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“CASCARA DE COCO Y LEUCAENA: POTENCIALIDADES PARA SER UTILIZADOS EN

UN SISTEMA DE PRODUCCIÓN ORGANICO”

PAOLA ANDREA MESA DE LOS RÍOS

ANGELA CONSTANZA SUAREZ PATIÑO

PRESENTADO A:
JUAN CARLOS MONTOYA

UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA


SEDE PALMIRA
ABONOS VERDES Y ACOLCHADOS ORGÁNICOS
2010
INTRODUCCIÓN

El abono verde es un cultivo que se siembra en rotación o asocio con un cultivo comercial,
el cuál es incorporado al suelo in situ, con el fin de mantener, mejorar o restaurar sus
propiedades físicas, químicas y biológicas; y que además en algunas ocasiones puede ser
utilizado antes de su incorporación, como alimento de animales ó el consumo humano.
(Costa et al, 1992). Por otro lado el acolchado orgánico es una práctica agrícola que
consiste en mantener cubierto el suelo con un material orgánico, destinado tanto a
proteger como a fertilizar. Se práctica en horticultura y arboricultura, ya sea en periodos
de reposo del suelo como en periodos de cultivo y también en sistemas cerealistas,
actuando como acolchado el propio rastrojo. (Smith et al, 1987).

La importancia de estas herramientas para el desarrollo de una agricultura limpia y con


perspectiva agroecológica viene siendo muy estudiada en la actualidad a propósito de las
tendencias en la producción agropecuaria. Aún así, las ventajas de tales herramientas han
sido mencionadas desde hace muchos años por investigadores que como Varro en 1934
quien escribió: «algunos cultivos se siembran no tanto por sus beneficios de corto pla zo
sino con una visión de largo plazo, cuando estas se cortan y se dejan en la tierra para
enriquecerla. Cuando el suelo es bastante pobre, en vez de usar estiércoles, es una
costumbre incorporar los lupinos y a veces los frijoles cuando comienzan a echar vainas,
antes de que sea rentable cosecharlas.»

Para definir qué tipo de abonos verdes o acochados usar, es importante tener claro lo que
buscamos al utilizarlos, pues a medida que han ido avanzado las investigaciones, se ha
encontrado que no cualquier abono verde o acolchado es benéfico para el crecimiento y
desarrollo de los cultivos objetivo. Por ello se hace necesario continuar investigando y
determinando las potencialidades de muchas plantas o materiales orgánicos para su
posible uso como abonos verdes o acolchados orgánicos.

En este trabajo, a partir de una revisión bibliográfica se pretende deliberar sobre las
probables potencialidades tanto de la cascara de Coco, como de la Leucaena leucocephala
en torno a su utilización en el sentido antes mencionado.
OBJETIVOS

GENERAL

 Determinar las diferentes potencialidades de la cascara de coco y la Leucaena


para ser utilizados en sistemas de producción orgánicos.

ESPECIFICOS

 Analizar si el contenido de nutrientes de la cascara de coco y la Leucaena


leucocepha contribuyen a la fertilización del suelo.

 Indagar acerca de los efectos positivos en la prevención del crecimiento de


arvenses, en la mejora de la estructura de un suelo y la prevención de la erosión
de la cascara de coco y de la Leucaena leucocephala.
1. CARACTERIZACIÓN DE LAS EPECIES

1.1. LEUCAENA

Clasificación Taxonómica:

Familia: Leguminoseae
Género: Leucaena
Nombre científico: Leucaena leucocephala (Lam.) de Wit
Nombres comunes: Guaje, Tantan, etc.

Botánica:

 Forma: Árbol o arbusto caducifolio o perennifolio, de 3 a 6 m (hasta 12 m) de altura


con un diámetro a la altura del pecho de hasta 25 cm.

 Copa / Hojas: Copa redondeada, ligeramente abierta y rala. Hojas alternas,


bipinnadas, de 9 a 25 cm de largo, verde grisáceas y glabras; folíolos 11 a 24 pares, de
8 a15 mm de largo, elípticos y algo oblicuos.

 Tronco / Ramas. Tronco usualmente torcido y se bifurca a diferentes alturas. Ramas


cilíndricas ascendentes. Desarrolla muchas ramas finas cuando crece aislado.
 Corteza. Externa lisa a ligeramente fisurada, grisnegruzca, con abundantes lenticelas
longitudinales protuberantes. Interna de color crema- amarillento, fibrosa, amarga,
con olor a ajo. Grosor total: 3 a 4 mm.

