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El Futuro Según Stephen Hawking

En este video el físico teórico, astrofísico, cosmólogo y divulgador científico


Stephen Hawking pretende mostrarnos una pincelada acerca del futuro y de cómo
la ciencia está a punto de cambiarnos la vida de forma radical a partir de las
investigaciones completamente revolucionarias y las consecuencias de este
progreso científico y tecnológico. Dichas consecuencias impacto directo en todos
los aspectos de nuestras vidas; el estar más seguros, la manera en como jugamos
y nos divertimos, extender la esperanza de vida e incluso potencias nuestras
capacidades receptosensoriales, solo por poner algunos ejemplos, ya que, con la
tecnología a nuestra disposición, las posibilidades son ilimitadas.

Hawking asegura dentro de este episodio que el futuro de la tecnología está en las
hiperconexiones o tecnología conectada, pues las máquinas se están conectando
y cada vez más disciplinas e industrias se van uniendo. Estas hiperconexiones
están dando una nueva pauta a hacer hallazgos e incluso dar brecha a nuevos
campos científicos.

Todas las máquinas que se han construido a lo largo de historia cumplen sus
funciones a partir de las “indicaciones” que nosotros mismos le hemos
programado para llevar a cabo, el problema es que no pueden tomas decisiones
razonadas como lo hacemos nosotros, son prácticamente estúpidas, afirma
Hawking, sin embargo, conectar máquinas entre sí les permite recibir información
acerca del mundo que les rodea, lo cual abre una puerta a la investigación de una
verdadera inteligencia artificial.

Jim Al-Khalili, físico teórico de Suiza, investiga una novedosa y revolucionaria


tecnología que permite a las máquinas enseñarse unas a otras y tomar sus
propias decisiones. Él menciona: “los científicos de la Escuela Politécnica Federal
de Zúrich, están probando un innovador concepto conocido como bucle de
retroalimentación inteligente en una nueva generación de máquinas, algo nunca
visto antes”.
Al igual que los humanos, las nuevas máquinas son capaces de incorporar
información nueva a sus procesadores centrales a partir de algoritmos de
aprendizaje previamente programados. Una vez que los artefactos han hecho una
exploración de la nueva información, desafío o tarea por realizar, llevan a cabo un
análisis para compensar errores, esto mediante la repetición. Es entonces cuando
son capaces de compartir la información a otros dispositivos, de modo que estos
últimos podrán llevar a cabo las tareas sin errores y a la primera.

Estas máquinas son además capaces de aprender a realizar tareas sumamente


complejas a una velocidad micho mayor de lo que le llevaría a un humano
aprender a hacerlo y tomar las decisiones basándose en las decisiones de otras
máquinas, es decir trabajan en conjunto para poder desempeñar tareas y
actividades asignadas. ¿Supone entonces esta tecnología el principio de una
nueva era? La promesa de contar con máquinas conectadas entre ellas es uno de
los ejemplos tangibles de un mundo hiperconectado, un mundo en el que las
máquinas unas de otras y colaboran sin interacción humana

A medida que las máquinas vayan desarrollando su capacidad para trabajar en


conjunto las personas irán pasando de dirigirlas a supervisarlas. Se pueden
imaginar cientos de aplicaciones de estas tecnologías en campo, desde
camareros dispositivos que repartan el correo hasta asistentes de doctor, estos y
otros más usos al final de la década pasarán de ser solamente ideas a una
realidad inevitable.

Estos descubrimientos, como ya se menciona, están destinados a extender,


mejorar y preservar la calidad de vida de las personas, es por eso que Daniel
Kraft, director ejecutivo de Future Med trabaja en la investigación del exoesqueleto
de las gambas el cual contiene un agente coagulante natural y que ayudaría a
salvar miles de vidas cada año, todo esto al realizar conexiones a nivel molecular.

