La calidad no es un fin en sí misma, va más allá de ser la herramienta, técnica
o modelo a la que se recurre para satisfacer las expectativas del cliente. La calidad es una estrategia para la competitividad, la mejora continua y el camino a la excelencia que nunca termina siendo así la gestión de la calidad no finaliza en la certificación, las organizaciones además son alentadas a través de incentivos como lo son los Premios de Calidad.
Estos premios tienen referencia en distintos escenarios; El primero de estos es
El Premio Deming fundamentado en las características de los procesos claves de calidad, originalmente japoneses. Este fue creado en 1951 por la JUSE (Japanese Union of Scientists and Engineers) en honor a W. Deming como promotor del control estadístico de calidad. Entre tanto el panorama Norteamericano ante la preocupación de la baja productividad y competitividad, planificó incentivos para estimular la calidad, como resultado surgió el Premio Malcom Baldrige, en el año 1987. Así mismo, en Europa iniciando los años noventa nace el Premio Europeo a la Calidad creado por la Organización Europea para la Calidad, Fundación Europea para la Calidad y la Comisión Europea. Este premio surgió con la necesidad de mejorar los resultados a través de las personas y procesos, al igual que el Premio Iberoamericano de la Calidad, creado en el año 1999 1. En el caso Colombiano, en busca de que las organizaciones construyan un modelo de gestión que sirva como referencia para lograr la excelencia, para lo cual en el año 2001, se instituyó formalmente El Premio Colombiano a la Calidad
De lo anterior podría determinarse la aplicabilidad geográfica principal de cada
premio así: El premio Deming, en Japón; El Premio Baldrige, dirigido a EEUU; el Premio Europeo de Calidad a Europa, y tanto El Premio Iberoamericano como el Colombiano aplicados para las respectivas regiones.
En cuanto al enfoque, el Premio Deming se centra en el control estadístico,
resolución de problemas y perfeccionamiento, que establece tres 2 modalidades : a personas, aplicaciones concretas y a empresas sean públicas y privadas. El Baldrige en el liderazgo, la mejora, el aporte a la organización y evaluación, exclusivamente para empresas Estadounidenses Privadas. El premio Europeo basado en procesos, resultados y Benchmarking. En tanto el Iberoamericano se orienta al liderazgo, los clientes y resultados, mientras el Premio Colombiano a la Calidad asegura las bases para promover la 1 NIETO, Carmen; MCDONELL, Lorenzo. Comparación entre los modelos de Gestión de Calidad Total: EFQM, Gerencial de Deming, Iberoamericano para la Excelencia y Malcolm Baldrige, situación frente a la ISO 9000. X Congreso de Ingeniería de Organización. España. 2006. 2 BENAVIDES, Carlos; QUINTANA, Cristina. Gestión del Conocimiento y Calidad Total. Editorial Díaz De Santos. España 2003. competitividad, situando al premio como herramienta de partida para que mas organizaciones se beneficien. Estos dos últimos premios van dirigidos a todo tipo de organización. A partir de esto se puede decir que El premio Deming presenta condiciones con diferencias considerables debido a su carácter técnico, mientras los cuatro premios restantes consideran el nivel de liderazgo y desarrollo organizacional, como base para su otorgamiento.
Frente a las necesidades de la región, El Premio Iberoamericano por su
carácter global, permite integrar modelos de gestión encaminados a consolidar la posición competitiva internacional además de promover criterios indispensables para perfeccionar los sistemas de gestión en las empresas regionales. En el panorama nariñense, han sido las exigencias y requisitos del estado los que incitan la implementación de sistemas de calidad y la certificación, situación que a través del premio nacional no ha logrado mejorías significativas sobre todo para que las empresas aspiren a la excelencia más allá de la certificación. A partir de esto se podría considerar como un estimulo importante la experiencia de otros países, sobre todo porque al compartir un mismo referente de gestión es posible establecer relaciones internacionales más amplias y con mejores resultados.
La gestión de calidad en Nariño se ha visto afectada a causa de una cultura
poco desarrollada en términos de cómo se percibe la calidad, por lo que el papel del liderazgo debe orientarse a hacer de la calidad una forma de vida para las organizaciones, que facilite el logro de los objetivos además de que revalorice el potencial del talento humano como pilar de la competitividad empresarial.
En la región son pocas las organizaciones que realizan planeación estratégica,
provocando que los esfuerzos se dispersen de la visión. De manera que se hace necesario por parte de las empresas estructurar este proceso integrando a los grupos de interés como parte fundamental de la gestión de calidad y así mismo asegurar la planificación de los recursos para cada campo de acción.
Estos agentes facilitadores, como se los considera en el premio iberoamericano
permitirán que las organizaciones que implementen los Sistemas de Gestión de calidad logren además de satisfacer las expectativas y requisitos del cliente, resultados para la organización y la comunidad. Y adicionalmente tendrán reconocimiento al interior y exterior de país, como modelo exitoso de gestión de calidad para la excelencia.