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Ingreso Nacional

El ingreso nacional es el valor agregado por todos los factores productivos


de un país durante un período de tiempo determinado (usualmente un año).
También se puede definir como la suma de todos los ingresos de los factores
productivos de un país, sin tener en cuenta los bienes y servicios intermedios. El
ingreso nacional no incluye la depreciación.

Diferencia entre Ingreso Nacional y Producto Interno

Los factores productivos que se tienen en cuenta para calcular el ingreso nacional
pueden encontrarse físicamente fuera del país en cuestión, lo que importa para el
ingreso nacional es la nacionalidad del factor productivo (si se trata de trabajo) o
del dueño del factor productivo (si se trata de otro tipo de factor productivo). Por
ejemplo, si un trabajador de Alemania trabaja temporalmente y cobra un salario en
Estados Unidos, ese salario se incluye en el ingreso nacional de Alemania, pero
no en el ingreso nacional de Estados Unidos.

El ingreso neto del extranjero

La diferencia entre el ingreso nacional y el producto interno es el ingreso neto del


extranjero, y puede ser positivo o negativo. El ingreso neto del extranjero es la
diferencia entre el ingreso recibido en el exterior por factores productivos
nacionales y el ingreso recibido dentro de las fronteras nacionales, por factores
productivos extranjeros.

Ingreso Nacional = Producto Interno + Ingreso recibido por factores nacionales


que se encuentran en el exterior - Ingreso recibido por factores extranjeros que se
encuentran dentro del país

Algunos países, como Japón y Alemania, tienen ingresos netos del extranjero
positivos, porque durante años lograron acumular inversiones en otros países.
Esas inversiones están otorgando rendimientos a sus dueños.

Otros países, por ejemplo, muchos países africanos, tienen ingresos netos del
extranjero negativos, porque muchas actividades productivas realizadas dentro de
sus fronteras se llevan a cabo con capital extranjero.
Diferencia entre Ingreso Nacional y Producto Nacional Bruto

El término "bruto" se refiere a que no se contabiliza la depreciación del capital. El


ingreso nacional o producto nacional neto, sí la tiene en cuenta. La diferencia
entre el ingreso nacional y el producto nacional bruto es la depreciación del
capital:

Ingreso Nacional = Producto Nacional Bruto - Depreciación

La depreciación es la pérdida de valor del capital por desgaste y obsolesencia


técnológica.

Críticas al uso del Ingreso Nacional como medida de bienestar

Si bien el uso del ingreso nacional o el ingreso nacional per cápita (ingreso
nacional dividido la cantidad de habitantes de un país) es extendido, exiten
algunas críticas al mismo, porque el ingreso nacional tiene algunas falencias como
medida de bienestar. Por ejemplo, no tiene en cuenta:
- Algunos factores sociales: factores que afectan el bienestar de las personas
pueden no estar incluidos, por ejemplo ditribución del ingreso o nivel de
criminalidad.
- Sostenibilidad en el tiempo: parte del ingreso nacional puede ser llevado a cabo
simplemente por el consumo de capital o recursos no renovables, lo que llevaría a
una situación de menor ingreso nacional en el futuro.
- Factores ambientales: polución, destrucción ambiental, utilización de recursos
naturales no renovables, etc.

Es por esto que se han elaborado medidas alternativas que buscan tener en
cuenta estos factores ignorados por el Ingreso Nacional. Algunas de estas
medidas alternativas son:
- Índice de desarrollo humano.
Teoría Keynesiana

Keynes trató de explicar en detalle por qué altos niveles de desempleo como los
existentes tras la gran recesión, no pueden ser autocorregidos por el propio
mercado, debido a la baja "demanda efectiva" que dificulta el aumento de la
actividad económica si solo se impulsa por el capital privado, y porque la
flexibilidad de precios y la política monetaria podrían ser inútiles (trampa de
liquidez).

