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Voces: DESPIDO JUSTIFICADO - EXTINCIÓN DEL CONTRATO DE TRABAJO -

INDEMNIZACIÓN DE FERIADOS - RESPONSABILIDAD DEL CONTRATISTA Y


SUBCONTRATISTA - IRRETROACTIVIDAD DE LA LEY - CASACIÓN DE OFICIO -
SENTENCIA DE REEMPLAZO - DISIDENCIA

Partes: Araneda Moreno, Roberto A. c/ Mansilla Oyarzún, Mario y otro e Ilustre Municipalidad
de Concepción | Despido justificado - Contrato de trabajo por obra o faena

Tribunal: Corte Suprema

Fecha: 27-may-2011

Cita: MJCH_MJJ27892 | ROL:8090-10, MJJ27892

Producto: LJ

Si el término del contrato de trabajo está atado a la relación civil entre el contratista y la
empresa principal y, estando en conocimiento de ello los trabajadores, debe entenderse que
aquel es uno por obra o faena, a pesar de que tenga una duración mayor a un año.

Doctrina:

1.- Corresponde anular de oficio la sentencia de segunda instancia, que revoca la de primera,
recurrida por la parte demandante. Lo anterior por cuanto el fallo tenido a la vista, no hace
mención a peticiones concretas realizadas por la recurrente en su demanda, respecto al pago
del feriado legal y proporcional solicitado, lo cual constituye la causal de nulidad del artículo
768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, que trata de la circunstancia de pronunciarse la
sentencia con omisión de cualquiera de los requisitos enumerados en el artículo 170 del
Código citado, en lo que interesa, su numeral cuarto, en cuanto dispone que éstas deben
contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirvan de fundamento.

2.- Respecto a la justificación del despido, la controversia radica en determinar la calificación


jurídica que ha tenido la vinculación convenida entre los demandantes y la demandada
principal y la procedencia de la causal contemplada en el Nº5 del artículo 159 del Código del
Trabajo, para la terminación de los respectivos contratos. De esa manera, teniendo presente
las cláusulas contractuales transcritas en la sentencia que se revisa, en el caso sub lite
concurren la especificación de las faenas, su transitoriedad y el conocimiento que los
demandantes tenían de la naturaleza de los servicios que debían prestar. De este modo la
vinculación que los unió con la demandada principal sólo puede calificarse de contrato por obra
o faena y para su término resulta plenamente aplicable la causal invocada por la empleadora,
sin que obste a esta conclusión la circunstancia que para la demandada Municipalidad las
labores de recolección de basura y barrido de calles sean permanentes, porque no ha sido ésta
la empleadora de los actores, sino que lo fue quien se adjudicó la prestación de los servicios de
esa naturaleza y para la empleadora concluyeron por causa ajena a su voluntad. Tampoco es
dable imputar a esta última, que licitó los servicios de que se trata, el riesgo de la finalización
de su vinculación con la demandada solidaria, ya que dicho término se encontraba
preestablecido y sujeto a esa condición, plenamente conocida por los trabajadores. Por
consiguiente, y atendida la naturaleza por obra o faena de los contratos de trabajo celebrados
entre las partes, la terminación del contrato de trabajo motivo de la demanda aparece del todo
justificada.

3.- Respecto de los contratos, civil - celebrado entre los demandados el 31 de agosto de 2001 -
y de trabajo - celebrados entre el demandado principal y los demandantes entre el 1° de
septiembre de 2001 y el 14 de enero de 2007- acordados con anterioridad a la entrada en
vigencia de la Ley N° 20.123 , por aplicación del artículo 22 de la Ley Sobre Efecto
Retroactivo de las Leyes, deben entenderse incorporados a éstos las leyes vigentes al tiempo
de su celebración, a saber, el antiguo artículo 64 del Código del Trabajo, y en consecuencia,
tal es la norma que debe ser aplicada a su respecto.

