Está en la página 1de 5

Interpretación de los exámenes de laboratorio clínico

La glicemia o glucemia

La glucosa es la principal fuente de energía para la mayoría de las células del cuerpo y algunas de
estas células (por ejemplo, las del cerebro y los glóbulos rojos) son casi totalmente dependientes
de la glucosa en la sangre, como fuente de energía.

La glicemia o glucemia es el azúcar (glucosa) contenido en la sangre.

El principal origen de la glucosa está en la ingesta de los carbohidratos consumidos como


alimentos y la mayoría de ellos terminan convirtiéndose en glucosa en la sangre.

Inicio

Servicios

Chequeo preventivo

Preop. Express!

Eval. Preoperatoria

Preguntas frecuentes
Directorio

Enlaces

Contáctenos

Después de las comidas, una parte de la glucosa se convierte en glucógeno para ser almacenado
por el hígado y por los músculos esqueléticos. El glucógeno se descompone gradualmente en
glucosa y el hígado lo libera al torrente sanguíneo cuando los niveles de glucosa disminuyen. El
exceso de glucosa se transforma en triglicéridos para el almacenamiento de energía.

El cerebro necesita que las concentraciones de glucosa en la sangre se mantengan dentro de un


margen determinado para funcionar normalmente. Las concentraciones inferiores a 30
(hipoglicemia) miligramos por decilitro (mg/dl) o superiores a 300 mg/dl pueden producir
confusión, pérdida de la conciencia e incluso la muerte, particularmente la hipoglicemia.

La absorción de los hidratos de carbono simples o monosacáridos preformados en los alimentos


o producidos durante el proceso digestivo, se realiza en las vellosidades del intestino delgado.
La principal hormona reguladora de la concentración de glucosa en el cuerpo es la insulina (a
pesar de que otras hormonas como el glucagon, la epinefrina y el cortisol también la pueden
afectar).

La diabetes se presenta por insuficiencia de insulina o por insensibilidad a la misma en los


diversos tejidos corporales.

La hiperglucemia (elevación de la glicemia) producida por la ingesta de glucosa se acompaña


siempre en sujetos normales de una disminución de los fosfatos inorgánicos del plasma en un 25
a 30%, hecho provocado porque el mecanismo de utilización de la glucosa implica la
participación de los fosfatos.

Cuando se hace ingerir a una persona normal 100 g de glucosa se observa un incremento en la
concentración del azúcar sanguíneo, con un nivel máximo cerca de la primera media hora y
luego un descenso continuo, algo lento en su comienzo, acentuado después, que llega alrededor
de las 2 horas a un valor algo inferior al inicial produciéndose por último la vuelta al valor
normal: Ver Prueba de tolerancia glucosada

Si se ingieren cantidades de glucosa mayores no suele ocurrir un aumento de la glucemia,


porque la cantidad que pasa a la sangre está limitada por la absorción intestinal, manteniéndose
sólo los valores altos de la glucemia durante más tiempo. Sin embargo, si la cantidad de glucosa
ingerida es demasiado grande, la glucemia puede alcanzar un valor superior al de la resorción
tubular renal, excretándose glucosa por la orina.
En la diabetes si se suministran 100 g de glucosa o bien 1 g/kg de peso, se produce una curva de
hiperglucemia venosa con valores mayores a los normales, un descenso de los valores iniciales
en tiempo superior a las 2 horas y no se observa hipoglucemia secundaria.

Muchas formas de estrés severo (por ejemplo, trauma, accidente cerebrovascular, ataque
cardíaco y cirugía) pueden aumentar temporalmente los niveles de glucosa.

Algunas drogas también pueden aumentar los niveles de glucosa, entre las que destacan:

Corticosteroides

Antidepresivos tricíclicos

Isoniazida

Litio

Fenotiazinas

Fenitoína

Otras, por el contrario, pueden disminuir los niveles de glucosa sanguíneos, entre las que
destacan:
Alcohol

Esteroides anabólicos

Clofibrato

Gemfibrozil

Inhibidores de la monoaminoxidasa (IMAO)

Sulfonilúreas.

VALORES NORMALES

Sangre venosa: 60 a 100 mg/100ml

Sangre capilar: 65 a 110 mg/100ml

También podría gustarte