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INDICE
Elementos menores
Zinc
Deficiencias
Toxicidad
Fuentes
2
Boro
Deficiencias
Toxicidad
Fuentes
Cobre
Deficiencias
Toxicidad
Fuentes
Hierro
Deficiencias
Toxicidad
Fuentes
Manganeso
Deficiencias
Toxicidad
Fuentes
Molibdeno
Deficiencias
Toxicidad
Aluminio
Toxicidad
FERTILIZACIÓN
Fertilización Nitrogenada
Fertilización Potásica
Fertilización Fosfórica
Fertilización Magnésica
Fertilización Cálcica
Encalado
Fertilización con Azufre
Fertilización con elementos menores
Eficiencia de la fertilización
Nitrógeno
Fósforo
Potasio
Formas de aplicación
Fertilización manual
Fertilización mecánica
Fertilización líquida
Aérea
Fertirriego
Generalidades
Sistemas de riego aptos para fertirriego
Instalación de un sistema de riego
Fertilizantes para fertirriego y sus características
Dosis y frecuencia de aplicación
Fertilización Foliar
Fertilización al pseudotallo
Fraccionamiento de la fertilización
Tipos de fertilizantes
4
FERTILIZACIÓN
FERTILIZACIÓN QUÍMICA
FERTILIZACIÓN ORGÁNICA
La materia orgánica
Origen de la materia orgánica
Descomposición de la materia orgánica
Humus
Importancia del humus
Clasificación de las sustancias húmicas
Acidos húmicos
Acidos fúlvicos
Huminas
Efectos de los abonos orgánicos sobre el suelo
Físicos
Químicos
Biológicos
Desventajas o limitaciones de los abonos orgánicos
Tipos de abonos orgánicos
Compost
Bokashi
Vermicompost
Gallinaza
Abonos verdes
Metodología para elaborar algunos abonos orgánicos
Compost
Bokashi
Vermicompost
Manejo de los abonos
LIITERATURA CITADA
5
CAPITULO 8
Las plantas son autótrofas, ya que elaboran todas las moléculas que
necesitan para su normal desarrollo; pero para que ese proceso se lleve a cabo se
necesita el aporte de los diferentes componentes químicos que forman la planta,
por parte del suelo, la atmósfera y los correctivos y enmiendas químicas.
CUADRO 8.1.
6- POTASIO 0.92 K+
7- CALCIO 0.23 Ca 2+
8- FOSFORO 0.20 1.7 H2PO4-, HPO42-
9- MAGNESIO 0.18 Mg 2+
10- AZUFRE 0.17 SO4 2-
Fuente:
1/ Latsaw y Miller, (1924)
2/ Brown et al, (1987)
- Forma más asimilable
El carbono proviene del CO2 del aire, que con una concentración promedio
de 0.035% en la atmósfera, es suficiente para cubrir las necesidades de la planta;
el hidrógeno proviene del agua absorbida por la planta del suelo y el oxígeno
proviene única y exclusivamente de la atmósfera, que con una concentración de
20% entra en el suelo por los espacios porosos en un movimiento diferencial de
presión de gases y es absorbido por las raíces, con excepción de algunas plantas
con capacidad de absorber por las hojas, tal es el caso del arroz, pero bajo
ninguna circunstancia en el banano.
CUADRO 8.2.
intercepción de clorofila
S SO4-2 S-H/S-S ± flujo masas (95%) S
intercepción (5,%)
Mn Mn++ Mn ++ ± flujo masas Mn Activador
Quelatos intercepción enzimático
Metabolismo de N
Zn Zn++ Zn ++ ± flujo masas Zn Activador
Quelatos intercepción enzimático
muy importante
Cu Cu++ Cu ++ - flujo masas Cu Componente
CuOH+ Enzimático
de varias proteínas
Cu Cl+
Quelatos
Fe Fe++ Fe ++ - flujo masas Fe2O3 Activador
Fe+++ enzimático en
la síntesis de
Quelatos
clorofila
B H3BO3 - flujo masas B2O3 Interviene en el
H2BO3- transporte
de azúcares.
HBO3-2
Diferenciación y
BO3-3 Desarrollo celular.
Metabolismo de N y
B(OH)4- P en la fotosíntesis
B4O7-2
Energía
z Humedad relativa
Lu (potencial hídrico atmosférico)
H 2O
CO2
R E (calor)
H esp O2
(C i r
H ac CO 2
)+ ió n
2O
Catabolismo
O tos Anabolismo
2 s la s
CO es i op
ín t lor O CO 2 (0.035%)
2 +H
o tos lu z c N H 2
2 O F
O+ O 2
+ N2
+E H8 N H 2O (difusión)
+ N O+
C O 2 CH 2 O 2 (20%)
O)
Metabolismo Transpiración
CO 2 (59ox/ CO 2)
2
H
O2
H (C
(H CH O) s
ale
H 2O
H2 O mi ner
Materia
NH3 O2 costra H 2O
2
N2 orgánica
O2
N-P-K
O2
O 2 (10%) (oxidación) Agua de saturación
N-P-K mayores
Ca -agua capilar (capacidad de campo)
Activa (gradiente potencial hidráulico)
Mg medios H 2O -agua de marchitez permanente
Pasiva (ósmosis)
S
Zn-Mn-Fe-Cu-B-Mo-Cl (micros) CO 2 (1-3%) (reducción)
Absorción Microorganismos
Flujo de masa (gradiente potencial hidráulico) O2
Difusión (gradiente concentración nutrimentos) CO 2
Intercepción (intercepción radical (2%))
n (CH2O)+O2 CO2+H2O+E.
El CO2, el H2O y la energía en forma de calor se pierden en la atmósfera, en
este proceso el intercambio de O2 por CO2 es en volúmenes equivalentes y se
conoce como cociente respiratorio.
Los climas tropicales resultan beneficiosos a las plantas, bajo las siguientes
condiciones:
CUADRO 8.3.
CUADRO 8.4.
16
CUADRO 8.5.
Contenido de Biomasa y Materia Seca de N, P, K, Ca, Mg, S, Fe, Cu, Zn, Mn, y B por
planta presentes en cada Órgano y en la Planta Total en cada Fase del Desarrollo
Fenológico.