4.- Para establecer la extensión de la responsabilidad subsidiaria en relación con las


prestaciones que se han impuesto a la demandada principal, esta Corte ya ha decidido que
uno de los parámetros que debe considerarse para los efectos de determinar el alcance de la
responsabilidad subsidiaria, está constituido por la posibilidad de fiscalizar el cumplimiento de
las obligaciones laborales y previsionales a que tiene acceso la dueña de la obra o faena por
expresa disposición del artículo 64 bis del Código Laboral, y en el evento que dicho
cumplimiento haya podido ser cautelado por la responsable subsidiaria, ésta resulta afectada
por esa responsabilidad. Por lo que las obligaciones laborales y previsionales que afectan a la
dueña de la obra, empresa o faena, son aquéllas que nacen durante la vigencia no sólo de la
relación laboral entre trabajador y empleador, sino también del nexo entre la dueña de la obra y
el señalado empleador, y respecto de las cuales aquélla puede fiscalizar su cumplimiento. En
dicha situación no se encuentran la compensaciones de feriado proporcional, que surgen con
motivo del despido de los dependientes y en el cual, además, ninguna injerencia ha tenido la
responsable subsidiaria.

5.- La causal de término de la relación laboral, del Nº5 del artículo 159 del Código del Trabajo,
supone el desarrollo de actividades transitorias o de limitada duración, conclusión que es la
que se aviene con la protección de la inamovilidad relativa que consulta el Código, la que no
pueden eludir las partes por la vía de la autonomía contractual. Situaciones transitorias o de
temporada, de una duración no superior a un año, que es el término que contempla la
normativa para el plazo máximo de un contrato, es lo que encuadra con una interpretación
armónica de los textos legales con la protección que acuerda la estabilidad relativa. Por lo que
todo empleador al suscribir un contrato de trabajo asume el llamado riesgo de empresa
conforme el cual, en caso de terminación del contrato, debe otorgar, cuando corresponda, la
indemnización pertinente. Tal compensación obedece, desde un sentido, a lo que designa su
nombre, esto es, indemnizar el perjuicio causado por la extinción del vínculo; y, desde otro,
como se señaló en el Mensaje del Proyecto de Ley de la Nº19.010, dichos resarcimientos
cumplen también la función de una prestación por desempleo de cargo directo del empleador.
Finalidades, ambas, que no pueden ser obviadas por los contratantes, no siéndole permitido al
empleador, en una situación como la de la especie, dejar de arrogarse el mencionado riesgo
que le compete, una responsabilidad que la normativa, interpretada conforme a los principios
del Derecho del Trabajo, le irroga. Por lo que en el contexto referido, resulta, entonces, que los
contratos de trabajo de los actores no pueden sino estimarse de carácter indefinido y en tal
evento, la terminación de ellos debió dar origen al pago de la indemnización sustitutiva del
aviso previo y por años de servicios pertinentes (del voto de minoría de la Ministra Sra. Rosa
María Maggi D.).

6.- La ley hace responsable a la empresa principal, de las obligaciones laborales y


previsionales, sin excluir a ninguna en particular, ni referirse a alguna en especial, por lo que
no hay razón para excluir ninguno de los deberes, imposiciones o exigencias esenciales a la
vinculación de naturaleza laboral, cualquiera sea su fuente, es decir, legal, contractual e
incluso, según el caso, nacidas de la aplicación práctica que se haya consentido por las partes.
Todo ello, naturalmente, limitado al tiempo durante el cual los trabajadores prestaron servicios
en régimen de subcontratación para la empresa principal. Por lo que, en relación con la
obligación laboral en estudio, cabe destacar que la compensación del feriado es una obligación
que tiene su fuente en la ley y que nace o se devenga, con motivo de la terminación de la
relación laboral de los trabajadores que prestaban servicios en régimen de subcontratación.
Por lo que conforme a lo anterior, habiéndose condenado al empleador directo al pago de
feriado legal y proporcional, obligaciones laborales todas ellas, surgidas durante la vigencia de
la obra contratada por el demandado subsidiario con el empleador directo, procede acoger la
responsabilidad subsidiaria de la dueña de la obra o faena encomendada en relación con las
prestaciones ya indicadas (del voto de minoría de la Ministra Sra. Rosa María Maggi D. y del
Ministro Sr. Roberto Jacob Ch.).

Santiago, 27 de mayo de 2011.

Vistos:

En autos rol Nº 509-2008 del 2° Juzgado de Letras del Trabajo de Concepción, don Roberto
Antonio Araneda Moreno y otros, en juicio ordinario laboral, deducen demanda en contra de
don Mario Mansilla Oyarzún y de la Ilustre Municipalidad de Concepción, a fin que se declare
que sus despidos fueron injustificados, se condene a la demandada persona natural al pago de
las indemnizaciones sustitutiva de aviso previo y por años de servicio y feriados legal y
proporcional que señalan y se declare que la Municipalidad es solidariamente responsable de
las prestaciones que afecten a la demandada principal, con reajustes, intereses y costas.

