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Senderos de
AUTORIDADES nACIONALES
Valeria Pellizza
Subsecretaria de Desarrollo Turístico
Patricia Vismara
Subsecretaria de Promoción Turística Nacional
Alejandro Schiavi
Subsecretario de Coordinación
Roberto Palais
Secretario Ejecutivo INPROTUR (Instituto Nacional de Promoción Turística)
Alicia Lonac
Directora Nacional de Desarrollo Turístico
Oscar Suárez
Director Nacional de MARKETING Y PROmoción Turística
Verónica Llambrich
Directora Nacional de Calidad Turística
Cecilia Díaz
Directora Nacional de Agencias de Viajes
Carlos Martínez
Director Nacional de Prestaciones Turísticas
Javier Espina
Presidente DEL Consejo Federal de Turismo
Marcela Cuesta
COORDINADORa DEL Consejo Federal de Turismo
Senderos de
Provocar este tipo de turismo, además, es una forma de contribuir con la salud y con la
educación, porque la vivencia de experiencias activas en ámbitos patrimoniales como los
que forman parte de SENDEROS DE ARGENTINA, son opciones de viaje transformado-
ras. Se amplían los horizontes físicos, mentales, espirituales y del conocimiento.
Para avanzar en esta definición, profundizamos el trabajo conjunto con el Sistema Nacio-
nal de áreas Protegidas, anclando la labor en la idea de uso y disfrute de estos espacios
de pertenencia colectiva de los argentinos que permiten adentrarse en lo más profundo
de los ambientes en cada caso.
SENDEROS DE ARGENTINA nos propone meternos de lleno en la película viva que ofrecen
nuestros paisajes regionales llenos de contrastes.
Los otros capítulos que están en preparación y anticipamos en este trabajo son: Huella del
Fin del Mundo en Tierra del Fuego, Huella Guaraní (Misiones), Huella Entrerriana
en el Litoral (caminando o en bicicleta) y Huella Andina del Norte –entre la Quebrada
y las Yungas-
.
Valeria Pellizza
Subsecretaria de Desarrollo Turístico
EQUIPO TéCNICO senderos de argentina
Dirección General
Valeria Pellizza, Subsecretaria de Desarrollo Turístico
Alicia Lonac, Directora Nacional de Desarrollo Turístico
Mariana Pérez Márquez, Directora de Desarrollo de la Oferta
Coordinación Técnica
Florencia Aversa, asesora Subsecretaría de Desarrollo Turístico
Horacio Pelozo, Coordinador territorial de Huella Andina
Contenidos
Tasha Joos, asistente territorial de Huella Andina
Diego Fernando Alonso, asistente territorial de Huella Andina
Cristina Pérez Aguirre, asistente técnico profesional de Huella Andina
Víctor Motta, Coordinador territorial de Huella Guaraní
Victoria Ojeda, Instituto Fueguino de Turismo
Gpque. Jorge Troche, Reserva Provincial Corazón de la Isla
Pablo Trevisán, Ministerio de Turismo de Entre Ríos
Mapas
Mapas GIS: Macarena Pérez Correa- PIXMAP
Mapas generales: D.G. Cecilia Lerz
Diseño Gráfico
D.G. Mariano Masariche
D.G. Karina Porvitina (PNL) - D.G. María Eugenia Jiménez (PNL)
Redacción de Experiencias
Graciela Cutuli
Ricardo Druck
Agradecimientos
A Marcelo Cora, Coordinador MINTUR-APN (Huella Andina).
Al personal de los Parques Nacionales Lanín, Nahuel Huapi, Los Arrayanes, Lago Puelo, Los Alerces,
Pre Delta, Calilegua. En particular a los Gpques. Marcelo Pietrobon, Marcelo Guisasola, Ricardo Pereyra,
Eduardo Jones, Nicolás Ferrari y Julián Alonso.
A la Asociación Argentina de Guías de Montaña
A la Subsecretaría de Turismo de la Provincia del Neuquén
Al Ministerio de Turismo de la Provincia de Río Negro
A la Secretaría de Turismo y áreas Protegidas de la Provincia del Chubut
Al Instituto Fueguino de Turismo (In.Fue.Tur)
A la Secretaría de Turismo de Jujuy
A Ministerio de Turismo de Entre Ríos
Al Ministerio de Turismo de Misiones
A los directores, referentes de turismo, y prestadores de todos los destinos involucrados en el proyecto
RECOMENDACIONES GENERALES
Antes de salir infórmese sobre el estado de los senderos, condiciones del clima, seguridad, horarios
de ingreso para las etapas, etc.
Comience a caminar temprano por la mañana, dado que las etapas son largas. Así tendrá la seguridad
de poder disfrutar la caminata y llegar con luz de día a destino.
Los tiempos de las etapas son estimativos y solo incluyen el tiempo neto de caminata. Hay que
añadirle los intervalos de paradas (descansos, toma de fotografías, comida, etc.) para calcular el
tiempo total que puede demorar.
Solo se debe hacer fuego en los lugares permitidos. Consultar previamente cuáles son los sitios
permitidos.
Antes de salir recuerde cargar agua y llevar siempre consigo 2 litros por persona como mínimo.
Recuerde que no existe señal de celular en la mayor parte de los recorridos, no confíe en este medio
como garantía de seguridad.
Regrese con los residuos que genere en su travesía. Gracias por mantener el entorno tal cual como lo
encontró al llegar y no dejar rastros de su visita.
Para caminar las etapas de Huella Andina es obligatorio registrarse, por su seguridad y la de todos. Consulte las
modalidades de registro.
NEUQUéN
Tramo 1 - ETAPA 1
Villa Pehuenia - Moquehue
Distancia: 14.5 km
Duración: 6 hs Descripción en sentido Norte-Sur: El sendero comienza en el
puente de la Angostura del lago Aluminé. Atravesaremos un bosque de
Dificultad:
pehuenes con poco desnivel en el camino vecinal. A 1,7 km. de distancia
Estacionalidad: Noviembre – Marzo.
pasamos cerca de la costa del lago Aluminé, con una excelente vista
de Villa Pehuenia. Seguiremos el camino hasta la oficina de informes
Información turística: Secretaría Municipal e ingreso a la tierra de la comunidad Mapuche Lof Puel. Más adelante
de Turismo de Villa Pehuenia. Ruta encontramos un camino a la derecha que nos lleva hasta la Laguna
Provincial Nº 13 23. Centro Cívico (02942) Kechulaufquen. Allí podremos encontrar el Camping Kechulaufquen
498044. www.villapehuenia.gov.ar donde podremos adquirir diferentes productos artesanales y dulces que
produce la comunidad Puel. También tienen una variada gama de paseos
Servicios: Camping Kechulafquen de la guiados para ofrecernos. Un poco más adelante, el camino nos guiará
Comunidad Puel (02942) 15-471277 y hasta la Laguna Matethue, la más grande de la zona. El camino tuerce
15-517113. Camping El Puente. Final: a la derecha para dirigirse a la costa del lago Moquehue, en cuya playa
en Moquehue: Camping Trenel (02942) podemos hacer un descanso. Vadeando el arroyo Blanco, continuaremos
15-487202 y 15-664720. Distancia a hacia el sudoeste por bosques de pehuenes, cipreses, lengas y ñires.
Moquehue 1,5 km. En transición ecotonal, el bosque se irá convirtiendo, de a poco, en un
tenue sendero con vegetación baja de ñires y coirones que faldea la
Transporte público: hasta Moquehue
cuesta. Deberemos prestar atención a una zona de puzolana volcánica,
desde Villa Pehuenia. Consultar horarios de
ya que el terreno puede desmoronarse. Más adelante, y luego de pasar
omnibus en oficina de informes.
junto a un viejo galpón, llegaremos al camping organizado Trenel, que
Precauciones: vado del arroyo Blanco posee servicios completos. Si decidimos quedarnos allí, debemos avisar
crecido en invierno y primavera. de nuestra llegada al dueño del camping, a fin de que él se contacte con la
oficina de Turismo y dé aviso de nuestra llegada. Desde el Camping Trenel,
Previsiones: calzado extra para vadear el la distancia a Moquehue es de 1,5 km.
arroyo Blanco.
Puntos de interés: comunidad Mapuche
Puel. Lagunas Verde, Ralihuen, Pichún
y Matehue, playas y miradores. Paso
Icalma. Volcán Batea Mahuida. Bosques de
pehuenes. ALOJAMIENTO PROVEEDURÍA CAMPAMENTO ÓMNIBUS TELÉFONO INFORMACIÓN
PÚBLICO
1.266 m
1.200 m
1.165 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,5 km 14,5 km
NEUQUéN
NEUQUéN
Moquehue - Puesto Viejo
Tramo 1 - ETAPA 2
Distancia: 12,5 km
Descripción en sentido Norte-Sur: Para iniciar el
Duración: 6 hs
camino deberemos cruzar el puente del río Quillahue y tomar
Dificultad: un camino vecinal que sale hacia la derecha. El sendero tiene
Estacionalidad: Diciembre – Marzo un desnivel que llega hasta un pequeño claro a 1250 msnm.
Allí nos encontraremos con dos sendas, una de las cuales sube
Información turística: Secretaría Municipal de forma sostenida. Esa es la senda que nos llevará, a 600
de Turismo de Villa Pehuenia. Ruta Provincial m o quince minutos de caminata, a un cruce donde hay una
Nº 13 y 23. Centro Cívico (02942) 498044. huella de vehículos. Tomaremos a la derecha por ese camino
www.villapehuenia.gov.ar vehicular. Luego de una caminata de 1,3 km nos encontraremos
con un camino similar que baja por la derecha, pero nosotros
Servicios: Inicio: en Moquehue. Camping deberemos mantenernos en la misma huella tomando por
Trenel (02942) 15487202 – 15664720. la izquierda. Continuaremos en ese camino forestal hasta
Distancia a Moquehue 1,5 km. llegar a un cauce de piedras sueltas de color claro, donde
Final: en Puesto Viejo: sector de acampe sin finaliza la huella vehicular. Desde allí el camino se transforma
servicios. en un bosque abierto de pehuenes sin vegetación baja o
Transporte público: hasta Moquehue sotobosque. Al llegar a la zona del lenguero achaparrado, lo
desde Villa Pehuenia. Consultar horarios de rodearemos por la derecha y ascendemos en forma sostenida
ómnibus en oficina de informes. al portezuelo o filo del cerro Plomo, a 1850 msnm. Desde el
portezuelo comenzaremos el descenso desplazados hacia la
Precauciones: dependiendo del año, puede derecha, donde veremos unos pequeños pedreros claros para
haber nieve en el portezuelo. encontrar la senda entre las lengas achaparradas. Bajaremos
por el lenguero y el lecho del arroyo hasta encontrar un
Previsiones: llevar equipo para pernoctar en antiguo camino maderero que baja por la margen izquierda del
Puesto Viejo (Vivac): carpa, bolsa de dormir, arroyo Blanco. A 3 km del portezuelo hallamos el Puesto Viejo
calentador, provisiones y ropa de abrigo. maderero donde podremos hacer un vivac y descansar hasta el
Puntos de interés: bosques de pehuenes, día siguiente.
antiguos caminos madereros, vistas del
Volcán Lanín.
1850 m
1500 m
1250 m
1158 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,5 km
NEUQUéN
Tramo 1 - ETAPA 3
Puesto Viejo - Ñorquinco
Distancia: 11,3 km
Duración: 4 hs Descripción en sentido Norte-Sur:
Dificultad: Luego de pasar la noche en el vivac de
Puerto Viejo, continuaremos la marcha
Estacionalidad: Diciembre – Marzo descendiendo siempre por la margen
izquierda del arroyo Blanco. La senda tiene
Información turística: Centro de Informes de pendientes suaves y a los 2 km se abre,
la localidad de Ñorquinco. con vegetación baja, en forma de planicie.
Llegaremos a una zona de pampas de
Servicios: Inicio: en Puesto Viejo: sector
coirones donde encontraremos un cruce
de acampe sin servicios. Sólo vivac con de caminos. Desde allí seguiremos el
carpa. Final: en Ñorquinco: Camping Apu descenso por el camino de la izquierda,
Rawi. Camping El Fortín. Camping y cabañas siempre en dirección sur. En el trayecto de
Nompehuen www.nompehuencamp.com. 4 km que nos llevará hasta la ruta vamos
Camping y cabañas Ecocamping (02942) a ver unos cuadros para ganado con dos
496155 www.ecocamping.com.ar. Camping tranqueras. Continuaremos el descenso por
Quimey Mapu (02942) 497599. Cabañas un camino vehicular de tierra. Finalmente,
Pampa Gutiérrez. llegaremos a la pampa que nos dejará,
Transporte público: consultar horarios en después de cruzar el vado del arroyo
oficina de informes. Blanco, junto a la proveeduría. A 100 m
se encuentra la Ruta Provincial 11 que
Precauciones: coordinar el transporte. comunica Ñorquinco con Moquehue.
Previsiones: ropa de abrigo, botas de
trekking, guantes, gorro de sol y de abrigo,
lentes UV, protector solar.
Puntos de interés: bosques de pehuenes,
lago Ñorquinco. Basaltos columnares,
volcanes.
ALOJAMIENTO CAMPAMENTO PROVEEDURÍA INFORMACIÓN TELÉFONO PRIMEROS
PÚBLICO AUXILIOS
1527 m
1250 m
1071 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 11,3 km
NEUQUéN
Ñorquinco – Vivac Pampa de Castro
Tramo 2 - ETAPA 4
Distancia: 15 km
Duración: 6 hs Descripción en sentido SUR-NORTE: Antes de
comenzar a transitar por la senda debemos pasar por el
Dificultad: Centro de informes de Ñorquinco para hacer el registro de
Estacionalidad: Noviembre – Mayo salida y obtener la información más reciente. La entrada del
sendero se encuentra camino al área de uso diurno de la
Registro obligatorio: Centro de Informes o cabecera este del lago. Luego de pasar frente a la Seccional
Seccional de guardaparque de Ñorquinco. de Guardaparque, el camino transcurre a la vera del mismo
durante dos horas. El incendio de la temporada de verano
Información turística: Centro de Informes de
2014 llegó hasta aquí, podremos ver sus consecuencias y
Ñorquinco. como, poco a poco, la vegetación resurge de las cenizas.
Servicios: Inicio: en Ñorquinco: Camping Apu En esta zona costera tendremos la posibilidad de ver dos
Rawi. Camping El Fortín. Camping y cabañas cascadas aledañas al sendero, producto de un contrafuerte
Nompehuen www.nompehuencamp.com. de piedra que enmarca el camino. Más adelante la senda
Camping y cabañas Ecocamping (02942) se aleja del lago y comienza un ascenso en dirección sur,
496155 www.ecocamping.com.ar. Camping atravesando una pradera de césped. El camino nos guiará
Quimey Mapu (02942) 497599. Cabañas hasta la cascada de Coloco, que queda abajo, a la derecha.
Pampa Gutiérrez. Final: en Pampa de Castro: Luego pasaremos por un ñirantal que ha sufrido un incendio
sector de acampe sin servicios. en 1985 y se encuentra actualmente en recuperación.
Disfrutaremos a lo largo del recorrido de un entorno
Transporte público: desde Aluminé en boscoso compuesto por araucarias, coihues y robles pellín.
temporada, averiguar frecuencias y horarios A las cinco horas de caminata nos enfrentaremos con la
de omnibus. zona más alta del paso. Cruzaremos una zona de mallines
de altura llamada mallín de Chufquen y llegaremos a la
Previsiones: llevar equipo para pernoctar Pampa de Castro, donde esta el área de pernocte. En esta
en la Pampa de Castro (Vivac): carpa, bolsa etapa encontraremos cursos de agua cada dos horas.
de dormir, calentador, provisiones y ropa de
abrigo.
Puntos de interés: comunidades mapuches
Ñorquinco y Aigo. Lagos Ñorquinco y
Nompehuen, cascada Coloco, volcán Clugnu
Chompiru, pinturas rupestres.
CAMPAMENTO INFORMACIÓN PROVEEDURÍA MIRADOR CASCADA COMUNIDAD CABECERA
MAPUCHE DE ETAPA
5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,5 km 15 km
1379 m
1350 m
1300 m
1235 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,5 km 14,8 km
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SENDEROS DE ARGENTINA
NEUQUéN
Tramo 3 - ETAPA 6
Lago Ruca Choroy - Vivac Malalco Chico
Distancia: 11,8 km
Descripción en sentido Norte-Sur: La etapa se inicia en
Duración: 6 hs
el Centro de Informes de Ruca Choroy, abierto desde diciembre
Dificultad: hasta febrero, y donde debemos hacer obligatoriamente el
Estacionalidad: Diciembre – Marzo registro de salida. Si estuviera cerrado, debemos hacerlo en la
Seccional de Guardaparques.
Información turística y registro obligatorio: A 100 m de allí se encuentra el Lago Rucaco, desde donde
Centro de Informes o Seccional de parte el sendero, a la izquierda y en ascenso. Las primeras dos
Guardaparque de Ruca Choroy. horas de caminata transcurren por un bosque de araucarias.
El camino va ganando altura hasta los 1550 msnm, donde se
Servicios: Inicio: en Ruca Choroy: http:// inicia una nueva travesía de dos horas por un sector de lengas
campingruka.blogspot.com.ar. Camping achaparradas. Las vistas panorámicas son imponentes, y se
Trempain (02942) 15-5555633 / 15-635286. pueden apreciar el volcán Clugnu Chompirú y el lago Ruca
Camping Calfikrita (02942) 496599 / Choroy. Desde allí ingresaremos a un ambiente de alta montaña,
15-5555633 / 15-635286. Final: en Malalco con pedreros y vegetación baja, a una altura promedio de
Chico: sector de acampe sin servicios. 1800 msnm. La caminata dura otras dos horas y rodea el
Transporte público: averiguar por traslado cerro Ruca Choroy por su ladera este. Al final de la travesía se
desde Aluminé a Ruca Choroy. encuentra el mallín Malalco Chico donde se encuentra el lugar
para pernoctar. Quienes tengan experiencia en montaña pueden
Precauciones: Realizar esta etapa con buen optar por completar el tramo en un solo día y evitar cargar la
clima. Dada la altitud, se pueden presentar carpa. Igualmente se debería llevar suficiente abrigo y bolsa
condiciones de nubosidad espesa que de dormir, por cualquier eventualidad. En esta etapa es posible
dificulten la visión de las señales, además de abastecerse de agua cada dos horas.
neviscas en la zona alta.
Previsiones: llevar equipo para pernoctar
en Malalco Chico (Vivac de altura), carpa,
calentador, bolsa de dormir, provisiones y
ropa de abrigo.
Puntos de interés: comunidad Mapuche ALOJAMIENTO PROVEEDURÍA CAMPAMENTO ÁREA DE USO TELÉFONO INFORMACIÓN
Aigo. Mirador de lago Ruca Choroy y valle del DIURNO PÚBLICO
Calfiquitra.
2012 m
1750 m
1500 m
1235 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 11,8 km
NEUQUéN
Tramo 3 - ETAPA 7
Vivac Malalco Chico - Lago Quillén
1859 m
1500 m
1250 m
980 m
1 km 2 km 3 km 4 km 5 km 6 km 7 km 8 km 9,4 km
NEUQUéN
Tramo 4 - ETAPA 8
Puerto Canoa - Cara Sur Volcán Lanín
Distancia: 10 km (ida) / 20 km (ida y vuelta) Descripción en sentido Norte-Sur: Partiendo desde el Centro
Duración: 9 hs (ida y vuelta) de Informes, pasaremos por delante de la Seccional de Guardaparques,
Dificultad: y giraremos en dirección al Volcán Lanín para encontrarnos con
su cara sur. Cruzamos una extensa pampa de radales y cipreses
Estacionalidad: Diciembre – Abril atravesada por pequeños cursos de agua. Manteniendo la silueta del
Registro obligatorio: Centro de Informes o volcán Lanín al frente, caminamos aproximadamente una hora hasta
Guardaparque de Puerto Canoa. cruzar un arroyo por un puente rústico. Aquí comienza un bosque de
Información turística: Secretaría de Turismo coihues de alto porte. El sendero tiende a la derecha, hacia el cauce
de Junín de los Andes. Padre Milanesio y del lago Rucu Leufú. Es una zona de suelo pedregoso, donde aparecen
Coronel Suárez (02972) 491160 / 492575 los primeros ejemplares de pehuén. Siguiendo la señalización,
www.junindelosandesturismo.wordpress.com. cruzamos un pequeño brazo del arroyo a la derecha, para volver a
Secretaría de Turismo de San Martín de los cruzarlo más adelante, otra vez a la izquierda. Allí comienza un camino
Andes. Av. San Martín y Juan Manuel de Rosas ascendente, en caracoles, rodeados de un bosque alto de coihues y
(02972) 425500 www.sanmartindelosandes. lengas. La senda sube considerablemente hasta alcanzar una zona
gov.ar. Centro de Informes en el portal de de lengas achaparradas. Y atravesándolas nos encontraremos con
ingreso al Parque Nacional Lanín en sector Lago unos mallines de altura, cercanos a una cascada. Al cruzar el arroyo,
Huechulafquen y en Puerto Canoa.
nos encontraremos con el final de la etapa. La vista desde aquí es
Servicios: Inicio: hosterías, campings y magnífica. Una punta glaciaria sobre la pared sur del volcán Lanín nos
proveeduría, teléfono, gendarmería, puesto muestra la ruta de ascenso denominada “Colada Mazoldi”, en honor al
sanitario. Excursiones lacustres, comedores, primer escalador. Luego de descansar en el área, debe emprenderse el
cabalgatas. Final: sin servicios. regreso por la misma vía de ascenso.
Transporte público: desde Junín de los Andes
a Puerto Canoa, y entre Junín y San Martín de
los Andes. Transporte Castelli. En Junín de Los En este caso concreto hay que prever la ida y la vuelta, ya que
Andes, Los Álamos 247. (02972) 491557. www. no se puede pernoctar en el final de esta etapa.
transportecastelli.com.ar
Precauciones: llevar ropa de abrigo, recambio y
calzado de trekking.
Previsiones: salir temprano. ALOJAMIENTO PROVEEDURÍA INFORMACIÓN ÓMNIBUS TELÉFONO PRIMEROS
PÚBLICO AUXILIOS
Puntos de interés: contacto con comunidades
Mapuches Lafquenche y Raquitué. Vistas a
glaciares del Volcán Lanín y panorámicas de los
lagos Huechulaufquen y Paimún. GUARDAPARQUE MIRADOR EXCURSIONES
EN LANCHA
COMUNIDAD
MAPUCHE
CABECERA
DE ETAPA
1731 m
1500 m
1250 m
914 m
1 km 2 km 3 km 4 km 5 km 6 km 7 km 8 km 9 km 10 km
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SENDEROS DE ARGENTINA
NEUQUéN
Tramo 4 - ETAPA 9
Puerto Canoa - Aila
1202 m
1125 m
1050 m
975 m
897 m
1 km 2 km 3 km 4 km 5 km 6 km 7 km 8,2 km
NEUQUéN
Tramo 4 - ETAPA 10
Aila - Termas de Epulafquen
CASCADA CABECERA
DE ETAPA
1174 m
1125 m
1050 m
975 m
906 m
ETAPA DE CONEXIóN
CAMPAMENTO PROVEEDURÍA ÁREA DE USO GUARDAPARQUE CASCADA CAMINATA
DIURNO
CABECERA
DE ETAPA
1071 m
1050 m
1000 m
923 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 13 km
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NEUQUéN
SENDEROS DE ARGENTINA
NEUQUéN
Tramo 5 - ETAPA 12
Laguna Verde - Rincón de los Pinos
1499 m
1250 m
1000 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,5 km 15 km 16,2 km
NEUQUéN
Tramo 5 - ETAPA 13
Rincón de los Pinos - Auquinco
REFUGIO DE CABECERA
MONTAÑA DE ETAPA
1029 m
1000 m
950 m
909 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 11,5 km
43
SENDEROS DE ARGENTINA
NEUQUéN
Tramo 5 - ETAPA 14
Refugio Auquinco - Puerto Arturo
ETAPA DE CONEXIóN
1093 m
1050 m
1000 m
950 m
909 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,6 km
NEUQUéN
Tramo 5 - ETAPA 15
Pto. Arturo - Laguna Rosales
Distancia: 15 km Descripción en sentido Norte-Sur: Esta es una
(10,5 a villa Lolog + 4,5 a Rosales)
955 m
893 m
1003 m
900 m
825m
750m
649 m
1 km 2 km 3 km 4 km 5 km 6 km 7 km 8 km 9 km 10 km 11,4 km
NEUQUéN
Tramo 6 - ETAPA 17
Quila Quina – Puerto De Casanova
ETAPA DE CONEXIóN
EXCURSIONES BICICLETAS CABALGATAS COMUNIDAD CABECERA
EN LANCHA MAPUCHE DE ETAPA
909 m
825 m
750 m
651 m
1 km 2 km 3 km 4 km 5 km 6 km 7 km 8 km 9 km 10,3 km
NEUQUéN
Tramo 6 - ETAPA 18
Puesto de Casanova – Ruca Ñire
1125 m
1000 m
900 m
800 m
700 m
650 m
NEUQUéN
Tramo 6 - ETAPA 19
Ruca Ñire - Hua Hum
Esta etapa cuenta con ESTACIONES O SUB ETAPAS
Distancia: 14 km
Distancias de Ruca Ñire a: Pucará: 5.5 km Chachin: 10 km Hua Hum :14 km
Duración: 4 hs
Duración a : Pucará: 3,5 hs Chachin: 4,5 hs Hua Hum : 6 hs
Dificultad:
Dificultad: BAJA BAJA BAJA
Estacionalidad: Todo el año.
