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RECURSO No.

156-2011

RECURSO No. 156-2011


JUEZ PONENTE: DR. GUSTAVO DURANGO VELA

CORTE NACIONAL DE JUSTICIA - SALA ESPECIALIZADA DE LO


CONTENCIOSO TRIBUTARIO.-
Quito, a 25 de marzo de 2013. Las 11H40.---------------------------------------------------
VISTOS: Avocamos conocimiento de la presente causa en virtud de la Resolución No.
004-2012 de 25 de enero de 2012 emitida por el Consejo de la Judicatura; y, por la
Resolución de Conformación de Salas de 30 de enero de 2012 dictada por el Pleno de
la Corte Nacional de Justicia. En lo principal, mediante sentencia dictada el 18 de
marzo de 2011, el Tribunal Distrital de lo Contencioso Administrativo Nº 5 de Loja y
Zamora Chinchipe con competencia en materia fiscal, rechaza la demanda presentada
por el Ing. Daniel Eduardo Valdivieso Arias, en su calidad de representante legal de la
CONSTRUCTORA DEL SUR C.A. COSURCA, y confirma el acto administrativo contenido
en el Acta de Determinación No. 11020070100007 de 24 de octubre de 2007, dictada
por la Dirección Regional Sur del Servicio de Rentas Internas. Dentro del término
concedido en el Art. 5 de la Ley de Casación, la Empresa actora presenta un escrito
que contiene el pertinente recurso y solicita se suspenda la ejecución de la sentencia.-
Aceptado que ha sido a trámite por el Tribunal Juzgador en providencia de 11 de abril
de 2011, fija además la respectiva caución y suspende su ejecución, conforme a lo
solicitado. Subidos los autos para conocimiento de esta Sala a fin de que confirme o
revoque tal aceptación, se lo admite a trámite en auto de 13 de mayo del mismo año
y se pone en conocimiento de la parte demandada para los fines previstos en el Art.
13 de la Ley de Casación, la que, dentro de tiempo, ha contestado y señalado casillero
donde recibir notificaciones. Concluida la tramitación de la causa y siendo su estado el
de dictar sentencia, para hacerlo se considera: ------------------------------------------------
PRIMERO.- Esta Sala es competente para conocer del presente recurso, en virtud de
lo dispuesto en el numeral 1 del Art. 184 de la Constitución de la República, en
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concordancia con el Art. 1 de la Ley de Casación y el numeral 1, segunda parte del


Art. 185 del Código Orgánico de la Función Judicial.-------------------------------------------
SEGUNDO.- El Ing. Daniel Eduardo Valdivieso Arias, a nombre de CONSTRUCTORA
DEL SUR C.A. COSURCA en el escrito que contiene su recurso (fs. 849 a 854 de los
autos) dice que las causales en las que se fundamenta, son las contempladas en los
numerales primero, tercero y quinto del Art. 3 de la Ley de Casación, pues en la
sentencia recurrida se infringió las siguientes normas de derecho: Arts. 76 numeral 7
literal l, 425, 300 y 169 de la Constitución de la República del Ecuador, Arts. 4, 7, 17,
259, 273 del Código Tributario, Arts. 1 y 10 de la Ley de Régimen Tributario Interno,
Art. 14 de la Ley de Seguridad Social, Art. 18 de la Ley de Modernización del Estado,
Privatizaciones y Prestación de Servicios Públicos por parte de la Iniciativa Privada y
Arts. 115 y 117 del Código de Procedimiento Civil. Respecto de la primera causal del
Art. 3 de la Ley de Casación, que se refiere a la “falta de aplicación” de los Arts. 4, 7 y
17 del Código Tributario, Art. 1 de la Ley de Régimen Tributario Interno y Arts. 169,
300 y 425 de la Constitución de la República del Ecuador, argumenta que hasta el mes
de diciembre de 2007, los gastos deducibles para ser reconocidos como tales, debían
simplemente cumplir con el requisito previsto en el numeral 1 del Art. 10 de la Ley de
Régimen Tributario Interno, esto es, que sean costos y gastos imputables al ingreso
obtenido. Indica que el hecho generador nace luego de descontar a los ingresos
gravados, aquellos gastos que hubiesen sido necesarios para la obtención,
mantenimiento o incremento de las rentas gravadas; por ello, cuando la sentencia
ratifica la glosa correspondiente a “errores de forma en los comprobantes de venta”
por el valor de USD $ 472.091,39 incurre en falta de aplicación de las normas citadas.
Anota que, se ha dejado de aplicar el Art. 4 del Código Tributario que se refiere a la
reserva de Ley para establecer las deducciones, el Art. 7 del mismo cuerpo legal que,
se refiere a la inaplicabilidad de normas reglamentarias que contraiga la Ley, y el Art.
18 de la Ley de Modernización del Estado, Privatizaciones y Prestación de Servicios
Públicos por Iniciativa Privada que prohíbe la exigencia de mayores requisitos a los
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previstos en la Ley, ya que las normas reglamentarias no pueden exigir requisitos