La demandada principal, evacuando el traslado conferido, solicitó el rechazo de la acción


deducida en su contra, con costas, sosteniendo que la relación laboral que la unía con los
demandantes terminó por aplicación de la causal 5ª del artículo 159 del Código del Trabajo, por
cuanto los actores fueron contratados para una faena específica que su representada
desarrolló para la Municipalidad de Concepción, quien le entregó los servicios de recolección
de basura y barrido de calles de la comuna, los cuales concluyeron irrevocablemente el 31 de
agosto de 2008, razón por la cual, también finalizaron los contratos de trabajo con los actores
sin derecho a indemnización alguna.Respecto de los feriados controvierte la pretensión y los
valores demandados al efecto.

La Municipalidad de Concepción contesta la demanda solicitando su rechazo, alegando que no


responde ni solidaria ni subsidiariamente de las obligaciones a que sea condenado el
demandado principal.

En sentencia de nueve de diciembre de dos mil nueve, escrita a fojas 221 y rectificada a fojas
304, el tribunal de primer grado, en lo pertinente acogió la demanda, declaró injustificado el
despido de los actores y condenó a las demandadas a pagar solidariamente las sumas que se
indican, por concepto de indemnizaciones sustitutiva del aviso previo y por años de servicios,
feriado legal y feriado proporcional, con reajustes, intereses y costas.

En contra de esta sentencia la demandada principal interpuso recurso de casación en la forma


y de apelación, mientras que los actores y la demandada solidaria apelaron, y la Corte de
Apelaciones de Concepción, en fallo de uno de octubre del año dos mil diez, que se lee a fojas
342 y siguientes, desestimó el recurso de casación y, revocó la sentencia declarando, en su
lugar, que no se hace lugar a la demanda, sin costas.

En contra de esta última decisión, la demandante deduce recursos de casación en la forma y


en el fondo, pidiendo que se la invalide y se dicte sentencia de reemplazo que describe.

Se trajeron estos autos en relación.

Considerando:

Primero: Que, en conformidad con lo dispuesto en el artículo 775 del Código de Procedimiento
Civil, pueden los tribunales, conociendo por vía de apelación, consulta o casación, o en alguna
incidencia, invalidar de oficio las sentencias cuando los antecedentes del recurso manifiesten
que ellas adolecen de vicios que dan lugar a la casación en la forma.

Segundo:Que es causal de nulidad formal, de acuerdo a lo establecido en el artículo 768 Nº 5


del Código de Procedimiento Civil, la circunstancia de pronunciarse la sentencia con omisión
de cualquiera de los requisitos enumerados en el artículo 170 del Código citado, en lo que
interesa, su numeral cuarto, en cuanto dispone que éstas deben contener las consideraciones
de hecho y de derecho que le sirvan de fundamento.

Tercero: Que, al efecto, cabe consignar que en su demanda los actores solicitaron se
condenara solidariamente a los demandados, entre otras prestaciones, al pago de los feriados
legal y proporcional que indican, solicitud que fue rechazada por la Corte de Apelaciones, sin
que se explicaran los motivos que fundamentan tal decisión. En efecto, de la lectura de la
sentencia aparece que los jueces del fondo eliminaron el considerando vigésimo tercero de la
sentencia de primera instancia que se hacía cargo de la referida prestación concediendo los
feriados demandados, y no obstante ello, a continuación, sin hacer razonamiento alguno,
consideraron que los demandantes no tenían derecho al mencionado beneficio.

Cuarto:Que, en consecuencia, corresponde que este Tribunal actúe de oficio, de acuerdo a


sus facultades, por haberse incurrido en la causal de casación señalada en el motivo segundo
que antecede, para la corrección pertinente, desde que el vicio señalado ha provocado al
recurrente un perjuicio reparable sólo con la invalidación.

Por estas consideraciones y visto, además, lo dispuesto en los artículos 764 , 765 , 768, 775,
783 y 786 del Código de Procedimiento Civil, actuando de oficio esta Corte se invalida el fallo
impugnado de uno de octubre de dos mil diez, escrita a fojas 342 y siguientes y se reemplaza
por la que se dicta a continuación y en forma separada, sin nueva vista.

Ténganse por no interpuestos los recursos de casación en la forma y en el fondo deducidos


por la parte demandante, a fojas 350.