N P K Ca Mg S Fe Cu Zn Mn B
ORGANO * FASE BIOMASA MATERIA g (totales) mg (totales)
(Kg) SECA (Kg)
INICIAL 0,17 0,02 0,21 0,02 0,83 0,05 0,04 0,01 24,73 0,18 0,32 1,90 0,21
F-10 0,20 0,02 0,25 0,02 0,75 0,05 0,05 0,02 69,33 0,28 0,25 2,90 0,19
RAICES F-M 0,32 0,02 0,37 0,03 0,90 0,09 0,07 0,03 46,18 0,31 0,50 3,96 0,24
** FLORACION 0,94 0,08 1,13 0,08 3,73 0,35 0,28 0,06 264,04 1,45 1,39 11,22 1,20
COSECHA 0,29 0,08 0,37 0,02 0,86 0,11 0,12 0,02 77,31 0,6 0,51 3,73 0,38
INICIAL 1,43 0,17 2,96 0,36 9,17 0,25 0,39 0,21 74,20 1,87 4,26 12,71 1,59
F-10 3,62 0,27 4,01 0,46 16,04 0,58 0,81 0,34 59,47 2,22 4,83 18,83 2,55
CORMO F-M 5,4 0,41 4,96 0,44 14,60 0,85 1,27 0,35 122,80 3,17 8,52 19,56 2,27
FLORACION 12,90 1,29 15,99 1,14 46,04 4,91 6,67 0,62 453,94 6,73 16,30 170,71 12,16
** COSECHA 17,87 2,66 28,05 1,49 69,34 5,38 11,02 1,13 245,74 9,49 16,38 74,08 11,75
INICIAL 0,73 0,03 0,50 0,06 1,86 0,11 0,07 0,03 9,26 0,21 0,42 5,19 0,33
F-10 3,34 0,12 2,44 0,23 10,58 0,85 0,51 0,12 9,81 0,91 0,51 17,46 1,54
PSEUDOTALLO F-M 4,36 0,16 3,22 0,27 12,09 1,33 0,66 0,16 13,05 1,50 1,57 26,26 2,06
FLORACION 52,83 2,66 20,30 2,34 97,37 20,30 15,52 1,06 764,33 12,23 23,92 307,75 25,51
** COSECHA 66,80 3,52 35,74 2,89 122,67 31,23 23,55 1,69 444,85 22,58 56,40 214,32 31,72
INICIAL 0,01 0,01 0,01 0,00 0,02 0,00 0,00 0,00 0,63 0,01 0,01 0,17 0,01
F-10 0,06 0,01 0,21 0,02 0,30 0,04 0,03 0,03 1,92 0,12 0,34 4,06 0,08
HOJAS F-M 0,29 0,04 1,00 0,07 1,31 0,15 0,13 0,09 3,97 0,36 0,60 5,84 0,33
FLORACION 14,70 2,77 67,70 4,61 80,41 24,75 11,15 4,55 456,16 20,53 57,16 917,31 24,42
COSECHA 8,40 1,85 39,39 2,40 41,05 30,23 8,19 3,06 196,00 10,70 33,22 867,07 18,83
FRUTOS ** COSECHA 32,30 6,27 53,67 6,39 127,65 3,39 7,27 2,76 191,85 22,57 52,66 70,22 47,65
PLANTA INICIAL 2,34 0,22 3,68 0,43 11,88 0,40 0,51 0,26 108,82 2,27 5,02 19,97 2,14
TOTAL F-10 10,23 0,41 6,90 0,73 27,67 1,53 1,40 0,51 140,53 3,54 5,93 43,25 4,37
F-M 10,37 0,63 9,55 0,81 28,90 2,43 2,12 0,62 186,01 5,33 11,20 55,63 4,90
FLORACION 81,37 6,89 105,12 8,16 227,55 50,32 33,63 6,29 1938,47 40,94 98,76 1406,99 63,29
** (MAXIMAS) COSECHA 125,16 13,93 186,29 15,46 403,80 70,58 53,27 10,19 2130,32 76,60 183,99 1477,21 110,94
* Los datos por fase son acumulativos y no pueden ser sumados como un total.
** Para el total acumulado de cosecha, se usan los datos máximos en floración
o cosecha, ya que la pérdida de raíces y hojas, hacen que los contenidos en
cosecha puedan ser inferiores a los obtenidos en la fase previa de floración, pero
las necesidades totales de la planta son máximas.
Que el órgano que genera menor cantidad de biomasa por planta, son las
raíces en el momento de floración, con un total de 0,94 kg; resultados equivalentes
para el peso seco y peso húmedo.
La relación de biomasa, peso seco, peso húmedo, para una planta sana y
bien nutrida, muestra que en un peso total de biomasa para una planta en el
momento de la cosecha, el 0,75% son raíces, 14,15% cormo, el 52,88%
pseudotallo, 6,65% hojas y 25,57% del fruto.
18
CUADRO 8. 6.
Necesidades nutricionales (N, K, P, Ca, Mg, S, Fe, Cu, Zn, Mn y B en Kg) en cada uno
de los órganos de la planta de banano para 1900 plantas en un ciclo de 404 días.
Organos N P K Ca Mg S Fe Cu Zn Mn B
Raíces 2,15 0,15 7,09 0,66 0,53 0,11 0,5 0,003 0.026 0.02 0.01
Cormo 53,2 2,83 131,8 10,22 20,94 2,15 0,86 0,018 0.031 0.32 0.02
Pseudotallo 67,9 5,49 233,1 59,34 44,74 3,21 1,45 0,043 0.107 0.58 0.05
Hojas 128,63 8,76 152,8 57,44 21,18 8,67 0,87 0,038 0.109 1.76 0.05
Fruto 101,97 12,14 242,5 6,44 13,81 5,24 0,36 0,043 0.100 0.13 0.09
Total 353,85 29,37 767,2 134,1 101,2 19,35 4,04 0.145 0.360 2.80 0.21
21
420
405
390
375
360
345
330
315
300
285
270
Nutrientes (Kg) 255
240
225
210
195
180
165
150
135
120
105
90
75
60
45
30
15
0
Raíces Cormo Pseudotallo Hojas Fruto
Órganos de la planta
N P K Ca Mg S Fe Cu Zn Mn B
Figura 8.4 Contenido de Nutrimentos (N, P, K, Ca, Mg, S, Fe, Cu, Mn, y B) en cada
Órgano de la Planta de Banano al momento de la cosecha.
