Los caracteres sexuales primarios se determinan desde el momento de la
concepción o fecundación y nos permiten saber si somos niños o niñas. Se llaman caracteres sexuales a las características anatómicas y fisiológicas que nos distinguen a los hombres de las mujeres, es decir al sexo que tenemos. Se determinan desde el momento de la concepción Los caracteres sexuales primarios son los órganos sexuales (femeninos o masculinos) con los que nacemos y que nos permiten saber si somos niños o niñas. Estos caracteres se determinan desde el momento de la concepción o fecundación, o sea cuando se unen los cromosomas del espermatozoide y del óvulo. Los órganos sexuales, se forman durante las primeras semanas del embarazo y el sexo lo define un cromosoma del padre Caracteres sexuales primarios Desde que nacemos hasta más o menos los 10 u 11 años de edad, el cuerpo de los niños y niñas funcionan igual y la única diferencia visible son los caracteres sexuales primarios. Todos los sistemas y órganos de cuerpo desarrollan las mismas funciones, hasta la pubertad, etapa en la que se presentarán los caracteres sexuales secundarios. Así, los caracteres sexuales primarios son: Aparato reproductor masculino Ambos aparatos se componen de las gónadas (órganos sexuales donde se forman los gametos y producen las hormonas sexuales), las vías genitales y los genitales externos. Órganos internos masculinos Los principales órganos internos son: Los testículos: producen gametos, espermatozoides y liberan hormonas sexuales masculinas. El epidídimo: almacenan y conducen los espermas al exterior. Los conductos deferentes: también ayudan a que los espermatozoides lleguen a la uretra. Las glándulas accesorias: está compuesta por la próstata y las glándulas bulbouretrales, órganos glandulares del aparato reproductor masculino. Órganos externos masculinos Pene: está formado por el cuerpo esponjoso y los cuerpos cavernosos, una de sus funciones es la de depositar el esperma durante el coito vaginal en el aparato reproductor femenino Escroto: también llamado saco escrotal, es un conjunto de envolturas que cubre y aloja a los testículos en el varón. Importante: Los caracteres sexuales primarios nos distinguen como hombres o mujeres desde que nacemos. Sin embargo, comienzan a desarrollarse hasta la adolescencia, época en la que aparecen los caracteres secundarios.
CARACTERES SEXUALES SECUNDARIOS MASCULINOS
o Musculatura más desarrollada, mayor fuerza física y masa muscular.
o Incremento de la estatura, varones adultos son más altos que la mujer adulta, en promedio. o Presencia de vello androgénico más grueso y largo en otras partes del cuerpo: brazos, piernas, pectoral, abdominal, axilar, y púbico. o Vello facial, barba y/o bigote. o En promedio, pies, manos y nariz más grandes que en las mujeres. o Tórax y hombros más anchos. o Voz más grave que la de la mujer. o Alargamiento y aumento del grosor del pene. o Índice cintura/cadera menor que la mujer, en promedio. o Cabeza ósea y esqueleto más pesados. o Posible aparición de alopecia androgénica progresiva con la edad. o Comportamiento más agresivo. CARACTERES SEXUALES PRIMARIOS FEMENINOS
Órganos internos femeninos
Ovarios: productores de gametos femeninos u ovocitos. Trompas de Falopio: conductos que se comunican con el útero, lugar donde ocurre la fecundación. Útero: órgano hueco y musculoso donde se implanta y desarrolla el embrión. Vagina: canal que comunica al útero con el exterior, es el conducto por donde entran los espermatozoides. Órganos externos femeninos Vulva: Está compuesto por Clítoris, órgano eréctil y erógeno de la mujer. Labios, mayores y menores, pliegues saliente de la piel. Monte de Venus, almohadilla adiposa en la cara anterior cubierta de vello púbico. Vestíbulo vulvar, área en forma de almendra con seis orificios, el meato de la uretra, el orificio vaginal, las glándulas de Bartolino y las glándulas parauretrales de Skene.
CARACTERES SEXUALES PRIMARIOS FEMENINOS
o Senos desarrollados y pezones más grandes. o En promedio, menor crecimiento de la estatura que en el varón. o Mayor nivel de grasa subcutánea, especialmente en el rostro, glúteos y muslos. o Caderas más anchas. o Desarrollo de vello corporal o androgénico en menor medida que el varón, principalmente en las piernas y axilas. o Vello púbico crecido de forma triangular, en el área genital cubriendo la vulva y el monte de Venus. o Voz más aguda que la del varón.