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silviculturales
para el manejo de especies forestales
con miras a la producción de madera en
la zona andina colombiana
El Eucalipto
Eucalyptus grandis W. Hill ex Maiden
Por:
DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN
Carmenza Bacca Ramírez - Cenicafé
FOTOGRAFÍA
Gonzalo Hoyos S. - Cenicafé
Carlos Alberto Rodas P. - Cartón de Colombia
Carlos Mario Ospina P. - Cenicafé
Patricia Pinzón Florián - Conif
Carlos Rodrigo Solarte - Cenicafé
Raúl Jaime Hernández Restrepo - FNC
Programa Colombia Forestal PCF - Chemonics
Alejandro Madrigal C. - Universidad Nacional de Colombia - Sede Medellín
Francisco Alves Ferreira y Doraci Milani - Universidade Federal de Viçosa
Luis Alberto Ramírez Correa - Asesor particular Refocosta
Forestry and Agricultural Biotechnology Institute - FABI
Impreso por:
BLANECOLOR
©FNC-Cenicafé - 2006
Los trabajos suscritos por el personal técnico del Centro Nacional de Investigaciones de Café
son parte de las investigaciones realizadas por la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia. Sin embargo, tanto en este
caso como en el de personas ajenas a este Centro, las ideas emitidas por los autores son de su exclusiva responsabilidad y
no expresan necesariamente las opiniones de la Entidad.
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Presentación
Para la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia los recursos
naturales y en especial los árboles, han sido de gran importancia
para el manejo de las cuencas hidrográficas y la sostenibilidad del
ambiente. Hoy, el reto es lograr que algunos de esos árboles también
sean importantes para la producción de madera como alternativa
económica para los agricultores en la zona andina.
Familia: Myrtaceae.
Sinónimos:
Eucalyptus saligna var. pallidivalvis Baker et A.C. Sm.
GENERALIDADES DE LA ESPECIE
Figura 1. Población de E. grandis en El Eucalyptus grandis se encuentra naturalmente entre 32 y 17° de Latitud Sur en la región
Restrepo (Valle del Cauca). costera de Queensland y en el Nuevo Gales del Sur (Australia), en un rango altitudinal desde
0 hasta 900 m, con precipitación media anual entre 1.000 y 1.780 mm, una estación seca de
tres meses en promedio y temperatura máxima de 35ºC y mínima de 5ºC.
Se ha introducido en África, Asia, América del Sur y América Central. Gracias a su rápido crecimiento, productividad y
adaptabilidad, ha permitido su introducción en sitios de una variada oferta ambiental como en el bosque seco tropical (bs-
T), bosque húmedo tropical (bh-T), bosque húmedo pre-montano (bm-PM), bosque muy húmedo premontano (bmh- PM) y
bosque muy húmedo montano bajo (bmh-MB) (Conif, 2002).
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En Colombia crece bien entre 1.000 y 2.000 m.s.n.m., y es una de las especies forestales más cultivadas en los departamentos
del Cauca, Valle del Cauca, Caldas, Risaralda y Antioquia. Por su alta productividad es la especie preferida para la producción
de pulpa de fibra corta. En el país se tienen plantaciones con fines comerciales en un área de 15.984 hectáreas.
MORFOLOGÍA
Es un árbol que alcanza hasta 60 m de altura y 1,50 m de diámetro. La corteza es áspera y persistente desde la base hasta
uno o dos metros de altura; es delgada, fibrosa o escamosa, tiene una tonalidad gris clara a marrón y se puede desprender
en bandas alargadas. Inicialmente la corteza interna posee una tonalidad rosácea brillante y después es blanca o grisácea
- blanquecina. Los árboles son de copa poco densa y amplia, y tienen porte columnar en plantaciones densas. El árbol como
particularidad, produce un número indefinido de brotes y yemas desnudas.
a b c d
Figura 2. Detalle de fisionomía de E. grandis, a. Fuste y Copa, b y c Detalle de corteza, d. Detalle de madera
(Foto del Programa Colombia Forestal –PCF- Chemonics).
Las hojas son alternas y horizontales o colgantes. En estado juvenil son
opuestas por algunos pares, luego alternas, ovadas, de hasta 16 cm de
largo y 8,5 cm de ancho, verdes a verdes oscuras. Las hojas adultas son
alternas, lanceoladas a ampliamente lanceoladas, de hasta 15 cm de
largo y 3 cm de ancho, verdes por la haz y verdes pálidas por el envés,
penninervadas, densamente reticuladas.
La madera es de color rojo claro, suave, liviana y moderadamente durable en contacto con el suelo. La densidad de la
madera proveniente de plantaciones varía en promedio entre 0,4 y 0,59 g/cm3, pero este valor está influenciado por la
edad y el sitio de la plantación. Así por ejemplo, a los tres años la densidad varía entre 0,32 y 0,44 g/cm3, a los cuatro años
entre 0,44 y 0,47 g/cm3, a los seis años entre 0,46 y 0,54 g/cm3 . Cuando la plantación supera los ocho años de edad,
la densidad alcanza valores de 0,55 a 0,59 g/cm3 (Arango y Hoyos, 1999). Esta madera es fácil de impregnar y trabajar,
pero resulta difícil secarla. El crecimiento rápido y la capacidad de rebrote de esta especie le confieren gran potencial para
la producción de madera para leña. El poder calorífico es de 18.199 Kj/kg.
En la actualidad Smurfit Cartón de Colombia, tiene cerca de 15.200 hectáreas plantadas con E. grandis, 6.800 de las
cuales son clones producto del programa de mejoramiento; las 8.400 restantes son material de semilla, procedente de sus
huertos semilleros donde se combinan los mejores individuos de cada ciclo anterior de mejoramiento utilizando polinización
abierta.
La temperatura es un factor altamente influyente para la apertura de las valvas y la diseminación de las semillas. Para el
manejo de árboles semilleros, los frutos deben ser cosechados cortando la infrutescencia en el punto de inserción de éstas
a las ramas. No se recomienda cortar la rama completa, pues eliminaría la posibilidad que ella continúe produciendo
infrutescencias. Los frutos deben recolectarse cuando cambien de color verde a marrón, una vez los primeros frutos hayan
abierto.
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Una vez colectados las cápsulas se esparcen libremente sobre una superficie seca y se exponen a la acción directa del sol
por espacio de dos horas, tiempo después del cual los frutos se abren y liberan las semillas. Para la extracción de grandes
cantidades de semilla se depositan los frutos en sitios donde pueda garantizarse una temperatura de 30 a 35°C, con circulación
de aire forzado a través de ventiladores, y los frutos colocadas sobre mallas con papel periódico encima, para que la semilla
se deposite allí una vez el fruto abra. En un kilogramo se pueden encontrar de 450 mil a 650 mil semillas viables.
Secado. El eucalipto es considerada una especie ortodoxa por lo que para el almacenamiento de sus semillas éstas deben
secarse hasta que tengan un contenido de humedad del 8 al 10%. Dicho contenido de humedad se obtiene colocando las
semillas en un ambiente ventilado, sobre papel periódico y encima de mallas o zarandas que faciliten la circulación del
aire. La pérdida acelerada de humedad, cuando se expone directamente al sol reduce su capacidad de germinación. Para
un secado más uniforme debe removerse el exceso de humedad utilizando ventiladores y revolviendo periódicamente los
frutos. En días soleados el secado puede durar unos 8 días, y pueden alcanzarse contenidos de humedad de 8 a 9%.
Almacenamiento. Las semillas secas deben almacenarse en bolsas plásticas de calibre grueso (3- 4 mm) y éstas en
recipientes herméticos de vidrio, los cuales deben refrigerarse a una temperatura de 3 a 5°C y una humedad relativa del
80%. Bajo estas condiciones de almacenamiento las semillas pueden permanecer viables por varios años. En condiciones
ambientales, la semilla pierde hasta el 85% de su capacidad de germinación después de
un mes de almacenamiento.