Descripción en sentido SUR-NORTE: El sendero da inicio en Ruca
Registro obligatorio: en el Centro de Ñire. Comenzaremos con un suave trayecto ascendente hasta llegar a
Informes de Van Dorsser, en Hua Hum. una bifurcación. Tomaremos por la derecha. El camino, que tiene subidas
Información turística: Centro de Informes y bajadas leves, mantiene mayormente su nivel. Encontraremos buenas
y Museo Van Dorsser. Hua Hum, ruta vistas panorámicas del lago Lacar. La vegetación comienza a tener
características selváticas, y ejemplares típicos de la selva Valdiviana, como
provincial 48.
el palo santo, arrayanes, lianas leñosas y helechos de gran porte. Más
Servicios: Inicio: en Ruca Ñire, domo adelante el sendero se ensancha y comienza el descenso hasta el Paraje
para pernocte. En Pucará: Camping libre Pucará, pasando por la población Castro y la Seccional de Guardaparques
y proveeduría. En Cachín: proveeduría, de Pucará. Deberemos dar aviso de la llegada. Unos metros por delante
camping libre y cabalgatas. En Hua Hum: encontraremos el Camping Agreste de Pucará, que tiene proveeduría
Camping Don Bartolo (02972) 42-6512. y baños. Si continuamos en dirección a Chachín, cruzaremos una
Hostel y restaurante Hua Hum (02972) pasarela colgante y luego un camino vehicular que tiene unos 4,5 km.
428142. www.hosteriahuahum.com.ar aproximadamente. En Chachín veremos una pequeña proveeduría que
está a cargo del poblador Hernández, y un área de acampe libre sobre el
Transporte público: Empresa KoKo. Dos lago. Al cruzar el puente de Chachín, la senda deja el camino vehicular
frecuencias diarias enero y febrero desde y nos dirige a una bonita playa llamada Puerto Elvira. A partir de ahí
Hua Hum a San Martín de los Andes. comienza el ascenso por un bosque alto que cruza el camino vehicular
Resto del año sin servicios. Navegación en dos oportunidades, hasta llegar al puente del río Hua Hum donde
desde el muelle de la Hostería Hua Hum encontraremos la entrada al camping Don Bartolo. Al otro lado del puente,
a San Martín de los Andes. Naviera Lacar a 300 mts., podremos ubicar el Centro de Informes Van Dorsser, donde
y Nonthue. (02972) 428427 – 427380 deberemos dar parte de nuestra llegada. En la hosteria Hua Hum hay hostel
www.lagolacarynonthue.com.ar y cabañas. El transporte público a San Martín de los Andes tiene dos
frecuencias diarias durante los meses de enero y febrero.
Previsiones: llevar traje de baño,
hermosas playas.
Puntos de interés: playas, lagos Lacar ALOJAMIENTO PROVEEDURÍA CAMPAMENTO ÓMNIBUS INFORMACIÓN RESTAURANTE
773 m
750 m
649 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,5 km 14 km
NEUQUéN
Tramo 7 - ETAPA 20
Villa Traful- Camping Cataratas
Distancia: 9,2 km
Duración: 2,5 hs Descripción en sentido Norte-Sur:
Se trata de una etapa de conexión que
Dificultad:
vincula la comuna de Villa Traful con el
camping del arroyo Cataratas, situado sobre
Estacionalidad: Todo el año. la Ruta Provincial 65. El sendero corre en
Información turística: Oficina de Turismo forma paralela a la ruta. Por momentos se
de Villa Traful. Ruta provincial Nº 65. (0294) superpone y en ocasiones baja hasta la
4479099 www.villatraful.gov.ar. Secretaría de playa. Atraviesa, en un principio, un bosque
Turismo Municipal de Villa La Angostura. Av. alto de coihues y cipreses, hasta el paraje
Arrayanes 9. (0294) 4494124 Piedra Mala, donde comienza un bosque
www.laangostura.gov.ar de vegetación baja. Allí encontraremos
el camping agreste Cataratas. Avisar en
Servicios: Camping Arroyo Cataratas (0294) el camping a la familia Lagos. Esta etapa
154643101 conviene hacerla en vehículo por el alto
transito en la ruta.
Transporte público: a Villa Traful desde Villa
La Angostura y San Martín de los Andes:
Empresa La Araucana. Desde Bariloche: Vía
Bariloche, SITA y Albus.
Precauciones: senda por ruta provincial de
alto transito.
Previsiones: estar atento en curvas
pronunciadas. Se sugiere hacerlo en vehículo.
Puntos de interés: Villa Traful y lago Traful.
ETAPA DE CONEXIóN
ALOJAMIENTO PROVEEDURÍA CAMPAMENTO INFORMACIÓN TELÉFONO ÓMNIBUS
PÚBLICO
900 m
866 m
808 m
2,5 km 5 km 7,5 km 9,2 km
1376 m
1250 m
1000 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 14 km
NEUQUéN
Vivac Tapera de Lagos - Cerro Bayo
Tramo 7 - ETAPA 22
1564 m
1250 m
1045 m
2,5 km 5 km 7,5 km 12 km
NEUQUéN
Tramo 7 - ETAPA 23
Angostura – Bosque de arrayanes
1000 m
919 m
900 m
800 m
778 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 11,5 km
3 días - 2 noches
Experiencia: vuelta al lacar
La tierra prometida Sólo hay que dejarse llevar. Dejar de lado apuros y
relojes, y empezar a descubrirla.
La Patagonia es una permanente invitación a los Un buen punto de partida puede ser el Centro Cí-
sentidos. vico, donde alrededor de la plaza San Martín se
En un país con poco más de cuatro siglos de his- despliegan el edificio municipal, el banco Nación, el
toria, mirar hacia el sur es algo más que viajar. Es la correo, los puestos de artesanos y las oficinas de Tu-
increíble posibilidad de asomarse a un pedacito de rismo. Allí, entre renovadas aguas danzantes, cente-
tierra que empieza a dar sus primeros pasos. A des- narias araucarias y la figura del Libertador señalando
cubrir un territorio que, incorporado a la Nación ape- el poniente, late el corazón de la ciudad.
nas un siglo atrás, aún tiene mucho de inexplorado, y Desde allí, unos pocos pasos conducen al Museo
que es toda una reserva de espacios y sensaciones Primeros Pobladores, un inmueble originalmente
vitales: agua dulce, aire puro, bosques, y una exten- sede de la primera Comisión de Fomento, recuperado
sión inabarcable de absoluta desmesura. para exhibir diferentes muestras que cuentan la his-
Y allí, donde esa mítica mención comienza a asomar toria regional.
desafiante partiendo el mapa de la Argentina con un Cruzando la plaza, asoma otro edificio de visita
tajo de asombros, aparece San Martín de los Andes. ineludible: la antigua intendencia del Parque Nacio-
Sin dejarse encasillar en términos como “pueblo” nal Lanín. Un monumento arquitectónico de piedra y
o “ciudad”, el abigarrado centro urbano se despliega madera, producto del denominado “período funda-
sobre un valle que mucho tiene de encantamiento. cional” de dicho organismo nacional, que lleva con
Enclavado entre montañas, ajeno por vocación propia orgullo la marca del arquitecto Alejandro Bustillo, fi-
a cualquier vinculación con los que se podría llamar gura emblemática de dicha profesión en la Argentina.
“vicios de una gran ciudad”, su cotidiano discurrir es Devenido en Centro de Visitantes y Museo, en sus
un bálsamo para todo aquel que tenga la buena idea salas resume buena parte de la influencia que tuvo
de visitarlo. Parques Nacionales en el desarrollo regional, y suma
La hotelería, la gastronomía, las artesanías y el es- una colorida y sensorial recorrida por las particulares
pacio todo exhiben orgullosos su absoluta dedicación especies animales y vegetales del lugar, para permitir
a los pequeños detalles. La decoración de los am- al visitante comprender el porqué de la importancia
bientes, la calidad de los servicios, el fuego en las de conservar la naturaleza en todas sus formas.
chimeneas, los jardines ornamentados por rosas, Sobre la calle principal, se ofrecen los servicios de
tulipanes y lavandas, la madera y la lana hechizadas un renovado transporte que resalta notablemente en
por las hábiles manos de artesanos, el sabor intenso el paisaje: un ómnibus rojo de dos pisos, de origen
de los frutos del bosque haciéndole un guiño a los inglés, reciclado y adaptado para brindar al visitante
paladares exigentes, ciervo, jabalí y trucha invitantes lo que se denomina un “city tour”, que no es otra
desde las cocinas de los restaurantes, las plazas, los cosa que un recorrido guiado por el casco urbano,
árboles, el lago y un bosque al alcance de la mano, ideal para descubrir antiguas casas de pioneros, en
son apenas algunas de las muchas y bienhechoras las cuales aún se conserva intacto el espíritu de los
postales que abrumarán el alma con un asombro ol- primeros años del pueblo.
vidado. A unas pocas cuadras, el listado de museos se
completa con “La Pastera, Museo del Che”; un es- y sueños de conquistadores, aventureros, misione-
pacio originalmente propiedad del Parque Nacional ros, colonos y pioneros, dejándose atrapar por una
Lanín en el cual Ernesto Guevara y Alberto Grana- naturaleza de fábula en la que aún todo está por des-
dos encontraron refugio durante su periplo por la cubrirse.
Patagonia, recuperado por los trabajadores para dar El equipaje es liviano; sólo hay que tener a mano
testimonio de la presencia del por entonces sólo un la capacidad de asombro. Porque, a no engañarse,
joven entusiasta que, entre las maderas y el forraje de mas allá de lo que se advierte en la arquitectura de
lo que era una precaria caballeriza, soñó sin saberlo piedra y madera, en veredas arboladas y aromas a
al Che. carnes salvajes asándose en las parrillas, el placer
La sala de exposiciones municipal, el Centro Cul- está en cerrar los ojos y dejarse atrapar por un sen-
tural de la Cooperativa Telefónica, y la “Casa Georg” timiento de tranquilidad y paz interior que envuelve
son espacios ideales de consulta obligatoria para toda la región con infinita sabiduría.
acercarse a las artes, en una ciudad que ha hecho de Es el momento de tomarse de la mano con la natu-
ellas y la cultura en general uno de los pilares de su raleza, abrirse a los sentidos y dejarse llevar por un
fisonomía cotidiana. renovado espíritu, abandonando la postura de mero
Más allá del casco urbano, miradores, senderos, observador para descubrirse en la íntima convicción
cascadas y naturaleza en estado puro se despliegan de ser absoluto protagonista.
sin pudor alguno, en un verdadero acto de encanta- Despreocuparse de memorizar nombres, lugares,
miento que hará de la estadía del visitante una abso- fechas históricas o referencias, para alimentar el
luta delicia para los sentidos. alma de nuevas sensaciones y renovadas caricias.
Uno de los principales centros turísticos de la pro- Darle riendas al impulso, y beberse de un sorbo todo
vincia del Neuquén, estratégicamente ubicado sobre el sabor de una tierra preñada de historias impen-
la margen del lago Lácar, es además el punto de sadas.
partida del sendero Huella Andina: un recorrido que Es momento de salir a su encuentro, porque allí
permite transitar los mismos caminos, sensaciones precisamente radica el misterio de la Patagonia. En
que su desmesura convierte a todo viaje en una ex- Una huella, tres lagos
periencia, y que visitarla no es una suma de postales,
sino una absoluta multiplicación de sensaciones. La lancha vuelve a surcar las aguas alejándose del
muelle de madera. Es el momento de ajustar los co-
De la mano de la Naturaleza rreajes de la mochila, empuñar los bastones y liberar
al cuerpo entregándolo a las emociones.
espaldas al casco urbano, el rostro se enciende La cascada del arroyo Grande le pone música al
con el cosquilleo del viento y la inmensidad de las primer tramo del recorrido. Las aguas que arrastran
aguas del lago desplegándose como un abanico in- la memoria de la nieve, guardada en las altas cum-
terminable. bres, se despeñan tumultuosas sobre rocas y corte-
Allí, donde la ciudad parece querer acostarse so- zas. La marcha empuja al caminante entre el humo
bre el enorme espejo de agua, éste hace honor a ello de las chimeneas, que deja escapar el aroma del pan
multiplicando pictóricamente las montañas sobre su recién horneado entre la penumbra rural de las coci-
superficie, en otro engaño sutil del paisaje por el cual nas de campo. El cuerpo se desprende de viejos can-
el visitante se encuentra sin saber dónde termina el sancios, y se envuelve en un agotamiento que mucho
lago y empieza el cielo. tiene de atávica felicidad.
Pero en algo sí tendrá certezas: cuando el barco La sensación se repite. Nuevamente, el bosque y la
empiece a navegar para transportarlo hasta la villa Patagonia no son aquello que vemos, sino que aquello
Quila Quina –punto de partida del tramo peatonal del que sentimos. El aire impregnado del aroma dulzón de
recorrido- será el momento de cerrar nuevamente los la tierra y las bayas silvestres, el paso amortiguado
ojos y disfrutar de saber que no hay vuelta atrás, y por una alfombra vegetal tejida con hojas que guardan
que entre el graznido de los gaviotines que revolotean toda la policromía del otoño cordillerano, el sabor del
sobre la embarcación, la transparencia brutal de las agua fresca de los arroyitos saciando una sed que,
aguas y la sonoridad del silencio natural, el privilegio paradójicamente, venimos a descubrir no fue saciada
de ser un afortunado no se lo podrá arrebatar nadie. en muchos años...
Media hora de navegación, y playas de arena Es momento del primer descanso, donde la Huella
blanca con árboles brotando del lago, ovejas pas- Andina y los pobladores se unen para dar la bien-
tando y casitas desplegándose en las laderas, le venida al viajero. Los cercos de palo a pique, las va-
darán la bienvenida. El roble pellín (“corazón duro”
en la lengua ancestral de los pueblos originarios) do-
mina la escena; el bosque late en cada hoja, en cada
corteza y en cada rama desplegándose en busca
del sol. La historia entremezcla sensaciones varias:
el despojo territorial que aún sangra en la memoria
del pueblo mapuche, el lento transitar de un siglo de
historia que sigue escribiéndose día a día, y un pre-
sente de integración que permite al visitante acercarse
a una cultura que persiste tenaz en tejidos, artesanías
en madera, dulces caseros y gestos simples, y que se
impone absoluta en toda la toponimia regional, dando
sentido a fábulas, leyendas y misterios.
La naturaleza no está sola. El Parque Nacional La-
nín despliega su abrazo protector sobre una maravi-
llosa enumeración de vida en todas sus formas: está
en las montañas, asegurando la limpidez de las aguas;
en el latido oculto de una fauna particular; en el vuelo
de las aves, y en la tranquilidad del bosque para que
pueda seguir perpetuando su invalorable beneficio de
aire puro.
cas, el fuego y la mesa bajo los árboles son la mejor Hay muchas historias multiplicadas en este tramo
escenografía para esperar las estrellas de un cielo del recorrido. Los árboles frutales, los álamos, tilos
estremecedor. y restos de muelles traen voces de los primeros co-
En la mañana, los pasos seguirán hacia el lago lonos, cuando la madera era el oro que convocaba
Escondido, un pedacito de paraíso celosamente res- perseverancias para desafiar la inclemencia de una
guardado de la avidez humana. tierra lejana e inhóspita. En Ruca Ñire, la toponimia
¿Dónde guardar tanto asombro? La plenitud ali- convierte en “casa del zorro” una bahía que supo
menta los músculos para poder vencer el ascenso; del esfuerzo descomunal de hacheros y bueyes,
una laguna repleta de juncos se adivina en la espe- y que hoy se abre invitante para que el caminante
sura, y el camino se interna en un bosque milenario, recupere fuerzas y siga alimentando un asombro
dueño absoluto del paisaje. merecido.
Unos golpes repican escabulléndose entre el fo- El aire se multiplica en sensaciones que cambian
llaje. Los pájaros carpinteros se alimentan trepando a lo largo del año. En primavera es tiempo de flores
por las cortezas, y el grito breve de una gallareta perfumándolo todo; en verano es momento de fru-
reclama su alerta entre las cañas colihue. De repen- tillas silvestres, chapuzón en las aguas del lago y
te, helechos gigantes cubren toda la senda, y una días que sucumben a un anochecer de medianoche.
conjunción de seres mitológicos, duendes y refe- Otoño es sinónimo de una policromía absoluta, en-
rencias al mejor cine de aventuras se ofrece para tre ocres, rojos y amarillos que pintan las hojas de
acompañar al viajero. los árboles, la rosa mosqueta abriéndose en frutos,
El bosque corre finalmente su telón, y la esceno- y las manzanas silvestres ofreciéndose sin pudor a
grafía se completa con un balcón natural sobre el los labios del viajero.
lago, la corteza canela de los arrayanes y la trans- Es el turno de atravesar el paraje Pucará, donde
parencia de las aguas envolviéndolo todo. el lago Lácar se convierte en el lago Nonthué para
continuar su marcha hacia el océano Pacífico, con- en un bosque que soporta unos de los regímenes de
trariando al resto de los espejos de agua de la región, precipitaciones mas altos del Parque Nacional.
que desembocan pacientemente hacia el Atlántico.
Otra vez la toponimia viene en ayuda del visitante.
Y Pucará (“fortaleza”) remite a conquistadores veni- Un territorio de colonos y aventureros
dos del otro lado del mundo, mientras abundan los
indicios de un fuerte español cuyos restos se man- La huella comienza a transitar el final del reco-
tienen ocultos en la otra orilla del lago. Un ventanita rrido. Dejando atrás Pucará, el camino –ya vehi-
al pasado en nada descabellada, considerando que cular–conduce hasta el paraje Chachín, un antiguo
precisamente desde este lugar, la “angostura” en- asentamiento que también guarda la memoria forestal,
tre ambos lagos, se controlaba estratégicamente el actividad excluyente en el desarrollo del lugar.
paso de todo aquel que transitara la región tres siglos Doña Ema Vergara, partera del lugar y referente in-
atrás. eludible a la hora de rememorar pasados, comparte
La falta de caminos, y los pasos escondidos en la allí espacios con la familia Hernández, íntimamente
espesura, saben del estremecimiento de aventureros, ligados a la madera y las historias. El aroma a pan ca-
fugitivos y misioneros, que los utilizaron para ir y sero se renueva cotidianamente, la bandera argentina
venir entre ambos lados de la cordillera. Sea tras la ondea en el antiguo edificio de la vieja escuela rural,
mítica Ciudad de los Césares, sea para obtener en- hoy convertido en Campamento Educativo para con-
tre los primeros habitantes mano de obra para los tingentes escolares, y el río se abre desbocado bus-
invasores y su obsesiva búsqueda del oro, sea para cando con avidez las aguas del lago.
intentar llevar sus creencias al fin del mundo, o para Es inevitable dejarse atrapar por el juego repetido de
escapar de un destino funesto, ellos entraron al bos- la toponimia. Porque Chachín significa “saltar en un
que desesperados, sin saber que ese bosque se los solo pie”, y la memoria recurrente de los pobladores
devoraría para siempre. no deja de mencionar pequeñitos seres que habitan el
La memoria del lugar es una permanente recurren- bosque, traviesos pero malignos, cuya principal ca-
cia a la memoria del bosque. Es allí donde un per- racterística es, precisamente... dejar sólo una huella
sonaje ruso de mítica ascendencia zarista encontró al caminar.
su lugar en el mundo, para descansar hoy junto a Imposible resistirse al encanto de creer, tanto como
su mascota bajo una cruz ortodoxa y el respeto por no dejarse llevar por la senda y desviarse hasta la cas-
sus conocimientos científicos, que abrieron camino a cada homónima, un atractivo natural insoslayable que
especies vegetales de todo el mundo, y dieron alas a bien merece una visita.
insectos insospechados que hoy llevan su nombre. Cruzando el puente de madera, y mientras las se-
Las voces de los actuales ocupantes del paraje ñales de Huella Andina conducen hacia la derecha,
rememoran frente al fuego de la cocina económica la cartelería señala hacia la izquierda el inicio del
historias atrapantes. Ellos saben de los tiempos en circuito peatonal hacia la Cascada Chachín.
que no había ley; de los cazadores de recompen- Servicios como proveeduría y baños públicos se
sas, tragedias cotidianas y sinrazón. Dominga Leiva, concentran en el estacionamiento para los vehículos
mate en mano, desgrana lentamente recuerdos del que arriban al lugar desde el otro lado, para iniciar allí
paraje, en los cuales la rudeza y el realismo mágico el paseo que les demandará unos treinta minutos para
se toman de la mano para envolver la memoria con acceder al punto final.
un hálito de absoluta melancolía. Un sendero con carteles que describen la importan-
“Eran tiempos bravos, mi mamá me contaba que cia del bosque y sus especiales características sirve
en la noche se escuchaban los pasos de las tropillas de aperitivo para el plato fuerte del recorrido. El as-
enteras, que se robaban para llevarlas al otro lado...” censo es suave, el tintineo de la corriente acompaña
cuenta Dominga. la marcha, aparecen especies vegetales únicas como
En la costa, la madera sigue viva en el perfil de los el raulí, canelo y maniú, hasta que un kilómetro y me-
botes de los pobladores, y el río convoca a un martín dio río arriba un espectacular salto de agua de casi
pescador adivinando su alimento. Hongos, musgos y cuarenta metros de altura parece estallar en medio del
líquenes dan cuenta de la perseverancia de la lluvia, bosque.
Un mirador de madera permite disfrutar en su totali- XX, colonos sudafricanos descendientes de holan-
dad la maravillosa vista, mientras el vapor que generan deses ( “boers”) respondieron a la convocatoria del
las aguas rompiéndose contra las rocas se asocia con gobierno argentino, depositando en este apartado
el sol para inventar un arco iris entre el follaje. lugar sus sueños y esperanzas, en una epopeya que
De regreso, hay que volver al puente para reto- tuvo mucho de sinsabor y un final tan incierto como
mar el sendero Huella Andina, que conduce a una anunciado.
espectacular playa escondida, y que atravesando el Un inmueble histórico, devenido en Museo de Si-
bosque lleva hacia el punto final del recorrido. tio, rescata del olvido sensaciones y memorias de un
El cansancio es un premio merecido. Pero aún falta grupo de soñadores que se abrió paso en la espesura
lo mejor. Es momento de percibir en el horizonte para saberse nuevo.
boscoso la callada perseverancia del paraje Hua En él, la madera encierra las voces de todos aque-
Hum, que resguarda buena parte de la historia re- llos que desafiaron distancias para abrirse a un mun-
gional. do promisorio que idealizaron venturoso.
Corría el año 1900, y la cordillera no terminaba de Sus paredes cuentan de la pujanza de un otrora flo-
definirse como un punto de encuentro o de división reciente paraje, en el que hubo lugar para comercios,
entre Argentina y Chile. Aceptada como límite, resul- escuela, hosterías y cementerio, y que hoy se rebela
tado del reconocimiento de la postura argentina de contra el olvido.
tomar el criterio de “altas cumbres” (una línea ima- Los sueños sucumbieron al progreso, pero los sa-
ginaria que uniera los puntos mas altos del macizo lones vacíos y las herramientas herrumbradas se re-
andino para delimitar fronteras con el vecino país) en nuevan en la persistencia de los árboles frutales y el
contra del criterio chileno de “divisorias de aguas”, testimonio lacerante de los sobrevivientes. Y la vida
el gobierno abrió las puertas a la colonización del vuelve a tomar forma de la mano de la memoria, en
territorio, entendiendo que gobernar es poblar, y per- algo que se convierte más en un testimonio brutal de
mitiendo así que gentes de otros lugares del mundo la condición humana que en el simple lamento de un
se radicaran y crecieran en el lugar. tiempo perdido.
Fue por entonces que, allá por los albores del siglo “Mi abuela contaba que, cuando llegaron, tuvieron
que vivir una semana bajo los paraguas con los cuatro pobladores que aún resisten el paso inexorable del
hijos, porque era mayo, llovía, y tenían que apurarse tiempo y el progreso.
para construir su casa”, recuerda Ana Van Dorsser, Teodora Martínez y su esposo, don Diógenes Fos-
nieta de Martina e Ysbrand, colonos arribados a Hua bery, atienden el camping “Don Bartolo”, decididos a
Hum en el año 1904. reconvertir su economía de subsistencia orientándola
Luego fueron los tiempos del molino harinero, el hacia el servicio turístico.
ganado, los cercos, corrales, casas y aserradero. Ella, heredera de una familia que llegó en 1927 para
Los viajes en bote, la espera del lanchón para tener trabajar en la madera, atesora en sus recuerdos todo
noticias del mundo, y el cotidiano sacrificio para coci- el perfume de años pasados; él, también maderero,
nar, proveerse de los servicios esenciales, darse ca- con su bigotito fino y su sombrero ancho, abre cóm-
lor y ánimo; la actividad forestal, la primera hostería, plice sus ojos claros para acompañar el relato.
sembrar sueños y cosechar esperanzas, hasta que la “Era muy lindo....el invierno era bravo. Teníamos
creación del área protegida y las nuevas políticas de algunos animales, después vivíamos de la siembra.
gobierno –paradójicamente- obligaron a marcharse, Mi papá trabajaba en la madera, las mujeres se de-
apenas tres décadas después, a todos aquellos que dicaban a la huerta, vendían verduras, mi vieja hacía
habían seducido para que colonizaran la región. quesos...Íbamos a San Martín de los Andes a comprar
Ellos se tuvieron que ir, pero el bosque sigue en pie. en bote, se tardaba entre cinco a seis horas, porque
En la espesura se advierten testimonios de la intensa mi papá era un buen remador, remaba mucho”.
actividad forestal que caracterizó al paraje durante la
primera mitad del siglo pasado. Los viejos y destar-
talados puentes de madera, los tocones de antiguos Un paso a la libertad
árboles cortados, ocultos por la renovada vegetación,
las frambuesas y nueces que plantaron los alumnos Pegaditos a la frontera, los caminos se bifurcan
de la escuelita rural que funcionó entre los años ´30 y culmina el recorrido del tramo Huella Andina que
y ´70, las cruces y lápidas de las tumbas del cemen- comenzó en San Martín de los Andes.
terio, cubiertas de musgo, y la perseverancia de los En verano, dos frecuencias de transporte público,
y la lancha en la tarde, permiten retornar al punto ventura a los caminantes, los duendes dejan de ser
de partida. una mención aislada para convertirse en una inquie-
Hua Hum (“agujero en el cielo”) se abre a la me- tante realidad.
moria para convencer al visitante que no hay regreso Nuevamente la magia se corporiza. Y los mismos
posible, y la historia se sigue escribiendo en el re- senderos clandestinos que vieron pasar furtivamen-
cuerdo de todo lo vivido. te a tantas humanas sensaciones toman nueva di-
Y cuando uno cree que el lugar ha agotado sus mensión. Ellos significaron la libertad para el gran
sorpresas, aventuras de contrabandistas y bandidos poeta chileno Pablo Neruda, que allá por el año 1949
rurales también abren paso a la poesía, porque muy los transitó escapando de la persecución política en
cerca de allí el “paso Ilpela” guarda una de las mas su país, convirtiendo su marcha en una experiencia
interesantes páginas de la historia del lugar. imborrable, la cual mereció su especial mención al
El clandestino e intrincado camino atraviesa el momento de recibir el premio Nobel.
bosque comunicando ambos países, convertido en “En aquella larga jornada encontré las dosis ne-
toda una fuente de leyendas. Utilizado por contra- cesarias a la formación del poema. Allí me fueron
bandistas, cuatreros y familias enteras que llegaban dadas las aportaciones de la tierra y el alma...Y digo
al país para encontrar en el trabajo forestal una luz de igual modo que no sé, después de tantos años,
de esperanza para sus miserias, se guardó sin sa- si aquellas lecciones que recibí al cruzar un verti-
berlo un dejo de esperanza para una de las figuras ginoso río, al bailar alrededor de un cráneo de una
mas reconocidas de la literatura mundial. vaca, al bañar mi piel en el agua purificadora de las
Allí, donde la frontera es sólo un trazo imaginario, más altas regiones, digo que no sé si aquello salía
y donde –vaya coincidencia- atravesarla implica el de mi mismo para comunicarse después con mu-
rito de dar tres vueltas en un solo pie alrededor de un chos otros seres, o era el mensaje que los demás
montículo de troncos coronados por una calavera de hombres me enviaban como exigencia o emplaza-
vaca, en una pagana ceremonia destinada a proveer miento...”