Del Cuadro 8.6, Figura 8.4, es posible concluir, que al momento de la cosecha, el
cormo, el pseudotallo y las hojas son grandes depositarios de nutrimentos que no
se trasladan al fruto, y que el pseudotallo y el cormo son reservas indispensables
que guarda la planta madre para la nutrición del hijo de sucesión (retorno).
CUADRO 8. 7.
Necesidades nutricionales (N, K, P, Ca, Mg, S, Fe, Cu, Zn, Mn y B en Kg) en cada
una de las fases de desarrollo de la planta de banano para 1900 plantas en un
ciclo de 404 días.
Fases N P K Ca Mg S Fe Cu Zn Mn B
INICIAL 6,99 0,82 22,57 0,76 0,97 0,49 0,21 0,004 0.010 0.038 0.01
F-10 13,11 1,38 52,58 2,91 2,66 0,97 0,27 0,007 0.011 0.082 0.08
F-M 18,14 1,54 54,91 4,62 4,03 1,18 0,35 0,01 0.021 0.106 0.09
FLORACIÓN 199,72 15,5 432,4 95,61 63,9 11,95 3,68 0,078 0.188 2.673 0.12
COSECHA 353,85 29,37 767,2 134,1 101,2 19,35 4,04 0,145 0.350 2.801 0.21
Estudios sobre este mismo tema realizados por López y Arias (1998), para
Chiquita Brands, con el clon “Williams”, sembrado con plantas de cultivo de
tejidos, en altas densidades de siembra y en doble hilera (“HIDRAC”), y con el
propósito de fertilizar las plantas de acuerdo a la edad de las mismas, encontraron
lo siguiente: (Cuadro8.8):
22
Es posible concluir, que durante las primeras 16 semanas del ciclo de vida
de las plantas los elementos no son requeridos en altas cantidades, aunque
se necesita de su presencia para un adecuado crecimiento de la planta,
información semejante a la encontrada por Tavares y Falquez, (1997). Por
lo que para este período se deben utilizar en los programas de fertilización
fórmulas completas en pequeñas dosis, pero que suplan la mayoría de
nutrientes que requiere la planta.
CUADRO 8.8.
SEMANA N P K Mg Ca S Fe Mn Cu Zn B
2 0.8 0.1 0.8 0.1 0.5 0.050 0.007 0.009 0.0002 0.0006 0.0002
4 1.3 0.1 2.3 0.2 0.6 0.130 0.017 0.035 0.0003 0.001 0.0004
7 2.2 0.2 4.7 0.2 1.0 0.160 0.023 0.027 0.0007 0.003 0.001
10 6.7 0.5 18.9 0.8 3.0 0.460 1.177 0.028 0.0036 0.01 0.003
14 6.8 0.7 23.5 1.2 3.5 0.670 0.457 0.044 0.0049 0.016 0.004
16 14.6 1.5 46.0 2.0 7.3 1.270 0.375 0.106 0.0073 0.042 0.009
23 20.6 2.5 80.1 3.1 12.0 1.810 0.411 0.162 0.0097 0.069 0.015
25 30.6 4.1 144.4 5.7 22.7 2.800 0.775 0.265 0.0187 0.081 0.027
27 43.6 4.5 131.3 6.6 30.5 3.500 0.605 0.254 0.0197 0.116 0.035
29 39.4 5.2 184.2 9.8 28.3 3.350 0.789 0.218 0.0178 0.133 0.037
32 45.6 5.1 183.1 8.9 36.8 3.520 0.696 0.492 0.0296 0.178 0.038
0
1 Para el período de rápido crecimiento de la planta (después de la semana 16)
que coincide con la Fase FM en cultivos establecidos, se debe aumentar el
uso de fertilizantes al suelo, altos sobre todo en N y K, este aspecto se
visualiza muy bien en las curvas de absorción (Figura 8.3).
CUADRO 8.9.
CUADRO 8.10.
FASES N P K Ca Mg S Fe Cu Zn Mn B
INICIAL 6,99 0,82 22,57 0,76 0,97 0,49 0,2 0 0,010 0,04 0
F 10 13,11 1,38 52,58 2,91 2,66 0,97 0,3 0,01 0,01 0,08 0,1
FM 18,14 1,54 54,91 4,62 4,03 1,18 0,4 0,010 0,02 0,11 0,1
FLORACION 199,72 15,50 432,35 95,61 63,90 12 3,7 0,08 0,19 2,67 0,1
* COSECHA 353.85 29,37 767,22 134,10 101,21 19,35 4,04 0,145 0,373 2,801 0,22
ORGANOS *
RAICES 2,15 0,15 7,09 0,66 0,53 0,11 0,50 0,003 0,026 0,02 0,01
CORMO 53,20 2,83 131,75 10,22 20,94 2,15 0,86 0,018 0,031 0,32 0,02
PSEUDOTALLO 67,90 5,49 233,07 59,34 44,74 3,21 1,45 0,043 0,107 0,58 0,05
HOJAS 128,6 8,76 152,8 57,44 21,18 8,64 0,9 0,038 0,109 1,76 0,05
FRUTO ** 102 12,1 242,5 6,44 13,81 5,24 0,4 0,043 0.100 0,13 0,09
TOTAL 353,9 29,4 767,2 134,10 101,2 19,35 4,04 0,15 0,37 2,81 0,2
* Para el cálculo se usa la necesidad máxima de cada fase
** Equivalente a extracción de la cosecha.
CUADRO 8.11.
Entonces se puede decir, que si las plantas están sanas y vigorosas, con
suelos bien nutridos y balanceados, oxigenados y con buen contenido de materia
orgánica, sólo sería necesario aplicar como fertilizantes químicos los elementos
extraídos por la cosecha, esto es: N:101,97 kg/ha, P: 12,14 kg, K; 242,53 kg, Ca:
6,44 kg, Mg: 13,81 kg, S: 5,24 kg, Fe: 0,36 kg, Cu: 0,04 kg, Zn: 0,10 kg, Mn: 0,13
kg y B: 0,09 kg.
