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Bautismo de Niños

¿PORQUÉ NO BAUTIZAMOS A LOS NIÑOS?

No bautizamos a los niños porque Jesús dijo: Mateo 11:29 “Aprended de


Mí” y Jesús cuando era niño no fue bautizado sino presentado en el
Templo conforme a la Ley:

Números 6:22-27 dice: Jehová habló a Moisés, diciendo: Habla a Aarón


y a sus hijos y diles: Así bendeciréis a los hijos de Israel, diciéndoles:
Jehová te bendiga, y te guarde; Jehová haga resplandecer su rostro
sobre ti, y tenga de ti misericordia; Jehová alce sobre ti su rostro, y
ponga en ti paz. Y pondrán mi nombre sobre los hijos de Israel, y yo los
bendeciré.

Lucas 2:21-22 dice: Cumplidos los ocho días para circuncidar al niño, le
pusieron por nombre JESÚS, el cual le había sido puesto por el ángel
antes que fuese concebido. Y cuando se cumplieron los días de la
purificación de ellos, conforme a la ley de Moisés, le trajeron a Jerusalén
para presentarle al Señor

Quiero que entiendan todos aquellos que Jesús en su ministerio no


bautizaba a los niños; si no les bendecía (Marcos 10:13-16 dice: Y le
presentaban niños para que los tocase; y los discípulos reprendían a los
que los presentaban.
Viéndolo Jesús, se indignó, y les dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no
se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios. De cierto os digo,
que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él. Y
tomándolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los
bendecía.)

El Bautismo es para los que tienen conciencia de que son pecadores, y


deben arrepentirse.
Todos los bautizados eran personas jóvenes y adultas:

• Marcos 16:16 dice: El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas
el que no creyere, será condenado.

• Hechos 2:38-41 dice: Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno
de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y
recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa,
y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el
Señor nuestro Dios llamare. Y con otras muchas palabras testificaba y
les exhortaba, diciendo: Sed salvos de esta perversa generación. Así
que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron
aquel día como tres mil personas.

• Hechos 8:12,16 dice: Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el


evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban
hombres y mujeres.
También creyó Simón mismo, y habiéndose bautizado, estaba siempre
con Felipe; y viendo las señales y grandes milagros que se hacían,
estaba atónito.
Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria
había recibido la palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan; los
cuales, habiendo venido, oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu
Santo; porque aún no había descendido sobre ninguno de ellos, sino
que solamente habían sido bautizados en el nombre de Jesús.

• Hechos 10:45-48 dice: Y los fieles de la circuncisión que habían venido


con Pedro se quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se
derramase el don del Espíritu Santo.
Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban a Dios.
Entonces respondió Pedro: ¿Puede acaso alguno impedir el agua, para
que no sean bautizados estos que han recibido el Espíritu Santo también
como nosotros? Y mandó bautizarles en el nombre del Señor Jesús.
Entonces le rogaron que se quedase por algunos días.

Hechos 19:1-7 dice: Aconteció que entre tanto que Apolos estaba en
Corinto, Pablo, después de recorrer las regiones superiores, vino a
Efeso, y hallando a ciertos discípulos, les dijo: ¿Recibisteis el Espíritu
Santo cuando creísteis? Y ellos le dijeron: Ni siquiera hemos oído si hay
Espíritu Santo. Entonces dijo: ¿En qué, pues, fuisteis bautizados? Ellos
dijeron: En el bautismo de Juan. Dijo Pablo: Juan bautizó con bautismo
de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que
vendría después de él, esto es, en Jesús el Cristo. Cuando oyeron esto,
fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús. Y habiéndoles
impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban
en lenguas, y profetizaban. Eran por todos unos doce hombres.

y un niño no tiene discernimiento ni puede arrepentirse. Y mucho menos


puede expresar o decidir a que doctrina quiere elegir:

• Marcos 16:15,16: Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el


evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo;
mas el que no creyere, será condenado.
Por eso instruimos en la escuela Bíblica a los jóvenes para que ellos
oigan la palabra de Dios, la crean y se arrepientan, y así tomen la
determinación y elección de seguir a Jesucristo, bautizarse para la
salvación de sus almas: 1ra. Pedro 3:21dice: El bautismo que
corresponde a esto ahora nos salva (no quitando las inmundicias de la
carne, sino como la aspiración de una buena conciencia hacia Dios) por
la resurrección de Jesucristo.

Los padres son informados de la decisión de sus hijos y en mutuo


acuerdo permiten que sus hijos sean bautizados en el nombre de
nuestro señor Jesucristo, tal como lo señala las Sagradas Escrituras,
este es el varadero bautismo de salvación ordenado por nuestro gran
Dios y salvador Jesucristo.
Querido amigo si tu no tienes el vestido que solo da Jesús por medio del
bautismo, no podrás entrar al reino de los cielos:

• porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis
revestidos. (Gálatas 3:27).

• Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de


agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. (Juan 3:5).

Dios les bendiga

Fredy Delgado (Teólogo)

bautismo de niños no es Biblico

EL BAUTISMO DE NIÑOS NO ES BÍBLICO

Las personas que parece ser que no han entendido el mandado de nuestro
gran Dios y salvador Jesucristo son los que practican esta ceremonia
bautismal anti bíblica y si digo que es anti bíblica es porque no van de acuerdo
a las enseñanzas de las Sagradas Escrituras.

Jesús ordeno que el evangelio es para toda criatura, pero que estas debían
entender el mensaje de salvación o la buena noticia. La persona que crea esta
noticia procederá al bautismo en el nombre de Jesús. Pero si no lo cree se
condenara por su propia voluntad: “Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad
el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas
el que no creyere, será condenado.” (Marcos 16:15-16). Y estas señales
seguirá a todos aquellas personas que creen en este evangelio del nombre de
Jesús: “Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre…” (Marcos
16:17). Ahora le pregunto ¿Si las señales son para los que CREEN, será que
un niño puede creer por qué le rocían agua en la cabeza? No creo que un niño
pueda responder. Pues bien Jesús en el primer libro de los evangelios da un
gran mandamiento a sus apóstoles y dice: “Por tanto, id, y haced discípulos a
todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del
Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he
mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del
mundo. Amén.” (Mateo 28:19-20). Hay un mandato y es el de enseñarles
todas las cosas que mando Jesús, a aquellas personas que tomaron esta
decisión de bautizase en su nombre, para el perdón de sus pecados. El
apóstol Pedro fue el primero en cumplir con esta enseñanza en el día de
pentecostés cuando respondió aquella pregunta de salvación: “…Varones
hermanos, ¿qué haremos?” (Hechos 2:37). Ahora imaginemos a un niño
haciendo esta pregunta ¿Para qué me bautizan? Creo que esto nunca va a
suceder y ustedes saben la razón. Ellos no tienen discernimiento, ellos no
pueden responder, ellos no pueden tomar decisiones. Si esto es así no sé
porque insisten en bautizarlos. Que pasa con estas personas que dicen ser
cristianas pero que no cumplen el mandamiento del maestro y señor
Jesucristo. Pedro le respondió a aquella multitud y les dijo: “Arrepentíos, y
bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los
pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la
promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos
el Señor nuestro Dios llamare.” (Hechos 2:38-39).

Si, el bautismo es para todas aquellas personas que Dios llama, a que sean
salvas, a que le sigan, esta es una promesa de limpieza y de salvación para
los que han cometido pecados. Las Sagradas Escrituras confirma que aquel
día tomaron la decisión de bautizarse en el nombre de Jesús como unas tres
mil personas, y vemos que entre estas personas no había niños incluidos: “Así
que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día
como tres mil personas.” (Hechos 2:41). El bautismo en el nombre de Jesús,
es para los que reciben la palabra de Dios. En ninguna manera es para los
niños que no tienen discernimiento, no tienen poder de decisión.

Por eso querido amigo bautizar a los niños es anti Bíblico, va encontrar de las
enseñanzas de Jesús y de los apóstoles el cual enseñaron que el bautismo es
para los hombres y mujeres, tal como paso en la ciudad de Samaria, veamos:
“Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios
y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres. También creyó
Simón mismo, y habiéndose bautizado, estaba siempre con Felipe; y viendo
las señales y grandes milagros que se hacían, estaba atónito. Cuando los
apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la
palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan; los cuales, habiendo venido,
oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu Santo; porque aún no había
descendido sobre ninguno de ellos, sino que solamente habían sido
bautizados en el nombre de Jesús. Entonces les imponían las manos, y
recibían el Espíritu Santo. ” (Hechos 8:12-17). La palabra clave aquí es
CREER, como paso con Simón que también creyó y fue bautizado en el
nombre de Jesús.
Si leemos con detenimiento nos daremos cuenta que hay una gran diferencia
en ser bautizado en el nombre de Jesús y el ser bautizado por el Espíritu
Santo. La comunidad de Samaria había sido bautizada, pero había un gran
problema, no habían recibido el Espíritu Santo, esta fue una de las razones
por las cuales mandaron a Samaria a Pedro y a Juan, los cuales, oraron por
ellos para que recibiesen el Espíritu Santo; porque aún no había descendido
sobre ninguno de ellos, sino que solamente habían sido bautizados en el
nombre de Jesús. Ahora te preguntaras como un niño puede ser lleno del
Espíritu Santo?