 Flor(es). Cabezuelas, con 100 a 180 flores blancas, de 1.2 a 2.5 cm de diámetro; flor de
4.1 a 5.3 mm de largo; pétalos libres; cáliz de 2.3 a 3.1 mm.

 Fruto(s). Vainas oblongas, estipitadas, en capítulos florales de 30 o más vainas, de 11


a 25 cm de largo por 1.2 a 2.3 cm de ancho, verdes cuando tiernas y cafés cuando
maduras; conteniendo de 15 a 30 semillas.

 Semilla(s). Semillas ligeramente elípticas de 0.5 a 1 cm de largo por 3 a 6 mm de


ancho, aplanadas, color café brillante, dispuestas transversalmente en la vaina. La
semilla está cubierta por una cera que retarda la absorción de agua durante la
germinación.

 Raíz. Raíz profunda y extendida. La raíz primaria penetra en las capas profundas del
suelo y aprovecha el agua y los minerales por debajo de la zona a la que llegan las
raíces de muchas plantas agrícolas.

Distribución

Es una especie de amplia distribución en las regiones tropicales y subtropicales. Altitud: 0


a 900 m.

Hábitat

Prospera en ambientes adversos. Se adapta muy bien a las tierras bajas, crece desde
sitios secos con 350 mm/año hasta húmedos con 2,300 mm/año y temperatura media
anual de 22 a 30 ºC. Es necesario un período seco de 4 a 6 meses. Crece en una amplia
variedad de suelos, desde neutros, hasta alcalinos, siempre y cuando sean suelos bien
drenados, no compactados ni ácidos. Los mejores resultados se obtienen en suelos con
pH de 6.5 a 7.5. Suelos inferiores a 5.5 pH no son recomendables.

Propiedades Fisiológicas

 Asociación con nódulos. Nódulos fijadores de nitrógeno en las raíces. Simbionte:


Rhizobium y/o Bradyrhizobium. Nodula espontáneamente con el rizobium del lugar lo
que le permite buena adaptación aún en sitios con factores limitantes (nutrición y
disponibilidad de agua). Sus nódulos grandes y prolíficos se encuentran en las raicillas
de las capas superficiales y aireadas del suelo.
 Adaptación. Especie de fácil adaptación.
 Competencia. Buena capacidad competitiva. Fuerte competidora con otros cultivos
y/o árboles nativos en situaciones de estrés.
 Crecimiento. Especie de rápido crecimiento, longevidad de 50 años. Muestra un
incremento medio anual de 2.8 m en altura y 2.4 cm en diámetro. El crecimiento es
lento en las primeras etapas de desarrollo de la planta y en sitios donde no hay
estación seca bien definida y la precipitación es mayor a 2,500 mm.
 Descomposición. La hojarasca presenta una rápida descomposición.
 Establecimiento. Es lenta para establecerse, pero una vez establecida, su
productividad es alta aún bajo defoliación regular.
 Producción de hojas, flores, frutos, madera y/o semillas. Buena productora de
materia orgánica. Se logran producciones anuales de 23 toneladas/ha, en densidades
de 66,600 árboles/ha y cosechas a intervalos de 60 días. Tiene capacidad para formar
follaje fácilmente. Sus hojas tienen un alto contenido de nitrógeno (4.3 % peso seco).
Alcanza su estado reproductivo y de producción en 1 ó 2 años, no obstante, la semilla
debe cosecharse de individuos de más de 3 años. Un árbol con copa bien desarrollada
puede producir entre 500 y 1,500 g de semilla limpia. Se pueden llegar a cosechar
hasta 50 toneladas/ha de hojas y vainas verdes. Producción de leña 50 m3/ha/año. Sus
rendimientos en madera varían de 24 a 100 m3 ha/año, según resultados de
plantaciones en Filipinas.

La Leucaena se siembra también para la mejora de los suelos. Su follaje se usa como un
abono orgánico, y su capacidad para fijar nitrógeno aumenta la provisión de nitrógeno en
los horizontes superiores del suelo. Se reporta que su comportamiento radical profundo y
agresivo aumenta la infiltración del suelo y disminuye la cantidad de desagüe superficial
en sitios con suelos pesados y aquellos con capas impermeables en el subsuelo. La
habilidad de la Leucaena para prosperar en pendientes escarpadas, en suelos marginales
y en áreas con estaciones secas prolongadas, la hacen útil en la reforestación de cuencas
denudadas, laderas y pastizales.

Composición de la planta

Cuadro 1. Contenidos de celulosa, hemicelulosa y lignina de algunos desechos


vegetales1

ESPECIE CELULOSA% LIGNINA% DEGRADACIÓN %


Leucaena 11.36* 11.65* Rápida
Mucuna 14,35 5,56 Rápida
Fibra de Coco 23-43 35-45 Lenta
Paja de Trigo 50.12 7,61 Rápida
*Corresponde a la edad de corte de 98 días.

