Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Entonces, la pregunta que cabe hacer es ¿La protesta social es un problema que entra
como inquietud de un colectivo en específico, o, por el contrario, debe ser abordada como
un problema colectivo, cuya raíz se encuentra en la estructura social? Para responder,
parafraseando a Mills, si la institución del matrimonio registra en 1000 casamientos, más de
un buen porcentaje de divorcios, suponiendo de 200 a 400, el problema no tiene raíz en las
dificultades de reconciliarse entre la pareja, sino que responde a un problema más
estructural y por lo tanto colectivo. Ahora, se tienen los casos resientes en Chile, Ecuador y
Colombia como los más apreciados en el contexto latinoamericano. Cabe resaltar que la
protesta social en estos países se desarrollaba en torno a decisiones administrativas que
perjudican furtivamente a la población más vulnerable, trabajadores, estudiantes, en pocas
palabras, la clase media-baja de estos “Estados de derecho”. En estos países, sobre todo en
el austral, los modelos de producción mercantil, asociados a procesos de producción en el
sector primario de la economía, más la evidencia histórica los regímenes políticos del siglo
pasado, desestabilizó la realidad obligando a la ciudadanía, movilizarse por meses. La
protesta incluyó desde apreciaciones políticas como conflictos directos entre la población y
las fuerzas armadas. Para el caso chileno, la protesta surge a partir de las alzas
desmesuradas del sistema de transporte público, decisión tomada por el gobierno nacional
en manos de Sebastián Piñera, el 6 de Octubre de 2019, a partir de esto, miles de
estudiantes, acompañados posteriormente por la comunidad en general, se aglomeran en las
plazas principales de Santiago de Chile, su capital, evitando el sistema de transporte
público, evadiendo el pago del metro y suscitando en enfrentamientos contra el Cuerpo de
Carabineros de Chile. La protesta estalla en Santiago y avanza paulatinamente a las
principales ciudades productoras del país; como resultado, millares de personas heridas, 34
muertes confirmadas, aun así, se retrocede en la medida de alza de la tarifa del transporte
público y de la electricidad, cambio del gabinete presidencial, plebiscito acordado para el
próximo 26 de abril, acusaciones legitimas contra el gobierno de Sebastián Piñera, entre
otros.
___________________________________
1
diferente al concepto de problema público o colectivo que se menciona líneas antes.
Para el caso ecuatoriano, la protesta surge con motivo de la reformulación de leyes
fiscales e incrementos injustificados en los impuestos, además de esto, como hecho
particular, la sustitución del subsidio al combustible; esta protesta surge la primera semana
de octubre, el día 2, y se extiende hasta el 13 del mismo mes. Solo dos semanas fueron
suficientes para colapsar todo Ecuador en contra de las medidas represivas de la
administración de Lenin Moreno. Se congregaron varios sectores de la clase media-baja del
país, sindicatos de trabajadores, grupos indígenas, asociaciones estudiantiles y la
comunidad en general. La protesta social en este escenario se extendió a las principales
ciudades del país ecuatoriano, llevándose a cabo enfrentamientos entre los diferentes
grupos sociales y la Policía Nacional, quien en última instancia instauró el toque de queda
en Quito, su capital. Los resultados: 11 muertos, 1507 heridos, 133 policías en entidades de
salud, pero como victoria, se define el 13 de octubre la derogación del Decreto 883 que
imponía la sustitución del subsidio del combustible y medidas cautelares contra el gobierno
de Lenin Moreno.
Como se puede observar, los hechos de conflicto directo son más que evidentes, estos
dejan secuelas en los sistemas económicos, frenando la producción y la movilidad,
registrando perdida en el patrimonio arquitectónico, en el caso de Chile y Ecuador, y la
pérdida de vida en los tres casos. Con dichos resultados, se consideraría a la protesta social
como un agente que se contrapone a los valores y normas de las sociedades
latinoamericanas, al desestabilizar economías y en muchos casos imponer el estado de
excepción, como sucedió en Ecuador. Sin embargo, si se quiere profundizar sobre la
problemática central, se tiene que objetivar con relación a la función de las instituciones
sociales y como esta afecta y produce la efervescencia entre las clases menos favorecidas.