Términos tales como "revolucionario" se han aplicado para el libro por su impacto
en el análisis económico.
Función consumo y función ahorro:

Para derivar la función consumo de las familias debemos considerar el siguiente


plano euclídeo, y la bisectriz que lo atraviesa. Teniendo presente la función
keynesiana de consumo, en primer lugar, estableceremos el nacimiento de la
misma que se corresponde con el nivel de consumo autónomo. De otra parte,
dada su pendiente positiva la trazaremos con la inclinación que determina el valor
de la propensión marginal a consumir.

El lugar en donde la función interseca a la bisectriz representará el nivel de


producción o renta en donde toda la renta se consume (Y*). Cualquier nivel de
renta inferior a este, refleja que las familias han consumido más que la renta que
han percibido, en tanto que en el polo opuesto, en Y´´ ocurriría todo lo contrario,
es decir, la renta ha sido mayor que el consumo realizado.

La renta no consumida se definirá como ahorro, por tanto, estamos en condiciones


de derivar dicha función. Partiremos de su expresión matemática, y a partir de ella
la derivaremos gráficamente considerando dos niveles de renta. En primero será
cuando la renta es nula, en este caso el ahorro se correspondería con el valor del
menos consumo autónomo, el segundo punto lo derivaremos considerando el nivel
de renta Y* en donde toda la renta se consume, es decir, el ahorro es nulo.

Trazaremos finalmente la línea que atraviesa estos dos puntos, derivando así la
función de ahorro. Tal como podemos apreciar hasta Y* la función discurre a lo
largo del cuarto cuadrante dado que para todos los niveles de renta el consumo es
mayor, la sociedad está desahorrando. En tanto que cuando el nivel de renta es
mayor que Y* la sociedad estaría ahorrando al ser su nivel de renta mayor que el
consumo efectuado.
Las inversiones bien sea a corto o a largo plazo, representan colocaciones que la
empresa realiza para obtener un rendimiento de ellos o bien recibir dividendos que
ayuden a aumentar el capital de la empresa. Las inversiones a corto plazo si se
quiere son colocaciones que son prácticamente efectivas en cualquier momento a
diferencia de las de largo plazo que representan un poco mas de riesgo dentro del
mercado.

Números Indices.

Los números índices son indicadores de varios aspectos de la industria y el


comercio…tales números variaran con la fecha y también con el área del país a la
que se refieran. Los números índices normalmente comienzan con una base de
100 en un tiempo en particular para el país." Taro Yamane

Según Rosembaum y Highland "un número índice es una forma especial de razón
utilizada para mostrar cambios durante el periodo. Se compara una cantidad
(venta, precio, producción, etc.) con el valor correspondiente en algún periodo
anterior al que se le conoce como la base."

Generalmente se calcula así:

Índice= X 100

Si se analiza la palabra índice, esta puede tener muchas acepciones diferentes,


pero todas conservan palabras claves que nos dan una idea de lo significa como:
señal de una cosa, indicador, breve, lista y contenido.

Se puede definir como aquel número, cosa o característica, que engloba, un gran
contenido de información, la cual se expresa de manera simple.
Un Número índice es un valor representativo que indica las variaciones de una o
más variables en un periodo dado con respecto a un periodo base.

Ejemplo: un comerciante ha registrado las siguientes ventas anuales. Tomando


como base el año 1980

Año 1980 1981 1982 1983 1984

Ventas ($) 200.000 250.000 200.000 190.000 220.000

EL PAPEL DEL GOBIERNO


EL GOBIERNO: en general, son las autoridades que dirigen, controlan y
administran las instituciones del Estado el cual consiste en la conducción política
general o ejercicio del poder del Estado. En sentido estricto, habitualmente se
entiende por tal al órgano (que puede estar formado por un Presidente o Primer
Ministro y un número variable de Ministros) al que la Constitución o la norma
fundamental de un Estado atribuye la función o poder ejecutivo, y que ejerce el
poder político sobre una sociedad.