Redacción a cargo del abogado integrante señor Ricardo Peralta Valenzuela.


Regístrese.

N° 8090-10.

Pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema integrada por los Ministros señor Patricio
Valdés A., señoras Rosa María Maggi D., Rosa Egnem S., señor Roberto Jacob Ch., y el
Abogado Integrante señor Ricardo Peralta V. No firma el Ministro señor Jacob, no obstante
haber concurrido a la vista y al acuerdo de la causa, por estar con feriado legal. Santiago, 27
de mayo de 2011.

Autoriza la Ministra de Fe de la Excma. Corte Suprema.

En Santiago, a veintisiete de mayo de dos mil once, notifiqué en Secretaria por el Estado Diario
la resolución precedente.

Santiago, 27 de mayo de 2011.

En cumplimiento de lo prevenido en el artículo 786 del Código de Procedimiento Civil, se dicta


la siguiente sentencia de reemplazo:

Vistos:

Se reproduce la sentencia en alzada con las siguientes modificaciones: a) Se eliminan los


considerandos trece a vigésimo primero y vigésimo octavo.b) Se elimina del considerando
vigésimo séptimo su párrafo final que comienza con la frase ";en consecuencia, concurren" y
termina con las palabras "del citado Código". c) Al final del considerando vigésimo tercero se
agrega, entre la voz cobro y el punto final, la siguiente frase: ", salvo en lo que se dirá".

Y teniendo en su lugar y, además, presente:

Primero: Que el demandado don Mario Mancilla Oyarzún, apeló de la sentencia de primera
instancia en cuanto declaró injustificado el despido de los actores, solicitando se declare, en
cambio, que la terminación de los contratos de trabajo fue realizada conforme a derecho. En
subsidio de lo anterior, y para el evento que se confirme la sentencia de primera instancia en el
aspecto anterior, apela respecto a los montos fijados por la juez a quo por concepto de feriados
e indemnizaciones propias del despido y de la condena en costas.

Segundo: Que, por su parte, la demandada Municipalidad de Concepción, apela de la


sentencia, en cuanto lo condenó en forma solidaria al pago de las prestaciones a que fue
condenado el empleador directo de los actores, alegando la inaplicabilidad de la Ley N°20.123 .
Agrega que, para el caso que se estime pertinente la aplicación de los artículos 64 y 64 bis del
Código del Trabajo, la responsabilidad subsidiaria no puede extenderse a las indemnizaciones
a que da lugar el término de la relación laboral. Asimismo, sostiene que el despido de los
actores fue justificado. En subsidio de lo anterior, solicita se revoque la condena en costas.

Tercero: Que la demandante apeló de la sentencia de primera instancia en cuanto al monto


fijado respecto de los feriados proporcionales de nueve de los actores, los que considera
fueron erróneamente calculados y respecto al feriado legal de uno de ellos, por no haber sido
concedido.
I.- En cuanto al despido.

Cuarto:Que respecto a la justificación del despido la controversia radica en determinar la


calificación jurídica que ha tenido la vinculación convenida entre los demandantes y la
demandada principal y la procedencia de la causal contemplada en el Nº5 del artículo 159 del
Código del Trabajo, para la terminación de los respectivos contratos.

Quinto: Que el artículo 159 Nº 5 del Código del Trabajo, establece: "El contrato de trabajo
terminará en los siguientes casos: "5.- Conclusión del trabajo o servicio que dio origen al
contrato". Como es posible advertir del tenor literal del citado precepto tal causal tiene como
elementos esenciales la transitoriedad de las labores que deben desarrollarse y la especificidad
y determinación de las mismas, las cuales deben estar perfectamente individualizadas en la
convención respectiva y, por lo tanto, ser plenamente conocidas por las partes. Presentándose
tales condiciones, sin duda, concluido el trabajo, fluye como lógica consecuencia el
surgimiento de esta causal, la que, además, constituye una situación excepcional al principio
de la estabilidad en el empleo, recogido por nuestro ordenamiento jurídico laboral. A ello cabe
agregar que, en el caso que se presente válidamente esta forma de terminar un contrato de
trabajo, en general, el dependiente carece del derecho a ser indemnizado.

