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Sanando el cuerpo y alma

Las siete zambullidas de Naaman nos revelan 7 cosas a las que debemos renunciar para ser
sanos en cuerpo y alma.

(Lectura, 2 de Reyes 5: 1- 14) Vs. 14: "El entonces descendió, y se zambulló siete veces en
el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de
un niño, y quedó limpio".

La mayoría de las enfermedades físicas tienen una relación directa con problemas
emocionales, el 90% de las enfermedades son producto de alguna situación emocional que
todavía no has resuelto. Dios quiere sanarte de la enfermedad física y emocional.

Hay muchas emociones dentro de los seres humanos que están sin resolver, recuerdos del
pasado, enojos y broncas acumuladas que han creado situaciones negativas que hacen que
nos sintamos enfermos.

Toda emoción negativa que no es expresada tiende a enfermar a alguno de los órganos de
nuestro cuerpo, las emociones no expresadas afectan nuestras vidas de manera significativa.

Dios quiere sanar tus emociones para también sanar tu cuerpo.

Hay una estadística hecha por científicos en una empresa que dice que de 200 personas que
aparentemente estaban sanas, encontraron que el 43,5% sufría de Trastornos generales,
37,5% Dolores de estómago, 26,5% Estados de ansiedad, 22% faringitis recurrente, 17,5%
mareos, 17,5% insomnio, 15% diarrea, 15% dolor de cabeza, 6% reumatismo. Es evidente
que las presiones laborales son un ejemplo de cómo se ve afectado el cuerpo.

También se ha descubierto que una persona en promedio antes de los 25 años ha tenido 200
enfermedades. Cuando nos preguntamos porque las cosas pasan, porque la enfermedad nos
ataca, nos damos cuenta que es muy probable que en nuestro interior haya cosas sin
resolver.

Las siete zambullidas de Namman, el general sirio.

Naaman era un hombre muy importante, pero él tenía lepra y en ese tiempo la lepra no se
podía tratar, no tenía cura. La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, la piel es el
reflejo de nuestro interior, cuando estamos enfermos muchos de los síntomas se manifiestan
en la piel, por ejemplo: la persona que tiene problemas en el hígado su piel se pone
amarilla, una persona con alergia también se ve en su piel, etc.

Investigaciones nos dicen que la piel se ve afectada también cuando la gente en su niñez no
recibe amor y cariño, abrazos y caricias es decir la piel se ve afectada por la falta de esas
personas que nos tenían que haber amado, abrazado, contenido, entonces aquí descubrimos
que Naaman estaba pasando por esta situación.
Ahora la pregunta que me hice al leer esta historia es ¿por qué siete veces tenía que meterse
en el río, porque no una, dos o tres? Naamán tenía que resolver y sanar siete cosas en su
interior, siete situaciones internas para poder recibir la sanidad en su cuerpo.

Hay siete situaciones que Naaman necesitaba solucionar, situaciones internas que lo
enfermaban, en cada zambullida una de ellas era sanada, quizás estés pasando por lo
mismo, siete situaciones que no te permiten recibir la sanidad completa de parte de Dios, y
hoy quiero hablarte de estas siete zambullidas que tuvo que hacer Naamán para ser sano, y
que tendrás que vencer en tu vida para que la sanidad interna y externa venga a ti.

Zambullida #1 "El orgullo"

Lo primero que dice la Biblia sobre Naamán es que era un varón grande delante de su
señor. Era un hombre orgulloso, las personas que son orgullosas terminan enfermándose, se
sienten superiores a los demás y quieren demostrarlo todo el tiempo, es gente que se afirma
en sus logros, en su propia fuerza para demostrar que son alguien, necesitan mantener una
apariencia que terminan enfermándolos.

Una de las principales cosas que Dios tiene que sanar es el orgullo. Tienes que renunciar al
orgullo. El orgullo te enferma, este hombre hasta el día que conoció a la niña que le sugirio
ir al profeta, siguió enfermo, él se consideraba una persona importante, estaba orgulloso de
estar al lado del Rey, cuando estas en esa actitud le pones una traba al Señor. Quitar el
orgullo de tu vida hará que el poder de Dios pueda actuar en ti y puedas recibir la sanidad
que estas necesitando.