El gobierno no es lo mismo que el Estado, está vinculado a éste por el elemento


poder. El gobierno pasa, cambia y se transforma, mientras que el Estado
permanece idéntico. En ese sentido, el gobierno es el conjunto de los órganos
directores de un Estado a través del cual se expresa el poder estatal, por medio
del orden jurídico. Puede ser analizado desde tres puntos de vista: según sus
actores, como un conjunto de funciones, o por sus instituciones.
VARIABLES MACROECONÓMICAS

Variables Macroeconómicas es una expresión utilizada en Macroeconomía, a nivel


de los agregados económicos y monetarios.

Variables Macroeconómicas son las que hacen referencia a la economía en su


conjunto, Bien sea de un país determinado, o Bien de un grupo de ellos. Estos
agregados de contenido económico se refieren, por ejemplo, al estudio del nivel
global de producción, la Renta, el Empleo y los Precios de una nación.

Agregados macroeconómicos

La Renta Nacional (RN).

Para valorar la actividad económica que supone la transformación de unos bienes


y servicios en otros utilizaremos el Valor Añadido.

Bienes y Servicios Consumo Intermedio Producción Efectiva

Métodos de estimacion del PIB.

Por la via de la Oferta.

La producción efectiva se valora a precios básicos

Por la via de la Renta.

Remuneración a la mano de obra (Rmo): se incluye dentro de e

Los Sueldos y Salarios en efectivo y en especie.

Cotizaciones sociales a cargo del empresario

Rentas del Capital (R .Cap.): se incluye dentro de esto:

Excedente Bruto de Explotación.

Rentas Mixtas.
“Si eres cuerpo vivo nadie puede decirte cómo has de sentir el mundo. Y nadie
puede decirte qué es la verdad, pues tú mismo la sentirás. El cuerpo no miente”

S. Keleman

La inteligencia y la habilidad son rasgos de personalidad, el apasionamiento es del


temperamento y el carácter se hace.
La personalidad es una parte inherente del ser humano. Sabemos que se
desarrolla durante la infancia. Pero, ¿cómo se desarrolla la personalidad en la
cultura?

De acuerdo con Jahoda, entre los Ashanti, cuando un niño nace (no ocurre lo
mismo con las niñas), se le pone el nombre del día en el que ha nacido. El nombre
se refiere al kra, el alma del día. Este implica disposición hacia cierto tipo de
comportamiento.

Los que han nacido en Lunes se supone que son más tranquilos y pacíficos. Los
chicos llamados Miércoles tienen una tendencia de comportamiento agresivo e
impulsivo. Un análisis de Jahoda sobre los registros de delincuencia en un tribunal
de menores indicaba un número significativamente más bajo de lo esperado entre
los jóvenes llamados Lunes.

Había también evidencias de que los que se llamaban Miércoles tenían más
tendencia a cometer crímenes en contra de otras personas (peleas o asaltos).
Aunque las relaciones eran débiles y las replicaciones de los estudios podían
haber sido deseadas para establecer la validez de los resultados, las conclusiones
de Jahoda parecen indicar que «las correspondencias parecen muy importantes
para ser obviadas fácilmente» (1).

¿Cómo debemos interpretar estos hallazgos? ¿Se trata de estereotipos sociales y


prejuicios que centran la atención en unos delitos menores (esperados) de ciertos
jóvenes más que de otros? O, por el contrario, ¿son expectativas sociales
interiorizadas de alguna manera por dichos jóvenes formando su personalidad?

Hombre pensando en el trabajo

Modelos dimensionales de los rasgos de personalidad

La personalidad se estudia a partir de los rasgos de personalidad. Se trata así de


buscar un conjunto de rasgos que cubran todos los grandes aspectos de la
conducta individual-característica. Por otro lado, se miden:

Cuestionarios de personalidad auto-informe o de observadores externos (para


rasgos específicos).

