Caso 1

La empresa y el supervisor cumplieron dando aviso a los clientes de los desechos peligrosos ya que
su deber como ingenieros compete en proteger la vida y la salud de los miembros de la comunidad,
según el artículo 33 literal h de la ley 842, sin embargo, hubo interés por parte del supervisor al
encubrir la información a las autoridades competentes.

Vale resaltar que el deber como ingeniero por parte de marcos no le permite realizar trabajos como
revisar las canecas de sus clientes según el artículo 34ª y además si hubiese realizado el análisis
respectivo con permiso del cliente este ingeniero puede que no esté facultado para realizarlo según
el artículo 40ª, aunque obró bien en abstenerse de emitir conceptos sin tener convicción absoluta
de estar debidamente informado (Artículo 33 i).

Marco no debe ponerse en la tarea de hacer análisis a las canecas, pero si desde el punto de vista
de su deber como profesional pudo notificar a las autoridades competentes el supuesto o en el caso
de informar primero al cliente asegurarse de que los desechos se trasladen de manera segura.

Caso 2

Martha en su deber como profesional cumplió al estudiar cuidadosamente el ambiente que será
afectado por la propuesta de elaborar un permiso (artículo 33 d), y rechazando las recomendaciones
por parte de su supervisor ya que así puede evitar daños al entorno humano y la naturaleza (Artículo
33e), basándose en dichas acciones debe denunciar la situación como lo exige la ley 842 en el
artículo 31 f en la cual tiene la obligación de “Denunciar los delitos, contravenciones y faltas contra
este Código de Ética, de que tuviere conocimiento con ocasión del ejercicio de su profesión,
aportando toda la información y pruebas que tuviere en su poder” debido a que la persona que
autorizó la expedición de los permisos faltó a los artículos anteriormente mencionados.

Martha debe realizar una queja por escrito hacia el copnia en donde se notifique la situación y se
proceda a la respectiva investigación.

Caso 7

En caso tal en el que Alberto no domine todas las áreas de la ingeniería, lo que es más probable, y
que utilice el slogan de “Ingeniero polifacético” estaría faltando directamente al artículo 35d el cul
dice que “Sus medios de propaganda deberán ajustarse a las reglas de la prudencia y al decoro
profesional, sin hacer uso de medios de publicidad con avisos exagerados que den lugar a equívocos
sobre su especialidad o idoneidad profesional”, y a su vez el artículo 40 a, ya que ofrecería la
prestación de servicios cuyo objeto sea dudoso o de imposible cumplimiento. En ese caso, Alberto
no debe adoptar esta consigna.

Alberto debe considerar que su slogan ofrece de su empresa un servicio con avisos muy exagerados
a lo que probablemente él está capacitado para realizar.

No debería anunciarse como el ingeniero polifacético por las mismas razones.

Caso 8.

La compañía no cometió faltas legales con Lita ya que la oferta de trabajo que se le hizo a ella fue
sólo por un gerente de Ecopetrol, y nunca se habla de un contrato dónde se afirme que oficialmente
fue contratada por la compañía lo que indica que, aunque el artículo 42 C prohíbe el reemplazo de
un profesional sin causa demostrada o justa. En este caso no aplica ya que no hay un documento
legal que permita afirmar que Lita fue reemplazada por causa injusta, sin embargo, si fue un acto de
mala fe el no notificar de la manera más oportuna a Lita su situación, ya que la decisión se tomó en
consenso con los demás directivos y no se informó hasta luego de semana y media.

Lita debe contactarse con la compañía para que se le justifique por qué retiraron su oferta de
trabajo, donde debe verificar que hubiese sido por causa justa. También, solicitar una retribución a
la compañía por el acto de mala fe al no notificarle a tiempo.

En el caso de que se conociera que si hubo un documento donde se oficializara la contratación en

la compañía, la situación sería completamente distinta debido a que en este caso la compañía si
estaría faltando al artículo 42 C.