VIVERO
Para la siembra, primero debe ubicarse superficialmente la semilla en hileras. Luego con
un cernidor o cedazo, se consigue cubrir el germinador con una capa fina de 0,5 cm del
mismo sustrato empleado. Debe evitarse las piedras y terrones y protegerse el germinador
de la acción directa del sol y de la lluvia.
e f g h
Figura 6. Semilleros plásticos para propagación de E. grandis. a. Llenado con sustrato, b. Siembra de plántulas, c y d. Semilleros
levantados del piso, e y f. Desarrollo de plántulas, g y h. Desarrollo radical de plántulas listas para campo.
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Germinación. Debido al tamaño de la semilla no se acostumbra utilizar tratamientos pregerminativos. La germinación es epigea,
se inicia a los cinco días de sembrada la semilla y finaliza a los veinte días, alcanzando entre un 70% - 80% de germinación. El
número de semillas viables por kg que germinan es de 694.115 aproximadamente.
El transplante debe hacerse cuando las plántulas tienen su primer par de hojas verdaderas, pero antes de ello es necesario hacer
un control fitosanitario, consistente en la aplicación preventiva de la mezcla de dos fungicidas como Benlate y Manzate en dosis
de 0,6 y 4,0 g/litro de agua, respectivamente, para evitar la acción de hongos que producen volcamiento.
Para el transplante, dos tipos de contenedores son los más utilizados: bolsa de plástico negra de dimensiones 16cm x 8 cm,
comúnmente conocida como “tabaquera”, con fondo resistente y perforado. Tres y medio a cuatro meses posterior a la germinación
las plántulas alcanzan una altura de 15- 20 cm, que es indicativo de estar listas para ser llevadas a campo. Es necesario mantener
una buen aireación y drenaje ya que las plántulas son muy susceptibles a la alta humedad, la cual ocasiona “damping off “ y
pudrición de las hojas y el tallo.
Semilleros plásticos. El más utilizado para la propagación de eucalipto es el contenedor plástico de 40 conos con dimensiones
de 12 cm de alto, 26 cm de ancho y 40 cm de largo. Cada cono de 4,0 cm de diámetro superior, 1,7 cm de diámetro inferior y
12 cm de profundidad, tienen volumen de 118 cm3. La característica importante de estos conos, además de las facilidades en el
manejo y transporte, es que favorece la formación radical, por la presencia de venas verticales que direccionan las raíces hacia
abajo, previniendo las malformaciones o “entorchamientos”.
Los pellets. Reemplazan los contenedores plásticos al ser sustrato y contenedor en uno. Son unidades de turba comprimida,
(una especie de musgo del género Sphagnum sp) dentro de una malla biodegradable, que tienen la capacidad de absorber
aire y agua (hasta siete veces su peso) y luego expandirse verticalmente como una esponja. Este contenedor es considerado
el sustrato ideal para la formación de las raíces de las plantas y no requiere el uso de grandes cantidades de suelo u otros
sustratos.
Para Eucalipto el tamaño de Jiffy más utilizado es de 3, 6 cm x 1 cm de diámetro (102 cm3). La mayor ventaja de la utilización
del Jiffy es que la plántula puede transplantarse directamente al campo sin que requiera retirarse la malla. Para su manejo
en el vivero es necesario utilizar una bandeja plástica de 92 cm de largo, 33,6 cm de ancho y 7,6 cm de alto, la cual facilita
a el transporte en la plantación. Con este sistema las plántulas están listas para llevarlas al
campo entre 8 y 9 semanas después de la siembra de la semilla.
Fertilización. Los Jiffy o pellets empleados para los viveros de plantas forestales tienen un
pH de 4,8 y pequeñas trazas de cal dolomítica con los siguientes elementos: calcio (21%de Ca
y 30% de CaO), Magnesio (12,5% de Mg y 21% de MgO), además de pequeñas cantidades
de microelementos como Fe y Cu pero no tienen incluidos macroelementos.
b
Para obtener una buena plántula es necesario fertilizarla periódicamente y durante la permanencia
de ésta en el vivero (10 semanas). Los fertilizantes granulados deben disolverse en agua para
aplicarlos a las plántulas. En el primer mes es necesario fortalecer la raíz de la plántula y que
también haya buena emisión de hojas, por ello debe aplicarse un producto fosforado como
difosfato de amonio DAP (18%-46%-0%), en una cantidad de 0,03 g por plántula y por cada
100 plántulas se aplican 3 g de producto (DAP). Las plántulas deben recibir riego cada 15 días y
c para ello puede emplearse una regadera manual, que generalmente tiene capacidad de 7 litros
y alcanza para remojar, en
e f g dos pasadas, dos metros
cuadrados de germinador.
Si los pellets son de 36
mm caben 576 por metro
cuadrado de era o de
d banco.
Después de la primera
Figura 7. Desarrollo de plántulas en contenedores Jiffy a. Jiffy sin hidratar
fertilización es necesario
e hidratados, b. Plántulas recién transplantadas, c. plántulas de 60 días, estimular el desarrollo
d. Estructuras de soporte para Jiffy, e. Plántula lista para campo (80 días), de la plántula con la
f y g. Desarrollo radical de plántula lista para campo. aplicación de elementos
menores, dentro de los
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a
cuales el boro (B) es uno de los más importantes. Para la fertilización con este elemento
puede utilizarse boro líquido (Borolik), que se aplica con aspersora de espalda en dosis
de 2 cm3/ por litro, si se asume que un equipo de espalda de 10 litros alcanza para
fertilizar 40.000 plántulas. Para la aplicación de los demás microelementos se puede
utilizar un producto líquido como Microcoljap al 5% (5cc de producto/litro de agua),
con aspersora de espalda.
La aplicación de potasio (K) debe hacerse una o dos semanas antes de llevar las
plántulas al campo. Puede emplearse KCL diluido en agua, a razón de 50 g en 20
b litros de agua, con una distribución de 0,5 g por árbol, asperjado con aspersora de
espalda. Es conveniente remover el material, y cortar con una cuchilla fina las raíces
de las plántulas que se han entrecruzado. En esta labor se debe usar una cuchilla y los
pellets deben estar bien húmedos; no es aconsejable separar las plántulas arrancando
sus raíces.
Una vez aplicado el fertilizante, es necesario, de manera preventiva, efectuar un lavado
con abundante agua, del sistema foliar, con el fin de prevenir problemas de intoxicación
y quemazón de las hojas.
c Propagación vegetativa
Esta práctica es altamente promisoria por su potencial para aumentar el rendimiento y
mejorar la calidad y uniformidad de la madera. Al comparar el material obtenido con clones
las plantaciones establecidas con plántulas provenientes de semilla, puede obtenerse un
volumen por hectárea mayor, entre un 25 y un 50% para el clon en relación a la semilla.
Este aumento en productividad es el resultado de la mayor uniformidad en la plantación,
Figura 8. Propagación vegetativa de debido a que las plantas producidas por este método provienen de árboles superiores en
E. grandis. a. Rebrotes producto de
volumen y forma.
la poda, para la toma de estaquillas,
b. Setos para la toma de miniestacas,
c. Siembra de miniestacas.
Obtención de pseudoestacas. El primer paso es la selección del árbol plus,
seleccionado por características que se deseen replicar (anteriormente mencionadas). Una
vez seleccionado, se procede a cortarlo a una altura de 20 cm sobre el suelo, 65 días después del corte puede iniciarse la cosecha
de rebrotes. Igualmente las estacas pueden obtenerse de clones ya seleccionados y establecidos. El corte puede realizarse 1,5
años después del establecimiento del clon.
El número de rebrotes a dejar por árbol cortado es de entre 5 y 10 . De cada rebrote se cortan 2 a 3 estacas de 12 cm., dejándoles
un par de hojas que luego se cortan a la mitad para evitar que una vez en el modulo de enraizamiento generen acumulación de
humedad por traslape de hojas. En la práctica no se han observado diferencias en el porcentaje de enraizamiento entre de las
estacas obtenidas de la parte superior o apical de rebrote y de la parte basal.
Sustrato. Smurfit Cartón de Colombia utiliza como sustrato para el enraizamiento de estacas la mezcla de 50% de carbonilla
(residuo de la quema del carbón) y 50% de subsuelo amarillo con textura franco arenosa y un pH de 6 a 6,5.