Inventarios de personalidad (instrumentos de ómnibus que cubren una amplia


gama de rasgos).
Así, uno de los modelos más famosos para determinar los rasgos de personalidad
es el modelo de cinco factores (FFM) o de los 5 grandes. El inventario que suele
utilizarse normalmente para analizar estos cinco factores es el NEO-PI-R (Costa y
McCrae, 1992). Sus dimensiones y sus facetas son:

Extraversión: cordialidad, asertividad, gregarismo, actividad, búsqueda de


emociones y emociones positivas.

Neuroticismo: ansiedad, hostilidad, depresión, timidez, impulsividad y


vulnerabilidad.

Cordialidad: franqueza, altruismo, modestia, confianza, honradez, sensibilidad a


los demás.

Escrupulosidad: competencia, orden, necesidad de logro, sentido del deber,


deliberación y autodisciplina.

Apertura a la experiencia: fantasía, estética, sentimientos, acciones y valores.

Investigaciones transculturales del NEO-PI-R

Este inventario se utiliza para medir la personalidad. Pero, ¿tiene una validez
universal? Varios autores se plantearon esto y obtuvieron que los análisis
factoriales sobre los conjuntos de datos nacionales muestran factores similares
entre naciones.

Parece, pues, que existe una estructura universal entorno a este inventario.
¿Quiere decir esto que las diferencias entre culturas quedan invalidadas?
¿Podemos decir entonces que no hay relación entre la cultura y la personalidad?

Además, parece que la diferencia de las medias entre las culturas son pequeñas
en comparación con las diferencias interindividuales dentro de una cultura. Así, la
variabilidad en las puntuaciones medias entre países es menor que las medias
intrapaís.
1. La personalidad en la cultura: La persona en contexto

El autor Julian Rotter acuñó el término locus de control. Este psicólogo


estadounidense pensaba que el historial de aprendizaje de un individuo puede dar
lugar a expectativas generalizadas. Uno puede ver una recompensa (positiva o
negativa) como dependiente de la propia conducta o como contingente de fuerzas
más allá del control de uno mismo (control interno/externo).

Así, este concepto de locus de control permite un papel más explícito en el


contexto cultural en la formación de la personalidad que en las teorías de rasgos.

Mujer pensando mirando hacia arriba

El self en el contexto social

El yo como producto cultural

El yo se ve por muchos investigadores, particularmente en EEUU y en el este de


Asia, como un producto cultural (2). Por su parte, la autora Kağıtçıbaşı diferenció
entre el yo relacional y el yo autónomo:

El yo relacional: entendido en «un modelo familiar de interdependencia material


y emocional».

El yo autónomo: se encuentra en ambientes urbanos occidentales individualistas


con un «modelo familiar de independencia».

También existe el yo relacionado autónomo, el cual se desarrolla en un «modelo


de familia emocional de interdependencia». Este puede verse sobre todo en áreas
urbanas de países colectivistas.

La dicotomía de Markus y Kitayama entre un yo independiente y el yo


interdependiente
Esta dicotomía representa un amplio conglomerado de las diferencias entre el
Este y el Oeste en la emoción, la motivación, la cognición y la motivación. En la
personalidad occidental podemos observar un modelo de persona que se concibe
un organismo autónomo, separado y atomizado. Está hecho y fabricado con un
rango de habilidades, valores y motivos, buscando la separación y la
independencia de los demás.

En el modelo oriental la persona implica interdependencia y relaciones. No se


considera como una entidad singular, sino como atada a los demás. La persona se
hace «completa» cuando está situada en su lugar en una unidad social.

Así pues, podemos decir que, dependiendo del lugar, la cultura tiene mayor o
menor influencia en la personalidad. El individualismo también tiene mucho que
ver con esto, marcando las grandes diferencias entre las culturas.

«La perspectiva cultural asume que los procesos psicológicos, en este caso, la
naturaleza y el funcionamiento de la personalidad, no están solo influenciados por
la cultura sino también constituidos básicamente por ella».