adicionales a los previstos en ella. Continúa argumentando que, la sentencia recurrida
ha dejado de aplicar las disposiciones del Art. 425 de la Constitución de la República
del Ecuador que ordena que, en caso de conflicto entre normas de jerarquía diferente,
se debe aplicar la norma superior, indicando que las normas que debían aplicarse son
las del Código Tributario y la Ley de Régimen Tributario Interno sobre los reglamentos
o la jurisprudencia correspondiente al caso. Señala que se debió aplicar el principio
contenido en el Art. 169 de la Constitución de la República del Ecuador, referente a
que no se sacrificará la justicia por la mera omisión de formalidades, mencionando
que en el período auditado la cultura tributaria del país iniciaba y las circunstancias de
su actividad constructora ubicada en las provincias de El Oro y Loja, impedía obtener
comprobantes de venta de acuerdo a las exigencias reglamentarias; así como los
principios contenidos en el Art. 300 del mismo cuerpo normativo referente a la
equidad e irretroactividad, ya que pese a haberse demostrado la existencia del gasto,
se ha negado su deducibilidad, pretendiendo aplicar normas de inferior jerarquía.
Sobre la falta de aplicación del Art. 14 de la Ley de Seguridad Social, dice que, ello ha
llevado a que la sentencia recurrida considere que todos los emolumentos pagados a
los trabajadores son susceptibles de aportación al Instituto Ecuatoriano de Seguridad
Social, pues la segunda glosa ratificada se sustenta en la “falta de aportes al IESS” por
el valor de USD $ 289.639,19, con lo que deja de aplicar la norma que establece
valores pagados a trabajadores exentos de aporte al IESS, entre ellos alimentos,
trasporte y estadía. Con relación a la tercera causal del Art. 3 de la Ley de Casación
dice que, se ha valorado un medio de prueba inexistente ya que, las conclusiones que
constan en la sentencia como si fuesen del perito, no son a las que arriba el perito
insinuado por la compañía, lo que ha provocado que se haya tomado una decisión que
no está basada en las pruebas actuadas en el juicio, lo cual contraviene el Art. 117 del
Código de Procedimiento Civil, tampoco se cita en la sentencia otras pruebas como
certificaciones del IESS, de instituciones del Sistema Financiero, del propio Servicio de
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Rentas Internas, contraviniendo el Art. 115 del Código de Procedimiento Civil, además,
no se considera la disposición del Art. 259 del Código Tributario que ordena a la
Administración Tributaria probar la existencia de la obligación, lo cual no lo hizo.
Respecto de la quinta causal del Art. 3 de la Ley de Casación, que refiere a la falta de
motivación de la sentencia, inaplicando con ello el literal l) del numeral 7 del Art. 76
de la Constitución de la República y el Art. 273 del Código Tributario, pues alega que,
la sentencia se limita a trascribir partes de las normas, a citar equivocadamente
pruebas inexistentes y sin la debida motivación de normas aplicables al tema,
limitándose a señalar que se han violado la Ley, los Reglamentos y la Jurisprudencia.
Por lo expuesto pide se acepte el recurso planteado y se case la sentencia.--------------
TERCERO.- Por su parte, la Abg. Andrea Aguirre Bermeo, en su calidad de
Procuradora designada por el Director Regional del Sur del Servicio de Rentas
Internas, en el escrito de contestación al recurso (fs. 6 a 10 del cuadernillo de
casación) en defensa de la sentencia impugnada manifiesta que, según el recurrente,
la sentencia infringió las normas de derecho señaladas en su escrito, lo cual no es
verdad, puesto que la misma abunda en motivación y aplica los derechos y garantías
establecidas en la Constitución; recalca que, de manera improcedente el actor enuncia
normas constitucionales y legales argumentando que se han inobservado y conforme
su equivocado parecer, han sido erróneamente interpretados por la Administración
Tributaria; por el contrario, el SRI emite en forma legal el Acta de Determinación No.
1120070100007 objeto de la impugnación que, con total acierto el Tribunal Juzgador
rechaza la demanda y considera legal el referido acto. Indica que el actor pretende
que el SRI acepte como gastos deducibles comprobantes que no cumplen con las
disposiciones legales y reglamentarias existentes, tema sobre el cual existen
pronunciamientos jurisprudenciales emitidos por la Ex Corte Suprema de Justicia,
entre muchos de los cuales, cita los siguientes: Proceso 220-2004, sentencia publicada
en el Registro Oficial No. 196 de martes 23 de Octubre de 2007; Proceso No. 62-99 de
fecha 28 de noviembre de 2000; Proceso No. 236-2006 de fecha 11 de junio de 2007.
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En estos precedentes jurisprudenciales se menciona que, para que el gasto sea


