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Contenido

1. Rinoplastia ................................................................................................................................... 3
1.1 Tipos de rinoplastia ............................................................................................................. 4
2 Técnicas ....................................................................................................................................... 4
3 Consideraciones anatómicas ....................................................................................................... 5
4 Consideraciones estéticas ........................................................................................................... 6
4.1 Vista de frente ..................................................................................................................... 6
4.1.1 Vista de perfil .............................................................................................................. 6
4.1.2 Vista basal.................................................................................................................... 7
4.1.3 Evaluación prequirúrgica ............................................................................................. 7
4.1.4 Anestesia ..................................................................................................................... 7
5 Abordaje e incisiones .................................................................................................................. 7
5.1 Modificación del dorso nasal .............................................................................................. 8
5.1.1 Modificaciones de la punta nasal ................................................................................ 8
6 Procedimientos concomitantes .................................................................................................. 9
6.1 Vendajes y tapones ........................................................................................................... 10
7 Complicaciones de una rinoplastia ........................................................................................... 10
7.1 Postoperatorio .................................................................................................................. 10
8 Nuevas tecnologías: rinoplastia ultrasónica.............................................................................. 12
8.1 Alternativas ....................................................................................................................... 12
cirujano plástico, 3 otorrinolaringólogo, 3
Enderezamiento de la nariz, 5 problemas estéticos, 3
mínima cicatriz, 3 rinoplastía revisional, 4
1. Rinoplastia
La rinoplastia (del griego ρινός rhinos, nariz, πλασσειν plassein, formar) es una intervención
quirúrgica en la que se resuelven principalmente los problemas estéticos de la nariz tales como la
giba ósea, el hueso que sobresale del dorso de la nariz a semejanza de una joroba, las desviaciones
hacia la derecha o izquierda de la totalidad de la nariz y las malformaciones congénitas como las
secuelas del labio y paladar hendido, como asimismo otros factores genéticos o adquiridos por
traumatismos y enfermedades. Cuando se busca una solución a la nariz obstruida por tensión
excesiva o desviación del septum o tabique nasal exclusivamente, nos estamos refiriendo a
la septoplastia. Existen otras estructuras dentro de la nariz, cornetes y válvulas nasales o la propia
mucosa inflamada entre otras, cuyas alteraciones congénitas o adquiridas pueden contribuir o ser
la causa de la obstrucción. A pesar de que este último es un procedimiento diferente, ambas
operaciones, rinoplastia y septoplastia pueden realizarse en el mismo acto operatorio en la
mayoría de los casos. La cirugía que incluye ambos procedimientos se
denomina septorrinoplastia o rinoplastia funcional.

Actualmente la rinoplastia busca devolver la armonía facial del paciente adaptando su nariz a la
cara. Es decir que un resultado óptimo, generalmente, hace que la nariz siga los rasgos
estructurales de la cara. Uno de los objetivos principales del cirujano es producir narices que
luzcan como "no operadas".

Tradicionalmente, quien realizaba la septoplastia era el otorrinolaringólogo y resolvía los


problemas funcionales, mientras que la rinoplastia estética era realizada por el cirujano plástico o
el cirujano maxilofacial. Durante la segunda mitad del xx, se comenzó a desarrollar el concepto de
una cirugía integral de la nariz que atendiera tanto los problemas funcionales, reconstructivos y
estéticos. En la actualidad, la rinología parte de la otorrinolaringología, es la especialidad médica
que contempla la nariz y sus anexos desde todos los puntos de vista, mientras que la cirugía
plástica atiende solo el aspecto estético y reconstructivo, requiriendo la participación de otros
especialistas para resolver el mayor número de problemas nasales en una sola intervención
quirúrgica.

Desde la década de 1980, las técnicas han evolucionado mucho. La rinoplastia clásica o cerrada
sigue siendo un procedimiento frecuente. Por otro parte, la rinoplastia abierta permite una
exposición y visualización completa del esqueleto nasal. Como inconvenientes, deja una mínima
cicatriz en la columela nasal y tiene un mayor edema postoperatorio. Esta se reserva para algunos
casos en los que ya se ha intervenido la nariz previamente o en situaciones que requieren de una
exposición amplia del esqueleto nasal. Algunos cirujanos prefieren esta técnica como primera
opción. La elección de la técnica operatoria quedará sujeta a la experiencia del cirujano.
La rinoplastía secundaria es aquella que se realiza en pacientes que han tenido cirugía de nariz
previa y deben someterse a una nueva intervención para resolver problemas que no se han
resuelto en la primera cirugía, o complicaciones de la misma. También reciben el nombre de
rinoplastía revisional.

