Mecánica de Rocas Correlación Entre La

Copyright © 2015. Programa Editorial Universidad del Valle. All rights reserved.
Galván, Ceballos, Manolo. <i>Mecánica de rocas: correlación entre la resistencia a carga puntual y la resistencia a compresión simple</i>, Programa Editorial Universidad del Valle,
2015. ProQuest Ebook Central, http://ebookcentral.proquest.com/lib/upnortesp/detail.action?docID=4760824.
Created from upnortesp on 2019-05-20 19:46:23.
Galván Ceballos, Manolo
Mecánica de rocas : correlación entre la resistencia a carga
puntual y la resistencia a compresión simple / Manolo A.
Galván Ceballos.-- Cali : Programa Editorial Universidad del Valle,2015
208 Páginas ; 28 cm. -- (Ciencias Naturales y Exactas)
Incluye índice de contenido
1.Mecánica de suelos 2.Mecánica de rocas 3. Rocas -
Estructuras 4.Cimentaciones i. Tít. Ii. Serie.
624 .1513 Cd 21 ed.
A1479159
CEP-Banco de la República-Biblioteca Luis Ángel Arango
Universidad del Valle

Programa Editorial
Título: Mecánica de Rocas. Correlación entre la Resistencia a

Carga Puntual y la Resistencia a Comprensión Simple
Autores: Manolo Adolfo Galván Ceballos
ISBN: 978-958-765-143-0
Colección: Ciencias Naturales y Exactas
Primera edición
Rector de la Universidad del Valle: Iván Enrique Ramos Calderón

Vicerrectora de Investigaciones: Ángela María Franco Calderón
Director del Programa Editorial: Francisco Ramírez Potes
© Universidad del Valle

© Manolo Adolfo Galván Ceballos
Diseño de carátula y diagramación: Hugo H. Ordóñez Nievas

Impreso en: Artes Gráficas del Valle S.A.S.
Universidad del Valle

Ciudad Universitaria, Meléndez
A.A. 025360
Cali, Colombia
Teléfonos: 57(2) 321 2227-Telefax: 57(2) 330 8877
programa.editorial@correounivalle.edu.co
Este libro, o parte de él, no puede ser reproducido por ningún

medio sin autorización escrita de la Universidad del Valle.
El contenido de esta obra corresponde al derecho de expresión

del autor y no compromete el pensamiento institucional de la
Universidad del Valle, ni genera responsabilidad frente a terceros.
El autor es el responsable del respeto a los derechos de autor y del
material contenido en la publicación (fotografías, ilustraciones,
tablas, etc.), razón por la cual la Universidad no puede asumir
ninguna responsabilidad en caso de omisiones o errores.
Cali, Colombia, marzo de 2015
visita nuestra pagina para más libros y cursos de mineria y exploración
mineriadelibrosycursos.blogspot.com
PRÓLOGO
La resistencia a compresión uniaxial, o Re- misma y ese proceso o método de determina-

sistencia a Compresión Simple, es uno de los ción, entre otras cosas, provoca una variabilidad
parámetros ingenieriles más preponderantes en manifiesta en su magnitud.
la Mecánica de Rocas, y por tanto lo es su deter- De ese modo, lo que se denomina “Resistencia
minación. a Compresión Simple” es un convencionalismo,
Es un parámetro que sirve para disponer de que se corresponde al valor que se obtiene
un criterio no lineal de resistencia de la matriz sometiendo una probeta de roca a un ensayo
rocosa, más adecuado que el criterio lineal de de compresión uniaxial, con unas condiciones,
Mohr-Coulomb basado en los parámetros de tanto del procedimiento de ensayo como de
cohesión y ángulo de rozamiento, conceptos las características de la probeta, fijadas en las
que para el caso de la matriz rocosa, al menos, normativas de ensayo.
“chirrían”. Pero ocurre que no siempre es posible deter-
Igualmente es imprescindible para los criterios minar ese valor correspondiente al resultado del
de rotura del macizo rocoso y, en concreto, para ensayo normalizado, bien porque el esfuerzo y
el criterio de Hoek-Brown, el más ampliamente coste de realización del ensayo no son adecua-
aceptado y utilizado en la actualidad. dos para el nivel de estimación de la RCS que se
También es necesario para la evaluación de necesita, o bien porque, sencillamente, no puede

la “calidad geomecánicas” de los macizos roco- realizarse dicho ensayo cumpliendo todos sus re-
sos de la clasificación de Bieniawski (RMR), que quisitos.
permite tener un “orden de entendimiento” del Por esa razón han proliferado los métodos
hecho natural complejo que es un macizo roco- alternativos para la determinación, con mayor
so; otro asunto, en el que no entraremos aquí, es o menor aproximación, de la RCS de la matriz
el uso inadecuado que se haga de ese “entendi- rocosa: desde la correlación con diferentes
miento” del macizo, utilizándolo como solución “propiedades no mecánicas” de la matriz, o la
del problema y no como una herramienta más de estimación con el sencillo ensayo organoléptico
diseño previo. del martillo de geólogo, hasta la correlación con
Sea como fuere, la determinación de la Resis- propiedades mecánicas obtenidas en ensayos
tencia a Compresión Simple (RCS) es necesaria menos exigentes en su realización que el de RCS.
e imprescindible, pero no resulta sencilla, pues Dentro del último grupo, tres son los ensayos
aunque entendamos y utilicemos la RCS como más utilizados para su correlación con la RCS,
una propiedad intrínseca de la matriz, lo que en que, por orden de aparición cronológica son:
realidad manejamos es una determinación de la el ensayo para la determinación de la dureza
superficial (Martillo de Schmidt), el ensayo para El presente trabajo, presentado por D. Manolo
la determinación de la resistencia a tracción Adolfo Galván Ceballos para la obtención de su
indirecta (Tracción Brasileña) y el ensayo para título de Doctor, es el inicio de una de esas líneas
la determinación de la resistencia a la Carga de investigación (ver diagrama adjunto).
Puntual (Franklin o Point-Load). Este trabajo es el punto de partida para el
El ensayo con el Martillo de Schmidt estudio del ensayo a Carga Puntual en calizas;
proporciona una estimación del rango en el dicho estudio se centra fundamentalmente en
que se encuentra la RCS y es apropiado para las la obtención del Índice de Resistencia a la Carga
primeras determinaciones in-situ de una estación Puntual, Is(50) y su correlación con la Resistencia a
geomecánica. Compresión Simple.
El ensayo Brasileño proporciona un valor La obtención del Is(50) puede realizarse, según
de la resistencia a tracción aceptable, pero su las diversas normativas, de dos modos diferentes.
correlación con la RCS está lejos de ser aceptable Para el primer método, que es el más aconsejable,
más allá de la mera orientación. debe disponerse de varias determinaciones para
El ensayo a Carga Puntual fue definido por cada una de las cuales se habrá obtenido una
Reichmuth (1968) y estandarizado por Broch y carga de rotura P para un diámetro equivalente
Franklin (1972), resultando un ensayo sencillo de la muestra De; representando en una gráfica
y poco exigente en la ejecución, planteándose doblemente logarítmica los puntos (P;De), se
pronto la correlación entre el índice de Resis- obtiene, ignorando los puntos no alineados,
tencia a la Carga Puntual Is(50) (normalizado para una recta que proporciona el valor de rotura P50
probetas cilíndricas a carga diametral de 50 mm correspondiente a
de diámetro) y la Resistencia a Compresión Sim- Una muestra de 50 mm de diámetro (De = 50
ple σc., del tipo σc = β.Is(50) mm), siendo el índice de resistencia a la Carga
Bieniawski (1974) propuso el valor de β = 24 y Puntual Is(50) = P50 / (De)2.
posteriormente Brook (1985) el de β = 22. Estos Como habitualmente no se dispone de
valores han sido, y son, ampliamente utilizados suficientes determinaciones para poder construir
para todo tipo de rocas, aunque se ha comprobado la curva P–De con garantías; la norma propone
que varían entre 6 (o menos) y 30 (o más), según calcular el índice Is = P / (De)2, y multiplicarlo
el tipo de roca. por el denominado “factor de corrección por
Bieniawski, en principio, propuso utilizar tamaño” F = (De / 50)0,45.
su correlación para la valoración de la RCS Pues bien, con el presente trabajo, que inicia
en su clasificación, pero posteriormente lo una base de datos para el estudio de la resistencia
desaconsejo, debido a la variabilidad que podía de las calizas de la Comunidad Valenciana ob-
tener el coeficiente β. tenida por diferentes métodos, se va a determi-
El Grupo de Investigación de Mecánica de nar la mejor equivalencia entre los dos métodos
Rocas, del Departamento de Ingeniería del Terreno de obtención del índice de resistencia a la Carga
de la UPV, tiene abiertas líneas de investigación Puntual Is(50). Igualmente se comienza el estudio
sobre la Resistencia a Compresión Simple de la de la expresión del factor de corrección por ta-
matriz rocosa, centradas fundamentalmente maño (Serón, 2008) más adecuado para las cali-
en los métodos para su determinación y en las zas por el segundo método.
calizas de la Comunidad Valenciana.
8
Definición, características,
parámetros de los que depende, ...
Relación con otras propiedades índice

RCS (excepto indices de resistencia)
de la matriz
rocosa
Métodos para la estimación y/o determinación

Estimación...
Martillo de geólogo
Martillo de Schmidt
tipos L y N
Utilización de “equotipos”
Métodos esclerométricos
Introducción al estudio:
determinación y correlación RCS
Ensayo de Tracción Brasileña
Introducción al estudio:
Correlación...
determinación y correlación RCS
Ensayo de Carga Puntual
Efectos del refrentado
Medición Ensayo de Compresión Uniaxial

directa
Tomado de: Serón, J.B. 2007
9
CONTENIDO
Capítulo 1 Ensayos con muestras de un talud de la carretera