considerado como deducible son requisitos indispensables no únicamente que sean del
giro del negocio, sino que además, estén sustentados en comprobantes de venta
válidos, de acuerdo a la normativa legal y reglamentaria vigente. Dice que, la
recurrente equivocadamente cita el Art. 10 de la Ley de Régimen Tributario Interno
pretendiendo que, en este caso se aplique el principio de realidad económica, lo que a
su criterio es impertinente. Cita al Reglamento de Comprobantes de Venta y Retención
expedido mediante Decreto Ejecutivo 3055, publicado en el Registro Oficial No. 679 de
8 de Octubre de 2002, vigente en el ejercicio fiscal 2005, el que en su Art. 8, referente
al sustento de costos y gastos, considera como comprobantes válidos, los
determinados en sus Arts. 1 y 13, siempre y cuando cumplan con los requisitos
establecidos en ese Reglamento, por lo que no se puede pretender que se reconozca
los gastos cuando efectivamente no cumplen con lo dispuesto en la norma tributaria.
Sobre la falta de aplicación del Art. 14 de la Ley de Seguridad Social, indica que el SRI
actuó conforme a derecho, aplicando lo establecido en el inciso II del numeral 9 del
Art. 10 de la Ley de Régimen Tributario Interno referente a que, sólo son deducibles
los pagos a los trabajadores en la parte respecto de la cual el contribuyente haya
cumplido con sus obligaciones legales para con el seguro social obligatorio, si sobre
éstos no se efectuaron aportes al IESS, no cabe su deducibilidad. Cita el Art. 4 del
Código del Trabajo referente a la irrenunciabilidad de los derechos del trabajador, en
concordancia con el numeral 31 del Art. 42 del mismo cuerpo legal referente a la
obligación de inscribir a los trabajadores en el seguro social desde el primer día de
labores. Menciona que el contribuyente debió observar el Art. 18 del Reglamento de
Aplicación de la Ley de Régimen Tributario Interno, es decir que la sola existencia de
los roles de pago, no son justificativos suficientes para la deducibilidad del gasto.
Sobre la supuesta falta de aplicación de los preceptos jurídicos aplicables a la
valoración de la prueba, a criterio de la Administración Tributaria la casación no puede
cambiar, alterar o revisar los hechos que se encuentren definitivamente fijados en la
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sentencia recurrida. El recurrente no realiza una exposición clara de la pertinencia de