1
Elaborada con base en datos obtenidos de COSTA, 2010; DÍAZ, 2010 y SAAVEDRA 1987.
Teniendo en cuenta la composición bromatológica de la planta de Leucaena se puede
intuir la velocidad de descomposición de la hojarasca derivada de ésta. Así estudios
realizados por Jamaludheen y Kumar (1997) describieron el proceso de descomposición
de la hojarasca de la leucaena en la India, donde fue totalmente descompuesta a los ocho
meses, y lo correlacionaron con su alto contenido de nitrógeno. Por su parte, Vanlauwe et
al. (1997) señalaron que L. leucocephala, en condiciones subhúmedas tropicales, logró su
total descomposición a los 112 días. Así mismo, en otras investigaciones donde se
compara la velocidad de descomposición de la hojarasca de gramíneas y leguminosas, los
autores señalaron que las diferencias marcadas en la velocidad de desaparición de la
hojarasca entre las especies están estrechamente relacionadas con su composición
química, ya que por lo general en las gramíneas las relaciones C/N y lignina/nitrógeno son
mayores que en las leguminosas, lo cual hace más lenta la velocidad de descomposición.

Aportes de nutrientes al suelo

Incorporación de la leucaena entre las hileras de maíz EE. “El Porvenir

Poda de la leucaena, para no interferir el desarrollo del cultivo de maíz. EE.”El Porvenir”.
El aporte de nutrientes que hace Leucaena al suelo puede ser o por la fijación de
nitrógeno al suelo para que luego sea aprovechada por las plantas que allí se encuentran;
así como por la descomposición, fundamentalmente de la hojarasca que aporta, además
de nitrógeno otros nutrientes al suelo.

Respecto a la fijación de nitrógeno atmosférico, se sabe que sus raíces laterales


horizontales y pequeñas en las capas de suelo aireado superficial forman asociaciones
simbióticas con facilidad con las bacterias fijadoras de nitrógeno de la Rhizobiaceae. Las
tasas de fijación anual de nitrógeno en la Leucaena han sido calculadas tan altas como de
110 kg por Ha bajo condiciones de campo. La nodulación parece ser influenciada
grandemente por la reacción del suelo y es pobre a unos valores de pH de menos de 5.5.
Además de Rhizobium spp., las raíces finas y los vellos radicales se encuentran infectados
con micorrizas vesicularesarbusculares (MVA), las cuales mejoran la nutrición por fósforo
y las relaciones de agua en la Leucaena. En los suelos tropicales deficientes en fósforo, la
inoculación dual con Rhizobium spp. y MVA mejora grandemente el crecimiento de las
plántulas. La infección con MVA parece ser necesaria para que la nodulación ocurra en
algunos suelos.

En cuanto a la descomposición de la hojarasca, es importante mencionar que ésta


constituye la vía de entrada principal de los nutrientes en el suelo y es uno de los puntos
clave del reciclado de la materia orgánica y los nutrientes (Vitousek et al., 1994; Aerts y
De Caluwe, 1997).La hojarasca determina la estabilidad y el funcionamiento del
ecosistema, pues constituye la fuente principal de circulación de materia orgánica,
energía y nutrientes entre las plantas y el suelo; su contenido depende del balance entre
los procesos de acumulación y descomposición, lo cual está determinado por la especie
de planta y su composición química, entre otros factores.

Respecto a lo anterior, podemos citar un estudio realizado en Peru, por medio del cual se
evaluó el efecto de la leucaena como elemento de conservación del suelo y como fuente
de nitrógeno, asociado a diferentes niveles de nitrógeno químico sobre la productividad
del maíz. En este estudio, encontraron que la Leucaena influye positivamente en el
rendimiento de grano de Maíz, pues con ésta como abono verde se obtiene obtiene 4,0
t/ha con un nivel de 80 N, lo que equivale a 118 % del rendimiento obtenido con el nivel
cero de nitrógeno sin Leucaena que dio 3,4 t/ha (Cuadro 2). Además la materia seca que
incorpora la leucaena es entre 7,4 a 7,8 t con promedio de 7,5 t/ha/año, (promedio de
cuatro años), es decir es una planta muy buena en producción de biomasa lo que
garantiza tener abono verde constantemente en el cultivo. (Cuadro 3). También
encontraron que el nivel de algunos elementos del suelo sufre cambios como el N, P y
M.O.; la materia orgánica en el suelo con la incorporación de sólo rastrojo de maíz se
incrementa en 0,5 %; mientras que con la incorporación de materia seca de leucaena más
rastrojo de maíz se incrementa en 1,3%. Es decir la Leucaena incorporada aumenta la
materia orgánica a una profundidad entre 0 a 20 cm del suelo, y además se muestra
como una buena protectora del suelo evitando la proliferación de malezas, pues tiene
efectos alelopáticos que inhiben el crecimiento y desarrollo de las mismas. (Cuadro 4)
Cuadro 2. Productividad Media de Maíz en (t/ha) en Cuatro Años, en Función a la
Presencia y Ausencia de Leucaena Asociada a Cuatro Niveles de Nitrógeno EE. El
Porvenir (Juan Guerra, San Martín) 1998 - 2001.