Índice

1.1 Tipos de rinoplastia


Existen dos tipos de procedimientos para realizar una rinoplastia:

Rinoplastia cerrada: Suele ser la técnica más utilizada por los cirujanos y ofrece una gran ventaja:
no existe cicatriz visible. Se accede a los cartílagos, tabique o la zona sobre la que se deba hacer
algún tipo de acción mediante las fosas nasales, de esta forma la intervención se salda sin
incisiones exteriores, y resulta mucho más cómodo a largo plazo para el paciente, el hecho de no
verse con ninguna marca de la intervención. El cirujano tiene acceso a la mayoría de zonas
problemáticas, de este modo, puede moldear la sección hasta lograr que la nariz tenga la forma
deseada.

Rinoplastia abierta: Es una intervención más laboriosa que la cerrada, y se basa en que el cirujano
realiza una incisión en la zona media de la nariz, con el fin de dejar los huesos y cartílagos, más
accesibles. Por regla general se recomienda para casos de pacientes más complicados, o segundas
operaciones.

2 Técnicas

Ilustración 1 TECNICAS RINOPLASTIA


Los cirujanos emplean diversas técnicas para poder entregar el resultado esperado. Estas son:

Corrección de la raíz: la raíz es la parte superior de la nariz. Junto con el cartílago subyacente,
pueden ser grandes y ocasionar un bulto o tener poca profundidad y causar una depresión. El
cirujano puede rebajar cuidadosamente para eliminar las imperfecciones o agregar volumen
empleando el mismo cartílago de la nariz del paciente, dando como resultado una nariz mucho
más recta.

Enderezamiento de la nariz: cuando la nariz está ligeramente torcida o sesgada, el cirujano puede
solucionar la situación retirando un poco de hueso o cartílago. Suele usarse una férula para
mantener la nariz con el menor movimiento posible mientras cicatriza.

Reducción y rotación de punta: la rotación se refiere a la curva hacia arriba o abajo de la punta de
la nariz. En el caso de que esta carezca de definición o sea muy fina, puede deberse a una falta de
rotación adecuada. El cirujano reajustará la punta de la nariz mediante el uso de cartílago,
prestando especial atención a la base.

3 Consideraciones anatómicas
La anatomía nasal es bastante compleja. El paciente identifica la nariz simplemente como la
pirámide del centro de la cara, la parte visible. Sin embargo, más allá de lo meramente evidente, la
anatomía de la nariz incluye una cavidad tan profunda y amplia como la boca con interconexiones
con muchos otros aparatos y sistemas. No obstante, para fines prácticos, la nariz externa se puede
considerar como una estructura tridimensional de forma piramidal, constituida esencialmente por
un esqueleto óseo y otro cartilaginoso.

El esqueleto óseo o bóveda ósea está formado fundamentalmente por los huesos propios de la
nariz en la parte superior, los cuales se encuentran articulados al hueso frontal superior, hueso
nasal, e inferiormente a las apófisis ascendentes del maxilar superior. El esqueleto cartilaginoso
está formado por los cartílagos laterales nasales, dos inferiores (también conocidos como
cartílagos alares) y dos superiores. Otra estructura fundamental en el mantenimiento de la forma
y función nasal es el septum o tabique nasal, el cual está formado por una parte ósea posterior y
superior (formada por los huesos vómer y etmoides) y otra parte cartilaginosa anterior e inferior.
Con base en los anteriores conceptos se puede dividir la pirámide nasal en tres tercios para fines
estéticos y en cinco zonas desde el punto de vista funcional, más amplio.

Con respecto a la edad, no hay un límite, no obstante se lo que recomiendan los cirujanos, es
realizar pruebas médicas si el paciente tiene entre 15 y 16 años, debido a que es la edad promedio
en que se desarrolla el crecimiento del rostro.1

4 Consideraciones estéticas
Quizás fue Leonardo Da Vinci uno de los anatomistas más juiciosos y pioneros en el estudio de la
armonía facial y nasal, puesto que sus preceptos casi permanecen inalterados hasta el día de hoy.
Los conceptos de armonía facial nos ayudan fácilmente a identificar cuáles deben ser las
características y dimensiones de una nariz estética y armónicamente aceptables para un rostro en
particular. Para el análisis de la nariz consideramos fundamentalmente sus tres vistas o
proyecciones básicas: de frente, de perfil, y base nasal.