Sexto: Que, teniendo presente las cláusulas contractuales transcritas en el considerando


duodécimo de la sentencia que se revisa, en el caso sub lite concurren la especificación de las
faenas, su transitoriedad y el conocimiento que los demandantes tenían de la naturaleza de los
servicios que debían prestar.De este modo la vinculación que los unió con la demandada
principal sólo puede calificarse de contrato por obra o faena y para su término resulta
plenamente aplicable la causal invocada por la empleadora, sin que obste a esta conclusión la
circunstancia que para la demandada Municipalidad las labores de recolección de basura y
barrido de calles sean permanentes, porque no ha sido ésta la empleadora de los actores, sino
que lo fue quien se adjudicó la prestación de los servicios de esa naturaleza y para la
empleadora concluyeron por causa ajena a su voluntad. Tampoco es dable imputar a esta
última, que licitó los servicios de que se trata, el riesgo de la finalización de su vinculación con
la demandada solidaria, ya que dicho término se encontraba preestablecido y sujeto a esa
condición, plenamente conocida por los trabajadores.

No obsta lo antes señalado la existencia en los contratos de trabajo de una primitiva cláusula
de plazo fijo, ya que ésta se explica como una forma de probar la eficiencia e idoneidad del
dependiente contratado para labores específicas como lo son la recolección de residuos
sólidos domiciliarios y el barrido de las vías públicas de una comuna.

Séptimo:Que, por consiguiente, y atendida la naturaleza por obra o faena de los contratos de
trabajo celebrados entre las partes, la terminación del contrato de trabajo motivo de la
demanda aparece del todo justificada por lo que se rechazará la demanda en cuanto se solicita
el pago de las indemnizaciones sustitutiva de aviso previo y por años de servicio.

II.- En cuanto a los feriados.

Octavo.- Que habiéndose demandado la compensación de feriado proporcional respecto de los


demandantes Roberto Araneda Moreno, Héctor Fernández Aguilar, José Quezada Aguayo,
Jaime Ramos Espinoza, Carlos Rivas Pino, Mario Rodríguez Benimelis, Luis Tapia Rojas,
Diego Vergara Carrasco e Iván Quezada Pastene y no habiéndose acreditado el pago de la
prestación demandada por el empleador directo, procede acceder a la mencionada solicitud.

El cálculo de los feriados deberá efectuarse en la etapa de ejecución, de acuerdo a la fecha de


ingreso de los trabajadores a prestar servicios, a aquella en que se cumplió la última anualidad
y al monto de la remuneración fijada al efecto en el motivo 12° de la sentencia recurrida, y
considerando, además, que la relación laboral terminó el 31 de agosto de 2008.

Noveno: En cuanto al feriado legal demandado por Iván Quezada Pastene, la parte demandada
acreditó su pago, acompañando al efecto los comprobantes de feriado respectivos, motivo por
el cual tal pretensión será rechazada.

III.- En cuanto a la responsabilidad de dueño de la obra.

Décimo:Que, en cuanto a la responsabilidad que pesa sobre el dueño de la obra respecto de


las obligaciones del empleador principal en referencia a sus trabajadores, cabe tener presente
que el contrato de prestación de servicios que unió a los demandados Mario Mancilla Oyarzún
y la Ilustre Municipalidad de Concepción se celebró con fecha 31 de agosto de 2001, mientras
que el primero de ellos celebró contratos de trabajo con los actores para llevar a cabo la
ejecución del mencionado acuerdo civil en diversas épocas, entre el uno de septiembre de
2001 y el 25 de septiembre de 2007.

Por lo antes señalado y teniendo presente que la Ley N° 20.023 , que modificó el régimen de
responsabilidad a que queda sujeto el dueño de obra, entró en vigencia el día 14 de enero de
2007, la controversia jurídica, en este aspecto, implica determinar la legislación aplicable en
relación al contrato civil ya indicado y a los contratos de trabajo celebrados bajo la vigencia del
antiguo artículo 64 del Código del Trabajo "responsabilidad subsidiaria", esto es, con
anterioridad al día 14 de enero de 2007, y a los contratos de trabajos celebrados con
posterioridad a la mencionada fecha, en plena vigencia del artículo 183-B del Código citado
que establece una responsabilidad solidaria o subsidiaria, según el caso.

