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FALLAS EXTENSIONALES SEGUN EL RUMBO

La clasificación de perfil de los sistemas de fallas extensionales se complementa con


una visión a lo largo de su rumbo. Se distinguen los siguientes rasgos: segmentación,
zonas de transferencia y rampas de relevo.
Segmentación de fallas normales
En su etapa inicial de evolución, las fallas presentan una configuración segmentada.
Es decir ellas se componen de segmentos separados por espacios de roca no
afectados por el fallamiento y dentro de los cuales no existe actividad sísmica. Los
segmentos pueden resolverse en una sola falla en profundidad. Cuando la falla
madura, los segmentos se unen en superficie.
Zonas de transferencia
Son zonas a lo largo de las cuales se produce la transferencia del desplazamiento
desde un sistema de fallas a otro sistema de fallas (figura 3.13a). Por ejemplo, una
falla transcurrente oblicua, denominada falla de transferencia, puede conectar partes
de un mismo sistema de fallas normales, con desplazamientos en el mismo sentido, en
el borde de un graben (figura 3.13b).

Figura 3.13: Fallas de transferencia. (a) Falla con vector-desplazamiento oblicuo (1)
que transfiere los movimientos de dos sistemas de fallas normales (2) y (3). (b) Fallas
de transferencia T conectando fallas normales N en el borde de un graben.
Notar en este último caso, el vector rechazo oblicuo de la falla de transferencia.
También se distinguen zonas de transferencia ubicadas entre fallas normales con
manteos opuestos, pero que comparten una misma línea de rumbo (figura 3.14).

Figura 3.14: Falla de transferencia transcurrente conectando fallas normales lístricas


con distinto sentido de manteo. (1) Corteza frágil. (2) Nivel de corteza dúctil.

En este caso, la transferencia se realiza a lo largo de una falla de rumbo que separa
dos geometrías lístricas con sentidos opuestos. Finalmente, la transferencia puede
realizarse según una zona de ramificación de fallas normales conjugadas que nacen
respectivamente de dos fallas maestras de mayor dimensión y que se unen en
profundidad (figura 3.15).

Figura 3.15: Transferencia entre dos juegos de fallas con sentido de manteo opuesto.
(a) Mapa. (b) Perfil estructural AA’.
Rampas de relevo
Ocurren en la zona terminal de dos fallas de rumbo paralelo. En superficie, el
desplazamiento en cada una de las fallas decrece hacia un punto en que se hace igual
a cero. Sin embargo, en profundidad, las dos fallas se resuelven en una sola falla
lístrica. Por este motivo, la sola presencia de una rampa de relevo en superficie es
indicativa de una falla lístrica en profundidad (figura 3.16).

Figura 3.16: Rampas de relevo. (a) Rampa de relevo entre dos fallas en escalón de
igual rumbo, (1) Punto extremo de cada una de las fallas. (b) Rampa de relevo con
una falla secundaria adelante. (c) Rampa de relevo con una falla atrás.

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