4.1 Vista de frente


Inicialmente se debe considerar el rostro como un todo que posee dos mitades aproximadamente
iguales; la línea que divide el rostro en dos mitades debe pasar por la mitad de la raíz nasal, seguir
todo el dorso nasal y dividir la punta nasal justo en dos partes iguales; esta primera consideración
es útil a la hora de valorar desviaciones de la pirámide nasal. Igualmente con esta vista puede
determinarse el ancho nasal ideal, el cual debe ser exactamente igual a la distancia que hay entre
los ángulos oculares o puntos lacrimales más internos (distancia interocular). Esta última medida
debe coincidir a su vez con el tamaño de los ojos.

4.1.1 Vista de perfil


Vista de perfil de los resultados de una rinoplastia

Esta vista permite esencialmente valorar tres aspectos: el tamaño de la nariz, la forma del dorso y
la rotación y proyección de la punta nasal. El tamaño ideal de la nariz para algunos anatomistas
debe ser igual al tamaño de la longitud de la oreja; otra medida útil es dividir la cara es sus tres
tercios (aproximadamente iguales): un tercio superior que va desde la línea de inserción del
cabello hasta el punto más prominente de la unión naso-frontal (glabela), un tercio medio desde
la glabela hasta el punto subnasal (donde nace o emerge la columna o columela nasal) y un tercio
inferior desde el punto subnasal hasta el punto más inferior del mentón (llamado mentión). La
forma del dorso nasal puede evaluarse trazando una línea desde la raíz nasal o radix (punto más
deprimido de la unión naso-frontal hasta la punta nasal. Esta medición puede identificar
anormalidades del dorso como gibas o jorobas o dorsos muy bajos. La rotación nasal hace
referencia a la posición de la punta nasal con respecto al dorso nasal y puede evaluarse
esencialmente con el ángulo naso-labial el cual en hombres debe ser entre 90º a 95º y en las
mujeres entre 100º a 110º. La proyección nasal se refiere a qué tanto sobresale o se proyecta la
nariz de la cara. La medida ideal de la proyección nasal a nivel de la punta corresponde a 0.67
veces la longitud nasal.
4.1.2 Vista basal
La vista basal permite evaluar la forma de la punta nasal, la simetría de las narinas u orificios
nasales. Idealmente la proyección de las líneas de la base nasal debe formar un triángulo
equilátero, en donde 1/3 de la longitud de la base nasal corresponde al lóbulo nasal de la punta y
los 2/3 restantes a la longitud de la columela.

4.1.3 Evaluación prequirúrgica


En una o más consultas, el cirujano escuchará los deseos y expectativas del paciente con respecto
a su nariz. Investigará la patología naso-sinusal o de otro tipo mediante el interrogatorio, la
exploración física y la tomografía de nariz y senos paranasales, indispensable en la mayoría de los
casos. Hará un análisis fotográfico y propondrá al paciente un plan quirúrgico, sin generar falsas
expectativas. De igual forma, el cirujano referirá el paciente hacia el anestesiólogo para su
correspondiente valoración. Es indispensable la valoración cuidadosa del paciente no solo desde el
punto de vista estético, ya que lo ideal es que en un mismo tiempo quirúrgico se resuelvan tanto
el aspecto estético como el funcional. Esto evitará futuras reintervenciones. El cirujano plástico
podrá recurrir a la experiencia del otorrinolaringólogo y viceversa o a la de algún otro especialista
afín. Es también en esta fase, donde se acuerdan los honorarios médicos y los demás gastos
generados por la cirugía (derechos de sala de cirugía, honorarios del anestesiólogo, etcétera).

El día de la cirugía, el paciente deberá presentarse con un ayuno de al menos ocho horas, en ropa
cómoda sin joyas ni maquillaje y deberá evitar el consumo de medicamentos o sustancias que
puedan alterar la cicatrización o generar un sangrado mayor de lo habitual (analgésicos, aspirina,
ging seng, ginkgo biloba, vitamina E, entre otros).

4.1.4 Anestesia
Puede ser anestesia local para algunos procedimientos menores, o general.

5 Abordaje e incisiones
Existen básicamente tres tipos de abordaje en rinoplastia: un abordaje abierto descrito por Rethy,
que implica una cicatriz casi imperceptible en la mayoría de los casos a nivel de la base de la
columela, otro abordaje cerrado descrito por Joseph en el cual todas las incisiones son
endonasales y no presenta cicatrices externas. Existen además abordajes atípicos por vía bucal
descrito por Calson, Bonnano y Convers, que elevan las estructuras cartilaginosas para
reconstrucciones óseas del tercio medio de la cara y Verbauvede, que realiza la disección completa
de las estructuras nasales que se utilizan para reconstrucciones nasales complejas en la cual
pueden visualizarse todas las estructuras nasales en su conjunto. Hoy por hoy la elección de los
abordajes se hace de acuerdo a la preferencia del cirujano, y según el caso.

