Después de la homilía, el guía invita a un dialoga entre el
catequista y el sacerdote. Luego se le pide que no se sienten
y dialogan con el sacerdote:
Sacerdote: Chicos, ¿Quieren celebrar el sacramento
de la Confirmación, que es el sacramento del don
del Espíritu Santo, con el que darán plenitud a su
bautismo?
Niños: Sí, queremos.
Sacerdote: Ahora, dénse vuelta y mirando a la
asamblea muestren sus nombres escritos.
Niños: Sí, Padre Santo, queremos hacer siempre lo
que te agrada, pero sentimos en nosotros una
inclinación contraria.
Unos presentan los nombres escritos
Sacerdote ¿Para qué presentan sus nombres a la
asamblea?
Niños: Para que recen por nosotros.
Sacerdote: ¿Y por qué quieren que recen por
ustedes?
Niños: Porque recibiremos la confirmación y
queremos perseverar en el compromiso hecho
con Jesús.
Sacerdote: Querida comunidad, estos niños confían
en su oración y en su ejemplo. No los defrauden.
Recen por ellos y den un firme y alegre
testimonio de vida cristiana para que ellos puedan
perseverar en el camino que comenzaron.
El sacerdote invita a rezar la oración de los fieles y se van a
sentar.
Después de la homilía, el guía invita a un dialoga entre el
catequista y el sacerdote. Luego se le pide que no se sienten
y dialogan con el sacerdote:
Sacerdote: Chicos, ¿Quieren celebrar el sacramento
de la Confirmación, que es el sacramento del don
del Espíritu Santo, con el que darán plenitud a su
bautismo?
Niños: Sí, queremos.
Sacerdote: Ahora, dénse vuelta y mirando a la
asamblea muestren sus nombres escritos.
Niños: Sí, Padre Santo, queremos hacer siempre lo
que te agrada, pero sentimos en nosotros una
inclinación contraria.
Unos presentan los nombres escritos
Sacerdote ¿Para qué presentan sus nombres a la
asamblea?
Niños: Para que recen por nosotros.
Sacerdote: ¿Y por qué quieren que recen por
ustedes?
Niños: Porque recibiremos la confirmación y
queremos perseverar en el compromiso hecho
con Jesús.
Sacerdote: Querida comunidad, estos niños confían
en su oración y en su ejemplo. No los defrauden.
Recen por ellos y den un firme y alegre
testimonio de vida cristiana para que ellos puedan
perseverar en el camino que comenzaron.
El sacerdote invita a rezar la oración de los fieles y se van a
sentar.
Después de la homilía, el guía invita a un dialoga entre el
catequista y el sacerdote. Luego se le pide que no se sienten
y dialogan con el sacerdote:
Sacerdote: Chicos, ¿Quieren celebrar el sacramento
de la Confirmación, que es el sacramento del don
del Espíritu Santo, con el que darán plenitud a su
bautismo?
Niños: Sí, queremos.
Sacerdote: Ahora, dénse vuelta y mirando a la
asamblea muestren sus nombres escritos.
Niños: Sí, Padre Santo, queremos hacer siempre lo
que te agrada, pero sentimos en nosotros una
inclinación contraria.
Unos presentan los nombres escritos
Sacerdote ¿Para qué presentan sus nombres a la
asamblea?
Niños: Para que recen por nosotros.
Sacerdote: ¿Y por qué quieren que recen por
ustedes?
Niños: Porque recibiremos la confirmación y
queremos perseverar en el compromiso hecho
con Jesús.
Sacerdote: Querida comunidad, estos niños confían
en su oración y en su ejemplo. No los defrauden.
Recen por ellos y den un firme y alegre
testimonio de vida cristiana para que ellos puedan
perseverar en el camino que comenzaron.
El sacerdote invita a rezar la oración de los fieles y se van a
sentar.
Después de la homilía, el guía invita a un dialoga entre el
catequista y el sacerdote. Luego se le pide que no se sienten
y dialogan con el sacerdote:
Sacerdote: Chicos, ¿Quieren celebrar el sacramento
de la Confirmación, que es el sacramento del don
del Espíritu Santo, con el que darán plenitud a su
bautismo?
Niños: Sí, queremos.
Sacerdote: Ahora, dénse vuelta y mirando a la
asamblea muestren sus nombres escritos.
Niños: Sí, Padre Santo, queremos hacer siempre lo
que te agrada, pero sentimos en nosotros una
inclinación contraria.
Unos presentan los nombres escritos
Sacerdote ¿Para qué presentan sus nombres a la
asamblea?
Niños: Para que recen por nosotros.
Sacerdote: ¿Y por qué quieren que recen por
ustedes?
Niños: Porque recibiremos la confirmación y
queremos perseverar en el compromiso hecho
con Jesús.
Sacerdote: Querida comunidad, estos niños confían
en su oración y en su ejemplo. No los defrauden.
Recen por ellos y den un firme y alegre
testimonio de vida cristiana para que ellos puedan
perseverar en el camino que comenzaron.
El sacerdote invita a rezar la oración de los fieles y se van a
sentar.