Carbono (C)
Hidrógeno (H)
Este elemento forma parte indispensable del trinomio C-H 2-O, sin el cual las
plantas no podrían desarrollarse. El H es muy abundante en las regiones
tropicales y las plantas lo absorben del agua del suelo, ya sea por ósmosis
(pasiva) o por gradiente del potencial hidráulico (activa) (Figura 8.1)
Oxígeno (O)
1. El suelo es compacto o denso, con macro poros reducidos que permiten una
circulación deficiente de aire; tal es el caso del banano, como monocultivo, con
fuerte compactación de los suelos por intenso tránsito humano (Figura 8.5).
29
SUELO
COMPACTADO
Respiración acelerada,
consumo mayor de los
productos fotosintéticos
FALTA O2
Falta de agua a
la plata
Cosecha pequeña Absorción deficiente,
de calidad inferior unidades portadoras
no son oxidadas
4. Tablas de agua altas que saturan los espacios de poro por periodos mayores
de 72 horas.
La misma autora dice una frase que resume la importancia del oxígeno en
la nutrición de la planta “cuando una planta sufre carencia de todo, lo que sufre es
ausencia de oxígeno“.
Nitrógeno (N)
Los suelos suelen ser más deficientes en nitrógeno que en cualquier otro
elemento, si bien la deficiencia de fósforo también es muy común. De los
suelos, las plantas absorben el nitrógeno de dos formas: nitrato (NO 3-) y
amonio (NH4+).
Como el nitrógeno está presente en muchos compuestos esenciales, no es
sorprendente que el crecimiento sea lento si no se añade dicho elemento. Las
plantas que contienen una cantidad tal de nitrógeno que limita su crecimiento
muestran síntomas de deficiencia que consisten en una clorosis generalizada,
especialmente en las hojas más antiguas. En casos severos, estas hojas se
tornan por completo amarillas y luego se queman a medida que mueren. Con
frecuencia caen de la planta durante estas dos etapas. Las hojas más jóvenes
permanecen verdes por más tiempo, ya que reciben formas solubles de nitrógeno
provenientes de las hojas más antiguas.
Las plantas que crecen con un exceso de nitrógeno casi siempre tienen
hojas color verde oscuro y presenta abundancia de follaje, por lo común con un
sistema radical de tamaño pequeño y, por consiguiente, con una elevada
proporción parte aérea- raíz (la proporción inversa es frecuente cuando hay
deficiencia de nitrógeno). Las plantas de papa que crecen con sobreabundancia
de nitrógeno muestran un crecimiento excesivo de la parte aérea, con tubérculos
pequeños bajo el suelo. Se desconocen las razones de este crecimiento
relativamente alto de la parte aérea, pero sin duda la translocación de azúcares
hacia las raíces o tubérculos se ve afectada de alguna forma, quizá a causa de un
desequilibrio hormonal. La floración y la formación de semillas en varios cultivos
agrícolas se ven retardadas por exceso de nitrógeno.
Lahav y Turner, citados por Borges et al ( 1997), dicen que existe una
correlación positiva (r=0,79) entre la producción de materia seca y el N absorbido.
circunferencia del pseudotallo. Por otro lado, encontraron que la mayoría de los
valores de N de la hoja estaban por arriba del 3 %. Los mismos autores afirman
que una vez rebasado el nivel crítico de N en las hojas, todo aumento de la
concentración tiende a disminuir la circunferencia del pseudotallo.
Deficiencia de Nitrógeno
Fuentes de Nitrógeno
Por otro lado, según López (1991), el nitrato de amonio acidifica poco los
suelos, debido a su bajo contenido amoniacal. El uso de nitrato de potasio, no
provocó cambios en la acidez del suelo.
El N se puede aplicar con éxito en forma foliar. Cain (1956), citado por
López y Espinoza (1995), dice que la urea se puede aplicar en forma foliar, en
concentraciones hasta del 5%. Guerrero y Gadban (1992), citado por los mismos
autores, dicen que el nitrato de potasio ha sido usado con éxito en Santa Marta,
Colombia en concentraciones del 2%.
35
CUADRO 8.12.
Fijación no simbiótica
N
N2 ORGANICO
LIBRE Integrado
ELEMENTAL descargas organizado
Inmovilizado en humus
en la eléctricas en restos
por micro- acomplejado
atmósfera lluvia organismos en organo
animales y
vegetales
minerales
volatilización inmovilización
desnitrificación amonificación
Fósforo (P)
Deficiencias de Fósforo
García Gilabert y Benítez (1986), afirman que los suelos que tienen
disponibles de 10 a 20 ppm de fósforo requieren o responden a aplicaciones
fosfatadas. La deficiencia de fósforo provoca achaparramiento, hace lento el ritmo
de producción de hojas, las cuales se presentan muy verdes y con clorosis
marginal, luego necrosis y muerte prematura. Si la deficiencia es muy intensa hay
retardo en la emisión floral.
Fuentes de Fósforo:
Roca fosfórica: con una concentración de 22 a 33% de P 205, tiene también un 33%
de Ca, es un material poco soluble y se recomienda para suelos ácidos. Según
Sánchez (1981), citado por López y Espinoza (1995), este material ha demostrado
ser eficaz y económico, comparado con fuentes más solubles.
P- Orgánico
estructurado en
restos, humus, organo - Deposición
minerales e inmovilizado de restos
por organismos
Inmovilización
mineralización
P-Ca
P-Al solubilización
P
P-Fe
Aplicado
fertilizantes P
fosforados P Nativo y absorción P
Soluble
presipitado en solución Absorbido
fijación del suelo excreción por la planta
P- soluble en H2 PO4- HPO4-
reductante
P- ocluído
absorción
Precipitación
P- Fijado liberación
(absorbido muy fuerte)
en el complejo coloidal
Solubilización
Potasio (K)
Evans y Sorger (1966), citados por Evans y Wildes (1971), indicaron que el
papel más importante del K es el de activador enzimático en el metabolismo
celular, y proponen que el K y cationes univalentes similares, inducen a
conformaciones específicas de proteínas enzimáticas que son necesarias para la
actividad catalítica de la planta.