Nivel Rendimiento Promedio de Grano (t/ha)


Nitrógeno
Sin Leucaena Con Leucaena
(kg/ha)
1998 1999 2000 2001 Media % 1998 1999 2000 2001 Media %
00 3,3 4,9 2,8 2,6 3,4 100 3,0 4,5 3,3 3,5 3,6 104
40 3,1 4,6 3,0 2,9 3,4 99,7 2,4 3,9 3,8 4,0 3,5 102
80 3,3 4,7 3,2 3,7 3,7 109 3,9 4,6 4,0 3,7 4,0 118
120 3,0 5,1 3,5 3,8 3,9 113 3,6 4,4 3,9 3,6 3,9 113

Cuadro 3. Peso Total de materia seca proveniente de la Leucaena que se incorpora en


el suelo para conservar su fertilidad. EE. El Porvenir (Juan Guerra, San Martín).
Campañas 1998 a 2001.
Materia Seca
Nitrógeno kg/ha Promedio
Kg/ha kg/ha
1998 1999 2000 2001
00 ------ 6382 8680 8282 7781
40 ------ 7778 8429 6357 7521
80 ------ 6509 8549 7142 7400
120 ------ 6611 8434 7402
7162
Promedio 6820 8523 7235 7526

Cuadro 4. Fertilidad de la capa arable del suelo (0 - 20 cm) en función a la


disponibilidad de nutrientes promovida por la Leucaena. EE. El Porvenir (Juan
Guerra, San Martín). Campaña 2001.
Año Tratamiento Arena Arcilla Limo Textura pH N% P K M.O.
% % % ppm ppm
1998 Sin 44,24 30,84 24,92 Fr. Arc. 7,1 0,086 16,20 ------ 1,72
Leucaena
2001 Sin 42,24 32,48 25,28 Fr. Arc. 7,2 0,097 8,80 166,2 2,17
Leucaena
1998 Con 46,24 30,84 22,92 Fr. Arc. 7,1 0,089 18,40 ------- 1,79
Leucaena
2001 Con 44,38 32,48 23,14 Fr. Arc. 7,3 0,138 8,12 175,5 3,07
Leucaena
Maíz en callejones de Leucaena leucocephala L. EE.”El Porvenir”- Tarapoto

En otros estudios realizados se indaga sobre el efecto de la descomposición de la


hojarasca de Leucaena en el contenido nutricional del suelo y su incidencia en la nutrición
del cultivo de pasto, se ha demostrado, que se genera un incremento en el contenido de
M.O. y N total del suelo como resultado de la presencia de la Leucaena en el área, así
como la poda de la Leucaena conllevó a un incremento en el nivel de disponibilidad de N
en la planta, refiriéndose al pasto sembrado en el área. También se resalta que los niveles
de N, P y K en pasto no arrojaron valores de deficiencias nutrimentales para el cultivo, en
contradicción con el aspecto no satisfactorio que el mismo presenta.

Así mismo, en otro estudio denominado “Tecnología de producción animal mediante


Leucaena leucocephala asociada con pastos en el 100 % del área de la unidad ganadera” se
encontró que la siembra de Leucaena en un área de producción ganadera tiene diferentes
incidencias positivas respecto al aumento de la productividad, pues por ejemplo en el
siguiente cuadro se muestra que el efecto de la sombra de la Leucaena genera un mayor
contenido nutricional del pasto estrella

Cuadro 5. Efecto de la sombra de leucaena en el contenido nutricional del pasto


estrella Sistema

Indicadores, % Leucaena Pasto solo


+ pasto
Proteína bruta 10.2 7.4
Fibra bruta 32.8 41.3
KOH 54.4 51.9
Calcio 0.75 0.58
Fósforo 0.26 0.28
Potasio 2.01 1.64
Fuente: Ruiz, 2008
Cuadro 6. Contenido de nitrógeno y relación C/N en hojas de 14 árboles
multipropósito.