Undécimo:Que, para dilucidar el asunto resulta necesario recurrir a la Ley sobre Efecto
Retroactivo de las Leyes, de 7 de octubre de 1861, cuyo artículo 1º dispone perentoriamente
que "Los conflictos que resultaren de la aplicación de leyes dictadas en diversas épocas se
decidirán con arreglo a las disposiciones de la presente ley". Además, ha de considerarse lo
dispuesto en el inciso primero del artículo 9º del Código Civil, en cuanto previene que, "La ley
puede sólo disponer para lo futuro, y no tendrá jamás efecto retroactivo", lo que significa que,
en general, la nueva ley rige los actos y situaciones que se produzcan a contar de la fecha de
publicación de la misma.

Duodécimo: Que, asimismo, debe tenerse en cuenta el artículo 22 de la Ley sobre Efecto
Retroactivo de las Leyes, al disponer que: "En todo contrato se entenderán incorporadas las
leyes vigentes al tiempo de su celebración." "Exceptúanse de esta disposición:" "1° Las leyes
concernientes al modo de reclamar en juicio los derechos que resultaren de ellos; y" "2° Las
que señalan penas para el caso de infracción de lo estipulado en ellos; pues ésta será
castigada con arreglo a la ley bajo la cual se hubiere cometido."

Décimo Tercero: Que, en consecuencia, respecto de los contratos civil -celebrado entre los
demandados el 31 de agosto de 2001- y de trabajo -celebrados entre don Mario Mancilla
Oyarzún y los demandantes entre el 1° de septiembre de 2001 y el 14 de enero de 2007-
acordados con anterioridad a la entrada en vigencia de la Ley N° 20.123, por aplicación del
artículo 22 citado, deben entenderse incorporados a éstos las leyes vigentes al tiempo de su
celebración, a saber, el artículo 64 del Código del Trabajo, y en consecuencia, tal es la norma
que debe ser aplicada a su respecto.

Décimo Cuarto: Que en cuanto a los demandantes Luis Ponce C.y Diego Vergara C., la
situación es diversa ya que celebraron sus contratos de trabajo con don Mario Mancilla
Oyarzún los días 25 de septiembre y 29 de enero de 2007, respectivamente, esto es, en plena
vigencia del artículo 183 - B del Código del Trabajo, por lo que a las fechas señaladas, por
aplicación del artículo 9 del Código Civil, este último precepto del estatuto laboral es el que
resulta aplicable a su respecto en cuanto a la materia en estudio. No obsta lo anterior el
derecho que a la Municipalidad confiere el artículo 22 de la Ley Sobre Efecto Retroactivo de las
Leyes, en lo que se refiere a exigir la aplicación del artículo 64 del Código del Trabajo -ya
derogado- toda vez que éste debe entenderse referido preferentemente respecto de la
contraparte del contrato civil que lo hace aplicable, esto es, respecto de don Mario Mancilla
Oyarzún, pero no tiene la entidad suficiente como para alcanzar los derechos de los
trabajadores a incorporar a sus contratos de trabajo la normativa que rige en la fecha en que
se vinculen con su empleador, esto es, el artículo 183-B del Código del Trabajo. Lo anterior se
ve reafirmado en el hecho que las normas laborales son concebidas como un sistema
protector de los derechos de los trabajadores, los que expresamente en el artículo 5° del
Código del Trabajo son irrenunciables, por lo que, éstos, al entrar en conflicto con los intereses
de un particular, en este caso del dueño de obra, deben prevalecer. Por lo demás, fueron
precisamente los contratos de trabajo celebrados por estos dos actores los presupuestos
necesarios para hacer efectiva la responsabilidad de la Municipalidad demandada que la ley
establecía a la fecha de suscripción de los mismos, resultándoles en consecuencia ajeno para
tales efectos el contrato civil celebrado entre los demandados en una época pretérita y a base
de una legislación ya derogada al celebrarse los primeros.

Décimo Quinto:Que para establecer la extensión de la responsabilidad subsidiaria en relación


con las prestaciones que se han impuesto a la principal, esta Corte ya ha decidido
reiteradamente que uno de los parámetros que debe considerarse para los efectos de
determinar el alcance de la responsabilidad subsidiaria, está constituido por la posibilidad de
fiscalizar el cumplimiento de las obligaciones laborales y previsionales a que tiene acceso la
dueña de la obra o faena por expresa disposición del artículo 64 bis del Código Laboral, y en el
evento que dicho cumplimiento haya podido ser cautelado por la responsable subsidiaria, ésta
resulta afectada por esa responsabilidad.