La planta de banano absorbe poco potasio durante los dos primeros meses
de la plantación, luego sus necesidades aumentan rápidamente en fuertes
proporciones 4 a 5 meses después y las cantidades absorbidas se elevan 20
veces. En forma general, la absorción parece detenerse o disminuir mucho
después de la floración, y el racimo se llena en su mayor parte a expensas del K
acumulado en los órganos vegetativos (Montagut y Prével, 1965).
Deficiencias de Potasio
Los síntomas foliares son: pérdida del color verde normal con
amarillamiento en el margen de las hojas que se mueve hacia adentro con
necrosis de los tejidos (Ver Foto 8.3).
Lahav (1975), dice que los síntomas aparecen en las hojas más viejas, con
manchas pequeñas y líneas pardo azuladas en los peciolos. Con carencia
severa de K, las hojas afectadas cogen un color característico amarillo-
naranja, que puede clasificar según Anon (1963), citado por Lahav (1972),
en la Tabla de color de Munsell como 2,5 y 8/10. Estas áreas se necrosan y
mueren a lo largo de las venas secundarias hasta la vena central. Toda la
hoja se necrosa y muere, con enrollamiento del ápice hacia abajo. El tejido
muere en un período de 1 a 2 días.
Fuentes de Potasio
Sulfato de potasio (K2SO4): con un 50% de K2O. Es una buena fuente de K, ya que
también suple azufre. Flores(1991), citado por los mismos autores, obtuvo
buenos resultados mezclando KCl con K2SO4.
Nitrato de potasio (KNO3): con un 44% de K 2O, su uso es restringido por su alto
costo, pero es excelente en aplicaciones foliares al 2% según Guerrero Y Gasban
(1992), citados por López y Espinoza (1995). (Cuadro 8.12). La aplicación de
este compuesto en el pseudotallo de plantas recién cosechadas a razón de 30
gramos por aplicación, en 2 aplicaciones 4 semanas una después de la otra, han
dado muy buenos resultados en la nutrición del retorno.
K-Ca-Mg K-Ca-Mg
Nativo Orgánico
en estructura del en estructura
material parental de la materia
orgánica
meteorización mineralización
K-Ca-Mg K-Ca-Mg
APLICADO Soluble absorción K-Ca-Mg
con fertiliizantes solubilización en la solución Absorbido
y enmiendas por las plantas
del suelo
Intercambio iónico
K K-Ca-Mg
lixiviación
Fijado solubilización cambiable
entre capas absorbidos al
fijación complejo coloidal
K-Ca-Mg
Lavado
a capas inferiores
y ríos
Calcio (Ca)
celular que surge entre las células hijas. Los tejidos torcidos y deformados resultan
de la deficiencia de calcio, y por ello las zonas meristemáticas mueren en etapas
tempranas. El calcio es esencial para las funciones normales de la membrana en
todas las células, probablemente como un enlazador de fosfolípidos, entre sí
mismo o hacia proteínas de membrana.
Deficiencias de Calcio
Fuentes de Calcio:
Carbonato de calcio (CaCO3): con una concentración de 32% de Ca, es una fuente
excelente como corrector de acidez del suelo para suplir Ca. El grado de
molienda es muy importante en su efecto.
Nitrato de calcio (CaNO3)2: con 27% de CaO, es una fuente muy soluble que
funciona muy bien para corregir deficiencias de Ca (Cuadro 8.12).
51
Magnesio ( Mg)
Las raíces son pobres depositarias, lo mismo que el fruto, pero el cormo
deposita cantidades importantes en el período de floración a cosecha. Las
necesidades de Mg en las primeras fases de desarrollo de la planta son muy
bajas, pero se incrementa fuertemente en las fases de FM, floración y cosecha
(Cuadro 8.10, Figura 8.3).
Deficiencias de Magnesio
Las deficiencias de Mg han sido estudiadas por varios autores, entre los
cuales se destacan Murray (1959 y 1960); Charpentier y Martin Prével (1965) y
Simmonds (1973). Ellos concuerdan en que las plantas con carencia de Mg
muestran disminución en el crecimiento, y las hojas más viejas palidecen en color
y desarrollan halos amarillos de forma alargada, viéndose poco afectados los
márgenes. Charpentier y Martin Prével (1965), concuerdan con Murray (1959), al
describir manchas purpúreas en los peciolos, manchas necróticas en las hojas,
obstrucción foliar, y separación y ruptura de las vainas. Freiberg y Steward, citados
por Simmonds (1973), describen clorosis intervenal en las hojas viejas que se
traslada a las más nuevas.
52
En New South Wales el síntoma más común es que los márgenes de las
hojas más viejas permanecen verdes, mientras el área entre el margen y la vena
central llega a ser amarillo. La hoja no muere rápidamente y los síntomas pueden
estar presentes en las mismas hojas por muchas semanas (Turner y Bull, 1970),
en estas condiciones, la producción disminuye, el amarillamiento de las hojas
aumenta y la situación llega a empeorar con aplicaciones de N, P y K. (Turner y
Bull, 1970). Además, se produce un mal llenado de la fruta y la producción es
significativamente reducida (Chalker y Turner, 1969).
Fuentes de Magnesio:
Dolimita (CaCO3 Mg CO3): con un 18% MgO, es de acción doble al suplir Ca.
Azufre (S)
El azufre se absorbe del suelo como aniones sulfato divalentes (SO 42-). Al
parecer es metabolizado por las raíces sólo hasta el grado en que se requiere, y el
exceso de sulfato se transporta sin cambio hacia las partes aéreas en el xilema.
Debido a que hay suficiente sulfato en la mayoría de los suelos, las plantas con
deficiencia de azufre son poco comunes. Los síntomas de deficiencia consisten en
una clorosis general en toda la hoja, incluyendo los haces vasculares (venas). En
algunas especies el azufre no se redistribuye con facilidad a partir de tejidos
maduros, por lo que la deficiencia casi siempre se nota primero en las hojas más
recientes. Sin embargo, en otras especies la mayor parte de las hojas se vuelven
cloróticas casi al mismo tiempo, o incluso las hojas más antiguas primero. Muchas
plantas cultivadas contienen como un quinzavo de azufre respecto a la cantidad
de nitrógeno (en peso), esto parece ser una clave útil para evaluar requerimientos
nutricionales (Duke y Reisenauer, 1986).
