El formalismo ruso

El formalismo Ruso es considerado el movimiento que comienza o da inicio a la teoría literaria.

Reaccionando a la crítica literaria de la época y a los propios escritores simbolistas.
Tres escuelas o instituciones son las que intervienen en el: la OPOJAZ (Sociedad para el estudio del
lenguje poético), El círculo Lingüístico de Moscú y el Instituto Nacional de Arte de San Petesburgo.
Entre los principales exponentes se encuentran Víctor Shklovsky, Yury Tinianov, Boris Eikhenbam,
Roman Jakobson, entre otros más.
Del formalismo puede decirse que tuvo tres etapas: 1916-1920 inicio, enfrentamiento y polémica,
1921-1926 desarrollo, 1926 -1930 crisis y desbandada. Los Formalistas estaban interesados en
desarrollar modelos e hipótesis que permitieran explicar cómo los mecanismos literarios producen
efectos estéticos. Las vanguardias están estrechamente relacionadas con esta teoría, sobre todo el
futurismo, al considerar que existen objetos estéticos que son creados por artistas, quienes son
"obreros" de dicho artefactos.
Consideraban a la literatura, en un primer momento, como " la suma total de todos los recursos
estilísticos empleados en ella". Algunos de los conceptos que desarrollaron fueron lteraturiedad: qué
hace a un texto un objeto estético. De ahí devino el término de "extrañamiento" y "desautomatización".
El extrañamiento, producido por una dificultad en el lenguaje literario, desautomarizaba el propio
lenguaje y al lector.
Otro de los aportes, en una etapa ya revisionista dentro del propio formalismo, Tynyanov desarrollaría
el concepto de la "dominante". Respecto a esto, la concepción de la obra cambia, pasa de ser un
conjunto arbitrario de recursos para verse como un sistema de elementos relacionados entre sí. Con ello,
la dominante vendría a ser el elemento desde el cual los demás elementos se subordinan. Cada uno de
ellos recibirá el nombre de "función".
En relación al concepto de función, aparecerá el de "la evolución literaria", ya que la dominante cambia
respecto a otros sistemas literarios que van modificando dicha jerarquización que responden muchas
veces a razones extra literarias.
Ya en esta etapa el formalismo había pasado a considerar lo extralierario como un factor en el análisis
de los textos, ya que en un inicio el fondo era considerado sólo como un elemento que hacía posible la
forma, el cual era el interés único. En su etapa final, el formalismo recibió grandes críticas por su
empeño inmanentista de la obra y en una Rusia cada vez más socialista los llevó a su desaparición. Sin
embargo, hoy en día su trabajo es considerado fundamental para la creación e inicio de muchos de los
conceptos claves de la teoría literaria.

El estructuralismo Checo

Cuando el formalismo fue acosado en Rusia, continuó sus estudios en el Círculo Lingüístico de Praga
en 1927, que devendría en el Estructuralismo Checo. Ya incluso dentro del del Formalismo se había
replanteado su propio enfoque. Tynyanov y Jakobson en Problemas de los estudios literarios y
lingüísticos publicado en 1928 rompen el inmanentismo de la obra al considerar esencial un estudio
sincrónico y diacrónico.
La figura principal del estructuralismo checo es Jan Mukarowsky, aunque Jakobson será la figura que
"esparcirá" en occidente los conceptos claves del estructuralismo. La idea de la obra literaria como una
estructura conformada por determinadas funciones serán sus principales aportaciones. Se verá a la obra
como un sistema que está, además, en relación a otros sistemas extra literarios.
Otra de las figuras claves sera Felix Vodicka, quien desarrollará su teoría sobre la historia literaria. Para
el análisis de las propias obras es necesario también estudiar la historia literaria, esto por medio de la
reconstrucción de la norma literaria, reconstrucción de las obras por periodos, estudios del alcance y
concreción de la obras, entre otras.
El estructuralismo checo, a diferencia de la idea que se tiene del Estructuralismo literario, veía a la obra
literaria como un estructura orgánica, que se modificaba y estaba en constante cambio, por lo que era
necesario conocer cuáles eran los motivos para que esto ocurriera, por ello, un estudio inmanentista de
la obra no podía explicarlo. Así consideraban vital un análisis de las relaciones de los otros sistemas no
literarios e históricos. Sin embargo, al igual que el formalismo ruso, el estructuralismo checo se
consideró fuera de las exigencias de una marxismo cada vez más imperante y terminó por desaparecer.