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Trabajo de crecimiento

Presentado a:

Mónica Pesellin

Presentado por:

Valentina Gaviria

Michelle Gutiérrez

Juan Guarín

Ana Mendoza

Daniela Robles

T-04

Barranquilla, Atlántico- Marzo de 2020


La corrupción

Oscar Bautista, doctor de la Universidad Complutense de Madrid, plantea en su


publicación ¿Cómo abordar la corrupción?[ CITATION Bau16 \l 3082 ] El camino a
seguir para localizar y abordar el problema. Este camino pasa por entender la corrupción
como una cuestión global que afecta a cargos y estructuras puntuales del sistema
político, y está también presente en el ámbito administrativo, universitario e incluso
privado. Así mismo es necesario darle a la corrupción la importancia que merece, como
un problema transversal que afecta a toda la sociedad. Hay que ubicar el problema
dentro de un espacio y tiempo, entender su génesis, contextualizarlo.

Según Bautista (2016) para vencer la corrupción es necesario conocer el estado de la


cuestión; esto se tiene que hacer a través de distintos enfoques que permitan comprender
el problema en sus distintas dimensiones. La educación en valores es crucial para vencer
el fenómeno de la corrupción; ésta puede ser trabajada no sólo con recursos didácticos
tradicionales, sino con otros más innovadoras como es el cine donde se reflejan valores
y contravalores presentes en nuestro entorno (Santana Vega, 2007; 2015). Además
educar en valores compete a la sociedad en su conjunto; tal como reza un proverbio
africano “se necesita la tribu entera para educar a un niño” enseñar el valor de la
honradez en el hogar, en la comunidad y en la escuela es un antídoto eficaz contra las
conductas corruptas futuras. Además, según Bautista, (2009), es muy necesario educar a
los ciudadanos en la llamada ética pública, que constituye el conjunto de valores y, por
ende, de comportamientos que se encuentran dentro de la legalidad y los principios
generales del derecho, así como todos aquellos valores considerados como universales e
inherentes al ser humano.

En la actualidad existen numerosos problemas relacionados con las conductas poco


éticas (o deshonestas) de muchos estudiantes que a lo largo de su devenir universitario
van desarrollándolas, tales como el plagio o la copia en exámenes; la corrupción parece
traspasar el ámbito puramente político (Chapman y Lindner, 2016).

El desarrollo de los valores que guían nuestro comportamiento, y al fin y al cabo nuestro
juicio moral, incrementa la capacidad de abstracción y empatía en la toma de
decisiones; así pues los valores deben ser trabajados en la educación superior (Robina
Ramírez, 2017)
Como se ha señalado, el origen de la corrupción se sitúa en una crisis de valores o de
sensibilidad moral en los cargos políticos, que les hace más propensos a cometer
prácticas moralmente reprochables en el ejercicio de sus responsabilidades. La
educación en valores y en buenas prácticas democráticas no es lo suficientemente
amplia como para afianzar los principios universales que garantizan una convivencia
sana en sociedad.

¿Qué agentes influyen en la corrupción para que afecte nuestro desarrollo moral?

La moral se origina en las costumbres o hábitos de comportamiento de una persona o


grupo. Así, según nuestras costumbres y comportamientos, vamos construyendo nuestra
“manera de ser” a lo largo de nuestra vida.

La vida humana es un proyecto, el cual no se determina ni define por algo o alguien


ajeno al sujeto que vive. La moral de cada individuo está compuesta de actos, hábitos y
costumbres que tienen que ver con proyectos, fines y normas o códigos que orientan de
alguna manera nuestra vida.

Según Xavier Zubiri, la moral es constitutivamente humana. No se trata de un ideal,


sino de una forzosidad, de una necesidad que viene exigida por las propias estructuras
psicobiológicas de los seres humanos. En este sentido, la “moral como estructura”
comprende tanto los comportamientos "honestos" como los "deshonestos".

El modelo de desarrollo moral de Kohlberg se caracteriza por:

 La integración jerárquica de los estadios: los sujetos sólo comprenden el


razonamiento moral del propio estadio y de los estadios inferiores. La jerarquía
de los estadios se explica porque son seis estructuras que emergen de la
interacción del sujeto con su entorno social. Los sucesivos estadios muestran
un influjo progresivamente decreciente de la presión del medio sobre el sujeto,
desde la compulsión externa que domina el estadio 1, el sistema de intercambios
y satisfacción de necesidades del estadio 2, el mantenimiento de expectativas
legítimas de los estadios 3 y 4, hasta los ideales o principios éticos generales que
dominan los estadios 5 y 6. Todo sugiere que son los sujetos quienes organizan y
elaboran de modo cada vez más personal y autónomo el universo sociocultural.
 La invariabilidad de la secuencia evolutiva, de ahí que considere probada su
universalidad e irreversibilidad.

 Ahora bien, los estadios no forman un modelo acumulativo, sino que se limitan a
ser un modelo secuencial. Es más preciso, pues, hablar de "estadio
dominante", que cubre al menos el 50% de los juicios emitidos, repartiéndose el
resto por los estadios antecedentes y subsiguientes.

Kohlberg concibe la maduración del juicio moral como el resultado de dos factores
combinados: el desarrollo de las capacidades cognitivas y la adopción de papeles
sociales.