Los exoesqueletos producen un material denominado quitosano, los ingenieros


biológicos han encontrado la manera de mejorar sus propiedades naturales
agregando una masa nanoscópica que al mezclarse con la sangre forma un
coagulo hasta mil veces más viscosa que en su estado normal. La aplicación de
este descubrimiento en el campo va desde su uso en heridos de guerra o en
accidentes de tránsito, intervenciones quirúrgicas e incluso hasta en emergencias
cotidianas en que los servicios médicos no están tan al alcance. Así mismo se ha
diseñado una fórmula que hace la función inversa, pues al ser aplicado en el
quitosano, la sangre se hace líquida de nuevo, de modo que el hemogrip puede
ser retirado para la adecuada intervención médica. Las posibilidades de sobrevivir
a un accidente van cada vez más en aumento gracias a los científicos que crean
conexiones a nivel molecular.

Por su parte otros científicos de diferentes áreas combinan sus conocimientos e


investigaciones de tal forma que podrían crear una nueva especia de máquina
voladora, una máquina independiente, inteligente y sobre todo que vuele con la
misma agilidad que un ave y Chris Eliasmith teórico neurocientífico está a punto
de descubrir si las palomas esconden el secreto para volar sin tripulación.

Dichas investigaciones analizan las posibles conexiones entre las palomas y los
aviones del futuro, lo que se pretende es descubrir los patrones de respuesta tan
ágiles que les brinda el sentido de la vista y el proceso a nivel neuronal en las
palomas que las lleva a controlar su vuelo. Un grupo de ingenieros del Instituto
Tecnológico de Massachusetts está muy al pendiente de estas investigaciones.
¿Será posible que las palomas sirvan de inspiración para un avanzado aeroplano
robótico de verdad? Enlazar cerebros a cuerpos artificiales presenta un nuevo
abanico de nuevos retos, reproducir la fluidez de un movimiento natural como el
vuelo en un aparato mecánico no es tarea fácil.

Fundamentalmente se utilizan los conocimientos de investigaciones previas que


los ingenieros han obtenido a partir del estudio de las palomas, basarse en lo que
se ve en el último momento para tomas decisiones aviónicas correctas. Los
avances sugieren que aviones autónomos sin tripulación e inteligentes estarán
surcando los cielos en 2020.

La biología aún tiene mucho que aportar a la ingeniería, según se vayan


desentrañando los misterios de la navegación de las aves y la aerodinámica de
sus alas se verá un tipo completo distinto de avión Si las conexiones entre pájaros
y aviones están ayudando a definir el futuro de los aviones no tripulados ¿podría la
conexión entre la electricidad y los automóviles dar lugar a mejorar el rendimiento
de los vehículos que funcionan con gasolina?

Con el evidente costo económico y ambiental que se representan el uso de los


hidrocarburos es claro que los coches eléctricos son el transporte del futuro. Thurc
es el nuevo coche deportivo de alto rendimiento, el cual está muy lejos de ser un
carro ordinario, pues al ser completamente eléctrico y gracias a su tecnología,
supone un salto cualitativo por delante de sus competidores.

El chasis está fabricado de fibra de carbono, lo que le brinda rapidez y una


aerodinámica superior. Cuenta con muchas características avanzadas, suspensión
en fórmula, sistemas de frenos vanguardistas y es el resultado de un diseño
revolucionario, pues solo tiene 3 ruedas, esto le proporciona dos ventajas frente a
sus rivales; 90 kilos menos de peso y un mejor agarre a la carretera. Pero la
tecnología más sobresaliente que presenta el Thurc es su central eléctrica, integra
cincuenta y seis baterías de celdas que contienen un nanomaterial excepcional
denominado Litio Ferrofosfato (LiFePo4), las cuales tienen la propiedad de
almacenar más carga, de modo que estas cincuenta y seis baterías contienen más
densidad e carga. Otra ventaja importante de señalar es que son 60% más ligeras
y proporcionan 20 veces más energía que las baterías de coches convencionales.
La necesidad de reducir la dependencia de los combustibles fósiles nos lleva la
conexión definitiva, a una energía atómica y sin límites que será posible gracias a
la fusión nuclear, la cual proporciona una energía segura, limpia y prácticamente
ilimitada.

Máquinas programadas para aprender, apósitos apegados a procesos biológicos,


coches eléctricos de resistencia superior y energía sin límites basada en la
potencia de las estrellas, estas son solo algunas de las hiperconexiones que
definirán el futuro de nuestras vidas y de nuestro planeta.

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