Zambullida #2 "Mala conexión con el dinero"

Cuando Naaman se enteró que alguien lo podía sanar de una manera sobrenatural, llevo
¡340 kilos de plata 60 kilos de oro y 10 mudas de vestido, sin duda era una gran riqueza!.
Tomo ese dinero y se fue a presentar delante del hombre que lo iba a sanar, él pensaba que
podía comprar su sanidad a través del dinero. Pero no funciona de esa manera. Dios no
necesita tu dinero para sanarte, cuando le ofrendas a Dios le ofrendas para que el reino de
Dios se extienda, no para comprar tu sanidad, la sanidad no se compra, el amor de Dios no
se compra. Sino solo los que tienen dinero se sanarían.

El problema de Naaman era la mala conexión con el dinero, como esas personas que creen
que porque tienen dinero son más que los demás. El dinero no sirve solo para comprar
bienes y servicios, al dinero a veces, se puede usar como una mala conexión, las personas
lo utilizan para tener amigos, gente que compra amistades, invitan a cenar y dicen "Ven que
te compro esto, ven que te regalo lo otro". Eso es una mala conexión porque si no fuese por
el dinero estarían solos. El dinero es una bendición de Dios, pero la biblia dice que "raíz de
todos los males es el amor al dinero" lo malo no es tener dinero sino adorar al dinero, en
vez de adorar a Dios que te da el dinero. Lo que Dios quiere hacer es sanar tu conexión con
el dinero. Desde que Jesús vino a la tierra todas las bendiciones que recibimos son por
gracia, antes de conocer a Jesús nosotros merecíamos la enfermedad, porque no habíamos
recibido la gracia de Él. Lo que tu recibes no es por tener mucho o poco dinero sino porque
Dios es bueno y aunque no lo merezcamos él nos lo da igual.

Zambullida #3 "Actitudes de Sabelotodo"

¡El creía que sabía todo! Esas personas que creen que saben más que todos, cuando les
explicas algo, ellos ya lo sabían. Hay que levantarse todos los días con una mentalidad de
aprendiz. Este hombre creía que sabía todo, cuando la niña le dice: "En Israel hay un
profeta" no le dijo que fuera a ver al Rey, sino al p-r-o-f-e-t-a. Pero este hombre en vez de
ir a ver al profeta quiso ir a ver al rey. A veces por creer que sabemos todo, recurrimos a la
gente equivocada. Tenemos que levantarnos pensando y preguntándole a Dios cual es el
paso que tengo que dar, Dios te está mirando y para sanarte quiere que saques la actitud de
"lo sé todo", y la reemplaces por una actitud de aprendiz. Cada dia hay algo nuevo por
aprender.

Zambullida #4: "Demostraciones exageradas de poder"

Cuando Naaman llega a la casa del profeta, este estaba adentro. Llega a la puerta de Eliseo
en un carro de guerra y rodeado de soldados a caballo, intento meterle presión al profeta,
demostrar quién era. Tu no puedes presionar a Dios para que te sane, no puedes
impresionar a Dios con lo que tienes para que te sane.

Cuando este hombre llega con todo su ejército y Eliseo en vez de salir a la puerta y
atenderlo, le manda un empleado diciéndole que tenía que: "irse a bañar". Esto nos enseña
que de ninguna manera podemos intimidar con lo que tenemos a Dios, Dios actúa por
gracia, no por presión. Dios busca corazones humildes y sinceros para poder bendecirlos.
Un Naaman moderno llegaría a la puerta de nuestros templos, en una limusina, con diez
vehículos Mercedes Benz de compañía, alardeando, tratando de impresionar y poniendo
presión. Diciendo, "soy importante, sáname".

Zambullida #5: "El Enojo"

Dice la biblia que Naaman se fue enojado. Estadísticamente la gente que se enoja muy
seguido vive menos tiempo. El que se enoja mucho tiene problemas cardiacos, hepáticos y
gastrointestinales. No hay que enojarse más, hay que tomar con calma los problemas.

El enojo te enferma y también te aparta de tu sanidad.