El azufre también puede absorberse por las hojas a través de las estomas
como dióxido de azufre gaseoso (SO 2), un contaminante liberado en el medio,
producto de la combustión de carbón, madera y petróleo. El SO 2 se
transforma en bisulfito (HSO3-) cuando reacciona con agua en el interior de las
células y en esta forma inhibe la fotosíntesis y provoca la destrucción de
clorofila.
En estado vegetativo, los tejidos activos de rápido desarrollo como las hojas
no emergidas y meristema presentan altas cantidades, siendo el pseudotallo y las
hojas los órganos más ricos en azufre. En la fase productiva, la concentración
mayor del nutrimento se presenta en los órganos de crecimiento y diferenciación,
es decir, la inflorescencia y el raquis. En la cosecha, el pseudotallo continúa
siendo el órgano con mayores contenidos de azufre en la planta. Los frutos al igual
que las hojas, contienen poco azufre (Twyford y Walmsley, 1974; Marchal et al,
1972).
Las hojas inmovilizan la mayor parte del azufre absorbido por la planta. Los
órganos de conducción hacia el limbo, tales como vainas, peciolos y venas son
pobres en azufre, mientras el raquis (órgano de conducción hacia los frutos) es tan
rico como los limbos.
Melin (1970), encontró que el azufre tiene una acción benéfica sobre la
vegetación de las plantas de banano, proporcionando un crecimiento más rápido,
una mayor precocidad y un intervalo floración-cosecha más corto. El aumento de
los rendimientos se debe probablemente a una mejor utilización de los fertilizantes
nitrogenados, por efecto del azufre. El autor señala que una acidificación del suelo
por un aporte de azufre atenúa el efecto del calcio en el desarrollo de la “pulpa
amarilla”. Tavares y Falquez (1997), encontraron que el azufre se concentra en las
hojas en el momento entre floración y cosecha, seguido por el fruto. Los
contenidos en el pseudotallo, cormo y raíces son bajos y descendentes en su
orden. El mayor contenido de azufre se da en la fase de floración, por lo que su
aplicación debe hacerse entre la fase de FM y floración (Cuadro 8.10,
Figura 8.3).
Deficiencias de Azufre
Fuentes de Azufre
Las principales fuentes de azufre según López y Espinoza (1995), son las
siguientes:
Sulfato doble de potasio y magnesio (K2 SO4 . 2Mg SO4): tiene un 22% de azufre,
22% de K2O y 18% de MgO. Es una excelente fuente triple, no cambia el pH y es
muy soluble.
Sulfato de magnesio (Mg SO4): con el 22% de S, también es una buena fuente de
MgO con 17%.
Superfosfato simple: con 12% de S, es un material que se usa con éxito, pero es
poco soluble.
S
LIBRE S
S
ELEMENTAL Precipitado ORGANICO
en la Fe2S
atmósfera Inmovilizado Humus Organizado en
(contaminación) por micro- organo- restos animales
volatización organismos minerales y vegetales
precipitación
Deposición inmovilización
con lluvia
mineralización
S Soluble
Deposición de restos
H2 S Soluble
S Aplicado Micro- O S
en fertilizantes 2 REDOX absorción Absorbido
organismos
de N y P en las plantas
enmiendas
SO 4- Soluble
translocación
absorción liberación
solubilización precipitación
SO 4- Absorbido
solubilización en complejo
coloidal
S Nativo
Insoluble en
material parental o
precipitado
Translocación SO 4- Absorbido
profundamente
lixiviación
SO 4+ Lavados
a capas inferiores
Cloro (Cl)
El cloro se absorbe del suelo en forma de ion cloruro (Cl -), y en su mayor
parte permanece en esta forma, aunque se han encontrado más de 130
compuestos orgánicos en el reino vegetal que contienen cloro en cantidades muy
pequeñas (Engvild, 1986). Uno de los más interesantes es el ácido 4-
cloroindolacético, el cual parece ser una hormona natural tipo auxina. Casi todos
las especies absorben de 10 a 100 veces más cloro del que necesitan, por lo que
esto representa un ejemplo común de consumo extra. Una de las funciones del
cloro consiste en estimular la ruptura (oxidación) de la molécula de H 2O durante la
fotosíntesis, aunque también es esencial en las raíces, para la división celular en
las hojas y como un soluto osmóticamente activo de importancia (Terry, 1977;
Flowers, 1988).
58
Pfeffer, a finales del siglo XIX, fue el primero en sugerir que el sodio podría
ser necesario como micronutriente para plantas; no fue sino hasta que en 1950
Wood sugirió que el sodio o el cloro (o ambos) podrían ser esenciales para las
plantas en pequeñas cantidades. Según Brownel P.F (1992), el sodio es necesario
para el funcionamiento de la parte C-4 en que se transporta CO 2 a las células para
ser reducido a carbohidratos.
Las toxicidades por sodio se muestran en las hojas como quemaduras, que
comienzan con un halo marginal y terminan como una larga franja de color
marrón-ceniza, entorno a la periferia de toda la hoja; en la mayoría de los
casos, esa franja no es mayor de 3 a 5 centímetros.
Poner Foto
Zinc (Zn)
Malavolta, citado por López y Espinoza (1995), dice que en suelos con alto
contenido de P es frecuente observar, una reducción en la concentración de Zn en
los tejidos, hasta el punto de presentarse síntomas visuales por deficiencias. No
por la formación de carbonatos, ya que estos son solubles, sino por la inhibición
de la absorción del Zn en la superficie de la raíz, como consecuencia del alto
contenido de P y la precipitación del Zn en los vasos conductores de savia.
Asimismo, según Olsen (1972), se presentan reducciones en la disponibilidad de
zinc en el suelo, debido al antagonismo existente entre estos dos elementos.
También mencionan, que el Zn puede ser fuertemente retenido por las arcillas
llegando a ser no disponible (Ver Foto 8.8).
