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GATACCA, RETOS JURÍDICOS ANTE LA MODIFICACIÓN GENÉTICA.

La historia de la película transcurre en un futuro no muy lejano, donde la tecnología ha


avanzado a ritmo acelerado, y la ciencia ha logrado modificar genéticamente a los fetos
durante el embarazo de la mujer, por lo que los padres pueden elegir las características
físicas e intelectuales de su hijo.

Sin embargo, hay algunos bebés que nacen naturalmente, por lo que siempre están bajo el
riesgo de padecer enfermedades o condiciones físicas o mentales desfavorables, quienes, al
crecer, son considerados como personas no validas, lo que les impide acceder a los mejores
empleos y las mejores condiciones económicas y sociales.

Por lo tanto, aunque el mundo ha avanzado y ya no se habla de una discriminación por


motivos de género, de raza, de religión, de cultura, entre otros conocidos hoy en día, ese
mundo, ha logrado dividir a las personas en dos clases: las válidas y las inválidas. En las
primeras, están todas aquellas personas, que, gracias a los avances de la ciencia y la
tecnología, pudieron ser modificados genéticamente a petición de sus padres, logrando
nacer con las características que se elegían, predestinados, aun antes de nacer, a ejercer
ciertos cargos en la sociedad.

Por otro lado, están las personas consideradas como no validas, quienes su nacimiento y su
formación durante el embarazo fue al azar, es decir, nacieron naturalmente sin intervención
ni modificaciones de la manipulación genética, y que, por lo tanto, no tienen las mismas
oportunidades en el transcurso de su vida.

Esta clasificación ha generado una segregación: Las personas ricas, poderosas, con la mejor
educación, los grandes atletas, los científicos, y en el caso de la película, los astronautas,
son personas válidas, cuyos genes fueron manipulados y modificados desde antes de su
nacimiento.

Por su parte, las personas pobres, sin educación, débiles físicamente, son las personas no
validas, quienes se ven marginadas y obligadas a ejercer oficios de poca remuneración, y
aunque son oficios dignos, son desagradecidos y aislados por la sociedad, como en el caso
de la película, el personal del servicio de aseo.
Sin embargo, la película logra juntar en un mismo edificio a astronautas y personal de
limpieza, edificio dedicado a la investigación y la exploración, y que lleva el nombre de la
película. En este lugar, el protagonista, que es una persona no valida, y que desde pequeño
vivió la marginación ya que sus padres le dieron preferencia a su hermano menor, quien sí
fue elegido por ellos, logra hacerse pasar por una persona válida, debiendo someterse a una
serie de procedimiento para ocultar su identidad, lo cual, logra con cierto éxito, hasta que
empiezan las investigaciones por una ceja que accidentalmente dejó caer.

De esta forma, un reto jurídico que se abarca en la película, es la deshumanización de las


normas, las cuales, permiten que exista una transformación y modificación de las personas
desde su genética, es decir, se llegó a un punto en el que se es posible construir a los
humanos: seleccionar sus capacidades, modificarlos genéticamente para extender sus vidas,
jugar con sus características físicas. Por lo cual, empiezan a dejar de ser humanos, para
convertirse básicamente en robots prefabricados.

Del mismo modo, en la película es claramente observable cómo el progreso, que se refleja
por los avances tecnológicos y científicos, ha hecho que el ser humano como persona, se
deshumanice, ya que ha perdido ciertos valores y principios, que actualmente parecen
básicos para la convivencia. El egoísmo, la falta de solidaridad, la intolerancia, el irrespeto
hacia las otras personas, la discriminación, son elementos del día a día de la sociedad
recreada en la película.

Por tal razón, es importante plantearse el siguiente interrogante: ¿Cómo debe actuar el
derecho, ante los avances científicos y tecnológicos? Si bien es cierto que la sociedad
avanza, y cada día los desarrollos en las ciencias son más sofisticados, es importante
pensar, si debe existe una regulación para las nuevas invenciones, que, en algún punto,
pondrán en peligro el sentido mismo de la vida.

¿Qué tipo de regulación debe existir en casos de modificación genética? Como se vio en la
película, la búsqueda de la perfección humana conllevó a un falso progreso que involucraba
el nacimiento de seres humanos modificados genéticamente, seres humanos con
capacidades físicas e intelectuales muy superiores, destinados a ser los mejores y hechos a
la medida de los caprichos y exigencias de sus padres.
A tal circunstancia, se presenta una nueva discriminación, entre los “validos” y “al azar”,
donde los primeros son superiores y son destinados a obtener cargos importantes dentro de
la sociedad. Mientras que estos últimos están destinados a ocupar la clase más baja, siendo
tratados como inferiores y teniendo menos oportunidades para trabajar.

Durante la búsqueda de la perfección, el ser humano aprovechándose de los avances


tecnológicos y científicos, ha llegado al punto de modificar su composición genética para
hacer personas cada vez más fuertes, más inteligentes, más rápidas.

Sin embargo, eso es solo un eufemismo, que, en realidad refleja, la descomposición de la


sociedad, que cada vez busca que nazcan humanos autómatas, predeterminados, y con
funciones específicas, y que se rijan bajo esas instrucciones el resto de su vida.

Por lo tanto, necesariamente el progreso no significa un avance de la sociedad, en ocasiones


puede generar un retroceso, como se manifiesta en la película. Las modificaciones
genéticas han supuesto un amplio debate, lo cual, aunque por ahora se reserva sólo a
animales y a vegetación, existe la preocupación de su uso en seres humanos en un futuro,
por tal razón, sería importante estudiar y profundizar sobre los retos que tiene la sociedad
para afrontar una posible modificación genética en un ser humano

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