Inicialmente, las estacas se impregnan, en los primeros 3 cm, con la hormona enraizadora ácido indol- butírico (AIB) de
6.000 ppm, mezclada con talco. Para evitar el ataque de patógenos es necesario proteger la estaca con Benomyl (Benlate
al 0,005%) y Oxicob al 0,2%.
Para un buen enraizamiento se requiere una alta humedad relativa de 90 a 95% y temperatura entre 26 y 28°C, condiciones
que pueden lograrse bajo cobertura de plástico (invernadero) y abundante riego, preferiblemente riego por nebulización
constante. Los árboles están listos para llevarlos al campo después de tres meses. Con este método se han logrado producir
mil árboles o clones por tocón, durante cinco meses.
PLANTACIÓN
Requerimientos ambientales
Suelos. E. grandis se adapta a una amplia variedad de condiciones edáficas, incluidas suelos de aluvión, pobres, limosos,
francos, ligeramente húmedos y arcillosos. Su mejor desarrollo se obtiene en suelo de mas de 1,0 m de profundidad, de
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textura liviana a media, y con pH ligeramente ácido, fértiles, húmedos y bien drenados de origen tanto volcánico como
aluvial. Tolera suelos pobres y con bajo contenido de fósforo pero es muy sensible a suelos con deficiencias de boro donde
presenta síntomas similares a los de marchites por sequía. Tolera períodos cortos de inundación siempre y cuando el agua
circule.
Elevación y clima. El rango altitudinal donde ocurre un mejor desarrollo de los árboles está entre los 1.000 a 2.200 m.
Es una especie exigente en luz, por tanto, requiere luminosidades entre 1.000 y 1.500 horas de sol/año. Es moderadamente
sensible a las heladas y a las sequías, aunque en su área de distribución natural parece soportar heladas esporádicas. El
eucalipto tiene un buen crecimiento en un rango de temperaturas que está entre 10 y 30ºC, y donde la precipitación entre
1.000 y 2.000 milímetros al año, con una buena distribución de lluvias.
Micorrización. Las micorrizas son microorganismos fundamentales para el desarrollo de la planta. Las principales ectomicorrizas
que se asocian directamente con las raíces del eucalipto son Scleroderma auratum y Lacaria lacata. La mejor forma de aplicar
las esporas es tomar los cuerpos fructíferos (setas) de ambos hongos, en las plantaciones en las cuales se ha comprobado su
presencia, y licuarlos en agua; esta solución debe asperjarse sobre los contenedores para el transplante de las plántulas (Jiffy,
Bandejas plásticas o bolsas plásticas); para el Jiffy se recomienda asperjar las micorrizas entre la sexta y séptima semana posterior
al transplante. Igualmente, para el caso de bandejas plásticas o bolsas se
utiliza la mezcla de los micelios de los hongos con la tierra de los bancos de
a micorriza y se mezcla con el sustrato para el llenado de estos contenedores.
Cuando se utiliza suelo de los bancos de micorriza se tiene el inconveniente
de contaminar con arvenses, nematodos, insectos y otros microorganismos
el sustrato.
c d El período óptimo
e f para realizar esta
actividad es cuando
la plantación tenga
uno o dos años de
edad. La fertilización
con fósforo, nitrógeno
y boro al inicio de
la plantación, es
Figura 12. Detalle de plantación en diferentes estados de desarrollo, a. 9 meses, b. 1,5 años, c. 4 años, d . 7 años.
e. Diferentes edades de plantación, f. Barreras contrafuegos de 4-5m de amplitud.
necesaria para lograr un buen crecimiento inicial. Investigaciones recientes, sugieren
que refertilizaciones con dosis superiores a 200 kg/ha de nitrógeno y 30 kg/ha de
fósforo y 2.0 kg/ha de boro no producen respuestas económicamente rentables
en la mayoría de los suelos en los que se han hecho las investigaciones.
Podas. Por tener poda natural, el eucalipto no requiere esta práctica, especialmente
si se planta a distancias menores de 4 metros.
Figura 13.Forma y cuerpo fructífero de
Lacaria lacata
Aclareos. Aunque no existe experiencia sobre aclareos, estos dependen del
crecimiento de la especie en el sitio (Indice de Sitio) y de los usos que se quieran dar
a los productos de las entresacas. En caso de que el destino final de la plantación sea madera de aserrío, el manejo silvicultural
debe ser de acuerdo a lo presentado en el capitulo de crecimiento y aprovechamiento.
Plagas y Enfermedades
Plagas asociadas al Eucalipto
Como todas las especies vegetales, los Eucaliptos pueden verse afectados por diferentes organismos, algunos de los cuales
pueden ser plagas de insectos y otros son considerados como agentes patógenos que causan enfermedades. Dentro de los
organismos comúnmente asociados a las plantaciones del Eucalipto se encuentran:
Tipo de daño. Es considerada una de las peores plagas del Eucalipto en los primeros años de la plantación y está
catalogada en América como la quinta plaga en orden de importancia económica. La acción del insecto se basa en el corte
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de fragmentos de hojas y brotes de los árboles, lo cual provoca el retraso del crecimiento y produce malformaciones de la
planta al cortar el meristemo apical. Cuando su ataque es permanente causa defoliaciones sucesivas y el árbol muere.El
material cortado es y almacenado en sus nidos, y posteriormente se fermenta para formar un mantillo sobre el cual cultivan
un hongo pequeñísimo llamado Attamyces bromatificus, el cual les sirve de alimento. Datos recientes han podido comprobar
que además del hongo, las hormigas arrieras, consumen líquidos de las plantas que cortan.
Formación, tamaño y duración del hormiguero. La formación del hormiguero se inicia en la época de lluvias,
momento en el cual hembras y machos realizan el vuelo nupcial. Cuando la hembra es fecundada corta sus alas y busca un
lugar adecuado para el establecimiento del hormiguero, generalmente a orillas de caminos, claros de vegetación o taludes,
en los cuales la tierra está blanda y la reina puede excavar una pequeña galería de 8 a 25 cm de profundidad. Luego tapa
el orifico de entrada y regurgita una pequeña bola del hongo que colectó en su hormiguero de origen. Cuatro a seis días
después inicia la puesta de huevos, que darán origen a las primeras obreras y otros individuos que servirán de alimento
para la reina y las primeras larvas. 80 a 100 días después, las primeras obreras retiran la tierra que sellaba la salida, salen
a c f
b
d
Figura 14. a y b. Detalle de formación de hormiguero, c. Hormiga arriera d. Hongo del cual se alimentan las pupas de hormiga
albergando la reina y obreras, e. Total de colonia (obreras, soldados , machos alados, reina y reina alada), f. Recuadro (soldado).
y comienzan su labor. Un hormiguero puede alcanzar su máximo desarrollo en 10 años aproximadamente y puede ocupar
una superficie de 100 m2 y 3,5 m de profundidad.
Manejo y control
Control mecánico. El objetivo es la eliminación de la reina que por lo general se ubica en las cámaras más profundas.
La eliminación de obreras o soldados sólo disminuye la acción de las hormigas en una o dos semanas. El mejor momento
para localizar la reina es tres meses después del vuelo nupcial, cuando las primeras obreras están abriendo el primer orifico
al exterior y la única cámara se encuentra a unos 20 cm de profundidad. La captura de la reina puede hacerse con un
regatón, palín o una barra. La labranza del suelo cada vez que se va a establecer un cultivo, elimina los hormigueros iniciales
y expone la reina a la acción de predadores como garzas y otras aves. Igualmente, pueden utilizarse los cultivos trampa.
Control químico. Los productos químicos que mejor resultado han mostrado para control de hormiga son los siguientes:
diflubenzuron (Dimilin® 4L, Dimilin® 2F, Formilin) y clorpirifos (Lorsban 48% EC). Para una mayor eficacia el producto
debe aplicarse con insufladora, para ello 24 a 48 horas antes de su aplicación debe removerse la tierra suelta ubicada
en la superficie de los nidos, para identificar los canales activos y garantizar que el suelo esté seco hasta unos 30 cm de
profundidad. La dosis recomendada es 10 g de ingrediente activo por m2 de hormiguero.