Fuente: Kamara, 2000

Respecto al reciclado de nutrientes en un pastizal de leucaena-pastos naturales, en este


estudio se demuestra que se presentó un balance positivo para el N, P y K, pues la
Leucaena hizo una contribución apreciable del N, no sólo debido a la fijación biológ ica del
N, sino además a la entrada, importante de ese nutriente mediante la descomposición de
la hojarasca que ella produce (Crespo y col., 1998). Todo esto influye favorablemente en
una mayor ganancia del peso vivo de los animales.

Cuadro 7. Balance de N, P y K en diferentes sistemas de pastizales kg/ha

Sistema N P K
Leucaena + pasto 22 1 0
Pasto solo -9 -6 -17
Fuente: Ruiz, 2008

1.2 COCO

Clasificación taxonómica

Familia: Arecaceae
Género: Cocus
Nombre científico : Cocus nucifera
Nombre común: coco, palma de coco.
Planta y fruto de Cocus nucifera

Su nombre está compuesto por el portugués, coco= máscara y del latín Nucífera, nucifer-
a-um = que emite nueces; el origen de esta palmera son las islas del Pacífico.

Botánica:

 Tronco: generalmente se encuentra inclinado, con una altura de 10-20 metros, 50


centímetros de grueso en la base y disminuyendo a medida que se asciende en altura.
En el ápice presenta un grupo de hojas que protegen el punto de crecimiento de la
planta y la aparición de frutos. El tronco aumenta dependiendo de la disponibilidad de
agua ya que no cuenta con tejido meristemático mientras que la altura depende de las
condiciones ecológicas y de la edad de la palma.
 Hojas: son pinnadas con 1.5-4 metros de longitud y foliolos con 50-70 centímetros y
de color verde amarillento. En condiciones ambientales favorables una planta gigante
en pleno desarrollo emite de 12 a 14 hojas por año, mientras la enana puede emitir
hasta 18 hojas.
 Raíces: El sistema radicular es fasciculado, las raíces primarias fijan la planta al suelo y
absorben el agua. Las raíces terciarias derivan de las secundarias, y son las verdaderas
extractoras de nutrientes. El radio de acción de las raíces activas es de dos metros
desde el tronco y con una profundidad entre 0.2 a 0.8 metros.
 Flores: inflorescencias paniculadas que emergen de las axilas de las hojas inferiores y
protegidas por la espata que mide hasta 70 centímetros, tienen un periodo de
desarrollo de 3 a 4 meses. La polinización puede ser por viento o por insectos y varía
según sea el cocotero, sí es gigante las flores masculinas se abren antes que las
femeninas lo que favorece la polinización cruzada; pero sí es en enano es simultánea y
se dan altos niveles de autofecundación.
 Fruto: es una drupa ovoidal de 20-30 centímetros, con un peso máximo de 2.5
kilogramos. En su interior tiene una pulpa blanca, comestible y con un líquido
azucarado (agua de coco). Está cubierto por una capa intermedia fina (mesocarpo) y
otra más dura (endocarpo) que dispone de tres orificios situados en el ápice, dos
cerrados y el otro frente a la raicilla del embrión. Y la más externa -el exocarpo- que es
una cáscara externa amarillenta, correosa y fibrosa adherida a la nuez. Estos tardan
en madurar hasta 13 meses.

Cáscara de coco

Distribución y hábitat:

La palma de coco se encuentra a lo largo de todo el trópico entre las latitudes 26° N. y 26°
S. (Parrotta). Las principales regiones productoras de coco –en el mundo- son el
archipiélago Malayo, suroriente de Asia, India, Sri Lanka, islas del Pacífico, oriente de
África, centro y sur América.

 Clima: Es ideal tener temperaturas estables alrededor de los 27°, con variaciones de 7
a 5ºC, un régimen de precipitación anual media de 1500mm, pero puede soportar
hasta 5000mm mientras que periodos de tres meses con menos de 50mm son
perjudiciales para el cultivo. La altitud óptima está entre los 0 a 400 metros.

En cuanto a humedad relativa lo ideal es que sea mayor al 60%, el clima cálido y húmedo
es más favorable para la palma de coco, vientos moderados fueres y una intensidad
lumínica de 2000 horas anuales.

 Suelo: Los mejores suelos son aquellos con texturas livianas es decir de francos a
arenosos, profundos (más de un metro) y con una capa freática superficial de uno a
dos metros de profundidad. Estos suelos se encuentran en las costas, en donde el
coco satisface sus exigencias de cloro (obtenido del agua de mar) es d ecir que se
adapta a capas freáticas salinas.
Cuando hay un buen manejo de riego el cultivo se puede desarrollar en suelos arcillosos y
limosos.

