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Epistemología Médica

(Transcripción: D. Harbst)

Profesor Juan Eduardo Carreño

¿Por qué se estudia medicina en la universidad?

En general, si uno va a ver los motivos por los que una persona ingresa a estudiar medicina
en la universidad, primero están las razones jurídicas: Si hoy en día un alumno de segundo año es
atrapado operando una apendicitis, es muy probable que lo lleven preso, pues aunque sus
acciones la produzca con un propósito medicinal, hay algunas acciones que caen dentro de un
marco jurídico que regula y determina qué procedimientos y prescripciones solo pueden ser
realizadas por un médico titulado. Esto se debe a que en la actualidad, y específicamente en
nuestro caso de la cultura occidental, el médico titulado es aquel que porta un título universitario.

Segundo, hay una motivación de prestigio y aceptación social. Desde hace siglos la
medicina se establece en la universidades como una carrera con una serie de particularidades y
especificidades que la hace desde un principio distinta, con un aura de excelencia. Las Expectativas
económicas también son parte de la razón por la que los aspirantes a médicos prefieren estudiar
medicina en la universidad.

Todo lo anterior habla de una cierta tradición, que se viene desarrollando desde hace más
de ocho siglos, sin embargo todos sabemos que hay tradiciones médicas que se pueden estudiar al
margen de la medicina. Existen escuelas de medicina extrauniversitarias, en particular de las
llamadas <<medicinas alternativas>>. Estas cada vez son más integradas en el currículo
universitario, pero se puede estudiar esta medicina sin poseer un título universitario.

Entonces, ¿Por qué no estudiar en uno de estos centros? Probablemente por expectativas
sociales, culturales, económicas, como las que fueron mencionadas anteriormente.

¿Por qué se forma esta tradición de <<medicina occidental>> en occidente, y


posteriormente en oriente?

Para responder esta pregunta se deben tomar en cuenta dos factores: la índole propia de
la medicina, y la índole propia de la universidad. Existe una íntima conexión entre una y otra.

La Índole propia de la medicina

Cuando uno le pide a una persona que caracterice a la medicina <<occidental>> en


contraste con otras formas de medicina, como las alternativas (entra las cuales hay algunas
generadas en occidente, como la homeopatía), generalmente se alude al estatus de que nuestra
medicina sería “científica”, por lo que el médico bajo estos presupuestos, sería científico. Pero ¿es
el médico científico?

Al preguntar en la clase, se ve que hay una tensión: Por una parte hay gente que dice que
sí, hay algo cercano a lo formalmente científico en el actuar médico, mientras otros dicen sí tiene
que ver con la ciencia, pero que la medicina propiamente tal no es exactamente una ciencia.

Hay una diferencia fundamental entre la lógica del científico y la del médico. La ciencia en
cuanto a ciencia aspira a establecer con certeza ciertos juicios fundamentales: va desde
observaciones de fenómenos singulares de la realidad hasta la formación de juicios universales. El
desafío del médico es el opuesto: el médico busca utilizar información universal en un caso
singular, el de su paciente, que presenta infinitas circunstancias que se escapan de las definiciones
de los libros, debido a que es influenciado por varios factores aparte de la enfermedad por la que
consulta.

Aún así un médico necesita una formación científica y también de humanidades, porque
de eso se trata la medicina que se enseña en la universidad, la herencia de la medicina griega o
techné iatriké (τεχνή ίατρική).

La medicina como actividad sanadora es tan antigua como el hombre. Muchas veces el rol
de curandero coincidía también con ciertos rituales religiosos. En estas formas de medicina más
primitivas, se fusionan elementos empíricos, los cuáles tenían una base en el ensayo y error, con
otros elementos mágicos o supersticiones.

La gran innovación en la historia aparece en el siglo VII a.C. y cristaliza en el siglo V a.C. con
la escuela Hipocrática. Esta escuela instaura una nueva manera de entender y de practicar la
medicina, que es la que hemos heredado hasta el día de hoy.

En la cultura de la Grecia antigua, la medicina se basa sobre un hallazgo fundamental con


una concepción filosófica, el concepto de physis (φύσις). Los griegos se percatan que las cosas se
comportan de una forma regularmente, de una cierta manera, según lo que son. Esto es a lo que
denominan como physis. El médico es la persona que estudia la physis del hombre y las pathos, las
alteraciones que la afectan. En un mundo sin physis no hay posibilidades de entender la
enfermedad. Por ejemplo, podemos entender la insuficiencia cardíaca porque entendemos como
funciona el miocardio en condiciones normales. Debido a que este se comporta de cierta manera,
también falla de cierta manera.

