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ISSN: 0034-7485
rcca@ica.co.cu
Instituto de Ciencia Animal
Cuba
Mediante el método de análisis de varianza multivariado con mediciones repetidas en el tiempo (90, 180,
270 y 360 d) se estudió el efecto de la fase lunar durante el establecimiento del piñón florido (Gliricidia
sepium) como cerca viva. Los tratamientos consistieron en el corte y la siembra del piñón florido en cada una
de las fases de la luna: a) cuarto menguante, b) luna nueva, c) cuarto creciente y d) luna llena. Se midió en
distintos momentos del establecimiento, la altura de la estaca, la altura de inserción del primer y último
rebrote, el número y distribución de los rebrotes, la longitud del último rebrote y la supervivencia. Los
resultados mostraron que no hubo diferencias entre las distintas fases de la luna para la altura de la estaca,
el diámetro, la altura de inserción del último rebrote y el número de rebrote por planta. Los valores oscilaron
entre 2.01 y 2.24 m, 3.58 y 4.21 cm, 1.85 y 2.07 m y 13.17 y 19.71 rebrotes, respectivamente. Las distintas
fases lunares mostraron diferencias (P < 0.05) en la altura de inserción del primer rebrote y la longitud del
último rebrote. En estos indicadores los mejores valores se alcanzaron en la fase de cuarto creciente (0.92 m)
y. cuarto menguante (42.37 cm), respectivamente. En todas las fases de la luna el mayor porcentaje de los
rebrotes (más de 70 %) se encontró en los estratos más bajos de la estaca. Los resultados de este estudio
indicaron que la fase lunar influye en algunos indicadores del crecimiento durante el establecimiento del
piñón florido como cerca viva. Se recomienda realizar el corte y la plantación de esta especie durante la fase
de cuarto menguante de la luna.
Palabras clave: establecimiento, fase lunar, Gliricidia sepium
una de las fases de la luna (cuarto menguante, para la comparación de las medias. El número de
luna nueva, cuarto creciente y luna llena) du- rebrotes por plantas se transformó según √ x.
rante el mes de septiembre.
Resultados
Las estacas se plantaron en una cerca de
alambre de púas y postes de concreto sobre Al comparar la altura de la estaca, el diáme-
un suelo ferrálico rojo típico (Anon 2000a) sin tro, la altura de inserción del último rebrote y el
la presencia de los animales. Estas se obtuvie- número de rebrote por planta, no se encontra-
ron de árboles con más de cinco años de esta- ron diferencias entre los tratamientos en los
blecidos, para que lograran un buen desarro- distintos momentos del establecimiento del pi-
llo. Midieron 2.00 m de longitud y 4.0 cm de ñón florido (tabla 1).
diámetro aproximadamente. El corte de la parte En los indicadores altura de la estaca y
basal de la estaca se realizó de forma tradicio- diámetro, no se observó un crecimiento de-
nal, se dejó corteza siempre en una parte de la finido en ninguna de las fases de la luna.
misma. En el extremo apical se realizó un corte Los valores encontrados fueron muy simila-
a bisel. res a las características que tuvieron las es-
Se utilizaron 20 plantas/tratamiento y en tacas en el momento de la plantación (tabla
cada uno de los muestreos se midió la altura 1). En todos los tratamientos, la altura de
de la estaca, la altura de inserción del primer y inserción del último rebrote fue menor que la
último rebrote, el número y distribución de és- altura de la estaca y disminuyó 0.22, 0.22,
tos, la longitud del último, además de la super- 0.17 y 0.16 m en las fases de cuarto men-
vivencia. La metodología de muestreo que se guante, luna nueva, cuarto creciente y luna
utilizó para estos indicadores fue similar a la llena, respectivamente.
