TEMA: Arte y percepción visual / Capítulo 1 El presente texto habla acerca de la percepción visual que tenemos, en general, los seres humanos y las diversas formas en las que podemos ver y entender un objeto, a los cuales, los determinamos con un tamaño y una ubicación. “Ver algo significa asignarle un lugar dentro del todo: una ubicación en el espacio, una puntuación en la escala de tamaño, de luminosidad y de distancia” (Arnheim, 1954). Si vemos una pintura con más de un objeto, a estos no los vemos por separado, sino que los vemos como parte de un todo y de inmediato percibimos sus cualidades. Además, “la experiencia visual es dinámica” (Arnheim, 1954), los animales y las personas percibimos: objetos, colores, formas, movimientos y tamaños, pero también: tensiones dirigidas, éstas tienen magnitud y dirección; las podemos entender como: fuerzas psicológicas, lo que a la vez es una estructura inducida; “las inducciones perceptuales son a veces interpolaciones basadas en conocimientos previamente adquiridos (…) Para toda relación espacial entre objetos hay una distancia <correcta>, que el ojo establece intuitivamente” (Arnheim, 1954). El efecto de atracción lo podemos ver en un “esqueleto estructural” de cualquier objeto, [es un esquema estimulador que “ayuda a determinar el papel de cada elemento pictórico dentro del sistema de equilibrio de la totalidad, sirve de marco de referencia” (Arnheim, 1954)]; aquí, la fuerza y distancia relativas determinan el efecto de la configuración total; si se predomina influencia desde cualquier dirección de este esqueleto, resulta un tirón en esa dirección; “en las situaciones ambiguas el esquema visual deja de determinar lo que se ve, y entran en juego factores subjetivos del observador” (Arnheim, 1954). Las fuerzas perceptuales son fuerza psicológicas y físicas que existen en la experiencia de cada persona al mirar, por ejemplo, una pintura con más de un objeto, es decir, “perceptual y artísticamente son reales” (Arnheim, 1954). El equilibrio (psicológico y físico) también influye al ver una pintura, el sentido intuitivo de equilibrio del ojo se da, por decir, intuitivamente. El equilibrio es “el estado de distribución en el que toda acción se ha detenido” (Arnheim, 1954), esto se consigue cuando las fuerzas de un sistema se compensan unas a otras, lo que depende de las propiedades de las fuerzas: la ubicación de su punto de aplicación, su intensidad y su dirección. El peso es la intensidad de la fuerza gravitatoria que tira de los objetos hacia abajo y, a veces, a lo largo: en el peso puede influir: ubicación, profundidad espacial, tamaño, color, interés intrínseco, aislamiento, forma y conocimiento: el peso puede crear dirección y el habla también puede crear peso visual en el lugar de origen. El peso se distribuye de manera desigual dentro de los esquemas visuales, dando a conocer “movimientos” de arriba, abajo, derecha e izquierda. En conclusión, cuando miramos una representación con más de un objeto, existen otros elementos detrás, los cuales, los podemos captar en nuestro esquema visual. “Un esquema visual se compone de algo más que las formas restringidas por la retina (…) ver es la percepción de una acción” (Arnheim, 1954). BIBLIOGRAFÍA Arnheim, R. (1954). Arte y percepción visual. California: University of California Press.