Hay maneras negativas de enojarse, por ejemplo podes expresar el enojo con la otra
persona: gritando, insultando, algunos hasta llegan al punto de golpear al otro. Hay gente
que expresa su enojo en forma interna, se traga la bronca, en vez de decir todo, se guarda.
Cuando guardas esa bronca se transforma en problemas internos.

Una de las consecuencias más comunes que encontré es que muchas de las personas con
sobrepeso están así porque tienen problemas guardados, enojos escondidos porque
acumulan problemas en vez de resolverlos de la manera adecuada, también hay otras
personas que quieren tapar el enojo con la droga o con el alcohol.

¿Cómo sacamos el enojo?

Una manera seria entregárselo a Dios, de una manera sobrenatural. Al enojo hay que
sacarlo de alguna manera, una manera es encerrarte en tu habitación, no expresarlo en
palabras a una persona, si no hablarlo solo, gritarle a la nada, y sacarte la bronca. Otra
manera es hacer ejercicio físico y gastar esa energía negativa de forma sana. Tienes que
sacar el enojo.

Descargar todo lo que acumulaste durante tanto tiempo, porque es posible que eso sea lo
que haya traído enfermedad a tu vida.

Zambullida #6: "Todo se hace como digo yo"

Naaman decía y trataba de enseñarle a Dios como tenia que hacer el milagro de sanidad. El
creía que todos tenían que hacer las cosas como a él le parecía, es esa gente que es
estructurada y que cree que se hace todo de cierta manera. Personas inflexibles, que tienen
posturas rigidas que no desean cambiar aunque saben que deberían hacerlo. La rigides de
pensamiento se ve reflejada en enfermedades en las articulaciones, artritis y artrosis. Hay
que abrir la mente a lo nuevo de Dios, hoy Dios puede ser que te sane de una manera
sobrenatural y sientas un fuego dentro tuyo, o que te unjan con aceite, hay distintas
maneras, porque Dios es multiforme, y no lo podemos encasillar.

Zambullida #7: "Las Comparaciones"

Naaman decía "¿como me voy a meter y sanar en estos ríos, si en Siria en la ciudad de
Damasco son mejores que los que hay acá?". La última de las cosas que tenia este hombre
era que vivía de las comparaciones, esa gente que mira que ropa te pusiste hoy, que
zapatos, que vehiculo tenés. Las comparaciones te llevan a la envidia y la envidia te
enferma. Dios tiene que sanar ese espíritu de comparación. No compitas, ni te compares
con nadie, solo con tu mismo para superarte cada día.

Estas 7 cosas que tenia este hombre fueron obstáculos que tenia para llegar a la bendición,
pero Dios lo fue sanando en un espacio de horas. Dios lo fue tratando, primero, le puso a
una niña esclava que le dijo lo que tenía que hacer, después fue a ver a un un Rey que lo
saco corriendo, luego le puso a un profeta que no le dio interés, por otro lado lo atendió un
sirviente que le dijo "anda a bañarte". Dios le fue rompiendo todos los esquemas mentales,
porque Dios sabe que si rompemos los esquemas mentales negativos nos vamos a sanar, si
rompemos los obstáculos que están en nuestro interior Dios puede sanarnos. A veces Dios
nos sana rápidamente y a veces en un proceso en el cual nos va rompiendo esquemas hasta
llegar a la sanidad.

Dios quiere sanar esos obstáculos para que llegues a tu sanidad. Hoy es dia de renunciar a
ellos. Lo bueno es que todo esto no lo merecíamos, si no que Dios a través de su
misericordia y por medio de su hijo Jesucristo nos regaló la vida eterna, por gracia, gracia
es un regalo que no merecemos. La biblia también nos enseña que Jesús nos da vida
abundante. En lo físico, en lo espiritual, en lo emocional, en lo material, Dios no solamente
piensa en el "más allá" si no también en el "más acá".

Va a llegar un momento en el que irás al médico y mientras sigas haciendo el tratamiento,


Dios te va a sanar de una manera sobrenatural y cuando vuelvas al médico, él se va a
sorprender y no va a encontrar ninguna enfermedad. No va a haber nada. Pero sigue con el
tratamiento, hasta que llegue el milagro de Dios, y vayas al médico y no pueda explicarte
como de una enfermedad incurable pasaste a ser una persona sana, y en ese momento
podrás decir: ¡Fue mi Dios, mi Dios sanó mi cuerpo, porque primero sanó mi interior!