La deficiencia de zinc también está asociada con una reacción alcalina del
suelo, provocada por aplicaciones de carbonato de calcio y bajos niveles de
materia orgánica (Jones, 1972). Esta deficiencia puede ser corregida con ZnSO 4,
el cual se aplica en dosis de 2 a 20 Kg de Zn/ha.
Toxicidad de Zinc:
Este elemento está envuelto en la translocación del Fe, por lo tanto puede
causar clorosis típica de deficiencia de este elemento (Bertch, 1995).
Fuentes de Zinc:
Sulfato de Zinc (ZnSO4): con un 28% de Zn, es una buena fuente. Se recomienda
aplicaciones foliares con concentraciones del 0.5%.
Boro (B)
El boro es absorbido de los suelos casi por completo como ácido bórico sin
disociar (H3BO3), representado con mayor exactitud como (B[OH] 3). Se transporta
con lentitud hacia fuera de los órganos floemáticos después de su llegada a través
del xilema (Raven, 1980). Sin embargo, en algunas especies sale del floema de
manera mucho más eficaz (Welch, 1986; Shep, 1988). Las deficiencias de este
elemento no son comunes, aunque existen diversos trastornos relacionados con la
desintegración de los tejidos internos, debido a un aporte inadecuado de boro. Las
plantas con deficiencia de boro muestran una amplia variedad de síntomas,
dependiendo de la especie y edad de la planta, pero el primer síntoma es la falta
de elongación normal en las puntas de las raíces, acompañada de inhibición de la
síntesis de DNA Y RNA. También se inhibe la división celular en el ápice del tallo y
en las hojas jóvenes. El boro tiene un cometido aún no determinado pero esencial
en la elongación de los tubos polínicos. Muchos hallazgos indican que sólo los dos
grupos taxonómicos importantes requieren este elemento, plantas vasculares y
diatomeas, en estas últimas forma parte de la pared celular, rica en silicio (Lovatt,
1985).
Las funciones bioquímicas del boro en las plantas vasculares siguen siendo
poco claras a pesar de que se han estudiado mucho, debido a que no se sabe en
que medida el B(OH) 3 se modifica en las células, ya que puede cumplir muchas
funciones en ese sitio. Quizá mucho de este ácido débil se une para formar
complejos de borato cis-diol con grupos hidroxilo cercanos, provenientes de la
manosa y con algunos otros azúcares de los polisacáridos de la pared celular
(aunque no con glucosa, fructosa, galactosa y sacarosa, las cuales no tienen
arreglos cis-diol de grupos hidroxilo). Las funciones bioquímicas y fisiológicas que
64
Según Devlin, citado por López y Espinoza (1995), este elemento participa
en el transporte de azúcares, y es esencial en la formación de las paredes
celulares. Asimismo, el boro está relacionado con la utilización del calcio de la
planta, actúa en el metabolismo de los carbohidratos y facilita el movimiento de los
azúcares (Marín y Christensen, 1979).
El Instituto de la potasa, citado por López y Espinoza (1995), dice que las
flores y los frutos son afectados por la carencia de este elemento.
Las necesidades de B desde la fase inicial hasta FM son muy bajas, pero
se incrementan muy frecuentemente entre la fase de floración y cosecha
(Cuadro 8.10, Figura 8.3).
Deficiencias de Boro
López y Solís (1991), dicen que una fuerte deficiencia en boro puede
producir deformación de los racimos, asegurando que si la deficiencia es extrema
la planta puede morir al no haber hijos nuevos. Dicen López y Espinoza (1995),
que las deficiencias de B se pueden confundir con mucha frecuencia con los
síntomas provocados por virus, y si es severa puede confundirse con deficiencia
de Ca. Por otro lado, Norton, citado por los mismos autores, dice que la falta de B
provoca un pobre desarrollo del sistema radical, con muy poca presencia de pelos
absorbentes, que al final termina necrosándose severamente (Ver Foto 8.9).
Fuentes de Boro:
Ácido bórico (H3 BO3): con 17% de B, puede aplicarse en forma foliar en
concentraciones del 0.3%.
66
Cobre (Cu)
Las necesidades de Cu de la planta del banano son tan pequeñas, que sólo
se conoce el caso de la deficiencia, en el campo de las turberas de Niecky en
Costa de Marfil, descrito por Moity (1961). Por tal motivo, la nutrición cúprica en
banano ha sido muy poco estudiada (Díaz et al, 1976).
Los órganos que tienen contenidos más altos en Cu son las hojas, el
pseudotallo y el cormo. Los frutos a la cosecha tienen cantidades de cobre
similares a las del cormo (Twyford y Walmsley, 1974).
Deficiencia de Cobre:
El uso del cobre alrededor del mundo es muy amplio, Bowen (1966),
menciona que para esa fecha en el ámbito mundial se usaban 70 millones de kg
69
Hodgson et al (1966), observaron que más del 98% del cobre del suelo se
encuentra complejado con la materia orgánica. Fácilmente forma complejos muy
estables que son compuestos predominantes en la solución. En turbas con pH 3,5
entre 60 y 90% del Cu 2+ extraído en agua se encontró complejado orgánicamente, y
70
Fuentes de Cobre
Hierro (Fe)
Dice Deulin, citado por López y Espinoza (1995), que el Fe es absorbido por
la planta como Fe3+, sin embargo, la forma ferrosa (Fe 2+) es la forma metabólica
activa.
Deficiencia de Hierro:
Dice Bertsch (1995), que la toxicidad por hierro depende principalmente del
material que originó el suelo, sin embargo en general las plantas tienen mucha
tolerancia a cantidades altas, por lo que no es muy común en condiciones
naturales. Sin embargo, en áreas de suelos ácidos y poco fértiles, es posible
73
Pa
Fe 3+ + O2 Pe
Fe 2+ + O2
Fe = 6244 ppm
Ri
Fe = 77 ppm 50
Fe = 158 ppm
Pc En Fl Tr Xi
En Endodermis
Fl Floema
Pa Pelos absorventes
Pc Parénquima cortical
Pe Periciclo
Ri Rizodermis
Tr Tráquea de formación
Xi Xilema
Fuentes de Hierro
Manganeso (Mn)
Deficiencia de Manganeso
Fuentes de Manganeso
Molibdeno (Mo)
Deficiencias de Molibdeno
Por otro lado, Bertsch (1995), dice que los síntomas más visibles pueden
empezar como un moteado clorótico intervenal de las hojas inferiores, seguido por
una necrosis marginal y encurvamiento de las hojas, las que pueden llegar a
secarse por completo. La floración se inhibe, y si llegan a formarse, se
desprenden.