Que también se ha señalado que las obligaciones laborales y previsionales que afectan a la
dueña de la obra, empresa o faena, son aquéllas que nacen durante la vigencia no sólo de la
relación laboral entre trabajador y empleador, sino también del nexo entre la dueña de la obra y
el señalado empleador, y respecto de las cuales aquélla puede fiscalizar su cumplimiento. En
dicha situación no se encuentran la compensaciones de feriado proporcional, que surgen con
motivo del despido de los dependientes y en el cual, además, ninguna injerencia ha tenido la
responsable subsidiaria.

Décimo Sexto: Que respecto de los demandantes Luis Ponce C. y Diego Vergara C., la
responsabilidad de la Ilustre Municipalidad de Concepción se extiende a todas las prestaciones
a las cuales fue condenado su empleador directo, esto es, feriado legal y proporcional, toda vez
que el artículo 183-B del Código del Trabajo la hace solidariamente responsable de las
obligaciones laborales y previsionales de dar que afecten a los contratistas a favor de los
trabajadores de éstos, incluidas las indemnizaciones legales que correspondan por el término
de la relación laboral.Al efecto, debe tenerse presente que antes de la entrada en vigencia de la
Ley N°20.123, ante la falta de una definición legal, fue la jurisprudencia la que desarrolló la
extensión de la responsabilidad subsidiaria del dueño de la empresa obra o faena,
encontrándose las mayores discrepancias en relación con las indemnizaciones legales a pagar
al término de contrato, de acuerdo a lo que prescribían los artículos 64 y 64 bis del Código del
Trabajo.

Fue la citada ley Nº 20.123, la que aclaró la discusión existente, precisando que las
obligaciones, respecto de las qu e ha de responder solidaria o subsidiariamente la empresa
principal, son las de naturaleza laboral, incluidas las indemnizaciones legales por el término de
la relación laboral y las obligaciones previsionales, en ambos casos a las obligaciones de dar
pertinentes, al tiempo que hubiere durado el trabajo en régimen de subcontratación.

Por estos fundamentos, se revoca la sentencia apelada de nueve de diciembre de dos mil
nueve, escrita a fojas 157 y siguientes, rectificada a fojas 304, en cuanto sostiene que fueron
injustificados los despidos de los actores y, se declara en cambio, que éstos fueron
justificados, y en consecuencia que no proceden las indemnizaciones sustitutiva de aviso
previo y por años de servicios demandadas.

Se confirma, en lo demás apelado, la referida sentencia, con declaración que los feriados
proporcionales concedidos a Roberto Araneda Moreno, Héctor Fernández Aguilar, José
Quezada Aguayo, Jaime Ramos Espinoza, Carlos Rivas Pino, Mario Rodríguez Benimelis, Luis
Tapia Rojas, Diego Vergara Carrasco e Iván Quezada Pastene, deberán calcularse de
conformidad a lo establecido en el considerando noveno de esta sentencia; que la Ilustre
Municipalidad de Concepción responde de manera subsidiaria solamente del pago de los
feriados legales a los que fue condenado el demandado don Mario Mancilla Oyarzún; con
excepción de los feriados a que tienen derecho los trabajadores don Luis Ponce C.y don Diego
Vergara, respecto de todos los cuales responde solidariamente; y que cada parte soportará sus
costas.

Acordada, en cuanto declara la justificación de los despidos, con el voto en contra de la


Ministra señora Maggi, quien estuvo por confirmar en este aspecto la sentencia de primera
instancia, teniendo para ello presente:

a) Que la causal contemplada en el artículo 159 Nº 5 del Código del Trabajo, esto es,
conclusión del trabajo o servicio que dio origen al contrato, supone, implícitamente, una
temporalidad en la prestación de los servicios. En otros términos y considerando el principio de
la estabilidad relativa en el empleo que recoge la legislación laboral, la citada causal importa o
supone una ausencia de continuidad en la labor que desarrolla el trabajador.

b) Que el legislador laboral, siempre en aras de la directriz mencionada, ha consagrado


situaciones específicas que denotan su repudio a la transgresión de la aludida permanencia
laboral, como son, por ejemplo, las consagradas en el artículo 159 Nº 4 del Código del ramo,
incisos segundo y cuarto, en cuanto ellas contemplan presunciones que conducen a evitar la
contratación de trabajadores, incluso en forma discontinua, con el objeto de eludir las
responsabilidades del empleador al momento de la terminación de la relación laboral.