2 de Reyes 5 – Naamán el leproso


A. Naamán viene a Eliseo.

1. (2 Reyes 5:1) El problema de Naamán.

Naamán, general del ejército del rey de Siria, era varón grande delante de su señor, y
lo tenía en alta estima, porque por medio de él había dado Jehová salvación a Siria.
Era este hombre valeroso en extremo, pero leproso

a. Naamán, general del ejército del rey de Siria, era varón grande delante de su señor,
y lo tenía en alta estima: Naamán era el comandante militar en jefe de un persistente
enemigo, tanto de Israel como de Judá. Tan recientemente como en los días de Acab y
Josafat, Siria había peleado y ganado contra Israel (1 de Reyes 22:35-36). Su posición y
éxito lo hicieron un varón grande delante de su señor, y personalmente eraun hombre
valeroso en extremo.

b. Pero leproso: Naamán tenía mucho a su favor, pero lo que tenía contra él era devastador.
Él era un leproso, lo que significaba que tenía una enfermedad horrible e incurable que
lentamente lo llevaría a la muerte. No importaba qué tan bueno y exitoso fuera todo lo
demás en la vida de Naamán, él era un leproso.

i. “Aquí había un pesado impuesto sobre su grandeza; estaba siendo afectado con un
desorden de lo más posiblemente repugnante y humillante que podía desgraciar a un ser
humano.” (Clarke)

ii. La lepra antigua iniciaba como manchas pequeñas y rojas sobre la piel. Antes de que
pasara mucho tiempo las manchas crecían, y comenzaban a volverse blancas, con una
especia de apariencia brillante o escamosa. Muy pronto las manchas se propagaban por
todo el cuerpo y el cabello comenzaba a caerse – primero de la cabeza, y después incluso de
las cejas. Conforme las cosas empeoraban, las uñas de las manos y pies se aflojaban,
empezaban a podrirse y eventualmente se caían. Luego las uniones de los dedos de las
manos y pies comienzan a romperse y a caerse pedazo por pedazo. Las encías comienzan a
encogerse y ya no pueden sostener a los dientes, así que cada uno de ellos se pierde. La
lepra sigue carcomiendo su rostro hasta que literalmente la nariz, el paladar e incluso los
ojos se pudren – y la víctima se consume hasta la muerte.

2. (2 Reyes 5:2-3) El testimonio de la joven esclava.

Y de Siria habían salido bandas armadas, y habían llevado cautiva de la tierra de


Israel a una muchacha, la cual servía a la mujer de Naamán. Ésta dijo a su señora: Si
rogase mi señor al profeta que está en Samaria, él lo sanaría de su lepra.

a. Habían llevado cautiva de la tierra de Israel a una muchacha: Esta muchacha era una
misionera involuntaria, tomada cautiva de Israel y ahora en Siria. Sin embargo, Dios
permitió la tragedia de su cautividad para lograr un bien más grande.

i. La muchacha ilustra las formas misteriosas en las que Dios actúa. Ella probablemente
fue criada en un hogar temeroso de Dios, sin embargo, fue arrebatada de su familia a una
corta edad. Fue una pérdida irremplazable para sus padres, y por la cual sin duda se
lamentaban cada día. Sin embargo, ella fue usada grandemente de una manera sencilla.

b. Si rogase mi señor al profeta que está en Samaria: Esta muchacha fue un


extraordinario ejemplo de un testigo fiel en sus circunstancias actuales. Se interesó lo
suficiente como para hablar, y tuvo la suficiente fe como para creer que Eliseo sanaría de
su lepra.

i. “¡Y vean los beneficios de una educación religiosa! Si esta pequeña sierva no hubiera
sido instruida en los conocimientos del Dios verdadero, no hubiera sido instrumento de tan
gran salvación.” (Clarke)

3. (2 Reyes 5:4-7) Naamán viene al rey de Israel buscando sanidad.

