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La Globalización y Mundo Unipolar

Aunque el mundo está compuesto por grandes divisiones geográficas, políticas y


culturales, en la actualidad es posible que dos personas puedan mantener una
comunicación a tiempo real con la otra; es posible llegar de un día a otro al extremo
más alejado del planeta tomando un avión; así como un producto producido en Asia
puede ser exportado a América con cotidianidad.

Todos estos procesos si bien parecen muy comunes hoy en día, la verdad es que
hace unos años no eran tan simples. Pero en el presente lo son, gracias al proceso
de globalización que hemos experimentado en las últimas décadas.

Existen muchas concepciones diferentes acerca de la definición de globalización. Sin


embargo, se puede resumir en que se trata de un proceso dinámico que está
compuesto por una creciente interdependencia entre los países del mundo. Algo
que ocurre usando como medio, una serie de transformaciones de carácter global. Las
fronteras que antes tantas limitaciones representaban, con más frecuencia tienen
menos relevancia.

Un mundo unipolar se refiere a dos o más países que se unen para hacer algún
cambio, para apoyarse, luchar contra algún problema, pelear contra una batalla u otras
cosas. Pueden ser países de un mismo continente o de diferentes. Pueden basarse en
diferentes aspectos, como la economía, la sociopolítica, entre otros.
La caída del muro de Berlín en 1989, el inicio de la unificación alemana al siguiente
año, la guerra del golfo Pérsico y la desintegración oficial de la Unión soviética fueron
los sucesos que más se marcaron del nuevo orden mundial que se estableció al
terminar la década de los ochenta del siglo veinte.

Una muestra de que existe algo de unipolaridad actualmente, es que el idioma mundial
es el inglés, es el que más se habla, el que debes conocer para poder desarrollarte
más plenamente en diferentes campos. Esto, en parte, demuestra que el mundo esta
aceptando el poder absoluto de Estados Unidos, y eso a su vez, le da más poder.
Esta unipolaridad que poco a poco se va haciendo presente, no solamente se
encuentra en el idioma, sino también en la cultura. Muchas tradiciones
estadounidenses se han ido adoptando fácilmente por otros países haciéndolas ya
parte de ellos. También la música y los íconos de cine, provienen en gran parte de
Estados Unidos, y estos son seguidos y vistos por todo el mundo.

CARACTERISTICAS DEL MUNDO UNIPOLAR

Las características de mundo unipolar puede clasificarse a partir de 3 ámbitos: el


político, el económico y el social.En el ámbito político se pretende institucionalizar el
modelo de la democracia representativa, con instituciones autónomas, con equilibrio
de poderes, que en el discurso enfatiza el respeto a los derechos humanos y pregona
la defensa de un estado de derecho.

En lo económico se implanta un modelo económico “Neoliberal” donde existe una


imposición a través del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial.

En lo social se aprovecha la capacidad de penetración ideológica de los medios


masivos de comunicación para divulgar e imponer la cultura occidental y
particularmente, las bondades del denominado “american life” como modelo de vida.
Imperialismo en América Latina

El imperialismo fue consecuencia de la revolución industrial. Constituyó el marco de la


decisiva incorporación de América Latina a la economía mundial capitalista. Este
proceso produjo transformaciones fundamentales en todo el subcontinente: por un
lado, consolidó el perfil agro-minero exportador de su economía; Y por otro lado, esa
orientación profundizó las diferencias regionales, en función de las diversas “vías
nacionales” a través de las cuales se llevó a cabo. Fue también cuando se despertaron
las más intensas expresiones de búsqueda de una identidad latinoamericana y
nacional, recortada frente a los imperialismos que la amenazaban.

Las apetencias de las economías europeas, en este período de crecimiento de las


economías industrializadas y de expansión sobre nuevos territorios, encontraron en
América Latina un espacio propicio para la obtención de materias primas y un mercado
en crecimiento para la colocación de productos de elaboración industrial. Frente a ese
contexto, las oligarquías locales buscaron incrementar la producción agrícola y minera
para su exportación. Lo hicieron sobre la base de la estructura de los grandes
latifundios o haciendas, de las que eran propietarias. Así, consolidaron un modelo de
crecimiento económico basado en la especialización productiva, en la explotación
extensiva y en la dependencia de los mercados exteriores.

El contexto era propicio para que las oligarquías dejaran atrás las viejas disputas
faccionales y coordinar desde el Estado las tareas necesarias para la definición de una
economía orientada hacia el exterior. Esto suponía la integración del territorio nacional
y el avance sobre nuevas tierras para sumarlas a la producción exportable; además
era necesario solucionar, en algunas regiones, el problema de la escasez de mano de
obra, y resolver la necesidad de contar con capital e infraestructura para agilizar la
producción y fundamentalmente la comercialización. Si las primeras tareas podían ser
encaminadas a partir de la construcción de la gestión estatal (lo cual incluía la
administración de la violencia por parte del Estado, necesaria para la reducción o
incorporación de las poblaciones originarias al área de influencia de la “economía
europea”), y en algunos casos resultó importante el fomento de la inmigración, las
inversiones que se requerían para el transporte y la comercialización le aseguraron a
las economías imperiales algo más que el papel de compradores. Así, principalmente
el capital inglés se posicionó, fundamentalmente a través de la inversión en
ferrocarriles y del control del sistema financiero, como una presencia tutelar del
crecimiento de las economías de los países latinoamericanos y de la orientación de
sus elites gobernantes.