de otros trabajos con árboles establecidos Las distintas fases lunares mostraron dife-
como cercas vivas (Alonso et al. 2000). En es- rencias significativas en la altura de inserción
tos estudios, las observaciones para las dis- del primer rebrote y la longitud del último re-
tintas alturas y la distribución de los rebrotes brote (tabla 2). La altura de inserción más baja
siempre se realizan del suelo hacia arriba. (0.68 m) se encontró en la fase de cuarto men-
Para el análisis estadístico se utilizó el mé- guante de la luna, que no difirió de la luna llena.
todo de análisis de varianza multivariado con Esta fase tuvo un comportamiento similar a las
mediciones repetidas en el tiempo (90, 180, 270 fases de cuarto creciente y luna nueva. Los
y 360 d). Los datos se procesaron por el siste- mayores crecimientos en el último rebrote se
ma estadístico InfoStat versión 1 (Di Rienzo et encontraron en las fases de cuarto menguante
al. 2001). Se utilizó la prueba de Hotelling (1951) y luna nueva.
Tabla 1. Comportamiento de la altura de la estaca, diámetro, altura de inserción del último rebrote y
número de rebrotes por plantas en el establecimiento de Gliricidia sepium como cerca viva
Tratamientos Altura de la estaca, Diámetro, Altura de inserción del No. de rebrotes por
m cm último rebrote, m planta1
Media EE± Media EE± Media EE± Media EE±
Cuarto menguante 2.09 0.03 4.21 0.11 1.87 0.03 3.96 (16.67) 0.15
Luna nueva 2.09 0.06 3.89 0.09 1.87 0.06 4.28 (19.71) 0.24
Cuarto creciente 2.24 0.04 3.58 0 . 12 2.07 0.05 3.56 (13.17) 0.21
Luna llena 2.01 0.02 - - 1. 8 5 0.03 3.68 (14.50) 0.16
1
Datos transformados según √ x.
( ) Valores reales
Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 36, No. 2, 2002. 189
Tabla 2. Altura de inserción del primer rebrote y longitud del últi-
mo rebote en Gliricidia sepium establecida como cerca
viva durante diferentes fases lunares
Tratamientos Altura de inserción del Longitud del último
primer rebrote, m2 rebrote, cm
Media EE ± Media EE ±
Cuarto menguante 0.68 a 0.06 42.37a 1.29
Luna nueva b 0.09 ab 1.72
0.85 31.50
Cuarto creciente 0 . 9 2b 0.10 15.26b 1.45
Luna llena 0.71ab 0.07 2 4 . 7 1b 0.74
ab
Datos con diferentes superíndices dentro de cada columna
difieren significativamente (P < 0.05) (Hotelling 1951)
* P < 0.05
Discusión
La distribución de los rebrotes a los 360 d
mostró que más del 70 % de ellos aparecen en No son muchos los trabajos científicos
los primeros estratos de la estaca, es decir, de desarrollados en Cuba en los que se pueda
0 a 2.00 m de altura en todas las fases de la luna corroborar la creencia popular acerca de la
(figura 1). Alonso et al. (2000) encontraron si- influencia de las fases lunares en el prendi-
milares resultados en esta especie. Esto reafir- miento de las estacas. Esta experiencia par-
ma que la distribución de los rebrotes es una te del conocimiento empírico del campesi-
respuesta fisiológica de las plantas y varía se- nado, aunque en muchos países del trópico,
gún las especies. Los mejores porcentajes de es indudable que este razonamiento tiene
supervivencia durante los distintos momentos un fundamento científico (Lieber 1984, Ba-
del establecimiento se encontraron en las fa- rón 1986, Bellapart 1988 y Cuervo y Zuluaga
ses de cuarto menguante y luna llena. 1994).