Las incisiones extramucosas son las que otorgan el mayor beneficio funcional y previene de las
severas complicaciones respiratorias que pueden ocurrir tras la intervención, por daño de la
válvula interna. La disección debe ser preferentemente en el plano del pericondrio para prevenir el
edema postoperatorio.
Cuando la piel es delgada, se debe tener extremo cuidado en no dejar espículas de cartílago
haciendo relieve, que luego serán visibles en la nariz.

5.1 Modificación del dorso nasal


De acuerdo al análisis hecho por el cirujano previo a la cirugía, el dorso nasal requerirá aumento,
disminución o alineación. Para su aumento es común el uso de injertos cartilaginosos tomados
del septum nasal o, en ausencia de este, del cartílago de la oreja o de una costilla del propio
paciente. Estos injertos se introducen a través de incisiones endonasales o vía externa según el
tipo de abordaje y se ubican sobre el dorso para aumentar su volumen. Este tipo de procedimiento
es practicado principalmente a pacientes con deformidades postraumáticas o quienes han sido
sometidos a una rinoplastia previa con recesión excesiva de dorso. La disminución del dorso nasal
es quizás el procedimiento más común: corresponde a la recesión de gibas o jorobas nasales que
según su tamaño y conformación (cartilaginosas, óseas u osteocartilaginosas) se retiran por medio
de bisturí, cincel o lima. La alineación del dorso nasal se realiza a través de fracturas dirigidas
(osteotomías) en la bóveda ósea, que tienen por objeto reacomodar en la línea media la pirámide
nasal.

Ilustración 2DIFERENCIA DE NARIZ OPERADA

5.1.1 Modificaciones de la punta nasal


Este paso constituye el más crítico y difícil de toda la cirugía y por ende es el que mayor
experiencia y sensibilidad artística requiere por parte del cirujano. Existe una gran cantidad de
procedimientos para modificar la forma, la rotación y la proyección de la punta nasal. La aplicación
de uno u otro dependerá del análisis previo, el plan quirúrgico y los hallazgos intraoperatorios. Sea
cual fuere el método utilizado, el objetivo es dejar una punta nasal armoniosa con el resto de la
nariz y el rostro del paciente y con una apariencia natural, que no luzca como operada.
Ilustración 3 MODIFICACIONES

Entre las nuevas técnicas implantadas a nivel mundial destaca la detallada por el Dr. Rodríguez-
Camps, en la Revista Cirugía Plástica Ibero-latinoamericana, para el tratamiento de la punta nasal
difícil ¿qué ventajas introduce esta rinoplastia? ¿Qué resultados mejora? El tratamiento de la
punta nasal es seguramente lo más complejo de la rinoplastia. Y si la punta es especialmente
difícil, la rinoplastia se complica más. Esta técnica está basada en el refinamiento y la belleza de la
punta nasal para casos extremadamente complejos de puntas rotas, asimétricas, distorsionadas,
anchas, globulosas y achatadas. Consiste en la eliminación de toda la estructura cartilaginosa del
vértice malformada o destruida, siendo posteriormente sustituida por tejido blando, llamado
fascia temporal. De este modo, se consigue un vértice nasal suave, tanto a la vista como al tacto,
sin picos ni aristas antiestéticos.

6 Procedimientos concomitantes
Es frecuente que la rinoplastia se acompañe de otro u otros procedimientos que busquen mejorar
la función nasal. Dentro de ellos se cuenta la modificación de la forma del septum nasal con el
ánimo de corregir desviaciones septales que causen obstrucción o deformidad nasal. Conviene,
por lo tanto, hacer un correcta valoración de la función nasal antes de programar la cirugía —
rinoplastia, septorrinoplastia con o sin intervención de otras zonas intranasales—, ya que de otro
modo, si solo se realizan maniobras parciales para mejorar la función nasal, frecuentemente el
paciente se verá en la necesidad de una segunda intervención por el otorrinolaringólogo.