En evaluaciones hechas en Eucalyptus urophylla en Villanueva (Casanare), se encontró que con el Diflubenzuron, como
producto activo, utilizado como cebo controlaba en un 100% los “hormigueros”, al cabo de 45 días. Su acción producía
que la reina abandone la récamara principal (la más profunda) y muera cerca a la superficie o donde el hongo no estuviera
contaminado por el insecticida (Gasca, 1992).
En Colombia, los cebos más utilizados son Attamix SB con Lorsband como insecticida y Blitz con el ingrediente activo
denominado fenil-pirzol. Los cebos deben protegerse de la humedad, y deben aplicarse en senderos y cerca de las bocas
principales del hormiguero a 15 cm de distancia; así mismo, es necesario abstenerse de aplicar repetidamente el mismo
cebo en el mismo hormiguero, en un lapso menor a cuatro meses. La cantidad de cebo depende del número de bocas del
21
a
hormiguero, así: una boca 10 g, dos o tres bocas 20 g, cuatro o seis bocas
30 g, siete a nueve bocas 60 g y más de diez bocas 100g.
Control biológico. Un control del 100% del hormiguero fue logrado al cabo
de 90 días, utilizando los hongos Beauveria bassiana y Metharrizium anisophliae
en cebos, humedecidos con jugo de naranja y con avena o salvado de maíz;
igualmente, al aplicar Trichoderma hartzianum
con insufladora se obtuvo un buen control, el cual
c d e aumentó al aplicarlo en cebos con salvado de maíz
y jugo de naranja.
El primer brote del insecto se registró en una plantación de Pinus patula en la Meseta de Popayán en 1991, posteriormente
se han registrado brotes en los departamentos de Caldas, Quindío, Risaralda y Valle del Cauca, causando daños en otras
especies forestales en las que se incluyen varias especies del genero Eucalyptus spp (Rodas, 1996).
Daño. El daño lo producen las larvas, las cuales se comen las hojas del borde hacia adentro. La acción del insecto produce
defoliación total de las plantaciones, las cuales pueden morir al cabo de varias defoliaciones sucesivas.
Huevos. La hembra pone un promedio de 715 huevos en masas irregulares sobre la corteza del fuste y las ramas. Los huevos
miden de 0,5 a 0,6 mm de ancho por 0,7 a 0,8 mm de largo, tienen forma de barril y en su parte apical son aplanados
con grabado en forma de corona. Recién ovipositados son de color verde oliva, después se tornan verde amarillentos, luego
café- rojizos, y después de 5-6 días rojos oscuros y próximos a eclosionar son grises.
Larvas. Recién emergidas son negras con una banda longitudinal blanca en las áreas pleurales. Miden entre 2,1 y 2,5
mm de longitud. Cuando están completamente desarrolladas miden entre 55 y 61 mm y tienen tonalidades variables entre
café verdoso y café rojizo, según la planta de la cual se alimentan. Tienen prominencias a manera de cuernos a lo largo
del cuerpo, con un par en la parte dorsal cerca a la cabeza y otro en la parte posterior del cuerpo. Las larvas en reposo se
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adhieren a las ramas y al follaje con sus patas abdominales en posición rígida por lo cual pasan inadvertidas por parecer
parte del árbol. La mayor defoliación ocurre durante la noche.
Pupas. Recién formadas son de color verdoso y luego se tornan café oscuro y brillantes al final. Se encuentran protegidas
por un capullo de seda ubicado a lo largo del tallo y de las ramas. Es común encontrar en el mismo capullo las pupas del
macho y la hembra, asegurando su relación sexual cuando alcanzan el estado adulto.
Control microbiológico. Para los primeros estados larvales debe aplicar Bacillus thuringiensis con equipos de
termonebulización. Para el control de pupas se emplean exitosamente los hongos Beauveria bassiana y Cordyceps sp.
Tanto las poblaciones de larvas como las de adultos, son depredadas por aves insectívoras como el barranquero o barranquillo
(Momotus momota aequatorialis), el garrapatero (Crotophaga ani), el copetón (Zonotrichia capensis – costarricensis) y otros
insectos como chinches del género Podisus y parasitoides de la familia Ichneumonidae (Rodas,1996).
Signos y descripción del daño. El follaje de los árboles afectados muestra perforaciones entre las nervaduras principales
de las hojas, que inicialmente son circulares y luego irregulares. El daño no se considera de importancia económica; sin
embargo, se ha observado que en altas poblaciones puede llegar a defoliar árboles menores de 3 años. El número de adultos
encontrados por hoja oscila entre 1 y 3, y logran ubicarse en todos los estratos del árbol, incluso en árboles de vivero. Pueden
considerarse como plagas de importancia para los programas de reforestación.
Descripción del insecto. Los huevos tienen forma alargada y son de color amarillo claro. Los adultos ovipositan en en
el suelo en pequeños grupos de 6 a 15 huevos. Los adultos son cucarrones de color verde brillante y al observarlos desde
ciertos ángulos dan un aspecto rojizo (hembra) y dorado brillante (macho); la cabeza y el protórax son rojos, las antenas son
filiformes con 11 segmentos y son de color gris oscuro y amarillas en la parte basal. Las hembras miden 8 mm de longitud
y 6 mm en los machos (sin incluir las antenas) (Madrigal, 2003).
Las hembras ponen sus huevos en el suelo, junto a la corteza, al emerger las larvas se alimentan de las hojas haciendo un
raspado, luego empupan debajo de la corteza o en el suelo y posteriormente emerge el adulto Los escarabajos pueden
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consumir toda la superficie de la hoja dejando solamente las nervaduras. Los adultos cortan los brotes terminales. Los
árboles altamente infestados pierden la mayoría de sus hojas lo cual incrementa el estrés del árbol. Los estados inmaduros
se desarrollan en el suelo, donde se alimentan de las raíces de los árboles, produciendo amarillamiento y retraso en el
crecimiento. Los cuales presenta amarillamiento y retraso en el crecimiento.
Manejo y control. No existen trabajos sobre su control o manejo. Algunos registros indican que algunas especies de
Chalcophana spp., pueden controlarse con el parasitoide de huevos Enoggera reticulata (Hemiptera: Pteromalidae), originario
de Australia. El control ocurre cuando la larva se alimenta dentro del huevo y luego emerge un adulto que también busca
los huevos para alimentarse de ellos. Se recomienda la recolección manual de adultos, siempre y cuando la altura de los
árboles lo permita, así como aplicaciones de Beauveria bassiana asperjado al follaje ayudan a disminuir las poblaciones
del insecto (Rodas,2005 información personal).
a b c d
Figura 17. a y b. Detalle del daño producido en hoja por Chalcophana sp., c. Hojas completamente perforadas por la acción
de insecto, d. Adulto del cucarroncito verde y rojo (Fotos a y b. Conif 1997, Foto c. Madrigal 2002).
a
ENFERMEDADES
Las enfermedades causadas por hongos fitopatogenos en plantaciones de eucaliptos
se han venido incrementado en los ultimos 10 años. Desde 1993 se han intensificado
estudios de investigación buscando entender la problematica fitosanitaria de los
eucaliptos; los principales agentes responsables de las enfermedades del E. grandis
en Colombia, evaluaciones detalladas de las enfermedades, su interacción con los
hospederos y el ambiente en que se desarrollan.
síntomas como damping-off, pudriciones radicales y de plántulas en viveros, manchas foliares y lesiones en tallos, entre
otros.
Síntomas. En plantaciones comerciales de eucalipto es frecuente encontrar manchas irregulares de las hojas originadas en
las ramas más viejas del árbol, y la defoliación de este ocurre de manera ascendente (de abajo hacia arriba), en plantaciones
desde un año de edad; en casos severos la enfermedad puede afectar el 100% del área foliar del árbol, y los árboles afectados
pueden llegar a morir. La enfermedad se ve favorecida por condiciones de alta humedad y precipitación.
