Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Tierra de relleno.
Relleno y compactación
Es el efecto que consiste en colocar el material, producto de la excavación, proveniente de una cantera de
préstamo para alcanzar los niveles del proyecto, para mejorar o sustituir material natural inestable, para
ocultar y confinar cimentaciones o cualquier otra excavación que lo requiera.
El relleno se clasifica de diferentes maneras:
• Por el grado de compactación:
Relleno a volteo. Cuando el material que se usa para el relleno se coloca en el sitio sin compactación alguna.
Relleno compactado. Cuando al material que se usa para rellenar se le aplica un proceso para aumentar su
peso volumétrico (eliminación de vacíos) con el objeto de incrementar la resistencia y disminuir la
compresibilidad.
• Por el tipo de material
Material producto de la excavación. En ocasiones cuando el material sobre el cual se construye y sobre el
que se aloja el sistema de cimentación es resistente, estable y presenta gran capacidad de cohesión al aplicar
la compactación, además de no estar contaminado, se utiliza para rellenar.
Material de cantera. Cuando las características del suelo no son apropiadas para usarse como material de
relleno se sustituirá por otro proveniente de un banco de préstamo. Entendiéndose por banco o cantera de
préstamo el sitio de preferencia cercano a la obra y formado por material inerte, libre de contaminación y de
granulometría uniforme que permita alcanzar el nivel óptimo de humedad para el proceso de compactación.
El objeto de un relleno compactado es densificar el suelo y se puede hacer aplicando carga con un peso
estático; mediante golpes con un objeto; por vibración; por medios manuales (pisón de mano) o por medios
mecánicos ligeros o pesados (vibro apisonador, placa vibratoria, aplanadoras o rodillos).
La compactación se utiliza para eliminar los asentamientos y para hacer más impermeable el suelo, cuando
sea el caso.
La compactación que debe obtenerse en los rellenos se especifica como un porcentaje mínimo del peso
volumétrico máximo con humedad óptima que se determina en pruebas de laboratorio. Es decir, para un
suelo y un esfuerzo de compactación dado, existe un contenido óptimo de humedad, expresado en
porcentaje con respecto al peso del suelo seco, que permite el máximo grado de compactación.
Para verificar lo anterior existe una prueba de laboratorio llamada prueba Proctor que se desprende de la
norma ASTM (American Society of Testing Materials) D698 y D1557: Relaciones de humedad-densidad en
suelos y con mezclas de suelo agregados, utilizando ariete de 2.50 kg (5.5 lb) para una caída de 30.50 cm
(1.00 pie) y un ariete de 4.54 kg (10 lb) para una caída de 45.70 cm (1.50 pie), respectivamente.
Se deben tomar varias muestras del relleno que se requiere verificar, aunado al grado de compactación
obtenido y se someten a las pruebas de laboratorio para encontrar la densidad de la muestra del material
compactado con relación al contenido de humedad; estos datos se grafican para determinar la densidad
máxima con la humedad óptima.
La especificación de compactación para un relleno debe entenderse como que una compactación de 95%
significa que el material, ya compactado, debe tener una densidad mínima del 95% del peso volumétrico
máximo del terreno, el cual como ya se mencionó se obtiene cuando el material tiene un contenido óptimo
de humedad. En la tabla 4 se presentan los requisitos de algunas compactaciones en función de su densidad
en seco.
PROCESOS CONSTRUCTIVOS I
PROCESOS CONSTRUCTIVOS I
PROCESOS CONSTRUCTIVOS I
PROCESOS CONSTRUCTIVOS I
PROCESOS CONSTRUCTIVOS I
PROCESOS CONSTRUCTIVOS I
Es necesario el conocimiento con exactitud del tipo de terreno existente para poder definir correctamente el alcance
del mismo y determinar los parámetros que se desean alcanzar como única forma de poder establecer los sistemas
de control que se consideren precisos para garantizar la consecución de los objetivos previstos y su compatibilidad
con la cimentación proyectada. El proyecto de edificación debe de incluir las características del relleno junto a sus
condiciones de colocación y compactación, las cuales se deben de comprobar después de la compactación para
poder asegurar su estabilidad evitando cualquier perturbación sobre el subsuelo natural.
Las causas de aparición de patologías en edificaciones en donde se han utilizado rellenos estructurales son muy
variadas, pudiendo hacer una clasificación atendiendo al origen de la causa, teniendo por lo tanto causas
intrínsecas y causas extrínsecas.
Causas intrínsecas, debido a los defectos en el proyecto o en la ejecución, situaciones que se podrían haber evitado
con un proyecto o ejecución correctos.
Derivados del proyecto podremos tener patologías que se deben a la falta de idoneidad de los materiales, ensayos
de reconocimiento insuficientes, falta de definición de los materiales de relleno, falta de definición de los valores de
compactación, etc.
Derivados de la ejecución: podremos tener patologías que se deben a la disposición de materiales no adecuados,
errores en la compactación de los rellenos, errores en las impermeabilizaciones de saneamientos, etc.