1532 m
1250 m
1000m
835 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,5 km 14 km
75
RíO NEGRO
SENDEROS DE ARGENTINA
1727 m
1500 m
1250 m
1000 m
813 m
77
SENDEROS DE ARGENTINA
RíO NEGRO
Tramo 9 - ETAPA 26
Lago Mascardi - Lago Steffen
1088 m
1000 m
750 m
559 m
79
SENDEROS DE ARGENTINA
RíO NEGRO
Lago Steffen - Villegas
Tramo 9 - ETAPA 27
749 m
700 m
650 m
600 m
550 m
524 m
81
SENDEROS DE ARGENTINA
814 m
750 m
675 m
600 m
497 m
RíO NEGRO
Tramo 9 - ETAPA 29
Chacra Santa Lucía - Perito Moreno
943 m
900 m
800 m
700 m
600 m
566 m
85
RíO NEGRO
SENDEROS DE ARGENTINA
RíO NEGRO
Tramo 9 - ETAPA 30
Perito Moreno - Wharton
995 m
900 m
800 m
700 m
584 m
1 km 2 km 3 km 4 km 5 km 6 km 7 km 8 km 9,4 km
RíO NEGRO
Tramo 9 - ETAPA 31
Wharton - Camping Río Azul
580 m
450 m
375m
300 m
266 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,5 km 15 km 18 km
CHUBUT
Camping Río Azul - PN Lago Puelo
Tramo 10 - ETAPA 32
300 m
273 m
250 m
214 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 12,5 km 14,9 km
93
CHUBUT
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
PN Lago Puelo - El Desemboque
Tramo 10 - ETAPA 33
794 m
500 m
199 m
95
CHUBUT
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
Tramo 11 - ETAPA 34
El Desemboque - Puerto Patriada
727 m
600 m
500 m
400 m
300 m
197 m
97
CHUBUT
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
Villa lago Rivadavia - Portada Norte
Tramo 11 - ETAPA 35
877 m
825 m
750 m
675 m
600 m
539 m
2,5 km 5 km 7,5 km 10 km 11 km
99
CHUBUT
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
Tramo 11 - ETAPA 36
Portada Norte - Bahía Solís
754 m
700 m
650m
600m
535 m
0,75 km 1,5 km 2,25 km 3 km 3,75 km 4,5 km 5,25 km 6 km 6,75 km 7,5 km 8,8 km
101
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
Tramo 11 - ETAPA 37
Bahía Solís - Seccional Arrayanes
Distancia: 15,2 km
Descripción en sentido Norte-Sur: Bordeando el
Duración: 8 hs lago Rivadavia desde Bahía Solís, llegamos hasta el río
Dificultad: Rivadavia. El sendero lo sigue por la costa hasta encontrarse
con el arroyo Colehual, que remontamos hasta cruzarlo por
Estacionalidad: Enero – Marzo un puente sobre la ruta. Continuamos por una vieja huella
Registro Obligatorio: Autoregistro en inicio de senda de carro hasta las inmediaciones de la población Alarcón.
en Bahía Solís y en Seccional de guardaparques del río Debemos cruzar un arroyo por un puente de troncos y
Arrayanes. continuar el ascenso hasta el mirador del lago Verde. Para
eso vamos a cruzar la ruta un par de veces.
Información turística: Centro de Visitantes e Informes Desde el mirador, las señales nos van a guiar hasta la
Turísticos de la Intendencia del Parque Nacional Los
Seccional del Guardaparque de Lago Verde, donde también
Alerces. Villa Futalaufquen. Secretaría de Turismo de
Esquel. Av. Alvear y Sarmiento www.esquel.gov.ar se encuentra el camping agreste El Aura. Unos metros antes
(02945) 451927 / 455652 de llegar, a mano izquierda, empalmamos con un sendero
que bordea el lago Verde hasta llegar al
Servicios: Inicio: Camping agreste en Bahía Solís. En estacionamiento del puente peatonal sobre el río Arrayanes.
lago Verde camping agreste El Aura www.el-aura.net No hay que cruzar la pasarela, la misma permite el acceso
(011) 4816-5348 Final: Camping Río Arrayanes www. al camino a Puerto Chucao de donde parten las excursiones
rioarrayanes.com (011) 4152 5381. La contratación
de las excursiones al alerzal milenario y al glaciar
lacustres al alerzal milenario y al glaciar Torrecillas.
Torrecillas en el Lago Menéndez debe realizarse con Para finalizar la etapa, desde este lugar, se retoman unos
anticipación en agencias de viajes y turismo de Esquel. metros de ruta hasta entrar al sendero que lleva a la
Seccional del Guardaparque y el camping río Arrayanes. Dar
Transporte público: Transportes Esquel www. aviso al llegar al destino.
transportesesquel.com.ar (02945) 453529. Transporte
Jacobsen. Sólo en temporada de verano www.
transportejacobsen.com.ar (02945) 454676. Atención: avisar llegada en Seccional de guardaparques
del río Arrayanes
Precauciones: secciones en ruta con tránsito vehicular.
Previsiones: salir temprano, llevar agua y vianda.
Puntos de interés: vistas panorámicas desde el
mirador del lago Verde. Río Arrayanes, pasarela, ALOJAMIENTO PROVEEDURÍA ÓMNIBUS GUARDAPARQUE MIRADOR EXCURSIONES
sendero a Puerto Chucao, excursiones lacustres en EN LANCHA
Lago Menéndez.
Importante: si bien la etapa es de dificultad media,
consultar por conexiones de menor dificultad. CABECERA
DE ETAPA
761 m
700 m
650 m
600 m
550 m
524 m
103
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
Tramo 11 - ETAPA 38
Seccional Arrayanes - Punta Mattos
902 m
825 m
750 m
675 m
600 m
522 m
105
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
ETAPA - ETAPA 39
Tramo 1239
Lago Krügger - Villa Futalaufquen
1148 m
1000 m
750 m
524 m
107
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
Tramo 12 - ETAPA 40
Villa Futalaufquen - Portada Centro
CABECERA
DE ETAPA
706 m
650 m
600 m
550 m
532 m
109
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
Tramo 13 - ETAPA 41
Aldea Escolar - Ruca Nehuén
395 m
355 m
335 m
111
SENDEROS DE ARGENTINA
CHUBUT
Tramo 13 - ETAPA 42
Ruca Nehuén - Lago Baguilt
1131 m
1000 m
750 m
500 m
364 m
113
SENDEROS DE ARGENTINA
3 días - 2 noches
Experiencia: Alerces, testigos del tiempo
línea troncal del largo sendero pero también algunos ejemplares, 60 de ellos en Los Alerces. La ilusión de
desvíos –o “capilares”- que invitan a descubrir algu- avistarlo motiva a muchos de los senderistas, pero la
nos de los rincones más espectaculares del Parque suerte y el azar tienen la última palabra, como siem-
Nacional, aquellos que fundamentan su candidatura pre que se trata de fauna. Dentro del pequeño Museo,
como Patrimonio Mundial ante la Unesco. una maqueta del Parque Nacional permite visualizar
de antemano el recorrido de esta parte de la Huella
Andina y, a su lado, un tronco seccionado de alerce
Todo comienza en Esquel tienta a contar sus anillos concéntricos, una sucesión
de líneas tenues y apretadas en la madera que revelan
Esquel, ciudad de orígenes galeses como la veci- la edad de este árbol centenario.
na Trevelin, el “pueblo del molino” famoso por sus
tentadoras mesas de té y “torta negra”, es el pun-
to de partida de muchos caminantes que recorren De Arrayanes al Alerzal Milenario
este tramo de la Huella Andina. A unos 50 kilóme-
tros del Parque Nacional, la cercanía y los servicios El punto de partida de la caminata será la Sec-
no son los únicos motivos para elegirla: todo viajero cional Arrayanes del Parque Nacional Los Alerces,
sabe que aquí está el hogar de la entrañable Trochi- una veintena de kilómetros más adelante, precisa-
ta, el trencito de trocha angosta que solía realizar un mente el lugar donde recientemente hubo un sorpren-
recorrido épico por las estepas patagónicas entre In- dente avistaje de huemules cruzando la carretera.
geniero Jacobacci (Río Negro) y Esquel, a fuerza de Aquí hay un camping agreste o su opción glamping,
humo y traqueteo, transportando pobladores a través una serie de domos que permiten disfrutar de la na-
de tierras desiertas, contra viento y nieve, haciendo turaleza con mayor comodidad y escaso impacto en
patria y creando un mito duradero junto a la frontera. un ambiente de notoria fragilidad: durmiendo en este
Con Paul Theroux y Bruce Chatwin alcanzó estatura sector del parque es posible levantarse ya sumergido
literaria: pero con cada visitante que vuelve a subirse en el paisaje que se va a transitar durante el día, un
a la formación en la estación de Esquel, para realizar día que deparará un viaje en el tiempo mucho más
el trayecto hasta el paraje Nahuel Pan, esa estatura extenso que la cantidad de kilómetros que pueda
ya mítica se transforma en un recuerdo personal e completar el más entrenado de los senderistas.
íntimo atesorado en el álbum de fotos de su travesía Antes de comenzar, es preciso chequear el es-
patagónica. tado de cada etapa en la página web de Huella
Desde Esquel hasta Villa Futalaufquen, donde se Andina, confirmar el informe en la seccional del
encuentra la Intendencia del Parque Nacional Los Parque Nacional y registrarse, teniendo en cuenta
Alerces –uno de los cinco que atraviesa la Huella que los tiempos indicados para cada etapa son esti-
Andina además del Lanín, Nahuel Huapi, Los Arra- mativos: por eso –sobre todo cuando son trayectos
yanes y Lago Puelo- se llega con facilidad en trans- largos- conviene salir temprano y caminar siempre
porte público. Un busto del Perito Francisco Moreno, acompañado.
a metros de la Intendencia, parece dar la bienvenida De 15 kilómetros de extensión, la etapa se cami-
al visitante que le sigue los pasos más de un siglo na en unas ocho horas, previo registro obligatorio
después de sus primeras expediciones: porque es en la Seccional Arrayanes o Lago Verde, con auto-
gracias al ingente trabajo realizado por el científi- rregistro final en Bahía Solís. Pero itinerario reserva
co y explorador argentino que los colores celeste y una sorpresa, que está entre las mejores experiencias
blanco –como las señalizaciones que indican hoy los del Parque Nacional Los Alerces y de la Patagonia
senderos de la Huella Andina- flamean replicando en argentina: el Alerzal Milenario, el verdadero corazón
nuestra bandera las franjas del cielo austral. del Parque Nacional, accesible atravesando el lago
La franja bicolor de la Huella se exhibe también en hasta Puerto Sagrario.
la entrada del Centro de Informes y Museo, junto al Para conocerlo -la única forma de ahondar en los
emblema del Parque Nacional, cuyo animal símbolo secretos de una naturaleza donde el tiempo del hom-
es el huemul, el pequeño ciervo andino en peligro de bre dura apenas un pestañeo- hay que bordear el río
extinción del que se estima quedan apenas unos 600 Arrayanes, que une los lagos Futalaufquen y Verde,
partiendo de la Seccional Arrayanes por el circuito difícil imaginar lo contrario caminando en este pai-
Pasarela, un camino boscoso que deja entrever entre saje donde, entre cañas colihue, radales, coihues y
los árboles el increíble color esmeralda del río. Des- cipreses, aparece el primer alerce aislado: el “lahuán
cansando a un borde del puente que cruza el río, un solitario”, promesa del bosque milenario por venir.
hurón grande no se inmuta al paso de los caminan- Lahuán, “abuelo” en lengua mapuche, es el nombre
tes, y se queda un ratito atento hasta desaparecer nativo del árbol testigo del tiempo, ese tiempo que no
bajo las ramas. Calma y brillante, reluciente bajo los parece hacerle mella sino para dejarle nuevos anillos
rayos del sol veraniego, el agua corre entre un marco escondidos en el corazón del tronco.
de arrayanes de frío tronco color canela, custodiada El sendero desemboca en Puerto Chucao, punto
por picos nevados y rodeada de lagos que compiten de partida de la travesía lacustre por el lago Me-
en colores y belleza para pintar una de las postales néndez hacia puerto Sagrario y el Alerzal Milenario.
más hermosas del sur. Las aguas azules y profundas –alcanzan hasta 450
El caminante se acostumbra pronto a escuchar la metros- donde la embarcación va dejando una estela
voz inconfundible del chucao, un pájaro color rojizo y de espuma blanca, replican inmutables el paisaje cor-
café bastante sociable, que se deja ver con frecuen- dillerano, que desciende hacia el agua en la forma de
cia saltando entre las hojas y ramitas del suelo. Dicen un bosque densamente verde, con algunas playitas
que quien lo ve tendrá un buen día, tal vez porque es escondidas al pie de los árboles. Durante los 22 kiló-
metros de travesía lacustre, algún cóndor sobrevuela
el cielo despejado, y un silencio casi sagrado parece
descender sobre el paisaje cuando aparece, abrigado
por las legendarias nieves eternas, el blanco manto
del glaciar Torrecillas. Desde aquí es demasiada la
distancia para apreciar otros detalles: pero el gla-
ciar está en retroceso, como se puede comprobar
comparando el paisaje de hoy –hay excursiones que
permiten llegar hasta el pie del vestisquero- con las
fotografías tomadas por el propio Perito Moreno en
su travesía de la región a fines del siglo XIX.
Después de pasar por la Isla Grande del lago
Menéndez –famosa científicamente porque hace
algunos años se descubrió aquí la existencia de
la Batrachyla Fitzroya, una ranita endémica del lu-
gar- la embarcación amarra sobre las aguas trans-
parentes de Puerto Sagrario. Estamos a un paso
del Alerzal Milenario, donde se levantan los añosos
alerces que inspiran, a fuerza de altura y venerable
edad, cierto respeto reverencial. “Se construyó el
Partenón y estos árboles ya estaban. Nació Cristo y
estaban, Leonardo Da Vinci pintó la Mona Lisa, se
logró la independencia argentina, pasaron las guerras
mundiales… y siempre estuvieron acá”, dice en voz
baja una señora que se apresta a emprender el sen-
dero hacia el lago Cisne, atravesando el Alerzal. Este
bosque de árboles milenarios es hoy un superviviente
de la época en que el alerce era ampliamente explo-
tado por la calidad de la madera, de color rojo-café
con un fino veteado, distintiva por su resistencia a los
distintos climas y su durabilidad: todavía hoy se en-
cuentran los tocones de estos gigantes, talados para
hacer tejuelas, y algunos árboles que llevan la cicatriz primitiva del corte de tablas de alerce, hechas a pulso
del corte que se hacía para explorar la dirección de de la mano sólo con hacha y todas de tamaño igual
la veta. Si era oblicua, el tronco seguiría en pie. Si y reducido, para admitir su transporte a hombro por
era recta, se sellaba el destino del árbol, que sería los senderos más escabrosos al través de los bos-
abatido y desmembrado con certeros hachazos. La ques impenetrables”. “Aunque este trabajo esté lleno
explotación del alerce fue extensa y sin control a am- de penas y privaciones, como lo pinta Menéndez, no
bos lados de la cordillera –en algunos lugares incluso deja de ofrecer sus atractivos y cierto aire de poesía,
se aceptaban las tablas de esta madera como mo- que son la causa de que los tableros se dediquen a
neda de pago- hasta poner a la especie en peligro él con la mayor afición”, agrega Fonck. Y observa:
de extinción. La explotación de los alerzales –que se “Esta duración tan larga del alerce nos da la idea
había iniciado mucho antes del otro lado de la cor- de que sus bosques sean casi inagotables y que se
dillera- comenzó en las primeras décadas del siglo puedan comparar, como suele hacerse efectivamen-
pasado en el lago Menéndez, donde los troncos eran te, a una mina cuya riqueza no se agota tampoco”.
seleccionados, hachados y luego transportados en Fonck describe el alerce “en manchas más o menos
jangadas –a través de ríos y lagos- hasta el Futalauf- extensas y frecuentes y raras veces forma verdaderos
quen, en dirección a los aserraderos. En total, el viaje bosques”, sino que “los árboles están colocados las
duraba entre dos semanas y un mes. más veces algo dispersos y entremezclados con otros
En su comentario al Diario de Viaje de Fray Fran- árboles, principalmente el Nothofagus dombeyi (coi-
ciso Menéndez –el misionero que recorrió extensa- hue). Sobrepujando sus gigantescas columnas blan-
mente la Patagonia a fines del siglo XVIII, cuyo nom- quiscas por mucho el bosque que las rodea, dan es-
bre se recuerda ampliamente en los topónimos cor- tas manchas al paisaje de la cordillera una fisonomía
dilleranos- Francisco Fonck relata “la industria muy especial. El ojo experimentado las conoce al momento
y a distancia muy grande”. Pero más allá de la compa-
Alerce ración con la “mina inagotable”, Fonck es bien cons-
ciente del peligro que ya entonces corre la especie: “El
rendimiento de árboles gigantes, que se hallan sólo
dispersos y necesitan siglos y siglos para volver a cre-
cer, no puede competir en manera alguna con el de los
veneros continuos de los minerales. El alerce está ya
muy escaso en la falda marítima de la cordillera, que
es por ahora la única accesible. Más adentro, donde
Menéndez y los exploradores modernos lo encontra-
ron también, existe abundante en estado virginal. Aun
en esta parte y en todas, en que no ha pasado la mano
destructora del hombre, le han destruido por grandes
trechos las quemazones que ocurren allí en épocas
más o menos distantes. Felizmente suelen dejar los
troncos casi intactos para el uso. Es raro ya encontrar
un árbol íntegro de grandes dimensiones”.
El itinerario exacto de fray Menéndez no está en
realidad del todo claro pero sí se sabe que se internó
hacia el lado sur de la meseta. De algún modo, ocurre
con su viaje lo que ocurría con los viejos pobladores
que vivían en la cordillera mucho tiempo atrás, sin
tener demasiado claro si estaban del lado chileno o
del lago argentino, hasta llegar a algún punto de refe-
rencia certero en esa inmensidad.
Con el recuerdo de Menéndez, y quien sabe si con
sus mismas ilusiones de hallar la mítica Ciudad de
esas familias. De hecho cuando era chica –recuer- historia, menos visible que aquella que revelan luga-
da una esquelense que nos acompaña- aquí estaba res como el lago Menéndez –asociado al fraile ex-
todavía Marcelo Mermoud, que hacía los cruces en plorador- o el Futalaufquen, “lago grande” en lengua
bote”. Desde entonces, los tiempos han cambia- aborigen.
do. Pero la historia de aquellos pioneros se puede Historiador y residente en Esquel, Jorge Orio-
reconstruir, mapa en mano. Será al día siguiente, la conoce bien el tema: “La cuestión de los viejos
después de dormir junto a la Seccional Arrayanes pobladores es un aspecto cultural que muchas ve-
para emprender bien temprano la continuación de ces no se ve, tapado por la naturaleza exuberante.
la Huella Andina hacia Bahía Solís. Algunos de ellos venían de Chile y otros de Chubut y
luego subieron hacia el parque, como es el caso de
los Mermoud. También estaba quien venía, pasando
Historias de pobladores por Chile o Bariloche, directamente desde Europa”.
Los Mermoud en particular eran oriundos de Suiza y
El mapa vuelve a desplegarse: esta vez, la lí- llegaron pasando por Chile por el lado del río Chubut;
nea celeste y blanca nos llevará primero hasta el por su parte Heriberto Braese llegó siendo jovencito
mirador del Lago Verde, donde se abre uno de los en un barco desde Alemania, en tiempos de la Pri-
panoramas más prístinos del Parque Nacional Los mera Guerra Mundial, y por ser Chile probritánico no
Alerces. Y seguirá luego hasta la bahía Solís, com- dejaron entrar su buque y tuvo que quedar afuera,
pletando una caminata de 15 kilómetros, de dificultad en la bahía. De allí se escapó en un bote y viajó por
media, que lleva unas ocho horas de marcha. tierra hasta San Luis y luego Río Negro, para llego
Pero antes de empezar, la vista recorre algunos de llegar hasta aquí. Cortaba leña, tenía tres o cuatro
los topónimos que despertaron nuestra curiosidad en animales, armó su familia, y con el tiempo una hos-
las primeras exploraciones previas al viaje y a la de- tería que aún existe”. Enfrente, donde desemboca el
cisión de las etapas: el arroyo Braese, la bahía Toro, río Arrayanes, estaban los Toro: “Quedan los restos
la Playa del Francés, aquel Puerto Mermoud visitado de la casa familiar, que tenía rosales, ciruelos y otros
el día anterior. Hay detrás de esos nombres alguna frutales. Hay un llano donde tenían papas, se dice
que hacían carreras cuadreras y quedó una arauca- tre 30 y 35 personas que llevaban carros, mulas, ins-
ria, que plantaron alguna vez. Allí se encontraron res- trumental, con baqueanos, todo para poner los hitos
tos de madera, tejuelas y postes… es lo que queda fronterizos. Porque hay que recordar que no se sabía
de quienes vivieron en el Parque Nacional hasta que bien de qué lado estabas… ¿Chileno o argentino? La
se fueron los últimos, a comienzos de los años 80”. gente entraba por los pasos y recién al llegar al lago
No era una vida fácil, tenían sus parientes a un lado Menéndez sabían que estaban ‘de este lado’, y em-
y otro del río Arrayanes, que cruzaban a caballo: el pezaban a buscar a sus parientes”. Por el aislamiento
animal nadando y ellos arriba, llevando sus cosas en se generó una comunidad endogámica, donde se re-
una bolsa de lona embetunada para resistir al agua… piten los apellidos Toro, Mermoud, Solís, Cárdenas,
“Eran gente pobre, no tenían lanchas con motor fuera Coronado: “Terminan siendo todos parientes, porque
de borda, sino botes a remo que había que calafatear, nunca venían a Esquel. Estaban todos allá, apenas si
sacando el agua con una lata. Algunos, muy pocos, podían llegar a la villa, donde tenían cerca el aserra-
podían comprar un motor y ponerlo atrás. Tenían sus dero y la policía, donde había dos comercios y estaba
itinerarios, relativamente cerca de las costas, pero la escuela, y donde se instaló más tarde la Adminis-
así como bajaban viento en popa a veces tenían que tración de Parques Nacionales”. Aparece también la
subir contra el viento y era imposible seguir. Enton- cuestión del idioma, con muchos pobladores extran-
ces frente a cada población, del lado de la costa, los jeros que fueron aprendiendo poco a poco el español:
pobladores clavaban estacas largas de coihue –que con la apertura de los senderos –evoca Oriola- fueron
suelen existir todavía- y a eso lo llamaban ‘puerto’. apareciendo lugares, como “puertos”, que no esta-
Paraban ahí, amarraban, se iban a la casa del vecino ban en los mapas. La gente decía “a esto lo llamamos
y al día siguiente, o el otro, volvían a cargar el bote Puerto Cárdenas”, por ejemplo, pero no había nada
para irse”, agrega Oriola. registrado geográficamente. Como ocurre también
En 1902 se define el tema de las fronteras y había con la Playa del Francés. Que encierra otra historia, la
que poner los hitos: “Eran grandes expediciones, en- de Eugenio Le Gauffre –“el francés” en cuestión- ins-
SECRETARíA DE TURISMO DE ESQUEL
talado en ese lugar que hoy lo recuerda con su nom- paraje, tiene su propia historia: y si el recién llegado
bre. Don Eugenio “había ocupado el campo en 1918 quiere comprender en toda su dimensión el pasado
con 250 lanares. Conceptuado como un hombre de que encierran estos paisajes, tendrá que hablar con
vasta cultura, había iniciado la construcción de una la gente del lugar, preguntar por el nombre de cada
casa precaria, y sembrado papas. Don Eugenio solía rincón aparentemente virgen, remontar el tiempo para
juntarse con los Mermoud y conversar en francés. Lo viajar con la memoria hasta las primeras décadas del
mismo que con Jorge Chemin que años después se siglo XX, cuando los pioneros se asentaron en la re-
instaló en las costas del Río Arrayanes. Apenas ini- gión, desafiando las incomodidades y el aislamiento.
