La preparación radiológica durante este brote requiere políticas y
procedimientos del departamento de radiología diseñados para tener
suficiente capacidad para la operación continua durante una emergencia de atención médica de proporciones sin precedentes y para apoyar la atención de pacientes con COVID-19.
Podemos enumerar las siguientes mejores prácticas:
Limite la exposición al virus.
Usar controles de detección en todas las entradas del hospital,
así como en el mostrador de recepción de radiología, para verificar los síntomas que podrían estar relacionados con el coronavirus. Establecer protocolos para pacientes con coronavirus conocido o sospechado para dirigirlos adecuadamente a la atención de urgencia virtual, el departamento de emergencias o la radiología.
Determinar el mejor uso de las imágenes.
Las pruebas de laboratorio de diagnóstico tienen una
sensibilidad del 95% al 97%, con un tiempo de respuesta rápido, y deben usarse primero. Reservar las imágenes para casos sospechosos de coronavirus para los cuales afectará el manejo del paciente o para los cuales debe descartarse un diagnóstico alternativo. Reservar el PACs, para su inmediato diagnóstico.
Proteger al personal.
Enmascarar a los pacientes durante las imágenes y los
procedimientos. Limpiar profundamente el tomógrafo computador y la sala después de la imagen y permita el intercambio pasivo de aire. Usar las precauciones adecuadas para los pacientes que se someten a procedimientos de atención. Establecer sitios de aislamiento previo. Respetar las decisiones del Tecnólogo, por ser el experto en toma de imágenes. Mantener el suministro de máscaras N-95 y otros equipos de protección personal. Proporcionar tutoriales de control de infecciones, especialmente a CT, ultrasonido y tecnólogos intervencionistas. Mantener las operaciones del departamento de radiología.
Establecer un equipo de gestión de crisis de coronavirus que
supervise la preparación del departamento. Desarrollar un plan para sitios separados de atención de urgencia para el tratamiento de pacientes con coronavirus. Poner en práctica medidas de distanciamiento social: permita que el personal trabaje desde su casa, cree salas de lectura aisladas en el sitio y use la videoconferencia para las reuniones. No permita que el personal deambule entre las instalaciones. No obligar trabajar al personal de mayor edad, es más vulnerable a la exposición de pacientes con sospecha de coronavirus. Crear un plan para manejar la sobretensión si el sistema de salud se ve afectado por el aumento del volumen de pacientes y las necesidades de imágenes. Crear un horario de llamadas de respaldo para cubrir al personal enfermo. Si atendemos un paciente infectado en un TC, el equipo debe desinfectarse y ventilarse por lo menos una hora antes q entre el siguiente. Tener en todos los equipos GEL, GUANTES Y DESECHAR TODO EL MATERIAL en tachos exclusivos.