de acceso a la Presa del Embalse de Loriguilla 107
INTRODUCCIÓN 17 Ensayos con muestras de la planta
de Sierra Gorda. Bellús (Xátiva) 109
Capítulo 2 Velocidad de las ondas P 116
Alterabilidad y determinación
METODOLOGÍA de las propiedades índice 116
Realización de ensayos 21 Ensayos con muestras de un talud
Organización del documento 22 en Puebla de Arenoso (Castellón) 120
Ensayos con muestras de desmontes
Capítulo 3
de la ampliación de la A-7 en puerto
de Albaida (Alicante) 122
COMPORTAMIENTO Y ENSAYOS DE LA MATRIZ ROCOSA
Comportamiento tenso-deformacional
Capítulo 5
de la matriz rocosa 23
Resistencia a Compresión
ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS OBTENIDOS
Simple de la Matriz Rocosa 26
Introducción 125
Resistencia a tracción de la Matriz Rocosa 29
Sobre la distribución de los tamaños
Resistencia a la Carga
de las muestras ensayadas 128
Puntual de la Matriz Rocosa 30
Criterios de rotura de la matriz rocosa 39 Estudio por tandas de ensayos
Métodos de ensayo para la estimación de las campañas de la CV–13 132
y/o determinación de la RCS 44 Análisis conjunto por niveles de resistencia 150
Ensayo de Resistencia a Compresión Uniaxial 50 Resumen y contraste de resultados
Ensayo de resistencia a la Carga Puntual 56 del estudio de la CV–13 175
Verificación de la relación de L/D
Capítulo 4 en el ensayo de PLT 183
Correlación entre el PLT y la RCS 187
ESTUDIO EXPERIMENTAL 61 Resumen y contraste de resultados
Estudio experimental en la carretera CV–13 62 de la correlación entre el PLT y la
Velocidad de las ondas P 76 RCS y comparativa de α con α* 190
Estudio experimental en los sondeos
para el Túnel de Cullera 81 Capítulo 6
Ensayos de resistencia a tracción brasileña 103
Ensayos con muestras de las obras RESUMEN Y APORTES 197
de duplicación de calzada en la N–332,
tramo Gandía-Xeresa 104 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 203
L i s ta d e ta b l a s
1. Valores de resistencia de la matriz rocosa sana 28 56. Resultados de los ensayos de resistencia a compresión uniaxial
2. Clasificación de las rocas a partir de su Resistencia a Compresión Simple 29 realizados con muestras del Embalse de Loriguilla 108
3. Influencia del contenido de agua 57. Resultados de los ensayos de alterabilidad y determinación de propiedades
en los resultados de resistencia a Carga Puntual-diametral 34 índice realizados con las muestras del Embalse de Loriguilla 108
4. Valores de los parámetros υ, χ, α y k para diferentes tipos de roca 38 58. Resultados de los ensayos de carga puntual diametral
5. Algunos valores para la constante mi 40 con diferentes contenidos de humedad de la cantera de Sierra Gorda 110
6. Métodos para determinar la Resistencia a Compresión simple 44 59. Resultados de los contenidos de humedad en el ensayo
7. Ejemplo de directrices para realizar el ensayo con martillo de geólogo, de carga puntual de la cantera de Sierra Gorda 111
donde se incluye también la escala para suelos para el ensayo manual 45 60. Resultados de los ensayos de Carga Puntual diametral
8. Valores estimados del coeficiente de correlación con diferentes diámetros de la cantera de Sierra Gorda 112
a aplicar en el ensayo de compresión puntual 49 61. Resultados de los contenidos de humedad en el ensayo de carga
9. Resumen de los autores más importantes que han realizado puntual de los diferentes diámetros de la cantera de Sierra Gorda 113
correlaciones de ensayo de RCS con el PLT 49 62. Resultados de los ensayos de carga puntual diametral con diferentes
10. Tolerancia de la elaboración de probetas relaciones de L/D de cuatro puntos de la Comunidad Valenciana 114
de roca para el ensayo de compresión simple 51 63. Resultados de los contenidos de humedad en el ensayo de carga
11. Factor de reducción de resistencia con la variación de peso específico 54 puntual de los cuatro puntos de la Comunidad Valenciana 115
12. Requisitos geométricos de las probetas para el ensayo de Carga Puntual 58 64. 4ª tanda de ensayos. Ensayos de resistencia a compresión unaxial 115
13. Clasificación de las rocas en función de su resistencia a Carga Puntual 59 65. 5ª tanda de ensayos. Ensayo complementarios realizados 116
14. Distribución de ensayos por ubicación en campo o laboratorio 62 66. Ensayos de medición de la velocidad de las Ondas P y S 117
15. Resumen de la 1ª campaña de ensayos con muestras de la CV–13 65 67. Ensayos de alterabilidad y determinación de propiedades índice 117
16. Resumen de la 2ª campaña de ensayos con muestras de la CV–13 67 68. Resumen de las propiedades índice de muestras 118
17. 1ª Tanda de ensayos (PLT in situ) con muestras de la CV–13. 69. Resumen de los ensayos realizados
Probetas con dimensiones normativas 69 con las muestras de la planta de Áridos de Guerola 119
18. 1ª Tanda de ensayos (PLT in situ) con muestras de la CV–13. 70. Resultados de los ensayos PLT realizados en la roca de la planta
Probetas con dimensiones fuera de normativa. 70 de Áridos de Guerola (muestras cilíndricas con carga diametral) 120
19. 2ª Tanda de ensayos (PLT en laboratorio) con muestras de la CV–13. 71. Resultados de los ensayos de resistencia a comprensión
Probetas en bloque regular, con dimensiones fuera de normativa 71 uniaxial en la roca de la planta de Áridos de Guerola 120
20. 3ª Tanda de ensayos (PLT en laboratorio) con muestras de la CV–13. 72. Resultados de los ensayos de alterabilidad y determinación de propiedades
Probetas en bloque regular, con dimensiones según normativa 72 índice realizados con las muestras de la planta de Áridos de Guerola 120
21. 4ª Tanda de ensayos (RCS en laboratorio) con muestras de la CV–13 73 73. Resumen de los ensayos realizados con las muestras
22. 4ª Tanda de ensayos (PLT en laboratorio) con muestras de la CV–13. del desprendimiento de un talud en Puebla de Arenoso 121
Probetas cilíndricas, a carga diametral, con dimensiones según normativa 74 74. Resultados de los ensayos PLT realizados en la roca del desprendimiento
23. 4ª Tanda de ensayos (PLT en laboratorio) con muestras de un talud en Puebla de Arenoso (muestras cilíndricas con carga diametral) 122
de la CV–13. Probetas sin dimensiones normativas 74 75. Resultados de los ensayos de resistencia a comprensión uniaxial
24. 5ª Tanda de ensayos (PLT en laboratorio) con muestras de la CV–13. en la roca del desprendimiento de un talúd en Puebla de Arenoso 122
Probetas en bloque regular con dimensiones normativas. 75 76. Resultados de los ensayos de alterabilidad y determinación
25. 6ª Tanda de ensayos con muestras de la CV–13. de propiedades índice realizados con las muestras
Ensayos complementarios realizados. 76 del desprendimiento de un talúd en Puebla de Arenoso 122
26. 6ª Tanda de ensayos con muestras de la CV–13. 77. Resumen de los ensayos realizados con las muestras
Ensayos de medición de la velocidad de las ondas 77 de la ampliación de la A-7 en puerto de Albaida 123
27. 6ª Tanda de ensayos con muestras de la CV–13. 78. Resultados de los ensayos PLT realizados
Ensayos de alterabilidad y determinación de propiedades índice 80 en la roca de la ampliación de la A-7 en puerto de Albaida
28. 6ª Tanda de ensayos con muestras de la CV–13. (muestras cilíndricas con carga diametral) 124
Resumen de propiedades índice de las muestras 81 79. Resultados de los ensayos de resistencia a comprensión uniaxial
29. Sondeos realizados para el estudio del Túnel de Cullera 83 en la roca de la ampliación de la A-7 en puerto de la Albaida 124
30. Resumen de los ensayos realizados con los testigos 80. Resultados de los ensayos de alterabilidad y determinación
de los sondeos para el Túnel de Cullera 84 de propiedades índice realizados con las muestras
31. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo S–1 85 de la ampliación de la A-7 en puerto de Albaida 124
32. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SE–1 86 82. Estadísticos del conjunto de tamaños de las probetas ensayadas en la
33. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SE–2 88 campaña experimental con muestras de la CV–13 129
34. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SE–4 90 81. Estadísticos del conjunto de tamaños de las probetas ensayadas
35. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SE–5 91 (considerando todas las campañas) 129
36a. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SW–1 (1 de 2) 92 83. Estadísticos del conjunto de tamaños de las probetas ensayadas
36b. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SW–1 (2 de 2) 93 en la 1ª campaña experimental con muestras de la CV–13 130
37. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SW–2a 95 84. Estadísticos del conjunto de tamaños de las probetas ensayadas
38. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SW–2b 96 en la 2ª campaña experimental con muestras de la CV–13 130
39. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SE–5 96 85. Estadísticos del conjunto de tamaños de las probetas
40. Resultados de los ensayos PLT in situ con el sondeo SW–4 98 ensayadas en la campaña con muestras de cantera de Bellús 132
41. Ensayos y determinaciones de laboratorio realizados en la 2ª campaña 86. Cálculo del Is(50) de los ensayos de la 1ª Tanda de la CV–13 133
con muestras de los sondeos para el reconocimiento del Túnel de Cullera 99 87. Cálculo del Is(50) de los ensayos de la 3ª Tanda de la CV–13 134
42. Resultados de los ensayos de la 2ª campaña de ensayos con muestras de los 88. Estudio de la correlación P–De2 de la 1ª y 3ª Tanda de la CV–13 136
sondeos de reconocimiento para el Túnel de Cullera: Ensayos de alterabilidad 89. Variación de R2, B y α con el número de puntos de ajuste
y de las determinaciones de la porosidad eficaz y el peso específico 100 (1ª y 3ª Tanda de la CV–13) 137
43. Resultados de los ensayos de la 2ª campaña de ensayos con muestras 90. Cálculo del Is(50) de los ensayos de la 4ª Tanda de la CV–13 139
de los sondeos de reconocimiento para el Túnel de Cullera: 91. Estudio de la correlación P–De2 de la 4ª Tanda de la CV–13 140
Determinación de la velocidad de las ondas P y S 101 92. Variación de R2, B y Į con el número de puntos de ajuste (4ª Tanda, CV–13) 141
44. Resultados de los ensayos de la 2ª campaña de ensayos con muestras 93. Cálculo del Is(50) de los ensayos de la 5ª Tanda de la CV–13 143
de los sondeos de reconocimiento para el Túnel de Cullera: 94. Estudio de la correlación P–De2 de la 5ª Tanda de la CV–13 144
Ensayos de resistencia a compresión uniaxial 102 95. Variación de R2, B y Į con el número de puntos de ajuste (5ª Tanda, CV–13) 147
45. Resultados de los ensayos de la 2ª campaña de ensayos 96. Resultados obtenidos con diversos ajustes generales P–De²,
con muestras de los sondeos de reconocimiento para con todas las determinaciones de la CV–13 150
el Túnel de Cullera: Ensayos de resistencia a tracción brasileña 104 97. Conjunto de todos los ensayos de resistencia
46. Ensayos realizados con las muestras del desdoblamiento de la N–332 105 a Carga Puntual, con probetas de dimensiones normativas,
47. Resultados de los ensayos PLT realizados en las obras desdoblamiento realizados con muestras de la CV–13 151
de la N–332 (muestras con dimensiones no normativas) 106 98. Conjunto de todos los ensayos de resistencia a carga puntual, con probetas
48. Desarrollo de los ensayos PLT realizados en las obras desdoblamiento de dimensiones normativas, por grupos de resistencia (CV–13) 156
de la N–332 (muestras con dimensiones normativas) 106 99. Variación de los exponentes B y α, considerando tres grupos
49. Desarrollo de los ensayos PLT realizados en las obras desdoblamiento de resistencia (CV–13) 157
de la N–332 (muestras cilíndricas con carga diametral) 106 100. Conjunto de todos los ensayos de resistencia a Carga Puntual, con probetas
50. Resultados de los ensayos de resistencia a compresión uniaxial realizados de dimensiones normativas, por subgrupos de resistencia (CV–13) 162
con muestras de las obras desdoblamiento de la N–332 106 101. Variación de los exponentes B y Į, considerando 9
51. Resultados de los ensayos de alterabilidad y determinación de propiedades subgrupos de resistencia (CV–13) 163
índice realizados con las muestras de las obras desdoblamiento de la N–332 106 102. Evolución de los coeficientes C1 y C2 con la bondad
52. Ensayos realizados con las muestras del Embalse de Loriguilla 107 de los ajustes Į*–Is(50),F, considerando subgrupos de resistencia 166
53. Resultados de los ensayos PLT en laboratorio realizados con probetas en forma de 103. Conjunto de todos los ensayos de resistencia a carga puntual, con probetas
bloque irregular del Embalse de Loriguilla (bloques con dimensiones normativas) 108 de dimensiones normativas, por intervalos de resistencia (CV–13) 169
54. Resultados de los ensayos PLT en laboratorio realizados con probetas en forma de 104. Variación de los exponentes B y α, considerando
bloque irregular del Embalse de Loriguilla (bloques sin dimensiones normativas) 108 intervalos de resistencia de 1MPa (CV–13) 170
55. Resultados de los ensayos PLT en laboratorio realizados con probetas 105. Evolución de los coeficientes C1 y C2 con la bondad de los ajustes
cilíndricas del Embalse de Loriguilla (con dimensiones normativas) 108 α*–Is(50),F, considerando intervalos de 1MPa de resistencia 174
106. Valores más probables del exponente α obtenidos con el análisis 114. Mejores aproximaciones al valor de referencia de Is(50),
por tandas de ensayos con las muestras de la CV–13 175 con distintos valores de α para las distintas litologías ensayadas 181
107. Expresiones de los ajustes lineales de α* en función del nivel de resistencia 115. Mejores aproximaciones al valor de referencia de Is(50)
obtenidos con el análisis por niveles de resistencia (Ensayos de la CV-13) 176 para grupos de submuestras de la CV–13, con distintos valores de α* 182
108. Expresiones de los ajustes bilineales de α* en función del nivel 116. Mejores aproximaciones al valor de referencia de Is(50),
de resistencia obtenidos con el análisis por intervalos con distintos valores de α* para las distintas litologías ensayadas 182
de resistencia de 1MPa (Ensayos de la CV–13) 176 117. Cálculo del Is y de la relación de L/D con muestras de la cantera de Bellús 183
109. Comparativa de los valores de la resistencia a la carga puntual 118. Cálculo del Is y de la relación de L/D con muestras de Puebla de Arenoso 185
obtenidos con la determinación de P50, con el valor de α, normativo 119. Cálculo del Is y de la relación de L/D con muestras de puerto de Albaida 186
y con los valores más probables de α, para el conjunto de muestras 120. Cálculo del Is y de la relación de L/D con muestras de la cantera de Onteniente 186
Lnº (4ª y 5ª tandas de ensayos con muestras de la CV–13) 177 121. Tabla anova, análisis de la Varianza del Is(50) 188
110. Comparativa de los valores de la resistencia a la carga puntual obtenidos con 122. Tabla anova, análisis de la varianza del σc 189
la determinación de P50, con el valor de α, normativo y con los más probables 123. Tabla contraste múltiple de rango para σc 189
de α, para los ensayos relizados con muestras de Xeresa y Loriguilla 178 124. Correlación para el subgrupo 1 189
111. Comparativa de los valores de la resistencia a la carga puntual 125. Correlación para el subgrupo 2 190
obtenidos con la determinación de P50, con el valor de α normativo 126. Correlación para el subgrupo 3 190
y con los valores más probables de α* obtenidos con los ajustes lineal 127. Correlación para el subgrupo 4 190
y bilineal adoptados como más significativos para el conjunto de todas 128. Resumen de las correlaciones 191
las muestras Lnº (4ª y 5ª tandas de ensayos con muestras de la CV–13) 179 129a. Comparativas de los valores de la Is(50) obtenidos con el valor
112. Comparativa de los valores de la resistencia a la carga puntual obtenidos de α normativo y con los valores α*, para las muestras de la CV–13 191
con la determinación de P50, con el valor de α normativo y con los valores de α* 129b. Comparativas de los valores de la Is(50) obtenidos con el valor
obtenidos con los ajustes lineal y bilineal adoptados como más significativos, de α normativo y con los valores α*, para las muestras de Cullera 193
para los ensayos relizados con muestras de Xeresa y Loriguilla 180 129c. Comparativas de los valores de la Is(50) obtenidos con el valor
113. Mejores aproximaciones al valor de referencia de Is(50) de α normativo y con los valores α*, para las muestras de N–332, Loriguilla,
para grupos de submuestras de la CV–13, con distintos valores de α 181 Bellús, Onteniente, Puebla de Arenoso y puerto de Albaida 194
L i s ta d e f i g u r a s
1. Curva de tensión contra deformación 24 52. Equipo para lamedición de la velocidad de ondas en muestras de la CV–13 76
2. Fracturación: a) nucleación de una grieta. b) crecimiento de una grieta 26 53. Ensayo de inmesisón dinámica con una muestra de la CV–13 78
3. Esquemas de deslizamiento cristalino 26 54. Ensayos de inmersión estática con muestras de la CV–13 78
4. Compresión simple 26 55. Peso de las muestras secas y saturadas con la superficie seca (izquierda)
5. Criterio lineal de rotura de Mohr-Coulomb 27 y saturadas en balanza hidrostática (derecha) de muestras de la CV–13 79
6. Variación de la resistencia a compresión en función del ángulo 56. Operaciones para la determinación del peso específico
de aplicación de la carga: curvas teóricas y curvas de ensayos reales 27 de las particulas, mediante picnómetros, con muestras de la CV–13 79
7. Tracción simple 29 57. Futuro túnel en la Montaña del Oro (Cullera) 82
8. Criterio de griffith 30 58. Situación de los sondeos de reconocimiento para el Túnel de Cullera 83
9. Tracción brasileña 30 59. Ejecución del sondeo S–1 83
10. Modos de rotura típicos en probetas cilíndricas 31 60. Ejecución del sondeo SW–2a 83
11. Influencia del contenido de agua en la resistencia a compresión uniaxial 33 61. Vista parcial del lugar de almacenamiento
12. Variación de la media y mediana del ensayo a Carga de los testigos de los sondeos para el Túnel de Cullera 84
Puntual diametral en función del número de ensayos 34 62. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo S–1 86
13. Valores teóricos del coeficiente de tensión de tracción 63. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo SE–1 87
según el coeficiente de Poisson y la relación D/L 35 64. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo SE–2 89
14. Gráfico para la evaluación del GSI 41 65. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo SE–4 90
15. Indicaciones para la determinación del parámetro D 43 66. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo SE–5 91
16. Criterio de rotura de Hoek-Brown para la matriz rocosa 44 67. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo SW–1 94
17. Ejemplos de maza y martillo de geólogo 45 68. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo SW–2a 95
18. Martillo de Schmidt y ejecución del ensayo 46 69. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo SW–2b 96
19. Gráfica para la determinación de la RCS con el Martillo de Schmidt tipo L. 46 70. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo SW–3a 97
20. Ensayo de tracción brasileña 47 71. Cajas de testigos de las principales zonas ensayadas del sondeo SW–4 98
21. Requerimientos para la muestra de ensayo 51 72. Ensayo de resistencia a compresión uniaxial con bandas
22. Prensa del Laboratorio de Mecánica de Rocas extensométricas para la determinación de las deformaciones 103
del Departamento de Ingeniería del Terreno (UPV) 52 73. Detalles de las bandas extensométricas
23. Variación de la RCS con el dámetro de la probeta 53 para la determinación de las deformaciones 103
24. Resistencia a compresión simple frente a la porosidad para pizarras y areniscas 54 74. Ejemplo de registro de las bandas extensométricas
25. Resistencia a compresión simple frente en el ensayo de compresión uniaxial 103
al peso específico calizas de ribarroja del ebro 55 75. Ensayo de resistencia a tracción brasileña con una muestra
26. Fases del ensayo de resistencia a compresión simple 56 procedente de los sondeos de reconocimiento para el Túnel de Cullera 104
27. Prensa de Carga Puntual para el ensayo Franklin 56 76. Desmonte en roca entre los Pk 1+680 y 1+830 de las obras de desdoblamiento
28. Máquina en laboratorio para el ensayo de Carga Puntual 57 de la N–332, tramo Gandía-Xeresa 105
29. Máquina en campo para el ensayo de Carga Puntual 57 77. Taludes en roca de la carretera de acceso a la Presa del Embalse de Loriguilla 107
30. Requisitos geométricos de las probetas para el ensayo de Carga Puntual 57 78. Ubicación satelital de la planta de áridos de Sierra Gorda 109
31. Formas de rotura para ensayos válidos y nulos 58 79. Vista del frente 2 de Sierra Gorda 109
32. Procedimiento para la determinación gráfica de P50 58 80. Rocas de la planta de Sierra Gorda, referencia B01 (izq) y B02 (der) 110
33. Gráfico del factor de corrección F por tamaño 59 81. Roca con referencia B00 110
34. Variación de los índices de Carga Puntual para diferentes tipos de roca 60 82. Rocas de los diferentes sitios de la Comunidad Valenciana.
35. Variación de los índices de Carga Puntual para las calizas 60 Onteniente (arriba izquierda.), Puebla de Arenoso (arriba derecha),
36. Ubicación de las zonas de estudio 61 Pueblo Albaida (abajo izquierda) y Bellús (abajo derecha) 111
37. Detalle del desmonte nº 8 de las obras de la CV–13 63 83. Rocas de la planta de Sierra Gorda, con diferentes contenidos de humedad 111
38. Muestras para el ensayo PLT en campo procedentes del desmonte nº 8 63 84. Rocas de la planta de Sierra Gorda, con diferentes diametros y longuitudes.
39. Ejemplo de fragmentos para tallar y ensayar probetas en el laboratorio 63 (Arriba), Testigos del A1 hasta A7. (Abajo), testigos del A11 al A17 y A21 al A26 112
40. Ejemplo de fragmentos con forma de bloque regulares 85. Rocas de cuatro puntos de la Comunidad Valenciana 113
para ser ensayados en la 2ª tanda o tallados para la 3ª tanda 64 86. Rocas de cuatro puntos de la comunidad valenciana, con galgas extensiométricas 113
41. Bloques para ser tallados y ensayados en laboratorio 64 87. Ejemplo de la medición de la Resistencia a
42. Muestra representativa de las calizas del desmonte nº 8 64 Compresión Simple con muestras de Bellús 115
43. Sala de tallado de muestras en el laboratorio 66 88. Ejemplo de la medición de la Velocidad
44. Ejemplo de muestras cilíndricas y en bloque regular talladas de ondas en muestras de la Comunidad Valenciana 116
en la 2ª campaña de ensayos con muestras de la CV–13 66 89. Ejemplo del ensayo de inmersión
45. Esquema de las muestras tomadas y ensayos realizados en la CV–13 69 dinamica en muestras de la Comunidad Valenciana 117
46. Tallado de las probetas en campo en la CV–13 70 90. Ubicación satelital de la planta de áridos de Guerola 119
47. Ensayos en campo en la CV–13 70 91. Talud de donde se recogio la roca de la Puebla de Arenoso 120
48. Ejemplo de rotura válida (izquierda) y no válida (derecha). 71 92. Tramo de la antigua N–340, aprovechado para la ampliación de la A-7 123
49. Ensayo PLT con bloque regular en laboratorio, con medición electrónica 93. Histograma de distribución de los tamaños de las probetas ensayadas
de la carga de rotura (izquierda). Ejemplo de rotura válida (derecha) 72 (Considerando todas las campañas realizadas) 128
50. Ensayo de RCS en laboratorio con muestras de la CV–13 73 94. Diagrama de caja y bigotes de la distribución de los tamaños de las
51. Ensayo PLT a carga diametral en laboratorio con muestras de la CV–13 73 probetas ensayadas (Considerando todas las campañas realizadas) 128
95. Diagrama de dispersión de los tamaños de las probetas ensayadas 142. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, frente a los valores
(Considerando todas las campañas realizadas) 129 medios, sin extremos, de Is(50),F , por grupos de resistencia 158
96. Histograma de distribución de los tamaños de las probetas ensayadas 143. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2,
(Todos los ensayos con probetas de la CV–13) 130 frente a las marcas de clase Is(50),F , de los grupos de resistencia 158
97. Diagrama de caja y bigotes de la distribución de los tamaños de las 144. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, frente a las marcas
probetas ensayadas (Todos los ensayos con probetas de la CV–13) 130 de clase Is(50),F , de los rangos de valores obtenidos para cada grupo de resistencia 159
98. Diagrama de dispersión de los tamaños de las probetas ensayadas 145. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, frente
(Todos los ensayos con probetas de la CV–13) 130 a las marcas de clase Is(50),F , de los rangos de valores utilizados para dichos
99. Histograma de distribución de los tamaños de las probetas ensayadas ajustes, en los grupos de resistencia 159
(1ª campaña experimental de la CV–13) 130 146. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, frente
100. Diagrama de caja y bigotes de la distribución de los tamaños a los valores medios Is(50),F , de los rangos de valores utilizados
de las probetas ensayadas (1ª campaña experimental de la CV–13) 131 para dichos ajustes, en los grupos de resistencia 159
101. Diagrama de dispersión de los tamaños de las probetas ensayadas 147. Ajuste P–De2 para los sub-grupos de resistencia
(1ª campaña experimental de la CV–13) 131 2,08 < Is < 3,0; 3,0 < Is < 4,5; 4,5 < Is < 6,7; (sin ignorar ningún valor) 161
102. Histograma de distribución de los tamaños de las probetas ensayadas 148. Ajuste P–De2 para los sub-grupos de resistencia
(2ª campaña experimental de la CV–13) 131 2,08 < Is < 3,0; 3,0 < Is < 4,5; 4,5 < Is < 6,7; (ignorando los peor alineados)
103. Diagrama de caja y bigotes de la distribución de los tamaños de las (Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 161
probetas ensayadas (2ª campaña experimental de la CV–13) 131 149. Variación del exponente B de los ajustes P–De2
104. Diagrama de dispersión de los tamaños de las probetas ensayadas con todas las determinaciones, frente a los valores medios
(2ª campaña experimental de la CV–13) 131 de todas las determinaciones de Is(50),F , por subgrupos de resistencia 163
105. Histograma de distribución de los tamaños de las probetas ensayadas 150. Variación del α correspondiente a los ajustes P–De2 con todas
(Todos los ensayos con probetas de cantera de Bellús) 132 las determinaciones, frente a los valores medios de todas
106. Diagrama de caja y bigotes de la distribución de los tamaños de las probetas las determinaciones de Is(50),F , por subgrupos de resistencia 164
ensayadas (Todos los ensayos con probetas de cantera de Bellús) 132 151. Variación del exponente B de los mejores ajustes P–De2,
107. Diagrama de dispersión de los tamaños de las probetas ensayadas frente a los valores medios, sin extremos, de Is(50),F , por subgrupos de resistencia 164
(Todos los ensayos con probetas de cantera de Bellús) 132 152. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2,
108. Ajuste De2–P50 para la 1ª tanda de la campaña de la CV–13 133 frente a los valores medios, sin extremos, de Is(50),F , por subgrupos de resistencia 164
109. Ajuste P–De2 para la 3ª tanda de la campaña de la CV–13 135 153. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2,
110. Ajuste P–De2 para la 1ª y 3ª tanda de la campaña de la CV–13 135 frente a las marcas de clase Is(50),F , de los subgrupos de resistencia 164
111. Ajuste P–De2 con los 7 puntos mejor alineados 154. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2,
(1ª y 3ª tanda de la campaña de la CV–13) 136 frente a las marcas de clase Is(50),F , de los rangos de valores
112. Variación de B con el coeficiente de correlación obtenidos para cada subgrupo de resistencia 165
(1ª y 3ª tanda de la campaña de la CV–13) 137 155. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, frente
113. Variación de α con el número de puntos ajustados a las marcas de clase Is(50),F , de los rangos de valores utilizados para
(1ª y 3ª tanda de la campaña de la CV–13) 138 dichos ajustes, en los subgrupos de resistencia 165
114. Variación de α con el número de puntos ajustados, sin puntos no 156. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2,
representativos (3ª tanda de la campaña de la CV–13) 138 frente a los valores medios Is(50),F , de los rangos de valores
115. Ajuste P–De2 para la 4ª tanda de la campaña de la CV–13 139 utilizados para dichos ajustes, en los subgrupos de resistencia 165
116. Ajuste P–De2 con los 5 puntos mejor alineados 157. Evolución del coeficiente C1 con la bondad de los ajustes α–Is(50),F 166
(4ª tanda de la campaña de la CV–13) 140 158. Evolución del coeficiente C2 con la bondad de los ajustes α–Is(50),F
117. Ajuste P–De2 , por grupos de resistencia, para la 4ª tanda de la CV–13 141 (ajustes lineal y logaritmico para subgrupos de resistencia) 167
118. Variación de B con el coeficiente de correlación 159. Ajuste P–De2 para niveles de resistencia de 1 MPa, de 2,0 a 7,0 MPa
(4ª tanda de la campaña de la CV–13) 141 (sin ignorar ningún valor) 167
119. Variación de α con el número de puntos ajustados 160. Ajuste P–De2 para niveles de resistencia de 1 MPa, de 2,0 a 7,0 MPa
(4ª tanda de la campaña de la CV–13) 142 (ignorando los valores peor alineados) 168
120. Ajuste P–De2, con todos los puntos, para la 5ª tanda de la CV–13 143 161. Variación del exponente B de los ajustes P–De2 con todas las determinaciones,
121. Ajuste P–De2, con los puntos mejor alineados, para la 5ª tanda (CV–13) 144 frente a los valores medios de todas las determinaciones
122. Ajustes P–De2, por grupos de probetas (con solo dos ensayos), de Is(50),F , por intervalos de resistencia de 1 MPa 170
para la 5ª tanda (CV–13) 145 162. Variación del α correspondiente a los ajustes P–De2 con todas las determinaciones,
123. Ajustes P–De2, por grupos de probetas, para la 5ª tanda (CV–13) 146 frente a los valores medios de todas las determinaciones
124. Variación de B con el coeficiente de correlación de Is(50),F , por intervalos de resistencia de 1 MPa. 170
(5ª tanda de la campaña de la CV–13) 148 163. Variación del exponente B de los mejores ajustes P–De2, frente a los
125. Variación de α con el número de puntos ajustados valores medios, sin extremos, de Is(50),F , por intervalos de resistencia de 1 MPa 171
(5ª tanda de la campaña de la CV–13) 148 164. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, frente a los valores
126. Variación de α con el número de puntos ajustados, sin los ajustes menos medios, sin extremos, de Is(50),F , por intervalos de resistencia de 1 MPa 171
representativos (5ª tanda de la campaña de la CV–13) 149 165. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, frente
127. Ajuste P–De2 sin ignorar ningún punto. a las marcas de clase Is(50),F, de los intervalos de resistencia de 1 MPa 171
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 150 166. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, Frente a las
128. Ajuste P–De2 ignorando puntos no alineados (1). (Todos los ensayos marcas de clase Is(50),F, de los rangos de valores obtenidos para cada
con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 151 intervalo de resistencia de 1 MPa 171
129. Ajuste P–De2 ignorando puntos no alineados (2). 167. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, frente
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 151 a las marcas de clase Is(50),F, de los rangos de valores utilizados para
130. Histograma de distribución del Is(50) dichos ajustes, en los intervalos de resistencia de 1 MPa 172
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 152 168. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, frente
131. Diagrama de caja y bigotes de la distribución del Is(50) a los valores medios Is(50),F , de los rangos de valores utilizados para
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 152 dichos ajustes, en los intervalos de resistencia de 1 MPa 172
132. Diagrama de dispersión del Is(50) 169. Evolución del coeficiente C1 con la bondad de los ajustes α–Is(50),F
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 152 (Ajustes lineales para subgrupos e intervalos de resistencia) 174
133. Histograma de distribución del Is(50) (sin los 2 extremos) 170. Evolución del coeficiente C2 con la bondad de los ajustes α–Is(50),F
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 152 (Ajustes lineales para subgrupos e intervalos de resistencia) 174
134. Diagrama de caja y bigotes de la distribución del Is(50) (sin los 2 extremos) 171. Dimensión del ensayo de PLT critica 183
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 153 172. Variación del Is con respecto a la relación del l/d, muestra B00 (Todos los valores) 184
135. Diagrama de dispersión del Is(50) (sin los 2 extremos) 173. Variación del Is con respecto a la relación del l/d, muestra B00
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 153 (Eliminando los valores mas altos y los valores mas bajos) 184
136. Histogramas de distribución del Is(50) en la escala habitual de clasificación 174. Variación del Is con respecto a la relación del l/d, muestra B01 (Todos los valores) 185
de la resistencia a la Carga Puntual (Todos los ensayos con probetas 175. Variación del Is con respecto a la relación del l/d, muestra B02 (Todos los valores) 185
de dimensiones normativas de la CV–13) 154 176. Variación del Is con respecto a la relación del l/d, muestra PA01 (Todos los valores) 185
137. Ajustes P–De2 para los grupos de resistencia principales: 177. Variación del Is con respecto a la relación del l/d, muestra PAL01
1,0 < Is < 3,0; 3,0 < Is < 6,0 e Is > 10,0 (sin ignorar ningún valor) (Todos los valores) 186
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 154 178. Variación del Is con respecto a la relación del l/d, muestra PP01 (Todos los valores) 186
138. Ajustes P–De2 para los grupos de resistencia principales: 179. Gráfico de cajas y bigotes Is(50) (Todos los ensayos) 187
1,0 < Is < 3,0; 3,0 < Is < 6,0 e Is > 10,0 (ignorando los puntos peor alineados) 180. Diagrama de medias y 95% de intervalos LSD del Is(50) (Todos los ensayos) 187
(Todos los ensayos con probetas de dimensiones normativas de la CV–13) 155 181. Diagrama de representación por código de nivel del Is(50) (Todos los ensayos) 187
139. Variación del exponente B de los ajustes P–De2 con todas las 182. Gráfico de cajas y bigotes para la RCS (Todos los ensayos) 188
determinaciones, frente a los valores medios de todas las 183. Diagrama de medias y 95% de Intervalos LSD de la RCS (Todos los ensayos) 188
determinaciones de Is(50),F , por grupos de resistencia 157 184. Diagrama de representación por código de nivel de la RCS) (Todos los ensayos) 188
140. Variación del α correspondiente a los mejores ajustes P–De2, 185. Regresión del RCS contra el PLT (todos los valores) 189
frente a los valores medios, sin extremos, 186. Regresión del RCS contra el PLT (para el subgrupo 1) 190
de Is(50),F , por grupos de resistencia 158 187. Regresión del RCS contra el PLT (para el subgrupo 2) 190
141. Variación del exponente B de los mejores ajustes P–De2, frente a los valores 188. Regresión del RCS contra el PLT (para el subgrupo 3) 190
medios, sin extremos, de Is(50),F , por grupos de resistencia 158 189. Regresión del RCS contra el PLT (para el subgrupo 4) 190
Agradecimientos
En las siguientes líneas me gustaría expresar mi

más sincero agradecimiento, a todas aquellas
personas que, de una forma u otra, han
contribuido para que este trabajo se haya podido
realizar. En primer lugar a Dios por darme la
oportunidad de realizar esta investigación, a mis
padres, hermanos, sobrinos y amigos.
También me gustaría agradecer a los profesores
de la Universidad Politécnica de Valencia D.
Jorge Preciado Romero Ph.D y D. José Bernardo
Serón Gañez M.Sc por su apoyo y asesorías y a las
personas del laboratorio de Ingeniería del Terreno
de la misma Universidad donde se realizaron la
totalidad de los ensayos de laboratorio. Por último
quiero agradecer a la Ing. Alejandra López por
su ayuda en la preparación de este texto y a la
Universidad del Valle en la cual actualmente

soy Docente e Investigador.
Ing. Manolo Adolfo Galván Ceballos Ph.D. - M.Sc
CAPÍTULO 1
INTRODUCCIÓN
El presente libro se encuadra dentro de la rama utilización de los macizos rocosos en obras
o parte de la Geotecnia denominada “Mecánica subterráneas, en la explotación de recursos
de Rocas”. mineros y en todo tipo de obras superficiales,
La Mecánica de Rocas, es una ciencia teórica entre las que jugaron un papel muy importante
y aplicada que trata del comportamiento de los las presas.
macizos rocosos; es la rama de la Mecánica que Para entender la diferenciación entre Mecánica
estudia la reacción de las rocas a los campos de del Suelo y Mecánica de Rocas, es necesario tener
fuerza de su entorno físico1. en cuenta que se entiende por “macizos rocosos”,
El papel de la geología es también evidente, o “rocas” en general, desde el punto de vista de la
todos los materiales son masas rocosas situadas Ingeniería Civil.
en un entorno geológico o extraído de él. Los ma- Según la Geología, se considera roca (Fou-
teriales poseen ciertas características físicas, que cault, 1985)
son función de su origen y de los procesos geo-
lógicos posteriores que han actuado sobre ellos. a un material constitutivo de la corteza te-
Otra definición es la que ofreció el U.S. Na- rrestre, formado en general por una asocia-
ción de minerales, que presentan una cierta
tional Comite on Rock Mechanics en 1964 y
homogeneidad estadística; en general dura y

subsecuentemente modificada en 1974 donde coherente (p.e. piedra, canto), a veces plástica
dice que (p.e. arcilla) o móvil (p.e. arena); en el límite
líquida (p.e. petróleo) o gaseosa.
la Mecánica de Rocas es la ciencia teórica y
práctica del comportamiento mecánico de las Intuitiva y tradicionalmente se distingue en-
rocas y de los macizos rocosos; es la rama de
la mecánica referente a la respuesta de la roca
tre suelo y roca por el grado de consolidación y
y del macizo rocoso a los campos de fuerza de por la resistencia (distinción que no siempre se
su ambiente físico. cumple, por ejemplo con algunas arcillas y con
algunas rocas blandas); pero, desde el punto
La Mecánica de Rocas tuvo su inicio, oficial de vista de la Ingeniería, la principal diferencia
u oficioso, en el Primer Congreso de la ISRM, radica en el comportamiento y, sobre todo, en la
como consecuencia de la necesidad de dotar de modelización de dicho comportamiento.
un cuerpo de ciencia, dentro de la Geotecnia Mientras que una masa de suelo, pese a ser
y diferente de la Mecánica del Suelo, para la un conjunto de partículas discretas, se puede
1
Definición del comité de Mecánica de Rocas de la Academia Nacional de Ciencias. Washington, D.C., 1966.
M a n o l o A d o l f o Ga lvá n C e ba l l o s
modelizar en muchas ocasiones como un sólido geológicas: litología y estratigrafía, estructura

continuo, una masa rocosa o “macizo rocoso” es geológica, discontinuidades tectónicas o diage-
un medio discontinuo, compuesto por la matriz néticas, estados de esfuerzos in situ, etc.
rocosa (o “materia prima” del macizo) y un con- A ambas escalas, matriz y macizo, la respues-
junto de discontinuidades. ta mecánica es también función de otros facto-
Los ámbitos de aplicación de la Mecánica de res como las condiciones hidrogeológicas y las
Rocas son muchos y pueden considerarse tres condiciones ambientales, el clima y los fenóme-
grupos fundamentales: nos meteorológicos, que actúan sobre el medio
t Aplicaciones en las que los materiales roco- geológico y dan lugar a los procesos de alteración
sos constituyen la estructura (excavación de y meteorización, modificando las propiedades
túneles, galerías, taludes, etc.). iníciales de las rocas y macizos rocosos.
t Aplicaciones en las que son el soporte de La matriz rocosa generalmente está formada
otras estructuras (cimentaciones de edifi- por varias especies mineralógicas (rocas com-
cios, presas, pilares de puentes, etc.). puestas), pero también existen rocas constituidas
t Y, por último, las aplicaciones en las rocas por un solo mineral (rocas monominerálicas).
se utilizan como material de construcción Las rocas suelen ser materiales duros, pero
(rellenos, escolleras, pedraplén, etc.). también pueden ser blandas, como ocurre en el
caso de algunas sales y rocas arcillosas.
La Mecánica de Rocas tiene una gran relación, En la corteza terrestre se distinguen tres tipos
con otras disciplinas como son la Geología y, de rocas:
principalmente la Geología Estructural para el t Rocas ígneas: rocas formadas por la solidi-
estudio de los procesos y estructuras tectónicas ficación de magma.
que afectan a las rocas y, por supuesto, a la t Rocas metamórficas: rocas formadas por
Mecánica del Suelo. alteración en estado sólido de rocas ya con-
Para determinar el comportamiento de los solidadas de la corteza de la Tierra, cuando
macizos rocosos, es muy importante conocer las quedan sometidas a un ambiente energéti-
tensiones y las deformaciones que pueden llegar co muy diferente al de su formación.
a soportar el material rocoso ante unas determi- t Rocas sedimentarias: rocas formadas por
nadas condiciones, permitiendo evaluar su com- la consolidación de sedimentos, materia-
portamiento mecánico y abordar el diseño de les procedentes de la erosión de rocas an-
estructuras de ingeniería. teriores, o de precipitación a partir de una

La relación entre esos dos parámetros, tensión disolución.
y deformación, describe el comportamiento de
los diferentes tipos de rocas y macizos rocosos, Las rocas se distinguen, de muchos de los
que a su vez dependen de las propiedades de demás materiales comunes de ingeniería, a
los materiales y de las condiciones a que están excepción del hormigón, por su baja resistencia
sometidos en la naturaleza. a la tracción. Los especímenes de roca probados
Las propiedades físicas (composición mine- en pruebas de tracción uniaxial han fallado a
ralógica, densidad, estructura, porosidad, per- esfuerzos muy bajos en comparación a los valores
meabilidad, alterabilidad, dureza, etc.) controlan obtenidos en las pruebas a la compresión simple
las características resistentes y deformaciona- o a la Carga Puntual (Brook, 1993).
les de la matriz rocosa y son el resultado de las Debido a que las discontinuidades ofrecen
condiciones y procesos geológicos y tectónicos poca o nula resistencia a la tracción, la resistencia
sufridos por las rocas a lo largo de su historia. a la tracción en un macizo rocoso es también
En el comportamiento mecánico de los maci- muy baja. La implicación de esta propiedad en
zos rocosos influyen, además, las características diseños de excavaciones en roca es que ninguna
18
Introducción
zona identificada por el análisis será sujeta a homogéneas e isótropas, presentan variabilidad
esfuerzos de tracción. en sus propiedades físicas y mecánicas.
En la práctica, la roca también es “distensio- La Resistencia a Compresión Simple, es pues
nada” y se causan redistribuciones de esfuerzos un parámetro fundamental, pero en ocasiones
locales. La distensión puede dar como resultado costosa e incluso imposible determinar, me-
una inestabilidad en la roca, lo cual se verá re- diante el Ensayo de Compresión Uniaxial (ECU)
flejado en desprendimiento espontáneo o pro- normalizado; pero se puede estimar de forma
gresivo de la roca. aproximada a partir de índices obtenidos en sen-
Debido a todo esto en la Mecánica de Ro- cillos ensayos de campo o laboratorio, como el
cas es necesario el estudio de la Resistencia a ensayo de Carga Puntual (PLT) o el Martillo Sch-
Compresión Simple (RCS), porque el compor- midt (EMS), entre otros.
tamiento mecánico de la matriz rocosa y del Si nos centramos en el ensayo de Carga Pun-
macizo rocoso dependerá, entre otros factores, tual o también denominado ensayo Franklin,
de esta resistencia. se utilizan probetas formadas por fragmentos
El estado de esfuerzos al que está sometido irregulares o regulares de roca o probetas cilín-
un sólido se define por las tensiones principales dricas (generalmente procedentes de sondeos)
que actúan: σ1, σ2, σ3. Dependiendo principal- a las que no se les imponen grandes requisitos
mente de la magnitud de estas tensiones y de para su obtención.
su dirección, se producirán las deformaciones La evolución de dicho ensayo, se debe, a la
en las rocas y en su caso, la rotura. Las rocas posibilidad de utilizar trozos de roca relativamente
rompen en condiciones de esfuerzo diferencial sin preparación y también que se puede corregir
y a una determinada relación, entre las tensio- el tamaño mediante un coeficiente de corrección
nes principales corresponde un determinado por tamaño. Esta prueba puede realizarse en
nivel de deformaciones. Si se conoce estas re- campo o en laboratorio y no es indicada para
laciones, se podrá predecir el comportamien- rocas blandas o con anisotropía muy marcada
to del material para un estado de esfuerzos (esquistos, pizarras, etc.).
determinado. El resultado del ensayo, es el denominado
Esta predicción del comportamiento, con Índice de Resistencia a la Carga Puntual o Índice
precisión, solo se podría realizar si las rocas y de Carga Puntual (Is(50)), que permite clasificar
los macizos rocosos fueran isótropos y homo- la roca en cuanto a su resistencia y la utilidad
géneos, pero incluso las rocas que parecen más general del ensayo es la estimación del la RCS.
19
CAPÍTULO 2
METODOLOGÍA
Para la realización de la investigación, tras la REALIZACIÓN DE ENSAYOS

formulación del problema y el planteamiento de
los objetivos indicados en el punto anterior, se ha Para la realización de los ensayos, se contó con
seguido la siguiente metodología: el apoyo del Laboratorio de Mecánica de Rocas
En una primera fase, se ha revisado la del Departamento de Ingeniería del Terreno de
literatura básica relacionada con los principios la Universidad Politécnica de Valencia.
del comportamiento tenso-deformacional de las Los ensayos se realizaron con muestras proce-
rocas y de los métodos de ensayo para determinar dentes de ocho ubicaciones:
sus propiedades mecánicas. t De la excavación de los taludes en roca, de
En la siguiente fase se ha revisado la literatu- las obras de la nueva carretera de acceso al
ra específica, relacionada con la resistencia a la futuro aeropuerto de Castellón (CV–13).
Carga Puntual en general; se ha procedido a se- t De los sondeos para el estudio geológico y
leccionar y estudiar los artículos que realmente geotécnico del proyecto básico del Túnel en
tienen relación e importancia con la pregunta de la Montaña del Oro en Cullera (Valencia)
investigación, para posteriormente sintetizar los t De la excavación de los taludes en roca, de
valores más significativos de los estudios realiza- las obras de duplicación de calzada en la ca-
dos anteriormente. rretera N–332, tramo Gandía-Xeresa.

