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Universidad Politécnica de Durango

Ingeniería en Tecnología Ambiental

ITAM

Manejo de cuencas hidrológicas

“Unidad 3”
Ensayo sobre los tipos y formas de
precipitación.

Facilitador: Dr. Felipa de Jesús Rodríguez Flores


Alumno: De La Rosa Chávez Marcos Guillermo

9B Mayo-agosto 2018
Introducción.

El proceso de la precipitación no es tan sencillo como parece, pues se necesitan


una serie de condiciones previas en la atmósfera, tales como la existencia de
vapor de agua en grandes proporciones; este vapor deber ascender y
condensarse en la altura formando nubes, y que las condiciones dentro de las
nubes permita que las pequeñísimas partículas de agua y hielo aumenten de
tamaño y peso, suficiente para caer desde la nube y llegar al suelo. El único de los
procesos que conduce a una condensación, es la ascendencia, la cual puede
generar la lluvia o cualquier otra precipitación.

Se entiende por precipitación todo aquello que cae del cielo a la superficie de la


tierra, ya sea en forma de lluvia, granizo, agua nieve, nieve, etc. Este fenómeno se
da por la condensación del vapor de agua con tal rapidez en la atmósfera,
alcanzando tal peso que no puede seguir flotando como las nubes, la niebla o la
neblina y se precipita de las diversas formas ya mencionadas.

Se engloba dentro de precipitación a cualquier producto de condensación del agua


atmosférica que cae sobre la superficie terrestre. Pueden distinguirse varios tipos:
llovizna (0.1-0.5 mm D), lluvia (D> 0.5 mm), escarcha, nieve, bolitas de nieve,
granizo y bolas de hielo. Estos diversos tipos de precipitaciones son normalmente
medidos sin efectuar su discriminación por medio de su equivalente en agua.

La precipitación es el origen de todas las corrientes superficiales y profundas, por


lo cual su cuantificación y el conocimiento de su distribución, en el tiempo y en el
espacio, se constituyen en problemas básicos para la hidrología.
Desarrollo

Tipos de precipitación

Según el autor Atendiendo al mecanismo causante del enfriamiento de las masas


de aire y por tanto de la condensación, se pueden distinguir varios tipos de
precipitación los cuales se describen a continuación:

Ciclónica.

Es la que está asociada al paso de una perturbación ciclónica cuando se produce


un levantamiento del aire que converge a una zona de bajas presiones. Se
presentan dos casos: frontal y no frontal.

Se habla de precipitación frontal cuando las masas de aire cálido y húmedo son
levantadas por encima de una masa de aire frío (p. de frente cálido y p. de frente
frío).

Puede ocurrir en cualquier depresión barométrica, resultando el ascenso


debido a la convergencia de masas de aire que tienden a rellenar la zona de baja
presión.

Se habla de precipitación no frontal cuando en el ascenso del aire cálido hay


implicadas zonas de bajas presiones, pero no un sistema de frentes.

No ciclónica.

Cuando el levantamiento del aire no se produce como consecuencia de una zona


de bajas presiones. Dentro de este tipo podemos distinguir la precipitación
convectiva, cuando el ascenso se produce por la menor densidad de una masa de
aire en un proceso de calentamiento, y p. Orográfica cuando este ascenso se
produce forzado por la presencia de la elevación de la topografía.

La precipitación convectiva tiene su origen en la inestabilidad de una masa de aire


más caliente que las circundantes. La masa de aire caliente asciende, se
enfría, se condensa y se forma la nubosidad de tipo cumuliforme, origen de
las precipitaciones en forma de chubascos o tormentas. El ascenso de la masa
de aire se debe generalmente a un mayor calentamiento en superficie.

La precipitación orográfica es aquella que tiene su origen en el ascenso de una


masa de aire, forzado por una barrera orográfica o montañosa. Se presentan en
forma de lluvia o nieve, siendo muy irregulares en importancia y localización.

A veces, en casos de masas inestables, el efecto orográfico no supone más que el


mecanismo de disparo de la inestabilidad convectiva.

Precipitación frontal, Se
originan cuando entran en contacto una masa de aire cálido y una masa de aire
frío. La zona de contacto es el llamado frente.
Formas de precipitación

Por la forma en que cae (tipos de hidrometeoros), se pueden distinguir diversos


tipos de precipitación, entre los cuales los de mayor interés son:

Lluvia

Es la precipitación atmosférica de gotas de agua en estado líquido. La mayor parte


de ellas tiene, generalmente, con gotas de diámetro entre 0.5 y 5 milímetros, y
caen, en el aire en calma, con una velocidad superior a los dos metros por
segundo.

Según sus intensidades pueden distinguirse:

Ligera para tasas de caída de hasta 2,5 mm/h

Moderada desde 2,5 hasta 7,5 mm/h

Fuerte por encima de 7,5 mm/h

Si la cantidad de agua recogida por hora es mayor de un milímetro de altura (es


decir, un litro por metro cuadrado), se considere lluvia.