su recurso ya que, no especifica qué parte de la sentencia impugna, ni cómo las
normas que supuestamente se han infringido han afectado la decisión de la Sala
juzgadora. Respecto a la supuesta falta de motivación de la sentencia, el recurrente
únicamente lo deja como un mero enunciado ya que no hace una relación concreta de
qué parte carece de argumentación, lo manifestado responde a una mera
especulación maliciosa que no puede ser sustentada por no estar basada en la
realidad. En base a lo referido concluye que, la sentencia expedida cumple en forma
legal y estricta la normatividad tributaria y constitucional y posee motivación, sustento
y argumentación en todos sus considerandos. Por lo que pide se deseche el recurso
interpuesto.-------------------------------------------------------------------------------------------
CUARTO.- En definitiva, debe dilucidarse si la sentencia del Tribunal Distrital de lo
Contencioso Administrativo Nº 5 de Loja y Zamora Chinchipe con competencia en
materia fiscal, aplicó o no las normas legales que dice el recurrente ha infringido.
Para resolver sobre el controvertido, esta Sala hace las siguientes consideraciones:
4.1. Lo primero que debe afrontarse es, sin duda, lo referente a la “falta de
motivación”, porque de ser cierto la aseveración hecha por el recurrente, dicha
omisión produciría la nulidad de la sentencia, al tenor de lo ordenado en el art. 76,
numeral 7, literal l) de la Constitución de la República, que ha sido esgrimida como
motivo del recurso, y enmarcada en la causal quinta del Art. 3 de la Ley de Casación,
conforme lo sostiene. Dicha norma establece que: “Las resoluciones de los poderes
públicos deberán ser motivadas. No habrá motivación si en la resolución no se
enuncian las normas o principios jurídicos en que se funda y no se explica la
pertinencia de su aplicación a los antecedentes de hecho. Los actos administrativos,
resoluciones o fallos que no se encuentren debidamente motivados se considerarán
nulos. Las servidoras o servidores responsables serán sancionados.” (el subrayado
pertenece a la Sala); a su vez, el segundo inciso del art. 273 del Código Orgánico
Tributario, en la parte pertinente establece que “La sentencia será motivada y decidirá
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con claridad los puntos sobre los que se trabó la litis y aquellos que, en relación
directa a los mismos, comporten control de legalidad de los antecedentes o
fundamentos de la resolución o actos impugnados…”, de la norma constitucional y
legal transcritas se evidencia la trascendencia que tiene la motivación de las
resoluciones en general y de las sentencias en particular; es una operación lógica en la
que se confronta los hechos probados por las partes en el proceso, con el derecho,
esto es la normativa constitucional, legal y de menor jerarquía aplicable, que sirve de
base para una decisión acertada del Juzgador. En la especie, el Tribunal ha hecho una
recopilación del texto de la demanda, de la contestación dada por la Administración
Tributaria, en su Considerando Cuarto se transcriben y valoran las pruebas
presentadas por las partes y los informes periciales, para posteriormente en el
Considerando Quinto hacer una subsunción de aquellos hechos con las normas legales
aplicables y toma la decisión; en consecuencia, no porque la sentencia sea contraria a
los intereses de la actora puede sostenerse que no está debidamente motivada, por
tanto se inadmite esta causal (5ta.) argumentada por el recurrente. 4.2. Ha sido