Posteriormente se ha llevado a cabo la parte t De uno de los taludes de la carretera de ac-
experimental, tomando muestras de rocas de ceso al embalse de Loriguilla, en las inme-
ocho ubicaciones de la Comunidad Valenciana, diaciones de este.
con las cuales se ejecutaron los ensayos de campo t De la cantera de Sierra Gorda, ubicada en el
y laboratorio. Los ensayos realizados, además, del termino de Bellús (Xátiva).
ensayo de Carga Puntual, han sido: Resistencia t De la cantera de Guerola, que se encuentra
a Compresión Simple, velocidad ultrasónica de ubicada en Onteniente.
propagación de ondas, durabilidad (dinámica y t Del desprendimiento del macizo rocoso en
estática) y propiedades índice. Puebla de Arenoso (Castellón).
Finalmente se ha realizado, el análisis de los t De la construcción de un pedraplén en
resultados y se han obtenido las correspondientes puerto de Albaida.
conclusiones, a partir de las cuales se proponen
algunas líneas para futuras investigaciones.
En todas las zonas de estudio se han ido rea- El Capítulo 2 se presenta la metodología para
lizando ensayos in situ de Carga Puntual y reco- realizar esta investigación y las zonas de estudio
giendo muestras para ser talladas y ensayadas en donde se realizó estudio experimental.
el laboratorio. Se han tallado probetas cilíndri- El Capítulo 3 contiene el análisis del compor-
cas para ensayos a carga axial y diametral, como tamiento tenso-deformacional de la matriz roco-
también se han moldeado testigos, para ensayos sa y la obtención de la resistencia a compresión,
con bloques regulares. tracción y a carga puntual. Además presenta los
Se han realizado ensayos de RCS con las diferentes aportes realizados por diferentes au-
probetas cilíndricas que cumplen con todos los tores en el campo de la resistencia de la matriz
requerimientos normativos. Se han hecho ensayos rocosa.
de RCS, algunos con bandas extensométricas, El Capítulo 4 contiene el estudio experimental,
para medir su deformación axial y diametral. en el cual se realizaron los ensayos de Resistencia
A su vez, se han realizado otros ensayos para y propiedades índices de la matriz rocosa en cada
caracterizar la roca y determinar su porosidad, uno de los puntos de estudio.
densidad e índices de durabilidad. El Capítulo 5 es el análisis de los resultados
Igualmente, antes de ser sometidas las pro- obtenidos en el estudio experimental, determi-
betas a los ensayos de RCS y/o PLT se ha me- nando los siguientes índices y factores:
dido la velocidad ultrasónica de las ondas P y t Cálculo del índice de Resistencia a la Carga
S, como ensayo no destructivo que nos permite Puntual Is(50).
determinar su deformación dinámica (módulos t Estudio de la obtención del factor de co-
elásticos dinámicos del macizo, Ed y υd). Este en- rrección por tamaño, según la normativa
sayo se utiliza como índice de clasificación y su vigente y propuesta de un factor más ade-
valor es indicativo de la calidad de la roca, co- cuado.
rrelacionándose linealmente con la Resistencia a t Correlación del índice de Resistencia a Car-
Compresión Simple. ga Puntual con la Resistencia a Compresión
En total se han realizado 701 ensayos, aproxi- Simple.
madamente un 28% son pruebas de campo y
un 72% se han realizado en el laboratorio de El Capítulo 6 cierra la presente investigación
Mecánica de Rocas del Departamento de Inge- con el resumen y aportes del análisis de resulta-
niería del Terreno de la Universidad Politécnica dos, proponiendo una correlación del índice de
de Valencia. Resistencia a Carga Puntual con la Resistencia a

Compresión Simple para calizas de la Comuni-
ORGANIZACIÓN DEL DOCUMENTO dad Valenciana.
El Capítulo 7 se enuncian las futuras líneas de
El presente estudio de investigación se divide investigación, que pueden ser usadas en estudios
en siete partes principales: posteriores a este.
El Capítulo 1 contiene la introducción, en Finalmente se presenta un listado con las
la que se describe que es la mecánica de rocas referencias bibliográficas consultadas y usadas
y cuales sus ámbitos de aplicación. También se en esta investigación.
explican las diferentes formas de obtener la Re-
sistencia a Compresión Simple a través de co-
rrelaciones de ensayos de estimación subjetiva,
objetiva y mecánicos.
22
CAPÍTULO 3
COMPORTAMIENTO Y ENSAYOS DE LA MATRIZ ROCOSA
El estudio de la Mecánica de Rocas, resuelve tenso-deformacionales de la misma, sometida a

entre otros los problemas del comportamiento un estado de esfuerzos determinados. Dentro de
de la matriz rocosa y del comportamiento de la las propiedades básicas, y de cara al conocimiento
roca in situ con las discontinuidades inherentes del comportamiento mecánico de la matriz,
(macizo rocoso). son de particular importancia la Resistencia a
En cuanto a la matriz rocosa, hay muchos Compresión Simple y la resistencia a tracción.
parámetros que se emplean para la identifica-
ción y descripción cuantitativa y/o cualitativa COMPORTAMIENTO TENSO-DEFORMACIONAL
de sus propiedades básicas. Estas propiedades, DE LA MATRIZ ROCOSA
denominadas propiedades índices, son las que
determinarán, en primera instancia, junto con El comportamiento tensión-deformacional de
la composición mineralógica y la fábrica, las una roca, viene definido por la relación entre los
propiedades y el comportamiento mecánico de esfuerzos aplicados y las deformaciones produci-
dicha matriz. das y hace referencia a cómo se va deformando y
Cuando se hace una descripción geológica de a la variación del comportamiento del material a
la roca, se incluye su nombre, mineralogía, tex- lo largo de la aplicación de la carga; que permite
tura, tipo de cementación y grado de alteración. conocer:

Esta descripción petrográfica, se lleva a cabo t El comportamiento antes de llegar a la
mediante el análisis de láminas delgadas, con la rotura.
microscopía óptica, electrónica y el empleo de t La forma en que se produce la rotura.
técnicas de difracción de rayos X. t El comportamiento después de la rotura.
El estudio petrofísico, de la matriz rocosa
permite interpretar sus propiedades físicas en Su estudio, se lleva a cabo a partir de ensayos
función de sus componentes y características de aplicación de fuerzas, en donde se registran
petrográficas (poros y fisuras intergranulares, las curvas de esfuerzo-deformación a lo largo
uniones, anisotropías, minerales, composición de las diferentes etapas del proceso.
química, etc.), mediante la descripción de pará- Las rocas presentan relaciones lineales y/o no
metros petrográficos y procedimientos específi- lineales entre las fuerzas aplicadas y las deforma-
cos para su evaluación (Montoto y Esbert, 1999). ciones producidas, obteniéndose diferentes mo-
Las propiedades mecánicas de la matriz rocosa delos de curvas tensión contra deformación para
son las que permiten conocer las características distintos tipos de rocas.
Si se aplica una carga y se supera su resistencia rígidos; la rotura frágil se produce al alcanzar
de pico (es decir, si la deformación aumenta más la resistencia máxima. En otras situaciones, se
allá de la deformación de pico) puede ocurrir: puede controlar la rotura de tal forma que sigan
t La resistencia de la roca disminuye drás- “trabajando” aún después de haber alcanzado su
ticamente incluso hasta alcanzar un valor resistencia máxima.
próximo a cero. Es el caso de un comporta-
miento frágil.
t La resistencia de la roca decrece hasta un
cierto valor después de haberse alcanzado
deformaciones importantes. Es el caso de
un comportamiento frágil-dúctil o parcial-
mente frágil.
t La deformación sigue aumentando sin que
se pierda resistencia (esto es, la resistencia
se mantienen constante después de grandes
deformaciones). Es el caso de comporta-
miento dúctil.
Una roca presenta comportamiento frágil,

cuando su capacidad para resistir cargas dismi-
nuye al aumentar la deformación, esta rotura se Figura 1. Curva de tensión contra deformación
asocia con una deformación permanente muy (Serrano, 1998)
pequeña o casi nula de la roca antes de la rotu-
ra, que según las condiciones de ensayo, puede El hecho de que el comportamiento sea frágil
producirse repentinamente. El fenómeno de ro- o dúctil depende de la rigidez relativa de la roca
tura explosiva frágil se puede observar especial- que soporta la carga y del sistema de aplicación
mente en minas profundas excavadas en rocas de la carga; así, en los ensayos de laboratorio,
resistentes. la probabilidad de rotura frágil se reduce utili-
El comportamiento dúctil, aparece cuando la zando prensas rígidas. El conocimiento de las
roca conserva su resistencia a pesar de estar suje- curvas completas tensión-deformación de las
ta a deformaciones permanentes. La mayoría de rocas y macizos rocosos frágiles, es fundamen-

rocas presentan un comportamiento frágil, más tal para analizar el comportamiento de la roca
que dúctil, para las condiciones de presión y tem- sometida a altas tensiones en las excavaciones
peratura a las que normalmente están sometidas subterráneas.
en las actuaciones de Ingeniería Civil. La duc- La fragilidad de la roca, viene definida por
tilidad puede ser mayor en rocas meteorizadas, la pendiente de la curva tensión-deformación a
macizos rocosos diaclasados y rocas poco resis- partir del punto de resistencia máxima, la fragili-
tentes, tales como evaporitas. dad viene dada por:
Al ir aumentado la presión de confinamiento,
se pasa de un comportamiento frágil de la probeta σ 1M − σ 1R
(1)
a un comportamiento dúctil. La rotura frágil que ε 1R − ε 1M
se produce en rocas sometidas a tensiones, es
de naturaleza violenta e incontrolada, cuando donde: σ1M es la resistencia máxima
la rigidez de la prensa es menor que la de la σ1R es la resistencia residual
probeta, caso de ensayos de laboratorio, o cuando ε1R y ε1M son las respectivas deformaciones
los estratos que cargan sobre ellas son menos
24
C omp ortamiento y ensayos de l a matriz ro cosa
La curva de esfuerzo-deformación, en la rama samente. En realidad, microscópicamente,

ascendente, antes de alcanzar la resistencia pico, se producen grietas de tracción y pla-
presenta un comportamiento lineal o elástico nos de corte que progresan delimitando
para la mayor parte de las rocas. En el campo el volumen roto por “compresión”. Inde-
elástico, la deformación es proporcional al pendiente de estos procesos de rotura por
esfuerzo y se cumple la relación: compresión, en las rocas muy porosas, ta-
les como aglomerados volcánicos de baja
σ
E= (2) densidad, areniscas cementadas (tipo Cre-
ε ax ta); se dan procesos de colapso mecánico
por una compresión isótropa, en los que
donde: E es el módulo de Young o de elasticidad la estructura de la cementación se rompe,
σ es el esfuerzo transformándose la roca en un material
εax es la deformación axial pulverulento de tipo suelo con mayor den-
sidad que la roca inicial. Las rocas densas
Existe otra constante que define el compor- bajo compresión isotrópica, pueden colap-
tamiento elástico del material rocoso, que es el sar también bajo compresiones muy eleva-
módulo de Poisson: das por cambio de su estructura cristalina.
t Rotura por flexión: Se produce cuando
εt
υ= (3) una cierta sección de la roca está sometida a
ε ax flexión. En realidad la sección está someti-
da a unas tensiones normales variables y se
donde: εax es la deformación axial rompe por la zona de las tracciones a causa
εt es la deformación transversal de esta solicitación.
Procesos de rotura Procesos de rotura microscópica

El proceso de rotura macroscópica de una En forma simplificada, los procesos de rotura
roca, es muy complejo y generalmente intervie- a nivel microscópico pueden agruparse en los
nen en él muchos fenómenos microscópicos que siguientes fenómenos:
complican su comprensión y con ello su trata- t Fracturación o formación de superficies
miento teórico. libres: Consiste en la apertura de una grie-
ta con la formación de una superficie libre,

Procesos de rotura macroscópica para lo cual hay que aportar una “energía
En la rotura macroscópica (Serrano, 1998) específica de superficie” por unidad de área
pueden considerarse los siguientes tipos: creada o bien, en el crecimiento de una
t Rotura por tracción: En este tipo de rotura grieta ya existente, a causa de una tensión
se produce cuando la disposición y estruc- de tracción (Ver Figura 2).
tura del macizo rocoso hace que una cierta
sección de la roca esté sometida a una trac- En este fenómeno tiene gran importancia el
ción pura o casi pura. efecto de concentración de tensiones en los ex-
t Rotura por esfuerzo cortante: Se produce tremos de la fisura.
cuando una cierta superficie de la roca está t Deslizamiento: Se produce cuando por
sometida a esfuerzos cortantes suficiente- efecto de una solicitación cortante, un pla-
mente altos para que una cara de la superfi- no reticular, o una banda de planos desliza
cie deslice respecto a la otra. o deslizan, dando un salto de una o varias
t Rotura por compresión: Se presenta en distancias reticulares.
volúmenes de roca comprimidos inten-
25
Un fenómeno similar puede presentarse a

escala de la roca matriz, cuando se produce un
deslizamiento de una cara de una fisura respecto
a la otra debido a una solicitación cortante.
RESISTENCIA A COMPRESIÓN SIMPLE

DE LA MATRIZ ROCOSA
Se suele entender por “resistencia” a la carga

específica (por unidad de sección), que es nece-
sario aplicar a un material para producir su rotu-
ra. Según el esfuerzo que se aplique la resistencia
puede ser: a compresión, a tracción, a flexión, a
Figura 2. Fracturación: a) nucleación de una grieta. corte, a torsión, etc.
b) crecimiento de una grieta
(Serrano, 1998).
Figura 4. Compresión simple.
La Resistencia a Compresión Simple (o com-

presión uniaxial) de la matriz rocosa, es el valor
que se obtiene cuando se aplica (Figura 4) una
carga de compresión en una dirección dada, sin
aplicar ningún otro esfuerzo en ninguna otra
dirección. Se suele expresar con los símbolos2

C o ó σ c:
P P
Co = ó σc = (4)
A A
Donde, P es la carga de rotura y A la sección

sobre la que se aplica.
Figura 3. Esquemas de deslizamiento cristalino La matriz rocosa rompe a favor de las super-
(Serrano, 1998). ficies de fractura que se generan al superarse su
resistencia pico. Así, de una forma indirecta los
ensayos de compresión miden la resistencia al
corte de las rocas.
2
Lo más adecuado sería utilizar el símbolo σc para indicar una tensión de compresión y el símbolo Co para el valor último o de rotura de
dicha tensión.
26
Podría pensarse que los planos de fractura,

tienden a desarrollarse con dirección paralela a la
de aplicación de la carga; sin embargo, la mínima
resistencia se obtiene para la dirección en la que
se ejerce el mayor esfuerzo tangencial, formando
un ángulo determinado con respecto a la direc-
ción de aplicación de la carga.
Teóricamente, en caso de matriz rocosa isó-
tropa, la resistencia compresiva será siempre la
misma para un mismo estado de esfuerzos apli-
cados y unas mismas condiciones de presión
de agua, temperatura, etc. y, según el círculo de
Mohr, la rotura se producirá en una dirección tal
que: 2.θ = 90º + Ø.
Figura 5. Criterio lineal de rotura de Mohr-Coulomb

(González de Vallejo et al, 2002).
Sin embargo, la matriz rocosa suele tener

naturaleza anisótropa y no siempre se cumple la
predicción anterior en los ensayos de laboratorio.
Cuando la roca presenta anisotropía su re-
sistencia compresiva, para un mismo estado de

esfuerzos, varía según el ángulo entre la direc-
ción de los planos de anisotropía y la dirección
de la carga aplicada.
Siguiendo el modelo de Mecánica del Suelo
(Mohr-Coulomb) la resistencia es función de las
fuerzas cohesivas y fricciónales del material. La
cohesión, es la fuerza de unión entre las partículas
minerales que forman la roca. Figura 6. Variación de la resistencia a compresión en
El ángulo de fricción interna (Ø), es el ángulo función del ángulo de aplicación de la carga: curvas
de rozamiento entre los planos de la misma roca, teóricas y curvas de ensayos reales
para la mayoría de las rocas éste ángulo varía (González de Vallejo et al, 2002).
entre 25º y 45º. La fuerza friccional depende del
ángulo de fricción y del esfuerzo normal (σn),
actuando sobre el plano considerado.
27
La Resistencia a Compresión Simple de la ma- Factores extrínsecos:

triz rocosa es un parámetro muy variable que de- t Características del ensayo
pende de muchos factores: t Características de la muestra
Factores intrínsecos: t La resistencia de las rocas es una propiedad
t Tipo de roca (factor condicionante básico). que también depende del tiempo. Consi-
t Grado de microfisuración. derando este factor, por una parte se tiene
t Porosidad y grado de alteración y/o meteo- que la magnitud de la tensión, que ocasio-
rización. na la rotura desciende exponencialmente a
un valor límite cuando el tiempo tiende a
Esto da lugar a que no solo varíe la resistencia infinito y, por otra parte, la roca tiene una
de un tipo de roca a otra, sino que, dentro de capacidad de soportar una tensión mayor
un mismo tipo de roca, se pueda dar un amplio pero durante un corto espacio de tiempo
rango de valores: (siendo, por ejemplo, el tiempo del paso
de la onda de tensión producida por una
Tabla 1. Valores de resistencia de la matriz rocosa sana voladura). Al realizar en el laboratorio el
Resistencia a Compresión Simple
Resistencia ensayo de compresión simple, normal-
Roca (Kp/cm2)
Intacta
a la Tracción mente no se está en ninguna de estas dos
Valores Medios Rango de Valores (Kp/cm2)
situaciones límite, sino en una intermedia.
Andesita 2.100 - 3.200 1.000 - 5.000 70
$Q¿EROLWD 2.800 2.100 - 5.300 230
Anhidrita 900 800 - 1.300 60 - 120 En una serie de ensayos llevados a cabo en gra-
Arenisca 550 - 1.400 300 - 2.350 50 - 200 nito de Westerley, se ha recogido la información
%DVDOWR 1.500 - 2.150 800 - 3.500 50 - 250 de la influencia de la velocidad de carga, sobre
&DOL]D 800 - 1.400 600 - 2.000 40 - 300 la resistencia a la compresión triaxial de la roca
Cuarcita 2.000 - 3.200 1.000 - 5.000 100 - 300
'LDEDVD 2.400 - 3.500 1.300 - 3.650 550
y se ha llegado a la conclusión que la resistencia
'LRULWD 1.800 - 2.450 1.200 - 3.350 80 - 300 puede descender hasta un 50 por ciento, dismi-
'ROHULWD 2.000 - 3.000 1.000 - 3.500 150 - 350 nuyendo la velocidad de carga en 4 órdenes de
'RORPLD 900 - 2.500 650 - 3.500 50 - 250 magnitud. En general, al ser más rápida la aplica-
(VTXLVWR 500 - 600 200 - 1.600 20 - 55
*DEUR 2.100 - 2.800 1.800 - 3.000 140 - 300
ción de la carga, la muestra de roca ensayada será
Gneiss 1.600 - 2.000 850 - 2.500 50 - 200 más resistente.
*UDQLWR 1.700 - 2.300 1.000 - 3.000 70 - 250 El hecho de que se produzca una disminución
Grauvaca 1.800 800 - 2.200 55 - 150 de la resistencia de la roca al disminuir la

/LPROLWD 350 - 2.500 27
velocidad de aplicación de la carga se explica,
Lutita 300 - 700 100 - 1.000 15 - 100
5 - 10* según Manrique (1982) en ITGE (1991), mediante
Marga 700 - 1.400 700 - 1.900 la teoría de la microfisuración de McClintock y
0iUPRO 1.200 - 2.000 600 - 2.500 65 - 200 Walsh (1982).
3L]DUUD 1.000 - 1.800 900 - 2.500 70 - 200 Al disminuir la velocidad de aplicación de la
6DO 120 50 - 300
7RED 100 - 460 10 - 40 carga, también disminuye la velocidad de desli-
<HVR 250 100 - 400 10 - 25 zamiento de las superficies de las microfisuras ya
$IDYRUGHVXSHU¿FLHVGHODPLQDFLyQ'DWRVVHOHFFLRQDGRVD cerradas, con lo cual aumenta su resistencia a la
SDUWLUGH5DKP:DOWKDQ2EHUW\'XYDOO)DU- fricción y como consecuencia de ello, aumenta
PHU la concentración de tensiones en los extremos de
(González de Vallejo et al, 2002). las microfisuras; de este modo la propagación
de las microfisuras es más rápida, haciendo que
Esa dispersión de valores, se corresponde a la resistencia de la roca sea menor.
los valores “medidos” de la resistencia, que están El comportamiento mecánico de las rocas,
también influidos por: para resolver problemas de Ingeniería Civil, se
28
Tabla 2. Clasificación de las rocas a partir de su Resistencia a Compresión Simple

Resistencia a
ISRM Geological Society Bieniawki
la Compresión Ejemplos
(1981) of London (1970) (1973)
Simple (Mpa)
<1 Suelos
1-5 0X\EODQGD %ODQGD! 0X\EDMD

%ODQGD 0RGHUDGDPHQWHEODQGD 0X\EDMD 6DOOXWLWDOLPROLWDPDUJDWREDFDUEyQ
%ODQGD 0RGHUDGDPHQWHGXUD 0X\EDMD
25-50 0RGHUDGDPHQWHGXUD 0RGHUDGDPHQWHGXUD %DMD (VTXLVWRSL]DUUD
50-100 Dura Dura Media 5RFDVPHWDPyU¿FDVHVTXLVWRVDVFDOL]DSRURVD
100-200 0X\GXUD 0X\GXUD $OWD 5RFDVtJQHDV\PHWDPyU¿FDVGXUDVFDOL]D
! 0X\GXUD ([WUHPDGDPHQWHGXUD 0X\DOWD
&XDUFLWDJDEUREDVDOWR
! ([WUHPDGDPHQWHGXUD ([WUHPDGDPHQWHGXUD 0X\DOWD
(González de Vallejo et al, 2002)
“maneja” mediante los denominados “criterios

de rotura”, que suponen una relación entre la
combinación de estados tensiónales, σi, (o de es-
tados deformacionales) que produce la rotura de
la roca y una serie de parámetros (ki) representa- Figura 7. Tracción simple
tivos de la misma:
Se suele expresar con los símbolos3 To ó σt:
Rotura = f (σ i ; k i ) (5) T T
To = ó σt = (6)
Como se verá en los siguientes apartados, en A A
el criterio más ampliamente aceptado y utilizado Donde T es la carga de rotura y A la sección
en la actualidad, la Resistencia a Compresión sobre la que se aplica.
Simple es uno de los parámetros fundamentales, Resulta difícil, la determinación de la resisten-
y de ahí la importancia de la determinación de cia a tracción simple mediante el ensayo directo
dicha resistencia. de una probeta, ya que aún no se ha conseguido
Además, tradicionalmente, la Resistencia a un método satisfactorio para sujetar la probeta