Otras características

En condiciones óptimas las variedades altas empiezan su florecimiento a los 6 años


cuando tienen de 2.5 a 4.5 m de alto, se da durante todo el año y continúa hasta que el
árbol alcanza una altura de 25 a 30 m, aproximadamente a los 60 años de edad. Cada
palma puede producir 40 o más frutos al año (Parrotta).

Los cocos permanecen activos todo el tiempo, incluso pueden iniciar la germinación en la
palma, pero generalmente pasan 4 meses desde la caída de la fruta madura hasta la
emergencia. El fruto puede permanecer flotando 3 y 4 meses sin perder su viabilidad, y
por lo tanto pueden ser desplazadas y diseminadas por grandes distancias con las
corrientes marinas

Usos:

Se derivan principalmente del fruto: el agua que se utiliza como bebida refrescante y
como promotora de crecimiento, la copra o carne de coco (endospermo) se usa como
insumo para confitería y el aceite se aprovecha de diferentes formas (cosmética,
consumo humano y animal).

Otros usos provienen de la cáscara de coco (mesocarpo) en forma de fibra para colchones
y escobas, además tiene características deseables para ser utilizada como sustrato o
compost pues induce un crecimiento más rápido de raíces, a continuación se presentan
con más detalle sus usos agrícolas y particularidades. Del peso total de la semilla de coco,
el 65% lo constituye la nuez y el 35% restante corresponde a la parte fibrosa.

1.2.1 Particularidades de la fibra, cáscara o polvo de coco

Los beneficios agrícolas del coco se dan a partir del polvo de coco (material corchoso de
poros abiertos) y de las fibras cortas pues tienen altos contenidos de ligninas y celulosas
(Tabla 1), y de otros componentes orgánicos como la hemicelulosa, pectina y ceras. Sí
bien este material es orgánico, su descomposición tiene tasas muy lentas con periodos de
vida entre 4 a 6 años en el trópico y 8 a 10 años en países como Holanda.

La fibra de coco tiene características físicas y químicas determinadas, estas son:

 Características Físicas: como se puede observar en el Cuadro 8, la cáscara tiene altos


niveles de porosidad (82% Total y 66% capilar, esto del total del volumen), a demás
presenta un equilibrio entre la retención de agua y la capacidad de aireación.
Cuadro 8: Características físicas de la fibra de coco

Fuente: CALDERON, 2001

 Características Químicas: su Capacidad de Intercambio Catiónico (CIC) es baja por lo


cual puede retener nutrientes poco a poco en un tiempo dado. En cuanto al contenido
de elementos, sí bien la cáscara es fuente importante de Ca y de K (Cuadro 9) en su
forma asimilable (potasa) el N no es alto haciendo que la degradación sea difícil pues
según Verdonck et al (1983) citado por ZARATE (2006), la fibra de coco tiene un alto
contenido de C (>45%) y con la adición de un 1% de N tal material consume pequeñas
cantidades de O, es decir que tiene altas tasas de C/N. Este componente del coco -en
fresco- tiene polifenoles que pueden estancar el crecimiento de las plantas.

Cuadro 9. Características químicas fibra de coco 2

pH 5
N total 0,51%
P Total (P2O5) 0,20%
K total (K2O) 0,6%
Ca total CaO 1,4%
Mg total MgO 0,20%
Na total (NaO) 0,187%
Fe total 0,206%

2
Tomado de http://www.scribd.com/doc/29715787/Fibra-de-Coco
Antecedentes del uso de fibra de coco en manejo orgánico de cultivos

El primer indicio de tal uso lo referencia Hume en 1949, quien habla y experimenta con
fibra de coco como sustrato de hortalizas; después de obtener resultados favorables en
este sentido se han dado ensayos en pro de demostrar los beneficios en el desarrol lo de
diversos cultivos. Un ejemplo de ello son estudios realizados en especies recalcitrantes
para favorecer el enraizamiento, en el Cuadro 10 se pueden apreciar los resultados
obtenidos en ruda (Ruta graveolens), en donde se tuvo un comportamiento favorable de
las estacas en fibra de coco, debido entre otras cosas, a las diferencias en las relaciones
aire: agua entre esta y los otros sustratos.