Llovizna

Precipitación análoga a la lluvia, es un riego tenue de gotitas pequeñas, de


diámetro menor que 0.5 milímetros, muy denso o compacto.

Se puede considerar débil, moderada o fuerte dependiendo de la visibilidad. Su


procedencia son estratos bajos, algunas veces tanto que constituyen niebla.

Chaparrón o Aguacero

Son precipitaciones de agua líquida o sólida, de extraordinaria intensidad, que


comienzan y acaban bruscamente, con duración relativamente corta; o bien,
varían violenta y rápidamente de intensidad y coinciden con la alternancia brusca
de cielo encapotado y amenazador, con claros de cielo azul, o de nubes muy
oscuras con otras muy claras.

Neblina

Es una precipitación mucho más tenue aún que la llovizna.

Rocío

Gotas de agua debidas a la condensación directa del vapor contenido en el aire


adyacente a superficies enfriadas por radiación nocturna.

Escarche

Cristales diminutos de hielo, en forma de escamas o agujas que se forman por


condensación del vapor de agua existente en el aire, que pasa directamente al
estado sólido sobre las superficies muy enfriadas durante la noche.

Su origen puede ser también el congelamiento de agua súper enfriada que


previamente se ha depositado sobre la superficie en forma de lluvia o llovizna. Su
densidad puede llegar a ser de 0,8 a 0,9 g/m³.

Nieve

La nieve se forma de cristales de hielo cuando el vapor de agua se congela en


diminutas partículas sólidas en niveles donde las temperaturas son muy inferiores
a 0º C. Los cristales de hielo se van uniendo para formar los copos de nieve.

Cuando los copos de nieve tienen suficiente peso, caen al suelo. Su tamaño,
forma y concentración depende de la temperatura de donde se formen y por
donde pasan y tienen una gran variedad de formas, pero todos tienen la
característica de ser hexagonales, con un motivo único que no se repite. La nieve
es transparente, aunque las reflexiones de los muchos lados de sus cristales
hacen que parezca blanca.

Aguanieve
Una mezcla de lluvia y nieve que cae a tierra cuando la temperatura ambiente está
por debajo del nivel de congelación.

Lluvia helada

Se produce cuando la temperatura en el nivel de las nubes es negativa y las gotas


de lluvia están sobre enfriadas. La lluvia se congela al llegar a la superficie y
chocar con los objetos.

Granizo

Se forma cuando las gotas de agua sobre enfriadas circulan en una zona de
corrientes ascendentes en el interior de un cumulonimbo.

El granizo cae de la nube como precipitación sólida de terrones de hielo duro,


redondeados o irregulares, cuando adquiere demasiado peso para que las
corrientes ascendentes lo mantengan en el aire. Es tal vez la forma de
precipitación más destructiva.

Conclusión

En conclusión, la precipitación de agua puede ser de diferentes formas y tipos en


las cuales intervienen diferentes factores como viento, altitud, clima, viento como
las principales, sin descartar otras condiciones como cercanía con algún almacén
hídrico como ríos, lagos, océanos, etc. y otros factores como vegetación que
también generan algún tipo y forma de precipitación. Pero se deben comprender
que con un gran registro histórico de las precipitaciones se puede estimar el
principio y término del periodo de lluvia comúnmente llamado “invierno”, además
nos permite determinar si las condiciones del suelo son las adecuadas para
realizar actividades de construcción, sociales o por otro lado de conservación, ya
que un suelo seco o muy húmedo puede sufrir daños al generar una presión sobre
el así como también dañar la estructura del suelo y afectar su flora. De tal manera
también nos ayuda a saber como se presentaran los años si serán secos o
húmedos ya que gracias al estudio de la Hidrologia y a la intervención de algunas
otras ciencias esto se hace cada vez mas parte de las razones de tener en cuenta
las precipitaciones y las formas para saber el comportamiento de las aguas
durante los meses que son de lluvias y de tal manera ayuda a que aquellos que se
dedican a la agricultura y ganadería tengan un enfoque preliminar de lo que podrá
pasar durante ese mes o los meses siguientes a este. También la precipitación es
de gran ayuda en el área ambiental ya que nos permite establecer algunas
mediciones que son de gran ayuda para obtener datos que servirán para los años
siguientes o bien para tener un gran registro de lo que paso con anteoridad y de lo
que pudiese pasar consiguiente a las precipitaciones actuales.

Bibliografía.
Breña, A., & Agustín, F. (2004). Precipitación y recursos hidráulicos en México.
Coordinación General de Vinculación y Desarrollo Institucional de la Rectoría
General de la Universidad Autónoma Metropolitana.

Aparicio Mijares, F.J. 1999. Fundamentos de Hidrología de Superficie. Ed. Limusa.


México.303 p.

Chow, V., Maidment, D. y Mays, L. 2000. Hidrología Aplicada. Ed. Nomos, S.A.


Colombia. 584 p.

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