Jesús nos dejó las enseñanzas de su doctrina muy claras y precisas cuando
dijo que aprendiéramos de él. Indicando que sus padres lo que hicieron fue
presentarlo en el templo, y no fue bautizado siendo un niño, como suele
suceder hoy en día: “Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que
soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas”
(Mateo 11:29)

“Aprended de Mí” qué bueno que usted entienda que el aprendizaje comienza
con Jesús. Jesús cuando era niño no fue bautizado sino presentado en el
Templo conforme a la Ley, eso sí lo podemos hacer todavía en este tiempo,
veamos:

• “Jehová habló a Moisés, diciendo: Habla a Aarón y a sus hijos y diles: Así
bendeciréis a los hijos de Israel, diciéndoles Jehová te bendiga, y te guarde;
Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; Jehová
alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz. Y pondrán mi nombre sobre los hijos
de Israel, y yo los bendeciré.” (Números 6:22-27).

• “Cumplidos los ocho días para circuncidar al niño, le pusieron por nombre
JESÚS, el cual le había sido puesto por el ángel antes que fuese concebido. Y
cuando se cumplieron los días de la purificación de ellos, conforme a la ley de
Moisés, le trajeron a Jerusalén para presentarle al Señor (como está escrito en
la ley del Señor: Todo varón que abriere la matriz será llamado santo al Señor”
(Lucas 2:21-23).

Si usted está dispuesto seguir las enseñanzas de nuestro gran Dios y salvador
Jesucristo debe comprender que él, en su ministerio no bautizaba a los niños;
si no les bendecía, así lo enseña la escritura: “Y le presentaban niños para que
los tocase; y los discípulos reprendían a los que los presentaban. Viéndolo
Jesús, se indignó, y les dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis;
porque de los tales es el reino de Dios. De cierto os digo, que el que no reciba
el reino de Dios como un niño, no entrará en él. Y tomándolos en los brazos,
poniendo las manos sobre ellos, los bendecía.” (Marcos 10:13-16). Les repito
querido amigo que el Bautismo en el nombre de Jesús, es para los que tienen
conciencia de que son pecadores, y deben arrepentirse. Todos los bautizados
que muestra la Biblia eran personas jóvenes y adultas. En ninguna parte de
las Sagradas Escrituras manifiesta que los niños eran bautizados, usted puede
orar, ayunar, dar limosnas, ayudar a los necesitados y aun así necesita
obedecer lo que Jesús ordeno. La Biblia narra una historia de un hombre que
tenía este deseo de ser salvo, él era un centurión que tenía a su cargo una
compañía de soldados llamado la Italiana. A este militar Dios le mostro que era
necesario que obedeciera las enseñanzas de Jesús, las cuales habían sido
enseñadas a Pedro y que el obedientemente trasmitía a todos aquellos que
cumplen con este mandamiento del bautismo en el nombre de Jesús, veamos:

• “Había en Cesarea un hombre llamado Cornelio, centurión de la compañía


llamada la Italiana, piadoso y temeroso de Dios con toda su casa, y que hacía
muchas limosnas al pueblo, y oraba a Dios siempre. Este vio claramente en
una visión, como a la hora novena del día, que un ángel de Dios entraba
donde él estaba, y le decía: Cornelio. El, mirándole fijamente, y atemorizado,
dijo: ¿Qué es, Señor? Y le dijo: Tus oraciones y tus limosnas han subido para
memoria delante de Dios. Envía, pues, ahora hombres a Jope, y haz venir a
Simón, el que tiene por sobrenombre Pedro. Este posa en casa de cierto
Simón curtidor, que tiene su casa junto al mar; él te dirá lo que es necesario
que hagas.” (Hechos 10:1-6).

• “Y nosotros somos testigos de todas las cosas que Jesús hizo en la tierra de
Judea y en Jerusalén; a quien mataron colgándole en un madero. A éste
levantó Dios al tercer día, e hizo que se manifestase; no a todo el pueblo, sino
a los testigos que Dios había ordenado de antemano, a nosotros que comimos
y bebimos con él después que resucitó de los muertos. Y nos mandó que
predicásemos al pueblo, y testificásemos que él es el que Dios ha puesto por
Juez de vivos y muertos. De éste dan testimonio todos los profetas, que todos
los que en él creyeren, recibirán perdón de pecados por su nombre. Mientras
aún hablaba Pedro estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los que
oían el discurso. Y los fieles de la circuncisión que habían venido con Pedro se
quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se derramase el don del
Espíritu Santo. Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban
a Dios. Entonces respondió Pedro: ¿Puede acaso alguno impedir el agua,
para que no sean bautizados estos que han recibido el Espíritu Santo también
como nosotros? Y mandó bautizarles en el nombre del Señor Jesús. Entonces
le rogaron que se quedase por algunos días.” (Hechos 10:45-48).