Agente causante. Estudios preliminares realizados entre 1993 y 1995, permitieron hallar varias especies de Cylindrocladium
asociadas con el suelo de las plantaciones estudiadas; entre ellas se encontraron C. candelabrum, C. gracile, C. parasiticum,
y C. reteadii. Sin embargo, en un estudio reciente en el que se evaluaron plantaciones afectadas por el patógeno en los
departamentos de Cauca, Valle del Cauca, Quindío, Risaralda y Caldas, solamente se encontró Cylindrocladium spathulatum
y fue identificado morfológica y molecularmente como el agente causante de la enfermedad.
Impacto. Aunque no se ha evaluado el impacto económico de la enfermedad, se deduce que durante el tiempo de
permanencia de ésta, los árboles pierden el follaje, lo cual reduce su capacidad fotosintética, produciendo una condición
de estrés y la disminución del crecimiento de la plantación.
Edad de susceptibilidad. El primer año de la plantación es la etapa de mayor susceptibilidad, la cual coincide con el
momento en el cual la plantación empieza a cerrar dosel y ocurre una mayor concentración de humedad. Una alta incidencia
de la enfermedad se registra en zonas con alta humedad y/o precipitación.
Manejo. Desarrollo de programas de mejoramiento genético que permitan seleccionar material con altos niveles de
resistencia o tolerancia a la enfermedad causada por C. spathulatum.
a
CHANCRO DEL EUCALIPTO
(Chrysoporthe cubensis)
Importancia. La enfermedad conocida como “cáncer basal del eucalipto” o “chancro del
eucalipto”, causada por el hongo Chrysoporthe cubensis, es una de las más importantes en
las plantaciones comerciales del eucalipto en zonas del trópico y subtrópico. Fue reportada
por primera vez en Cuba en 1917, y desde entonces son muchos los reportes en otras partes
en el mundo donde causa cuantiosas pérdidas económicas.
d e f g
Figura 19. Avance de lesión y consecuencias de la presencia de (Chrysoporthe cubensis), a y b. inicio y desarrollo de lesión basal (Chancro
basal), c. Gomosis y ennegrecimineto de árbol, d. Reventamiento por pérdida de resistencia mecánica, e. Daño interno de la madera, f y g.
Estructuras reproductivas; Peritecios y Picnidios. (Fotos a, d, e y f Carlos Rodas - Cartón de Colombia).
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se encuentran en forma abundante en la corteza alrededor de las lesiones. Estas estructuras pueden observarse fácilmente
a simple vista o con la ayuda de una lupa sencilla.
Dependiendo de la resistencia del material genético los árboles afectados pueden morir súbitamente cuando están jóvenes
(6 meses a 18 meses) o pueden tolerar la enfermedad y convivir con ella. La recuperación de la lesión se hace a través de la
regeneración del nuevo tejido alrededor del sitio lesionado, comúnmente conocido como “callo”, que cubre la parte anterior
del xilema. La formación de callos se convierte en una respuesta del árbol al ataque del patógeno.
El patógeno mata el cámbium de los arboles afectados y en casos severos puede ocasionar la muerte total de las plantaciones.
El impacto de la enfermedad se produce directamente sobre la madera y causa pérdidas en la productividad de la plantación
afectada.
Agente causante. Hasta hace poco, Chrysoporthe cubensis fue conocido como Cryphonectria cubensis, e investigaciones
recientes basadas en estudios morfológicos y moleculares del hongo lo han transferido a un nuevo género denominado
Chrysoporthe. El patógeno se puede transmitir por medio del viento, la lluvia o los insectos vectores, que transportan las
esporas o conidias de un sitio a otro. A diferencia de otros patógenos, éste no requiere condiciones de estrés en la plantación,
y puede penetrar por cualquier herida u orificio de árboles sanos.
Hospedantes. Chrysoporthe cubensis causa serios daños en árboles de la familia Myrtaceae, especialmente aquellos
del género Eucalyptus, y plantas conocidas como “clavo de olor” Syzygium aromaticum (Hodges et al., 1986) y Psidium
cattleianum (Hodeges, 1988). En Colombia el patogeno se ha encontrado afectando un amplio rango de hospederos de la
familia Melastomataceae entre los que se incluyen Tibouchina lepidota, T. urvilleana, T. semidecandra y T. longifolia. Estudios
recientes indican además que el hongo C. cubensis se encuentra afectando en forma natural a Miconia theaezans y M.
rubiginosa (Myrtales, Melastomataceae) nativas en Colombia. (Rodas et al., 2005). Todas estas investigaciones ubican a
Colombia entre los probables sitios de origen de la enfermedad.
Condiciones favorables. En Colombia, los cánceres basales a lo largo de tallo se observan en plantaciones de E. grandis
de un año de edad en adelante, ubicadas en áreas ubicadas entre 900 y 1.500 m de altitud, la agresividad del patógeno
puede verse favorecida por condiciones de alta temperatura y humedad relativa.
Manejo. Las estrategias deben enfocarse en la realización de pruebas de patogenicidad para identificar los microorganismos
más agresivos y estudios de campo, con el fin de seleccionar los clones tolerantes a Chrysoporthe cubensis. En campo hacer
selección de clones tolerantes a Chrysoporthe cubensis.
Importancia. El género Botryosphaeria comprende un amplio grupo de patógenos que afectan una gran variedad de
hospedantes en el mundo. Especies de Botryosphaeria son reconocidas como hongos oportunistas, bien adaptados para
vivir como parásitos facultativos, y bajo ciertas condiciones ambientales pueden ser patógenos muy virulentos, que afectan
yemas, ramas, raíces y hojas de las plantas.
La enfermedad causada por Botryosphaeria es reconocida como una importante amenaza para la productividad de las
plantaciones de E. grandis en el país. Desde 1994, se vienen registrando áreas afectadas por el patógeno en los departamentos
de Caldas, Quindío, Valle del Cauca y Cauca.
Síntomas. Los síntomas comúnmente encontrados en E. grandis incluyen lesiones necróticas en la inserción de las yemas a
las ramas, éstas se desarrollan y forman chancros irregulares, que causan secamiento de yemas y secamiento descendente;
también pueden producirse chancros a lo largo del tallo y las ramas con abundante exudación en los puntos de infección,
necrosis de tejidos (madera) y secamiento descendente, que llegan incluso a causar la muerte de los individuos afectados.
Las infecciones pueden iniciarse desde los 4 meses de edad y la mayor susceptibilidad de las plantaciones se registra entre
1,5 y 2 años de edad. Según la susceptibilidad de la especie afectada, ésta puede recuperarse y continuar su crecimiento
a una menor tasa o morir.
a 31
d e f g
Figura 20. Avance de lesión y consecuencias de la presencia de Botryosphaeria ribis, a. Chancros en inserción de ramas a tallo, b. Agrietamiento
de corteza y chancros en inserción de ramas a tallo, exudación o gomosis, c. Lesiones necroticas en hojas, d. quemazón y secado de hojas
por acción del hongo, e. Lesiones en tallo, f. Secamiento de yemas y daño foliar en plantaciones jovenes, g. Lesiones en los haces vasculares
de la madera, (Fotos b, d, e, f y g Carlos Rodas - Cartón de Colombia).
ser confirmada mediante trabajos de taxonomía molecular. Además, las pruebas de patogenicidad permiten confirmar que
B. ribis es considerablemente más patogénica que B. dothidea, en E. grandis en Colombia.
Hospederos. El patógeno afecta un amplio rango de plantas en el mundo, entre ellas varias especies del género Eucalyptus.
Plantaciones de E. grandis pueden presentar síntomas de la enfermedad desde los 6 meses de edad y la mayor susceptibilidad
se registra entre 1 y 2 años de edad.
Condiciones favorables. Las plantaciones frecuentemente afectadas son aquellas localizadas en áreas donde prevalecen
condiciones de alta humedad y precipitación, y/o aquellas en las que ocurren cambios bruscos de temperatura. Plantaciones
establecidas en zonas con suelos inadecuados para el desarrollo del eucalipto, plantaciones con un deficiente manejo
silvicultural y en general, cualquier condición que genere estrés puede propiciar el desarrollo de la enfermedad.