ciada la década del ’20 en el lugar que ocupara Justi- Varias décadas más tarde, hubo otros pioneros.
niano Mermoud y al retirarse éste, se afincó Heriberto Fueron los que abrieron los primeros pasos del tu-
Braese, alemán quien, como Le Gauffre, hizo amistad rismo, que también requería temple y fuerza de vo-
con los Mermoud”, según recuerda una investigación luntad. Refiriéndose a la zona de la actual represa,
de María Marta Novella y Débora Finkelstein, de la al sur del comienzo de nuestro itinerario, dice Jorge
Universidad Nacional de la Patagonia. Oriola: “No había hospedaje, hotel ni hostería; había
Eran tiempos duros; ambas historiadoras recogie- pobladores que criaban animales ajenos, peones que
ron el testimonio de Amadeo, hijo de Jorge Chemin, vivían allí y familias muy pobres con chacritas. Las
que recordaba así las noches de su infancia: “Ne- rutas tampoco estaban pavimentadas. De turismo,
vaba muchísimo, hacía mucho frío, no había abrigo. nada. Sin embargo, en un legajo de Parques Nacio-
Nosotros cuando nos fuimos al río Arrayanes, a la nales, está el caso de una familia que pide permiso
Coihuería (nombre que se le daba a esa zona de bos- para vender en lo que sería como un polirrubro ac-
que de coihue cercana al río), era unos ranchos de tual, porque había en la zona muchos mochileros”.
palo a pique así, la nieve pasaba por esas aberturas María Marta Novella y Débora Finkelstein también
tranquilamente, yo me acostaba y la mamá me tapa- los recuerdan en su investigación: “En la década del
ba, tenía una lona, una lona de esas enceradas. Me 60 empezó a ser frecuente la presencia de mochi-
la ponía encima cuando nevaba; al otro día cinco o leros. Varios grupos organizados, de las distintas
seis centímetros de nieve encima de uno y había que Facultades de la Universidad de Buenos Aires (Fede-
levantarse y sacudirla y tirarla afuera”. ración de Campamentos Universitarios de Buenos Ai-
Y agregan: “Con el paso de los años, algunos as- res) eligieron el parque como destino para sus vaca-
pectos cambiaron, como el transporte, al introducir- ciones de verano. El viaje se realizaba en la Trochita
se losprimeros motores para los botes, al comenzar hasta Esquel, en camiones hasta Futalaufquen y de
a circular la lancha de Parques, y por último en la dé- allí en las lanchas de Parques hasta Playa el Francés,
cada del 70 al abrirse la ruta de Bahía Rosales hasta el Arrayanes y el Verde. Las carpas se armaban en
Cholila. Pero también fue cambiando la situación de espacios cedidos por los pobladores que les proveían
los pobladores. El francés Le Gauffre se internó hacia de pan casero, leche y carne fresca. Entre los acam-
Chile por el fondo del lago Cisne en la década del 40 pantes y los pobladores se establecieron lazos de
y nunca más regresó. Algunos de los hijos de los pri- amistad que superaban el tiempo de las vacaciones y
meros pobladores se fueron, otros entraron a trabajar se mantuvieron a través de los años”.
en Parques, como guardaparques, tal el caso de Mar- Sergio Sepiurka, autor de “Sueños de Cordillera”
celo Chemin”. La familia Chemin dejó la población y “La Trochita”, va más atrás todavía: “Los mochile-
del río Arrayanes en 1980, y las casas fueron desar- ros de Buenos Aires, y sobre todo los campamentos
madas; el último descendiente de los Mermoud que universitarios, fueron esenciales en el desarrollo del
habitó en lago Verde fue Marcelo, quien cruzaba a los senderismo. El primero fue el campamento químico
turistas con su bote de madera cuando no existía la en 1948, seguido por los de la Federación de Cam-
pasarela sobre el río Arrayanes. Es el mismo Marcelo pamentos Universitarios. Los estudiantes venían en
Mermoud que recordaba de su infancia nuestra com- tren, y entablaron una estrecha relación con el medio
pañera de viaje, que cruzaba con él en bote antes que los traía. Fue toda una época, el cerro Químico
de la construcción del puente sobre el Arrayanes. Y es un testimonio toponímico de aquellos tiempos.
como ella, lo recuerdan tantos habitantes de Esquel, Hasta había un cancionero… de algún modo, ellos
a modo de confirmación de que cada nombre, cada fueron clave en forjar la leyenda argentina de la Tro-
chita, que después tomó dimensión internacional con muy especial. La cabaña donde vivió Llewellyn tuvo un
los escritores anglosajones. Todo este sitio es como incendio, pero se mantiene allí”, agrega Sepiurka, men-
un gran escenario, donde pasaron muchas cosas: cionando que el tercer personaje de esta curiosa co-
hasta La Balsa, de Tanguito, se compuso en Esquel”. munidad patagónica de raíz europea era “la condesa”,
La historia oficial dice que fue en el baño del bar La una alemana que también había formado una pequeña
Perla de Once, en Buenos Aires: pero Juan “Gamba” comunidad en la zona.
Gentilini, uno de los campañeros de ruta de Tanguito,
contó recientemente que los primeros acordes de la
canción “se escucharon en los vagones de La Trochita, Del mirador del lago Verde a Bahía Solís
entre El Maitén y Esquel”. Era el verano del 67 y “cuatro
flacos sin un mango, medio muertos de hambre y de Después de escuchar a los historiadores, el paisa-
frío, se sacuden dentro de un vagón Clase Única de La je parece haber tomado otra dimensión: en los nom-
Trochita. Es un viaje que comenzó en Constitución, tres bres de los mapas, en la huella de algún árbol, en
días atrás, lleno de percances y demoras, para llegar senderitos perdidos, empieza a aparecer la sombra
hasta Esquel”. “Sin nada que hacer, más que fumar de aquellos que vivieron aquí cuando el Parque Nacio-
algo y mirar cómo se repite en la ventanilla el paisaje de nal no existía, o apenas comenzaba, cuando en lugar
la precordillera uno de ellos, guitarra en mano, tararea de las dos horas de vuelo de hoy se llegaba en días de
algo nuevo que se le viene a la cabeza con insistencia. tren, y todo era más esforzado y también –sobre todo
Será en Esquel donde Tanguito termine de componer a la distancia- más romántico.
la canción ícono del rock nacional: La Balsa”, explicó Para retomar la Huella Andina, amanecemos en la
Gentilini en una entrevista en Radio Nacional Esquel. Seccional Arrayanes para tomar el sendero hacia el
Sin saberlo, sin buscarlo, de modo pasajero pero a mirador del lago Verde. Esta etapa, de baja dificultad
la larga perdurable, Tanguito se inscribió así en la línea
una excéntrica colonia cultural que existió en la región
muchos años antes, concentrada en la zona de Los Te-
púes. “Después de la Segunda Guerra Mundial –cuen-
ta Sepiurka- estuvieron aquí el pintor austríaco Erick
Gornik y el escritor de origen galés Richard Llewellyn.
Gornik –conocido como “el vikingo”- fue el primer pes-
cador con mosca en el Parque Nacional Los Alerces.
Se estableció en Villa Futalaufquen y luego fue a parar
a lago Hess, donde fundó una hostería y tuvo un gran
alumno que fue Raúl San Martín, quien aprendió de
chico a pintar con él. En cuanto a Llewellyn, se había
hecho mundialmente famoso con la novela ‘Cuán ver-
de era mi valle’. De la novela se hizo una película, que
le ganó el Oscar a ‘El ciudadano’ en 1942. El libro con-
taba la historia de la familia de Gwylym y Beth Morgan,
y tuvo varias secuelas, donde sus personajes viajan a
la Patagonia, aunque ninguna fue tan célebre como la
primera”. Se dice que cuando se estrenó la película,
tuvo amplia difusión en Gaiman y otras colonias gale-
sas de Chubut: y como para cerrar el círculo, la cuarta
y última obra de la saga relata la historia del hijo de
Gwylym y Beth, de regreso en Gales con su esposa…
descendiente de galeses de Chubut. “Algunas de sus
novelas –como ‘Bride of Israel My Love’- las escribió
acá. Uno de los galeses de la región era su chofer aquí,
y tenían buena relación, pero sin duda era una persona
(no requiere registrarse) y uso diurno, requiere alre- cuando, después de caminar por el bosque entre he-
dedor de una hora de caminata y recorre 1,5 kilóme- lechos y coihues, después de atravesar un pastizal
tros. A metros del indicador del comienzo, la señal de altura y dar los últimos pasos hacia el mirador,
celeste y blanca de la Huella Andina vuelve a indicar aparece de pronto en toda su espectacularidad el
la dirección que tomar, en medio de un bosque hú- cuadro colorido que pintan el lago Menéndez, el
medo milenario, donde bulle una vida pequeña y gran- muelle del lago Verde, el cerro Alto El Petizo y el río
de, desde mínimos insectos ocultos bajo las hojas y Rivadavia, decenas de metros más abajo, resplande-
troncos hasta las aves que sobrevuelan, majestuosas, cientes en un sinfín de matices que cambian con cada
por encima de nuestras cabezas. No hay mayor dificul- ondulación de las aguas, con cada soplo de la brisa
tad en ir avanzando, paso a paso, mientras el guarda- veraniega. Un cartel indicador del Parque Nacional ayu-
parques Marcelo Pietrobon nos abre camino, contando da a identificar los distintos sectores del paisaje. Pero
secretos de los árboles, de los lagos que pronto vamos sobre todo, cada uno a su modo más expresivo o más
a ver desde arriba como un mapa –esta vez en tama- contemplativo, nadie puede permanecer indiferente
ño natural- extendido ante nuestros ojos, de la fauna ante la magnificencia generosa con que aquí se regala
que habita esta parte del Parque Nacional y que tal vez, la naturaleza patagónica: casi sin darse cuenta, en las
mientras la buscamos, esté observándonos curiosa, caras de todos se pintan la sorpresa, la admiración, la
discreta y sobre todo escondida. Subimos recordando más pura emoción. ¿Estará allá, del otro lado de los
las palabras de Daniel Crosta, intendente del Parque cerros, la mítica Ciudad de los Césares que buscaron
Nacional Los Alerces, en una visita a la sede de Par- Menéndez y sus compañeros de fatigas? ¿Será la des-
ques en Villa Futalaufquen: “Para nosotros, la Huella cripción de estos lugares en la pluma del explorador,
Andina es un atractivo tan importante como el Alerzal. curiosamente semejantes a las montañas cercanas
La familia puede recorrer las partes más importantes a Esquel, el secreto de la ciudad dorada que también
del Parque Nacional en contacto directo con lo que creemos vislumbrar hipnotizados por el sol que baña el
ofrece la naturaleza; no es igual a ir con el auto. Si vas paisaje? Todo el oro del mundo no vale la grandiosidad
caminando sentís los perfumes, te caeés en la tierra, con que la naturaleza bautizó estos valles: la leyenda
es muy distinto a ir sobre ruedas, con aire acondicio- seguirá siendo leyenda, pero sobre todo seguirá siendo
nado, tal vez escuchando un tango”. paisaje.
“Lo que se abre así –agrega- es la posibilidad de El sol inicia una curva descendente y se hace hora
entrar a distintas áreas del Parque Nacional que no de seguir la caminata, después del mirador del lago
eran conocidas. Que el Parque Nacional no sea un área Verde, hacia la bahía Solís, casi en paralelo a la
cerrada, prístina, que nada lo toque. Se trata de con- RP71 y en parte siguiendo el trazado de una vieja
servarlo, pero también para que la gente lo disfrute. La huella de carro, acercándose a la población Alarcón.
gente entra y sabe que va a un descubrimiento: porque Paso a paso, se avanza hacia el arroyo Colehual, el
en la ruta, por ejemplo, tengo carteles indicadores, río Rivadavia –de apenas unos diez kilómetros de
desde la velocidad hasta otras señales. Aquí en cam- largo- y el lago Rivadavia, un extenso espejo glaciario
bio voy a encontrar algo que me sorprenda. Uno llega a de unas 2.200 hectáreas, que ocupa la cuenca de un
los balcones y mira, como si dominara el mundo desde valle rodeado de bosques de alerce y lenga. Sobre el
ese lugar. Si vas en vehículo sos espectador, pero si lago, la bahía Solís es el punto final de la etapa 37
caminás el paisaje te volvés parte de él. La naturaleza de la Huella Andina. Que, siguiendo hacia el norte,
siempre te sorprende y eso motiva para querer seguir permite completar una experiencia de tres días
descubriendo siempre algo más. Aunque ya hayas ve- en Alerces con su etapa 36, entre Bahía Solís y la
nido, siempre te encontrás con algo distinto: el viento, Portada Norte del Parque Nacional: son en total 9,3
el sol, la vegetación. Eso es lo mágico. Y todos los kilómetros que se recorren en cuatro horas y media,
tramos tienen su diferencia, su atractivo, todos mues- con bellas vistas del lago Rivadavia. Siempre siguien-
tran cosas distintas. Lo rico de esto es hacer entender do las franjas celestes y blancas de la Huella Andi-
al visitante que cada tramo tiene su particularidad. Lo na, cuyos trazos reflejan los colores del firmamento
que atrae es la diversidad”. austral, para atravesar la Patagonia con los pies en la
Y la diversidad es lo que se abre ante nuestros ojos tierra, y la cabeza en el cielo.
Distancia: 12 km
Duración: 4 hs Descripción: Con el transporte que hayamos elegido
llegaremos al área de servicios a cargo de la Flia Ruiz , que
Dificultad:
se encuentra situado dentro de la Reserva Corazón de la Isla,
a cargo de la Familia Ruiz, lugar donde podremos pernoctar
Elevación Min – Prom – Max
y salir al día siguiente o comenzar la caminata ese mismo
72m – 144m – 228m
día hasta la segunda ruca de madera con forma de TIPI
Ganancia y pérdida de elevación (tipo de construcción cónica, realizada con palos largos y
255m – 321m forrada de cueros utilizada por los antiguos leñeros, también
heredada de los Selk’nam ). Este patrimonio cultural se
Pendientes promedio de subida y bajada encuentra sobre el trazado del sendero y marca el fin de la
4.4% – (-4.5%) etapa, allí podremos pernoctar en el domo, con capacidad
para 8 personas, o bien descansar y seguir hasta el fin de la
etapa siguiente (para aquellos caminantes más veloces que
Precauciones: Prohibición de hacer realizan las dos etapas en un solo día). El sendero atraviesa
fuego en toda la Provincia, salvo en sitios bosques interiores típicos, donde abundan guanacos y
específicamente habilitados, consultar castoreras, y los “volteos” de bosque (grandes extensiones
a los teléfonos: +54 (02901)-432807/ de vegetación tumbados todos hacia la misma dirección
422576/432103/431156. producto de vientos extremadamente veloces). El camino
Realice el registro de la salida comunicándose muy accesible presenta desniveles suaves que determinan
a la Dirección Provincial de Áreas Protegidas una baja dificultad en todo su recorrido. Toda el área está
y Biodiversidad a los tel (02901) 430720 y rodeada de lagos y lagunas menores que se entremezclan
492035 y a través del Sistema de Seguridad con el paisaje boscoso, su simplicidad hace que sea posible
para Caminantes, ver ANEXO de lugares de recorrerlo de manera independiente y una vez terminados los
registro. trabajos de mejora en la senda, podría recorrerse también
en bicicleta.
Previsiones: Llevar 2 litros de agua,
provisiones y elementos de cocina. No hay
señal de celular.
Emergencias: Def Civil Ushuaia tel: 103
VHF 148615, Prefectura Lag. Fagnano VHF
156600 -156800, Def Civil Tolhuin VHF 149335,
guardaparques Corazon de la isla VHF 154135
ALOJAMIENTO ÓMNIBUS
COMBIS O RESTAURANTE BICICLETAS REFUGIO DE AGUA POTABLE
TRANSPORTE MONTAÑA
IRREGULAR
129
SENDEROS DE ARGENTINA
Distancia: 9 km
Duración: 4 hs Descripción: Esta etapa recorre el mismo bioma que la
anterior, aunque la zona está dotada de un sistema de lagos
Dificultad:
y lagunas. El Rancho de Lata se encuentra en el camino, a la
vera de una apacible laguna donde habitan patos y macaes.
Elevación min – prom – max
Esta construcción habla de un pasado de la ex estancia
34m – 83m – 135m
Carmen vinculado al desarrollo forestal y ganadero, donde
Ganancia y pérdida de elevación grandes latifundios se dividían la isla. La poco común y
215m – (-242m) destacable recuperación de las tierras de la ex estancia por
parte de la Provincia, a su vez afectadas a la creación del
Pendientes promedio de subida y bajada área natural protegida, resignifican una dinámica territorial
4.9% – (-5.6%) donde la mayoría de los habitantes no podían acceder a
estos lugares. La llegada al Lago Yakush, famoso por la
buena pesca de salmónidos y sus playas de arena invitan
Precauciones: Prohibición de hacer a pasar el día en él. La etapa es de baja dificultad y nos
fuego en toda la Provincia, salvo en sitios llevará tan solo unas pocas horas de caminata. Desde este
específicamente habilitados, consultar lugar podemos optar por seguir hacia el sur, hacia el Lago
a los teléfonos: +54 (02901)-432807/ Fagnano o completar un circuito con salida a la localidad de
422576/432103/431156. Tolhuin a través de los caminos de acceso del área natural
Realice el registro de la salida comunicándose protegida Corazón de la Isla, saliendo por ruta provincial Nº
a la Dirección Provincial de Áreas Protegidas 107. Sirve para una propuesta de dos noches con entrada y
y Biodiversidad a los tel (02901) 430720 y salida por Tolhuin, o salida en caso de emergencias.
492035 y a través del Sistema de Seguridad Lago Yakush: Sitio habilitado para hacer fuego (res.893/14)
para Caminantes, ver ANEXO de lugares de Informate del indice de incendios forestales de la zona antes
registro. de salir al campo, algunos lugares cuentan con una pizarra
indicadora de la probabilidad de incendios para ese día.
Previsiones: Llevar 2 litros de agua,
provisiones y elementos de cocina. No hay
señal de celular.
Emergencias: Def Civil Ushuaia tel: 103
VHF 148615, Prefectura Lag. Fagnano VHF
156600 -156800, Def Civil Tolhuin VHF 149335,
guardaparques Corazon de la isla VHF 154135
131
SENDEROS DE ARGENTINA
Distancia: 12 km
Duración: 4 hs Descripción: En este tramo, se mantiene una métrica accesible,
con 4hs de caminata y 12 km de baja dificultad, siempre alternando
Dificultad:
el bosque con espejos de agua. La senda pasa cerca de unas
construcciones propiedad del área protegida y que en este momento es
Elevación min – prom – max
gestionada la Asociación Riograndense de pesca con mosca, allí existe
31m – 47m – 72m
una cabaña y un quincho para asados rústico, enmarcado en una gran
Ganancia y pérdida de elevación pampa de pastizales a orillas del río Claro. Toda esta zona tiene acceso
236 m – -245m por medio de cuatriciclos desde la ruta provincial 107 desde Tolhuin o
por medio de una lancha accediendo por el río. El lugar nos sirve como
Pendientes promedio de subida y bajada un parador para el almuerzo camino a la costa del Lago Fagnano y
3.3% – -4.0% desembocadura del Río Claro.
Continuando la senda con dirección sur, luego de un pequeño
descenso por un bosque tupido, nos sorprenderemos con el Lago
Precauciones: Prohibición de hacer Fagnano que surge imponente, presentando pequeños acantilados,
fuego en toda la Provincia, salvo en sitios costearemos hacia la derecha (oeste) camino al río Claro. Al llegar a
específicamente habilitados, consultar la desembocadura del mismo, la costa se vuelve suave con playas de
a los teléfonos: +54 (02901)-432807/ arena amigables, río arriba el mismo progresa entre llanuras mallinosas
422576/432103/431156. Realice el registro formando pequeñas lagunas llenas de aves. Este es el lugar de
de la salida comunicándose a la Dirección encuentro con los servicios náuticos que nos permitirán cruzar el lago
Provincial de Áreas Protegidas y Biodiversidad ya que por la profundidad del río Claro no es posible vadearlo para llegar
a los tel (02901) 430720 y 492035 y a través a la bahía Guanaco donde se encuentra un Viejo puesto de la ex estancia
del Sistema de Seguridad para Caminantes, ver Carmen unos 4 km más adelante. Una vez realizado el cruce del lago, se
ANEXO de lugares de registro. abandona la Reserva Provincial Corazón de la Isla.
Desembocadura Río Claro: Sitio habilitado para hacer fuego
Previsiones: Llevar campera impermeable, (res.893/14) infórmate del índice de peligro de la zona a la que vas a ir y
guantes, botas de goma y abrigo, además de observa “el reloj” antes de salir al campo.
bolsas para impermeabilizar el equipaje por
cruce del lago, equipo de pernocte por si no se
puede cruzar el lago. provisiones. No hay señal
de celular
Emergencias: Def Civil Ushuaia tel: 103
VHF 148615, Prefectura Lag. Fagnano VHF
156600 -156800, Def Civil Tolhuin VHF 149335,
guardaparques Corazon de la isla VHF 154135 CAMPAMENTO BICICLETAS REFUGIO DE PESCA CON
MONTAÑA PERMISO
133
SENDEROS DE ARGENTINA
Descripción: El lago Fagnano posee unos 102 km de largo y su orientación es oeste – este, acompañando el cambio de
dirección de la Cordillera de los Andes, lo cual implica que la intensidad del viento puede provocar un oleaje importante que
podría llegar a impedir el cruce. Los prestadores son muy experimentados y poseen embarcaciones especiales para este tipo
de lagos, habrá que preveer posibles esperas en el río Claro. Hay dos posibilidades de cruce, la primera hasta Bahía Palacios
donde opera el Club Caza y Pesca Ushuaia, el cual dispone de cabañas, quincho, teléfono. Desde Bahía Palacios podremos
hacer vía de escape terrestre a través de la ruta provincial Nº 119, a Ushuaia, Tolhuin o Río Grande para acortar la travesía, o
continuar a Bahía Torito, desde donde comenzamos el segundo tramo que nos llevará al cruce de la cordillera hacia el Valle
de Tierra Mayor.
Laguna Palacios (Club Caza y Pesca de Ushuaia, conforme a condiciones de acceso del club): Sitio habilitado para hacer
fuego (res.893/14) infórmate del índice de peligro de la zona a la que vas a ir y observa “el reloj” antes de salir al campo.
En cercanías del muelle público en Bahía Torito, hay pobladores permanentes que pueden brindar servicio de comidas,
teléfono en casos de emergencia, y se los puede consultar por el servicio de transporte. Es reconocida su pericia y
conocimiento del lago Fagnano ya que la lancha es su medio de transporte diario.
Previsiones: si Ud dispone de un equipo handy vhf, los canales de transmisión de prefectura naval del lago Fagnano son
VHF 156600 y VHF 156800, dejelos cargados antes de salir, para llevar el handy, desconecte la batería, separe la antena
y coloque en una bolsa estanca para su transporte en la mochila, eso evitará que se encienda sola o se moje. lleve bolsas
de consorcio grandes para poner evitar que se moje la mochila.
Consultar por servicios de alojamiento habilitados en este sector y en toda la Provincia en www.tierradelfuego.org.ar o al
teléfono + 54 (02901) 432067. (Vicky)
Distancia: 11 km
Duración: 6 hs Descripción: La Bahía Torito, cuenta con un núcleo de servicios muy
completos y accesibles, este lugar de inigualable belleza situado sobre las
Dificultad: costas del Lago Fagnano, ofrece servicios de alojamiento, comida y traslados
lacustres. Una vez realizado el cruce náutico hasta la Bahía, tendremos la
Elevación Min – Prom – Max oportunidad de tomarnos un descanso o pernoctar a orillas del lago. Bahía
29m – 217m – 489m Torito es sin dudas un lugar clave de logística en este tramo, tanto en la
entrada o salida del cruce de la cordillera. Comenzaremos la caminata
Ganancia y pérdida de elevación
hacia el sur, pasando por un bosque bajo de ñires muy cerca de la costa,
570m – (-116m) cruzaremos un arroyo por un pequeño puente de madera y comenzaremos
Pendientes promedio de subida y bajada a ascender suavemente ingresando a un bosque quemado. Esta zona fue
castigada por un incendio forestal de grandes dimensiones muy reciente.
6.1% – (-3.1%)
En las primeras dos horas de caminata podremos observar los daños que
causó el fuego, pero también los paisajes del lago Fagnano con la cordillera
Precauciones: Prohibición de hacer de fondo. La senda va ganando altura suavemente, y podremos observar los
fuego en toda la Provincia, salvo en sitios esfuerzos que se realizan replantando árboles autóctonos en un intento de
específicamente habilitados, consultar recuperación forestal. A dos horas de camino y ya saliendo del bosque nos
a los teléfonos: +54 (02901)-432807/ encontraremos con un lomo que asciende hacia el paso con una fantástica
422576/432103/431156.
cascada a la derecha y una laguna a la izquierda, el lugar invita a quedarse
aunque es muy reciente la salida, aprovecharemos para comer algo y seguir
Realice el registro de la salida a través del
camino. Hacia arriba se intercalan terrenos húmedos de turberas y mallines
Sistema de Seguridad para Caminantes, ver con bosques de altura, las castoreras se suceden escalonadamente en los
ANEXO de lugares de registro. arroyos causando diques de diversos tamaños. En ocasión del incendio, los
Previsiones: Llevar botas de vadeo o de goma, diques sirvieron para alimentar las motobombas en la despareja lucha de
provisiones, elementos de cocina y equipo de controlar el fuego, aunque lamentablemente es la única cosa positiva que
pernocte. No hay señal de celular.
podemos apuntar ya que el daño que le provocan los castores al bosque y al
arroyo es enorme. Allí donde hay castores la tala de bosque es incesante. El
Emergencias: Def Civil Ushuaia tel: 103 Campamento del Paso Beban se propone como final de esta jornada, lugar
VHF 148615, Prefectura Lag. Fagnano VHF donde encontraremos un domo, armado para ocho personas, situado a una
156600 -156800, Def Civil Tolhuin VHF 149335, distancia de 11 km de la salida. Si bien el desnivel acumulado suma 570 mts,
guardaparques Corazon de la isla VHF 154135 no se nota por el bajo porcentaje de inclinación (un 6%), por esto podemos
decir que es una etapa de baja dificultad.