Entrando Naamán a su señor, le relató diciendo: Así y así ha dicho una muchacha que
es de la tierra de Israel. Y le dijo el rey de Siria: Anda, ve, y yo enviaré cartas al rey
de Israel. Salió, pues, él, llevando consigo diez talentos de plata, y seis mil piezas de
oro, y diez mudas de vestidos. Tomó también cartas para el rey de Israel, que decían
así: Cuando lleguen a ti estas cartas, sabe por ellas que yo envío a ti mi siervo
Naamán, para que lo sanes de su lepra. Luego que el rey de Israel leyó las cartas,
rasgó sus vestidos, y dijo: ¿Soy yo Dios, que mate y dé vida, para que éste envíe a mí a
que sane un hombre de su lepra? Considerad ahora, y ved cómo busca ocasión contra
mí.

a. Anda, ve, y yo enviaré cartas al rey de Israel: Considerando el record de guerras entre
Israel y Siria descritas en los versículos anteriores, parece extraño que el rey de Siria
enviara una carta de recomendación con su General Naamán. Parece que 2 de Reyes no está
precisamente ordenado cronológicamente, por lo que probablemente esto ocurrió durante
un tiempo de baja tensión entre Israel y Siria.
i. Llevando consigo diez talentos de plata...: Dilday estima que Naamán tomó más de
$1.2 millones con él a Israel. Todo esto junto muestra cuán desesperada era la condición de
Naamán, y cuán desesperadamente el rey de Siria quería ayudarlo.

b. Yo envío a ti mi siervo Naamán, para que lo sanes de su lepra: Cuando el rey de


Israel (Joram) leyó la carta, comprensiblemente se disgustó. Primero, estaba evidentemente
fuera de su poder sanar la lepra de Naamán. Segundo, no tenía relación alguna con el
profeta de Dios que realmente tenía el poder para sanar. Él pensó que el rey de Siria
buscaba ocasión contra él.

i. El rey de Siria asumió que el rey de Israel estaba en mucha mejor relación Eliseo que lo
que realmente estaba. Es fácil para otros asumir que tenemos una mejor relación con Dios
que la que realmente tenemos.

4. (2 Reyes 5:8-9) Naamán viene a la casa de Eliseo.

Cuando Eliseo el varón de Dios oyó que el rey de Israel había rasgado sus vestidos,
envió a decir al rey: ¿Por qué has rasgado tus vestidos? Venga ahora a mí, y sabrá
que hay profeta en Israel. Y vino Naamán con sus caballos y con su carro, y se paró a
las puertas de la casa de Eliseo.

a. ¿Por qué has rasgado tus vestidos? Eliseo le dio una gentil reprimenda al rey de Israel.
“Esta es una crisis para ti, porque no tienes relación con el Dios que puede sanar leprosos.
Pero es una crisis innecesaria, porque podrías tener una relación con este Dios.”

b. Venga ahora a mí, y sabrá que hay profeta en Israel: Naamán nunca sabría que había
un profeta en Israel solamente quedándose en el palacio real. El verdadero profeta en Israel
no era bienvenido en el palacio.

B. Naamán es sanado

1. (2 Reyes 5:10-12) La furia de Naamán ante las instrucciones de Elías.

Entonces Eliseo le envió un mensajero, diciendo: Ve y lávate siete veces en el Jordán, y


tu carne se te restaurará, y serás limpio. Y Naamán se fue enojado, diciendo: He aquí
yo decía para mí: Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su
Dios, y alzará su mano y tocará el lugar, y sanará la lepra. Abana y Farfar, ríos de
Damasco, ¿no son mejores que todas las aguas de Israel? Si me lavare en ellos, ¿no
seré también limpio? Y se volvió, y se fue enojado.

a. Eliseo le envió un mensajero: Naamán se tomó la molestia de ir hasta la casa de Eliseo,


pero Eliseo se negó a concederle una audiencia personal. Simplemente le envió un
mensajero. Esto fue humillante para Naamán, quien estaba acostumbrado a ser honrado.
b. Ve y lávate siete veces en el Jordán, y tu carne se te restaurará, y serás limpio: Estas
fueron simples y nada complicadas instrucciones. Sin embargo, la reacción de Naamán
demuestra, que eran instrucciones humildes.

c. Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su Dios, y alzará su


mano y tocará el lugar, y sanará la lepra: Naamán ya lo tenía todo resuelto. En su gran
necesidad, se enfureció con la forma en que Dios obraría, y se ofendió cuando Dios no obró
de la manera en que él esperaba.

d. Y se volvió, y se fue enojado: Debido a sus expectativas de cómo debía obrar fueron
destrozadas, Naamán no quiso nada con Eliseo. Si la respuesta estaba en lavarse en un río,
Naamán sabía que había mejores ríos en su propia tierra.

