Hoy quiero enseñarte una poderosa oración que puedes hacer en momento de angustia y

desesperación, donde necesites urgentemente la ayuda de Dios, una oración de auxilio que
podemos elevar al cielo para que Dios acuda a nuestro llamado. La biblia dice en Jeremías 33:3
“Clama a Mi y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tu no conoces”; a partir
de la primera parte de este versículo “Clama a Mi y yo te responderé” ¿Qué es clamar? Es implorar
por algo, rogar, solicitar algo en tono de súplica.
Quizás hoy estés pasando por una situación adversa que no se puede solucionar por ninguno, o
que las soluciones que se presentan no están acordes a lo que dice la palabra de Dios.
Pero Dios quiere decirte en estos momentos sin importar el lugar dónde te encuentres, que
nosotros no dependemos de ningún gobierno, de ningún trabajo, de ningún hombre, nosotros
dependemos solamente de Dios, el creador de los cielos y de la tierra, quien ordenó la galaxia y el
cosmos, que gobierna con poder y con autoridad.
Este es el momento en el que debes depositar toda tu confianza en Dios, entrégale a Él tus cargas,
tus necesidades, todo lo que te agobia, lo que te angustia, lo que te atormenta para que Él te
pueda dar descanso.
Deposita toda tu fe y tu seguridad en Dios, confía en Él y verás cómo las cosas comienzan a
cambiar en tu vida y en las manos de Dios vamos a estar seguros.
La Biblia dice en Números 23:19 “Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que
se arrepienta” Él ha prometido estar con nosotros y en este momento de adversidad que es
cuando más lo necesitas, tienes que creer que Él camina a tu lado.
Declara en este momento en el nombre de nuestro Señor Jesucristo que Dios es un Dios de lo
imposible, que Él puede cambiar las cosas a nuestro favor y que nada puede quebrantarse si
estamos bajo su cobertura.
No sientas miedo, siente cómo Su paz llega a tú vida, siente como en este momento tú dolor y tú
desesperación mengua gracias a la poderosa Intervención de Dios en tu vida, Él te da paz y
tranquilidad, pero nunca olvides que Él resuelve las cosas en Su tiempo y a Su manera, por lo tanto
recibamos su paz y tranquilidad mientras esperamos que resuelva nuestra dificultad y en el
proceso nuestro carácter será transformado por su gracia.
Ahora haz la siguiente oración

ORACIÓN EN MOMENTOS DE AFLICCION

Dios todo poderoso, hoy vengo ante ti en medio de esta situación a clamar por tu ayuda.
Necesito que me des paz en medio de esta adversidad; entrego todos mis dolores y aflicciones
creyendo en que tú me ayudarás, que tú me darás las fuerzas para permanecer en pie en medio de
esta angustia.
Este desespero que hoy tengo lo desecho de mi vida y te lo entrego; me despojo de toda carga
que me impide caminar liviano.
Necesito desahogarme y sacar todo lo que tengo dentro de mi corazón, siento rabia, impotencia,
dolor, angustia, desespero; son muchas las cosas que siento en este momento que no puedo
pensar con claridad. Necesito de tu ayuda, hoy clamo por tu ayuda Señor Jesús.
En este momento no comprendo por qué me sucede esto a mí, pero Tú si sabes y has prometido
que estarás conmigo en todo momento, que cuidarás de todas mis necesidades y que nunca me
dejarás solo, tan solo quiero que te sientes al lado mío y me digas que me amas, que todo va a
estar bien.
Sé que he cometido errores y que la situación en la que me encuentro hoy es consecuencia de las
acciones que he hecho anteriormente, por eso te pido que me perdones y que me des una nueva
oportunidad.
Tú sabes cómo me siento en este momento, Tú sabes el dolor que aflige mi alma, permíteme
descansar de esto, permíteme salir victoriosa de esta situación. Tú eres mi sustento y mi fortaleza,
estoy en Tus manos y a partir de ahora camino en fe sobre mi adversidad.
Declaro que toda enfermedad sale de mi vida, declaro que toda situación adversa cambia a mi
favor, declaro que mi corazón tiene paz, que la angustia y la preocupación que me acechan son
echadas fuera en el nombre de Jesús, que el dolor físico y emocional que siento son sanados y mis
situación cambia en el nombre de Jesús, me declaro en victoria y hoy empiezo de nuevo.
Permíteme aprender lo que Tú quieres que aprenda en medio de esta prueba, permíteme no
desfallecer, ni dudar que Tú caminas a mi lado, por favor dame la fe suficiente para creer que esto
puede ayudar a formarme y formar mi carácter, que esta situación límite que estoy viviendo me
ayudará a fortalecer mi fe y a depender totalmente de Ti.
A partir de hoy pongo mi mirada solo en Ti y creo que el Dios que puede mover cielos y mares
puede obrar a mi favor en el nombre de Jesús. Amén