Manejo. Estudios de inoculación realizados en tres zonas geográficas del país muestran que los clones presentan marcadas
diferencias en su susceptibilidad a la infección por B. ribis. Estos resultados permiten la realización de estudios para seleccionar
clones tolerantes a la enfermedad.
Importancia. Ceratocystis fimbriata es reconocido como un patógeno de gran distribución en el mundo, que causa cánceres
o enfermedades vasculares en un amplio rango de cultivos, y entre ellos los forestales. En Colombia, es responsable de la
enfermedad conocida como “llaga macana del cafeto”, de significativa importancia en la productividad del café.
El hongo fue reportado causando cánceres y muerte de árboles de Acacia decurrens en Brasil, a finales de los 80, y en Sur
África como un patógeno de A. mearnsii, en 1993. Los primeros reportes de Ceratocystis spp. en Eucalyptus spp provienen
de la República del Congo y en Brasil, en 1999, seguidos por un reporte de C. fimbriata en E. grandis en Uganda, y más
33
Síntomas. La enfermedad puede identificarse por las lesiones en forma de manchas o parches
necróticos en las hojas, de color marrón a marrón oscuro, a menudo levantadas y más oscuras
Figura 22. a y b. Manchado por
que el centro de la lesión, coriáceas, circulares con bordes angulares a circulares o irregulares
la acción de Mycosphaerella o muy poco definidos, con diferencias en el color de la lesión, siendo más oscuras de un lado
eucalypti c. Lesiones necróticas por del limbo que del otro. Los márgenes que rodean la lesión pueden variar de amarillo a rojo o
Mycosphaerella en las hojas de rojo- púrpura. Algunas especies tienen la habilidad para causar manchas a través de la fusión
eucalipto. (Foto a. Fabi 2004, foto b. de pequeños puntos, lo cual termina en la distorsión de la lámina foliar. El follaje se arruga
Alves y Milani, 2002). o deforma y en casos severos puede acelerarse la caída prematura de las hojas. Otro de los
efectos es la curvatura de ramas hacia arriba.
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Biología. El hongo normalmente vive asociado con muchas especies nativas. Mycosphaerella, posee una alta patogenicidad,
debido a que tiene la capacidad de infectar el tejido del hospedante en ausencia de heridas. Las esporas son expulsadas del
cuerpo de los hongos y fácilmente dispersadas por el viento, en especial, cuando la humedad relativa es alta. El salpique de las
gotas de lluvia es también un buen dispersor del hongo dentro del árbol. La temperatura óptima para la infección varía entre 15 y
20°C. El manchado es considerado de mayor virulencia en las lluvias de verano, en áreas donde las condiciones de alta humedad
favorecen la infección. Se ha determinado que en condiciones de estrés, promovidas por déficit hídrico o desórdenes nutricionales
al igual que la competencia por arvenses, facilitan el ataque del hongo
Estrategias de manejo. El manchado en la hoja causado por Mycosphaerella es de mayor severidad en hojas juveniles de
árboles susceptibles, una vez las hojas adultas aparecen, usualmente en un año, la enfermedad es de menor importancia. Ha
sido encontrado en varias especies de eucalipto pero su acción no es de tipo virulenta, ya que E. tereticornis parece ser tolerante
a esta enfermedad.
CRECIMIENTO Y APROVECHAMIENTO
Como población base para la obtención de modelos de Crecimiento y Rendimiento para E. grandis, se dispone de plantaciones
establecidas por Smurfit Cartón de Colombia en los municipios de Restrepo y Sevilla (Valle del Cauca), Popayán (Cauca),
Pereira y Santa Rosa de Cabal (Risaralda), Salento y Circasia (Quindío), además de algunas plantaciones de propietarios
particulares, que participan en el programa de núcleos agroforestales campesinos y donde los árboles son ubicados como
linderos, separadores de lotes y barreras rompevientos. En estas plantaciones se realizaron los estudios de biomasa dentro
del Proyecto “Cuantificación del efecto de sumidero de Carbono por especies forestales nativas e introducidas” en convenio
con CONIF y cofinanciado por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, los cuales son la base para la elaboración de
los modelos de predicción que a continuación se analizarán (Riaño, et al, 2004).
Adicionalmente se tuvo en cuenta los trabajos de Cartón de Colombia para determinar las ecuaciones de volumen y peso
verde de E. grandis, en el programa de cercos vivos promovido por su División Forestal, en el Valle del Cauca. Para la
elaboración de las tablas de volumen y peso verde, se apearon, trozaron y midieron 8 árboles y las ecuaciones expresan el
volumen o el peso del árbol como una función del diámetro
normal y la altura total.
Figura 23. Estimación de la altura total (h) en función del diámetro normal
(d) para los árboles ubicados en plantaciones homogéneas y cercos vivos.
Cuando los árboles se encuentran plantados como cercos vivos o en linderos, el modelo de mejor predicción de la altura
en función del diámetro es del a forma:
Peso fresco comercial del tallo (kg/árbol). En la región central del Valle del Cauca, en el municipio de Darién, Uribe
y Marín, (1996), realizaron un estudio para la elaboración de tablas de peso fresco y volumen para árboles de Eucalipto
sembrados en cercos vivos. Las ecuaciones analizadas son de la forma:
Peso verde comercial sin corteza en Kg (pvcmsc)= 20,13 + 199,60 (d2* h). (Ecuación 5)
Volumen del árbol (m3/árbol). Con la información obtenida en los muestreos de Biomasa, se cubicaron y pesaron un
total de 54 árboles de E. grandis, los cuales han permitido obtener la estimación de productividad , expresado en volumen
(m3/árbol), a través de las ecuaciones de volumen con corteza (vcc) y sin corteza (vsc), para árboles con diámetros inferiores
a 65 cm y altura menores de 48 m (Riaño et al, 2004).
Peso verde total del tallo (kg/árbol). Con el análisis de esta información se determinó la relación que existe entre el
volumen en m3/árbol y el peso fresco del tallo en kg, bajo el modelo peso verde con corteza.
pftallo = a*(1– e –(b*d))c ; pftallo: Es el peso fresco del tallo, a y b constantes del modelo y d= diámetro normal a 1,3 m de
altura
Al realizar los estimativos de producción, es importante conocer y descartar el volumen de la corteza, ya que es un porcentaje
considerable dentro del volumen total del árbol y su utilización comercial es muy poca. La ecuación 10 relaciona de manera
lineal ambos volúmenes,
En cercos vivos
Con los valores de diámetro normal y altura total y empleando las ecuaciones 3, 4 y 5, obtenemos el volumen con corteza
del árbol 0,219 m3/arbol, el volumen comercial sin corteza 0,150 m3/arbol y el peso verde comercial sin corteza el cual es
de144,6 kg. Una vez obtenido este valor y de acuerdo a la unidad de comercialización en la región, se calcula el número
de unidades a las cuales corresponde el volumen calculado, de este modo 0,219 m3/árbol equivalen a 113 pies tablares,
1,4 rastras y 92,7 pulgadas cuadradas
Para el caso de plantaciones homogéneas, la Tabla 2 permite obtener el volumen en madera de un árbol, expresado en
las unidades comerciales, empleando las ecuaciones 1, 6, 7 y 8. Para ello y al igual en el ejemplo anterior, primero debe
medirse la circunferencia del árbol a 1,3 m de altura y calcular el diámetro normal.
Tabla 1. Relaciones entre el tamaño del árbol y la madera producida en pie, medida en volumen comercial y peso fresco, para
individuos desarrollados en cercos vivos.