Cuadro 10. Efecto de los diferentes sustratos sobre el enraizamiento de estacas de


ruda

Fuente: ALVARADO et al

Fibra o polvo de Coco


2. POSIBILIDADES PARA SER UTILIZADOS EN UN SISTEMA DE PRODUCCIÓN
ORGANICO

2.1 Leucaena: a continuación presentamos las posibilidades de utilizar Leucaena


leucocephala en un sistema de producción orgánico

Abono Verde

Teniendo en cuenta que un abono verde incrementa y/o conserva el contenido de materia
orgánica, que mejora la estructura del suelo al favorecer una buena agregación, propicia
la fijación biológica de nitrógeno, estimula la actividad biológica del suelo, al
suministrarse un sustrato para el desarrollo de los organismos (marco y micro), aumenta
el contenido de nutrientes del suelo y su capacidad de intercambio catiónico, mejora la
capacidad del suelo para retener humedad, favorece el ciclaje de nutrientes, cuando se
corta forma una cobertura vegetal que contribuye al control de la vegetación arvense e
igualmente tal cobertura impide el impacto directo de las gotas de lluvia sobre el suelo,
disminuyendo de manera significativa los niveles de erosión (Martin Praguer y Marina
Sanchez, etc), se puede aseverar que si bien la Leucaena leucocephala no es una planta
herbácea (característica de una abono verde) sí es una especie que se puede considerar
como un abono verde, pues las características referenciadas anteriormente, nos
demuestran que ésta ha sido ampliamente utilizada para diversas situaciones, entre ellas
para aportar nutricionalmente en a un sistema de producción, bien sea agrícola o que
involucre animales, como por ejemplo un sistema agrosilvopastoril. Esto debido a que la
hojarasca derivada de la planta, cuenta con una gran velocidad de descomposición así
como aporta nutricionalmente al suelo, cumpliendo las veces de fertilizante, pues su
contribución por lo menos en cuanto a N,P y K no es para nada despreciable, afirmación
detallada en el cuadro antes fijado. Igualmente, esta planta, mediante procesos de
fijación biológica, aporta al suelo cantidades considerables de nitrógeno que contribuyen
directamente en el crecimiento y desarrollo del cultivo donde se plante, según sea el
sistema establecido.

De acuerdo a la revisión teórica realizada, se puede concluir que por ejemplo, es


recomendable plantar Leucaena leucocephala en un sistema agrosilvopastorial, para
aprovechar las potencialidades de dicha especie; pues así por un lado está aportando en
la nutrición de un cultivo de pastos que debe establecerse en tal sistema, así como en los
cultivos secundarios que se plantean. El beneficio se aprovechara hasta el último eslabón
del sistema, pues por ejemplo al aporte de nutrientes realizado en el cultivo de pasto,
beneficiara además al ganado que se alimenta de este pasto, reflejándose esto en un
buen desarrollo y crecimiento de los animales. Esta forma de utilizar la Leucaena
leucocephala, muy seguramente representara para el agricultor, una disminución en los
costos de producción, ya que se está aportando tanto en la nutrición nitrogenada de los
cultivos, como en la nutrición de los animales. Y por otro lado se está contribuyendo con
el mejoramiento de las propiedades físicas del suelo, pues como se muestra en el cuadro
4 la Leucaena leucocephala promueve la actividad biológica que evidentemente aporta
para una mejor agregación del suelo.

Acolchado Orgánico (mulch) o cobertura muerta

Teniendo en cuenta que un acolchado orgánico es una práctica agrícola que consiste en
mantener cubierto el suelo con un material orgánico, destinado tanto a proteger como a
fertilizar(Smith et al, 1987), se considera pertinente el uso de la hojarasca de leucaena con
este fin, pues sus potencialidades nos demuestran que luego de una poda selectiva, sus
ramas y hojas podrían estar destinadas a proteger el suelo y al mismo tiempo a fertilizarlo
en razón a su descomposición. Bajo esta lógica, se piensa que con este fin, la leucaena
podría cumplir diferentes funciones a la vez, es decir es un árbol multipropósito, pues por
ejemplo podría ser plantada en una finca como barrera o cerca viva y a la vez sus ramas y
hojas ser aprovechadas como acolchado orgánico, pues se ha demostrado su amplia
capacidad de producción de grandes cantidades de biomasa, lo que además asegura
disponibilidad constante de acolchado, lo que contrarresta su gran velocidad de
descomposición.
Todo esto bajo la premisa de que el lugar donde se vaya a utilizar como acolchado sea en
el mismo predio donde se está utilizando como barrera, pues de lo contrario la estrategia
tendría que ser repensada porque muy seguramente se generarían costos de transporte
que a lo mejor no sean beneficiosos para el agricultor.