2. (2 Reyes 5:13) El buen consejo de los siervos de Naamán.

Mas sus criados se le acercaron y le hablaron diciendo: Padre mío, si el profeta te


mandara alguna gran cosa, ¿no la harías? ¿Cuánto más, diciéndote: Lávate, y serás
limpio?

a. Mas sus criados se le acercaron y le hablaron: Gracias a Dios por los fieles
subordinados que les hablan a sus superiores de esta manera. Naamán evidentemente estaba
enojado, sin embargo, fueron lo suficientemente osados como para darle el buen consejo
que necesitaba escuchar.

b. Si el profeta te mandara alguna gran cosa, ¿no la harías? Los siervos de Naamán
usaron un brillante y lógico enfoque. Si Elías le hubiera pedido a Naamán que sacrificara
100 o 1,000 animales al Dios de Israel, Naamán lo hubiera hecho inmediatamente. Sin
embargo, debido a que su petición era fácil y modesta, Naamán primero se negó.

3. (2 Reyes 5:14) Naamán es sanado.

Él entonces descendió, y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra


del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio.

a. Conforme a la palabra del varón de Dios: Naamán hizo exactamente lo que Eliseo le
dijo que hiciera. Por lo tanto, podemos decir que cada zambullida en el Jordán fue un paso
de fe, confiando en la palabra de Dios a través de su profeta.

i. Wiseman sobre la palabra Hebrea antigua traducida como zambulló: “Naamán se ‘lanzó’
en el río Jordán. Esto representó obediencia total a la palabra divina.”

ii. Spurgeon vio a Naamán atacado por dos enemigos: El yo orgulloso, quien internamente
demandaba que Eliseo saliera a verlo, y el Mal Cuestionar, quien cuestionaba por qué debía
lavarse en el Jordán cuando tenía mejores ríos en su tierra. Naamán superó a estos dos
enemigos e hizo lo que Dios le pidió hacer.
b. Y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio: La respuesta de fe de
Naamán fue generosamente recompensada. Dios respondió su fe con un milagro de sanidad
total.

i. “El sencillo método de este milagro, realizado sin el profeta ahí, sí le dio a Dios todo el
crédito. Era evidente que la sanidad vino de Yahvé en vez de algún tipo de encantamiento
mágico que Naamán había anticipado.” (Dilday)

4. (2 Reyes 5:15-16) Naamán ofrece recompensa a Eliseo pero el profeta se niega.

Y volvió al varón de Dios, él y toda su compañía, y se puso delante de él, y dijo: He


aquí ahora conozco que no hay Dios en toda la tierra, sino en Israel. Te ruego que
recibas algún presente de tu siervo. Mas él dijo: Vive Jehová, en cuya presencia estoy,
que no lo aceptaré. Y le instaba que aceptara alguna cosa, pero él no quiso.

a. Y volvió al varón de Dios: Esta fue una buena muestra de gratitud. Naamán fue como el
leproso que de los diez que sanó Jesús fue el único que regresó para agradecerle (Lucas
17:12-19). También era un extranjero, como el leproso agradecido de Lucas 17.

i. Antes, Naamán esperaba que el profeta viniera a él. Ahora él volvió al varón de Dios y
se puso delante de él.

ii. “A menudo es el caso que aquellos que tienen menos de que valorarse son orgullosos y
arrogantes; mientras que los más excelentes de la tierra son los más humildes, sabiendo que
no tienen nada más que lo que han recibido. Naamán, el leproso, era más orgulloso y
autoritario de lo que fue cuando fue limpiado de su lepra.” (Clarke)

b. He aquí ahora conozco que no hay Dios en toda la tierra, sino en Israel: No fue
solamente la sanidad lo que convenció a Naamán de esto. Fue la sanidad conectada con la
palabra del profeta. Juntas, fueron evidencia convincente para Naamán de que el Dios a
quien Eliseo representaba era el verdadero Dios en toda la tierra.

c. Te ruego que recibas algún presente de tu siervo: Podemos decir que Naamán solo
deseaba bien con este detalle. Sintió que era apropiado apoyar el ministerio de este hombre
de Dios a quien Jehová había usado grandemente para traer sanidad. Sin embargo, Eliseo
firmemente insistió en que no recibiría nada de Naamán.