El rol del médico es entonces restaurar la physis, cuando esta haya sido alterada. La physis,
decían los griegos, se sana a si misma. El rol del médico entonces es facilitar esta curación. Por eso,
los griegos admiten un doble tipo de conocimiento: el médico, el iatros, tiene que tener
conocimientos teóricos acerca de la physis y del pathos, pero además el médico se enriquece
tanto de su propia experiencia como la de sus maestros, mediante la empiria. Esto es lo que pasó a
concebirse como una techné iatriké, o técnica médica.
Modelo epistemológico

La epistemología es la rama de la filosofía que estudia la ciencia.

Una techné para los griegos, es un saber que aspira producir una obra, en
contraposición a la episteme, la ciencia, que sólo se dedica a estudiar. La techné es un saber
práctico pero que tiene un componente teórico sobre el cuál se basa su obra. Algunos ejemplos de
esta clase de saber son la Arquitectura, la Medicina y la Ingeniería. Todos estos saberes para los
griegos son techné, pues quien los ejerce va a producir una obra con un saber teórico como base.

La techné iatriké en particular espera producir una obra que, en términos muy amplios, es
la promoción y el restablecimiento de la salud. Para producir esta obra, el iatros debe poseer un
saber, que no es solamente empírico o sea proveniente de la experiencia, sino que también
implementa la episteme, que es lo que conocemos como la ciencia. En otras palabras, para el
griego el médico no es un científico, pero sí debe tener conocimientos de muchas ciencias.

El médico griego que aplica esta forma de curar la medicina, compite contra el médico que
cura mediante la empiria, el que solo se basa en ensayo y error, pero rápidamente gana un
prestigio, porque no solamente sabía lo que hacía, sino que sabía también el por qué lo hacía.

En los siglos que transcurren tras la caída de Grecia, este modo de entender la medicina se
va transmitiendo, no solamente a occidente, sino que también a lugares como medio oriente. No
sólo se pasa a los latinos, si no que también a bizantinos, árabes, musulmanes y judíos. Entre los
grandes modelos de la medicina antigua, encontramos a Galeno, a Avicena y Maimónides. Estos
últimos provienen del mundo árabe. Todos estos, seguían el modelo de techné iatriké como base
para su actuar médico.

En resumen, la techné iatriké es una disciplina práctica, fundada en un conocimiento


teórico y en la experiencia, cuyo fin es la promoción y el restablecimiento de la salud del hombre
enfermo. Commented [DH1]: Obtenido del PPT “qué es la
medicina”
Esta caracterización de la medicina occidental nos permite delimitar cuál es el objeto de la
medicina. Esto propone ciertos límites no sólo de facto, o sea “de hecho”, sino también de iure,
que significa “de derecho”. Un médico no debe solucionarle la vida a los pacientes, ese no es el
deber del médico en cuanto a médico. Puede caritativamente ayudar en problemas que no sean
de su rubro, como por ejemplo donar dinero, pero no es lo que se requiere de su trabajo. No hay
que olvidar que médico forma parte de un equipo en el cuál distintos individuos -trabajadores
sociales, kinesiólogos etc- cumplen roles para ayudar en los otros aspectos de la vida del paciente.

La Índole propia de la Universidad

Siguiendo este paradigma que se transmite a varias líneas culturales incluyendo Bizancio,
Medio Oriente y también el occidente latino, se forman sobre todo en los siglos IX y X las primeras
escuelas de medicina. Una de las más connotadas es la Escuela de Salerno, Italia, donde los
estudiantes van, generalmente financiados por mecenas, a estudiar medicina con maestros
reputados.

En el curso de los siglos, sobre todo en las grandes catedrales europeas, en particular en la
de París y la de Chatres, se forman las “Escuelas Catedralicias”. Las catedrales por aquellos años no
solo cumplían un rol religioso, si no que también un rol cultural. En ellas, variados gremios
profesionales arrendaban espacios en los cuáles se congregaban con el objetivo de que los
maestros le enseñaran a sus discípulos la profesión. Esto sienta las bases para las primeras
universidades, en particular la de Bologna, que es la primera universidad reconocida, en el siglo
XII, y ya en el siglo XIII empiezan a proliferar cada vez más: la de París, Oxford, Salamanca, etc.

¿Cuál es la idea de universidad?

Según David Thunder:

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