Parametros
dasómetricos
Equivalencias dasométricas y comerciales
Circunferencia del
3,0 6,0 9,0 12,0 15,0 18,0 21,0 24,0 27,0 30,0 33,0 36,0 39,0 42,0 45,0 48,0 51,0 54,0 57,0 60,0 63,0 66,0 69,0 72,0 75,0 78,0 81,0 84,0 87,0 90,0 93,0 96,0 99,0 102,0 105,0 108,0 111,0 114,0 117,0 120,0 123,0 126,0 129,0 132,0 135,0 138,0 141,0 144,0 147,0 150,0 153,0 156,0
árbol en (cm)
Diámetro (cm) 1,0 1,9 2,9 3,8 4,8 5,7 6,7 7,6 8,6 9,5 10,5 11,5 12,4 13,4 14,3 15,3 16,2 17,2 18,1 19,1 20,1 21,0 22,0 22,9 23,9 24,8 25,8 26,7 27,7 28,6 29,6 30,6 31,5 32,5 33,4 34,4 35,3 36,3 37,2 38,2 39,2 40,1 41,1 42,0 43,0 43,9 44,9 45,8 46,8 47,7 48,7 49,7
Altura (m) 1,0 2,0 3,0 4,0 5,0 5,9 6,8 7,7 8,6 9,5 10,3 11,1 11,9 12,7 13,5 14,3 15,0 15,7 16,4 17,1 17,8 18,4 19,0 19,7 20,2 20,8 21,4 21,9 22,4 22,9 23,4 23,9 23,9 24,8 25,2 25,6 26,0 26,3 26,7 27,0 27,0 27,6 27,8 28,1 28,3 28,5 28,7 28,9 29,1 29,2 29,9 29,4
Volumen con
corteza (m3/ 0,019 0,019 0,019 0,020 0,022 0,025 0,028 0,033 0,039 0,046 0,055 0,065 0,078 0,091 0,107 0,125 0,145 0,167 0,192 0,219 0,248 0,279 0,313 0,350 0,389 0,430 0,474 0,521 0,571 0,623 0,677 0,734 0,781 0,856 0,921 0,988 1,058 1,130 1,205 1,281 1,348 1,441 1,524 1,609 1,696 1,785 1,875 1,967 2,060 2,155 2,292 2,347
árbol)
Volumen
comercial sin
0,006 0,006 0,007 0,007 0,009 0,010 0,013 0,016 0,021 0,026 0,032 0,040 0,048 0,058 0,070 0,083 0,097 0,113 0,130 0,150 0,170 0,193 0,217 0,244 0,272 0,301 0,333 0,367 0,402 0,439 0,479 0,520 0,553 0,607 0,654 0,702 0,752 0,804 0,857 0,912 0,960 1,027 1,086 1,147 1,210 1,273 1,338 1,404 1,471 1,539 1,637 1,677
corteza (m3/
árbol)
Peso verde
comercial sin
20,1 20,3 20,6 21,3 22,4 24,0 26,2 29,1 32,8 37,3 42,8 49,3 56,8 65,5 75,4 86,6 99,0 112,8 128,0 144,6 162,7 182,3 203,5 226,2 250,4 276,3 303,8 332,9 363,6 395,9 429,9 465,4 494,5 541,3 581,7 623,5 666,9 711,7 758,0 805,7 847,3 905,2 956,9 1009,8 1063,8 1119,0 1175,2 1232,3 1290,3 1349,1 1434,8 1468,9
corteza (Kg/
árbol)
Pie tablar 9,6 9,7 10,0 10,5 11,4 12,8 14,6 17,0 20,1 23,9 28,4 33,8 40,1 47,3 55,5 64,7 75,1 86,5 99,2 113,0 128,0 144,3 161,9 180,7 200,9 222,4 245,2 269,4 294,9 321,7 349,9 379,5 403,6 442,5 476,0 510,8 546,8 584,1 622,5 662,2 696,7 744,8 787,8 831,7 876,6 922,4 969,1 1016,5 1064,7 1113,6 1184,7 1213,1
Rastras 0,1 0,1 0,1 0,1 0,1 0,2 0,2 0,2 0,3 0,3 0,4 0,4 0,5 0,6 0,7 0,8 0,9 1,1 1,2 1,4 1,6 1,8 2,0 2,3 2,5 2,8 3,1 3,4 3,7 4,0 4,4 4,7 5,0 5,5 6,0 6,4 6,8 7,3 7,8 8,3 8,7 9,3 9,8 10,4 11,0 11,5 12,1 12,7 13,3 13,9 14,8 15,2
Pulgadas
7,9 7,9 8,2 8,6 9,4 10,5 12,0 14,0 16,5 19,6 23,3 27,7 32,9 38,8 45,5 53,1 61,6 71,0 81,4 92,7 105,0 118,4 132,8 148,3 164,8 182,4 201,2 221,0 241,9 264,0 287,1 311,3 331,1 363,1 390,6 419,1 448,6 479,2 510,8 543,3 571,6 611,1 646,3 682,3 719,2 756,8 795,1 834,0 873,5 913,6 972,0 995,2
cuadradas
Se utilizaron las siguientes relaciones: 1 m3 = 6,46 rastras; 1 m3 = 424 pies tablares; 1m3 = 516,8 pulgadas cuadradas; 1m3 = 0,938 toneladas.
* Estos valores calculados son de la madera en pie y no tienen en cuenta las pérdidas por aprovechamiento, que en algunas mediciones que se han hecho puede
estar entre el 30 y 40%.
Con este valor de diámetro se obtiene la altura total empleando la Ecuación 1, que tomado como ejemplo 19, 1 cm de diámetro
la altura es de 24,2 m. Con éstos dos valores de diámetro normal y altura total y empleando las ecuaciones 6, 7 y 8, obtenemos
el volumen del árbol 0,3007 m3/arbol con corteza y 0,2749 m3/arbol sin corteza, el peso fresco total de 345, 6 kg.
Para la obtención del volumen por árbol con base en su forma, es posible utilizar la fórmula para el cálculo del volumen de un
cilindro vcilindro= π/4*(d2*h) , afectado por un factor de corrección llamado factor de forma o coeficiente mórfico, el
cual se obtiene al dividir el volumen real entre el volumen calculado, a través de la formula del cilindro (Lema,1995). Los trabajos
de investigación han determinado este factor como 0,4578 para Eucalipto, permitiendo así construir la siguiente ecuación de
volumen con corteza:
Tabla 2. Relaciones entre el tamaño del árbol y la madera producida en pie, medida en volumen comercial y peso fresco, para
individuos desarrollados bajo plantación homogénea.
