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FORO 2
Los riesgos normalmente se definen como eventos negativos, como puede ser la pérdida de dinero
en una empresa o una tormenta que generan un gran número de reclamaciones de seguro. Sin
embargo, durante el proceso de análisis de riesgos también se pueden descubrir resultados
potenciales positivos. Mediante la exploración de todo espacio de posibles resultados para una
situación determinada, un buen análisis de riesgo puede identificar peligros y descubrir
oportunidades.
Respecto a los niveles de Declaración de Riesgos indicados por el ANCOLD cabe indicar lo
siguiente:
Únicamente los niveles “Detallado” y “Muy detallado” deberían ser empleados, junto con los
métodos tradicionales de análisis, para determinar si una presa concreta cumple los
estándares de seguridad exigidos.
Por tanto, el análisis numérico y estocástico, permite hacer una cuantificación del riesgo de una
presa determinada, ya que el análisis de riesgos es diferente de una a otra.
Con la matemática financiera se actualizan los costos, considerando los posibles escenarios de
colapso de la presa y al mismo tiempo nos permiten minimizar el riesgo.
En consecuencia los análisis, permite realizar un buen diseño de la presa, optimizar costos de la
presa y en consecuencia mitigar los riesgos de colapso de la presa.
Al realizar el análisis de riesgos en presas y embalses, se deben desarrollar los siguientes puntos:
Por otra parte, los resultados de la estimación de riesgos deben quedar perfectamente
estructurados para facilitar posteriormente la reducción de riesgo y el seguimiento del mismo.
Esencialmente, la Evaluación del riesgo sienta las bases de lo que ha de constituir el riesgo
tolerable, para el que se ha dado una definición asumida mundialmente según lo establecido por la
“Health and Safety Executive” (HSE) del Reino Unido en el año 1999. Esta implica:
Se puede convivir con los riesgos existentes y, al mismo tiempo, asegurar unos
determinados beneficios sociales en contrapartida.
El riesgo se ubica en un rango no entendible como despreciable.
Se necesita revisar cada cierto tiempo, y de manera sistemática, el riesgo.
Se tiene que reducir el riesgo hasta el máximo de nuestras posibilidades teniendo en
cuenta la primera de las premisas (en definitiva, se trata del principio ALARP).