-Markus y Kitayama, 1998-


2. Personalidad y cultura

La personalidad siempre la consideramos un aspecto propio e inherente a cada


individuo, por tanto, diferente entre todos y cada uno de ellos y en cierto modo,
sometida a nuestro control.

Sin embargo, nos sorprendería saber cuántos de los aspectos que conforman
nuestra personalidad (percepciones, pensamientos, sentimientos y conductas)
vienen prácticamente determinados por un simple binomio cultural: haberse
desarrollado en una sociedad individualista o colectivista.

Las culturas individualistas se localizan geográficamente principalmente en Europa


y Norteamérica, mientras que las colectivistas en Asia, Sudamérica y África, y el
principal factor diferenciador es la importancia que dan al individuo respecto al
colectivo.

Los individuos que crecen y se desarrollan en culturas individualistas, se valoran


en la medida que son independientes, autónomos y completos e intentan lograr
esta independencia acentuando las diferencias entre el ‘yo’ y los ‘otros’.
Consideran que son agentes activos de su propia vida y que de alguna forma son
inmutables, por lo que necesariamente lo que hay que intentar modificar es el
ambiente circundante o las personas con las que se relacionan. Las relaciones
con los demás son importantes pero secundarias y sólo en la medida en que les
permiten alcanzar sus propias metas individuales o satisfacer ciertas necesidades
de toda índole. Con respecto a la motivación, dado que lo más valorado es la
imagen del ‘yo’, suelen actuar para conseguir la diferenciación de él mismo
respecto a los demás, es decir, están orientados a conseguir el éxito. Y por último
con respecto a las emociones, y debido a la misma causa, es lícito e incluso
valorado socialmente expresar orgullo, sentimiento de superioridad, autoconfianza
e incluso ira y frustración.

Por el contrario, en las sociedades colectivistas, lo más importante es conseguir el


respeto de los demás y las personas que han crecido en ellas, se identifican como
interdependientes del colectivo, siendo sus metas las metas del grupo al que
pertenecen o con el que se relacionan. Al considerarse parte de un colectivo, no
son inmutables sino todo lo contrario, son ellos los que deben cambiar para
adaptarse a las necesidades y el bienestar de este. Las relaciones con los demás
son primordiales y esto implica estar alerta a las necesidades, deseos y objetivos
del grupo. La motivación principal es el concepto que el grupo tiene de uno como
individuo y para ello han de lograr su respeto, por tanto, actúan para conseguir el
ajuste a los demás y son especialmente sensibles a los signos que indican
necesidad de mejora mostrando una elevada autocrítica. Emocionalmente lo
valorado socialmente es expresar simpatía, respeto, cercanía o amistad y llegado
el caso, vergüenza y culpabilidad.
Evidentemente es un planteamiento muy genérico que no tiene en cuenta muchos
otros factores que conforman la personalidad de cada individuo, pero entender el
contexto cultural en el que nos desarrollamos y sus influencias nos puede ayudar
a entendernos a nosotros mismos y por qué no a someter a crítica lo que se valora
en nuestra sociedad, al fin y al cabo, es meramente un factor geográfico.
personalidad

La personalidad se puede definir como un patrón de rasgos emocionales, cognitivos y


comportamentales que son persistentes a lo largo del tiempo.

La personalidad tiene su origen en tres tipos de factores:

1. Los factores biológicos básicos que incluyen la herencia y los factores maternos
prenatales.
2. Los factores bioambientales que están en la base del desarrollo neuropsicológico y
dónde están inextricablemente unido lo biológico y lo ambiental.
3. Y los factores puramente ambientales que incluyen el aprendizaje por contigüidad,
el instrumental y el vicario.

Las experiencias tempranas de la infancia son las más determinantes para la construcción
de la personalidad. Éstas están muy unidas a los aspectos biológicos y darán la base para
los futuros aprendizajes a lo largo de la vida.

No obstante, la personalidad y los trastornos son susceptibles de cambiar.