5. (2 Reyes 5:17-19) La nueva fe de Naamán.

Entonces Naamán dijo: Te ruego, pues, ¿de esta tierra no se dará a tu siervo la carga
de un par de mulas? Porque de aquí en adelante tu siervo no sacrificará holocausto ni
ofrecerá sacrificio a otros dioses, sino a Jehová. En esto perdone Jehová a tu siervo:
que cuando mi señor el rey entrare en el templo de Rimón para adorar en él, y se
apoyare sobre mi brazo, si yo también me inclinare en el templo de Rimón; cuando
haga tal, Jehová perdone en esto a tu siervo. Y él le dijo: Ve en paz. Se fue, pues, y
caminó como media legua de tierra.
a. ¿De esta tierra no se dará a tu siervo la carga de un par de mulas?: Como muchos
nuevos creyentes, Naamán era supersticioso en su fe. Mantenía la opinión popular del
mundo antiguo, que deidades particulares tenían poder sobre lugares particulares. Él pensó
que si tomaba un pedazo de Israel con él de regreso a Siria, podría adorar mejor al Dios de
Israel.

i. “La transportación de suelo sagrado era una costumbre extendida. La fe de Naamán aún
no era enseñada; y con su necesidad personal de seguir públicamente los cultos de Estado,
Eliseo puede haber sentido que suelo Israelita disponible podría proveerle a Naamán con
algún recordatorio de su sanidad y su nueva relación con Dios.” (Patterson y Austel)

b. Si yo también me inclinare en el templo de Rimón; cuando haga tal, Jehová perdone


en esto a tu siervo: Como oficial del gobierno de Siria, se esperaba que Naamán
participara en la adoración de los dioses Sirios. Le pidió a Eliseo permiso para dirigir su
corazón a Yahvé incluso cuando se encontrara en el templo de Rimón.

i. “El Hebreo ‘apoyar sobre el brazo’ no implica soporte físico sino que él era la ‘mano
derecha’ del rey (cf. 2 Kings 7:2, 17).” (Wiseman)

c. Ve en paz: Al dar una aprobación general sin decir específicamente “sí” o “no,” parece
que Eliseo dejó el asunto entre Naamán y Dios. Tal vez él confiaba en que Jehová
personalmente convencería a Naamán de esto y le daría la integridad y la fuerza para evitar
la idolatría.

i. Algunos comentadores (Clarke y Trapp entre ellos) creen que Naamán pidió perdón por
su idolatría previa en el templo de Rimón, en vez de pedir permiso para futuras ocasiones.
Al parecer, el Hebreo permitiría esta traducción, aunque no es la forma más natural de
entender el texto.

ii. Sin embargo, ciertamente podemos estar de acuerdo con la aplicación de Trapp: “No se
deje ninguno con el ejemplo de Naamán abogar por un alma derecha en un cuerpo
postrado.”

C. La avaricia de Giezi

1. (2 Reyes 5:20-24) Giezi sigue a Naamán.

