introduje-
ran en la nueva constitución, para así De otro lado, en el tema de la plura-
estimular a los asociados del estable- lidad, la constitución le dio espacio a
cimiento a participar durante los pro- sectores que antes no eran tan visibles
cesos democráticos. Expresa que “la en el panorama nacional. Son agentes

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sociales y políticos que se institucio- realización de la revocatoria como tal,


nalizan. Están ahí los indígenas, un frenan las voluntades y las ansias que
poco menos las negritudes, y sobre se tengan.
todo la izquierda ilegal urbana, que
entra con los acuerdos de paz al siste- De tal forma que como no hay incen-
ma político, dice Jorge Giraldo Ramí- tivos de por medio, la gente no sale
rez, decano de la Escuela de Ciencias a votar y por consiguiente las firmes
y Humanidades de EAFIT. intenciones de los protagonistas ter-
minan diluyéndose en el marisma de
Así como ha pasado mucha agua de- la nada. Todo, sencillamente, por un
bajo de los puentes, también se ha problema de tipo cultural de los na-
escrito bastante acerca de democracia cionales colombianos acostumbrados
participativa. Hay posturas conver- a la práctica proclive de la compra y
gentes, y por otro lado, divergentes venta del voto cual mercancía subas-
en el sentido de que el ensayo –si así tada.
se puede denominar– de incluirla y
en la constitución política de 1991, Lo anterior, en mecanismos donde el
con vida propia en los artículos 40 y pueblo puede tomar sus propias deci-
103, y luego desarrollarla con todo siones para su propio bien. Por otra
un marco legal, no ha resultado del parte, si nos referimos a otros asun-
todo beneficioso para los sectores lla- tos como tratados de libre comercio,
mados a hacer uso de ella, y esto se firma de tratados internacionales para
debe, tal vez, a un problema de tipo la protección del medioambiente, o la
cultural. Las elecciones populares en lucha mundial antidrogas o el comba-
Colombia escasamente llegan al 50% te al terrorismo, jamás se le ha con-
de participación de la población apta sultado al pueblo para ver si está de
para votar en los censos. Esto cuan- acuerdo o no, pues es este, en la ma-
do existen prebendas de por medio, yoría de los casos, el más perjudicado
y las diferentes prácticas clientelistas con las impositivas medidas guberna-
de los gamonales de turno. Sin em- mentales.
bargo, en el caso de la revocatoria de
un mandato popular, –a un alcalde en De modo que la democracia partici-
la mayoría de los casos– por citar un pativa ha sido, hasta ahora, solo lite-
ejemplo de los varios mecanismos, ratura constitucional, puesto que en el
la comunidad que es la directamen- terreno de la práctica no se la ha visto.
te más afectada debería volcarse a Esperemos que en venideros tiempos
las urnas para cumplir con la norma se materialice con hechos claros y
constitucional. Pero, no solo no lo contundentes para el bien de nuestra
hace, sino que ayuda a que no se dé, sufrida nación.
a que no fructifique la medida, como
el caso de los copartidarios políticos. Asimismo, esperamos dejar abierto el
Además hay que agregar el sinnúme- debate en torno a este tema que ape-
ro de pasos previos, conducentes a la nas, a nuestro juicio, comienza.

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