Personalidad normal y anormal

La normalidad o anormalidad de la personalidad no se pueden considerar como categorías


diferentes, es mejor considerar como un continuum que va desde una personalidad
saludable a otra que no lo es.

Se puede considerar que un individuo tiene una personalidad saludable cuando:

1. Se tiene capacidad para adaptarse al ambiente.


2. La percepción de uno o del ambiente es constructiva.
3. Los patrones de conducta son saludables.

Y se puede considerar que un individuo tiene una personalidad anormal y no


saludable cuando:

1. El individuo es inflexible y poco adaptativo.


2. La percepción de uno mismo o del entorno son negativas y frustrantes.
3. Los patrones de conducta del individuo tienen efectos negativos para la
salud.

Estos rasgos son los propios de los denominados trastornos de personalidad.

En el esquema que sigue se muestras los tipos de personalidad considerados


normales que en la medida en que se van haciendo desadaptativos, negativos en
insalubres darán lugar al correspondiente trastorno de personalidad.
Los tipos de personalidad son situados dentro de dos ejes: el que se refiere al tipo de
vinculación establecido con los cuidadores en la etapa infantil, más dependiente o más
autónomo, y el que se refiere a la expresividad emocional del individuo.
Uno de los grandes ámbitos de la psicología es el estudio de la personalidad. Os dejamos una
teoría que explica los 4 principales temperamentos del ser humano.

Sin embargo, a la hora de buscar maneras de clasificar y describir el estilo de


comportamiento y pensamiento de los seres humanos, no solo se ha hablado sobre la
personalidad, sino que hay otro concepto que a lo largo de la historia, también se ha
utilizado para intentar captar las particularidades de cada persona.

Este concepto se llama temperamento, e intenta dar cuenta de esas inclinaciones y


tendencias de cada uno que son más fijas, invariables y difíciles de cambiar.

¿Qué son los tipos de temperamento?

El tipo de temperamento de cada persona acostumbra a ser entendida como la estructura


básica encima de la cual se construye la personalidad de cada uno, con todos sus detalles y
particularidades.

En las últimas décadas esto significa que el término temperamento se ha usado para hacer
referencia a la genética de cada uno, la parte heredable de la personalidad, lo cual significa
que el temperamento de cada cual permanecería más o menos inalterado
independientemente de las cosas que nos sucedan, el modo en el que aprendamos a
gestionar nuestras emociones, etc.

Pero... ¿cómo nace la idea de que los seres humanos disponemos de diferentes tipos de
temperamentos que nos diferencian los unos de los otros? La respuesta está en la teoría de
los 4 temperamentos básicos, que parte de la idea de que nuestra manera de ser depende de
varios tipos de sustancias, o "humores", que circulan por nuestro cuerpo.

La teoría de los cuatro humores

Una de las primeras personalidades históricas en desarrollar la teoría de los 4 humores que
más tarde daría paso a la de los temperamentos fue el médico griego Hipócrates.

Alrededor de los siglos V y IV a. C., en la antigua Grecia que habitó Hipócrates, tenía
mucha importancia la creencia de que todo lo que existe en el mundo estaba compuesto por
unos pocos elementos combinados entre sí. Hipócrates adoptó este punto de vista al
defender la idea de que el cuerpo humano está formado por 4 sustancias básicas, también
llamadas humores.

Para Hipócrates, estos humores son los siguientes:

Sangre, cuyo elemento asociado es el aire.

Flema, el elemento del cual es el agua.

Bilis amarilla, que corresponde al elemento fuego.

Bilis negra, asociada a la tierra.


Pero Hipócrates no dejaba de ser un médico, y por eso hizo que esta teoría humoral entrase
más en el campo de la medicina que en el de la psicología y la personalidad. Según él, el
hecho de que en nuestro cuerpo se encuentren todas estas sustancias en equilibrio hace que
estemos sanos, mientras que una descompensación en los niveles de los humores produciría
enfermedades.

Fue Galeno de Pérgamo quien, en el siglo II a. C. realizó mayores esfuerzos para


transformar la teoría de los humores en una teoría de los temperamentos básicos.

