Está en la página 1de 2

LOS QUE DICEN “SER ENTRENADORES”, POR CHARLES GLASS

Hay un entrenador en mi gimnasio que me vuelve loco y a quien me


gustaría abofetear. No soy entrenador, pero tengo título de
fisicoculturismo del estado por eso, mucha gente me pide consejos sobre
entrenamiento y nutrición. Después, van a este tipo a quien llamaré “José
Descuidado”, un entrenador que tiene por lo menos 30 libras de más,
panza y senos. Quisiera decir que tiene muchos músculos debajo de la
gordura, pero no es así. La apariencia de José es la de alguien que jamás
tocó una pesa en su vida, y, de hecho, jamás vi que hiciera algo en el
gimnasio más que Zumba en donde creo que casi ni se mueve y lo único
que hace es mirar a las chicas.  Jose les dice a todos que soy un
fisicoculturista tonto y que no me deberías de escuchar nada de lo que
digo, porque tengo este cuerpo por las pastillas y las inyecciones.
Mientras tanto, él es el experto mundial porque tiene título universitario
en ciencias del ejercicio y esta certificado por cuatro organizaciones
diferentes de preparación personal. Todavía tengo que enfrentarme a este
idiota, pero mi paciencia ya se está terminando. ¿Qué harías con José si
estuviera en tu gimnasio y hablara mal de ti?

Respuesta de Glass:

Este tipo es todo un personaje! Si hubiera alguien como él hablando de mí de
esa manera, sin duda, lo enfrentaría. Le preguntaría por qué le parece que me
tiene que disminuir y, además, por qué él mismo no está en buen estado físico.
También le diría que, si sigue hablando de mí en forma despectiva, me dirigiría
al dueño del gimnasio que seguro no tolera este tipo de conducta poco
profesional en su establecimiento.

Como entrenador que se ha ganado la vida preparando atletas durante más de


dos décadas, me molesta ver casos en los que alguien da un ejemplo tan malo
a sus clientes. No siempre se trata de lo mucho que sabes, más bien de cuánto
de tu conocimiento sirve realmente. Muchos estadounidenses tienen una idea
de cómo deberían comer para estar sanos y controlar el peso, pero muchos
comen mal de todas maneras. Un entrenador personal no necesita ser
campeón de fisicoculturismo, pero debería “dar el ejemplo” y estar sano y en
buen estado. Supongo que es correcto decir que José está celoso de ti y de tu
físico. Si decides enfrentarlo, deberías decirle que trabajaste mucho y por
mucho tiempo para lucir como luces y que él no debería andar diciendo que lo
hiciste con químicos, en especial cuando está especulando. Además, eso se
llama calumnia y podrías iniciar una acción legal, si quisieras.
¡Este tipo es todo un personaje! Si hubiera alguien como él hablando de mí de
esa manera, sin duda, lo enfrentaría. Le preguntaría por qué le parece que me
tiene que disminuir y, además, por qué él mismo no está en buen estado físico.
También le diría que, si sigue hablando de mí en forma despectiva, me dirigiría
al dueño del gimnasio que seguro no tolera este tipo de conducta poco
profesional en su establecimiento.

También podría gustarte