Otro procedimiento que puede acompañar una rinoplastia o una septorrinoplastia es


la rinomodelación, la realización de pequeñas modificaciones de la nariz con sustancias
absorbibles y la turbinoplastia, la modificación de la forma y/o tamaño de los cornetes inferiores
cuando estos generan obstrucción nasal. La turbinoplastia o cirugía de los senos paranasales se
puede realizar en el mismo acto operatorio con el ánimo de restablecer la función correcta y la
armonía anatómica de la unidad naso-sinusal en la mayoría de los casos.
6.1 Vendajes y tapones
Una vez finalizada las modificaciones a la nariz y suturadas las incisiones realizadas, se colocan en
las fosas nasales unos u otros tipos de tapones que tienen por objeto mantener la estabilidad de la
pirámide nasal y evitar un sangrado nasal en el postoperatorio. En la actualidad, es posible
conseguir tapones modificados que tienen en conducto en el centro los cuales permiten al
paciente seguir respirando nasalmente a pesar de estar taponados. La férula y el vendaje nasal se
colocan sobre el dorso y la punta nasal y tienen como función mantener y preservar los cambios
realizados en la cirugía mientras inicia la fase de curación postquirúrgica. Su efectividad es relativa,
pero hay consenso positivo en favor de su utilización.

En algunos casos seleccionados, es posible no dejar tapones mediante la sutura de ambos colgajos
mucopericóndricos. Esto se hace habitualmente con una sutura continua de material absorbible.

7 Complicaciones de una rinoplastia


Durante una rinoplastia pueden surgir complicaciones dado que el acceso a la región nasal es
limitado, debido a esto la rinoplastia es una de las cirugías faciales más exigentes. Entre algunas
complicaciones tenemos:

Obstrucción nasal

Sangrado después de la cirugía (puede requerir taponamiento nasal para su control)

Vasos sanguíneos rotos

Infección

Resultado insatisfactorio

7.1 Postoperatorio
El paciente puede ser dado de alta una vez que los efectos residuales de la anestesia hayan
pasado, típicamente 3-6 horas después.
Ilustración 4 POSTOPERATORIO

Durante los primeros días tras la intervención, el paciente debe mantener un reposo relativo, en
posición semisentado, ingiriendo abundantes líquidos (debido a la sequedad oral que produce la
respiración oral) y tomando los analgésicos y demás medicamentos prescritos.

La alimentación puede ser normal según la tolerancia del paciente. El momento de retirar el
taponamiento varía según el modo de hacer de cada cirujano (entre 3 horas y 5 días dependiendo
del tipo de intervención). Conviene reajustar la férula a el vendaje nasal a medida que disminuya
la inflamación y este se afloje (típicamente a los 3 días y a la semana). A partir del momento en el
que se retire el taponamiento es conveniente la aplicación periódica de suero salino fisiológico
para mantener una mejor higiene.

La férula y el vendaje nasal se dejarán por espacio de 1 a 3 semanas, posterior a lo cual la piel de la
nariz deberá protegerse con fotoprotectores y someterse a masajes si se detectan recidivas de una
desviación del dorso nasal.

El dolor se maneja con analgésicos comunes como ibuprofeno, paracetamol o diclofenaco. En


general, no es un postoperatorio doloroso. La principal molestia radica en tener la nariz obstruida
los primeros días.
8 Nuevas tecnologías: rinoplastia ultrasónica
En la rinoplastia tradicional se utilizan herramientas como los osteotomos, escoplos y martillo.
Estas herramientas producen presión al ser usadas, lo que puede conllevar mayor hinchazón,
edemas y moratones durante el postoperatorio.

La rinoplastia ultrasónica es una nueva tecnología basada en un instrumental ultrasónico que


permite remodelar los huesos nasales sin romperlos y de forma menos traumática, ya que no daña
ni los vasos sanguíneos ni el tejido blando que recubren el hueso. De esta manera, se reduce la
hinchazón y los moratones que ocasionan los métodos tradicionales.

8.1 Alternativas
Existen opciones alternativas a una rinoplastia. Estas operaciones no alteran la estructura de la
propia nariz, pero sí modifican su aspecto visual, como la rinomodelación. Se trata de una
operación sin cirugía y, aunque sus efectos no son permanentes, es una buena opción para
aquellos que deseen eliminar los riesgos derivados de una intervención quirúrgica.

Consiste básicamente en utilizar un relleno para solventar los desniveles o malformaciones de la


nariz, haciéndola atractiva a la vista. Cabe decir que es un procedimiento mucho más barato que la
rinoplastia tradicional.

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