Cornelio obedeció lo que el ángel le dijo, el también invito a todos sus


familiares y allegados, para que escucharan el mensaje que Pedro les daría.
Los verdaderos testigos de Dios practican sus enseñanzas, y el testimonio
cuenta mucho. Todo el que quiera ser bautizado en el nombre de Jesús para
el perdón de pecador debe primero CREER en Jesús, como lo indica el
apóstol Pedro.
Como he venido enseñándoles queridos amigo aquí la palabra clave es
CREER. Y entendemos que un niño no puede creer, el apóstol Pablo cuando
llego a Éfeso, se encontró un gran problema con unos creyentes que habían
sido mal bautizados, como suele suceder hoy en día. Él les dijo: ¿Recibisteis
el Espíritu Santo cuando creísteis? Y ellos le dijeron: Ni siquiera hemos oído si
hay Espíritu Santo. Entonces dijo: ¿En qué, pues, fuisteis bautizados? Ellos
dijeron: En el bautismo de Juan. Dijo Pablo: Juan bautizó con bautismo de
arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que vendría
después de él, esto es, en Jesús el Cristo. Cuando oyeron esto, fueron
bautizados en el nombre del Señor Jesús. Y habiéndoles impuesto Pablo las
manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y
profetizaban. Eran por todos unos doce hombres. (Hechos 19:2-7).
Cuando oyeron esta buena noticia ellos tomaron la decisión de bautizarse en
el nombre de Jesús. Ellos se rebautizaron, lo mismo que paso con usted
querido amigo cuando lo bautizaron siendo un niño, un niño inocente, sin tener
poder de decisión, un niño que fue llevado ante un altar para ser bautizado de
una forma incorrecta y anti bíblica. Un niño no tiene discernimiento ni puede
arrepentirse. Y mucho menos puede expresar o decidir qué doctrina quiere
elegir, Jesús dijo: El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no
creyere, será condenado. (Marcos 16:16).
Les invito a que deje de estar creyendo esos mandamientos de hombres que
no se sujetan a las enseñanzas de las sagradas escrituras, Jesús en su
tiempo se encontró con que los fariseos enseñaban y vivían por
mandamientos de hombres, tradiciones de los mayores, al punto que les eran
preeminentes sobre los mandamientos de Dios. Como pasa hoy en día, donde
muchas personas son engañadas siguiendo las tradiciones de una iglesia que
esta fuera de todo contexto bíblico, practicando el bautismo de niños:

• “Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne
por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová. Será como la retama en el
desierto, y no verá cuando viene el bien, sino que morará en los sequedales
en el desierto, en tierra despoblada y deshabitada. Bendito el varón que confía
en Jehová, y cuya confianza es Jehová.” (Jeremías 17:5-7).

• “Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo: Este pueblo de


labios me honra; mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran,
Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres.” (Mateo 7-9).

Jesús dice que los que practican esta doctrina de hombres son unos hipócritas
y los que le siguen en vano no honran a Dios, siguiendo sus enseñanzas y
doctrinas de demonios, veamos: “Pero el Espíritu dice claramente que en los
postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus
engañadores y a doctrinas de demonios; por la hipocresía de mentirosos que,
teniendo cauterizada la conciencia, prohibirán casarse, y mandarán
abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias
participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad. ” (1
Timoteo 4:1-3). Estos señores además de no casarse también bautizan niños
y son muchos los que le siguen estas enseñanzas que la biblia dice que son
de demonios. De nada les han servido las advertencias que nos hizo el apóstol
Pablo que dijo: “Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas
sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del
mundo, y no según Cristo.” (Colosenses 2:8).

Querido amigo recuerde que lo más importante es oír el mensaje de la palabra


de Dios y entenderla. Yo creí en Cristo Jesús, y fui bautizado de acuerdo con
los requisitos del evangelio. Qué bueno que usted pueda decir aquí hay agua
que impide que yo sea bautizado, esta es una decisión de una persona que
sabe lo que es bueno, que sabe lo que le conviene, veamos: “Entonces Felipe,
abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le anunció el evangelio
de Jesús. Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua, y dijo el eunuco: Aquí
hay agua; ¿qué impide que yo sea bautizado? Felipe dijo: Si crees de todo
corazón, bien puedes. Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de
Dios. Y mandó parar el carro; y descendieron ambos al agua, Felipe y el
eunuco, y le bautizó. Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató
a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino.” (Hechos 8:35-
39).

Cuando en nuestras vidas se practica el verdadero bautismo en el nombre de


Jesús, podemos estar seguros de que nuestro gozo está completo, no nos
hace falta nada, porque en Jesús estamos completos: “y vosotros estáis
completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad.” (Colosenses
2:10).
Tengamos la seguridad de que estamos en el camino gozoso, en el camino de
la verdad y la vida eterna.

¿Sera que usted tiene esta seguridad?

Dios les siga bendiciendo

Fredy Delgado
Teólogo

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