137
SENDEROS DE ARGENTINA
139
SENDEROS DE ARGENTINA
Distancia: 11 km
Duración: 5 hs Descripción: Luego del pernocte nos dirigiremos
valle abajo hasta el centro de servicios de Tierra
Dificultad:
Mayor, la caminata ira sorteando las turberas de la
especie Sphagnum tan particulares de esta zona
Elevación min – prom – max
y dominantes en este valle, buscando el tránsito
248m – 286m – 380m
por lomos boscosos y secos. Es notorio como los
Ganancia y pérdida de elevación castores van cambiando dinámicamente el paisaje
213m – (-334m) y el suelo, los diques generan zonas inundables
que se suceden a medida que avanzamos. Nos
Pendientes promedio de subida y bajada cruzaremos con un sendero maderero antiguo que
3.8% – (-5.0%) va hasta el camping del Olivia y que forma parte
de un antiguo camino que va hasta Ushuahia pero
nosotros seguiremos camino al centro de servicios
Precauciones: Prohibición de hacer de Tierra Mayor. Cruzaremos la pista provincial
fuego en toda la Provincia, salvo en de esquí de fondo (PiPEF) donde se realizan
sitios específicamente habilitados, innumerables actividades en invierno, entre ellas la
consultar a los teléfonos: +54 (02901)- famosa Marcha Blanca donde participan cientos
432807/ 422576/432103/431156. de personas. Al llegar a Tierra Mayor, situado
Realice el registro de la salida a través del sobre la Ruta Nacional Nº 3 podremos renovarnos,
Sistema de Seguridad para Caminantes, luego de la extensa travesía, en alguno de los
ver ANEXO de lugares de registro. centros de servicios invernales que permanecen
abiertos durante todo el año, con una buena ducha,
Previsiones: Llevar botas de goma,
comida y cama luego de la extensa travesía, o
provisiones y elementos de cocina.
bien trasladarnos a Ushuaia (distante a 20km
Emergencias: Def Civil Ushuaia tel: 103 aproximadamente), en alguno de los transportes
VHF 148615, Prefectura Lag. Fagnano públicos que pasan por la ruta, a los cuales se
VHF 156600 -156800, Def Civil Tolhuin puede llamar por teléfono.
VHF 149335, guardaparques Corazon de
la isla VHF 154135
141
SENDEROS DE ARGENTINA
Distancia: 8 km
Duración: 3,5 hs Descripción: El sendero comienza sobre el camino donde se
encuentra el centro de servicios proyectado, tendremos que realizar
Dificultad:
el vado del Río Lasifashaj y a pocos metros entraremos en la
senda que va a las cascadas y a la laguna del cerro Submarino. El
Elevación min – prom – max
sendero atraviesa una zona densamente boscosa de lengas, que
231m – 463m – 694m
presenta una huella abierta precariamente pero que denota mucho
Ganancia y pérdida de elevación tránsito, doblaremos a la derecha siguiendo el valle que va ganando
497m – (-73.1m) altura suavemente, el cañadón del arroyo Submarino nos queda
siempre a nuestra izquierda y abajo, luego de un par de horas
Pendientes promedio de subida y bajada llegamos a las hermosas cascadas formadas por el contrafuerte
8.9% – (-4.3%) del cerro y que se nutre de la laguna superior. Subiremos el
contrafuerte por el bosque achaparrado de lengas, aquí se trabajará
en la senda para hacerla más fácil ya que es como un escalón.
Precauciones: Prohibición de hacer Continuaremos por un bosque bajo que enseguida desaparece para
fuego en toda la Provincia, salvo en sitios dejarnos en una amplia planicie de altura rodeada de hermosas
específicamente habilitados, consultar cumbres enmarcando la laguna Submarino. Esta es una de las
a los teléfonos: +54 (02901)-432807/ más lindas sendas de la zona sur, accesible y de hermosos
422576/432103/431156. paisajes circundantes, las cumbres rodean la laguna como un gran
Realice el registro de la salida a través del anfiteatro de rocas, aquí podremos descansar y pernoctar en el
Sistema de Seguridad para Caminantes, ver domo armado para continuar al día siguiente a la última etapa y
ANEXO de lugares de registro. llegar al Canal Beagle.
Previsiones: Llevar equipo de pernocte. No hay
señal de celular.
143
SENDEROS DE ARGENTINA
Distancia: 15 km
Duración: 5 hs Descripción: Esta será la última etapa o la primera dependiendo de
dónde se inicie la caminata, pero sin duda el sentido más favorable es
Dificultad:
de norte a sur dado que llegaremos al nivel del mar. Luego de pasar
por la laguna Submarino nos dirigimos al paso homónimo, se trata
Elevación Min – Prom – Max
de una pequeña subida de unos 50m sin dificultad, una vez llegados
17m – 300m – 659m
al paso tendremos que atravesar un pedrero que hace de portezuelo.
Ganancia y pérdida de elevación Este paso habrá que hacerlo con cuidado por la presencia de piedras
250m – (-800m) grandes que nos pueden causar un tropiezo, una vez superado el
pedrero comenzaremos a descender para el valle que irá girando a la
Pendientes promedio de subida y bajada derecha y por esa razón nos impedirá ver el mar, la senda irá transitando
5.5% – (-8.0%) la ladera oeste (derecha) del valle y bajando suavemente internándose
en el tupido bosque de costa marítima hasta encontrarse con un valle
secundario que aparece a la derecha. Este es un buen momento para
Precauciones: Prohibición de hacer hacer un descanso y comer una vianda antes de continuar. Retomando
fuego en toda la Provincia, salvo en sitios el descenso comenzaremos a girar al oeste donde ya tendremos la
específicamente habilitados, consultar majestuosa vista del Canal Beagle y de la ciudad de Ushuaia, también
a los teléfonos: +54 (02901)-432807/ tendremos señal de celular para poder avisar de nuestra llegada y
422576/432103/431156. solicitar el transporte. Finalmente bajaremos hasta la baliza de entrada al
Realice el registro de la salida a través del canal Beagle donde llega la ruta de acceso (Provincial 30) vehicular que
Sistema de Seguridad para Caminantes, ver va por la costa desde la baliza hasta el Río Olivia y donde pondremos fin
ANEXO de lugares de registro. a nuestra travesía.
Previsiones: Llevar 2 litros de agua,
provisiones y elementos de cocina. Hay señal
de celular llegando al canal Beagle.
REFUGIO DE
MONTAÑA
145
SENDEROS DE ARGENTINA
Completando en pocos minutos los datos que se solicitan en cualquiera de los puntos de registro
habilitados, un grupo de instituciones amigas estarán avisadas del inicio de su aventura. En caso
que no regrese en la fecha prevista, se pondrá en funcionamiento todo un sistema de búsqueda y
rescate que integran grupos de profesionales que recorrerán la zona por Ud. anunciada.
Ciudades de Cabecera
Humahuaca en el noroeste y Libertador Gral San Martín y Calilegua por el sureste.
Acceso por el sur: También desde San Salvador de Jujuy por Ruta Provincial N° 66
empalme ruta Ruta Provincial N° 34 hasta Libertador General San Martín.
jujuy
Desde Humahuca a Santa Ana (en combi)
ETAPA DE CONEXIóN
Descripción: Un servicio regular de combis que sale todos los días de Humahuaca nos permitirá llegar a la localidad de
Santa Ana. Conexión de altura, obligatorio desviarse al mirador del Hornocal. Durante el camino pasaremos por la entrada
de acceso al espectacular mirador del Hornocal, un cordón montañoso de roca sedimentaria que presenta una curiosa trama
de 14 colores en la montaña y que lo hace único e imperdible (se recomienda visitarlo después de medio día por la intensidad
de la luz solar), también pasaremos por los parajes de Palca de Aparzo, y Aparzo, en franco ascenso, por los portezuelos de
abra del Arca a 4440 msnm y abra del Viento a unos 4590 msnm siendo este el lugar más alto del camino. Luego de superar
el abra, comenzará el descenso permanente y sinuoso con dirección a Santa Ana, un pequeño y pintoresco pueblito detenido
en el tiempo que guarda celosamente sus tradiciones y donde podremos observar su iglesia y las típicas construcciones de
piedra y adobe. Se recorrerán unos 117 km en total desde Humahuaca a Santa Ana donde arribaremos en horas de la tarde.
ALOJAMIENTO ÓMNIBUS RESTAURANTE TELÉFONO CABALGATAS PROVEEDURÍA INFORMACIÓN MIRADOR ARTE RUPESTRE
PÚBLICO
153
SENDEROS DE ARGENTINA
JUJUY
ETAPA 1
Santa Ana - Valle Colorado
Distancia: 15,3 km
Duración: 7 hs Descripción: A lo largo de esta etapa visitaremos un sitio declarado
Patrimonio Mundial por la Unesco, por ello recomendamos realizar el tramo
Dificultad: hasta Cortaderas acompañados por un guía de sitio. Partiendo de Santa Ana,
nos dirigiremos por un camino vehicular en subida con dirección este hasta
Elevación Min – Prom – Max
el Abra del Valle, que dista 1,4 km del pueblo. En este lugar encontramos una
1952m – 2770m – 3439m cruz que divide ambas laderas, el camino vehicular continúa hacia el sudeste
Ganancia y pérdida de elevación (derecha), ahora siempre en descenso. A poco de andar por el camino nos
desviaremos tomando una senda que va por debajo del mismo. A 2,5 km
515m – (-1906)
retomaremos el camino y unos metros más adelante nos encontraremos con
Pendientes promedio de subida y bajada la Quebrada Grande que baja desde los filos. Unos 500 metros más y veremos
8.9% – (-15%) una senda hacia arriba que nos lleva por el medio de dos antiguas pircas
paralelas que delimitan este segmento del Sistema Vial Andino Qhapaq Ñan,
dejando el camino vehicular por debajo. A 5 km aproximadamente de nuestro
Previsiones: Llevar dos litros de agua, punto de partida comienzan Las Escaleras. De a poco comenzará a hacerse
sombrero, lentes de sol, protector solar, presente la vegetación del bosque alto andino, con pequeños árboles de alisos y
repelente para mosquitos y vianda. queñoas, a unos 9,5 km de nuestra travesía encontraremos un cañadón llamado
Posibilidad de alquilar burros para el porteo “Cortaderas” con un pequeño arroyo y sombra donde podremos descansar,
de equipaje y mochilas. comer algo y recobrar fuerzas para continuar. Una vez que retomemos el
Avisar llegada al hospedaje de Santa Ana camino vehicular nuevamente, recorreremos un breve tramo y tomaremos el
y Valle Colorado con anticipación a través desvío que va hacia abajo por la izquierda, cortando por un morro empinado
de la Secretaria de Turismo de Jujuy, o y ya en sendero de montaña, la vegetación se irá poniendo más espesa con
llamando al teléfono semipúblico de Santa el descenso siempre constante. Nos encontraremos con una puerta de metal
montada sobre pircas de piedra, para ese entonces habremos descendido cerca
Ana 03887-462001 y al teléfono
de 900 metros y caminado unas cinco horas y media. Una hora más de marcha
03887-461001 de Valle Colorado
y encontraremos el abra de Martín, (2200 msnm) desde donde podremos
divisar El Valle Colorado y el Pueblo. Un rato más y llegaremos a la entrada
del pueblo Valle Colorado situado a 1970 msnm. Si bien el camino siempre es
en descenso, no debemos menospreciar el esfuerzo muscular que implica la
bajada. La travesía nos tomará cerca de 7hs yendo a ritmo lento, de las cuales 2
serán utilizadas para descansos. Atención: esta etapa es unidireccional.
155
SENDEROS DE ARGENTINA
jujuy
ETAPA 2
Valle Colorado - Valle Grande
Distancia: 10,3 km
Duración: 3:30 hs Descripción: Partiendo de Valle Colorado, cruzaremos el puente del río Grande
y seguiremos por el Ruta Provincial N°83 rumbo a Valle Grande, esta etapa irá
Dificultad: mayormente por camino vehicular pero no dejará de tener su encanto, ya que
la vegetación cada vez más exuberante nos irá dando indicios de que a medida
Elevación Min – Prom – Max que perdemos altura se irá convirtiendo en selva montana, la profundidad de los
1631m – 1796m – 1962m valles en contraste con la gran altura de la montaña atraparán la atención y los
sentidos del caminante. El lugar es propicio para el avistaje de aves, ya que en
Ganancia y pérdida de elevación esos ambientes abunda la biodiversidad y es una oportunidad excelente de
452m – (-758m) observarlas en su medio natural. Aproximadamente a 7,8 km de nuestra salida
encontraremos la posibilidad de transitar por un sendero que sale a la derecha en
Pendientes promedio de subida y bajada bajada y que por espacio de 20 minutos nos llevará por senderos pedestres para
9.3% – (-11.2%) luego retomar la ruta (formando una cortada), en ese sendero encontraremos una
cascada que se desliza sobre una superficie de piedra lisa y que en momentos de
lluvias (donde trae y desciende más agua) puede tornarse peligroso por el riesgo
Previsiones: Llevar agua, sombrero, lentes,
de un resbalón sobre la piedra, así que es muy conveniente pasar con sumo con
protector solar, repelente de insectos. Avisar cuidado. Posteriormente la senda se transforma en un angosto faldeo con un
llegada al hospedaje de Valle grande con contrafuerte de roca junto a un paredón de piedra. Las bromelias adornan los
anticipación a través de la Secretaria de costados del camino prefiriendo los paredones rocosos dándole una impronta
Turismo de Jujuy, o llamando al teléfono muy bella. En este tramo tenemos la posibilidad de contratar el servicio de burritos
semipúblico de Valle Grande 03886-461001 cargueros, este tipo de servicio no sólo nos permite caminar despojados de la
carga, sino que también es muy interesante escuchar los relatos de los lugareños,
quienes a su vez ofician de guías de sitio. Luego la senda nos llevará nuevamente
hacia el camino que poco más adelante pasará por un pequeño cementerio local.
Un puente de material nos dará la bienvenida a “Valle Grande”, un pueblo que nos
recibirá con la calidez de la gente norteña de campo, posee todos los servicios
necesarios tales como, lugares de comidas, hospedajes, teléfono, almacenes y
transporte público todos los días a San Francisco. Es una zona donde abundan
las fiestas tradicionales en los distintos pueblos cercanos. Le recomendamos no
perderse la oportunidad de asistir a alguna de ellas, ya que en ellas se exponen
todas sus tradiciones, gastronomía, desfiles gauchescos, jineteadas y bailes donde
asisten cientos de familias.
jujuy
jujuy
ETAPA DE CONEXIóN
Valle Grande a San Francisco
jujuy
jujuy
ETAPA 3
San Francisco - Termas de Jordán
Distancia total: 18,6 km Descripción: En busca de las Termas del Río Jordán.
(9,3 km ida + 9,3 km vuelta desde San Francisco) El pintoresco pueblo de San Francisco está dotado de variados servicios como
Duración: 7 hs (bajada 3 hs, subida 4 hs) hosterías, casas de alojamiento, restoranes, cajero automático, y un servicio
regular de colectivos que viene desde Calilegua hasta Valle Grande y regresa
Dificultad: todos los días. Luego de las dos intensas jornadas desde que partimos de
Santa Ana, esta localidad nos propone hacer un alto en el camino para disfrutar
Elevación Min – Prom – Max de las termas de Jordán. Si bien este sendero es de ida y vuelta (regresando al
mismo lugar de partida) constituye una experiencia inolvidable que es digna
872m – 1219m – 1506m
de aprovechar. Saliendo por la Ruta Provincial N°83 en dirección a Calilegua,
Ganancia y pérdida de elevación encontraremos el cartel de cabecera que nos indicará el camino, recorreremos
aproximadamente 3 km por la misma hasta llegar a una curva donde hay
300m – (-912m) un cartel de inicio de sendero, en ese cartel la comunidad advierte de la
Pendientes promedio de subida y bajada obligatoriedad de contratar un guía local de San Francisco. Una vez arreglado
los permisos de ingreso con la comunidad, comenzaremos el descenso al
8.7% – (-13.5%) cañadón del río Valle Grande donde se conecta con el cañadón del Jordán
donde se encuentran las termas. La vegetación es muy variada, comenzando
Para el regreso se invierten los valores a notarse especies de la selva montana, con presencia de lianas leñosas y
helechos. El sendero faldea la ladera durante una hora y media con desniveles
suaves para luego comenzar una bajada constante que se empina muy fuerte
llegando casi al río Grande, aquí es recomendable el uso de bastones de
trekking o en su defecto una buena caña para apoyo extra en la bajada. A la
derecha nos quedará el río, caminaremos por su costa río abajo unos 50m
hasta llegar a una curva del río donde un cañadón estrecho se encuentra con el
mismo. Subiremos por ese cañadón unos metros apenas hasta encontrarnos
con el primer pozón termal, llama poderosamente la atención el color turquesa
de sus aguas, más arriba el agua termal va formando saltos y pozones en el
lecho de piedra para finalmente alcanzar el río. Es importante tener en cuenta
que debemos regresar por el mismo camino, de manera que se aconseja llevar
una linterna por si se hiciera de noche y salir con tiempo suficiente para no
regresar en la oscuridad. Existen servicios de guías de sitio de la comunidad
con apoyo de caballos que brindan también servicios de comidas en el lugar.
El regreso será más lento y esforzado, pero la oportunidad de haber conocido
un lugar tan fantástico seguramente quedará grabada en nuestras retinas y de
vuelta en la hostería, seguiremos disfrutando de la experiencia vivida.
jujuy
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Calilegua, Mesada de las Colmenas y Aguas Negras
SENDEROS DE ARGENTINA
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SENDEROS DE ARGENTINA
5 días - 6 noches
Experiencia: Huella Andina del Norte
entre la Quebrada y las Yungas
Por Graciela Cutuli
Humahuaca, punto de partida del viaje que permitirá no es tanta, el camino es de cornisa y requiere unas
atravesar un sorprendente cambio de paisaje en po- cinco horas. Conviene tener en cuenta que, si bien se
cas decenas de kilómetros. pasa por el mirador de la Serranía del Hornocal –el
Más allá del interés que despierta la Quebrada por famoso Cerro de los Catorce Colores- por la mañana
la belleza de sus pueblos y la riqueza de su historia, el el colorido cordón está en la sombra y no se aprecia
alto en Humahuaca antes de comenzar la travesía su multitud de matices. Es un motivo más para per-
es esencial por motivos de adaptación a la altura: manecer en Humahuaca y conocerlo la tarde anterior,
el recorrido de la Huella Andina del Norte empieza antes de emprender la travesía hacia Santa Ana.
aquí a 3.000 metros de altura y superará los 4.500 en Apenas se dejan atrás la Quebrada y su afluencia
lugares como el Abra del Zenta, manteniéndose a lo turística empieza a perfilarse la Puna. Un paisaje de
largo de todo el recorrido en los márgenes de lo que colores ocres y aire que puede ser filoso como un
la medicina de montaña considera “gran altitud” (de chuchillo, pero que se amansa cuando sopla el viento
1.500 a 3.500 metros) y “muy alta altitud” (de 3.500 a norte, aunque sea pleno invierno: “La gente que hizo
5.500 metros). Para disfrutar de la experiencia es cla- charqui en estos días –comenta el chofer- en dos días
ve haber logrado una buena adaptación a la altura, que ya tenía seca la carne. El viento norte cambia todo
en primer lugar requiere tiempo para acostumbrarse el clima. Hasta la noche es más suave. Allá hay una
a la menor cantidad de oxígeno disponible. Dicen los familia que hizo chalona, charqui de cordero, y para
entendidos que en la Puna el secreto es “caminar que le queden esos cuatro kilos de charqui debe de
despacito, comer poquito y dormir solito”: habrá que haber usado no menos de diez kilos de carne fresca”,
hacerles caso, y llevar también un mate de coca en agrega mientras señala una de las casitas de adobe
la mochila. del caserío de Aparzo, rodeado de corrales de piedra
Humahuaca, al este de la RN 9 que recorre la y cabras. Ya no hay cardones, ya no hay nada: sólo
Quebrada, fue uno de los ejes clave para el comercio abismos que se levantan sobre colchones de nubes,
en el camino rumbo al Alto Perú. Hoy es un pueblo- y algunas vicuñas gráciles que huyen rápidas con
ciudad de casas de adobe donde, a pesar de que el la vibración de los motores. Aquí y allá algún ojo de
tiempo quebradeño parece discurrir por carriles de agua, a medias congelado en invierno, asoma entre
ritmo propio, es necesario llegar puntual: porque aquí, las cumbres rojizas. A más de 4.500 metros, el Abra
cada mediodía, una estatua tallada en madera de San de Zenta es el punto más alto de la ruta: desde allí
Francisco Solano asoma por una hornacina del muni- el camino hacia Santa Ana empieza a bajar y des-
cipio y bendice a los presentes reunidos en la plaza. emboca finalmente en el pueblo.
A pocos pasos está el monumento a los Héroes de “Bienvenidos a Santa Ana”, dice una leyenda es-
la Independencia, más conocido como Monumento crita en la montaña para verse a la distancia, y bien-
al Indio, un homenaje al coraje de los quebradeños venida es lo que se siente en lo de Doña Gaby, dueña
en las largas y sufridas batallas que finalmente lleva- del “Portal de las Yungas”, el principal hospedaje del
ron a la independencia a principios del siglo XIX. Y pueblo, que invita a un merecido descanso después
como todo es cerca, tampoco está lejos el mercado, del traqueteo del viaje.
de visita imprescindible para descubrir la riqueza de Santa Ana tiene unos 500 habitantes y los servi-
los productos andinos, que integran ese patrimonio cios básicos distribuidos en su puñado de calles cru-
intangible de la tradición gastronómica local: quinoa, zadas por acequias, a las que se asoman sus casas
papines, locoto, quesos de cabra, maíz. de adobe: escuela primaria y secundaria, puesto de
Y después sí, habrá llegado el momento de em- salud, destacamento policial, capilla y la comisión
prender al día siguiente la partida en vehículo desde municipal. Como en muchos de los pueblos de la
Humahuaca hasta Santa Ana, algo más de cien kiló- región, tantos son los católicos como los evangéli-
metros que apartan al viajero de las rutas turísticas cos, y esta división traza una diferencia neta en una
habituales y lo sumergen en el genuino corazón de la comunidad coya que en todo lo demás se ve homo-
Puna. El traslado se puede hacer en vehículos priva- génea. Tímida y reservada, la gente habla poco y en
dos que se contratan en Humahuaca o en transporte cierto modo parece fundirse con este paisaje áspero
público, una combi de pasajeros que sale bien tem- de montaña y colores uniformes, donde las tradicio-
prano porque, aunque la distancia hasta Santa Ana nes de la vida comunitaria y del trabajo rural se dirían
Santa Ana
inmutables. Preguntando, se puede llegar hasta la Portugal, y muchos otros lugares del mundo que
casa de un platero, o conocer a las bordadoras que desde aquí, en medio de este silencio, parecen más
puntada a puntada dibujan en sus mantos los colores remotos que nunca.
de la Puna. Entre casa y casa pasean gallinas, burros “Mi marido decía ‘estoy haciendo un hotel’, y la gen-
y chanchos, transeúntes ocasionales que también te se reía. ‘¿A quién van a alojar aquí? A las vacas, a las
miran con curiosidad al recién llegado. ovejas’. ‘Ya van a ver, con el tiempo van a venir’, res-
La Despensa Maxi tiene todo lo necesario: este pondía él”, cuenta Gaby, que tiene tres hijos –“los tuve
“ramos generales” puneño ofrece desde pequeños en mi casa, no se necesitaba la enfermera, el hospi-
electrodomésticos hasta bebidas, pan y fiambres. tal”- y cuenta que mucha gente del pueblo, con el ciclo
Hay que tocar timbre y esperar: los negocios de San- escolar ya terminado (aquí es de septiembre a junio),
ta Ana, como los de Valle Colorado y otros pueblos, “se fue de vacaciones a sus puestos, a ver las ovejas al
suelen ser a puertas cerradas, con apenas una ven- cerro, las vacas al monte. Ahora empiezan a llegar los
tana para el despacho, y no está bien visto ir a la viajeros de Suiza, de Francia, como las dos chicas que
hora de la siesta. Inútil pensar en hacer o recibir un vinieron hace un par de años y querían ver el nacimien-
llamado: la señal de celular no existe desde hace ho- to de los corderitos, o la española que se recorrió todo
ras, desde que se ha dejado atrás Humahuaca, y en el camino desde Salta hasta Tilcara con un burro, y en
el pueblo hay solamente una cabina semipública que Tilcara se compró otro. Desde allí hizo Valle Grande,
funciona en una casa particular y atiende en horario Valle Colorado, y cuando llego aquí el burrito comió un
de oficina. Hacer llegar los mensajes a Doña Gaby pasto que no debía, porque les hace mal, y le tuvimos
antes del arribo también será tarea difícil: requiere que preparar un remedio que hacía mi papá, una purga
logística por un lado, y capacidad de improvisación de maíz blanco molido con limón, hasta que expulsó la
por otro, en caso de que el mensaje en cuestión no hierba que lo había intoxicado. Y así siguió camino a
haya llegado. Pero todo lo demás se arregla con la Caspalá, y de ahí a Humahuaca y Uquía”.