fundamento del recurso la causal primera del Art. 3 de la Ley de Casación, que
textualmente dice: “Aplicación indebida, falta de aplicación o errónea interpretación de
normas de derecho, incluyendo los precedentes jurisprudenciales obligatorios, en la
sentencia o auto, que hayan sido determinantes de su parte dispositiva”, y se sustenta
en que la sentencia ha infringido el Art. 10 de la LRTI vigente en el 2005, pues la
Empresa considera simples “errores de forma en los comprobantes de venta”, por
cuyo motivo el SRI no ha admitido deducir el valor de USD $ 472.091,39 con lo que,
afirma, la sentencia no ha aplicado (falta de aplicación) los Arts. 4, 7 y 17 del Código
Tributario, 1 de la LRTI y los Arts. 169, 300 y 425 de la Constitución de la República
del Ecuador; al respecto en forma reiterada y uniforme esta Sala Especializada ha sido
contundente en considerar que, los requisitos exigidos en la Ley y los Reglamentos
para la emisión de los Comprobantes de Venta (facturas) no son meras o simples
formalidades, sino por el contrario requisitos de los que depende la validez de la
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transacción y sobre todo el sustento del sistema tributario y de retenciones del país,
gracias a los cuales, indudablemente el monto de las recaudaciones públicas o
tributarias han tenido un crecimiento sostenido en los últimos años; al respecto el Art.
101 (actual 103) de la Ley de Régimen Tributario Interno es el que consagra el
principio de que las facturas, notas o boletas de venta en todas las operaciones
mercantiles que realicen “deben contener las especificaciones que se señalan en el
Reglamento”, las que en el caso concreto han sido rechazadas por la Administración
Tributaria aduciendo que los comprobantes que justifican los pagos o egresos, tienen
deficiencias o defectos graves o no cumplen lo dispuesto en el Art. 8 de del
Reglamento de Comprobantes de Venta y Retención, expedido mediante Decreto
Ejecutivo 3055, publicado en el Registro Oficial No. 679 de 8 de Octubre de 2002 que
dice: “Sustento de Costos y Gastos.- Sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 12 de
este reglamento, para sustentar costos y gastos a efectos de la determinación y
liquidación del impuesto a la renta, se considerarán como comprobantes válidos los
determinados en el Art. 1 y 13 siempre y cuando cumplan con los requisitos
establecidos en el reglamento”, requisitos que se señalan en detalle en los Arts. 17 y
18 de ese mismo Reglamento. Adicionalmente, el Tribunal Juzgador en su sentencia,
sostiene que la actora no ha demostrado la validez de sus asertos y la perito
designada por ella, admite las deficiencias, prueba que ha servido a dicho Tribunal
para considerar que el Acta de Determinación No. 1120070100007 dictada por la
Administración Tributaria es legal, apreciación de prueba que está dentro del más
amplio criterio de equidad o judicial señalado en el Art. 270 del Código Tributario,
apreciación que en múltiples fallos, esta Sala Especializada ha considerado no puede
ser motivo del recurso de casación, por tanto se rechaza la impugnación a la
sentencia.- 4.3. Asimismo, se ha impugnado la sentencia por falta de aplicación del
Art. 14 de la Ley de Seguridad Social (causal 1ra.) pues el recurrente considera que
los USD $ 289.639,19 glosados por “falta de aportes al IESS”, es ilegítimo pues dichos
pagos estaban exentos de aportes al IESS, pues son pagos extraordinarios no
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normales como alimentación, trasporte, estadía, etc., sin embargo de la transcripción