2.2 Fibra de coco

En sentido general las bondades de la fibra de coco son de destacar pues contribuye no
sólo al mantenimiento de cultivos para la alimentación sino al uso racional y cíclico de los
elementos de la naturaleza al minimizar el uso de recursos externos a un agroecosistema
y de la energía invertida en este a la vez que no se afectan otros ecosistemas ni se
generan desechos. Sin embargo es necesario hacer ciertas consideraciones en su uso
pues pueden convertirse en limitantes: este material al ser cultivado en regiones
tropicales puede verse limitado su uso por costos de transporte y en ciertos caso s el
mercado lo ofrece en presentaciones prácticas (para facilitar su uso) pero costosas lo cual
eleva los costos de los insumos.

De este material se puede decir que tiene dos usos posibles para el uso en
agroecosistemas con manejo orgánico:

o Uno que es el que se conoce y que se ha investigado ampliamente, es decir como


sustrato; por la capacidad que tiene de mantener un buen equilibrio entre agua y aire
(15 al 35 % de aire y del 20 al 60 % de agua en relación con el volumen total)
(CALDERÓN, 2001), alta porosidad, retención de agua así como buen drenaje, buena
estabilidad física, ser liviano y ser inerte tanto biológica como químicamente (para
que no se desequilibre iónicamente la solución nutritiva) es decir tener las
características deseadas un sustrato. Además el pH del sustrato se encuentra entre el
rango -5 y 6,5- sin afectar la disponibilidad de iones para la planta.

Esta es un sustento para la agricultura sin suelo o de invernadero pues además de


brindar las condiciones ya mencionadas es una manera económica de sostener estos
sistemas para especies de ciclo corto.

o El otro es como acolchado orgánico. En este caso las ventajas son: su gran capacidad
para retener agua, el alto porcentaje de porosidad que puede proporcionarle a un
suelo pesado desde su capacidad para equilibrar la relación agua-aire, la tasa de
infiltración, se aumenta la disponibilidad de nutrientes pues como su descomposición
es lenta se da un acumulado de ácidos húmicos (a partir de la lignina) que luego van a
ser aprovechados por la plantas y sin lixiviación.

Ya que tiene altos contenidos de K y de forma asimilable puede ser acolchado de cultivos
exigentes en este elemento como de gramíneas, leguminosas, verduras, tomates,
manzanas, uvas o remolacha; cubriendo un rango de cultivos más amplio que cuando se
limita a sustrato.

Como contiene polifenoles puede disminuir la presencia de plantas que compitan con
cultivos principales (por efectos alelopáticos) a la vez que está cubriendo la superficie lo
cual impide la acción de la luz solar y por ende la fotosíntesis de estas planta s no
deseadas.

Puede aplicarse como fibra fresca o como polvo que es en partículas más pequeñas y con
un grado de descomposición menor, esto puede depender del objetivo que se tenga pues
sí es el de mejorar un suelo con bajo porcentaje de poros, baja aireación es adecuado el
polvo pues puede mezclarse más adecuadamente y obtener resultados más eficaces y
rápidos mientras que sí es para acolchar las calles de un cultivo con el fin de mantener
humedad, disminuir arvenses y brindar algo de nutrientes pues es adecuada la fibra corta.

Fibra de coco en Tomate


CONCLUSIONES

o La Leucaena y la fibra o cáscara de coco pueden ser efectivamente utilizadas en


sistemas de producción orgánicos como abono verde y acolchado orgánico en el
primer caso y como sustrato y acolchado en el segundo caso pues no sólo contribuyen
a mejorar la producción de los cultivos sino que contribuyen a mantener el equilibrio y
la sostenibilidad de los agroecosistemas y de los elementos naturales.

o La luecaena es un árbol multipropósito ya que además de brindar una variedad de


productos tangibles como hojas, ramas, madera, semillas, y materia prima para
medicinas u otros usos, tiene una gran variedad de funciones no alimentarias como el
aporte de nitrógeno al suelo, el control de la erosión, el mejoramiento de propiedades
físicas y químicas del suelo, entre muchas otras, bondades que la hacen un especie
apta para ser utilizada en sistemas de producción orgánico y diversificados.

o Aunque la cáscara de coco no tiene un aporte considerable de nutrientes al suelo, se


rescata el del K pues se encuentra en forma de potasas las cuales pueden ser
aprovechables por las plantas que tienen un metabolismo exigente en este elemento.
Por otro lado a través del proceso de descomposición de la lignina se van acumulando
ácidos húmicos que luego son aprovechados por ellas.

o El uso de fibra de coco como sustrato puede, efectivamente, contribuir a la mejora de


suelos con problemas de estructura y circulación de aire-agua y también a disminuir la
presencia de arvenses, bien sea por efectos alelopáticos o ausencia de fotosíntesis en
esas plantas.
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