hospitalidad de la anfitriona, cuyo libro de pasajeros Como esa, son muchas las historias que atraviesan
muestra firmas de Alemania, Suiza, Estonia, Austria, la vida de Doña Gaby, historias de viajeros que llegan
desde la otra punta del mundo, solos o en grupo, pero Ecuador y Colombia, por el norte, y hacia Bolivia,
siempre movidos por la misma curiosidad de acer- Argentina y Chile por el sur: eran en total más de
carse al modo de vida de este pueblo enclavado en 30.000 kilómetros que, a través de montañas y ríos,
las entrañas de la Puna. Un poco más allá del “Portal sin importar alturas ni relieves, conectaban el terri-
de las Yungas” está la plaza, cerrada para evitar que torio de lo que hoy son seis países, uniendo centros
los animales se coman la corteza de los árboles, y administrativos, ceremoniales y de producción.
un poco más allá todavía el cementerio, un cuadrado En la Argentina, el Qhapaq Ñan –declarado Pa-
silencioso con flores y cruces que hace pensar en trimonio Mundial en la categoría Itinerario Cultural
las palabras de Héctor Tizón: “La Puna no es sólo Transnacional Seriado por la Unesco- unía los territo-
un desierto lunar cálido y frío, es una experiencia: allí rios de las provincias de Jujuy, Salta, Tucumán, Ca-
se viven intesamente el silencio, la soledad, el des- tamarca, La Rioja, San Juan y Mendoza: en total, se
amparo. Y los seres humanos se miran a sí mismos conservan unos 119 kilómetros que conectan sitios
como en un espejo, enfrentados a la razón de existir, arqueológicos relevantes para comprender la vida
a su destino más elemental”. y las creencias de la civilización que marcó defini-
tivamente el alma andina. Parte de ese trazado es el
que une Santa Ana y Valle Colorado, esas escaleras
Qhapaq Ñan y Valle Colorado de piedra colocadas con regularidad entre las pircas
que aún hoy forman parte de la vida diaria de las co-
El camino que va hoy de Santa Ana a Valle Colo- munidades locales. Por razones de conservación, es
rado –dieciocho kilómetros que son el corazón de preciso recorrer este tramo con guía: y paso a paso
la Huella Andina del Norte - permite al caminante en la montaña, cada metro que se avanza significa
transitar por tramos intactos del sistema vial andino también adentrarse en el corazón del pasado más
Qhapaq Ñan en el norte argentino, tal como lo hicie- remoto de la región.
ron desde tiempo ancestrales los pueblos andinos Partiendo de Santa Ana, el primer tramo de ca-
que vivieron en las regiones de la Puna y las Yungas. mino hacia Valle Colorado implica recorrer unos
El Qhapaq Ñan, esa red de caminos construida en 1.400 metros de subida accesible hasta llegar al
más de 2000 años de cultura andina pre-inca, partía Abra del Valle, a 3.450 metros de altura. Desde
del corazón del Tawantinsuyo en el actual Perú hacia allí los 14 kilómetros restantes son en bajada,
siguiendo en parte la ruta vehicular –que por el no lo sepa todavía, los pobladores ya vislumbraron
momento llega sólo hasta Cortaderas, a mitad de su llegada. Pueblo pequeño, corazón grande: aquí
camino- y en parte la senda pedestre entre las pir- todo se sabe y bastarán unas horas apenas para que
cas. Arriba, abajo y a los costados, todo lo que hay cualquier transeúnte esté informado del lugar donde
aquí es paisaje: nada parece interrumpir la sucesión se aloja el recién llegado y su lugar de procedencia.
de montañas donde el camino ya está trazado desde En “El Paraíso”, Martina Calapeña recibe a los
hace generaciones, ni el cielo que se cierne como visitantes en su propia casa. Haber llegado a Valle
una inmensa bóveda donde planean sin inmutarse Colorado, vale recordar, no significa mayor conexión
jotes, cóndores, halcones peregrinos. Los pies, por con el “mundo exterior” fuera de los valles jujeños:
su parte, saben dónde ir: siguen el trazado de las aquí tampoco hay señal de celular, y aunque se habla
zigzagueantes escaleras con sus piedras encastra- de un wi-fi que funciona en la parte baja del pueblo,
das prolijamente entre las pircas, las mismas piedras frente al río Valle Grande, es más una expresión de
intactas que hace cientos de años –como hoy- tran- deseos que una realidad. Pero en la casa de Martina
sitaban personas y animales llevando vida y comuni- todo está bien preparado para recibir a los viajeros,
cación entre los valles. que tienen aquí una de las mejores oportunidades del
Al observador atento no se le escaparán los de- viaje para acercarse a la vida diaria de la comunidad
talles de una primitiva pero eficaz tecnología que local, que se muestra más abierta que en la Puna.
resuelve los problemas planteados por la pendiente Aunque la gente sea la misma, como se encargan de
del terreno, y los “diquecitos” de piedra que cada subrayar: muchas familias de Valle Colorado tienen
tanto cruzan el trazado, para evitar que en época de casa en Santa Ana, y la conexión con el pueblo pu-
crecidas el curso de agua canalice por el camino. neño es más fluida que hacia los siguientes pueblos
Tampoco dejará de ver que los fósiles presentes en de Valle Grande y San Francisco, aunque haya que
el camino –trilobites, turritellas- revelan un antiguo hacer el camino a pie.
lecho marino subyacente en el paisaje actual. Y Preguntando, se llega a la casa de Concepción
pronto aprenderá a reconocer las queñoas, árboles Flores, guía baqueano de turismo y poblador de
de entre tres y ocho metros que crecen en los bos- toda la vida. “Hice de primer grado a sexto acá, en
ques de altura por encima de los 2.000 metros y son, la escuela, y séptimo en Santa Ana. Después volví
junto con los alisos, los más altos que pueden verse y siempre vivimos acá… Ahora soy guía, siempre
en esta parte de la Huella. hablo con los turistas, les pregunto si les gusta el
Paso a paso, se avanza frente a un filo de la Cor- lugar. Más de una vez llevé a turistas europeos de
dillera Oriental, de origen volcánico, rica en secretos subida para Santa Ana, y también puedo guiar de
geológicos acumulados a lo largo de diez millones allá para acá”, cuenta Concepción, que conoce los
de años: esta cordillera baja hacia Calilegua en “fi- problemas de comunicación –“es complicado, hay
los” divididos por ríos, entre antiguos afloramientos señal en alguno que otro lugar”- pero los sortea con
rocosos que miden su edad en millones de años. Y la buena voluntad de sus vecinos. Otra opción son
poco a poco, ese paisaje que era aridez pura em- los mensajes a los pobladores difundidos vía radio:
pieza a cambiar, con los primeros manchones de siempre hay un oído atento que, si el interesado no
bosque que revelan la menor altura, el cambio de lo supo personalmente, se lo hará llegar. Al fin y al
ambiente y una naturaleza algo más amigable para la cabo, quien llega hasta aquí no se da por vencido
actividad humana. Aún falta, pero ya se vislumbra la sino que lo busca casa por casa hasta que encuentra
razón de ser de este itinerario que une dos extremos: a su guía para salir a recorrer lo que hay para ver
la Puna y las yungas, la aridez y la exuberancia, la en los alrededores y, cuando es posible, acompañar
cultura colla y la guaraní. Cuando finalmente, tras a los pobladores en su vida de transhumancia, una
una vuelta del camino, aparece el cartel que dice costumbre que no se ha perdido y que vive regida
Valle Colorado, cierta sensación de victoria se por las temporadas húmeda y seca que se suceden a
adueña de los caminantes, que emprenden con su lo largo del año en esta puerta de las yungas.
última energía el tramo final en descenso hacia el “Los llevo a ver un molino que molía como antes,
pueblo, por una ruta de tierra tan colorada que haría con agua y piedra, y también vamos río arriba, hasta
palidecer a la región misionera. Y aunque el viajero donde estaba la toma de agua. Se puede subir tam-
bién por un caminito por donde trepan las vacas, que viste siempre su pollera y su rebozo, está siempre
tiene unas cascaditas. Quién sabe, con suerte se pue- atareada entre la casa y la cocina para sus hués-
de encontrar de fauna, aunque es raro: algún venado pedes: la mesa de su comedor brinda la oportuni-
andino, pero es muy difícil de ver, más bien chanchos dad de probar a la noche una humeante sopa de
de monte, que a veces bajan y destruyen los cultivos verduras –cultivadas por la familia en los campos
de la gente. Y un puma por ahí puede andar; distinto el aledaños- y guisos a base de carne y maíz donde
yaguareté, que es más arisco”. “La vida para nosotros parecen sumarse todos los sabores ancestrales del
–agrega Concepción con sencillez, pero con certeza valle. Y con orgullo, en el televisor de su comedor,
ganada en años de trabajo en otras regiones del país- Martina ofrece ver un documental realizado un tiem-
no es como en la ciudad. En la ciudad, si no tenés po atrás donde cuenta su testimonio sobre la vida
plata estás sonado. Acá podés cultivar, si tenés ani- en Valle Colorado y el conocimiento de la medicina
males siempre tenés carne, la carne no se compra. Y tradicional que las mujeres de la comunidad se fue-
se hace charqui también, que se corta fino como para ron transmitiendo de generación en generación. “Yo
milanesa, se sala y se pone a secar. Una pierna, por nací aquí –se la escucha decir desde la pantalla, con
ejemplo: aunque hay que esperar a la época seca, de el mismo hablar pausado con que cuenta su vida
abril en adelante, para ponerse a charquear. Acá la vida cotidiana en su comedor-, me gusta poner mi huer-
es tranquila. Aunque la gente joven y las familias se es- tita, me gusta tener mis animales, mis vaquitas, mis
tán yendo... Muchos se van pensando que en la ciudad corderitos, gallinas, lo que en el campo se puede
van a estar mejor. Pero muchos vuelven, y cuando se tener. Aquí estamos tranquilos, los chicos chiquitos
jubilan regresan para tener una vida más tranquila acá”. pueden andar felices al campo, no hay peligro de
Desde el patio de su casa, al borde de una calle nada. Estamos acostumbrados, comemos la comi-
por donde andan unos gallos que son el despertador da del campo, lo que madura aquí, todo natural. Y
ecológico de todo el pueblo, Concepción llama a Elda, hay muchos remedios que son del campo, para la
su mujer, que llega vestida –como la mayoría de las tos, para el resfrío… Son muy largas las distancias
mujeres del pueblo- con su ropa tradicional: una falda, para llegar al hospital y hay que usar el bolsillo, por
amplia y colorida como la montaña de la Quebrada que eso seguimos usando las hierbas naturales de esta
los lugareños llaman “la pollera de la coya”; envolvién- zona”. Y no sólo por las distancias, sino también
dole el pecho un rebozo que bordó con sus propias porque muchas mujeres conocen y están dispues-
manos; en la cabeza un sombrero de cintas con ador- tas a transmitir este saber recibido a su vez de sus
nos de plata. Porque Elda es ducha en una de las es- madres, de sus abuelas, desplegando con manos
pecialidades de las mujeres de la región: la confección tranquilas y voz suave el secreto de la salud nacido
y bordado de rebozos y pompones que se usan en las a la sombra de estas regiones silenciosas y solita-
trenzas, como adorno de los sombreros, o como llave- rias. Lo mismo ocurre con los productos de la tierra,
ro. “Los modelos de flor –explica mientras despliega el que más allá del alimento están vinculados a una
gran pañuelo a la luz del sol- se sacan de las plantas cosmovisión y un uso ancestral, al respeto por la
que hay por aquí. Muchos nos dicen que las bordamos Pachamama, a los ritos de agradecimiento a la tierra
a máquina, pero no: estos rebozos son doble cara”. Y y a la civilización incaica que integró y unificó el uso
mientras lo dice, muestra un envés que confirma sus de ciertos productos autóctonos –el maíz, la quinoa,
palabras: no hay máquina capaz de imitar la maestría la kiwicha, la canihua y las papas- en toda su área
de sus puntadas de ambos lados a la vez. “Me lleva un de influencia. Sólo la llegada de los europeos inte-
mes toda la vuelta, y después completamos los bordes rrumpió ese proceso de asimilación e impuso nue-
al crochet y ribeteamos con cinta”, concluye Elda, que vas costumbres en los cultivos y los alimentos, que
no se priva de lanzarle algún dardo a su marido: “Yo le en muchos casos llevaron a la pérdida de semillas
reto a él –asegura-, yo vivo acá y me pongo siempre y la reducción de la diversidad. El resultado fue el
el rebozo y el sombrero y él no, no quiere usar el pon- mestizaje, el que perdura hasta el día de hoy, el que
cho y el sombrero. Es por pura comodidad nomás que se vive día a día en estos pueblos administrados en
la mayoría de los hombres dejó de usar nuestra ropa forma conjunta por un comisionado –el represen-
tradicional”. tante del municipio- y un comunero –la cabeza de la
Mientras tanto Martina Calapeña, que como Elda comunidad aborigen-.
Valle Grande
tir de los 2.400 metros, se habla de pastizal de altura mino es ancho y se ven las estructuras de piedra, pero
o pastizal de neblina. sobre todo da la sensación de meterse en un amplio
Desde Valle Grande y San Francisco parte por la túnel cerrado por la vegetación. La ruta se generó en
tarde el transporte público que deja a los caminantes 1942, vinculada con la necesidad de mano de obra
–después de unos 40 kilómetros de recorrido- en el para el ingenio Ledesma, y tiene su punto más alto a
camping agreste Aguas Negras del Parque Nacional. 1.700 metros: ella es la que hizo que San Francisco,
“Aquí se hace noche, y a la mañana siguiente se que no era siquiera un pueblo sino un asentamiento
emprende nuevamente el camino a pie por la ruta muy joven, fuera creciendo, mientras otros lugares
hasta llegar a La Junta, o se toma el colectivo que como Alto Calilegua, que datan de tiempos prehispá-
va hasta la entrada del Parque Nacional y también nicos, quedaron con apenas un puñadito de casas”,
pasa por La Junta, que es el punto de partida del sen- agrega Nicolás. Ese túnel vegetal del comienzo del
dero que invita a terminar la Huella Andina del Norte sendero invita a apreciar el diverso entretejido de los
dentro de Calilegua”, explica Nicolás Ferrari, guar- árboles, las lianas, enredaderas, hongos, entre can-
daparques de la seccional Mesada de las Colmenas tos de aves y zumbido de insectos: “Cuando la gente
dentro del Parque Nacional. El ingreso por el sendero entra en la selva siente que se ahoga, pero acá es
La Junta es bien ancho, porque era parte de la antigua más amplio: sentís que la selva te va apretando de a
traza de la RP 83, que todavía hoy se puede ver en poco”. En noviembre, el túnel se pone florido con los
sus dimensiones y en el sostén de pircas de piedra en lapachos amarillos y rosados y los palos borrachos,
los bordes. La ruta original fue modificando su traza que los pobladores llaman yuchán. A medida que se
debido a derrumbes y otros obstáculos, hasta llegar avanza, el camino va bajando en un zigzag pronuncia-
a su dibujo actual entre laderas y abras. “Era un viejo do y se pasa de la selva montana a la pedemontana.
camino de caballos, un camino de herradura como Poco después de un mirador, cuando el camino se
se le dice a cualquier senda de caballos, lo mismo bifurca se toma a la izquierda y el susurro del agua
que ocurre desde Santa Ana a Valle Colorado. El ca- parece invadir el ambiente: casi sin darse cuenta, se
habrá llegado a una ventana en la vegetación donde
Las Yungas se ve la unión de los arroyos Aguas Negras y Toldos.
Un gran cauce que arrastra poco agua, pero donde se
siente más frescura porque los arroyos son grandes
reguladores térmicos en esta región donde el invier-
no apenas dura 20 o 25 días. “Cuando se llega aquí
–recomienda Nicolás- hay que acercarse sutilmente
al lecho del arroyo, porque es un lugar de paso que
los animales usan para saciar su sed. Y aunque no
siempre se los vea, sí están presentes a través de la
gran cantidad de huellas que suelen quedar impresas
en los márgenes arcillosos del arroyo. Como las del
tapir, el gran mamífero sudamericano; las del simpá-
tico mayuato; algún gato montés y con suerte… el
gran yaguareté”. El yaguareté -tigre u overo, como se
lo llama localmente- es el gran animal de la región,
el que concentra temores y suscita respeto con su
solo nombre: “Un poblador que trabajó muchos años
en Vialidad solía contar que su abuela decía que,
cuando ruge el yaguareté, se caen hasta las hojas
de los árboles. Se le tiene mucho respeto: de hecho
muchos pobladores son incapaces de matar a un
yaguareté porque les haya comido un ternero. Ellos
son respetuosos del ‘monte’, como le dicen a la selva,
y están convencidos de que el monte te va a cuidar.
Pero si cazás por cazar, el monte te hace confundir a la capa intermedia, las plantas epífitas, todo eso es
tu compañero con un animal y causarle la muerte”, lo que sostiene y acumula el agua. Esa ‘esponja’ va
advierte Nicolás. Sólo el avance de la conservación drenando lentamente el agua. Y si la selva es como
puede lograr que el yaguareté no se convierta en un un ambiente macro, cada árbol, cada liana es un am-
mito como el ucumar, el oso andino –cuya presen- biente en sí mismo, el ecosistema macro está lleno
cia está documentada en las selvas bolivianas- que de microecosistemas”. Todo esto genera además un
en el Noroeste argentino mezcla leyenda y realidad. “efecto paraguas”: este efecto logra que el impacto de
Su verdadera existencia en las yungas jujeñas está en la lluvia no choque en forma directa contra el suelo y
duda: para algunos investigadores que rastrearon su lo lave, erosionando el sostén del conjunto.
existencia real, “el ucumar representa un ser sobre- Ya acercándose al final del sendero, una subida
natural, cuyo aspecto no siempre concuerda con el empinada lleva a un observatorio de aves, una suerte
de oso, que protagoniza historias, generalmente oídas de mangrullo que permite ver la selva pedemontana
de terceros, sobre gritos escuchados en el bosque, desde arriba. Es un buen lugar para recordar el fenó-
piedras empujadas pendiente abajo, y personas se- meno de la “lluvia horizontal”: “A sólo 50 kilómetros en
cuestradas y atacadas”. “Hay gente que dice: ‘A mi línea recta está la Quebrada, y ahí ya no llueve. Toda
abuelo lo raptó el ucumar; aquella mujer quedó em- esta humedad viene del Atlántico y vuelve al Atlántico
barazada del ucumar’… esa mala prensa debió haber –dice el guardaparques- porque el agua que viene del
contribuido a su desaparición”, concuerda Nicolás. Y océano choca con la serranía de Calilegua y entonces
de paso recuerda que en el Parque Nacional no todo la selva muestra otra adaptación: capta la humedad en
es la huidiza gran fauna que todos sueñan ver: este es sus hojas, y aunque no llueva hay cien por ciento de
también el reino de los insectos, de los que se conoce humedad. La ‘lluvia horizontal’ es esa nube que pega y
apenas el 30 por ciento de las especies que pueblan también aporta agua a la selva”.
en el mundo. Y una gran porción de esa riqueza está El sendero llega a su fin al recorrer la última y estre-
oculta entre la vegetación y los senderos de Calilegua. cha senda que devuelve a los caminantes al encuentro
A partir del arroyo Aguas Negras, que acumula con la RP 83. Al cruzarla, un amplio balcón permite
el agua de las lluvias estacionales y que la selva va observar el río San Lorenzo, el monocultivo de caña
soltando durante las estaciones secas del invierno y de azúcar y la continuación de la selva. Es también un
la primavera, comienza un largo recorrido bordeando observatorio hacia el ambiente donde no sólo se reve-
el arroyo. El cauce del río tiene una vida dinámica, la la transición de la Puna a las yungas, sino también
que invita a idear la manera de superar los distintos la transición entre las culturas colla y guaraní. “Ese
obstáculos que se van presentando: árboles caídos, contraste que produce salir de la Quebrada y meterse
derrumbes, cambios de curso del arroyo, grandes en la yunga, se da también en lo cultural entre los co-
piedras. Es un paisaje anárquico, que cambia todos yas y guaraníes. Los incas eran pueblos muy organi-
los veranos según va cambiando el paso del agua, y zados, los guaraníes en cambio eran anárquicos. Esta
obliga a maximizar el sentido de la orientación. Antes serranía es el límite entre esas dos culturas: venís de
de reanudar la senda que devolverá al caminante a la los incas, de los cultivos en terrazas, y te metés en
selva pedemontana, hay que estar alerta para percibir la cultura guaraní, que no necesitaba esa estructura
esa realidad que estalla en múltiples formas de vida y porque eran cazadores recolectores. Las costumbres
microhábitats, como las que se encuentran en la cor- no son las mismas, las caras tampoco. Pero conviven
teza de un laurel, un mato, un lapacho y los cientos bien porque hay mucho mestizaje”, concluye Nicolás.
de epífitas que se sostienen de ellos. La senda llega El mestizaje que no figura en los mapas pero que se
así a una peculiar laguna escondida entre el relieve y vive todos los días, que quedó fijado en las fotos don-
el sotobosque, un humedal poblado por una increíble de las cumbres áridas se volvieron una selva densa y
red de raíces, lianas y ramas responsables de sos- se reveló en la timidez de una gente de montaña trans-
tener los suelos, capturar la humedad de las nubes formada en la cordialidad más abierta de los pueblos
y amortiguar las lluvias torrenciales de la temporada cercanos a la selva. La Huella Andina del Norte es
estival. “La yunga –subraya Nicolás Ferrari- tiene llu- el hilo invisible que une esas diferencias y las hace
vias estacionales de diciembre a marzo, y el resto del camino, un camino que -como todos- sólo se hace
año no llueve. La selva es todo uno: el sotobosque, al andar.
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SENDEROS DE ARGENTINA
Ciudades de Cabecera
Paraná por el norte y Diamante por el sur.
Acceso por el norte: La ciudad de Paraná cuenta con una gran oferta
de hotelería y gastronomía, y nos brindará la posibilidad de realizar variadas
actividades durante nuestra estadía. El casco histórico en pleno centro, el Parque
Nuevo, la Costanera Alta, Puerto Urquiza, el pintoresco Parque Urquiza, Puerto
Nuevo y el Islote Curupí, donde los “Baqueanos del Río” realizan actividades
culturales y excursiones. En Puerto Sánchez podremos compartir la vida del
pescador artesanal, sus actividades y costumbres. La gastronomía de río es
exquisita: empanadas de pescado frito a la holla negra, el dorado al carancheo y la boga
despinada, entre otros. La música y la poesía entrerriana también caracterizan el barrio.
Son parte de las muchas alternativas que ofrece la cuidad. El Complejo del Túnel tiene su lugar dentro de las actividades
turísticas de la ciudad, con visitas guiadas y alojamiento. A pocos kilómetros se encuentra el Parque Escolar Rural Enrique
Berduc -Reserva Natural Provincial- con actividades que incluyen avistaje de aves, senderismo, kayaks, y visitas nocturnas.
Acceso por el sur: La antigua y pintoresca Diamante fue fundada en 1836, es una pequeña ciudad situada a la vera
del Río Paraná conocida como Punta Gorda muy valorada por los antiguos navegantes del siglo XVIII ya que contaba con
un puerto natural, excelentes recursos pesqueros y la posibilidad de proveerse de leña dura proveniente de sus bosques
en galería. Podemos acceder a ésta a través de la ruta Provincial N° 11 por el norte desde Paraná, desde el sur a través
del Puente Victoria que la une con la Cuidad de Rosario, o el complejo de puentes “Zarate Brazo Largo” que conecta con la
provincia de Buenos Aires y Capital Federal.
ENTRE RíOS
ETAPA 1
Paraná - Aldea Brasilera CONEXIóN EN TREN
Distancia: 16,6 km
Duración: 5 hs Descripción: Descripción: Un servicio regular de trenes conecta la
ciudad de Paraná con Oro Verde, dando inicio a nuestra experiencia por Huella
Dificultad: Entrerriana Litoral. Los trenes salen desde la terminal de Paraná ubicada
Boulevard Racedo (Tel. (0343) 4840218 / 4840952). Lunes a Viernes en dos
Elevación Min – Prom – Max
frecuencias 8.15hs. y 16:00hs. Nos deja en la Estación Oro Verde (Apeadero).
37m – 80m – 109m Se recomienda consultar previamente la prestación del servicio.
Ganancia y pérdida de elevación Otra forma de llegar: También podemos llegar a Oro Verde en colectivo urbano
86,5m – (-109m) regular (líneas 6 y 15), desde el centro de la ciudad de Paraná, con frecuencia
cada 30 minutos. Las líneas finalizan en el corazón de la Escuela Alberdi, donde
comenzaremos a caminar. También existe la opción de bajarnos en la Estación
Pendientes promedio de subida y bajada de Tren para caminar por la senda pedestre hasta la Escuela Alberdi.
1.2% – (-1%) Bajamos del tren en la Estación Oro Verde (apeadero) y comenzaremos a
caminar por la senda pedestre que nos llevará al corazón de la Escuela Normal
Precauciones: Tránsito vehicular en Rural “Juan Bautista Alberdi” donde se forman maestros rurales. Cuenta con
caminos vecinales con baja frecuencia. paseos internos, un tajamar natural, un tambo y el Observatorio Astronómico.
Recomendamos parar en horas del Podremos comprar por la mañana productos de campo de elaboración propia
mediodía, (de 12 a 15 horas) en lugares y observar el trabajo campero. Oro Verde ofrece también dentro de la ciudad
sombreados para hidratarse y consumir el Paseo de Los Trenes, donde podremos conocer la historia del ferrocarril,
alimentos. Comience la caminata muy vagones restaurados y un excelente restorán que funciona en un vagón, sin
temprano. dudas un lugar pintoresco frente al Polideportivo Municipal. Desde la Escuela
Alberdi seguiremos en dirección oeste, buscando una aproximación al río
Previsiones: Llevar agua, gorro de sol, Paraná que alcanzaremos en la próxima etapa. La senda transcurre por caminos
rurales que van dejando la urbanidad para adentrarnos en la campiña. La
lentes, protector solar, repelente para
tranquilidad, el verde, las aves, los animales de campo, las praderas sembradas,
insectos. Vianda (preferentemente frutas).
las granjas conforman el paisaje durante este tramo. Los caminos son muy
En verano se recomienda usar manga larga
accesibles, abiertos, sin desniveles lo que hace que la dificultad sea baja. Al
para cubrirse del sol. Hay señal de celular. llegar a Aldea Brasilera podremos optar por alojarnos en la aldea, disfrutar de
su gastronomía típica de los alemanes del Volga y conocer su cultura. La otra
opción es continuar caminando 4 km más en dirección al Paraje La Virgen
y pernoctar a mitad de camino en “La Balconada”. Dicho lugar cuenta con
cabañas equipadas, quincho, senderos y mirador.