Entonces Giezi, criado de Eliseo el varón de Dios, dijo entre sí: He aquí mi señor
estorbó a este sirio Naamán, no tomando de su mano las cosas que había traído. Vive
Jehová, que correré yo tras él y tomaré de él alguna cosa. Y siguió Giezi a Naamán; y
cuando vio Naamán que venía corriendo tras él, se bajó del carro para recibirle, y
dijo: ¿Va todo bien? Y él dijo: Bien. Mi señor me envía a decirte: He aquí vinieron a
mí en esta hora del monte de Efraín dos jóvenes de los hijos de los profetas; te ruego
que les des un talento de plata, y dos vestidos nuevos. Dijo Naamán: Te ruego que
tomes dos talentos. Y le insistió, y ató dos talentos de plata en dos bolsas, y dos
vestidos nuevos, y lo puso todo a cuestas a dos de sus criados para que lo llevasen
delante de él. Y así que llegó a un lugar secreto, él lo tomó de mano de ellos, y lo
guardó en la casa; luego mandó a los hombres que se fuesen.

a. Correré yo tras él y tomaré de él alguna cosa: Cuando Giezi escuchó hablar a Naamán
y Eliseo, quedó impactado de que su amo se negara a tomar algo de un hombre tan rico,
influyente y agradecido. Él consideró que alguien debía beneficiarse de semejante
oportunidad, y tomó la iniciativa de correr tras Naamán y tomar de él alguna cosa.

i. Giezi pensaba que Eliseo merecía una recompensa (mi señor estorbó a este sirio
Naamán). También se convirtió exactamente en lo que Eliseo había evitado, un tomador
(tomaré de él alguna cosa).

b. Te ruego que tomes dos talentos: Giezi probablemente pensó que Dios estaba
bendiciendo su empresa. Después de todo, el pidió un talento de platay Naamán gustoso
le dio dos talentos.

i. El hecho de que lo puso todo a cuestas a dos de sus criados muestra que esto era mucha
plata. “Se requirió de dos siervos para cargar estos dos talentos, pues, de acuerdo con el
cálculo de abajo, cada talento pesaba alrededor de 120 libras.” (Clarke)

c. Lo guardó en la casa: Deliberadamente los escondió de Eliseo. Giezi sabía que había
hecho mal.

2. (2 Reyes 5:25-27) La recompensa de Giezi.

Y él entró, y se puso delante de su señor. Y Eliseo le dijo: ¿De dónde vienes, Giezi? Y
él dijo: Tu siervo no ha ido a ninguna parte. Él entonces le dijo: ¿No estaba también
allí mi corazón, cuando el hombre volvió de su carro a recibirte? ¿Es tiempo de tomar
plata, y de tomar vestidos, olivares, viñas, ovejas, bueyes, siervos y siervas? Por tanto,
la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tu descendencia para siempre. Y salió de
delante de él leproso, blanco como la nieve.

a. No estaba también allí mi corazón: Eliseo supo. No sabemos si esto fue conocimiento
sobrenatural, o simplemente obtenido por observación y conocimiento del carácter de
Giezi. De una u otra forma, Eliseo supo. Todos los intentos de Giezi de cubrir su pecado
fallaron.

b. Es tiempo de tomar plata: Parece que Elías no tenía ninguna ley en contra de recibir
apoyo de los que eran tocados por su ministerio. Sin embargo, era espiritualmente claro
para Eliseo, y debió haberlo sido también para Giezi, que no era apropiado en este tiempo y
circunstancia.

i. Plata... vestidos... olivares... viñas... ovejas, bueyes, siervos y siervas: Evidentemente,


Giezi no trajo todas estas cosas de Naamán a casa con él. Sin embargo, quería todas estas
cosas, y Eliseo expuso su codicioso corazón.
ii. “El mal más fuerte de la acción de Giezi fue que involucró el testimonio Divino que
había nacido al Sirio, Naamán, con la acción de la joven sierva, y del profeta Eliseo. Su
acción había sido totalmente desinteresada, y para la gloria de Dios.” (Morgan)

c. Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tu descendencia para siempre:


Esto fue un juicio severo, pero como un hombre en el ministerio estaba bajo un juicio más
estricto. Cuando se permitió a si mismo codiciar lo que tenía Naamán, pensó sólo en
términos del dinero que Naamán poseía. Dios le permitió mantener las riquezas, pero
también le dio la otra cosa que Naamán tenía – una lepra severa.

i. “Giezi no es el último que ha obtenido dinero de una forma ilegal, y que ha obtenido la
maldición de Dios junto éste.” (Clarke).

ii. “Vemos aquí a un pagano quien por un acto de fe es curado de lepra y a un Israelita que
por un acto de deshonra es maldito con ella.” (Dilday).

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