Nombre: Mantuano Macías Diego Omar

Curso: Religiones Comparadas

Profesora: Dorothea Ortmann
Resumen #5

El judaísmo. Pasado, presente, futuro. Hans Küng

En primer lugar, el autor comienza a explicar la historia pre-estatal de Israel con la idea
de la “toma de la tierra”. En torno a esta idea giran una serie macro constelaciones de
paradigmas de las tribus del Israel primitivo. El primer paradigma que explica la toma
de la tierra sigue siendo discutido, debido a que no se acepta la idea de un “pueblo
peregrino de Israel” por el desierto. Sin embargo, los especialistas han considerado tres
modelos de reconstrucción histórica de la toma de la tierra. El primero es el modelo de
conquista que consiste en la suposición de que la toma de la tierra se da mediante varias
oleadas de nómadas guerreros provenientes del desierto. El segundo es el modelo de
inmigración que supone una sucesiva sedentarización pacífica de nómadas pastores
provenientes de zonas fronterizas con el desierto. El tercer modelo de la transformación
social que supone un proceso de cambio de la población mediante un movimiento
pacífico o una lucha política y de una revuelta llevada a cabo por los campesinos.

Por otra parte, habría que preguntarse por rol que desempeñan los testimonios literarios
de la biblia en el proceso histórico de la “toma de la tierra” en Israel. Las narraciones
bíblicas contienen algunas tradiciones antiquísimas y son parte de la forma constructiva
de un modelo socio-político y religioso integrado. En el aspecto religioso se encuentra
la creencia en Yahvé junto con las diversas tradiciones culturales del grupo emigrante
desde la salida de Egipto. Para Hebert Donner, “la convicción de que Israel vino del
desierto, no puede ser una pura invención. Ellos trajeron consigo a Yahvé y también las
tradiciones de la salida Egipto”. Esto sigue confirmando que la “toma de la tierra” de los
pueblos Israel tenían una base en la creencia y en la tradición proveniente del desierto.
La creencia en Yahvé se fue imponiendo a lo largo de todo Palestina. Yahvé se
convirtió en el centro y fundamento de Israel. Un Dios que está plenamente
comprometido con su pueblo, a través de una alianza en el monte Sinaí. Esta alianza
incluía la soberanía de Dios y la comunión con el mismo sobre el pueblo elegido de
Israel. Las doce tribus de Israel estaban congregadas alrededor del arca de Yahvé. El
símbolo de la alianza entre Dios y el hombre. Esta constituía un santuario central en el
pensamiento político y religioso de la sociedad tribal israelita antes de convertirse en
Estado.
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Curso: Religiones Comparadas
Profesora: Dorothea Ortmann
Los estudios revelan que hubo una crisis en la naciente sociedad israelita, y esta
correspondía a ámbitos religiosos-políticos. Esta crisis dio lugar a cambios en el
paradigma, dando lugar al desarrollo de la sociedad israelita: economía, evolución
artesanal y militar, pero además la sedentarización permitió la coordinación interna para
defensa común frente al exterior. Los filisteos constituían una potencia militar que se le
podía hacer frente uniendo fuerzas entre los pueblos. En el practica del ensayo y error
surge la idea la monarquía que permita la unificación y el orden los pueblos en favor de
un bien común. Es así, como se da el paso de la sociedad tribal a una nación –Estado. A
pesar de la disputa presentes en textos antimonárquicos y pro monárquicos, el primer
rey fue Saúl. Saúl instauro una monarquía de corte militar durante ocho años. Luego le
sucedió David, un judío de origen humilde, Belén. Existen varias fuentes históricas que
evidencia la importancia de David para el pueblo de Israel. La política interior de David
estuvo caracterizada por la unificación y consolidación del ejército de Israel. Además,
que promovió a Jerusalén como la capital y centro del culto a Yahvé. Jerusalén alcanzo
el carácter sacro gracias a ser la ciudad de acogida del “Arca de Dios”. Con respecto a la
política exterior, David procuró la expansión del territorio de Israel. En este sentido lo
que comenzó como una guerra defensiva se convirtió en expedición y conquista.