Causas extrínsecas, debido a variaciones producidas en el edificio o en su entorno que modifican las características
existentes cuando se proyecto el edificio, podrían deberse a incrementos de sobrecargas, variación en numero de
plantas o sótanos, construcciones en las inmediaciones no previstas que provoquen descalces de la cimentación
por desconfinamiento del relleno, vibraciones, variaciones en el nivel freático, fugas o escapes de agua, etc.
A mediados de los años 50 se realizaron estudios sobre los asientos máximos diferenciales por Skempton y
McDonal, posteriormente completados por Bjerrum, basándose en casos reales de edificios y estableciendo unos
criterios de limitación de asientos para que no ocurrieran patologías.
La estructuras de las edificaciones son elementos con gran rigidez, mientras que los rellenos tienen una rigidez
menor y en cierta medida dependen tanto de la naturaleza de los materiales como de la compactación a la que se
vean sometidos, la aparición de grietas es como consecuencia de la interacción entre el suelo y estructura, y de los
PROCESOS CONSTRUCTIVOS I
movimientos o deformaciones provocadas a los niveles de rellenos estructurales, deformaciones que no son
asimilados por el edificio produciéndose grietas de tracción en las zonas de mayor rigidez del edificio como son las
tabaquerías y cerramientos hasta resultar dañada la estructura.
Cuando aparece una distorsión creada por la diferencia de asiento de una zona con respecto a otra, porque un pilar
asienta más que otro, se crea un estado tensional con sus isostáticas de compresión y tracción, las grietas se
generan donde la tensión de tracción es máxima, si el asiento diferencial es de poca entidad las fuerzas serán
absorbidas por la estructura, pero si el asiento diferencial es capaz de agotar la resistencia de lso tabiques se
producirán agrietamientos según una línea perpendicular al esfuerzo no resistido.
Las anisotropías y heterogeneidades de resistencia (por presencia de huecos en tabiques o por otros factores)
modifican la morfología de los agrietamientos, pudiendo a veces aparecer grietas horizontales y verticales en forma
de escalera, familias de grietas verticales en las uniones, etc.
Para una prevención de patologías debidas a la presencia de un relleno estructural se debe de prestar gran
atención al proceso de ejecución de los rellenos estructurales, controlando muy cuidadosamente tanto el proceso de
compactación como el control posterior del relleno para que no se generen heterogeneidades en la compactaciones
que provoquen el desarrollo de asientos diferenciales superiores a los tolerables por la estructura.
Los criterios de selección del material adecuado para su utilización en un relleno se basan en la
obtención, tras el proceso de compactación, de la resistencia, rigidez y permeabilidad necesarias en el relleno.
Estos criterios dependerán, por tanto, del propósito del relleno y de los requisitos del servicio o construcción a
disponer sobre el mismo.
Los materiales que, según los casos, pueden ser utilizados para rellenos de edificación incluyen la mayor parte de
los suelos predominantemente granulares e incluso algunos productos resultantes de la actividad industrial tales
como ciertas escorias y cenizas pulverizadas. Algunos productos manufacturados, tales como agregados ligeros,
podrán utilizarse en determinados casos. Los suelos cohesivos podrán ser tolerables pero requieren una especial
selección y las condiciones de colocación y compactación precisas
Se establecerán los procedimientos de colocación y compactación del relleno para cada zona o tongada de relleno
en función de su objeto y comportamiento previstos.
Los procedimientos de colocación y compactación del relleno deben asegurar su estabilidad en todo momento
evitando además cualquier perturbación del subsuelo natural.
El proceso de compactación se definirá en función de la compacidad a conseguir y de los siguientes factores:
b) Método de colocación;
f) Uniformidad de compactación;
El relleno que se coloque adyacente a estructuras debe disponerse en tongadas de espesor limitado y compactarse
con medios de energía pequeña para evitar daño a estas construcciones.
Previamente a la colocación de rellenos bajo el agua debe dragarse cualquier suelo blando existente.
El control de un relleno debe asegurar que el material, su contenido de humedad en la colocación y su grado final
de compacidad obedece a lo especificado en el Pliego de Condiciones del Proyecto, para ello se pueden realizar
ensayos in situ que determinen el grado de densidad y humedad obtenido en la compactación, junto con ensayos
de carga de placa y penetraciones dinámicas.
Habitualmente, el grado de compacidad se especificará como porcentaje del obtenido como máximo en un ensayo
de referencia como el Proctor.
En escolleras o en rellenos que contengan una proporción alta de tamaños gruesos no son aplicables los ensayos
Proctor. En este caso se comprobará la compacidad por métodos de campo, tales como definir el proceso de
compactación a seguir en un relleno de prueba, comprobar el asentamiento de una pasada adicional del equipo de
compactación, realización de ensayos de carga con placa o el empleo de métodos sísmicos o dinámicos.