Compresión Simple ha sido uno de los paráme- sin introducir tensiones de flexión.
tros clasificatorios de las rocas desde el punto de Brace, W. y Brittle, F. (1964) utilizaron mues-
vista ingenieril. tras de forma especial que reducen el problema
anterior, pero el método operativo es costoso y
RESISTENCIA A TRACCIÓN DE LA MATRIZ ROCOSA quizá demasiado complicado para su empleo ru-
tinario.
La resistencia a tracción simple de la matriz El método más práctico para determinar la
rocosa, es el valor de la resistencia que se obtiene resistencia a tracción directa se consigue, pegan-
cuando se aplica (Figura 7) una carga de tracción do con resina epoxi, cabezales de metal a mues-
en una dirección dada, sin aplicar ningún otro tras cilíndricas de roca que se ponen en tensión
esfuerzo en ninguna otra dirección. mediante cables.
3
Hacemos la misma observación que para el caso de la resistencia a compresión simple; lo más adecuado es utilizar el símbolo σt para
indicar una tensión de compresión y el símbolo To para el valor último o de rotura de dicha tensión.
29
No suele ser muy necesaria, una determina- desmentido por las observaciones experimenta-
ción exacta de la resistencia a tracción del mate- les, según las cuales4:
rial rocoso, éste se suele medir generalmente por
1 1
métodos rápidos indirectos. T o= de
⋅ Co a ⋅ Co (10)
Lo más habitual es adoptar una correlación 9 17
lineal directa entre la resistencia a tracción simple El ensayo brasileño (Lobo, F., 1942, en Serón,
y la Resistencia a Compresión Simple, del tipo: J.B., 2007) es el método más usado para deter-
minar la resistencia a tracción. En este ensayo,
T o= η ⋅ C o (7) una probeta cilíndrica de longitud (L) y diáme-
tro (D), se carga diametralmente con una carga
Donde η es el factor de proporcionalidad entre (P). La muestra se suele romper separándose en
ambas resistencias. dos mitades según el eje de carga diametral (Fi-
Tradicionalmente se ha utilizado y se sigue gura 9).
utilizando la correlación derivada del criterio de
rotura de Griffith a las rocas (Figura 8) que se
suele expresar como:
Si σ 1 + 3 ⋅ σ 3 > 0 → (σ 1 − σ 3 ) 2 = σ c ⋅ (σ 1 + σ 3) = 8 ⋅ σ t ⋅ (σ 1 + σ 3 )⎫
⎬
Si σ 3 + 3 ⋅ σ 3 < 0 → σ 3 = −σ t ⎭
(8)
Figura 9. Tracción brasileña
Con este ensayo (como se verá en el punto

4.6.3) se determina una resistencia a tracción in-
directa5 denominada “resistencia a tracción bra-
sileña”, TB ó σtB:
2⋅ P
TB ó σ tB = (11)
π ⋅D⋅L
RESISTENCIA A LA CARGA PUNTUAL DE

Figura 8. Criterio de griffith LA MATRIZ ROCOSA
El criterio de Griffith implica una relación: En mecánica de rocas se define la resistencia

a la Carga Puntual con el denominado “índice de
1
⋅ CoT o= (9) resistencia a la Carga Puntual”, que corresponde
8 al cociente entre la carga aplicada puntualmente
El criterio de Griffith es muy atractivo, por lo (P), para la que se produce la rotura en una
impecable de su fundamento teórico, pero queda probeta, dividida por el área de la sección teórica
4
Para el caso de análisis tridimensional (σ2 ≠ 0), el coeficiente η es aproximadamente de 1/12.
5
Se suele utilizar el término “resistencia a tracción” a secas, lo cual es incorrecto pues dicho término debe utilizarse para la resistencia
a tracción simple.
30
de rotura (At), considerándose dicha sección 9, páginas 669-697. Donde los autores: Broch,
como la sección mínima de la probeta, que pasa E. y Franklin, J.A. describieron la máquina y
por el eje de aplicación de la carga: la forma de realizar los ensayos, con cualquier
forma del testigo y sencillamente aplicando
P
Is = (12) un factor de corrección por forma. Y al final
At de todos los ensayos los resultados fueron
Se determina con el ensayo de resistencia a correlacionados con la RCS. También hablaron
la Carga Puntual (PLT) o ensayo Franklin, que de aspectos del ensayo que se investigaron como
se describe en profundidad en el punto 4.8. el tamaño y forma y sus efectos, la anisotropía
Aunque puede realizarse con probetas en forma y la influencia del contenido de agua en los
de bloques más o menos paralelepipédicos, e resultados.
incluso irregulares, el ensayo más ortodoxo6 es El ensayo de PLT en trozos irregulares, desa-
el realizado con probetas cilíndricas sometidas a rrollado en Rusia, es descrito por Protodyakonov,
carga diametral o axial (Ver Figura 10 y 28). M. (1960) obteniendo un índice de fuerza, que
El área de la sección teórica de rotura no tiene divide la carga de rotura por los 2/3 del volumen
por que coincidir con el área de la sección real de la muestra, siendo esta una aproximación a la
de rotura que incluso puede estar formada por sección transversal de la masa. El volumen lo de-
varias superficies de rotura. Así, por ejemplo, en terminó, utilizando la técnica de desplazamien-
el caso a) de la Figura 10, la sección teórica de to de la arena. El departamento internacional de
rotura será siempre la misma (la sección axial del Mecánica de Rocas (1964) incorporó el ensayo
cilindro sometido a ensayo), por muy sinuosa de Protodyakanov siendo una tecnología están-
que sea la superficie o superficies de rotura7 y lo dar, como se describe a continuación:
mismo ocurrirá con los casos b) y c), en los que la
sección teórica de rotura es la sección diametral Testigos con formas irregulares con forma de
recta de la probeta. “huevo” con unas relación de especímenes
entre su diámetro mayor y su diámetro me-
nor de aproximadamente 1,5:1,0 y volumen
de unos 100 cm3, obteniéndose con trozos de
roca utilizando cualquier método de tallado y
redondeando las muestras por golpes de mar-
tillo. Para la realización del ensayo, no debe
haber más de 15 a 25 ejemplares con una di-

ferencia de masa inferior al 2%.
En gran Bretaña, el método fue examinado

Figura 10. Modos de rotura típicos en por Hobbs, D. (1963) con la vista a la clasificación
probetas cilíndricas de rocas sedimentarias. Su principal crítica
del método de Protodyakanov, era que en las
Los primeros indicios del ensayo de rocas estratificadas en el eje longitudinal de
resistencia a Carga Puntual datan del año 1972, una masa irregular, por lo general coincidían
en una publicación de International Journal of con el plano de la estratificación, mientras
Rock Mechanics and Mining Sciences, volumen que la prueba requería que sea perpendicular.
6
Al menos es la modalidad de ensayo que mejor permite la reproducibilidad de condiciones de ensayo y que más se presta al estudio
teórico de los procesos de tensión-deformación que se producen.
7
Siempre que sea una rotura válida; se considera rotura valida aquella en la que todas las superficies de rotura producidas pasan por
los puntos de aplicación de la carga (ver Figura 31 del punto 4.8).
31
Por lo tanto, la preparación de la muestra fue es inexacta y difícil, como son las mediciones de
difícil. El autor, también expreso la opinión de la densidad o de la zona de contacto de la platina.
que las medidas de fuerza no deberían limitarse Hiramatsu, Y. y Oka, Y. (1966) dieron una for-
a una sola orientación de las láminas y que mulación alternativa que evita estos problemas
deberían tenerse en cuenta las variaciones de la prácticos, expresando la fuerza en términos de
fuerza con el tamaño de la muestra. Hobbs, D., la proporción de la carga de rotura, dividida el
(1963), utiliza un sistema alternativo en trozos cuadrado de la distancia entre los puntos de con-
irregulares, por lo general en forma de placas tacto de la platina. Esta distancia puede ser fácil
de lados paralelos que se obtienen fácilmente de medir con precisión. Ellos demostraron que
de las rocas sedimentarias, se han comprimido este tipo de formulación se aplica exactamente
entre los planos, con la dirección de compresión para cargar una esfera elástica entre los puntos
perpendicular al plano de las laminaciones. a lo largo de un diámetro y es una buena aproxi-
El índice de la fuerza se obtiene dividiendo la mación para trozos irregulares y otras formas de
carga de ruptura, por una superficie media la muestra.
perpendicular a la dirección de la carga; esta Los autores han utilizado el ensayo de Carga
área se calcula como el cociente de la masa de la Puntual, para trozos irregulares en estudios de
muestra por el producto de la altura de la muestra erosión de rocas. Las pruebas resultaron adecua-
y la densidad. También se utiliza un índice que das para este fin, debido a que la matriz rocosa no
se obtiene dividiendo la carga de rotura entre el estaba disponible y las rocas exteriores se podían
área de contacto de la platina, medido mediante desmenuzar con los dedos; si se hubiera intenta-
la interposición de hojas de papel carbón y papel do tallar las rocas para ensayos con forma regular
cuadriculado entre la muestra y las platinas. se hubieran encontrados con muchos problemas.
Una técnica similar fue descrita por Evans, I. y Pruebas con trozos irregulares se utilizaron en
Pomeroy, C. (1966) y fue utilizado con éxito por Bordeaux, Francia para clasificar la resistencia
Pigeon, Y. (1969) al investigar el comportamiento de los pilares de piedra caliza en una zona débil,
de materiales de escollera. debajo de la ciudad. También en Canadá el en-
En Francia, la prueba ha sido investigada por sayo para trozos irregulares se ha utilizado para
Dibrnat, F., y Duffaut, P. (1966), tomando como clasificar y hacer un mapa de las variaciones de
punto de partida la prueba descrita por Proto- las fuerzas en granitos, donde la caolinización de
yakanov, estaban especialmente preocupados las rocas había dado a lugar a un debilitamiento
por la influencia del tamaño, forma y orienta- considerable.

ción de la masa en los resultados de la prueba. La dispersión de los ensayos de trozos irregu-
Demostraron que la fuerza de rotura registrada lares, pueden ser en cierta medida compensada
podría ser casi el doble si el tamaño de la muestra por el gran número de ensayos (la prueba es rá-
se hubiera reducido a la mitad, o si el eje mayor pida) y tomando el valor de la mediana como un
del testigo fuese perpendicular a la carga aplica- índice. Esto no supera los problemas debido a la
da. Sus estudios experimentales fueron analiza- influencia del tamaño de la muestra, la forma, la
dos por esfuerzos foto-elásticos usando modelos normalización, todos estos efectos son necesa-
planos de varias formas. Estas revelaron que la rios corregirlos.
fuerza en especímenes delgados es muy sensible, En los Estados Unidos, Reichmuth, D. (1963)
a la longitud mas corta y los llevo a recomendar llevó a cabo un estudio experimental de los efec-
la prueba con la carga aplicada en calidad a lo lar- tos de tamaño y de forma de los ensayos de Carga
go del eje menor de la muestra. La funcionalidad Puntual. Su punto de partida fue una formulación
de la fuerza de las formulaciones propuestas an- simple para la fuerza, similar a la de Hiramatsy
teriormente puede ser cuestionada, la medición y Oka, en trabajos posteriores a esta formula-
del volumen a través del desplazamiento de arena ción, se fue modificando progresivamente, para
32
poderse adaptar a las curvas empíricas de los re- La influencia del contenido de agua en la
sultados experimentales. Sus formulas modifica- resistencia a Carga Puntual
das, una que incluía el valor de la resistencia a En la compresión uniaxial de las rocas, a
compresión, eran complicadas y su valor práctico medida que se satura el material su resistencia
fue cuestionado. Después que Reichmuth traba- disminuye (ver Figura 11).
jo en la oficina de Minas de los Estados Unidos, En la Tabla 3 se observa que tres tipos de ro-
uso la prueba diametral en un intento de la pre- cas fueron sometidas al ensayo de Carga Pun-
dicción de la fuerza de compresión. El ensayo de tual a testigos diametrales, quienes observaron
Carga Puntual dio la más alta correlación con la hasta una reducción del 33% con respecto a
resistencia a compresión uniaxial (con un coefi- muestras secas en la estufa, e incluso la muestra
ciente de correlación de 0.947). de granito con cero en la porosidad mensura-
McWilliams, J. (1966) utilizó el ensayo de Carga ble, sufrió un 13% de reducción de su resisten-
Puntual para estudiar la relación de la debilidad cia. Los investigadores sugieren que el ensayo
en rocas planas con defectos microestructurales se debe realizar con las muestras saturadas,
en el material rocoso. Las rocas fueron talladas para ensayos de clasificación. Estrictamente,
con sierras circulares y ensayadas de la forma las muestras, se deben almacenar bajo el agua
axial, rompiéndose muy cerca del plano de falla por varios días, antes del ensayo. Sin embargo,
de la roca. En Noruega, la prueba diametral se la diferencia entre las muestras completamente
ha usado desde 1965. Los primeros en aplicarla y/o parcialmente saturadas es probable que sean
en investigación fueron Bergh-Christensen, J. pequeñas (Figura 11).
(1970) y Selmer-Olsen, R. (1970).
Figura 11. Influencia del contenido de agua

en la resistencia a compresión uniaxial
(Colback, P. y Wild, B., 1965)
33
Tabla 3. Influencia del contenido de agua en los gulares) como varía D, cada valor del índice Is se
resultados de resistencia a Carga Puntual-diametral cálculo individualmente, luego se corrige por ta-

Muestra
Muestras
Muestra de arenisca de arenisca
maño y la mediana se deja para el final.
de granito

206
de Darley Dale 215 de Pennant Es difícil, quizás incluso incorrecto, especificar
219
un cierto número de ensayos mínimos que deban
'LiPHWURGHOQ~FOHRPP 38 38 25 23-5
realizarse. A menudo los suministros de testigos
3RURVLGDG 0-0 12-5 12-5 1-6
de roca están limitados y en otros casos son
IsVHFDGRDOKRUQR01P2) 10-6 3-5 4-2 10-9 abundantes. En los casos que son limitados, los
IsVDWXUDGR01P ) 2
9-2 2-4 2-8 8-5 índices obtenidos son mejor que nada, siempre
5HGXFFLyQGHODUHVLVWHQFLD 13-3 30-3 33-0 22-0 que la limitada precisión de los resultados se
(Franklin, J. y Broch, E. 1972). tenga en cuenta.
Los investigadores, han realizado una larga
Número de ensayos y cálculo serie de ensayos para obtener una orientación so-
de los resultados bre la influencia del número óptimo de ensayos
El índice de la fuerza puede ser obtenido como y sobre la exactitud de los resultados. Se obtuvie-
media o el promedio de los resultados de los en- ron, tanto la media y la mediana del Is en donde
sayos. La mediana es preferible si se tiene pocas se traza con el número de ensayos realizados (Fi-
probetas, porque esta es menos sensible a los re- gura 12).
sultados extremos y también implica menos cál- Como se puede observar en la Figura 12, la
culo y por lo tanto menos probabilidad de error. media y la mediana difieren en menor medida de
La mediana de un conjunto de resultados puede unos a otros después de 10 a 12 ensayos solo se ob-
ser obtenida por la supresión sistemática de los serva una ligera mejora en la exactitud del índice
valores más altos y más bajos, hasta que queden de Carga Puntual. Se recomienda que cuando se
dos valores. En la prueba de testigos diametrales, cuenta con pocos testigos de cada muestra, se rea-
donde el D es constante, se puede encontrar la licen los ensayos con testigos diametrales y axiales.
mediana de la carga P y a continuación, calcular En ensayos con testigos irregulares, el número
el índice Is y después ser corregirlo por tamaño. de muestras debe ser aproximadamente el doble de
En las pruebas globales (testigos axiales o irre- los ensayos con testigos diametrales y axiales.
Figura 12. Variación de la media y mediana del ensayo a Carga Puntual

diametral en función del número de ensayos
(Franklin, J. y Broch, E. 1972)
34
Análisis del ensayo de Carga Puntual El valor de βplaca se puede obtener por la regla
El estado de esfuerzo dentro de una roca bajo la de integración de Simpson (Press et al, 1992),
Carga Puntual, no ha sido resuelto analíticamente encontrándose que:
de un modo satisfactorio. Peng (1976), utilizo para
el método de elementos finitos para analizar el 0 ≤ υ ≤ 0,5 → 0,7043 ≤ β placa ≤ 0,3135 (15)
estado de esfuerzo en el interior de la muestra,
definiéndolo de una manera compleja. En la ecuación (13), cuando D/L tiende a in-
La solución analítica más aproximada la finito (lo que correspondería a una probeta de
desarrollo Wijk (1978), basándose en los análisis muy poco espesor frente a su extensión):
de placas de Dougall (1904).
Wijk obtuvo para la tensión de tracción8, la D 2 ⋅ L2 ⋅υ
→∞ ⇒ →0 ⇒
siguiente aproximación en el centro de una pro- L π ⋅ D2
beta cilíndrica de un sólido isotrópico sometido
⎛ 2 ⋅ L2 ⋅υ ⎞
al ensayo de carga axial: α = ⎜⎜ β placa + ⎟ → β placa (16)
⎝ π ⋅ D 2 ⎟⎠
⎛ 2 ⋅ L2 ⋅υ ⎞ ⎛ P ⎞ ⎛P⎞
σ t = −⎜⎜ β placa + ⎟⋅
2 ⎟ ⎜ 2 ⎟
= −α ⋅ ⎜ 2 ⎟ (13) En la Figura 13 se muestra la variación del
⎝ π ⋅D ⎠ ⎝ L ⎠ ⎝L ⎠ coeficiente de tensión de tracción, α, frente al
coeficiente de Poisson y la relación D/L.
donde: P es la carga de rotura
1.6
L la altura del cilindro ensayado D/L=
D el diámetro cilindro ensayado 1.4 0.5
1.0 D
υ coeficiente de Poisson 1.2
1.5
βplaca es el denominado “coeficiente de 2.0
1 L
placa” ∞
α se le denomina “coeficiente de α
0.8
tensión de tracción”. 0.6
0.4
Físicamente, el coeficiente de placa, βplaca, es el
0.2
factor de concentración de esfuerzo en el centro
de una placa infinita de espesor L bajo una Carga 0

0 0.05 0.1 0.15 0.2 0.25 0.3 0.35 0.4 0.45 0.5
Puntual de magnitud P.
v
El coeficiente de placa se evalúa con la
expresión: Figura 13. Valores teóricos del coeficiente de tensión de
∞
2 ξ ⋅ dξ tracción según el coeficiente de Poisson y la relación D/L
β placa = ⋅ ∫ ⋅
π 0 sinh(2 ⋅ ξ ) + 2 ⋅ ξ (Chau y Wong, 1996)
{ξ ⋅ cosh(ξ ) − (1 + 2 ⋅υ ) ⋅ sinh(ξ )} (14) Según Chau y Wong (1996) se puede conside-

rar que la tensión de tracción, σt, obtenida con la
donde: ξ es el amortiguamiento critico efec- ecuación (13) corresponde a la resistencia a trac-
tivo ción simple del material, To.
υ coeficiente de Poisson. Esa consideración es lo mismo que suponer
que la superficie de rotura (caso a de la Figura
8
Se introduce en la expresión el signo negativo para conservar el criterio de signos habitual en Geotecnia, según el cual se consideran
positivas las compresiones y negativas las tracciones.
35
10) se produce por un esfuerzo de tracción cuya Sin embargo es plausible un criterio unificado
magnitud viene dada por la ecuación (13) y que la del crecimiento de las microfisuras:
tensión de tracción se desarrolla uniformemente
en toda la superficie. K I = K IC (18)
La hipótesis anterior sería necesario justifi-
carla con estudios teóricos, pues como señaló Siendo KI el factor de intensidad de tensiones
Wijk (1978) en realidad la expresión (13) solo del modo I, y KIC la tenacidad de la fractura; nótese
proporciona la tensión en el centro de la muestra que KI depende de la geometría de la microfisura
aproximadamente. y del tipo de carga, y KIC es un parámetro local
Pero bajo las anteriores hipótesis la resistencia próximo a la inclinación de la fisura que significa
a tracción simple se puede estimar con las ecua- el campo de tensión local.
ciones (13) y (14), en función de D, L, P y υ. Por lo tanto es teóricamente posible unificar
El siguiente paso es relacionar la resistencia los dos tipos de rotura mediante una única teoría
a tracción simple y la Resistencia a Compresión tridimensional de microfisuras, por ejemplo,
Simple; Chau y Wong proponen un ratio fijo que el modelo de microfisura de Costin (1986) que
correlaciona la resistencia a tracción simple (To) predice:
y a compresión simple (Co), del tipo:
⎡ ⎤
Co = χ ⋅ To (17) ⎢ ⎥
1 ⎢
⋅ ⋅ ⎥
2 2 ⎢
1 ⎛ f ⋅d ⎞ n S n
⎥
K I = ⋅ (π ⋅ a ) ⋅ ⋅ σ kk + ⎜ ⎟⋅
i ij j
Aunque los modelos de grietas de corte, se π ⎢3 ⎝ a ⎠ ⎡ ⎛ a ⎞2 ⎤ ⎥
12
han aplicado satisfactoriamente para explicar la ⎢ ⎢1 − ⎜⎜ ⎟⎟ ⎥ ⎥

histéresis observada bajo cargas cíclicas en la zona ⎢
⎣ ⎢⎣ ⎝ d1 ⎠ ⎥⎦ ⎥⎦
dilatante de la curva tensión-deformación bajo
compresión uniaxial, Tapponnier y Brace (1976), (19)
estudiando la evolución de las microfisuras con
microscopio electrónico, encontraron que la donde: a = a(n) es el radio de la microfisura, que
mayor parte de ellas son de tracciones naturales, depende de la orientación del
incluso bajo compresión uniaxial y obtuvieron vector normal (n) a la superficie
el un criterio de crecimiento de las microfisuras de la misma.
(Ecuación 18). d representa el tamaño de la zona

Así pues Chau y Wong asumen que el meca- con tracción local causada por
nismo de rotura de los ensayos de compresión y la compresión; físicamente es el
tracción uniaxial son tracciones naturales y en tamaño de las heterogeneidades,
ambos son causadas por el crecimiento inestable responsables de la generación
de las microfisuras (si no hay una superficie de local de tensiones de tracción.
rotura preexistente en la muestra de roca). d1 es la distancia entre microfisu-
Generalmente bajo compresión uniaxial, la ras interactuantes. Aproximada-
secuencia de propagación estable de las microfi- mente a, d y d1 tienen un orden
suras ocurre antes de ser alcanzada la resistencia de magnitud del tamaño de gra-
a compresión, mientras que el crecimiento ines- no, y en general: a < d < d1.
table de las microfisuras ocurre poco después Sij es el tensor desviador de tensio-
de que las fisuras son activadas bajo la tensión nes: S ij = σ ij − 1 ⋅ δij ⋅ σ kk
3
uniaxial. f es una constante de
proporcionalidad determinada
experimentalmente.
36
El factor de intensidad del esfuerzo, KI, la orientación n de la fisura. Esta claro que ese
predicho por la ecuación (19), depende solo de término será máximo si:
la microestructura de la roca, pero es insensible a n12 + n22 = 0 ⎫⎪
⎬ → n3 = 1
2
la forma y el tamaño de la probeta. Esa hipótesis (24)
es válida, siempre y cuando el tamaño del grano y como : n1 + n2 + n3 = 1 ⎪⎭
2 2 2
sea relativamente pequeño, en comparación con

la dimensión mínima de la muestra. Por tanto las primeras fisuras que se activan
En cualquier estado de tensiones, la longitud son todas las horizontales puesto que son nor-
de una grieta a(n) debe circunscribirse a la si- males (n3 = 1) al eje x3.
guiente desigualdad, resultante de combinar las La tensión de tracción que se requiere para la
ecuaciones (18) y (19): iniciación del crecimiento de las fisuras horizon-
tales resulta entonces:
1 π ⋅ K IC 3 ⋅ π ⋅ K IC
ni ⋅ S ij ⋅ n j + ⋅ σ kk − ≤0 (20) σt = (25)
3⋅ F 2 ⋅ F ⋅ (π ⋅ a )1 2 1
2 ⋅ (π ⋅ ao ) ⋅ [2 ⋅ F (ao ) + 1]
2
donde F = F(a) se define como: Del mismo modo, si se aplica una tensión unia-
xial de compresión según el eje x3 (σ33 = – σc),
⎛ f ⋅d ⎞ 1
F (a) = ⎜ ⎟⋅ 12
(21) se obtiene una desigualdad similar a (23):
⎝ a ⎠ ⎡ ⎛ a ⎞2 ⎤
π ⋅ K IC
⎢1 − ⎜⎜ ⎟⎟ ⎥
⎢⎣ ⎝ d1 ⎠ ⎥⎦
1
3
[
⋅ σ c ⋅ (n12 + n22 ) − 2 ⋅ n32 −
1
]
3⋅ F
⋅σ c −
2 ⋅ F ⋅ (π ⋅ a )1 2
≤0
(26)
Cuando la desigualdad (20) se satisface, ocu-
rre la propagación de microfisuras. Y la mínima tensión de compresión uniaxial
Chau y Wong (1996) consideran el caso parti- que causa el inicio del crecimiento de las fisuras
cular en el que la tensión uniaxial de compresión se obtiene también maximizando el primer tér-
o de tracción se aplica a una probeta de roca que mino de la desigualdad (26); en este caso:
tiene una distribución isotrópica de microfisuras
preexistentes de longitud ao. n32 = 0 ⎫⎪
⎬ → n1 + n2 = 1
2 2
Si se aplica una tensión uniaxial de tracción y como : n1 + n2 + n3 = 1 ⎪⎭
2 2 2
según el eje x3 (σ33 = σt, σij = 0), las componentes
no nulas del desviador de tensiones son: (27)
1 2
S11 = S 22 = − ⋅ σ t ; S 33 = ⋅σ t (22) Esto implica que las primeras grietas en ac-
3 3 tivarse son verticales, con una orientación n
sustituyendo (22) en (20): arbitraria en el plano x1, x2.
Esto concuerda con las observaciones experi-
π ⋅ K IC
1
3
[
⋅ σ t ⋅ 2 ⋅ n32 − (n12 + n22 ) +
1
]
3⋅ F
⋅σ t −
2 ⋅ F ⋅ (π ⋅ a )1 2
≤0 mentales en las que se aprecia que las primeras
grietas en aparecer son paralelas a la dirección
(23) uniaxial de compresión.
La tensión de compresión para la iniciación
La tensión de tracción mínima, que se re- del crecimiento de las fisuras (o dilatancia) es por
quiere, para iniciar el crecimiento de las fisuras tanto:
se obtiene maximizando el primer término de 3 ⋅ π ⋅ K IC
σc = (28)
2 ⋅ (π ⋅ ao ) 2 ⋅ [F (ao ) − 1]
1
la izquierda de la desigualdad (23), respecto de
37
De las ecuaciones (25) y (28) se obtiene que: Donde χ es una constante que depende del
tipo de roca.
3 ⋅ π ⋅ K IC ⎫ De (32), (13) y (14):
σt = 1 ⎪ 2
⎛L ⎞
2 ⋅ (π ⋅ ao ) ⋅ [2 ⋅ F (ao ) + 1] ⎪⎪
2
C o = α ⋅ χ ⋅ ⎜ 50 ⎟ ⋅ I s (50 ) = β ⋅ I s ( 50 ) (33)
⎬→ ⎝ L ⎠
3 ⋅ π ⋅ K IC ⎪
σc = Donde L50 / L es la corrección por tamaño de
1
⎪
2 ⋅ (π ⋅ ao ) 2 ⋅ [F (ao ) − 1] ⎪⎭ la probeta si se utiliza Is(50) definido como:
P
I s (50 ) = (34)
⎧ 2 ⋅ F ( ao ) + 1 L250
⎪σc = ⋅σ t → (29)
⎨ F ( ao ) − 1 Se puede observar que, según la expresión
⎪ → σc >σt (35), el coeficiente β, de correlación entre la
⎩
Resistencia a la Carga Puntual y la Resistencia a
Pero esa relación es entre las tensiones de Compresión Simple, tiene la expresión:
compresión y tracción necesaria para iniciar el 2
⎛L ⎞
crecimiento de las fisuras; para obtener la relación β = α ⋅ χ ⋅ ⎜ 50 ⎟ (35)
entre la resistencia a tracción y la resistencia a ⎝ L ⎠
compresión, se tiene que aumentar el esfuerzo Y por tanto depende del coeficiente de Poisson
aplicado hasta que la propagación de las fisuras (υ), de la distancia entre los puntos de aplicación
sea inestable. de la carga (L), del ratio entre la Resistencia a
Con el criterio de crecimiento de las micro- Compresión Simple y a tracción simple (χ) y de
fisuras indicado en (18), la propagación es es- la relación de forma de la probeta (L/D).
table, con el crecimiento del tamaño a de las En la Tabla 4 se resumen los resultados ob-
grietas se conduce al decrecimiento de Ki, es tenidos por Chau y Wong (1996) para distintos
decir: tipos de roca. En dicha Tabla los parámetros υ y
⎧ ∂K I χ se han tomado de Goodman (1989), mientras
⎪ <0 →
crecimiento estable → ⎨ ∂a (30) que α y β se han calculado con las expresiones
⎪⎩ → K I < K IC (13), (14) y (35).
y dicho crecimiento será inestable cuando: Tabla 4. Valores de los parámetros υ, χ, α y k