que hace de la parte pertinente de la sentencia, se desprende que ha sido rechazada
la impugnación por el Tribunal A quo “por no encontrarse sustentados en
comprobantes de venta”, por ello, esta Sala se ratifica en los fundamentos constantes
en el ítem 4.2. inmediato anterior; adicionalmente y para mejor resolver, es necesario
indicar que, ha sido criterio de esta Sala que de conformidad a lo dispuesto en el Art.
11 de la Ley de Seguridad Social (en aplicación del No. 9 del Art. 10 de la LRTI), los
rubros que corresponden y deben servir para efectos del cálculo de aportaciones al
seguro obligatorio, son las prestaciones laborales de carácter normal u ordinarias, las
que si no han aportado al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social se convierten en
gastos no deducibles conforme a la norma señalada; no así los de carácter
extraordinario o eventual que no están sometidas a esta obligación. En el caso
concreto que se analiza, no existe prueba alguna que determine quienes fueron los
que percibieron dicho beneficio, y el recurso de casación tampoco identifica qué
pruebas relacionadas a esta valoración han sido desoídas por la sentencia, que puedan
llevar a la certeza de que se han aplicado erróneamente las normas del Seguro Social
Obligatorio, pues no consta de autos la determinación de que tales emolumentos sean
parte de la excepción contemplada en el Art. 11 antes referido.- Por tales motivos no
se admite la casación por aplicación indebida del No. 9 del Art. 10 de la LRTI. 4.4. La
otra causal en que se funda el recurrente es la tercera del Art. 3 de la Ley de
Casación, esto es: ”Aplicación indebida, falta de aplicación o errónea interpretación de
los preceptos jurídicos aplicables a la valoración de la prueba, siempre que hayan
conducido a una equivocada aplicación o a la no aplicación de normas de derecho en
la sentencia o auto”. En esta consideración, la Empresa recurrente, se ha fundado en
la “contravención” de lo previsto en los Arts. 115 y 117 del Código de Procedimiento
Civil, supletorio de esta Jurisdicción y tampoco se ha considerado el Art. 259 del
Código Tributario, por las razones que expone, pero ninguna de estas normas
conllevan a intentar subsumir esas situaciones a algún principio de valoración de la
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prueba. Tampoco calza a esta causal, el valor que la Sala A quo le ha dado al Informe
de una perito, ya que ello está dentro de su apreciación judicial o de equidad, lo cual
esta Sala de lo Contencioso Tributario de la Corte Nacional ha sido reiterativa en
manifestar que no es motivo de casación. Como si fuese poco, la tercera causal del
Art. 3 de la Ley de Casación, requiere no sólo alegar la aplicación indebida o la falta de
aplicación argumentadas, sino que es de aquellas denominada “en cadena”, porque a
más de demostrar que la sentencia violentó alguna norma legal explícita sobre la
valoración de un medio procesal (por ejemplo cuando le da valor pleno a la fecha y
otorgantes en las escrituras públicas), también debe señalarse que tal inobservancia
condujo a una equivocada aplicación o a la no aplicación de una norma de carácter
sustantivo, lo que en este caso específico no ha ocurrido, pues ni siquiera se menciona
qué norma de derecho ha sido violentada.- ---------------------------------------------------
Sin que sea menester entrar en otros análisis, la Sala de lo Contencioso Tributario de
la Corte Nacional ADMINISTRANDO JUSTICIA, EN NOMBRE DEL PUEBLO
SOBERANO DEL ECUADOR, Y POR AUTORIDAD DE LA CONSTITUCIÓN Y LAS
LEYES DE LA REPÚBLICA, rechaza el recurso de casación presentado por el Ing.
Daniel Eduardo Valdivieso Arias, Representante Legal de la CONSTRUCTORA DEL SUR
C.A. COSURCA.- Notifíquese, publíquese y devuélvase.- ff) Dra. Maritza Tatiana
Pérez Valencia, JUEZA PRESIDENTA, Dr. José Suing Nagua, JUEZ
NACIONAL; y, Dr. Gustavo Durango Vela, CONJUEZ NACIONAL.
Certifico: f) Dra. Carmen Dávila Yépez, SECRETARIA RELATORA
ENCARGADA.

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