Con todos estos antecedentes, David se convirtió en el símbolo de los reyes en Israel e
inclusive responde al apelativo de hijo de Dios. Haciendo de David una figura
mesiánica y que brinda esperanza y de orientación profética. Para las religiones como el
judaísmo, cristianismo y el islam, la persona de David mantiene un perfil distinto. Para
el judaísmo es presentado como el orante y profeta. Además de ser observante de la ley,
que la estudia a todo instante; un pecador y penitente ejemplar. Para el cristianismo se le
conoce como el autor de los salmos. Los evangelios de Mateo y Lucas ubican a Jesús de
Nazaret como descendiente directo de David. Es por esto que a Jesús se le da el
calificativo de hijo de David. Para el islam, David es una figura prominente del Corán.
Aparase como el khalifa de Alá. Además de presentar a David como el profeta al que se
le revelo Alá, dando origen a los salmos.

La historia de los sucesores de David, se encuentra en el libro de los Reyes y fue

particularmente difícil encontrar un digno sucesor a pesar de los 19 hijos de diferente
ascendencia. Salomón mostró una imagen disonante desde el mismo instante de su
acceso al poder. Él recibe un reconocimiento divino y se le concede sabiduría. El rey
Salomón construyó varios templos, reforzó el ejército, fomento las artes y las ciencias y
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Curso: Religiones Comparadas
Profesora: Dorothea Ortmann
procuró mantener las relaciones internacionales. No obstante, esto tuvo un precio que
fue el alejamiento del Reino de su pueblo, un empobrecimiento paulatino de las masas.
La separación de los dos reinos era una posibilidad inminente. El reino del Norte, más
fuerte, capital Samaría, carente de tradición y será reconstruida por el rey Omrí. En el
sur, más apartado y cerrado, nace el diminuto reino de Judá, con Jerusalén como capital.
Por otro lado, el profetismo desempeñó un papel fundamental en estos reinos. La figura
del profeta es aquella que anuncia con franqueza algo. Ellos son los heraldos de Dios. El
profeta, consciente de su nulidad humana, experimente su llamamiento estando ante
Dios. Este llamado este correspondido con el anuncio y cumplimiento de la voluntad de
Yahvé. Existen clases profetas unos son de la palabra, que pasaron a la leyenda como
Elías y Eliseo, otros son escritores como Amós y Oseas. Los profetas escritores eran los
radicales críticos de su tiempo. Critican la concepción que el pueblo tiene de la historia,
el culto de los sacerdotes y la praxis jurídica de los que se encuentran en el gobierno.
Los profetas no estaban en contra de la monarquía, ni de los sacerdotes, pero eran
especialmente agudos para denunciar el compadreo oportunista de la política exterior.
Procuraban hacer saber que Dios quería paz para los pueblos y no necesariamente la
guerra.

La herencia profética deja como resultado la consciencia de que Dios es único y que no
se tolera junto a él a otros dioses, la búsqueda de la justicia, la veracidad, felicidad, paz
y amor. En el judaísmo, los libros de los profetas fueron considerados como simples
interpretaciones. Para el cristianismo los profetas son los precursores y heraldos de
Jesús. En el islam, adán, Abrahán, Moisés, David y Jesús fueron estimados como
profetas enviados por Dios que legaron a la posteridad un mensaje y escrito especiales.

Una crisis en la sociedad israelita dio lugar a la separación de los dos reinos. El reino
del Norte estuvo enredado en guerras con Siria, con los amonitas y moabitas. Sin
embargo, el imperio neoasirio, comenzó a convertirse en potencia militar y conquistó
gran parte del norte. Esto provocó un gran exilio. Lo que se llamaba el reino del norte
ahora se llama Samaría. El reino del Sur, considerada el heredero del Estado davídico y
de su tradición religiosa, tuvo una gran dependencia del reino del Norte. El rey Josías
intento una restauración de las antiguas tradiciones y la unificación de los reinos con la
llamada reforma deuteronomica. No obstante, el sur caía bajo el dominio del imperio
neo babilónico. Y así, esta política no pudo realizarse con total libertad y se vio
sometido por los babilónicos.