para diferentes tipos de roca
⎧ ∂K I
⎪ ≥0 Tipo de roca υ χ α k
crecimiento inestable → ⎨ ∂a (31)
Arenisca Berea
⎪⎩ K I = K IC
$UHQLVFD1DYDMR
Chau y Wong (1996) utilizaron un procedi- /LPROLWDGH+DFNHQVDFN
miento iterativo para chequear el cumplimiento &DOL]DGH6ROHQKRIHQ
de (17) con cada incremento de tensión, y simu- &DOL]DGH%HGIRUG
laciones numéricas con las ecuaciones (18) y (19), &DOL]DGH7DYHUQDOOH
tanto bajo compresiones uniaxiales como con 'RORPLWDGH2QHRQWD
tracciones uniaxiales, con ensayos realizados en
'RORPLWDGH/RFNSRUW
mármoles, granitos y tobas, concluyendo que:
(VTXLVWRGH)ODPLQJ*RUJH
To = To (a, d , d1 , f , K IC ) ⎫ (VTXLVWRPLFiFHR
⎬ Co = χ ⋅ To (32) *QHLVGH'ZRUVKDN'DP
Co = Co (a, d , d1 , f , K IC ) ⎭
Continúa Tabla 4 →
38
Viene Tabla 4 →
Tipo de roca υ χ α k la rotura y los parámetros de cohesión y roza-

miento:
&XDU]RHVTXLVWRGHPLFD
&XDUFLWD%DUDERR
τ = c + σ n ⋅ tg (φ ) (36)
0iUPROGH7DFRQLF
0iUPRO&KHURNHH donde: τ tensión tangencial sobre el plano de
*UDQLWRGH1HYDGD rotura
*UDQLWRGHOSLFR3LNH σn tensión normal sobre el plano de
7RQDOtWLFRVGH&HGDU rotura
'LDEDVDGHORV3DOLVDGHV c cohesión de la matriz rocosa
%DVDOWRGH1HYDGD
Ø ángulo de rozamiento de la matriz
rocosa
%DVDOWRGH-KRQ'D\
7REDGH1HYDGD
El criterio puede expresarse igualmente en
(Chau y Wong, 1996) función de los esfuerzos principales:
CRITERIOS DE ROTURA DE LA MATRIZ ROCOSA f (σ 1 ;σ 3 ; c;φ ) →
La resistencia de la matriz rocosa se puede 2⋅c + σ3 [sen (2⋅θ ) + tg (φ ) ⋅ (1− cos(2⋅θ )] (37)
σ1 =
evaluar mediante diversos criterios de rotura, sen (2 ⋅ θ ) − tg (φ ) ⋅ (1 + cos(2 ⋅ θ )
entre los que se puede destacar los criterios de
rotura de Mohr-Coulomb y el de Hoek y Brown. Si se da la condición σ3 = 0, entonces σ1 será la
La principal diferencia entre ambos, además, Resistencia a Compresión Simple de la roca:
de los parámetros representativos de la roca 2 ⋅ c ⋅ cos(φ )
con los que se relaciona el estado tensional, es σ1 = σ c = (38)
1 − sen (φ )
el criterio lineal en el primero y no lineal en el
segundo, siendo este última, el más adecuado al El criterio también proporciona el valor de la
comportamiento real de las rocas. resistencia a tracción:
Además, se han desarrollado muchos otros 2 ⋅ c ⋅ cos(φ )
criterios por diferentes autores, generalmente σt = (39)
con menor difusión y aplicación; en el apartado 1 + sen (φ )

4.3 ya se describió el criterio de Griffith, que, La gran ventaja de este criterio es su sencillez,
como se dijo, tiene el atractivo de estar basado en sin embargo presenta inconvenientes debido a que:
fundamentos teóricos, pero que sus resultados se t Las envolventes de la resistencia en roca
apartan de la realidad. no son lineales; se ha comprobado experi-
Es interesante la recopilación realizada por mentalmente que la resistencia de las ro-
Sheorey (1997), que recoge en detalle los prin- cas, aumenta menos con el incremento de
cipales criterios de rotura aplicados en mecánica la presión normal de confinamiento que lo
de rocas. A continuación se describen los crite- obtenido al considerar una ley lineal; lo que
rios de Mohr-Coulomb y de Hoek-Brown. puede implicar errores al considerar los es-
fuerzos actuantes, sobre todo en zonas de
Criterio de Mohr-Coulomb esfuerzos bajos confinantes.
Expresa la resistencia a corte a lo largo de un t La dirección del plano de la fractura según
plano, mediante la relación entre los esfuerzos este criterio, no siempre coincide con los re-
normal y tangencial actuantes en el momento de sultados experimentales.
39
t El criterio sobrevalora la resistencia a la para macizos perturbados por

tracción. voladuras:
RMR −100 RMR −100
No obstante, si se utiliza este criterio lineal m = mi ⋅ e 14
s=e 6 (43)
de rotura para evaluar la resistencia de la matriz
rocosa, es conveniente: siendo RMR el índice de la clasificación
t Suponer que el valor de la cohesión es un geomecánica de Bieniawski y mi
valor próximo al 10% de la Resistencia a una constante que depende de las
Compresión Simple de la matriz rocosa. características de la matriz rocosa
t Adoptar un valor del ángulo de rozamiento y que debe obtenerse experimen-
interno según el nivel de tensiones con el talmente; en la siguiente tabla se
que trabaja, tomando ensayos específicos o adjuntan algunos ejemplos de los
tablas. valores más representativos:
Criterio de Hoek y Brown Tabla 5. Algunos valores para la constante mi

Hoek y Brown (1980) propusieron una parti- mi Tipo de Roca Ejemplos
cularización, para la matriz rocosa, del criterio
general de rotura para macizos rocosos isótro- 0HWDPyU¿FDHtJQHD *UDQLWR*QHLV*DEUR
25
FULVWDOLQDGHJUDQRJUXHVR Cuarcita.
pos, fracturados y sin alterar:
17 ËJQHDFULVWDOLQDGHJUDQR¿QR $QGHVLWD'LDEDVD5LROLWD
σ1 = σ 3 + m ⋅σ c ⋅σ 3 + s ⋅σ c 2
(40) $UHQLVFRVDFULVWDOLQDFRQ
15 $UHQLVFD&XDUFLWD
SRFRFOLYDMH
Que se suele expresar en términos de esfuerzos 10 $UFLOORVDOLWL¿FDGD (VTXLVWR3L]DUUD/XWLWD
normalizados respecto a σc:
7 &DUERQDWDFRQEXHQFOLYDMH &DOL]D'RORPtD0iUPRO
1
σ1 σ 3 ⎛ σ 3 ⎞ 2 (Tomado de Serón, 2008).
= + ⎜⎜ m ⋅ + s ⎟⎟ (41)
σc σc ⎝ σc ⎠ El criterio fue generalizado9 (Hoek y Brow,
1988, 1998) para macizos rocosos alterados y de
donde: σ1 y σ3 son las tensiones principales ma- mala calidad:
yor y menor en rotura α

σ1 σ 3 ⎛ σ 3 ⎞
σc es la Resistencia a Compresión = + ⎜⎜ m ⋅ + s ⎟⎟ (44)
Simple de la matriz rocosa σc σc ⎝ σc ⎠
m y s son constantes adimensionales
que dependen de las propieda- donde: σ1, σ3 y σc tienen el mismo significado que
des del macizo rocoso, del tipo de en la versión anterior
matriz rocosa y de las caracterís- m, s y α son constantes adimensiona-
ticas de las discontinuidades, que les, que dependen de las pro-
se obtenían con: piedades del macizo rocoso,
para macizos en estado natural: del tipo de matriz rocosa y de
las características de las dis-
RMR −100 RMR −100 continuidades, que ahora se
m = mi ⋅ e 28
s=e 9 (42) obtenían en función del GSI:
9
Fue generalizado a lo largo de la década 1988-1998 y recibió el nombre de “Criterio Generalizado de Hoek-Brown”.
40
GSI −100 GSI es el denominado “Geological Strength

m = mi ⋅ e 28 ( para cualquier valor de GSI) Index” (Índice Geológico de Resistencia), que,
⎧s = 0 originalmente, se evaluaba con el RMR:
⎪
⎪ GSI
si GSI < 25 → ⎨α = 0,65 − GSI = RMR89, básico, seco − 5 (46)
⎪ 200
⎩⎪(macizos de mala a muy mala calidad) donde era necesario indicar que se trataba de la
⎧ GSI −100 versión de 1989 del RMR, básico (sin corregir
⎪s = e por la orientación de las discontinuidades) y seco
9
⎪ (es decir, considerando que no hay presencia de

si GSI > 25 → ⎨α = 0,5
⎪(macizos de media a muy buena calidad) agua en el macizo).
⎪ Posteriormente la evaluación del GSI se
⎩
realizaba, independientemente del RMR, y
(45) cualitativamente, con el gráfico de la Figura 14.
Figura 14. Gráfico para la evaluación del GSI

41
Diversos colaboradores como Hoek y Marinos De los criterios de Hoek et al, se pueden ob-
(2000), Hoek, Carranza-Torres y Corkum (2002), tener la Resistencia a Compresión Simple y a
han realizado nuevas revisiones del criterio tracción del macizo rocoso (σ*c y σ*t), haciendo
(2000 edition, 2002 edition, etc), introduciendo σ3 = 0 y σ1 = 0 respectivamente.
en la evaluación de m y s un nuevo parámetro D Con el criterio de 1980 se obtiene:
que depende del grado de alteración del macizo 1
sujeto a voladuras y relajación de tensiones10. σ *c = σ c ⋅ s 2
( )
En la “2002 edition”, y usando la terminología 1
de Hoek et al, el criterio de rotura tiene la σ *t = ⋅ σ c ⋅ m − m2 + 4 ⋅ s (51)
expresión: 2
a Con el criterio generalizado la σ*t no es
⎛ σ 3′ ⎞ explícita:
σ 1′ = σ 3′ + σ ci ⎜⎜ mb ⋅ + s ⎟⎟ (47)
⎝ σ ci ⎠ σ *c = σ c ⋅ sα
α
σ *t ⎛ σ *t ⎞
donde: σ’1, σ’3 tensiones principales efectivas + ⎜⎜ m ⋅ + s ⎟⎟ = 0 (52)
mayor y menor en rotura σc ⎝ σc ⎠
σci Resistencia a Compresión Simple
de la matriz rocosa Y con el 2002 edition:
mb constante adimensional depen-
diente de mi, GSI y D: σ *c = σ ci ⋅ s a
a
σ *t ⎛ σ* ⎞
GSI −100 + ⎜⎜ mb ⋅ t + s ⎟⎟ = 0 (53)
mb = mi ⋅ e 28 −14 ⋅D (48) σ ci ⎝ σ ci ⎠
mi constante adimensional que de- Para la resistencia a tracción, con σ’1 = σ’3 = σ*t
pende de la matriz (esto representa condiciones de tensión biaxial):
GSI índice geológico de resistencia,
s ⋅ σ ci
que se evalúa cualitativamente σ *t = − (54)
con gráficos (Figura 14) mb
D factor que varía de 0 a 1, que En el criterio de rotura para la matriz rocosa,
depende del grado de alteración se puede considerar el caso particular del macizo
del macizo sujeto a voladuras y totalmente sano (GSI = 100; D = 1, y por tanto mb
se evalúa según las indicaciones = mi; s = 1; a = 0,5):
(Figura 15) f (σ 1 ;σ 3 ; mi ;σ c ) → σ 1 = σ 3 + mi ⋅ σ c ⋅ σ 3 + σ c
2
s, a constantes adimensionales que

dependen del macizo, que se (55)
evalúan con las expresiones:
donde: σ1 y σ3 son las tensiones principales
GSI −100
mayor y menor en rotura
s = e 9−3⋅D (49)
σc es la Resistencia a Compresión
Simple de la matriz rocosa
1 1 ⎛⎜ − 15 ⎞
GSI 20
− mi. es una constante que depende de
a= + ⋅ e − e 3 ⎟ (50)
2 6 ⎜⎝ ⎟
⎠
las características y propiedades
de la matriz rocosa
10
Se suele denominar a este parámetro “factor de disturbancia”
42
Figura 15. Indicaciones para la determinación del parámetro D

43
El criterio anterior, se suele expresar en tér- MÉTODOS DE ENSAYO PARA LA ESTIMACIÓN Y/O
minos de esfuerzos normalizados respecto a la DETERMINACIÓN DE LA RCS
Resistencia a Compresión Simple:
La composición y/o la fabricación de la
1
mayoría de los materiales de construcción, como
σ1 σ 3 ⎛ σ ⎞2
= + ⎜⎜ mi ⋅ 3 + 1⎟⎟ (56) metales y hormigones, es uniforme y homogénea,
σc σc ⎝ σc ⎠ hasta el extremo que las propiedades mecánicas
de estos materiales son virtualmente las mismas
Con el que: que se obtienen en los ensayos de laboratorio.
En las rocas no ocurre lo mismo, los resulta-
para σ 3 = 0 →
dos de los ensayos deben de ser interpretados te-
σ 1 = σ c = Resistencia a compresión simple niendo en cuenta sus limitaciones y el grado de
representatividad. Los métodos experimentales
para σ 1 = 0 → para determinar la resistencia de las rocas son in-
σ 3 = σ t = Resistencia a tracción dependientes del criterio de rotura adoptado en
cada caso; su finalidad es establecer las relaciones
1
= ⋅ σ c ⋅ (mi − mi2 + 4 ) (57) entre los esfuerzos y las deformaciones durante el
2 proceso de carga y rotura, los esfuerzos a que está
sometida la roca en el momento de la rotura y sus
parámetros resistentes.
Estos métodos son ensayos que se pueden
realizar en campo y/o laboratorio y como defi-
nió Serón, J. B., (2007) su obtención va desde una
estimación meramente subjetiva hasta una me-
dición directa (Tabla 6). Con cualquiera de estos
métodos es posible obtener, o al menos estimar
(con más o menos precisión), la Resistencia a
Compresión Simple σc.
Compresión
Tabla 6. Métodos para determinar
Uniaxial
la Resistencia a Compresión simple
Aplicación en Método Se obtiene σc por

Compresión
Uniaxial
ËQGLFLHVPDQXDOHV
(VWLPDFLyQVXEMHWLYD
(QVD\RRUJDQROpSWLFR
&DPSR
(VFOHUyPHWURRPDUWLOORGH
(VWLPDFLyQREMHWLYD
6FKPLGW
&RPSUHVLyQ3XQWXDO
&RUUHODFLyQGLUHFWD
)UDQNOLQ
Tracción
/DERUDWRULR
(QVD\RGH7UDFFLyQ
&RUUHODFLyQGLUHFWD
Tracción Compresión EUDVLOHxD
Figura 16. Criterio de rotura de Hoek-Brown (QVD\RGHFRPSUHVLyQ

0HGLFLyQGLUHFWD
para la matriz rocosa XQLD[LDO
(González de Vallejo et al, 2002). (Serón, J.B., 2007)
44
Con la realización de un número estadísti- de resistencia de la matriz rocosa en función del

camente representativo de ensayos, se pueden efecto producido descrito en tablas con claves
obtener los valores característicos de los pará- similares a las indicadas en la Tabla 7.
metros resistentes de una roca, a partir de las
fuerzas aplicadas en el momento de la rotura.
Se ha de tener en cuenta que para los ensayos de
rocas en el laboratorio, por lo general, se utilizan
testigos cilíndricos procedentes de sondeos, por
lo que las dimensiones de las probetas suelen ser Figura 17. Ejemplos de maza y martillo de geólogo
siempre pequeñas.
Los ensayos deben ser realizados con proce- Tabla 7. Ejemplo de directrices para realizar el ensayo
dimientos sistemáticos y los resultados deben ser con martillo de geólogo, donde se incluye también la
estadísticamente representativos de la roca a in- escala para suelos para el ensayo manual
vestigar. Grado Descripción Co (Mpa) Ensayo de identificación
Los valores obtenidos dependerán, como se
verá, de: $UFLOODPX\ )iFLOPHQWH SHQHWUDEOH FRQ
S1
t La naturaleza y condiciones de la roca (mi- EODQGD ODPDQRYDULDVSXOJDGDV
neralogía, tamaño de grano y cementación, )iFLOPHQWH SHQHWUDEOH FRQ
S2 $UFLOODEODQGD
HOSXOJDUYDULDVSXOJDGDV
microfisuración, porosidad, grado de me-
teorización, etc.) 3HQHWUDEOHFRQHOSXOJDUFRQ
S3 $UFLOOD¿UPH
HVIXHU]RPRGHUDGR
t Las condiciones del ensayo (forma y volu-
6HGHVPHQX]DFRQHOSXOJDU
men de la probeta, preparación y tallado S4 $UFLOODULJLGD SHURSHQHWUDFRQPXFKRHV-
de la misma, contenido de humedad, tem- IXHU]R
peratura, velocidad de carga, dirección de 6H GHVPHQX]D FRQ OD XxD
aplicación de la carga, rigidez de la máqui- S5 $UFLOODPX\ULJLGD
GHOSXOJDU
na de ensayo, etc.)
t En el caso de los ensayos de estimación sub- S6 $UFLOODGXUD ! 6HSXOYHUL]DFRQHOPDUWLOOR
6H GHVPHQX]D FRQ GL¿FXO-
jetiva, los valores dependerán, lógicamente, 5RFDH[WUHPDGD-
5 WDGFRQODXxDGHOSXOJDU
de la apreciación del operador que los realice PHQWHEODQGD
t En el caso de los ensayos de correlación, será 5RFDPX\ 6HSXOYHUL]DFRQHOPDUWLOOR
5 1-5
muy acusada la dependencia de los valores EODQGD 6HUD\DFRQODQDYDMD
obtenidos de la bondad de dicha correlación. 6HLQGHQWDODSXQWDGHOPDU-
5 5RFDEODQGD 5-25 WLOOR 6H UD\D FRQ GL¿FXOWDG
A continuación se describe brevemente los FRQODQDYDMD
ensayos con el martillo de geólogo (EMG), con el 6H IUDFWXUD FRQ HO PDUWLOOR
5RFDGHUHVLV-
5 25-50 1RVHUD\DQLVHDUDxDFRQ
martillo de Schmidt (EMS) y el ensayo brasileño WHQFLDPHGLD
HOPDUWLOOR
(ETB), para así, en los siguientes puntos describir
6HQHFHVLWDPiVGHXQPDU-
en profundidad el ensayo de compresión uniaxial 5 5RFDGXUD 50-100
WLOOD]RSDUDIUDFWXUDUOD
(ECU) y el ensayo de Carga Puntual (PLT).
6H QHFHVLWD PXFKRV PDUWL-
5 5RFDPX\GXUD 100-250
OOD]RVSDUDIUDFWXUDUOD
Ensayo con el martillo de geólogo
El ensayo con el martillo de geólogo11 (ver ([WUHPDGDPHQWH &RQHOPDUWLOORVRORVHFRQVL-
5 !
Figura 17) consiste en golpear una muestra de dura JXHTXHVDOWHQODVFDV
mano con dicho martillo y estimar un rango (Tomado de Serón, 2008).
11
Se dice “martillo de geólogo” específicamente, con objeto de que la energía de golpeo este más o menos estandarizada, al menos en
lo que a la herramienta se refiere.
45
Ensayo con el martillo de Schmidt

El ensayo con el martillo de Schmidt (ver Figura
18) consiste en golpear la superficie de la roca,
exenta de irregularidades, con dicho martillo
midiendo el rebote de la maza del mismo y
correlacionando dicho rebote con la Resistencia
a Compresión Simple (Figura 19). Figura 18. Martillo de Schmidt y ejecución del ensayo
Figura 19. Gráfica para la determinación de la RCS con el Martillo de Schmidt tipo L
46
Ensayo de resistencia a tracción indirecta muth (1963). La resistencia a tracción para Carga
(ensayo Brasileño) Puntual, se determina aplicando cargas de com-
El ensayo brasileño (ver Figura 20), como se presión puntuales, a la superficie lateral de un tes-
indicó en el apartado 4.3, consiste en someter a tigo cilíndrico con el eje en posición horizontal.
una probeta cilíndrica de longitud (L) y diámetro Las cargas puntuales, se aplican mediante una
(D), a una carga (P) a lo largo de una generatriz. prensa a través de rodillos de acero endurecido
La muestra se suele romper separándose en dos de pequeño diámetro, normales al eje del testigo.
mitades según el eje de carga diametral. Estas cargas producen tracciones perpendiculares
al eje de carga; la resistencia a tracción σtP viene
dada por la ecuación (60) que es empírica:
0.0675 ⋅ P
σ tP = (60)
D2
donde: σtP es la resistencia a tracción del en-
sayo con Carga Puntual
P es la carga de rotura (kg)
D es el diámetro del testigo (cm)
Figura 20. Ensayo de tracción brasileña
Miller (1965), ensayó veintiocho tipos dife-
Se calcula entonces la resistencia a tracción rentes de roca, según este método, encontró que
σtB en rotura mediante la ecuación (58) que da la la resistencia a tracción media σtP estaba relacio-
tracción uniforme que actúa sobre la mayor parte nada con la Resistencia a Compresión Simple σc,
del diámetro, normalmente a la línea que une los según la ecuación:
puntos de carga de acuerdo con la teoría elástica:
2⋅ P σ c = 21⋅ σ tP + 280 (kg/cm 2 ) (61)
σ tB = (58)
π ⋅D⋅L donde: σc es la resistencia a compresión
donde: σtBes la denominada “resistencia a σtP es la resistencia a tracción del en-
tracción brasileña” sayo con Carga Puntual
P es la carga de rotura
D y L son el diámetro y longitud de la Para fines prácticos, probablemente es sufi-