De una u otra manera, es más que evidente el hecho de considerar estas acciones sociales
como una problemática colectiva, ya que no depende del capricho, indiferencia o apatía,
como lo establece Mills, de un pequeño sector de la población, sino que responde a las
medidas de defensa que los grupos sociales replican en las calles a razón de su
inconformismo con la dirección político-administrativa de sus países.
Más allá de la categorización sobre la protesta social, si es legítima o no, Mills,
metodológicamente, invita a la identificación de los malestares sociales como inquietudes o
como problemas colectivos o públicos. En este apartado cabe mencionar que la protesta es
el resultado de la mala administración dentro de las estructuras sociales que rigen la
normativa de la sociedad, por lo tanto, no compete a los sujetos protagonistas de estas
protestas solucionar la realidad social de sus países, ni mucho menos se desprestigia la
protesta social buscando su no repetición en el escenario local, nacional, regional o
mundial.
Para entender mucho más sobre el contexto estructural, temporal y social del caso
colombiano, en el que se desenvuelven las protestas sociales, es necesario plantearse las
mismas preguntas que Mills se hace al momento de publicar Imaginación Sociológica, ya
que, como se puede ver, cada contexto se desarrolla de una manera específica, genera
diferentes resultados y se da por diversas circunstancias.
Esto ha llevado que en los últimos gobiernos se dé un descontento ante los decretos y
pronunciamientos por parte del Estado; es evidente que, en la mayoría, por no decir todas,
las organizaciones estatales existentes en el mundo hay desacuerdos además de numerosos
acontecimientos de movilizaciones sociales. En el caso colombiano hay distintas variables
que lo hacen un tema importante de análisis. Una de ellas es la dificultad para la
concertación de acuerdos entre las partes implicadas en el conflicto, esto se debe en
ocasiones a la omisión de ciertas peticiones y el poco interés por parte del Estado en
encontrar soluciones de manera rápida y efectiva, que no afecten demasiado a la sociedad
en general. Sin embargo, para agravar y abrir más la brecha entre los partícipes de este
problema se encuentra también el incumplimiento de aquellos compromisos que tanto
trabajo costó conseguir, provocando muchas más manifestaciones que hacen parecer como
si fuera un ciclo en el que siempre va a haber una pugna entre intereses de sectores sociales
opuestos, en el que el sentido de la vida humana es defendido por aquellos actores que
buscan un cambio, oponiéndose a aquellos intereses, más que todo económicos, que tiene el
Gobierno, que ha tomado medidas poco comprensibles para “controlar” estas luchas,
acciones las cuales se evidencia el poco valor que se le da a los derechos esenciales para el
correcto vivir de su población, que ni siquiera está por encima de la importancia que se le
ofrece a la economía y a la dominación que espera ejercer sobre los gobernados.
Reflexión
La razón por la que no se complementó los casos chilenos y ecuatorianos recae sobre el
motivo de ampliar el contexto colombiano, al tratarse de nuestra realidad social como tal.
En este apartado se puede apreciar como la protesta social surge a razón de debilidades en
las estructuras sociales que rigen la parte legislativa, judicial y ejecutiva de los tres poderes
residentes en la Constitución Política de Colombia.
Es papel del científico social, y más, del sociólogo, lustrar su capacidad de Imaginación
Sociológica para poder enfrentarse a la realidad social con las herramientas suficientes para
su completa y correcta comprensión y transformación. Es necesario entender las diferencias
contextuales en las diversas clases de sociedad, para así, no buscar una Teoría General
sobre la sociedad, sino que, a partir de la variedad, comprender el movimiento de la
realidad y poder alterar su curso para bien del colectivo.