Parametros
dasómetricos
Equivalencias dasométricas y comerciales
Circunferencia
del árbol en 3,0 6,0 9,0 12,0 15,0 18,0 21,0 24,0 27,0 30,0 33,0 36,0 39,0 42,0 45,0 48,0 51,0 54,0 57,0 60,0 63,0 66,0 69,0 72,0 75,0 78,0 81,0 84,0 87,0 90,0 93,0 96,0 99,0 102,0 105,0 108,0 111,0 114,0 117,0 120,0 123,0 126,0 129,0 132,0 135,0 138,0 141,0 144,0 147,0 150,0 153,0 156,0
(cm)
Diámetro (cm) 1,0 1,9 2,9 3,8 4,8 5,7 6,7 7,6 8,6 9,5 10,5 11,5 12,4 13,4 14,3 15,3 16,2 17,2 18,1 19,1 20,1 21,0 22,0 22,9 23,9 24,8 25,8 26,7 27,7 28,6 29,6 30,6 31,5 32,5 33,4 34,4 35,3 36,3 37,2 38,2 39,2 40,1 41,1 42,0 43,0 43,9 44,9 45,8 46,8 47,7 48,7 49,7
Altura (m) 1,4 2,8 4,2 5,5 6,9 8,2 9,5 10,7 12,0 13,2 14,4 15,6 16,7 17,9 19,0 20,1 21,1 22,2 23,2 24,2 25,2 26,2 27,1 28,0 28,9 29,8 30,7 31,5 32,3 33,1 33,9 34,6 35,3 36,0 36,7 37,4 38,0 38,6 39,2 39,8 40,3 40,9 41,4 41,8 42,3 42,7 43,2 43,6 43,9 44,3 44,6 44,9
Volumen con
corteza (m3/ 0,0003 0,0011 0,0026 0,0052 0,0089 0,0139 0,0205 0,0287 0,0387 0,0507 0,0647 0,0809 0,0994 0,1203 0,1437 0,1696 0,1983 0,2296 0,2637 0,3007 0,3406 0,3835 0,4294 0,4783 0,5303 0,5853 0,6435 0,7048 0,7693 0,8369 0,9076 0,9814 1,0584 1,1385 1,2216 1,3078 1,3970 1,4891 1,5842 1,6822 1,7830 1,8865 1,9928 2,1017 2,2131 2,3271 2,4434 2,5620 2,6828 2,8058 2,9308 3,0576
árbol)
Volumen sin
corteza (m3/ 0,0002 0,0009 0,0025 0,0052 0,0090 0,0143 0,0209 0,0292 0,0391 0,0508 0,0643 0,0796 0,0968 0,1161 0,1373 0,1606 0,1860 0,2135 0,2431 0,2749 0,3088 0,3449 0,3831 0,4235 0,4661 0,5109 0,5578 0,6068 0,6580 0,7113 0,7666 0,8240 0,8835 0,9449 1,0083 1,0736 1,1408 1,2099 1,2807 1,3533 1,4277 1,5036 1,5812 1,6602 1,7408 1,8228 1,9061 1,9907 2,0765 2,1635 2,2515 2,3405
árbol)
Peso fresco en
0,04 0,38 1,33 3,23 6,39 11,09 17,61 26,18 37,02 50,32 66,25 84,96 106,6 131,2 158,9 189,8 223,8 261,2 301,8 345,6 392,8 443,2 496,8 553,6 613,6 676,6 742,7 811,8 883,8 958,6 1036,1 1116,3 1199,1 1284,4 1372,1 1462,1 1554,3 1648,7 1745,0 1843,3 1943,5 2045,3 2148,9 2253,9 2360,5 2468,3 2577,5 2687,9 2799,3 2911,8 3025,1 3139,3
kilogramos
Pie tablar 0,1 0,5 1,4 2,7 4,6 7,2 10,6 14,8 20,0 26,2 33,4 41,8 51,4 62,2 74,3 87,7 102,5 118,7 136,3 155,4 176,0 198,2 221,9 247,2 274,0 302,5 332,6 364,3 397,6 432,5 469,0 507,2 547,0 588,4 631,3 675,9 722,0 769,6 818,7 869,4 921,4 975,0 1029,9 1086,2 1143,7 1202,6 1262,7 1324,0 1386,5 1450,0 1514,6 1580,2
Rastras 0,0 0,0 0,0 0,0 0,1 0,1 0,1 0,2 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,8 0,9 1,1 1,3 1,5 1,7 1,9 2,2 2,5 2,8 3,1 3,4 3,8 4,2 4,6 5,0 5,4 5,9 6,3 6,8 7,4 7,9 8,4 9,0 9,6 10,2 10,9 11,5 12,2 12,9 13,6 14,3 15,0 15,8 16,6 17,3 18,1 18,9 19,8
Pulgadas
0,1 0,4 1,1 2,2 3,8 5,9 8,7 12,2 16,4 21,5 27,4 34,3 42,1 51,0 60,9 71,9 84,1 97,3 111,8 127,5 144,4 162,6 182,1 202,8 224,8 248,2 272,8 298,8 326,2 354,8 384,8 416,1 448,8 482,7 518,0 554,5 592,3 631,4 671,7 713,2 756,0 799,9 844,9 891,1 938,4 986,7 1036,0 1086,3 1137,5 1189,7 1242,6 1296,4
cuadradas
Se utilizaron las siguientes relaciones: 1 m3 = 6,46 rastras; 1 m3 = 424 pies tablares; 1m3 = 516,8 pulgadas cuadradas; 1m3 = 0,938 toneladas.
Estos valores calculados son de la madera en pie y no tienen en cuenta las pérdidas por aprovechamiento, que en algunas mediciones que se han hecho puede
estar entre el 30 y 40%.
Manejo de plantaciones. Debido al uso casi exclusivo que se ha hecho de la especie como materia prima para la elaboración
de pulpa para papel, con densidades iniciales de 1,600 árb/ha (distanciamientos de 2,5m * 2,5 m) en turnos de producción de
7 años sin ningún tipo de intervención, no se conoce una guía de manejo clara en lo que deba hacerse a la plantación cuando
el uso final sea madera para aserrío.
Las figuras 26 y 27 corresponden a la representación gráfica del área basal (m2/ha) y del volumen ( m3/ha), a través del tiempo
para un periodo de evaluación de 24 años y sin ningún manejo de la densidad de plantación, (raleos o entresacas), hasta el año
15.
Los estudios de crecimiento realizados para la especie permiten afirmar que el máximo crecimiento corriente en área basal (G)
se presenta a los 4 años de edad (Figura 26), tiempo en el cual la plantación tiene un valor de 16,2 m2/ha, valor obtenido
de la ecuación 12 que permite proyectar el crecimiento del área basal en función de la edad de la plantación. De la gráfica
y el análisis de la función puede deducirse que la máxima capacidad de carga ,la cual esta representada por la asíntota
hacia la cual tiende la gráfica, es de 45 m2/ha, un mayor valor es indicio de que hay sobreocupación y se hace necesario
una intervención en la plantación. Puede observarse además como a partir del año 13, el crecimiento corriente anual en
área basal es menor a 1,5 m2/ha.
Para el caso del volumen, la ecuación de rendimiento que mejor explica el comportamiento de la especie es la de Chapman
y Richards (ecuación 13)
vcc = a*(1 – e –b*t)c donde a= 712,1894, b=-0.2641 y c= 4,0858, ajustando los parámetros la ecuación queda de la
siguiente forma
Para obtener una mayor eficiencia en el rendimiento de la especie, es necesario determinar el momento de inicio de la
competencia y el grado de ocupación del rodal. De la gráfica 27 puede observarse como la especie presenta su máximo
crecimiento en volumen a los 5 años, edad en la cual presenta un crecimiento corriente anual de 78,7 m3/ha y un volumen
acumulado de 239,8 m3/ha. Igualmente, para los sitios evaluados la especie presenta un crecimiento medio anual de 37,3
m3/ha/año y el máximo de crecimiento medio se presenta en el año 9 con un valor de 53,14 m3/ha, a partir de allí el
rendimiento de la especie se reduce drásticamente.
Igualmente de la gráfica puede deducirse que la máxima capacidad de carga de un rodal (asíntota), sembrado con Eucalipto
es de 712 m3/ha, y a partir del año 16, el incremento anual en volumen es bajo, estando incluso por debajo de 8 m3/ha lo
que indica que esta es una edad indicadora (Turno) para el aprovechamiento final de la población remanente, con destino
final de su madera para aserrío.
43
Figura 26. Relación entre la edad, la densidad de Figura 27. Relación entre la edad y el crecimiento en
plantación y el área basal (m /ha)
2 volumen (m3/ha)
a
Sistema Agroforestales
c
OTROS USOS
b
Madera de aserrío. A pesar de no ser su uso más difundido en
Colombia, la madera de Eucalipto es utilizada para construcción pesada,
como techos, durmientes (preservados) y en la elaboración de pisos
parque. La madera permite un buen torneado lo que la hace apta para la
elaboración de muebles de estanterias y en ebanistería fina; estanterías.
Igualmente uno de sus usos más difundidos es para la elaboración de
Embalajes; cajas para frutas, guacales, cajas corrientes (tomate, lulo,
mora), mangos de herramientas y palos de escoba.
La madera igualmente se utiliza para la elaboración de tableros de fibra, tableros de partículas. La leña y el carbón obtenido es
de alta calidad. La madera es usada como puntales y estructuras de soporte en minas.
Otros productos no maderables. Su néctar es fuente de miel de excelente calidad. Las hojas contienen 0.12-0.26% de
aceite esencial; los principales componentes son d-alfa-pineno, esteres y alcoholes. Se emplea como ornamental por su rectitud,
altura y abundancia y brillo de sus hojas. La corteza, producto del descortezado, es utilizada como sustrato para el cultivo de
plantas ornamentales, específicamente orquídeas, bromelias, helechos y cuernos.
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