%
90
80
70
60
50
40
30
20
10
0
Estrato 1 (0-1 m) Estrato 2 (1-2 m) Estrato 3 (> 2 m)
Es evidente que cuando se siembra o se evita las resiembras. Por otro lado, en estos cul-
trasplanta, según las fases de la luna, no sólo tivos la luna nueva facilita la germinación. Ade-
se cumple con el establecimiento de un calen- más, en las plantas en crecimiento se produce
dario, sino que además se aprovecha la posi- un período de desarrollo radicular y foliar equi-
bilidad de emplear las fuerzas de la naturaleza. librado, que se interpreta como un tiempo de
De una manera u otra, la fuerza de la gravedad reposo (Anon 2000b).
de la tierra y la luminosidad de la luna pueden Es oportuno señalar la gran variabilidad
influir en los procesos de la germinación y el genética que muestran las especies arbóreas
crecimiento de las plantas (Anon 2000b). cuando se utilizan en diferentes sistemas de
Sin embargo, parece que estos criterios no explotación (Stewart 1999). En este sentido,
influyen en algunos indicadores del crecimien- Febles et al. (2000) plantearon que la gran
to secundario de las plantas leñosas cuando variabilidad genética de los árboles puede
se reproducen por estacas, ya que no se en- conspirar contra la ejecución de experimen-
contraron diferencias entre las distintas fases tos diseñados adecuadamente, debido fun-
de la luna con respecto a la altura de la estaca, damentalmente a la gran mortalidad que pue-
el diámetro, la altura de inserción de la última de haber en estas especies en dependencia
rama y el número de rebrotes por planta. del lugar donde se introduzcan. Estos crite-
Además, se conoce que el crecimiento del rios pudieron influir en la supervivencia que
tallo en grosor es consecuencia de la activi- se logró en las distintas fases lunares du-
dad del anillo de cambium y de felógeno rante este estudio.
(González 1987). Sin embargo, durante el esta- Cuando los árboles se reproducen por es-
blecimiento en ninguno de los tratamientos tacas, la altura de la planta se alcanza a partir
utilizados se mostró claramente esta actividad. del crecimiento apical de sus rebrotes lo que
Por otro lado, el influjo lunar sobre las plan- provoca que la parte de la estaca que está por
tas puede determinar una mayor actividad fi- encima del último rebrote muera. Esto se ob-
siológica, al incrementar la velocidad de tras- servó en este trabajo, lo que provocó que la
lación de los líquidos en los tejidos conducto- altura de la estaca disminuyera con el tiempo
res durante la fase de la luna llena. Así, un en todas las fases de la luna.
corte en esta fase facilita una pérdida de líquido Los resultados de este estudio indicaron la
debido a la atracción lunar sobre éste, por lo que influencia de la fase lunar en algunos
las distintas fases de la luna indicaron un com- indicadores del crecimiento durante el estable-
portamiento significativo en la longitud del últi- cimiento de la Gliricidia sepium, introducida
mo rebrote. Los mejores resultados se obtuvie- como cerca viva. Además, demostraron la gran
ron para la fase de cuarto menguante. heterogeneidad que se puede encontrar en los
Estos resultados coinciden con los infor- estudios relacionados con la introducción de
mados por Cuervo y Zuluaga (1994) cuando árboles y arbustos en sistemas ganaderos. Se
estudiaron el prendimiento de diferentes es- recomienda realizar el corte y la plantación de
pecies arbóreas de uso múltiple bajo la influen- Gliricidia sepium durante la fase de cuarto
cia lunar. Estos autores hallaron una marcada menguante de la luna, ya que en esta fase la
influencia de la luna en el desarrollo de las altura de inserción del primer rebrote es más
plantas y señalaron un mejor comportamiento baja por lo que es necesario proteger la cerca
de todos los indicadores del crecimiento en la viva si los animales están presentes durante el
fase de cuarto menguante de la luna. establecimiento.
En esta fase, los cultivos vegetales una vez
Agradecimientos
que superan el trauma de la plantación,
incrementan el crecimiento radicular y vegetativo Agradecemos a la Dr. Verena Torres y al
que favorece la disminución de la mortalidad y Lic. Luis Martínez Machin la ayuda en los aná-
Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 36, No. 2, 2002. 191
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Recibido: 22 de Junio de 2001.