c) Que de lo expuesto se infiere que la causal del Nº5 del artículo 159 del Código del Trabajo,
supone el desarrollo de actividades transitorias o de limitada duración, conclusión que es la
que se aviene con la protección de la inamovilidad relativa que consulta el Código, la que no
pueden eludir las partes por la vía de la autonomía contractual. Situaciones transitorias o de
temporada, de una duración no superior a un año, que es el término que contempla la
normativa para el plazo máximo de un contrato, es lo que encuadra con una interpretación
armónica de los textos legales con la protección que acuerda la estabilidad relativa.d) Que por
otro lado, todo empleador al suscribir un contrato de trabajo asume el llamado "riesgo de
empresa" conforme el cual, en caso de terminación del contrato, debe otorgar, cuando
corresponda, la indemnización pertinente. Tal compensación obedece, desde un sentido, a lo
que designa su nombre, esto es, indemnizar el perjuicio causado por la extinción del vínculo; y,
desde otro, como se señaló en el Mensaje del Proyecto de Ley de la Nº19.010, dichos
resarcimientos cumplen también la función de una prestación por desempleo de cargo directo
del empleador. Finalidades, ambas, que no pueden ser obviadas por los contratantes, no
siéndole permitido al empleador, en una situación como la de la especie, dejar de arrogarse el
mencionado riesgo que le compete, una responsabilidad que la normativa, interpretada
conforme a los principios del Derecho del Trabajo, le irroga.

e) Que en el contexto referido, resulta, entonces, que los contratos de trabajo de los actores no
pueden sino estimarse de carácter indefinido y en tal evento, la terminación de ellos debió dar
origen al pago de la indemnización sustitutiva del aviso previo y por años de servicios
pertinentes.

Asimismo, acordada en lo relativo a la responsabilidad subsidiaria respecto del feriado


proporcional, con el voto en contra de la Ministra señora Rosa María Maggi Ducommun y del
Ministro señor Roberto Jacob Chocair, quienes estuvieron por condenar también a la Ilustre
Municipalidad de Concepción como responsable subsidiaria, de los feriados proporcionales a
los que fue condenado don Mario Mancilla Oyarzún, con la excepción de los trabajadores Luis
Ponce C.y Diego Vergara C., para lo cual tuvieron presente las siguientes consideraciones, ya
vertidas en fallos de este Tribunal:

1º) Que la ley hace responsable al dueño de la empresa obra o faena, de las obligaciones
laborales y previsionales, sin excluir a ninguna en particular, ni referirse a alguna en especial,
por lo que no hay razón para excluir ninguno de los deberes, imposiciones o exigencias
esenciales a la vinculación de naturaleza laboral, cualquiera sea su fuente, es decir, legal,
contractual e incluso, según el caso, nacidas de la aplicación práctica que se haya consentido
por las partes. Todo ello, naturalmente, limitado al tiempo durante el cual los trabajadores
prestaron servicios en régimen de subcontratación para la empresa principal.

2º) Que, en relación con la obligación laboral en estudio, cabe destacar que la compensación
del feriado es una obligación que tiene su fuente en la ley y que nace o se devenga, con motivo
de la terminación de la relación laboral de los trabajadores que prestaban servicios en régimen
de subcontratación.

3º) Que, conforme a lo anotado, habiéndose condenado al empleador directo al pago de


feriado legal y proporcional, obligaciones laborales todas ellas, surgidas durante la vigencia de
la obra contratada por el demandado subsidiario con el empleador directo, procede acoger la
responsabilidad subsidiaria de la Ilustre Municipalidad de Concepción, dueña de la obra o
faena encomendada en relación con las prestaciones ya indicadas.

Redacción a cargo del Abogado Integrante señor Ricardo Peralta Valenzuela y los votos de
minoría, sus autores.
Regístrese y devuélvase, con su agregado.

N°8.090-2010

Pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema integrada por los Ministros señor Patricio
Valdés A., señoras Rosa María Maggi D., Rosa Egnem S., señor Roberto Jacob Ch., y el
Abogado Integrante señor Ricardo Peralta V. No firma el Ministro señor Jacob, no obstante
haber concurrido a la vista y al acuerdo de la causa, por estar con feriado legal. Santiago, 27
de mayo de 2011.

Autoriza la Ministra de Fe de la Excma. Corte Suprema.

En Santiago, a veintisiete de mayo de dos mil once, notifiqué en Secretaria por el Estado Diario
la resolución precedente.

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