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PROGRAMA EDUCATIVO: MCP II- Semestre

FECHA: 03/03/2020

“Senectud”.

Al final del camino, hay dos opciones: aferrarse o seguir. Asimismo, al final de la vida nos
encontramos con ese dilema. La senectud nos enfrenta a una serie de sucesos esperados e
inesperados (crisis normativas y para normativas), los cuales debemos asimilar de una u
otra forma. Generalmente, en nuestra sociedad se usan diversas estrategias para superar las
crisis que surgen; la religión y la selección de alternativas a los problemas son válidas a la
hora de confrontar sucesos vitales como los cambios físicos, psicológicos o sociales. los
adultos mayores tienen asuntos qué resolver respecto a su vida emocional. Erik Erikson,
con su teoría del desarrollo psicosocial, propuso que en esta etapa de la vida se presenta la
crisis de la integridad del Yo versus la desesperanza. Erikson define a la integridad del Yo
como la aceptación de la vida y de la inminencia de la muerte, a su vez nace la virtud de la
sabiduría. Por otro lado, se encuentra la incesante idea de la desesperanza por no poder
volver a vivir la juventud y hacer todo lo que quisieron, allí surge un sentimiento de
arrepentimiento. George Vaillant descubrió que el empleo de mecanismos de adaptación
maduros era el factor más importante en el ajuste emocional a los 65 años, este método
consiste en que los adultos mayores manejan sus problemas sin culpar a nadie y sin
amargura ni pasividad. se han conocido varias teorías de cómo el envejecimiento puede ser
exitoso. La teoría del retiro, por ejemplo, sostiene que el éxito radica en que el anciano
debe reducir gradualmente su relación con la sociedad; mientras que la de la actividad,
sustenta que una persona debe permanecer tan activa como sea posible para envejecer con
éxito. El trabajo a esta edad se ve afectado debido a la jubilación, lo cual es asumido de
diversas formas según sea el caso. Las relaciones personales del adulto mayor, a pesar de
no ser tan frecuentes como en la juventud u otras etapas, es esencial para la senectud. Al
final de la vida, el bienestar emocional es fuente de salud mental y, por ende, se procura
que los adultos tardíos disfruten de relaciones familiares y de amistades que contribuyan a
ese fin. La adultez tardía no es más que otra etapa de la vida que hay que afrontar de la
forma que mejor se adecúe a nuestras necesidades físicas, psicológicas y sociales. Saber
adaptarse es la clave para lograr la integridad de Yo y poder aceptar todo lo vivido.

Bibliografía.

- Papalia, D., Wendkos, S., & Duskin., R. (s.f.). Desarrollo Humano (Undécima ed.).

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