probeta, respectivamente cientemente exacto, en la mayoría de los casos,
suponer una resistencia a tracción del 5 al 10% de
La Resistencia a Compresión Simple, se suele la Resistencia a Compresión Simple (McWillians
correlacionar con la resistencia a tracción brasi- J, 1966).
leña mediante la expresión:
Ensayo de Carga Puntual
σ c ≈ 8 ⋅σ tB (59) Son muchos los autores que han realizado co-
rrelaciones entre el Is(50) y la resistencia última a
donde: σc es la Resistencia a Compresión compresión uniaxial, siendo estas muy generales
Simple y variables. Existen valores de la relación entre σc
σtB es la resistencia a tracción brasi- y Is(50) desde 8 hasta 30, según el tipo de la roca y
leña de sus propiedades (Rusnak, J y Mark, C., 2000).
Algunos de los autores más relevantes que han
Un segundo método indirecto es el ensayo de estudiado esta relación son: Broch, E. y Franklin,
tracción con Carga Puntual, descrito por Reich- J.A. (1972), Bieniawski, Z.T. (1975), Pell, P.J.N.
47
(1975), Haw Kins, A.B. y Olver, J.A.G. (1986), σ c(50) = 18,7 ⋅ I s(50) (62)
Norbury, D.R. (1986), Romana, M. (1999),
Thuro, K. y Plinninger, R.J. (2005), Wiesner, E. Mark, C. (2002), hallan un valor de β=21, con
y Gillate, S.J. (1997), Palchikand, H. Yh. (2004), un software llamado CMRR, que fue diseñado
Tsiambaos, G. y Sabataka, K.S.N. (2004), Akman, para facilitar la entrada de los datos, para el
M. y Bakar, M.Z.A. (2007). almacenamiento y procesamiento de datos en
En 1972, Franklin, J.A. y Bosh, E., obtuvieron el ordenador,. Este software tiene la posibilidad
la primera correlación entre el Is(50) y la RCS, de ingresar los datos del ensayo de PLT y
propusieron el valor de 24, el cual hasta el día de automáticamente determinar la media de la RCS
hoy es muy utilizado, pero hay muchos factores y el diámetro del Is(50).
que afectan a la correlación y las diferencias entre No solamente se hacen investigaciones de
las rocas duras y blandas, recomendando que correlaciones que involucren a la RCS y al Is(50),
se deben obtener estos valores para rocas mas también se ha teniendo en cuenta el tamaño de
específicas. (Marck, C. 2002, Çelik, S.B. 2008, las probetas utilizadas (De2), como lo hacen los
Wong, R.H.C. 1996). Hoek en 1977, dice que el investigadores Wetchasat, K. y Thongthiangdee,
ensayo de RCS es una aproximación suficiente al P. (2003), que adaptaron dos métodos de ensa-
esfuerzo de compresión, pero tiene un problema, yos para ser comparados entre ellos. Utilizando
que es costoso, porque necesita preparar las secciones mínimas entre 7,87 cm2 y 9,75 cm2 y
muestras con las caras perfectamente paralelas, máximas entre 80,33 cm2 y 103,75 cm2, obtuvie-
lo que dificulta la realización de ese ensayo. ron una gráfica en las que relacionan el Is con el
Chau, K. T. y Wong, R.H.C. (1996) hacen un diámetro de la probeta y con el área de la probeta
análisis matemático y de tensiones del ensayo para rocas calizas de Tailandia, determinando las
de PLT. Realizando ensayos a 21 testigos con siguientes ecuaciones:
relación de D/L de 1:2,5 para Resistencia a
Compresión Simple y de 1:1 para Carga Puntual I s = 111,17 ⋅ D −1,975 r = 0,89 (63)
de unas rocas de granito y toba volcánica,
obtuvieron una correlación entre el Is(50) y la RCS I s = 99.171 ⋅ A −0,9569 r = 0,84 (64)
es de β=12,5 con un coeficiente de regresión de
r=0,73. Así mismo Rusnak, J. y Mark, C. (2000) De dichas ecuaciones, se puede concluir, con
involucran más de 10.000 muestras individuales, las correlaciones, que cuando el tamaño de la
de seis estados diferentes de Estados Unidos de muestra decrece, también decrece el índice de re-
América, llegando a un coeficiente de correlación sistencia a Carga Puntual.
β=21, con una regresión cuadrática de r2=0,68. Palchik, V. y Hatzar, Y.H. (2004) proponen
En 2001, Thuro y Plinninger, R.J., obtienen una correlación entre los ensayos de resistencia a
dos correlaciones; la primera para rocas filita Compresión simple, Carga Puntual y carga a trac-
cuarcita, con un valor de β=19,9 y con una ción indirecta “Brasileño”, para rocas calizas poro-
regresión cuadrática de r2=0,96. Sin embargo, sas de Israel. Se prepararon 18 testigos de 52 mm
en la segunda correlación, el resultado de varios de diámetro, obteniendo la siguiente ecuación:
ensayos realizados durante años para rocas ígneas,
metamórficas y sedimentarias (35 diferentes de r = 0,84
I s = 7,74 ⋅ e −0,039⋅n (65)
tipos de rocas), obtuvieron la ecuación (62) con
un r2=0,60. Recomiendan que un simple ensayo
donde: n es la porosidad (con un Gs=2,7)
de Carga Puntual no sea suficiente para remplazar
un ensayo de Resistencia a Compresión Simple,
recomendando que al menos se realicen de 15 a Con otros 12 testigos de 52 mm de diáme-
30 ensayos para obtener una buena correlación. tro, correlacionaron la Resistencia a Compresión
48
Simple con la porosidad, como se observa en la En resumen, un amplio abanico de investiga-

siguiente ecuación: dores demuestran que para cada caso particular,
existe una variación del valor de correlación,
σ c = 273,15 ⋅ e −0,076⋅n r = 0,87 (66) siendo preciso hacer un estudio exhaustivo de la
zona que se pretende investigar para obtener un
Y llegaron a una relación entre el ensayo de valor coherente de correlación. En la Tabla 9 se
RCS y el PLT. relaciona de manera cronológica los autores que
han realizado correlaciones del PLT con la RCS,
σc
= K 1 ⋅ e − K 2 ⋅n (67) como se puede observar, este tema goza de gran
Is interés entre los investigadores, debido a los be-
donde: K1 tiene el valor de 35,3 neficios que se pueden obtener al tener comple-
K2 tiene el valor de 0,037 tamente caracterizada la resistencia de una roca
en un extenso sector de desarrollo económico.
En Pakistán, en la zona de Salt Range, los in-
vestigadores Akram, M. y Bakar, M.Z.A. (2007), Tabla 9. Resumen de los autores más importantes que han
realizaron más de 200 ensayos, obteniendo dos realizado correlaciones de ensayo de RCS con el PLT
valores de correlación, el primero para rocas Año Autores Lugar Idea Principal
duras y el segundo para rocas blandas, y son &RUUHODFLyQ HQWUH OD 5&6 \
βa=13,295 y βb=11,076; respectivamente. Otros %URFK(\ 5HLQR
1972 3/7 &RUUHFFLyQ SRU IRUPD
investigadores han obtenido otros valores en )UDQNOLQ- 8QLGR
5RFDVGXUDV
Pakistán, como son Çobanoglu, I. y Çelik, S.B. %LHQLDZVNL Sur &RUUHODFLyQ HQWUH OD 5&6 \
1975
(2008), con un total de 150 ensayos con diáme- Z.T. África 3/75RFDVDUHQLVFDV
tros de 54, 48, 42, 30 y 21 mm de diámetro. Con &DUWHU\ 5HLQR &RUUHODFLyQ HQWUH OD 5&6 \
1977
6QHGGRQ 8QLGR 3/75RFDVFDUERQL¿FDGDV
los testigos de diámetro 48 mm se obtuvo el me- &RUUHODFLyQ HQWUH OD 5&6 \
jor valor de correlación. La ecuación es: 1980 5HDGHWDO Austria
3/75RFDVVHGLPHQWDULDV
5HLQR &RUUHODFLyQ HQWUD OD 5&6 \
1980 +DVVDQLHWDO
σ c = 8,66 ⋅ I s(50) + 10,85 (68) 8QLGR 3/75RFDVVHGLPHQWDULDV
5HLQR &RUUHFFLyQ SRU IRUPD GHO HQ-
1980 %URRN1
Finalmente, Romana, M. (1994), obtiene unos 8QLGR VD\RGH3/7
5HLQR &RUUHFFLyQSRUIRUPD\WDPD-
valores estimativos del coeficiente a aplicar en 1983 %URRN1
8QLGR xRGHOHQVD\RGH3/7
el ensayo a Carga Puntual, como se refleja en la &RUUHODFLyQ HQWUH OD 5&6 \
Tabla 8: 1988 2
5RXUNH- U.S.A.
3/75RFDVVHGLPHQWDULDV
&RUUHODFLyQ HQWUH OD 5&6 \
1989 9DOOHMRHWDO U.S.A.
Tabla 8. Valores estimados del coeficiente de correlación 3/75RFDVDUHQLVFDV
a aplicar en el ensayo de compresión puntual 'HOJDGR5\ &RUUHODFLyQ HQWUH OD 5&6 \
1989 3RUWXJDO
-HUHPLDV PLT
Tipo de Roca Resistencia Co/Is(50)
Sur &RUUHODFLyQ HQWUH OD 5&6 \
1991 -HUP\\%HOO
,JQHDFRPSDFWD 0HGLD$OWa 20-25 África 3/75RFDVFRQFDUEyQ
&RUUHODFLyQ HQWUH OD 5&6 \
1993 Singh India
0HWDPyU¿FDIROLDGD 0HGLD$OWD 16-22 3/75RFDVFRQFXDUFLWD
4XLQWD)\ &RUUHODFLyQHQWUHOD5&6\
0HWDPyU¿FDIROLDGD %DMD 12-16 1993 ––
0DFKDGR* PLT
&RUUHODFLyQHQWUHOD5&6\
&DOFiUHDELHQFHPHQWDGD 0HGLD$OWD 18-24 1995 Das Canadá
3/75RFDVFRQDUHQLVFD
6HGLPHQWDULDELHQFHPHQWDGD %DMD 10-15 &KDX.\ $QiOLVLVFRQPRGHORVPDWH-
1996 China
:RQJ5 PiWLFRVGH,s (50)
6HGLPHQWDULDPDOFHPHQWDGD %DMD 6-10 &RUUHODFLyQHQWUHOD5&6\
1997 6PLWK U.S.A.
3/75RFDVGUDJDGDV
(Tomado de Romana, M. 1994).
Continúa Tabla 9 →
49
Viene Tabla 9 →
Año Autores Lugar Idea Principal

UNE 22-950-90 / 1 Propiedades mecánicas
de las rocas. Ensayos para
5XVQDN-\ &RUUHODFLyQHQWUHOD5&6\
1998 U.S.A. la determinación de la
0DUN& 3/75RFDVFRQFDUERQ
&RUUHODFLRQHQWUHOD5&6\ resistencia. Parte 1: re-
1999 5RPDQD0 (VSDxD sistencia a la compresión
3/75RFDVFRQFDOL]DV
7KXUR.\ &RUUHODFLyQHQWUHOD5&6\ uniaxial
2001 6XL]D
3OLQQLQJHU5 3/75RFDVFRQFXDU]R¿OLWDV NLT-250 / 91 Determinación de la Re-
:HWFKDVDW. sistencia a Compresión
8WLOL]DFLyQFRUUHODFLRQHVSDUD
2003 \7KRQJWKLDQJ- 7DLODQGLD Simple de probetas de
HO,s(50)GHDFXHUGRDOD/\'e
GHH3
roca
3DOFKLN9\ &RUUHODFLRQHQWUHOD5&6 Standard Test Method for
2004 ,VUDHO ASTM D 2938–95
+DW]DU< 3/7\DWUDFFLyQ%UDVLOHxR
Unconfined Compressive
$NUDP0\ &RUUHODFLyQHQWUHOD5&6\ Strength of Intact Rock
2007 3DNLVWiQ
%DGRU0 3/75RFDVGXUDV\EODQGDV Core Specimens
&REDQRJOH, &RUUHODFLyQHQWUHOD5&6
2008 3DNLVWiQ
\&HOLN6 3/7923\PDUWLOOR6FKPLGW Los requisitos para realizar el ensayo son
(Elaboración propia). prácticamente los mismos en cualquiera de los
cuatro textos anteriores. Si tomamos las normas
UNE, podemos remarcar los siguientes pasos
ENSAYO DE RESISTENCIA A COMPRESIÓN UNIAXIAL más significativos:
La Resistencia a Compresión Simple se deter- Respecto del aparato de ensayo:
mina, de forma directa, mediante el denominado
“Ensayo de resistencia a compresión uniaxial” El dispositivo de carga será una máquina
(ECU). adecuada para aplicar y medir la carga axial a
En Mecánica de Rocas el ensayo consiste en la muestra. Deberá ser de suficiente capacidad
aplicar hasta la rotura, mediante una prensa, una y podrá aplicar la carga de modo que la rotura
fuerza axial (F) a una probeta cilíndrica de roca, se produzca entre los 5 y 10 minutos desde el
de sección circular de área A. La resistencia viene comienzo de aplicación de la carga.
dada por la ecuación:
Fc Los elementos de contacto serán dos placas de

σc = (69) acero de dureza 58 Rockwell C, por lo menos,
A
con forma de disco. Su diámetro debe estar
donde: Fc es el valor de la fuerza aplicada en comprendido entre D y 1,1 D, donde D es el
el momento de la rotura diámetro de la probeta expresado en mm. El
A es el área de aplicación de la carga espesor de las placas debe ser como mínimo
D/3. Las superficies deben estar rectificadas y
El método de ensayo, está recogido por diver- su error de plenitud debe ser inferior a 0,005
sos organismos, siendo las principales normas y mm. Los platos de la máquina o las placas en
recomendaciones las siguientes: contacto con las superficies de la muestra deben
ISRM (1978) Suggested methods for incorporar al menos un asiento esférico.
determining the uniaxial
compressive strength and
deformability of rock ma-
terials
50
Respecto de las probetas a ensayar:

1. Las probetas deben ser cilíndricas, con las
siguientes dimensiones:
1.1. con una relación altura / diámetro de 2,5
a 3,0
1.2. diámetro, mayor de 10 veces el tamaño
máximo de grano de la roca
1.3. diámetro no inferior a 50 mm
1.4. las tolerancias de elaboración serán las
indicadas en la Tabla 10:
Tabla 10. Tolerancia de la elaboración de probetas

de roca para el ensayo de compresión simple
Deformabilidad de la roca:
Tolerancia respecto a:
poca media alta
'HVYLDFLyQGHODJHQHUDWUL]
PP PP PP
UHVSHFWRDODGLUHFFLyQD[LDO
3ODQLWXGGHODEDVH PP PP PP
Figura 21. Requerimientos para la muestra de ensayo
'HVYLDFLyQUHVSHFWRDOiQ-
JXORUHFWRGHOiQJXORGHOHMH 10` 20` 30` (ISRM, 1978).
GHODSUREHWDFRQODEDVH
(UNE 22950-90). Estos requerimientos respecto al aparato de
ensayo, se pueden cumplir con facilidad (Garri-
2. Las probetas se elaborarán mediante perfo- do, M.E., et al, 2010). El laboratorio de Mecá-
ración, corte torneado y pulido o cualquier nica de Rocas del Departamento de Ingeniería
otro método apropiado, de modo que: del Terreno dispone de una máquina (marca
2.1. la superficie lateral de la probeta debe Suzpecar S.A., modelo 150), que cumple dichos
ser lisa y estar libre de irregularidades. requerimientos y que cuenta con las siguientes
2.2. las bases deben ser planas y formar un características:
ángulo recto con el eje de la probeta t Máquina construida en clase 1ª, según nor-
de ensayo. mas UNE, DIN, ASTM y BS.

2.3. se debe evitar el empleo de materiales t Marco de ensayos polivalente. Admite to-
de recubrimiento como igualadores, dos los dispositivos para ensayos (flexión,
para conseguir el paralelismo reque- brasileño, módulo de Poison, flexión, etc).
rido de las superficies de las bases de t Medida y memorización de cargas automá-
la probeta de ensayo. Si fuera necesa- ticas.
rio desviarse de esta regla debido a las t Escala con auto rango. Salto de 1:10 a 1:1.
características propias del material a t Selección digital de velocidad en el ensayo
ensayar, habrá que indicarlo en el pro- entre 1 y 10.000 Kg/seg.
tocolo de ensayo. t Conexión directa al ordenador para medi-
ción con galgas extensométricas.
Los requerimientos respecto a la muestra a t Precisión de 0.001 a escala 1:10 y de 0.01 a
ensayar, originalmente publicados por la ISRM, escala 1:1.
se pueden ver en la Figura 21.
51
lleva a que se haya generalizado la ya de

por si extendida costumbre de refrentar las
probetas con azufre.
Respecto a las dimensiones de la probeta:

t la red de discontinuidades del macizo rocoso
puede impedir la obtención de cilindros de
roca de la suficiente longitud (para 50 mm
de diámetro L > de 125 a 150 mm, entre dos
planos perpendiculares al eje)
t para las rocas de grano grueso (> 5 mm) el
diámetro de la probeta tiene que ser supe-
rior a 50 mm; en los casos de algunas ro-
cas con granos o clastos centimétricos las
proporciones de las probetas son prácti-
Figura 22. Prensa del Laboratorio camente imposibles de obtener (y caso de
de Mecánica de Rocas del Departamento obtenerse no podrían romperse con ningu-
de Ingeniería del Terreno (UPV) na prensa convencional).
Tamaño y forma de la probeta

Pero los requerimientos en cuanto a la Actualmente, a pesar del esfuerzo realizado
muestra a ensayar no son tan fáciles de cumplir por los investigadores, no se dispone de una for-
y, en algunas ocasiones, resultan imposibles. mulación general y única que permita extrapolar
Respecto a la elaboración de la probeta: los resultados de los ensayos, a las condiciones
t en cuanto a las tolerancias del acabado de reales de la matriz rocosa, no obstante, estas in-
las superficies (sobre todo las superficies vestigaciones han llegado a algunas conclusiones
laterales) los sistemas de perforación habi- importantes, tales como el hecho de que la resis-
tuales y la naturaleza de las rocas, conllevan tencia a compresión de la matriz varía en función
el que no puedan alcanzarse los requeri- del tamaño (diámetro) y de la forma (relación al-
mientos (ver Tabla 10) tura/ancho) del mismo.
t se requieren por tanto equipos especiales Con respecto al tamaño, se ha observado que
tanto de perforación como de corte y sola resistencia disminuye a medida que el tamaño
bre todo de pulido; equipos costosos, tanto de la probeta aumenta, debido, entre otras cosas,
estos, como los consumibles que utilizan a que al incrementarse el tamaño, es más proba-
(polvo de diamante, etc), de los que casi ble que aparezca algún defecto estructural que
ningún laboratorio dispone desarrolle la rotura de la roca.
t es especialmente importante el problema En la Figura 23, se muestran los resultados de
del refrentado. Originalmente (ver punto los ensayos a compresión simple llevados a cabo
(d) de la Figura 21) las recomendaciones de sobre probetas de distinta litología y tamaños
la ISRM no permitían ningún sistema que (Hoek y Brown, 1980). La Resistencia a Compre-
no fuese mecánico; la norma actual española sión Simple σc para una probeta de diámetro d, se
(UNE 22950-90) conserva esa imposición, relaciona con la correspondiente a un diámetro
pero indica que: “Si fuera necesario desviarse de 50 mm (σc50) con:
de esta regla debido a las características
σ c ⎛ 0,05 ⎞
0 ,18
propias del material a ensayar, habrá que
=⎜ ⎟ (70)
indicarlo en el protocolo de ensayo”, esto σ c 50 ⎝ d ⎠
52
Figura 23. Variación de la RCS con el dámetro de la probeta

(hoek y Brown, 1980, en ITGE, 1991).
Así mismo, la resistencia aumenta cuando carbón, con un rango de aplicación hasta valores
disminuye la relación altura/ancho y es mayor de w/h = 8:
cuando aumenta el confinamiento del testigo.
⎛ w⎞
Se define el tamaño crítico, como el tamaño σ p = σ 1 ⋅ ⎜ 0,778 + 0,222 ⋅
⎟ (71)
de la probeta a partir del cual un aumento de ⎝ h⎠
sus dimensiones no produce una disminución donde: σp es la Resistencia a Compresión
apreciable de su resistencia. Simple del pilar
Para analizar la variación de la resistencia σ1 es la RCS de una probeta cúbica
de probetas de un mismo material en función de tamaño crítico
de su forma o esbeltez, es decir, de la relación w y h son el ancho y la altura,
ancho/altura (w/h), diversos investigadores han respectivamente, del pilar
llevado a cabo ensayos tanto en laboratorio (con
probetas) como in situ (sobre pilares de mina, la En el caso de pilares en roca o minerales
mayoría en la minería del carbón). metálicos, en estudios realizados sobre probetas
Obert y Duvall (1967) en ITGE (1991), ob- de siderita por Ramirez y Martin (1981) en ITGE
tuvieron la siguiente ecuación para pilares de (1991), se ha encontrado la siguiente relación:
53
donde: σcn Resistencia a Compresión Simple

⎛ w⎞
σ p = 113 ⋅ ⎜ 0,737 + 0,263 ⋅
⎟ (72) con porosidad n
⎝ h⎠ σco Resistencia a Compresión Simple
Esta ecuación está en la línea de los resultados con porosidad o
alcanzados por Obert y Duvall. λ parámetro de la estructura espa-
Otros factores, respecto a las características cial de poros
de la muestra, que influyen en el valor de la n porosidad.
Resistencia a Compresión Simple son:
Grado de fisuración
Las fisuras en la matriz rocosa modifican su
comportamiento mecánico, pues inducen en la
roca las siguientes características:
t Resistencia y deformabilidad anisotrópica.
t Valores elevados del COV.
t Deformaciones irreversibles importantes.
t Reducción de la resistencia y aumento de la
deformabilidad.
t Fragilidad.
t Comportamiento mecánico dependiente
de la trayectoria de tensiones.
t Permeabilidad dependiente de las presiones.
Figura 24. Resistencia a compresión simple frente a la
Para tener un orden de magnitud (Serrano, porosidad para pizarras y areniscas
1998) en un granito, un volumen de huecos del (Vernik et al, 1993).
2 % en forma de fisuras, provoca una reducción
de la Resistencia a Compresión Simple del 50%. El grado de alteración de la roca también redu-
La porosidad (y por tanto la densidad) aunque ce la resistencia y en principio se puede evaluar la
no existan microfisuras, también afecta a la alteración por la reducción de su densidad.
Resistencia a Compresión Simple. Barton propuso un factor de reducción de la
resistencia de la roca sana en función de la varia-

Porosidad y grado de alteración ción relativa del peso específico, que se muestran
y/o meteorización en la Tabla 11.
La meteorización o la alteración, aparte de
un cambio químico, conllevan también un Tabla 11. Factor de reducción de resistencia
cambio físico que se traduce generalmente en un con la variación de peso específico.
aumento de la porosidad y en consecuencia una Factor de reducción de la Variación relativa del peso
resistencia específico
disminución de la densidad.
σ c (roca sana) Δγ
El aumento de porosidad reduce mucho la f = γ
(en %)
σ c (roca meteorizada)
resistencia; Vernik et al (1993), encontraron,
para pizarras y areniscas, correlaciones de tipo 1–2 0
parabólico entre la Resistencia a Compresión
2–3 –5
Simple y la porosidad (ver Figura 24):
3–4 – 10
σ cn = σ co ⋅ (1 − λ ⋅ n) 2 (73) 4–10 – 20
(Barton, tomado de Serrano 1998).
54
Los valores indicados por Barton en la Tabla Fase I Cierre de fisuras. Comportamiento
11, encajan aproximadamente con los resultados inelástico.
obtenidos en calizas meteorizadas del río Ebro Fase II Comportamiento elástico.
en Ribarroja (Serrano, 1995), según puede verse Fase III Las fisuras existentes son estables y
en la Figura 25. aparecen nuevas fisuras.
Fase IV Las relaciones tensión-deformación
dejan de ser lineales. Aumenta la den-
sidad de grietas que se coalescentes.
Fase V La tensión cae y la resistencia baja.
Se forman macrofisuras por unión
de las microfisuras que han crecido.
Fase VI Las macrofisuras deslizan. La tensión
en la probeta se mantiene constante.
Se ha llegado a la resistencia residual.
Estas fases se explican más detalladamente a

continuación con ayuda de la Figura 26.
Fase I Se empiezan a cerrar fisuras y algu-
Figura 25. Resistencia a compresión simple frente al nos poros. En gran parte de los casos
peso específico calizas de ribarroja del ebro la curva tensión-deformación tiene
(Serrano, 1995). la concavidad hacia arriba. El com-
portamiento es anelástico.
Por una parte todos los condicionantes y ra- Fase II Las relaciones incrementales de la
zones anteriores y por otra el hecho de que en tensión con la deformación longi-
muchas ocasiones, solo es necesaria una estima- tudinal y con la deformación radial
ción adecuada de la Resistencia a Compresión son ambas lineales. El comporta-
Simple, es lo que ha conducido al estableci- miento es elástico. En esta fase se
miento de métodos alternativos para evaluar la puede definir un coeficiente de Pois-
Resistencia a Compresión Simple de la matriz son constante.
rocosa. Fase III La relación incremental de la tensión
Existen métodos y correlaciones con propie- con la deformación longitudinal sigue

dades de todo tipo, pero los principales y más siendo lineal, pero la tasa de defor-
utilizados se han indicado en la Tabla 6. De ellos mación radial con la tensión aumen-
destaca, por su extendida y generalizada utiliza- ta. El coeficiente de Poisson crece.
ción, la correlación con la Resistencia a Carga En esta fase aparecen fisuras nuevas
Puntual, uno de los objetivos de esta tesis doc- que se añaden a las preexistentes en
toral para el cual se han realizado una serie de las zonas más tensionadas (cerca de
ensayos. los bordes de la sección medida de
la probeta). Se oyen ruidos causados
Descripción fenomenológica por la apertura de las fisuras. En esta
del ensayo de compresión uniaxial fase, las fisuras son estables.
Goodman (1989) dio una descripción muy Fase IV Las relaciones incrementales de la
detallada de los fenómenos que se observan du- tensión con la deformación longi-
rante un ensayo de compresión uniaxial, según la tudinal y la deformación radial de-
cual, en el comportamiento mecánico de la roca, jan de ser lineales, ambas aumentan
a lo largo del ensayo, se distinguen seis fases: mucho la densidad de grietas que se
55
Figura 26. Fases del ensayo de resistencia a compresión simple

