Universidad Politécnica de Chiapas

Ingeniería Mecatrónica
Expresión oral y escrita II
Oscar Gómez Ovando – 181056

TÉCNICAS PARA ESCUCHAR

La habilidad de saber escuchar resulta más complicada de desarrollar que la de

comunicar, sin embargo, proporciona más autoridad e influencia que esta última.
Es decir, si alguna persona es un buen comunicador, pero no sabe escuchar se
corre el riesgo de comunicar en forma elocuente cosas que no le interesan a la
gente.

Es importante hacer la observación que pasamos más tiempo escuchando que

hablando, esto hace referencia a que estamos más expuestos a estar recibiendo
información que a transmitirla. Mucha gente centra su atención en lo que va a
decir después de que termine de hablar la otra persona. Ni siquiera intentan
comprobar los que creen haber oído, y mucho menos reconocer el tono o los
matices emotivos; con lo cual no resulta tan conveniente.

El saber escuchar es importante porque quien sabe escuchar atentamente,

descubre y se beneficia no solo del estilo de los demás, sino también del
contenido de sus mensajes. Dentro de la habilidad de escuchar existen ciertas
técnicas que pretenden facilitar el desarrollo de esta, las cuales son:

 Dejar de hablar, es decir, usted no puede escuchar si está hablando.

 Hacer que el que habla se sienta cómodo. Ayúdelo a sentirse que es libre
de hablar.
 Elimine y evite las distracciones, por ejemplo, el distraerse escribiendo o
jugando con pedazos de papel entre otros.
 Tratar de ser empático con el otro. Trate de ponerse en su lugar, es decir,
comprender su punto de vista.
 Ser paciente. Dedíquele el tiempo necesario, no interrumpa.
 Una de las más importantes, mantener la calma.
 Concentrarnos en lo que nos transmiten, es decir, escuchar palabras y
gestos.
 Evitar barreras, no hacer suposiciones previas.

Por otra parte, también debemos tomar en cuenta la comunicación no verbal,

demostrando lo que se esta escuchando. Al hablar de esta comunicación se
refiere a los gestos, por ejemplo, mantener el contacto visual, sonreír, asistir y
negar cuando el interlocutor lo haga, todo esto teniendo como objetivo el poder
demostrar interés.

El saber escuchar trae consigo beneficios que pueden resultar de gran ayuda en
momentos críticos como, por ejemplo:

 Eleva la autoestima del que habla, pues le permite sentir que lo que dice es
importante para el que lo escuchar, logrando una comunicación e
interrelación más fluidas, respetuosas y agradables.
 Le permite al que escucha identificar intereses y sentimientos de que habla,
logrando una comunicación más efectiva con su interlocutor.
 Se aprenden los conocimientos y percepciones del otro.
 Reduce notablemente las potencialidades de conflictos por malas
interpretaciones en las comunicaciones.

Ahora bien, existen diferentes aspectos lo cual impide un exitoso desarrollo de

esta habilidad, los cuales es recomendable tomar en cuenta y evitar siempre.

 Falta de interés sobre el tema.

 Fijarse demasiado en el exterior y descuidar el contenido
 Interrumpir al que habla
 Concentrarse en los detalles y perderse lo principal
 Crear o tolerar las distracciones
 Permitir que las emociones bloqueen el mensaje

Es común que, al momento de aplicar esta habilidad, seamos selectivos,

escuchando principalmente las opiniones que coinciden con las nuestras.

Hay que tomar en cuenta que cuando se nos escuchar auténticamente tenemos
tendencia a expresar más cosas, y con mayor profundidad y riqueza de detalles
que si se nos escucha superficialmente. En conclusión, podemos comprender la
importancia del saber escuchar, si bien es un proceso de comunicación como el
habla o la escritura, no debe tomarse a la ligera porque trae consigo diferentes
beneficios y resulta un poco más importante que las anteriores.

Siendo que se necesita coraje para pararse y hablar. Pero mucho más para
sentarse y escuchar.