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SENDEROS DE ARGENTINA
ENTRE RíOS
ETAPA 2
Aldea Brasilera - Paraje La Virgen
Distancia: 11 km
Duración: 4 hs Descripción: Continuaremos hacia el oeste buscando las barrancas
del Paraná, partiendo desde la propia Aldea o desde “La Balconada”
Dificultad: dependiendo de dónde nos hayamos alojado. Poco a poco iremos dejando
la campiña y alternando con áreas de monte. La vegetación será más
Elevación Min – Prom – Max intensa a medida que nos acercamos al río Paraná. Se distinguen dos
12m – 35m – 55m ambientes bien definidos: los campos sembrados en las lomadas sobre la
barranca, y el bosque en galería entre la barranca y la rivera con árboles
Ganancia y pérdida de elevación más frondosos (grandes ombúes, alisos, ceibos, espinillos, enredaderas,
110m – (-140m) plumerillos). Podremos avistar fauna menor (cuises, liebres y zorritos). La
presencia de aves se intensifica. Avistaremos aves rapaces e infinidad de
Pendientes promedio de subida y bajada especies durante el trayecto. El descenso de la barranca será de media
2.1% – (-2.0%) dificultad, seguro, con sendas bien definidas. El sendero se traza sobre un
nivel medio para caminar paralelo al Paraná en dirección sur. Desde allí las
vistas son majestuosas. De un lado el río y del otro, la pared de barranca
Precauciones: Tránsito vehicular en caminos
que llega a superar los 60 metros de altura. Acompañados de guías
vecinales con baja frecuencia. Protegerse también existe la opción de ir pegados al río cuando su altura lo permite
del sol sobre todo en horarios del mediodía. donde podrán apreciarse las huellas que dejó el mar mucho tiempo atrás.
Recomendamos parar en horas del mediodía, Llegando al Paraje, la barranca dibuja una hoya donde se forma una
(de 12 a 15 horas) en lugares sombreados, laguna, un lugar mágico. Al otro lado, comienzan los primeros caseríos.
para hidratarse y consumir alimentos. Casi 1,5 km de camino costero natural, separan el río de la barranca.
Comience la caminata muy temprano. SI Mientras caminamos, conoceremos sobre la vida del pescador artesanal
es alérgico a picaduras de insectos lleve y sus artes de pesca. Sus canoas van y vienen durante este trayecto al
antialérgicos. igual que grandes buques cargueros, barcazas y empujes que remontan el
Paraná a metros de la orilla por donde pasa el canal. En el Paraje se rinde
Previsiones: Llevar agua, gorro de sol, tributo a la Virgen María. Allí todos los 8 de diciembre llega la procesión
lentes, protector solar, repelente para insectos. desde las aldeas vecinas con ofrendas. Cuenta con lugares donde dormir
Opcional: fruta o cereales. En verano se y comer. Si avisamos previamente nuestra llegada siempre será mejor.
recomienda usar manga larga para cubrir
brazos y piernas del sol, además del gorro
y lentes. Hay señal de celular en el Paraje e
intermitente durante el trayecto.
ENTRE RíOS
ENTRE RíOS
CONEXIóN NAUTICA
Desde Paraje la Virgen
al Balneario Valle María
Descripción: Una vez arribados a Paraje La Virgen, esta cálida aldea nos invitará a quedarnos a descansar y hacer
un alto en el camino. En este lugar podremos percibir la cultura del río, muy diferente a la de las colonias que se
establecieron en los campos para desarrollar sus ancestrales actividades agrícolas allá arriba de la barranca. Aquí el
río es el gran protagonista, con sus bosques en galería, la diversidad de plantas, animales y aves, nos sorprende tanta
diferencia en tan estrecha distancia. El río tiene vida propia, diariamente los pescadores se sumergen en este universo
de aguas marrones y camalotes, dominios de dorados, surubíes, bogas, bagres, parte de la enorme diversidad de
especies que habitan bajo estas aguas. Le sugerimos un alto en alguno de los paradores de este paraje y disfrutar de la
calidez de su gente, sus exquisitas empanadas de boga o surubí, y tal vez un dorado a la parrilla, mientras disfrutamos
de la fresca sombra a la orillas del Paraná. Desde el paraje podemos solicitar un servicio de traslado para regresar a
Paraná o contratar una lancha que nos acerque al “balneario Valle María”, cabecera de la próxima etapa. Este trayecto
náutico nos permitirá navegar el Paraná aguas abajo, ver la barranca desde el río, la vida de rivera de Puerto Alvear, la
brisa en la cara, seguramente podremos avistar algún biguá secando sus alas o ver en acción al martín pescador.
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SENDEROS DE ARGENTINA
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SENDEROS DE ARGENTINA
ENTRE RíOS
ETAPA 4
Casa de Retiro Stella Maris - Diamante
Distancia total: 17,7 km Descripción: Luego del desayuno en Stella Maris, caminaremos
Duración: 6 hs en dirección este, para cruzar al otro lado de la Ruta N° 11, donde
Dificultad: conoceremos una típica aldea de campo situada entre las tierras más
ricas y provechosas de la provincia. La senda nos guía por sembradíos,
calzadas, vistas de los valles que conforman las lomadas de la cuchilla
Elevación Min – Prom – Max de Montiel, en su extremo final sur. Llegaremos a Aldea Protestante
16m – 43m – 76m donde el campo encuentra trazos de urbanidad. Podemos allí apreciar
el trabajo artesanal en cueros, tientos, metales, astas, en finos recados,
Ganancia y pérdida de elevación artes de la jineteada como la bota de potro, las rastras, sombreros y
179m – (-179m) cuchillería de calidad. La cultura de los alemanes del Volga se hace
evidente. Podremos aprovechar para un alto y degustar gastronomía
Pendientes promedio de subida y bajada típica. Empanadas caseras o pirok, y una gran variedad de dulces,
1.9% – (-1.9%) licores, chocolates, torta rusa, ó los tradicionales krepel que podemos
acompañar con el té o con unos buenos mates para el que gusta.
Pasaremos por el corazón de la Aldea, y volveremos al camino vecinal.
Precauciones: Durante el verano debemos Saliendo de la Aldea, pasaremos por puentes sobre un tributario del
considerar protegernos del sol sobre todo arroyo La Ensenada. Unos 4 km nos separan de la Ruta Nº 11, por
en horario del mediodía. Durante el invierno donde orillamos unos 800 metros hasta llegar a Strobel, una localidad
recomendamos salir después de las 9hs y en que nació con el tren, y las necesidades de entonces en los puertos
verano comenzar la jornada con el alba. cerealeros del interior. Caminaremos por la pequeña ciudad, por entre
sus vías, un parque que recrea la vida del ferroviario con grandes y
Previsiones: Llevar agua, gorro de sol, coloridas locomotoras . Pasaremos por la vieja aceitera y depósitos de
lentes, protector solar, repelente para insectos. granos. Las mismas vías nos llevan al Puerto de Diamante, pasando
Opcional: fruta o cereales. En verano se por La Ensenada, un área de humedales incluida en una propuesta de
recomienda usar manga larga para cubrir sitio Ramsar. Diamante es una localidad turística y cuenta con todos
brazos y piernas, además del gorro y lentes los servicios: alojamiento, camping, gastronomía, eventos múltiples,
edificios de valor arquitectónico, y el Museo del Dr. Liotta diamantino
para cuidarse del sol. Hay buena señal de
distinguido inventor del primer corazón artificial.
celular durante el trayecto.
ENTRE RíOS
ENTRE RíOS
ETAPA 5
Diamante - Parque Nacional Pre Delta
Distancia total: 8,6 km Descripción: Este último tramo nos llevará al Parque Nacional Predelta,
Duración: 2,5 hs objetivo principal de la Huella Entrerriana Litoral. Partiremos del Paseo de la
Dificultad: Rivera, lindero con el Puerto de Diamante. Desde allí podremos contemplar
el Cristo Pescador implantado en la altura de la Barranca. Pasaremos por el
barrio de pescadores, paralelo al río Paraná, caminando por el borde costero.
Elevación Min – Prom – Max Nos encontraremos con canoas y embarcaciones menores que arriban con los
18m – 55m – 82m frutos de río durante la mañana. Nos acercaremos a Punta Gorda, sitio histórico
donde las tropas de Urquiza cruzaron a caballo el Río Paraná. Continuaremos 3
Ganancia y pérdida de elevación km con rumbo sur hasta el Paraje la Azotea, donde da comienzo el arroyo del
110m – (-81m) mismo nombre. Allí contemplamos un viejo barco ganadero encallado emblema
del paraje donde tiempo atrás se hacía el “azote” de ganado. Desde este punto
Pendientes promedio de subida y bajada restan unos 5 km al Parque, donde nos iremos internando en un bosque en
2.0% – (-2.6%) galería. Caminaremos bordeando el arroyo con linda vista, aguas tranquilas, el
cantar de las aves. Palomas, loros, carpinteros, tordos músicos y zorzales entre
los más bullangueros. Separándonos del curso de agua la senda avanzará por la
Precauciones:Durante el verano debemos selva en galería, un paisaje típico entrerriano donde las sombras y la humedad
considerar protegernos del sol sobre todo marcan presencia. Prevalecen los sonidos, los olores, el suelo cubierto de hojas
en horario del mediodía. Durante el invierno y cortezas. Enredaderas, alisos, sauces, ombúes, efedras, helechos, claveles
recomendamos salir después de las 9hs y del aire, y las cortaderas o pajonales se distinguen. Atravesamos un albardón
en verano comenzar la jornada con el alba. como por un túnel y comenzamos a subir un viejo cauce que nos conduce a un
Atención personas alérgicas a picaduras de pequeño cañón conformado por piedras. Se ven cuevas de tatú y de lagartos.
Si caminamos con cautela podremos avistar carpinchos y otros animales de
abejas o avispas ya que podemos encontrarnos
monte como los coipos. Salimos del bosque y repentinamente aparece la luz,
con estos insectos sobre todo en época estival. caminando por una lomada emprenderemos el último tramo que nos deja en la
Previsiones: Llevar agua, gorro de sol, lentes, portada del Parque. Dentro del área natural podremos recorrer senderos, visitar
protector solar, repelente de insectos. Opcional: lagunas, miradores, las lagunas del Irupé, observa fauna y flora acompañados
por los guardaparques o por guías habilitados. Se pueden realizar paseos
fruta o cereales.Se recomienda usar manga
náuticos por el arroyo La Azotea para conocer el ecosistema acuático y
larga para cubrir brazos y piernas. Hay señal de excursiones en búsqueda de la Flor del Irupé. El Parque es una de las 8 áreas de
celular hasta la Azotea, luego es mala la señal importancia para la conservación de aves de Entre Ríos (AICAs) y cuenta con
y prácticamente nula en el Parque Nacional área de servicio, camping, mesas y un Centro de Interpretación.
Predelta. Prever transporte de regreso a Cuenta con Paseos Náuticos. Parque Nacional Predelta ofrece también la
Diamante distante 8 km. posibilidad de regresar en bicicleta a Diamante o a través de un transporte
no regular. Son parte de las actividades que podremos vivenciar en las
inmediaciones de esta ciudad.
ENTRE RíOS
DESCRIPCIóN: Huella Entrerriana Litoral es el primer sendero de largo recorrido que, en el marco del
Programa Senderos de Argentina, incorpora una alternativa de cicloturismo. Nuestra propuesta está dirigida
al usuario común, sin un gran nivel de preparación pero con ganas de conocer y experimentar las ventajas de
realizar turismo desde una bicicleta. En este sentido esta región de la provincia es privilegiada ya que presenta
una variedad de servicios a lo largo de la traza que nos permitirá hacer la distancia que queramos, recorrer
y detenernos donde nos guste. Hemos tomado como final sugerido de la primera jornada la Casa de Retiro
Stella Maris, cuyas características, atmósfera interior y la calidad de sus comidas (a un precio accesible),
inevitablemente nos remiten al camino de Santiago de Compostela. Como consejo le podemos decir que no
pase de largo por las aldeas y pequeños parajes, deténgase, mézclese con su gente, dese la oportunidad de
sumergirse en el mundo de las colonias Alemanas descendientes de la inmigración proveniente del Volga y
de los pescadores del río: dos mundos tan distintos y sin embargo tan cercanos, con mucha identidad en sus
comidas típicas, su música y su idiosincrasia. Esperamos que disfrute de esta experiencia inolvidable donde
tendrá la oportunidad de conocer a los protagonistas genuinos del sendero, sus pobladores.
EN BICICLETA
Una ciudad, un río Hay muchas formas de recorrer Paraná, una ciu-
dad clave en la historia argentina: museos, palacios
Paraná tiene nombre de río. El sexto río de llanu- públicos y antiguas escuelas conforman un recorri-
ra más importante del mundo; el río que arrastra su do vinculado a los primeros pasos de una nación en
color león desde aguas arriba para llevar vida aguas formación, a mediados del siglo XIX. Pero cuando la
abajo sin medir kilómetros en su generosa entrega; el mirada se pone en la vida cotidiana y la vinculación de
río que no conoce de límites sino sólo de aguas cauda- su gente con el río, el panorama se completa con la
losas y orillas brillantes de monte y selva. profundidad de la “pequeña historia” que discretamen-
Paraná, la ciudad y su río, son el punto de partida te, día a día, va construyendo aquella historia grande
de la Huella Entrerriana Litoral, el sendero de largo que se relata en los libros.
recorrido por el oeste entrerriano que, después de Puerto Sánchez, el barrio de los pescadores de
casi cincuenta kilómetros, desemboca en Diamante Paraná, es uno de los lugares donde descubrir esa
y el Parque Nacional Predelta. En esos kilómetros se historia, contada casita a casita sobre la barranca,
encierra un mundo: el de la vida urbana de una capital desde donde parten los pescadores a colocar los es-
provincial; el de las aldeas fundadas por inmigrantes pineles en el río. Mejor aún si es de martes a jueves,
que unieron a sus tradiciones de origen alemán el los días de mayor actividad: en los pequeños puestos
arraigo en una nueva tierra; el de la riqueza silvestre de venta de pescado fresco, recién sacado del río, las
que estalla en el Parque Nacional. Para descubrir ese cuchillas van y vienen despinando y fileteando bogas,
mundo hay que caminarlo, y para caminarlo hay que dorados, surubíes, moncholos, armados. A cada es-
empezar abriendo los ojos en Paraná, la ciudad, frente pecie –de escama o de piel- su receta y su secreto,
a Paraná, el río. que se va compartiendo puesto a puesto: el paladar
entrenado sabrá distinguir rápido entre una milanesa
de surubí y una de patí; una empanada de armado o
De parque a parque una de tararira. El caminante novicio en pescado de
río tiene aquí entonces el mejor lugar para empezar el
El Parque Urquiza, un paisaje natural protegido que camino del conocedor, probando las deliciosas em-
rodea la barranca del Paraná, es el símbolo de esta panadas que vende Edgardo, crocantes y recién fritas
ciudad verde que en los últimos tiempos logró recupe- en grasa, a base de boga, dorado, pimiento verde y
rar su borde costero para devolver a la gente –que por rojo, cebolla y cebolla de verdeo.
aquí camina, corre, anda en roller o en bicicleta- el uso Pero Puerto Sánchez, además, es un hito en la vida
de los espacios públicos. Sus niveles –Costanera Alta, paranaense tocado por la varita musical que atravie-
Media y Baja- se conectan por senderos y escaleras sa mágicamente nuestro litoral. “Se despierta Puerto
internas, a la sombra de palos borrachos, lapachos, Sánchez / en mi Paraná / la canoa pescadora / se deja
jacarandás, ceibos y otros árboles que hacen de la llevar / un murmullo palanquero / un lento matear/
primavera una explosión de color. Bajo la vida de hoy un gurí descalzo juega / con arena nada más”, dice
el ayer sigue presente: se ven aún sobre las callecitas la canción del poeta y músico Jorge Méndez. Sus
empedradas cercanas al borde costero las vías de los versos traen ecos de otros acordes célebres: son los
ferrocarriles con que se sacaban los granos al puerto, de la “Canción de cuna costera” de Linares Cardozo:
un anticipo de esa presencia del tren que será constan- “Noche calma sobre el río / sueño trabajo y querer /
te a lo largo de la Huella Entrerriana. ahí va el pescador curtido / recogiendo el espinel. /
Allá en el rancho la madre / mece con tierna emoción canoa precaria, doce personas con remo y botador,
/ una cunita de sauce / entonando esta canción. / El desde Colón... Los conozco a todos y he sido hasta
niño ya se ha dormido / la luna salió a mirar / hama- partera de algunos gurises, he tenido la guarda de al-
cándose en las aguas / por entre el camalotal. / La gunos niños del lugar. Aquí nos la pasamos luchando
brisa juega y el canto / parece que viene y va / el eco contra el terraplén, cada vez que crecía el río tenía-
oscuro se pierde / por el río Paraná.” mos que ver cómo llevarnos las cosas para que no
Aquella madre de la canción es doña Dominga se perdiera todo en la creciente. Aquí el costero, la
Ayala, que vive aquí mismo en Puerto Sánchez y es gente de la costa, tiene la creciente grabada a fuego”.
la memoria viva de los tiempos en que el caserío era No muy lejos de la casa de Dominga está la pes-
sobre todo una zona de gente segregada, sin calles, cadería de Alejandro, con sus racimos de pescado
donde se reunía la gente que cazaba animales, que fresco recién capturado con trasmallo y por arrastre.
traía las varas de sauce y paja de las orillas, donde A cada variedad su método. A cada una su secreto,
se vendían pieles y plumas destinadas a relucir en escrito desde hace generaciones en la sangre de los
los teatros de una lejana Buenos Aires. Y estaba, cla- pescadores, criados en la isla desde antes de tener
ro, también la pesca, aunque no fuera entonces tan uso de razón, custodios de una vida que se resiste a
importante porque no había cadena de frío y sólo se desaparecer. Don Carlos, el padre de Alejandro, fue
podía consumir el producto del día que traía a cues- pescador toda la vida. Dice que ya no quiere saber
tas el pescador palanquero. Dominga tenía 22 años más nada, pero el recuerdo está a flor de piel: “Yo
cuando Linares escribió su canción de cuna, y aquel pesqué toda mi vida, mi papá me cargaba en la popa
gurisito hoy es un hombre hecho y derecho que mira de la canoa y yo me despertaba ya en la isla. A los 11
desde las fotos en las paredes de su casa, construi- años ya me quedaba solo, y lloraba porque te vienen
da sobre la zona aún firme de la barranca. En otras todos los fantasmas... Los árboles que se mueven
imágenes están Jorge Méndez, el zurdo Martínez, los son los fantasmas del chico. Yo lloraba y lloraba, pero
Hermanos Cuesta, Víctor Velázquez, Hugo Díaz: una al otro día vi que los fantasmas seguían ahí, y eran los
lleva a la otra, y todas desembocan en una anécdota. árboles. Y así al final salí a pescar”.
“Vine acá –recuerda Dominga con intacta frescu- “Antes, si eras pescador, tenías que salir y traer.
ra- en el año 40. Y voy a cumplir 83. Cuando vine, en Si en la noche no sacabas nada, salías al amanecer.
esta zona se vendía corte de rancho, madera, paja, Si amanecía y no sacabas, volvías a salir. Había que
todo lo que viniera de la isla. Todavía existen árboles traer. A mí me tocó muchas veces ver cómo comían
plantados por los viejos pobladores, pero todo está mis hijos y y mirar nomás. El acopiador te pagaba por
en constante cambio. Pensar que vinimos, en una pieza: cinco sábalos, cinco armados, y algún dorado
Puerto Sanchez
si había. No podía andar con nadie, tenía que andar ca, como la donación de estos terrenos: fueron 600
solo, porque no había nada para repartir”, agrega hectáreas destinadas a un parque escolar con fines
don Carlos, entre anécdotas de los tiempos en que de conservación donde debían crearse escuelas. La
pescaba pacúes con su padre, las manos y los pies donación abarcó, además, muchas más tierras en la
siempre en el agua, la vida infantil ya entregada al región”. Un número basta para dar cuenta de la bio-
abrazo estrecho del río. diversidad que encierra este ambiente de barranca y
de bosquecito en galería: en el parque fueron regis-
tradas más de 210 especies de aves, sobre las mil
Verde y a caminar que hay en todo el país. Entre muchas otras, casi sin
esfuerzo se ven y se oyen los pepiteros de collar, las
Hacia el norte, es posible prolongar la Huella chocas y los chororó, que el ojo entrenado distingue
Entrerriana Litoral hasta el Parque Escolar-Rural rápidamente entre los ramajes.
Enrique Berduc, a unos 25 kilómetros de la capital Y además están las plantas, como agrega Alfredo
provincial y accesible desde Paraná en transporte pú- Berduc: “El naturalista suizo Moisés Bertoni, que
blico, en bicicleta o a pie. El parque es viejo conocido trabajó en las costas del Paraná, cuenta que des-
de los trekkers y kayakistas que caminan sus sende- pués de la conquista en apenas 20 o 30 años los
ros o se suman a las travesías náuticas por el arroyo guaraníes les habían hallado propiedades medicina-
Las Conchas. Un camino de ripio desemboca en la les a las plantas que trajeron los europeos, y que
reserva General San Martín, que forma parte del ellos no habían descubierto en miles de años. La re-
conjunto. Tres senderos –uno de los cuales sigue lación del guaraní con las plantas y la naturaleza es
el arroyo- parten desde aquí para explorar una zona increíble, basta pensar que el guaraní se considera
que lleva apenas dos décadas como área protegida. el tercer idioma del mundo en materia de denomina-
Aquí abundan la ephedra, una planta medicinal ción científica, y que tiene desde antes de Linneo la
nativa que se ve en toda la Huella Entrerriana y está típica nomenclatura binomial de las ciencias: como
en el origen del estimulante efedrina; los quebrachi- ‘aguará-guazú’ o ‘ibirá-pitá’, una denominación que
llos, no tan comunes en Entre Ríos pero sí en este recuerda el ‘nombre y apellido’ de las especies tal
parque; y también los guayabos, árboles que hasta como estableció el científico sueco, al estilo de
el más inexperto pronto puede reconocer: como el ‘homo sapiens’”.
arrayán, son de la familia de las mirtáceas, y como Paso a paso, el sendero desemboca en la playa
el arrayán se distinguen por su color canela y el de arenas finas del arroyo Las Conchas. Un lugar
tronco frío al tacto. Como cerrando un círculo, vol- singular porque aquí se puede realizar un avista-
veremos a verlos al final del recorrido, en el Parque je inédito: el de los peces de río, visibles a flor de
Nacional Predelta. También están las especies exóti- superficie gracias a la transparencia y quietud del
cas, entre ellas la invasora acacia negra de grandes agua. Ahí están, como sombras que pasan rápidas
espinas, cuya semilla se disemina con facilidad en para jugar a la adivinanza con los reflejos del sol y el
las zonas bajas y los arroyos. En uno de esos tres agua, los dorados de brillante silueta y los sábalos,
caminos –conocido como el Sendero de los Guaya- que se ven comer más pegados al fondo y son una
bos- se encontraron restos de cerámica guaranítica especie comercial muy buscada para la exportación.
y de otras culturas que vivieron en la región: no es Y que además resultan clave porque son el alimento
pura coincidencia que el nombre local guaraní signi- de todas las especies migratorias del Paraná Central:
fique “el camino donde se cruza la gente”. sin sábalo, no hay comida, de modo que el riesgo
“El que donó esto –cuenta Alfredo Berduc, mien- de su sobreexplotación es la disminución también de
tras imita con maestría el canto de un picapalo co- las otras variedades por la falta de alimento. En otras
lorado, especie más típica de la selva misionera que palabras, cada eslabón es importante para que no se
también se avista en esta región- fue tío bisabuelo rompa la cadena natural. Y por la noche, cuando sá-
mío. Había nacido en Paraná en 1854 y llegó a ser balos y dorados ya no son visibles bajo el agua, en la
ministro de Hacienda de la Nación. A partir de la zona del arroyo se puede realizar también un trekking
muerte de su esposa comenzó su obra filantrópi- para avistar búhos y fauna de hábitos nocturnos.