(goodman, 1989).
coalescentes entre sí y puede dar lu- de distinta forma y tamaño. En 1972, la ISRM
gar a líneas semicontinuas de rotura normalizó el ensayo.
(microfallas). El punto C de la curva Además de la obtención de la resistencia a la
tensión-deformación radial en el que Carga Puntual, se utiliza el ensayo para determi-
se comienza esta fase es el inicio de nar la Resistencia a Compresión Simple de frag-
la plastificación o aparición de de- mentos irregulares de roca o testigos cilíndricos
formaciones irreversibles. El punto de sondeos, a partir del índice de Carga Puntual
D con el que termina, representa la Is(50) obtenido en el ensayo (Preciado, J., 2008).
rotura de la probeta. El ensayo no está diseñado para rocas con ani-
Fase V En esta fase la tensión en la probe- sotropía o blandas, aunque su aplicación según la
ta cae. La resistencia baja. Se forman normativa permite definir un “Índice de Aniso-
macrofisuras continuas por unión de tropía” Ia en función de los resultados que se ob-
las microfisuras que han crecido. tengan con la aplicación de la carga paralelamente
Fase VI En esta fase las macrofisuras desli- y perpendicularmente a los planos de anisotropía.
zan. La tensión en la probeta se man- Según la UNE 22950/5-90 y la NLT 252/91, el
tiene constante. Se ha llegado a la procedimiento consiste en romper la muestra en-
resistencia residual. tre dos puntas cónicas metálicas accionadas por

una prensa manual (Figura 27, 28 y 29).
Debe resaltarse que el proceso anterior co-
rresponde a un ensayo con tensión controlada;
en caso contrario las fases V y VI no se producen,
ya que a partir del punto D, final de la fase IV, el
proceso es energéticamente inestable.
ENSAYO DE RESISTENCIA A LA CARGA PUNTUAL
Se denomina también Point Load Test (PLT)

o ensayo Franklin. Se le conoce con este nombre,
porque Franklin lo normalizó y aún se mantienen
esas características por él establecidas. La primera
referencia escrita fue la de Reichmuth, D. (1963) Figura 27. Prensa de Carga Puntual
que definió el ensayo por completo para probetas para el ensayo Franklin
56
Figura 28. Máquina en laboratorio Figura 29. Máquina en campo

para el ensayo de Carga Puntual para el ensayo de Carga Puntual
(Departamento de Ingeniería del Terreno -UPV). (Departamento de Ingeniería del Terreno -UPV).
Figura 30. Requisitos geométricos de las probetas

para el ensayo de Carga Puntual
(UNE 22950-5:1996).
El ensayo tiene dos claras ventajas; por una ensayar, a las que solo se les exige unos mínimos
parte la portabilidad de la máquina, que permite geométricos (Tabla 12 y Figura 30) y que la ro-
su uso tanto en laboratorio como en campo (en tura de la probeta se produzca por un plano (o
afloramientos, a pie de sondeo o a pie de obra). varios) de fractura que contengan los dos puntos
La otra ventaja, y siendo la principal, es los de aplicación de la carga (Figura 31).
pocos requerimientos respecto a las muestras a
57
Tabla 12. Requisitos geométricos de las siendo P la carga de rotura y D el diámetro de la

probetas para el ensayo de Carga Puntual probeta; para carga axial en el caso de probetas
Distancia Semilongitud Ancho de la probeta cilíndricas o para probetas no cilíndricas:
Entre puntos De la
Tipo de
Menor Mayor Medio P
Is =
De carga Probeta
Ensayo
2
(75)
D L W1 W2 W De
&LOtQGULFR donde De es el “diámetro equivalente”, corres-
D /!' - - -
'LDPHWUDO pondiente al área de un circulo igual a la teórica
&LOLQGULFR sección de rotura que pasa por los puntos de apli-
:'Z - - - :
$[LDO cación de la carga.
%ORTXH El resultado del ensayo esta normalizado
:'Z /!' - - :
5HJXODU para probetas cilíndricas de 50mm de diámetro,
%ORTXH obteniéndose el índice de resistencia a Carga
:'Z /!' :1 :2 ò:1 + w2)
,UUHJXODU Puntual (Is(50)). Cuando el diámetro (o diámetro
(Fuente: Preciado, J., 2008). equivalente) de la muestra ensayada difiere de
50mm se debe realizar la corrección por tamaño.
Para ello se ensayan muestras con diversos
tamaños, cuyos cargas de rotura se representan,
en escala logarítmica, frente al De2, obteniéndose
el valor de P50, correspondiente a De2 = 2500 mm2
por interpolación o extrapolación en la gráfica
(Figura 32); los puntos representados en dicha
gráfica deben estar alineados según una recta,
ignorando (aunque no suprimiendo) los que se
desvíen sustancialmente de dicha recta.
Figura 31. Formas de rotura

para ensayos válidos y nulos
(UNE 22950-5:1996).
Según Broch y Franklin (1972) a partir de

la carga de rotura, para un ensayo en probeta
cilíndrica con carga diametral, se obtiene
la resistencia a Carga Puntual o índice de
resistencia a Carga Puntual no corregida (Is):
Figura 32. Procedimiento para la
P determinación gráfica de P50
Is = 2 (74)
D (UNE 22950-5:1996).
58
Cuando no se dispone de testigos para realizar mm se comete un error pequeño utilizando la

los ensayos para la corrección por tamaño, se expresión:
puede utilizar el factor de corrección F:
De
⎛D ⎞
0 , 45 F= (77)
F =⎜ e ⎟ (76) 50
⎝ 50 ⎠ Por tanto, el índice de resistencia a Carga
Puntual se obtiene como:
P50
I s (50 ) = (78)
50 2
o bien con la corrección por tamaño:
P
I s (50 ) = F ⋅ I s = F ⋅ 2
(79)
De
La resistencia a Carga Puntual, es un paráme-

tro identificador de las características geomecáni-
cas de la matriz rocosa y, del mismo modo que
se clasifican según su Resistencia a Compresión
Simple (ver Tabla 2), también se clasifican en fun-
ción de su resistencia a Carga Puntual (Tabla 13).
En la Figura 34 se muestran los rangos habi-
Figura 33. Gráfico del factor de corrección tuales del índice de Carga Puntual para diversos
F por tamaño tipos de rocas dentro de la escala de clasificación
(UNE 22950-5:1996). presentada en la Tabla 13; dicha escala es una de
las más utilizadas en Mecánica de Rocas.
El factor de corrección F por tamaño se mues- En la Figura 35 se muestran los rangos habi-
tra en la Figura 33; la norma NLT-252/91 indi- tuales del índice de Carga Puntual para las rocas
ca que para muestras de tamaño próximo a 50 calizas.
Tabla 13. Clasificación de las rocas en función de su resistencia a Carga Puntual
Resistencia a Carga Puntual

Is(50)
(Mpa)
(Tomado de Garnica et al, 1997) (Tomado de Carol, 2008)
([WUHPDGDPHQWHEDMD
0X\EDMD
± 0X\EDMD
± %DMD %DMD
± 0RGHUDGD Media
± $OWD $OWD
± 0X\DOWD 0X\DOWD
! ([WUHPDGDPHQWHDOWD ([WUHPDGDPHQWHDOWD

(Elaboración propia).
59
Figura 34. Variación de los índices de Carga Puntual para diferentes tipos de roca
(Garnica et al, 1997, en Galván, M. et al, 2010).
Figura 35. Variación de los índices de Carga Puntual para las calizas
(Elaboración propia).
60
CAPÍTULO 4
ESTUDIO EXPERIMENTAL
La campaña experimental de ensayos de cam- t Sondeos de reconocimiento para la redac-

po y laboratorio de la presente investigación, se ción del proyecto básico de túnel urbano en
fundamente en muestras de roca caliza, proce- la Montaña del Oro en Cullera (Valencia).
dentes de ocho ubicaciones de la Comunidad t Excavación de taludes en roca en una plan-
Valenciana (Figura 36). ta especializada en áridos, Sierra Gorda en
Bellús (Xátiva).
t Excavación de taludes en roca de las obras
de ejecución de la duplicación de calzada de
la carretera N–332, tramo Gandía-Xeresa
(Valencia).
t Talud en roca en la carretera de acceso al
Embalse de Loriguilla, en las proximidades
del mismo (Valencia).
t Excavación de taludes en roca en la cantera
de Guerola en Onteniente (Valencia).
t Desprendimiento de un talud en Puebla de
Arenoso (Castellón).
t Desmontes de la Autovía del Mediterráneo
A-7 en puerto de Albaida (Alicante).
Las campañas de investigación se han cen-

trado fundamentalmente en los tres primeros
proyectos de la lista anterior, elegidos por di-
Figura 36. Ubicación de las zonas de estudio versas razones: bien, por su importancia para la
(Fuente: elaboración propia). Comunidad Valenciana (obras de la CV–13), o
bien por la posibilidad de disponer de abundan-
Las ocho zonas, donde predominan las calizas tes testigos de sondeos (estudios para el túnel
y dolomías, son las siguientes: de Cullera), o ya sea por la facilidad de recoger
t Excavación de taludes en roca de las obras muestras con grandes dimensiones con una ca-
para la ejecución de la carretera CV–13, pacidad de producción de 900.000 Tm/año (can-
entre Torreblanca y el futuro Aeropuerto de tera de Sierra Gorda).
Castellón-Costa Azahar.
Como complemento a las anteriores, se ha ESTUDIO EXPERIMENTAL EN LA CARRETERA CV–13

realizado una campaña menor, en las obras de la
carretera N–332, en las proximidades de Xeresa. Breve descripción de las obras
Tanto esta ubicación, como la del túnel de Cu- de la Carretera CV–13
llera y CV–13, han sido elegidas, además de las La carretera CV–13 pertenece a la red de
razones expuestas antes, también por tratarse de carreteras de la Generalitat Valenciana. Se
proyectos en los que está colaborando, el perso- encuentra en la fase de construcción y permitirá
nal del Departamento de Ingeniería del Terreno, comunicar la N–340 y AP–7 a la altura de
lo cual a facilitado el acceso a las mismas. Torreblanca con el Aeropuerto de Castellón-
También se ha llevado una mini campaña en Costa Azahar, Vilanova d’Alcolea y la Autovía de
un talud de acceso al Embalse de Loriguilla, una la Plana.
de las zonas, donde se realizan prácticas de cam- El nuevo acceso al Aeropuerto de Castellón
po en las asignaturas de Mecánica de Rocas del será uno de los viales más importantes de la
Departamento de Ingeniería del Terreno. comarca de la Plana.
Igualmente, para conseguir unos resultados El trazado se ha proyectado para una velocidad
más representativos de la Comunidad Valenciana, máxima de 100 km/h y una previsión de 15.000
se realizaron ensayos de laboratorio a muestras vehículos diarios.
tomadas en las excavaciones de los taludes en Por el momento, se está construyendo una
roca de la cantera Guerola en Onteniente, a rocas única calzada para las dos direcciones, pero el
de un desprendimiento de un talud en Puebla de proyecto está diseñado para el desdoblamiento,
Arenoso y en los desmontes de la autovía A-7 en que la convertirá en autovía.
puerto de Albaida. La longitud total del trazado del vial es de 14
La distribución de los trabajos de campo y la- kilómetros aproximadamente. La vía tendrá una
boratorio realizados en las distintas ubicaciones, calzada de 7 metros, dividida en dos carriles de
se resume en la Tabla 14 y se pasa a describir en 3,5 metros y arcenes de 1,5 metros y bermas de
profundidad en los siguientes apartados. 1,5 metros, resultado una plataforma de 13 me-
tros de anchura.
Tabla 14. Distribución de ensayos Dada la orografía de la zona, la obra conlleva
por ubicación en campo o laboratorio la excavación de un total de 22 taludes, la mayor
parte de ellos en roca y en muchos casos en roca
Ubicación Ensayos en Ensayos en

Total
de los ensayos campo Laboratorio caliza, de muy diversa magnitud (tanto en altura
([FDYDFLRQHVGHWDOXGHV como en longitud).
20 153 173
carretera CV–13 Los desmontes se están realizando mediante
6RQGHRVGHOSUR\HFWRW~QHO voladuras con precorte. La campaña de ensayos
170 95 265
GH&XOOHUD del presente estudio se ha realizado con mate-
&DUUHWHUD1±7UDPR riales procedentes del desmonte 8, en concreto,
4 21 25
*DQGtD;HUHVD calizas cenomanienses, de colores claros y de as-
7DOXGGHDFFHVRDHO pecto marmóreo; las características geológicas de
0 21 21
HPEDOVHGH/RULJXLOOD
la zona.
&DQWHUDGH6LHUUD*RUGD
0 158 158
%HOO~V
Descripción de las muestras y ensayos
&DQWHUDGH2QWHQLHQWH 0 19 19 realizados a la Carretera CV–13
'HVSUHQGLPLHQWRPDFL]R Se hicieron varias visitas, a las obras de la
0 21 21 carretera CV–13 para conocer sus características
3XHEODGH$UHQRVR
&RQVWUXFFLyQSHGUDSOpQ y para la realización de los ensayos. Como se
0 19 19
SXHUWRGH$OEDLGD ha mencionado, se seleccionaron los materiales
62
E studio experimental
procedentes del desmonte nº. 8 (Figura 37, y C01-A a la C20-A, ver Tabla 15) con forma de
Anexo A1), de naturaleza caliza. bloque irregular (Figura 38).
Figura 37. Detalle del desmonte nº 8 Figura 38. Muestras para el ensayo PLT en campo
de las obras de la CV–13 procedentes del desmonte nº 8
(Fuente: elaboración propia). (Fuente: elaboración propia).
Se recogieron en dos campañas 30 muestras En esta primera tanda de 20 ensayos, realiza-

de roca en rama, en la primera campaña se dos en campo, en 11 casos se obtuvo una carga P
tomaron 20 muestras de rocas de tamaño entre con fracturación correcta y solo en dos de ellos
60mm y 200mm, ensayadas tanto en campo cumplían los requerimientos de las normas res-
como en el laboratorio, en la segunda campaña se pecto a las dimensiones.
tomaron 10 bloques de roca con tamaño superior Los fragmentos sobrantes de las 20 muestras
a 200mm. se llevaron al laboratorio para preparar probetas
Se tallaron probetas con dimensiones acordes para la segunda y la tercera tanda de ensayos
a la norma UNE 22-950-5; como probetas que (Figura 39).
no cumplían con las mismas; esto es para hacer,
en un futuro, un análisis de los ensayos de Carga

Puntual que están fuera de la Norma.
Sobre las dos campañas, se realizo para cada
campaña, con las muestras y submuestras, como
mínimo 3 tandas de ensayos, como a continua-
ción se explica, debido a que en ocasiones, de los
fragmentos ensayados, se pudieron obtener nue-
vas probetas para ser talladas y ensayadas.
Primera campaña de ensayos

En primer lugar se hizo una exploración del
desmonte nº 8, tomando 20 muestras (muestra
C01 a C20) y realizando tres tandas de ensayos: Figura 39. Ejemplo de fragmentos para
1ª Tanda de ensayos: Con cada una de las 20 tallar y ensayar probetas en el laboratorio
muestras se talló y ensayó in situ a Carga Puntual (Fuente: elaboración propia).
una probeta (referenciadas como Cn-A, de la
63
2ª Tanda de ensayos: Se tallaron y ensayaron Segunda campaña de ensayos

en laboratorio, a Carga Puntual, un total de 9 Posteriormente, se recogieron 10 bloques de
probetas (referenciadas como Cn-B-Lm) con roca en rama, generalmente de tamaño grande
forma de bloque regular y dimensiones fuera de (muestras L01 a L10), para ser transportadas al
las contempladas en la normativa. laboratorio (Figura 41) y posteriormente ser ta-
3ª Tanda de ensayos: Para la tercera tanda lladas en bloques regulares y probetas cilíndri-
se tallaron y ensayaron en laboratorio, a Car- cas. La muestra nº L05 (rotulada con el nº 5 en
ga Puntual, 12 probetas (referenciadas como la Figura 42) por su textura, color y geología, es
Cn-C-Lm) con forma de bloque regular y con la roca que mas representa al material calizo del
dimensiones acordes a la normativa. desmonte nº 8 de la carretera de la CV–13.
Figura 41. Bloques para ser tallados

y ensayados en laboratorio
Fuente: elaboración propia.
Figura 40. Ejemplo de fragmentos con forma

de bloque regulares para ser ensayados en la 2ª
tanda o tallados para la 3ª tanda
En la Tabla 15 se resumen los ensayos

realizados en la primera campaña. En total se
realizaron 41 ensayos de Carga Puntual (20 en
campo y 21 en laboratorio); de ellos 10 fueron
nulos, 18 se realizaron con dimensiones de las
probetas no normativas y 13 con dimensiones
normativas.
Con esta primera campaña se pretendían Figura 42. Muestra representativa
alcanzar diversos objetivos: de las calizas del desmonte nº 8
t “Romper en mano” en la toma de muestras Fuente: elaboración propia.
y en la realización de ensayos de campo (1ª
tanda de ensayos) y en el tallado de probe- En primer lugar se tallaron probetas cilíndri-
tas y realización de ensayos en laboratorio cas, mediante sonda (Figura 43) y sierra radial,
(2ª tanda de ensayos). para ensayos de Carga Puntual diametral, ensa-
t Tallado y realización de ensayos definitivos yos de compresión simple y ensayos de velocidad
(3ª tanda) para su estudio. de transmisión de ondas.
64
Tabla 15. Resumen de la 1ª campaña de ensayos con muestras de la CV–13

Número y distribución de ensayos realizados
[01] [A] - 1° Tanda de ensayos: [B] - 2° Tanda de ensayos: [C] - 3° Tanda de ensayos: PLT RCS Otros
Muestras de piedra Probetas procedentes de [01] talla- Probetas procedentes de [01] Probetas procedentes de [01]
en rama tomadas en das y ensayadas en campo talladas y ensayadas en laboratorio talladas y ensayadas en laboratorio v/d v/f 54 45 Tot.
n Tot. VS IE GS DD
campo
Ref. Tipo de ensayo Ref. Tipo de ensayo Ref. Tipo de ensayo cd ca br bi cd ca br bi mm mm

C01 C01 - A 3/7ELQ - - - - 1 1 1
C02 C02 - A 3/7ELYI - - - - 1 1 1
C03 C03 - A 3/7ELQ - - - - 1 1 1
C04 C04 - A 3/7ELYI - - - - 1 1 1
C05 C05 - A 3/7ELYI - - - - 1 1 1
C06 C06 - A 3/7ELYG C06 - B - L1 3/7EUYI C06 - C - L1 3/7EUYG 1 1 1 3 3
C07 C07 - A 3/7ELYI - - - - 1 1 1
C08 C08 - A 3/7ELQ - - - - 1 1 1
C09 - B - L1 3/7EUYI C09 - C - L1 3/7EUYG
C09 C09 - A 3/7ELYI 2 2 1 5 5
C09 - B - L2 3/7EUYI C09 - C - L2 3/7EUYG
C10 - C - L1 3/7EUQ
C10 C10 - A 3/7ELQ C10 - B - L1 3/7EUQ C10 - C - L2 3/7EUYG 3 2 5 5
C10 - C - L3 3/7EUYG
C11 - C - L1 3/7EUYG
C11 C11 - A 3/7ELYI C11 - B - L1 3/7EUYI 2 1 1 4 4
C11 - C - L2 3/7EUYG
C12 C12 - A 3/7ELYG C12 - B - L1 3/7EUYI C12 - C - L1 3/7EUYG 1 1 1 3 3

C13 C13 - A 3/7ELYI - - - - 1 1 1
C14 C14 - A 3/7ELYI - - - - 1 1 1
C15 - C - L1 3/7EUYG
C15 - B - L1 3/7EUYI
C15 C15 - A 3/7ELQ C15 - C - L2 1 3/7EUYG 2 2 5 5
C15 - B - L2 3/7EUYI - -
C16 C16 - A 3/7ELQ - - - 1 - 1 1
C17 C17 - A 3/7ELQ - - - 1 - 1 1
C18 C18 - A 3/7ELYI - - - - 1 1 1
C19 C19 - A 3/7ELQ - - - 1 - 1 1
C20 C20 - A 3/7ELYI C20 - B - L1 3/7EUYI C20 - C - L1 3/7EUYG 1 1 1 3 3
FG SUREHWDFLOtQGULFD
EU SUREHWDHQEORTXHUHJXODU 10 0 0 11 2 0 0 8 10 41 0 0 0 0 0 0 41
FDUJDGLDPHWUDO
[[
3/7[[[[ FD SUREHWDFLOtQGULFD EL SUREHWDHQEORTXHLUUHJXODU
Ens. Carga FDUJDD[LDO
SXQWXDO [ Y HQVD\RYiOLGR Q HQVD\RQXOR
G SUREHWDGHGLPHQVLRQHV I GLPHQVLRQHVIXHUDGHQRUPD
/(<(1'$ [ &$03$f$'((16$<26
QRUPDWLYDV
(16$<26'(&$5*$38178$/
5&6'PP (QVD\RGHUHVLVWHQFLDDFRPSUHVLyQXQLD[LDO'LiPHWURGHODSUREHWDHQPP
(1&$032<(1/$%25$725,2
96 (QVD\RGHYHORFLGDGGHRQGDV
,( (QVD\RGHLQPHUVLyQHVWiWLFDFRQGHWHUPLQDFLyQGHODSRURVLGDGH¿FD]\ODGHQVLGDGVHFD
*6 (QVD\RSDUDODGHWHUPLQDFLyQGHOSHVRHVSHFt¿FRGHODVSDUWtFXODV
'' (QVD\RGHGXUDELOLGDGDOGHVPRURQDPLHQWR6WDNH'XUDELOLW\,QGH[
65
Figura 43. Sala de tallado de muestras en el laboratorio

Con los sobrantes y recortes se tallaron Ensayos complementarios (6ª Tanda): Para la
muestras en forma de bloque regular, tanto de caracterización de la roca matriz se realizaron
dimensiones normativas (cuando lo permitía ensayos de medición de la velocidad de trans-
la geometría de la muestra origen) como con misión de ondas, ensayos de inmersión estáti-
dimensiones no normativas (cuando no lo per- ca (determinando la porosidad eficaz y el peso
mitía la muestra origen); en la Figura 44, puede específico seco), ensayos para la determinación
verse un ejemplo de las probetas talladas. del peso específico de las partículas y ensayos
En esta segunda campaña se realizaron las de durabilidad al desmoronamiento (Slake Du-
tres siguientes tandas de ensayos: rability).
4ª Tanda de ensayos: (Muestras referenciadas En la Tabla 16 se resumen los ensayos rea-
como Ln–Am) ensayos de compresión uniaxial, lizados en esta segunda campaña, en la que
ensayos de Carga Puntual con probetas cilíndricas en total se realizaron 136, de ellos 61 PLT, 10
de dimensiones normativas y ensayos de Carga RCS y 65 complementarios. En la Figura 45 se
Puntual con bloque regulares de dimensiones no presenta un esquema de los ensayos realizados
normativas. con las muestras tomadas en las obras de la
5ª Tanda de ensayos: Ensayos de Carga Puntual CV–13.
con bloques regulares de dimensiones normativas.
Figura 44. Ejemplo de muestras cilíndricas y en bloque regular talladas

en la 2ª campaña de ensayos con muestras de la CV–13
(Fuente: elaboración propia).
66
Tabla 16. Resumen de la 2ª campaña de ensayos con muestras de la CV–13

[02] [A] - 4° Tanda de ensayos: [B] - 5° Tanda de ensayos: [C] - Ensayos complementarios: Número y distribución de ensayos realizados
Muestras de Probetas procedentes de Probetas procedentes de [02] ta- Con probetas o muestras de [A] ó [B] PLT RCS Otros
piedra en rama [02] talladas y ensayadas en lladas y ensayadas en laboratorio ensayadas en laboratorio
tomadas en laboratorio v/d v/f 54 45 Tot.
n Tot. VS IE GS DD
campo Ref. Tipo de ensayo Ref. Tipo de ensayo Ref. Ensayo (s) cd ca br bi cd ca br bi mm mm

L01 L01 - A1 3/7EUYI L01 - B1 3/7EUYG L01 - C - A1 IE
L01 - A2 3/7EUYI - - L01 - C - A2 IE
L01 - A3 3/7EUYI L01 - B3 3/7EUYI L01 - C - A3 IE
L01 - A4 3/7EUYI L01 - B4 3/7EUYI L01 - C - A4 IE
L01 - B5 - 1 3/7EUYI 6 5 11 2 3 8 24
L01 - A5 3/7EUYI L01 - C - A5 IE
L01 - B5 - 2 3/7EUYI
L01 - A6 3/7FGYG - - L01 - C - A6 VS IE
L01 - A7 5&6PP - - L01 - C - A7 VS IE
L01 - A8 5&6PP - - L01 - C - A8 VS IE
L02 L02 - A1 3/7EUYI - - L02 - C - A1 IE GS
L02 - A2 3/7FGYG - - L02 - C - A2 VS IE 1 1 2 1 2 3 1 9
L02 - A3 5&6PP - - L02 - C - A3 VS IE
L03 3/7EUYI L03 - B1 - 1 3/7EUYG
L03 - A1 L03 - C - A1 IE
3/7EUYI L03 - B1 - 2 3/7EUYG

3/7EUYI L03 - B2 - 1 3/7EUYG
L03 - A2 L03 - C - A2 IE 1 4 1 2 8 2 2 12
3/7EUYI L03 - B2 - 2 3/7EUYG
L03 - A3 3/7FGYG - - L03 - C - A3 VS
L03 - A4 3/7FDYI - - L03 - C - A4 VS
L04 L04 - A1 3/7EUYI L04 - B1 3/7EUYG L04 - A1 IE GS
L04 - A2 3/7EUYI - L04 - A2 IE
L04 - A3 3/7EUYI L04 - B3 - L04 - A3 IE
L04 - A4 3/7EUYI L04 - B4 3/7EUQ L04 - A4 IE 1 2 2 1 4 10 3 7 1 21
L04 - A5 3/7FGYG - 3/7EUYG L04 - A5 VS IE
L04 - A6 3/7FDYG - - L04 - A6 VS IE
L04 - A7 3/7FGYG - - L04 - A7 VS IE
L05 L05 - A1 3/7EUYI - - L05 - A1 IE GS DD
L05 - A2 3/7EUYI L05 - B2 3/7EUYG L05 - A2 IE
L05 - A3 3/7FGYG L05 - B3 3/7EUYG L05 - A3 VS
1 2 2 5 3 4 2 1 1 16
L05 - A4 5&6PP - - L05 - A4 VS
L05 - A5 5&6PP - - L05 - A5 VS
L05 - A6 5&6PP - - L05 - A6 VS
67
68
[02] [A] - 4° Tanda de ensayos: [B] - 5° Tanda de ensayos: [C] - Ensayos complementarios: Número y distribución de ensayos realizados
Muestras de Probetas procedentes de Probetas procedentes de [02] ta- Con probetas o muestras de [A] ó [B] PLT RCS Otros
piedra en rama [02] talladas y ensayadas en lladas y ensayadas en laboratorio ensayadas en laboratorio
tomadas en laboratorio v/d v/f 54 45 Tot.
n Tot. VS IE GS DD
campo Ref. Tipo de ensayo Ref. Tipo de ensayo Ref. Ensayo (s) cd ca br bi cd ca br bi mm mm
L06 L06 - A1 3/7EUYI L06 - B1 3/7EUYG L06 - A1 IE

L06 - A3 3/7EUYI - - L06 - A3 IE 2 3 5 2 2 5 14
L06 - A4 5&6PP - - L06 - A4 VS IE
L06 - A5 5&6PP - - L06 - A5 VS IE
1 1 1 3 1 1 5
L07 - A2 3/7FGYG - - L07 - A2 VS

L08 - A2 3/7EUYI - - L08 - A2 IE
1 1 1 2 5 2 4 11
L08 - A3 3/7FGYG - - L08 - A3 VS IE
L08 - A4 3/7FDYI - - L08 - A4 VS IE
L09 L09 - A1 3/7EUYI L09 - B1 3/7EUYG L09 - A1
IE
3/7EUYI L09 - B2 3/7EUYG
2 1 3 2 2 3 10
L09 - A2 5&6PP - - L09 - A2 VS IE
L09 - A3 5&6PP - - L09 - A3 VS IE
L10 - A2 3/7FGQ L10 - B2 3/7EUYG L10 - A2 VS IE

1 1 4 3 9 1 4 14
/(<(1'$ PLT [[ FG SUREHWDFLOtQGULFD EU SUREHWDHQEORTXHUHJXODU
[[[[ FDUJDGLDPHWUDO
2 7 0 25 0 0 3 24 0 61 5 5 22 39 3 1 136
Ens. FD SUREHWDFLOtQGULFD EL SUREHWDHQEORTXHLUUHJXODU
Carga FDUJDD[LDO
SXQWXDO [ Y HQVD\RYiOLGR Q HQVD\RQXOR
[ G SUREHWDGHGLPHQVLR- I GLPHQVLRQHVIXHUDGHQRUPD
QHVQRUPDWLYDV
5&6'PP (QVD\RGHUHVLVWHQFLDDFRPSUHVLyQXQLD[LDO'LiPHWURGHODSUREHWD
&$03$f$'((16$<26
HQPP
&$5*$38178$/(1/$%25$725,2
96 (QVD\RGHYHORFLGDGGHRQGDV
<(16$<26&203/(0(17$5,26
,( (QVD\RGHLQPHUVLyQHVWiWLFDFRQGHWHUPLQDFLyQGHODSRURVLGDGH¿FD]\OD
densidad seca)
*6 (QVD\RSDUDODGHWHUPLQDFLyQGHOSHVRHVSHFt¿FRGHODVSDUWtFXODV
'' (QVD\RGHGXUDELOLGDGDOGHVPRURQDPLHQWR6WDNH'XUDELOLW\,QGH[
Figura 45. Esquema de las muestras tomadas y ensayos realizados en la CV–13

(Fuente: elaboración propia).
Resultados de los ensayos realizados fallidos (o bien por rotura no válida, o bien se
en campo y laboratorio con las muestras produce rotura sin indicación de carga).
procedentes de la Carretera CV–13 De los 11 ensayos con rotura válida, 2
1ª Campaña CV–13: 1ª Tanda: Ensayos PLT in-situ correspondían a probetas con geometría y
(dimensiones normativas y no normativas). dimensiones normativas y 9 fuera de la norma;
Se hicieron en campo 20 ensayos (probetas de los datos de los ensayos y los resultados obtenidos
la C01–A a la C20–A), de los cuales 9 resultaron se presentan en las Tablas 17 y 18.
Tabla 17. 1ª Tanda de ensayos (PLT in situ)

con muestras de la CV–13. Probetas con dimensiones normativas
Ref. L (mm) D (mm) W1 (mm) W2 (mm) W (mm) P (kN) De (mm) De² (mm²) Is (Mpa)
C06 - A
C12 - A
69
Tabla 18. 1ª Tanda de ensayos (PLT in situ) con muestras de la CV–13.