De acuerdo a esto, muchos de los fenómenos negativos que afectan a nuestro modelo
social están en conexión con decisiones y dilemas morales a los que han de enfrentarse
las personas. Los graves problemas que atraviesan las sociedades desarrolladas y en vías
de desarrollo se deben en gran medida a las crisis de valores, de la moralidad y, por
ende, a un pobre desarrollo del juicio y de la moralidad, así como a un déficit de
socialización normativa, abuso de poder y deshonestidad general, cuyo aspecto social
influencia a las personas a adquirir malos hábitos de corrupción por deshonestidad a sí
mismos y, presión social por adopción de comportamiento incorrectos.

La corrupción puedo considerarla como el incumplimiento de las normas morales y


éticas que atenta contra el pacto de justicia, ya que en él, la comunidad comparte lo que
considera bueno y adecuado y condena lo que asume inadecuado y transgresor, por
ende, todos los miembros de una sociedad deben preocuparse en fomentar el respeto por
las normas y las leyes, ya que las mismas representan, o deberían representar un orden
social basado en el bien común que en definitiva debe ser lo más importante y justo.

La corrupción no solo es un grave problema de ilegalidad, sino por sobre todas las cosas
un serio problema ético y moral. (Valdés)

La corrupción no solo es un problema legal que debe preocupar a toda la sociedad, sino
que por sobre todas las cosas, debe ser considerada una cuestión de profundo sentido
ético y moral que evidencia la crisis de esos valores.
Por lo dicho anteriormente puedo decir que la corrupción se puede prevenir si
retomamos desde la niñez la formación en valores y tener de la capacidad para no
dejarse contaminar por el ambiente, un ambiente en el que desde pequeños nos enseñan
a mentir cuando sea conveniente, cuando necesitemos salir bien librados y con el pasar
de los años algo que parecía un juego inocente se nos sale de las manos.

La corrupción es una cuestión de un hondo y profundo sentido ético y moral. La ética


no solo es un conjunto de normas sino que por sobre todas las cosas es un pensamiento
y reflexión sobre las mismas, en cambio la moral si constituye un conjunto de norma
que consideramos justas y que generalmente regulan nuestras conductas individuales de
acuerdo a la cultura de la época evidencia la crisis de esos valores (Edgar Tete, 2016)

La ética no solo abarca la descripción de las conductas de las personas sino que intenta
dar razones de cómo deberían ser.

La corrupción es un problema moral y ético, en oposición a esto, el Estado establece


ciertas normas jurídicas que los individuos están obligados a cumplirlas aunque no estén
de acuerdo con ellas hay normas que sancionan ciertos tipos de mentira aunque no toda
mentira es contemplada por ellas, un ejemplo de esto sería si miento a un amigo, esa
mentira puede no constituir un delito pero constituye un acto malo desde un punto de
vista moral. Mentirle a un amigo es considerado moralmente malo, pero si esta situación
sucede en la política los mismos que sancionaron estas normas se verían involucrados
en una situación legal mucho mayor que una pequeña mentira

La lucha contra la corrupción es fundamental para salvar justamente a la democracia y


no debe hacerse sin importar los medios, o sin importar el espíritu. El objetivo esencial
consiste en restaurar el buen funcionamiento del sistema político de la democracia.

Hay que ser prudentes para que esta lucha contra la corrupción no sea manipulada y
posteriormente convertida en una lucha contra la democracia. Estos puntos van juntos:
la lucha contra la corrupción y la defensa de la democracia.

La corrupción es un mal moral, pero también político y económico, paulatinamente


deteriora la democracia y constituye el más peligroso enemigo de cualquier sistema
socioeconómico basado sobre la competencia y la igualdad de posibilidades.
Conclusión:

En conclusión, la corrupción es un determinante social que debe ser cambiado para el


bien de toda la sociedad, por medio de diferentes métodos, principalmente educando
desde temprana edad basándose en valores morales. Además, se necesita el compromiso
de toda la sociedad para combatir esta lucha, ya que es la mejor herramienta para
perfeccionar el estado político y civil.
Bibliografía

1. Bautista, Oscar Diego. (2016). Revista Direito UFMS. ¿Cómo abordar la


corrupción? Una via para su solucion a traves de la ética pública. Recuperado
de: https://pdfs.semanticscholar.org/ad.pdf

2. Bautista, Oscar Diego. (2009). Ética para corruptos. Una forma de prevenir la
corrupción en los gobiernos y administraciones públicas, Bilbao, Desclee de
Brower.

3. Seña, Jorge Malem. (2002). La corrupción, Aspectos éticos, económicos,


políticos y jurídicos, Barcelona, Editorial Gedisa.

4. Barba, B. (2001). Razonamiento moral de principios en estudiantes de


secundaria y bachillerato. Revista Mexicana de Investigación Educativa, 6 (13),
501-523. Recuperado de http://www.quadernsdigitals.net/datos/hemeroteca/pdf.

5. Frisancho, S. (2010). Emociones morales y corrupción judicial: un estudio


exploratorio. Postconvencionales: ética, universidad, democracia, (1), 66-82.

6. Tete, E., Tete, E., & perfil, V. (2016). Problema Etico: La Corrupcion. Retrieved
17 March 2020, from http://problemaetico-lacorrupcion.blogspot.com/

7. Ubilla Abad, J. (2006). Corrupción moral. Retrieved 17 March 2020, from


https://www.eluniverso.com/opinion/2015/12/06/nota/5280579/corrupcion

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