Garza Mora
salvia, canutillo y otras especies. Pero a lo que hay los Trenes, que integra toda una zona de deportes y
que prestar más atención es al color del río, ese color recreación municipales. El diseño del complejo, a car-
marrón debido a la arcilla que viene del norte. Cuan- go de Fabio Bonell, busca emular la arquitectura de
do llueve en la precordillera, se lavan los cerros, y el una estación de trenes, con una pérgola central visible
Paraná toma este color de las aguas que vienen del desde todo el conjunto y pensada para la presentación
río Paraguay. Gracias a eso tenemos el Delta: si el río de distintos espectáculos. El centro de interés está en
no tuviera sedimentos no se formaría este gigantesco el vagón cocina y el vagón restaurante, restaurado a
ecosistema. Estos sedimentos llegan al Río de la Pla- partir de una formación de época que conserva al-
ta y de allí desembocan en el océano: esto sostiene gunas joyas de época como el vajillero original. Aquí
la cadena trófica del Atlántico”. Porque los humedales se creó una marquesina que revive la imagen de una
tienen alta concentración de vida, y sobre el río Paraná vieja estación, y se proyecta la creación de un vagón-
vive más de la mitad de la población de la Argentina. patio cervecero: en el futuro el complejo se integrará
Poco después, cuando señala los mogotes –las al programa Sabores Entrerrianos, que trabaja en el
enredaderas que se trepan y cubren de vegetación desarrollo de una propuesta gastronómica unificada
troncos y palos en el monte- vuelve el recuerdo de de toda la provincia. Otro de los vagones, a su vez,
aquellos “fantasmas” que asustaban a los niños isle- tendrá pastelería/heladería, y habrá un espacio para
ros en sus primeros días enfrentados a la pesca: “Del artesanos.
lado norte –observa- siempre tienen un desarrollo Oro Verde tiene un Jardín Botánico de unas 20 hec-
muy importante, de modo que son una referencia na- táreas que depende de la Facultad de Ciencias Agro-
tural del norte y el sur. También los árboles funcionan pecuarias de la UNER e integra la Red Argentina de
como brújula, ya que el tronco que mira hacia el norte Jardines Botánicos: en este bosque natural surcado
es más claro, mientras el lado que mira al sur es más por un arroyo se pueden visitar senderos interpre-
oscuro o con musgo”. No es la única orientación de la tativos de plantas nativas, así como colecciones de
naturaleza: las arañas tejen sus telas de este a oeste, orquídeas y cactus.
y se ponen con la panza mirando al norte, porque si El otro punto fuerte es la Escuela Normal Rural
no al soplar el viento sur serían expulsadas de la tela. Alberdi, nacida en 1904 como primera escuela de
De regreso en Paraná, la lancha vuelve al muelle, y Sudamérica dedicada a formar docentes rurales.
el visitante a poner los pies en la tierra, sintiendo por Desde Paraná se puede llegar también en transporte
un tiempo todavía el vaivén con que el agua acuna a público o en el tren a Oro Verde, para luego tomar un
quienes empiezan a entenderla. Y quien haya navega- sendero trazado sobre una antigua vía que desemboca
do sobre las aguas del ancho río ya no podrá olvidar en la escuela: en primavera, cuando florecen los jaca-
su rumor caudaloso arrastrando los camalotes co- randás que bordean el sendero, el espectáculo violeta
rriente abajo, mientras lleva consigo el color y el calor que envuelve a los caminantes forma una postal inol-
de la vida. vidable de la Huella Entrerriana.
El complejo actual de la Escuela Alberdi, donde
se siguen formando maestros rurales que luego se
Oro Verde, trenes y estrellas dispersan por escuelitas de todo el país, se extiende
sobre unas 200 hectáreas que incluyen un sendero de
Diez kilómetros al sur de Paraná, la Huella Entre- trekking, un tambo –donde se venden productos regio-
rriana Litoral tiene etapa en la aldea de Oro Verde, nales de elaboración propia, desde quesos a dulces y
conocida como la “ciudad universitaria” porque allí se embutidos- y un tajamar ideal para avistar y fotografiar
encuentran sedes de la Universidad Autónoma de En- fauna acuática, como patos y coipos. También están
tre Ríos (UADER) y la Universidad Nacional de Entre aquí el Museo de la Memoria, que resulta una buena
Ríos (UNER), además de la histórica Escuela Alberdi. introducción para comenzar la siguiente etapa por las
El tramo entre la capital provincial y Oro Verde se Aldeas Alemanas –de aquí mismo sale un sendero ha-
puede recorrer a pie por un camino vecinal en desuso, cia Aldea Brasilera- y la capilla Nuestra Señora de la
el Camino del Ejército; en bicicleta o en tren, excelente Siembra. Por la noche, no hay que perderse las visitas
introducción para adentrarse en la historia ferroviaria al Observatorio Astronómico, donde se brindan char-
de la localidad, y profundizarla luego en el Paseo de las guiadas y se realizan observaciones telescópicas
ánimos al apreciar los rostros alegres de todos los de alojamiento en la zona. Desde aquí se puede subir
presentes que los esperaban. Luego en la ciudad fue- por un sendero a la barranca de los helechos, que da
ron alojados en casas, galpones y también en carpas sobre un arroyo, y luego bajar hasta el borde mismo
levantadas en la plaza”. del agua. En otro sector de La Balconada, una ines-
El 21 de julio de 1878 se produjo la fundación co- perada imagen de la Virgen de la Guadalupe pintada
mún de las cinco primeras aldeas en Entre Ríos: Valle sobre porcelana corona un sector alto del terreno.
María o Marienthal, la “aldea madre”; Protestante, “Vivimos un tiempo en México por trabajo –cuenta
que nucleaba a unas 20 familias de esa confesión; Viviana, autora de la pintura- mientras aquí había
Spatzenkutter o Marienfeld; San Francisco y Santa gente que se ocupaba de la obra. Uno de ellos nos
Cruz. Aldea Brasilera nació poco después, fundada pidió una imagen de la Virgen de Guadalupe, porque
por un grupo de familias que primero se habían afin- un compañero tenía un hijo con leucemia, y también
cado en Brasil, y luego siguieron con rumbo al sur para la hija de una señora que había perdido dos em-
en busca de mejores tierras: sin embargo, eligieron barazos. Trajimos las estatuillas del santuario mexi-
homenajear con ese nombre la recepción y atención cano, y créase o no el nene se curó y la chica quedó
brindadas por el primer país sudamericano donde ha- embarazada, y llamó a su hijo Juan Diego. Le prometí
bían iniciado la nueva aventura de sus vidas. a la Virgen que la iba a pintar y que iba a hacer una
La germanidad de Aldea Brasilera se vive sobre gruta: y así lo hicimos, el 12 de diciembre de 2012,
todo puertas adentro: por fuera, es un pueblo entre- en una fiesta de entronización donde no faltaron los
rriano más, aunque quien ande atento pronto comen- mariachis”.
zará a observar los detalles que revelan sus orígenes. Desde aquí se sigue camino hacia Paraje La Vir-
Lo más visible y emblemático es todo un emblema de gen, que muchos pobladores siguen llamando con
la zona: la Esquina Munich, un hito de la mesa del fin su nombre tradicional -El Monte de la Paloma- por
de semana al que se llega simplemente preguntando un sendero que alterna partes más cerradas y más
porque la conoce todo el mundo. “Lo más tradicional abiertas, a veces puro campo de siembra y otras
es llegar y probar la picada Munich, con productos ondulaciones más agrestes que conforman, paso a
de tipo centroeuropeo, o la bandeja Munich, con car- paso, la conexión entre lo costero y la campiña den-
ne de vaca, codillo de cerdo, papas y batatas. Todo tro de la Huella Entrerriana. Aquí y allá, van apare-
acompañado con filsen, un bocadito dulce que es ciendo las herraduras de las barrancas del Paraná,
como un budín de pan con crema, pasas y dulce”, que descienden hacia el río y el cañadón, mientras se
dice Susana Schvindt, descendiente de los alemanes transita por un sendero que forma parte de una red
del Volga. Como muchos otros pobladores, Susana preexistente de caminos vecinales, que no generan
viene de una familia mezclada que adoptó costum- nuevo impacto en el ambiente. Frente al Paraná, es
bres de sus dos orígenes: “Acá es común escuchar común ver transitar remolcadores que arrastran cha-
‘mi mamá es criolla pero mi papá es ruso’, o tener tas, mientras una serie de boyitas indica el lugar por
abuelas alemanas que no saben hacer tortas fritas”, donde pasa el veril: es decir la zona hasta donde llega
resume, mientras acompaña en un paseo por el pue- la barranca por debajo del agua, y en cuyo límite está
blo y muestra la fábrica de cerveza artesanal, que la zona del canal, de hasta treinta metros de profun-
funciona en una antigua escuela. didad, por donde pueden pasar los grandes buques.
El núcleo urbano de Aldea Brasilera es pequeño y El Paraje de la Virgen es, en sí mismo, un ca-
basta tomar un camino de broza que sale del pueblo serío de viviendas dispersas que ocupan terrenos
para meterse de lleno en un ambiente rural ondulado, sobre la barranca. Un paisaje de pescados recién
acompañado de aves, mariposas y vegetación donde sacados del río esperando la parrilla o el comprador;
sobresalen los plumerillos y las tunas. Por aquí an- de hornos de pan en pleno funcionamiento; de jardin-
dan, ocultos al ojo distraído, liebres y zorritos, mien- citos improvisados que se confunden con la vegeta-
tras la barranca se aleja y se acerca de la costa, al- ción misma de estos terrenos húmedos que se aso-
terando el relieve y marcando el límite con el campo. man al Paraná. Cada 8 de diciembre, se juntan aquí
En cinco kilómetros de caminata se llega a La Bal- delegaciones llegadas a caballo de Aldea Brasilera,
conada, un complejo de cabañas y áreas comunes Valle María y Spatzenkutter, llevando a la Virgen en
sobre el arroyo Salto que forma parte de las opciones procesión a través de la Avenida Picaflores del paraje,
hasta llegar a la gruta construida por Agustín Barón, Desde un atalaya, la vista sobre el río es imperdible a
que luce cuidada aunque quedó inconclusa después medida que se acerca el atardecer y el sol se hunde
de su muerte. hasta fundirse en una llamarada naranja sobre las ya
Desde el parador La Amistad –donde se puede oscuras aguas del río. Desde aquí, se puede reco-
hacer un alto para comer lechón, pizza o empa- rrer un tramo de la Huella en bicicleta, en parte
nadas de tararira- la Huella Entrerriana suma un por asfalto y en parte por broza, hasta llegar hasta
trayecto náutico: el destino es el balneario de Valle la serena avenida arbolada que desemboca en la
María. Cerca de allí, el circuito de Aldeas Alemanas casa de retiros Stella Maris. Antiguamente un con-
tiene otro punto pequeño pero imperdible: es el mí- vento, visible entre las suaves lomas de la zona rural
nimo pueblo de San Francisco, entre la Ruta 11 y el de Valle María, este edificio funcionó como prese-
río, con su única calle asfaltada y el resto de broza, minario de la congregación del Verbo Divino desde
donde el visitante tiene a los pájaros como única 1952, luego sumó una escuela, y hoy es una casa de
compañía. Aunque hoy sea casi un recuerdo, esta retiros cuyos pasillos luminosos y sosegados invitan
aldea tuvo importancia porque aquí funcionó la pri- al descanso del caminante, acunado por ese aparen-
mera escuela alemana hasta 1934. Pero lo imperdible te letargo de la naturaleza que de tanto en tanto se
es el cementerio, un solitario camposanto donde se interrumpe con el rumor de los animales nocturnos.
dice que cada tumba representaba una capillita dife-
rente de Alemania. Aunque en realidad estas tumbas
fueron creadas por un italiano, el arquitecto Bernardi: Aldea Protestante, Strobel
y si bien hoy –un poco ladeadas y olvidadas por el y el Parque Nacional
tiempo- sigue sin estar claro su origen, lo cierto es
que son las únicas en la Argentina de estilo gótico. La mañana es gloriosa en Stella Maris. Sólo el
Al atardecer, cuando las lechuzas de campanario se canto de los pájaros acompaña el despertar tran-
posan inmóviles sobre las tumbas con sus ojos aten- quilo y el desayuno casero que invita a reponer las
tos de un amarillo brillante, las sombras empiezan a fuerzas para la última etapa: el sendero que llevará
alargarse y parecen hacer revivir los viejos misterios hasta Aldea Protestante, donde se asentaron los ale-
del cementerio. manes del Volga que conservaron ese credo también
Camino al balneario de Valle María, uno de los si- durante sus años en Rusia. El pueblo se parece a los
tios más refrescantes de la Huella Entrerriana du- demás de la ruta: casas bajas, la iglesia –protestante
rante el verano, El Mirador de Fernando Kranevitter es en este caso, junto a la casa del pastor- y esa quietud
otro de los lugares ideales para un alto en el camino. que no parece interrumpirse a ninguna hora del día.
El visitante atento notará que tampoco aquí las casas entre aves y árboles que tiñen el paisaje de un aire
tienen la puerta al frente sino más retirada, obligando bucólico. Un pequeño paseo con una lacomotora y un
al recién llegado a dar una vuelta para entrar, y que no vagón conforman un parquecito ferroviario junto con
hay ochavas en las esquinas: era una costumbre que otros elementos rescatados de los trenes, que forman
los colonos trajeron de Rusia, en parte para preser- parte de la cultura local. Además de las antiguas ins-
var la intimidad y en parte por razones de seguridad. talaciones de una aceitera que fue la razón de ser de
Como en los demás pueblos, con los que tiene una la localidad, se conserva todavía la vieja estación de
indisoluble unidad cultural, aquí se conservó la músi- tren. La Huella Entrerriana pasa por el Paseo de la
ca tradicional –una suerte de polka interpretada con Ribera de Diamante, como punto de partida hacia el
acordeón- pero no el idioma, ya que los intentos por Parque Nacional Predelta, y en su parte alta permite
enseñar el alemán actual chocaron con la lengua más disfrutar de la vista con el mirador sobre el puerto.
dialectal que los primeros pobladores habían traído de Desde aquí se organizan trekking insulares para ver en
Rusia. su temporada de floración la bellísima flor del irupé.
En Aldea Protestante, Noelia y Patricio son los res- En Diamante, donde el río descubre de vez en
ponsables de La Alemanita, una dulcería tentadora cuanto restos de importancia arqueológica, funciona
donde se puede comprar dulces, productos regionales también el museo del Doctor Liotta, oriundo de la ciu-
o tomar el té en un salón aledaño. Un sabor sigue al dad y creador del corazón artificial. Allí se conservan
otro y todos quieren hacerse un lugar en el recuerdo sus creaciones médicas, premios y regalos recibidos
del visitante: sobre todo la torta rusa, una delicia de a lo largo de su extensa trayectoria profesional, que
crema y azúcar; y los krepl, similares a los buñuelos incluyó el Texas Heart Institute de Houston, donde se
con la diferencia de que la masa se trabaja blanda so- concretó –el 4 de abril de 1969- el primer uso clínico
bre la mesada. “Siempre digo que el krepl es la torta de un corazón artificial total, durante un transplante
frita alemana: aquí cuando lleve se hace torta frita y cardíaco.
krepl, depende del origen de la familia”, explica Noelia,
que se explaya con entusiasmo en los años de trabajo Cristo Pescador
que hay detrás del emprendimiento. “Hubo que vencer
la resistencia de la gente y lograr que vinieran, que re-
corrieran los dos kilómetros hasta la aldea”, recuerda.
Hoy La Alemania trabaja con muchos establecimien-
tos de la zona, aunque no siempre fue fácil: “Al prin-
cipio usábamos ropa vieja, los batones de nuestras
abuelas, para hacer los sombreritos de los frascos,
porque no teníamos nada. Ahora ya estamos al borde
de la industrialización, pero no queremos porque no
es la idea con la que nacimos, aunque nos gusta se-
guir innovando. El movimiento de gente creció, y hay
muchos que más que dulces buscan el calor de hogar,
la contención”.
Otros sabores de la herencia alemana se pueden
probar en Akebia, un restaurante con jardín y patio
cervecero ideal para las noches de verano, donde
Sandra Streich agasaja con pirok caseros, una suerte
de empanada rellena con carne picada, repollo y ce-
bolla que forman parte de la mesa familiar en muchas
casas de la aldea.
A unos ocho kilómetros de Aldea Protestante,
Strobel es el último alto antes de Diamante y el
Parque Nacional Predelta. Se transita por un cami-
no paralelo a la vía del tren, a un lado de los silos,
Arroyo La Azotea
La caminata bordea el camino costero y llega al ner”, el camino llega a Punta Gorda, un área que
barrio de los pescadores, donde en 2006 se inau- era paso obligado del traslado hacia Buenos Aires.
guró el imponente Cristo Pescador, una escultura de Aquí se comprende por qué Diamante era un lugar
doce metros de altura y 14 toneladas, gracias a una estratégico para evitar el paso de los realistas hacia
iniciativa de una hermana de las Siervas del Espíritu Paraguay durante las guerras de Independencia, ya
Santo, instaladas en la zona para acompañar la fe y que aquí el Paraná es más angosto y resulta más
la educación de los alemanes del Volga. Antes de fácil cruzarlo. Desde aquí lo atravesó Urquiza para
instalar la obra, realizada por Andrés Mirwald –autor la batalla de Caseros, con unos 20.000 soldados y
del Monumento a Malvinas en Quequén, del Monu- cañones: un mes y unos días le llevó el viaje hasta la
mento al Sembrador en Villa Elisa y del Monumento provincia de Buenos Aires, que terminaría por definir
al Bicentenario en Neuquén- se realizó un estudio el futuro rumbo de la Argentina.
del suelo de la barranca, para determinar si podía La forma tradicional de hacer cruzar a los caba-
soportar el peso: el resultado es que hoy la estatua llos de costa a costa era “el azote”, que permitía
es el símbolo del barrio de pescadores, ese por don- cruzar decenas de animales a la vez con un gaucho
de pasa a diario Don Fernández, un pescador palan- azuzando y otro conduciéndolos desde el interior de
quero que se para gustoso a contar que sale cada la manada. De ahí el nombre del paraje La Azo-
mañana a las 5.30 a pescar a remo y con espinel, tea, desde donde una hora y media de caminata
bien provisto del gusano de las conejeras que es su permite recorrer los cinco kilómetros de sendero
carnada ideal. El resultado está a la vista, y después hasta el Parque Nacional Predelta. Aquí hay un
del saludo de rigor Don Fernández se va, con paso grupo de embarcaciones en desuso: un barco jaula,
firme, a ofrecer sus amarillos frescos por las calles usado para el traslado de animales; otro de dos pi-
del barrio. sos con enrejado para que los animales no resbalen
Entre recuerdos de pescadores y recomendacio- en el suelo; algunas barcas de pesca que parecen
nes para ir a comer pescado “en lo del Ruso Wag- inmóviles, nostálgicas de tiempos mejores.
Los bellos irupes del Parque Nacional Pre Delta (superior) y observando aves junto al guardaparque.
Al borde del arroyo La Azotea, la orilla de enfren- el sonido de las palomas, el rápido levantar vuelo de
te se muestra espesa en enredaderas, en timbós, en un hornero, el aroma de la salvia salvaje escondida
sangre de drago. Vuelve el recuerdo de aquellos fan- entre la vegetación. Del borde del arroyo, se sube
tasmas de la isla, aquellos mogotes que supieron hacia el monte en galería, donde un ombú sorpren-
asustar a un pescador niño, mientras se camina con de porque no sube para buscar la luz y exhibe una
cuidado observando las huellas de una vida animal silueta muy diferente a la tradicional desde la raíz
más o menos esquiva: el bosteo de los carpinchos, hasta la copa. Nidos de palomas, claveles del aire,
Cardenilla
cantos de aves: todo se confunde en el suave cruji- del norte, pero fueron bajando usando el río como
do de las hojas, y hay que andar con el oído atento corredor”.
porque el ruido de un chapuzón puede ser el único También se divisan caraús, que sería la única
indicio de los carpinchos que toman sol en la ori- grulla americana y se conoce como la “matraca de
lla y se meten rápidos al agua al detectar cualquier los isleros”. La especie es conocida porque se ali-
presencia extraña. El sendero pasa del albardón al menta de caracoles, que rompe utilizando el irupé
monte y de allí a un cañadón final, desde donde se como “plato”, a diferencia del caracolero que no
ve el Campo Coronel Sarmiento, hacia donde se necesita romperlos. Recorriendo los senderos in-
quiere extender el Parque Nacional y donde suelen ternos del Parque Nacional se ven también nidos de
refugiarse los animales cuando el río manda y se cotorras con sus varias entradas; las madrigueras
produce la inundación. de las mulitas; ortigas trepadoras; pollonas; chin-
Y ahora sí, el final del viaje se aproxima. El cheros o trepadores; cardenillas; zorzales y algunas
cartel que anuncia al Parque Nacional Predelta y especies subtropicales que fueron avanzando hacia
su símbolo, un martín pescador, son el broche de el sur, como el carpinterito del Chaco. Julián Alonso
oro de la Huella Entrerriana. Esta área protegida enseña a leer las huellas de la naturaleza, como el
busca conservar los ecosistemas del albardón, la pajonal aplastado que revela la siesta de un carpin-
zona más alta; la laguna; y el bañado, es decir las cho, o el “pega pega”, un árbol que desprende un
zonas más bajas e inundables. En este ambiente líquido pegajoso cuando se corta la corteza.
viven gallitos de agua, cuervillos, lobitos de río, coi- Desde los miradores, se ven los embalsados de
pos, y una cantidad de aves que tienta a cualquier camalotes, esas formaciones que a medida que
fotógrafo o amante del avistaje. “Aquí el camino se avanzan forman islas y en noviembre se tiñen del
abre en arroyos y riachos, que son las calles del bello color violeta de sus flores flotantes, siempre
Delta –cuenta el guardaparque Julián Alonso-, ade- navegantes.
más es el único lugar que queda para conocer el Con esa imagen, con el vuelo de las aves y el
verdadero Delta como era, ya que más al sur está chapoteo de los carpinchos, cierra la aventura de la
muy modificado”. El Parque, que abarca parte del Huella Entrerriana, un sendero de la ciudad a la na-
río Paraná y las islas Del Ceibo, Las Mangas y Del turaleza, de la historia grande a la vida pequeña, que
Barro, puede reservar sorpresas: “Hay especies encierra anécdotas, imágenes y la belleza del ancho
como el aguará popé –agrega Alonso- que son bien y fecundo litoral. Donde gobierna la flor; donde el
selváticas pero las tenemos acá. Son especies más río nunca regaló el color.
huella GUARANí
En la totalidad de su recorrido, la
Huella Guaraní atraviesa áreas
protegidas como la Reserva Natural
y Cultural, el Área Experimental
Guaraní y el Parque Provincial
CaáYarí. Asimismo la Huella
recorre 32 Km dentro de la Reserva
de Biósfera Yabotí, reconocida
internacionalmente por el Programa:
“Hombre y Biósfera” (Man and
Biosphere) de la UNESCO (1995).
Ciudades de Cabecera
El Soberbio por el sur. Colonia San Vicente y Colonia Fracran por el norte.
Acceso por el sur: Desde la ciudad de El Soberbio por Ruta Provincial N°2 hacia
el norte con dirección a la reserva del Moconá, nos encontraremos con el desvío
que conecta con la Ruta Provincial N°15, que en forma transversal conecta la Ruta
Provincial N°2 por el sur con la Ruta Nacional N°14 por el norte, uniendo los parajes
Colonia La Flor y Colonia Nueva. En este tramo podemos tomar un transporte público
desde El Soberbio hasta Colonia La Flor donde se inicia la primera etapa.
MISIONES
ETAPA 1
Colonia la Flor - Aldea Pindó Poty
Distancia: 9,3 km
Duración: 3 hs Descripción: Una vez que llegamos a Colonia La Flor en el transporte regular,
comenzaremos la etapa caminando por la Ruta Provincial N°15 en dirección
Dificultad: norte. La Flor es una colonia constituida por descendientes de inmigrantes,
muchos de ellos de origen polaco y alemán, que se adentraron en la selva
Elevación Min – Prom – Max
para habitarla y comenzar a realizar actividades agrícolas y en menor grado
386m – 495m – 549m ganaderas. Está conformada mayormente por minifundios donde se cultivan,
Ganancia y pérdida de elevación entre otros, el tabaco, la yerba mate, frutales, además de hortalizas. En esta
colonia podremos abastecernos de alimentos y existen en sus cercanías
195m – (-306m)
hosterías tipo lodge donde tendremos variadas propuestas de actividades para
Pendientes promedio de subida y bajada realizar con la selva como marco. A unos 4 km de nuestro punto de partida,
4.1% – (-6.1%) encontraremos que la Ruta Provincial N°15 se bifurca: hacia la izquierda
continúa la ruta, mientras que hacia la derecha debemos seguir el camino
que nos llevará a la Aldea Pindó Poty. A lo largo del camino iremos viendo las
Precauciones: Señal de celular, sólo en La prolijas fincas de los colonos coloreadas por sus cultivos y bordeadas por el
Flor. Cuídese del sol. Lleve analgésicos y paisaje selvático. Es común cruzarse con algún carro polaco, conducido por
antihistamínicos para calmar los dolores colonos con sus atuendos típicos. A los 2,5 km nos encontraremos a nuestra
de cabeza o el malestar producido por derecha con el edificio de la Asociación de Amigos Guaraníes que funciona
la exposición constante al sol y por las como espacio temático. Allí se pueden apreciar artesanías y tejidos realizados
picaduras de insectos. por los guaraníes de las aldeas vecinas, cuadros y esculturas talladas en madera
Hidrátese permanentemente, pues el calor que nos ilustran acerca del arte en su cultura. Seguiremos caminando por el
tropical hace que nos deshidratemos muy camino y aproximadamente 1 km más adelante comenzaremos la bajada hacia
rápidamente y que no paremos de sudar. Es la aldea. Una vez en el fondo del cañadón vadearemos un arroyo y unos 100
metros más adelante nos encontraremos en el corazón de la Aldea Pindó Poty
fundamental asegurarse de que los líquidos
donde nuestros anfitriones guaraníes nos darán la bienvenida y nos ofrecerán la
que consumamos estén preparados con
comodidad de una choza típica, preparada para recibir visitantes. En cercanías
agua potable.
de la misma, los aldeanos nos ofrecerán una visita guiada por alguno de los
circuitos temáticos que fueron realizados para mostrar a los visitantes sus
Previsiones: Llevar agua, gorro de técnicas de cacería en la selva. Es una buena oportunidad para hablar de su
sol, lentes, protector solar. El repelente interesante cosmovisión y su armonía con el medio. También nos mostrarán
para insectos es imprescindible. Vianda una pequeña feria donde tendremos la oportunidad de adquirir algunos de sus
(preferentemente frutas). Es importante productos artesanales.
llevar ropa cómoda, preferiblemente de
algodón y con colores claros. Llevar
camisas de manga larga para evitar las
picaduras de mosquitos.
ÓMNIBUS RESTAURANTE PROVEEDURÍA TELÉFONO CENTRO DE PRIMEROS
PÚBLICO VISITANTES AUXILIOS
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