Probetas con dimensiones fuera de normativa
C02 - A
C04 - A
C07 - A
C09 - A
C11 - A
C13 - A
C14 - A
C18 - A
C20 - A
Figura 46. Tallado de las probetas en campo en la CV–13

Figura 47. Ensayos en campo en la CV–13

70
Figura 48. Ejemplo de rotura válida (izquierda) y no válida (derecha)

1ª Campaña CV–13: 2ª Tanda: PLT en laboratorio Cuando en el laboratorio se tallaron las probetas
(probetas de dimensiones no normativas) con dimensiones normativas (para la realización
Con la 1ª tanda de ensayos en campo se pre- de ensayos totalmente válidos en la 3ª tanda) se dis-
tendía, principalmente, realizar un primer entre- ponía también de bloques regulares con dimensio-
namiento respecto a la ejecución del ensayo; el nes no normativas y se decidió someterlos a ensayo
objetivo era más realizar el ensayo que la validez para que de esta forma, junto con los de la tanda
del mismo, por ello no se perdió mucho tiempo en anterior, se iniciara una base de datos para futuras
tallar in situ, las muestras con dimensiones total- investigaciones que tuviesen en cuenta la influen-
mente normativas, pues eso se realizaría, una vez cia del cumplimiento dimensional de las probetas.
entrenados en la mecánica del ensayo, en el labo- Los resultados de estos ensayos se muestran
ratorio. en la Tabla 19.
Tabla 19. 2ª Tanda de ensayos (PLT en laboratorio) con muestras de la CV–13.

Probetas en bloque regular, con dimensiones fuera de normativa
C06 - B - L1 - -
C09 - B - L1 - -
C09 - B - L2 - -
C10 - B - L2 - -
C11 - B - L1 - -
C12 - B - L1 - -
C15 - B - L1 - -
C15 - B - L2 - -
C20 - B - L1 - -
71
1ª Campaña CV–13: 3ª Tanda: PLT en laboratorio 2ª Campaña CV–13: 4ª Tanda: RCS y PLT en
(probetas con dimensiones normativas) laboratorio (con y sin dimensiones normativas)
En esta 3ª tanda se realizaron 11 ensayos de Para la 2ª campaña de ensayos se comenzó,
Carga Puntual, con probetas en forma de bloque tallando 19 probetas cilíndricas, para realizar
regular y dimensiones según la normativa (ver ensayos de compresión uniaxial (10 probetas)
Figura 49), procedentes de 7 muestras; los con y sin medición de deformaciones (Figura 50)
resultados se presentan en la Tabla 20. y de Carga Puntual diametral (9 probetas).

Probetas en bloque regular, con dimensiones según normativa
C06 - C - L1 - -

C09 - C - L1 - -
C09 - C - L2 - -
C10 - C - L2 - -
C10 - C - L3 - -
C11 - C - L1 - -
C11 - C - L2 - -
C12 - C - L1 - -
C15 - C - L1 - -
C15 - C - L2 - -
C20 - C - L1 - -
Figura 49. Ensayo PLT con bloque regular en laboratorio,

con medición electrónica de la carga de rotura (izquierda).
Ejemplo de rotura válida (derecha)
72
Tabla 21. 4ª Tanda de ensayos (RCS en laboratorio) con muestras de la CV–13

D L Esbeltez de la γ RCS E ν
Ref.
(mm) (mm) probeta (kN/m³) (Mpa) (GPa) -
L01 - C - A7 - -
L01 - C - A8
L02 - C - A3 132
L05 - C - A4 115 - -
L05 - C - A5
L05 - C - A6 - -
L06 - C - A4
L06 - C - A5 - -
L09 - C - A2 - -
L09 - C - A3 45

Figura 50. Ensayo de RCS en laboratorio Figura 51. Ensayo PLT a carga diametral
con muestras de la CV–13 en laboratorio con muestras de la CV–13
(Fuente: elaboración propia). (Fuente: elaboración propia).
Los resultados de los 10 ensayos realizados de Con los restos de muestras se tallaron bloques
resistencia a compresión uniaxial se presentan regulares con dimensiones normativas (para la
en la Tabla 21. 5ª tanda de ensayos) y bloques regulares y pro-
De las 9 probetas ensayadas a Carga Puntual betas cilíndricas para carga axial, todos ellos sin
diametral, en una de ellas se produjo una forma dimensiones normativas.
de rotura no válida y los resultados de las otras 8 Los resultados de los ensayos con probetas
se presentan en la Tabla 22. sin dimensiones normativas se presentan en la
Tabla 23.
73

Probetas cilíndricas, a carga diametral, con dimensiones según normativa
L D W1 W2 W P De De² Is
Ref.
(mm) (mm) (mm) (mm) (mm) (kN) (mm) (mm²) (Mpa)
L01 - A6 - - -

L02 - A2 - - -
L03 - A3 56 - - -
L04 - A5 - - - 7
L04 - A7 - - -
L05 - A3 - - -
L07 - A2 - - -
L08 - A3 - - -
Tabla 23. 4ª Tanda de ensayos (PLT en laboratorio)

con muestras de la CV–13. Probetas sin dimensiones normativas
L D W1 W2 W P De D e² Is
Ref.
L01 - A1 46 - -

L01 - A2 31 - -
L01 - A3 - -
L01 - A4 - -
L01 - A5 - -
L02 - A1 27 - -
L03 - A1 - -
L03 - A2 - -
L03 - A4 - - -
L04 - A1 39 - -
L04 - A2 - -
L04 - A3 - -
L04 - A4 - - 36

L04 - A6 - - -
L05 - A1 - -
L05 - A2 - -
L06 - A1 - -
L06 - A2 - -
L06 - A3 - -
L07 - A1 - -
L08 - A1 - -
L08 - A2 44 - -
L08 - A4 - - -
L09 - A1 46 - -
L10 - A1 - -
L10 - A3 - -
L10 - A4 - -
74
Tabla 24. 5ª Tanda de ensayos (PLT en laboratorio)

con muestras de la CV–13. Probetas en bloque regular con dimensiones normativas
L D W1 W2 W P De De² Is
Ref.
L01 - B1 - -

L01 - B3 - -
L01 - B4 - -
L01 - B5 - 1 - -
L01 - B5 - 2 - -
L03 - B1 - 1 - - 41
L03 - B1 - 2 - -
L03 - B2 - 1 - -
L03 - B2 - 2 - -
L04 - B1 - -
L04 - B4 - -
L05 - B2 - -
L05 - B3 - -
L06 - B1 - -
L06 - B2 - -
L07 - B1 - -
L08 - B1 - -
L09 - B1 - 1 - -
L09 - B1 - 2 - -
L10 - B1 - -
L10 - B2 - - 5

L10 - B3 - -
L10 - B4 - -
2ª Campaña CV–13: 5ª Tanda: PLT en laboratorio 2ª Campaña CV–13: 6ª Tanda: Ensayos

(probetas con dimensiones normativas) complementarios de identificación
Para las probetas con forma de bloque re- Se ha denominado “6ª Tanda”, a los ensayos
gular y dimensiones normativas, talladas en la complementarios de identificación realizados a lo
tanda anterior, se realizaron 23 ensayos de Car- largo de la ejecución de las dos tandas anteriores.
ga Puntual cuyos resultados se presentan en la Se han realizado un total de 65 ensayos, con
Tabla 24. la distribución y características que se muestran
en la Tabla 25; a continuación se presentan los
resultados de estos ensayos.
75
Tabla 25. 6ª Tanda de ensayos con muestras de la CV–13. Ensayos complementarios realizados
Ensayo nº Descripción Objetivos y observaciones
(QVD\RGHLGHQWL¿FDFLyQ
9HORFLGDG &RPSUREDFLyQGHODKRPRJHQHLGDGGHODVSUREHWDV
22 0HGLFLyQGHODYHORFLGDGGHSURSDJDFLyQGHODV
XOWUDVRQLGRV SURFHGHQWHVGHXQDPLVPDPXHVWUD
RQGDV3DWUDYpVGHODPXHVWUD
(QVD\RGHDOWHUDELOLGDG &RQVWDWDUODSRFDDOWHUDELOLGDGGHODURFD\VREUHWRGR
,QPHUVLyQ
39 ,QPHUVLyQHQDJXDGHXQDSUREHWDVHFDGXUDQWH GHWHUPLQDUODSRURVLGDGH¿FD]\HOSHVRHVSHFt¿FR
estática
KRUDV VHFRGHODPDWUL]
,QPHUVLyQ (QVD\RGHDOWHUDELOLGDG 'DGDODSRFDDOWHUDELOLGDGGHODURFDVHKDUHDOL]DGR
1
GLQiPLFD &LFORVGHLQPHUVLyQHQDJXDFRQJROSHR VyORXQHQVD\RFRQWUHVFLFORV
6HKDQUHDOL]DGRWUHVGHWHUPLQDFLRQHVSDUDSRGHU
3HVRHVSHFt¿FR (QVD\RGHGHWHUPLQDFLyQGHSURSLHGDG
3 WHQHUXQDHVWLPDFLyQVX¿FLHQWHPHQWHFRUUHFWDGHOD
GHODVSDUWtFXODV LQWUtQVHFD
SRURVLGDGWRWDOGHODVPXHVWUDV
VELOCIDAD DE LAS ONDAS P Los resultados obtenidos se presentan en la

Tabla 26.
Con las 22 probetas cilíndricas talladas (10
para RCS, 9 para PLT a carga diametral y 3 Alterabilidad y determinación
para PLT a carga axial), se realizaron ensayos de las propiedades índice
de medición de la velocidad de transmisión de Para estudiar la alterabilidad de las rocas,
ondas, según la norma ASTM D2845–05. existen multitud de ensayos, pero dos de los más
Para ello se utilizó el equipo de marca CNS utilizados son el ensayo de inmersión estática y el
Farnell, con un rango de velocidad desde 1 ensayo de inmersión dinámica.
hasta 9999 m/s, con una pantalla de LCD de 128 El ensayo de inmersión dinámica (Slake Du-
x 128 y lectura del modulo de Elasticidad mayor rability Test o ensayo Sehudes, denominado en la
de 999,9 GN/m2, se puede ver en la Figura 52, norma NLT 251/91 “Determinación de la dura-
los transductores permiten medir las ondas P, S bilidad al desmoronamiento de rocas blandas”),
y soportan hasta un esfuerzo de 220 kN. consiste en someter a una muestra de roca, de
Figura 52. Equipo para lamedición de la velocidad de ondas en muestras de la CV–13

76
Tabla 26. 6ª Tanda de ensayos con muestras de la CV–13.

Ensayos de medición de la velocidad de las ondas
D L Ondas P Ondas S R γ Ed
Ref. υd
(mm) (mm) (Vp / Vs) (kN/m³) (GPa)
t (m/s) Vp (μ/s) t (μ/s) Vs (m/s)
L01 - C - A6 54 6201 3213
L01 - C - A7 54 6134 3292
L01 - C - A8 54 6024 3538
L02 - C - A2 54 4854 2433
L02 - C - A3 54 4953 2467
L03 - C - A3 45 4580 2450
L03 - C - A4 45 4640 2342
L04 - C - A5 45 5468 2682
L04 - C - A6 54 5460 2767
L04 - C - A7 54 4958 2539
L05 - C - A3 45 3796 1751
L05 - C - A4 45 3999 1891
L05 - C - A5 45 3690 1550
L05 - C - A6 45 3663 1977
L06 - C - A4 6083 3683
L06 - C - A5 6058 3099
L07 - C - A2 45 5835 2986
L08 - C - A3 45 4285 2142
L08 - C - A4 45 4307 2243
L09 - C - A2 45 5481 2438
L09 - C - A3 45 5405 1818
L10 - C - A2 - - - - - - - -
unos 500 g de peso seco (en 10 fragmentos de de muy alta durabilidad; como se comprobó con
unos 50 g cada uno) a ciclos de 10 minutos de la realización de 39 ensayos de inmersión estática

golpeo, en el interior de un tambor sumergido o ensayo Dusseault (Figura 54).
en agua; las paredes del tambor están formadas El ensayo de inmersión estática consiste
por una malla metálica de 2 mm de abertura en sumergir una muestra en agua durante 24
(Figura 53). horas, determinando a lo largo de ese tiempo la
Con este ensayo se obtiene el denominado evolución de la turbidez del agua y del deterioro
“Índice Sehudes” que es la relación entre el de la muestra, según las siguientes categorías:
peso final y el peso inicial de la muestra. Suele t A – Sin deterioro visible.
utilizarse como referente el índice del 2º ciclo t B – Algún deterioro (desprendimiento de
(Id2); en este caso se ha realizado un solo ensayo, pocos fragmentos o esquirlas).
con tres ciclos, obteniéndose un Índice Sehudes t C – Deterioro medio (se conserva la forma
del 98,5 %, correspondiente a rocas de muy alta pero la superficie se deteriora).
durabilidad. t D – Gan deterioro (se destruye la forma
Se ha realizado solo un ensayo Sehudes, pues, casi por completo).
dada la naturaleza de las rocas estudiadas, es t E – Desintegración total.
previsible que todas pertenezcan a la categoría
77
Figura 53. Ensayo de inmesisón dinámica con una muestra de la CV–13

Figura 54. Ensayos de inmersión estática con muestras de la CV–13

Los ensayos de inmersión estática realizados t Y, sobre todo, poder determinar algunas pro-
tenían dos objetivos: piedades índice como son la porosidad eficaz
t Comprobar, como se ha dicho, que las y el peso específico seco de las muestras.
muestras no sufrían ningún tipo de altera-
ción (todas estuvieron en la categoría A, sin Para este último objetivo se determinó, para
deterioro visible) y que por tanto no era ne- cada muestra (Figura 55), el peso de la muestra
cesario realizar más ensayos de inmersión saturada (a 24 horas) con la superficie seca,
dinámica el peso de la muestra sumergida (con balanza
78
Figura 55. Peso de las muestras secas y saturadas con la superficie seca (izquierda)
y saturadas en balanza hidrostática (derecha) de muestras de la CV–13.
hidrostática) para obtener el volumen y el peso cíficos de los minerales que la componen; el mé-
de la muestra seca en estufa. todo del picnómetro utilizado no es válido para
Con objeto de poder conocer con suficiente rocas con textura porfídica compuestas por mine-
aproximación la porosidad total de las muestras, rales diferentes, pero es suficientemente aproxi-
se determinaron en tres muestras el peso especí- mado para el tipo de roca que se está estudiando.
fico relativo de las partículas, por el mismo pro- En la Tabla 27 se resumen los resultados de
cedimiento (ensayo del picnómetro) que es utili- todos los ensayos de alterabilidad y de determi-
zado para los suelos. nación de las propiedades índice realizados.
Para ello se procedió a triturar fragmentos de En dicha Tabla se indica, entre paréntesis los
las muestras de roca (Figura 56) hasta disponer valores del peso específico relativo de las partícu-
de la suficiente cantidad, en cada una de ellas, las adoptadas para algunas muestras (media de
para realizar los ensayos con 6 picnómetros. las tres realizadas) y se indica con cursivas la po-
El peso específico relativo de las partículas en rosidad total obtenida con dicho peso específico
una roca es la media ponderada de los pesos espe- de las partículas.
Figura 56. Operaciones para la determinación del peso específico de las particulas,
mediante picnómetros, con muestras de la CV–13
79

Ensayos de alterabilidad y determinación de propiedades índice
Ensayos de alterabilidad Propiedades de índice
Ref. Índices de slake (%)

Deterioro en ne(24) γd Gs n
inmersión (%) (kN/m³) - (%)
Id1 Id2 Id3
L01 - C - A1 1LQJXQR



L03 - C - A3 - -
L03 - C - A4 - -

L05 - C - A3 - -
L05 - C - A6 - -


L07 - C - A2 - -


80

Resumen de propiedades índice de las muestras
Propiedades de índice
Ref.
ne(24) (%) γd (kN/m³) Gs n (%)
min med max min med max - min med max
L01 - C
L02 - C
L03 - C
L04 - C
L05 - C
L06 - C
L07 - C
L08 - C
L09 - C
L10 - C
0tQLPR
Media
0i[LPR
En la Tabla 28 se presenta, para cada una conocida como Montaña del Oro (Figura 57) y
de las 10 muestras de esta segunda campaña, servirá para mejorar los accesos por el norte y
un resumen de los valores e intervalos de los el este de la ciudad, permitiendo llegar hasta las
mismos obtenidos para las propiedades índice playas desde la carretera sin el penoso recorrido
determinadas. a través de las calles de la localidad de Cullera.
La infraestructura tendrá una entrada situada a
ESTUDIO EXPERIMENTAL EN LOS SONDEOS espaldas del centro comercial Sabeco y conecta
PARA EL TÚNEL DE CULLERA mediante una rotonda con la N–332.
Geológicamente la zona atravesada por el
Breve descripción del estudio túnel está compuesta, fundamentalmente, por
para el proyecto del Túnel en Cullera formaciones del Cretácico Superior: dolomías
La empresa IVA-LEYING, S.A. está redac- cristalinas, calizas, brechas poligámicas y mar-
tando el “Proyecto Básico del Túnel Urbano gas; en el anexo nº 1 se adjunta una descripción
en la Montaña del Oro en Cullera (Valencia)”, geológica más completa.
para la División de Carreteras de la Conselleria Para el reconocimiento geológico y geotécnico
d’Infraestructures i Transport de la Generalitat se han realizado, entre otras labores, 10 sondeos a
Valenciana. rotación, con extracción continua de testigo, con
Se trata de un túnel de aproximadamente las características que se indican en la Tabla 29 y
1,5 kilómetros, que abrirá un paso a través de la una longitud total de 762,15 m.
81
Figura 57. Futuro túnel en la Montaña del Oro (Cullera)

Fuente: iva-leying, s.a.
82
Tabla 29. Sondeos realizados para el estudio del Túnel de Cullera

Sondeo Ref. nº Localización Dirección Longitud (m)
S–1 5DGDUPHWHRUROyJLFR 9HUWLFDO

SE–1 &DOOH8UE%DKtD3DUN 9HUWLFDO
SE–2 'HWUiV8UE%DKtD3DUN
SE–4 8UE(O3HGUHJDO 9HUWLFDO
SE–5 &DPSLQJ
6:± Cantera
6:±D 8UE%RQDYLVWD
6:±E 8UE%RQDYLVWD 9HUWLFDO
6:±D 'HWUiV&HPHQWHULR 9HUWLFDO
6:± 'HWUiV'HSyVLWR 9HUWLFDO
1RWD7RGRVORVVRQGHRVVHUHDOL]DURQFRQVRQGDVQRUPDOHVH[FHSWRORVVRQGHRV
6±6(±6:±\6:±DTXHVHUHDOL]DURQFRQVRQGDWLSR³ZLUHOLQH´
Fuente: IVA-LEYING, 2008.
En la Figura 58 se indica la situación de estos

sondeos y en las Figuras 59 y 60 se muestran
como ejemplo la ejecución de los sondeos S–1 y
SW–2a respectivamente.
Figura 59. Ejecución del sondeo S–1

Fuente: IVA-LEYING, 2008.
Figura 58. Situación de los sondeos

de reconocimiento para el Túnel de Cullera Figura 60. Ejecución del sondeo SW–2a
Fuente: IVA-LEYING, 2008. Fuente: IVA-LEYING, 2008.
83

Mecánica de Rocas Correlación Entre La

Cargado por

Información del documento

Título original

Derechos de autor

Formatos disponibles

Compartir este documento

Compartir o incrustar documentos

Opciones para compartir

¿Le pareció útil este documento?

¿Este contenido es inapropiado?

Copyright:

Formatos disponibles

Mecánica de Rocas Correlación Entre La

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

Copyright © 2015. Programa Editorial Universidad del Valle. All rights reserved.

CEP-Banco de la República-Biblioteca Luis Ángel Arango

Universidad del Valle

Título: Mecánica de Rocas. Correlación entre la Resistencia a

Rector de la Universidad del Valle: Iván Enrique Ramos Calderón

© Universidad del Valle

Diseño de carátula y diagramación: Hugo H. Ordóñez Nievas

Impreso en: Artes Gráficas del Valle S.A.S.

Universidad del Valle

Este libro, o parte de él, no puede ser reproducido por ningún

El contenido de esta obra corresponde al derecho de expresión

Cali, Colombia, marzo de 2015

La resistencia a compresión uniaxial, o Re- misma y ese proceso o método de determina-

También es necesario para la evaluación de necesita, o bien porque, sencillamente, no puede

Relación con otras propiedades índice

Métodos para la estimación y/o determinación

Ensayo de Tracción Brasileña

determinación y correlación RCS

Ensayo de Carga Puntual

Efectos del refrentado

Medición Ensayo de Compresión Uniaxial

Tomado de: Serón, J.B. 2007

Capítulo 1 Ensayos con muestras de un talud de la carretera

En las siguientes líneas me gustaría expresar mi

Universidad del Valle en la cual actualmente

Ing. Manolo Adolfo Galván Ceballos Ph.D. - M.Sc

homogeneidad estadística; en general dura y

modelizar en muchas ocasiones como un sólido geológicas: litología y estratigrafía, estructura

estructuras de ingeniería. teriores, o de precipitación a partir de una

Para la realización de la investigación, tras la REALIZACIÓN DE ENSAYOS

dos anteriormente. rretera N–332, tramo Gandía-Xeresa.

de Valencia. Resistencia a Carga Puntual con la Resistencia a

COMPORTAMIENTO Y ENSAYOS DE LA MATRIZ ROCOSA

El estudio de la Mecánica de Rocas, resuelve tenso-deformacionales de la misma, sometida a

tura, tipo de cementación y grado de alteración. conocer:

Una roca presenta comportamiento frágil,

ta a deformaciones permanentes. La mayoría de rocas y macizos rocosos frágiles, es fundamen-

La curva de esfuerzo-deformación, en la rama samente. En realidad, microscópicamente,

Procesos de rotura Procesos de rotura microscópica

ta con la formación de una superficie libre,

Un fenómeno similar puede presentarse a

RESISTENCIA A COMPRESIÓN SIMPLE

Se suele entender por “resistencia” a la carga

Figura 4. Compresión simple.

La Resistencia a Compresión Simple (o com-

dirección. Se suele expresar con los símbolos2

Donde, P es la carga de rotura y A la sección

Podría pensarse que los planos de fractura,

Figura 5. Criterio lineal de rotura de Mohr-Coulomb

Sin embargo, la matriz rocosa suele tener

sistencia compresiva, para un mismo estado de

La Resistencia a Compresión Simple de la ma- Factores extrínsecos:

Grauvaca 1.800 800 - 2.200 55 - 150 de la resistencia de la roca al disminuir la

Tabla 2. Clasificación de las rocas a partir de su Resistencia a Compresión Simple

1-5 0X\EODQGD %ODQGD! 0X\EDMD

“maneja” mediante los denominados “criterios

Además, tradicionalmente, la Resistencia a un método satisfactorio para sujetar la probeta

Figura 9. Tracción brasileña

Con este ensayo (como se verá en el punto

RESISTENCIA A LA CARGA PUNTUAL DE

El criterio de Griffith implica una relación: En mecánica de rocas se define la resistencia

haber más de 15 a 25 ejemplares con una di-

En gran Bretaña, el método fue examinado

1-5 0X\EODQGD %ODQGD! 0X\EDMD

± %DMD %DMD

± 0RGHUDGD Media

± $OWD $OWD

± 0X\DOWD 0X\DOWD

! ([WUHPDGDPHQWHDOWD ([WUHPDGDPHQWHDOWD