La teoría de los temperamentos básicos


Galeno partió de la idea de que todo está constituido por la mezcla de 4 elementos y que
cada uno de ellos corresponde a uno de los humores del cuerpo humano para terminar
aplicando esta visión a la primitiva psicología de aquella época.

Para este médico griego, los niveles en los que están presentes cada uno de los humores en
un cuerpo humano explican los estilos de personalidad y temperamento de este, lo cual
significa que observando las cantidades de estas sustancias se podría saber el estilo de
comportamiento de una persona, cómo expresa sus emociones, etc.
Los 4 temperamentos básicos propuestos por Galeno fueron los siguientes:

1. Temperamento sanguíneo
Las personas sanguíneas se caracterizan según Galeno por ser alegres, optimistas y buscar
siempre la compañía de los demás.

Muestran calidez a la hora de tratar con otras personas, su modo de actuar obedece más a
los sentimientos que a las conclusiones generadas por el análisis racional. Además, cambian
de parecer con facilidad y son poco dadas al comportamiento disciplinado, porque se guían
por la búsqueda del placer inmediato. Por eso frecuentemente dejan cosas sin terminar. Su
elemento asociado es el aire.

2. Temperamento flemático
El temperamento flemático expresa una propensión a un modo de comportarse sereno y
tranquilo y un modo de acercarse a las metas perseverante y basado en la racionalidad.

Según la teoría de galeno, las personas que destacan por este tipo de temperamento valoran
mucho la exactitud a la hora de pensar y de hacer las cosas, raramente se enfadan y no
muestran demasiado sus emociones, llegando a parecer algo frías. Además, suelen
mostrarse algo tímidas y evitar ser el centro de atención o sostener un rol de liderazgo.
Según la teoría de los 4 temperamentos, a estas personas les correspondía el elemento agua.

3. Temperamento colérico
Las personas que destacan por su temperamento colérico son especialmente enérgicas,
proactivas e independientes. Muestran una tendencia a estar siempre dedicándose a una
actividad o emprendiendo proyectos y defienden con ahínco sus opiniones y posturas ante
las diferentes situaciones que viven.

Además, confían en su propio criterio y no temen entrar en confrontación con los demás,
por lo que son asertivas y no rehúyen las posiciones de liderazgo. Sin embargo, si este tipo
de temperamento es muy extremado puede dar pie a la aparición de muchos conflictos y
hostilidades. El elemento con el que se las relacionó era el fuego.

4. Temperamento melancólico
Las personas con temperamento melancólico se caracterizan, según Galeno, por ser
emocionalmente sensibles, creativas, introvertidas, abnegadas y perfeccionistas. De algún
modo, este tipo de temperamento puede relacionarse con el concepto reciente de Personas
Altamente Sensibles (PAS), aunque definido de modo mucho más ambiguo.
Aunque encuentran placer en las tareas que requieran esfuerzo y sacrificio personal, les
cuesta decidirse a la hora de iniciar proyectos justamente por ese espíritu perfeccionista y
por la preocupación que produce la inseguridad de no saber lo que va a pasar. Su humor
varía con facilidad y muestran una propensión a la tristeza. Su elemento es la tierra.

La teoría de los 4 temperamentos y la psicología

La obra de Galeno ha sido un referente durante muchos siglos de historia, pero hoy en día
no se considera válida ni en la medicina ni en la psicología.

Los motivos son que, por un lado, no se formuló sobre ideas y posturas filosóficas
aceptadas hoy en día (la teoría humoral) y por otro lado, que el modo en el que se describen
los diferentes temperamentos es muy ambigua. Eso significa que aunque pueda ser
inspirador ver reflejada la propia personalidad en alguno de estos tipos temperamentales, es
muy posible que parte del interés que nos produzca este sencillo sistema de clasificación se
deba al efecto Forer, tal y como ocurre por ejemplo con el eneagrama de la personalidad.

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