La consolidación de una estructura estatal resultó fundamental para la integración del


territorio nacional y para definir las bases institucionales necesarias para el
funcionamiento del modelo primario exportador. Este proceso tuvo diferentes ritmos y
etapas en los diversos países del continente. Allí donde la demanda internacional
coincidía con las posibilidades que ofrecían los suelos, las oligarquías pudieron
negociar o imponer su predominio sobre otras facciones, y consolidar el poder del
Estado. Lo hicieron a partir de una alianza de hecho con el capital extranjero, que
ocupó un lugar fundamental en el financiamiento a través de préstamos, que
inauguraban una larga historia de endeudamientos.
Pero en esos años finales del siglo XIX asomaría en el continente una sombra
imperialista que a la postre se revelaría como algo más palpable que un espectro. La
presencia de EEUU se hizo cada vez más potente a partir de su creciente
protagonismo en las disputas por los mercados de capital y las fuentes de materias
primas. La emergente potencia imperial del norte había procurado posicionarse desde
principios del siglo XIX como “hermano mayor” de sus “débiles” vecinos, para
resguardarlos de la posibilidad de recaer en las “garras” coloniales. El marco ofrecido
por la Doctrina Monroe, sancionada en 1823, invocaba el principio soberano de
“América para los americanos”, pero establecía de hecho la incumbencia
norteamericana en el ámbito continental.

EEUU impulsaba ahora, en “la era del imperialismo”, una traducción de su liderazgo
continental por medio de la promoción de Conferencias que buscaban unir a todos los
Estados Americanos. La primera de esas reuniones, convocada en Washington, en
1889, puso en evidencia la intención de los norteamericanos de propiciar acuerdos
comerciales y unificar las normas jurídicas para potenciar su penetración económica
en el continente, en el marco de su proyecto “panamericano”. Esa posición de
liderazgo en la promoción de una organización de escala continental sería pronto
reafirmada a través de la participación en gestiones para dirimir conflictos entre los
países latinoamericanos y las viejas potencias imperiales europeas, que aún
conservaban su presencia en el continente. Así, la gestión diplomática en ocasión de
las disputas entre Venezuela y Gran Bretaña por el límite de la Guyana, en 1897, sería
un antecedente para que luego EEUU interviniera decisivamente en el proceso de
independencia de dos islas que constituían los últimos bastiones del viejo imperio
español. Principalmente Cuba, aquel emporio de la colonia, constituía un espacio
estratégico en el área del Caribe, de singular interés para los norteamericanos. De allí
que EEUU ofreciera, además de la diplomacia, su apoyo militar a los ejércitos rebeldes
que luchaban por la independencia. La declaración de guerra a España, en 1898, tras
un incidente con un barco de bandera norteamericana, decidió el definitivo retroceso
del colonialismo ibérico, y al mismo tiempo inauguró la era del imperialismo
norteamericano, a través de la ocupación de Cuba y Puerto Rico, botines de la Guerra
ganada. Si bien la primera de estas dos islas declararía su independencia formal, la
enmienda Platt, incorporada al texto constitucional de la nueva República, cedía a
EEUU parte del territorio y el derecho a la intervención.

LA INJERENCIA IMPERIALISTA EN VENEZUELA


El imperialismo continúa con su intromisión descarada en los asuntos internos del
país, y apoya y financia a los mismos asesinos que masacraron al pueblo duranteel
“caracazo”, hace ya 15 años y lo volvieron a hacer el 11 A del 2002 El gobierno de bush esta
decidido a acabar con el proceso revolucionario y para ello utilizar ‘todos los medios que
considere necesarios para sacar a Chávez del poder hoy esta “contrarrevolución democrática”
a través del referéndum y el fraude, lo cual no excluye la posibilidad de cometer actos
violentos, amparados en la impunidad que reina en el país.

los trabajadores y el pueblo enezolano tienen una lar%a tradició


n d e l u c h a antiimperialista y de unidad latinoamericana, cuyo ejemplo primigenio fue la
guerra de independencia del yugo español sobre esa memoria histórica se erigen
en la actualidad, la lucha del pueblo venezolano contra la injerencia del
imperialismo norteamericano en los asuntos internos de /Venezuela, y en ese
espíritu es quecon ocamos a los dirigentes y luchadores populares de !m*rica
atina a que semo ilicen para impedir que se acepten las firmas fraudulentas de
la oposición y contra la intromisión imperialista

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