Aluminio (Al)
iones metálicos en la solución del suelo, que influyen en los procesos biológicos
vitales.
Las plantas con la estrategia II, hasta donde se sabe, sólo están
representadas por pastos, incluyendo ciertos granos. Responden a la deficiencia
de hierro formando y liberando ligandos poderosos que atrapan iones Fe 3+ de
manera específica y muy eficaz. Estos ligandos se conocen como sideróforos
(de la palabra griega que significa “portadores de hierro”) o más específicamente,
fitosideróforos (Sugiura y Nomoto, 1984; Neilands y Leon, 1986).
Las interacciones y sus efectos varían con los diferentes cultivos, estos
fenómenos no son aun bien conocidos en el cultivo del banano por lo que deben
estudiarse a fondo; en el Cuadro 8.13 (falta) se dan algunos antagonismos según
diversos autores.
Lahav (1974), encontró que el K suministrado tiene más influencia sobre los
niveles de Ca y Mg que sobre los otros nutrimentos. Un incremento en la
concentración de K en el suelo o en la solución nutritiva es seguido por una caída
en los niveles de Ca y Mg en los tejidos de la planta.
reducción y otras reacciones dentro del espacio libre, la superficie del plasmalema
y por último, por la quinesis del transporte de iones a través del citoplasma.
Según Marschner (1986), en algunas plantas en las cuales se dan asociaciones
con micorrizas, la adquisición de nutrientes por parte de las raíces es fortalecida
por la absorción y transporte dentro del micelio del hongo, en donde el ion se
transfiere en forma directa al citoplasma. Por otro lado, Marshner (1991) y Bell et
al (1991), mencionan que los niveles altos de algunos iones causan la destrucción
de la plasmalema, las cuales facilitan la entrada directa de la solución del suelo a
los vasos del xilema y al sistema de transporte de nutrimentos dentro de la planta.
El papel del espacio libre y la asociación de las fases sólidas en el abastecimiento
de nutrimentos en la planta no están bien entendidos.
De los metales pesados que afectan la utilización de hierro por las plantas,
el cobre es el que produce los síntomas más fuertes de interferencia (Dekock,
1956). La susceptibilidad de las plantas a la contaminación por cobre es variable
dependiendo de la especie, el estado de desarrollo y la disponibilidad de otros
nutrimentos como nitrógeno, fósforo y potasio. En general, las legumbres parecen
ser de los cultivos más susceptibles a la toxicidad por Cu 2+.
Relación Valor
Fe
Mo
Co
pH 6.0-7.2
S
Va
Cl
Mg
pH 5.5 - 6.5
Cu N
K Ca
pH 4.5 - 6.0
pH 4.8 - 6.5
Zn
Mn Na
B
pH 5.0
A
A/2
B/2 1
B
Prével (1962), señala que reportó la composición del limbo del banano en la
fase de floración y dio los siguientes resultados: N:2,82; P:0,15; K:3,43; Ca: 0,71 y
Mg: 0,18 % respectivamente. En la cosecha, la composición de las hojas es la
siguiente: N: 2,56; P:0,14; K:3,03; Ca:0,92 y Mg: 0,12 % respectivamente.
Diversos autores dan los niveles desde crítico hasta tóxico para diferentes
cultivares en varios países (Cuadro 8.14).
94
CUADRO 8.14.
NIVEL
Elemento Deficiente Bajo Optimo Alto Crítico Deficiente Bajo Optimo Toxicidad Adecuado
N (%) < 2,6 2,6-3 3-4 >4 2,6 1,6-2,1 2,0-2,5 2,7-3,6 -- 2,5-3,0
P (%) < 0,13 0,13- 0,19-0,25 > 0,25 0,2 0,15- 0,18-0,27 -- 0,10-0,20
0,19 0,17
K (%) < 2,4 2,4-3 3-4 >4 3,0 1,3-2,7 -- 3,5-5,4 -- 3,0-4,0
Ca (%) < 0,4 0,4- 0,74-1,25 > 1,25 0,5 0,15 -- 0,25-1,20 -- 0,8-1,25
0,74
Mg (%) < 0,2 0,2- 0,3-0,46 > 0,46 0,3 0,07-0,19 0,20- 0,27-0,60 -- 0,25-1,0
0,3 0,25
S (%) -- -- 0,2-0,27 -- 0,23 -- -- -- --
Cl (%) -- -- 0,8-0,9 -- 0,6 -- -- -- --
Mn (ppm) < 10 -- 1.000- 4.000- 25 30-100 -- 200- 4.000 150-1.000
2.000 6.000 2.000
Cu (ppm) -- 3-7 7-20 -- 9 -- ¿< 5 ? 6-30 -- 5-20
Zn (ppm) < 15 15- 20-35 > 35 18 6-17 -- 20-50 -- 25-50
20
Fe (ppm) -- -- 70-200 -- 80 -- -- 80-360 -- 50-200
B (ppm) < 10 10- 20-50 > 300 11 -- ¿< 10-25 80-100 16-60
20 10 ?
Mo (ppm) -- -- 1,5-3,2 -- 1,5-3,2 -- -- -- --
Al (ppm) -- -- 50-240 -- -- -- -- -- --
Cultivar Williams. Nueva Gales del Sur Hoja Marchal (no publicado, citado por Prével, Smith
(Tuner, 1985) 3ª hoja de hijos de mediano Completa. 1984). Cvs. Poyo, Gran Enano y (1991), en
tamaño aún muestreables desde el suelo. Cvs Pequeña Americani en estado de emergencia del Sudaméric
Enana.
Lacatán y
racimo. Hoja III y muestreo de mitad a para los
Poyo. Hoja interna del limbo en el centro de la hoja. cvs.
3ª. Estado: Williams y
desarrollo Pequeña
completo del Enana
hijo (Lavah y
Turner,
1983).
Para clones del subgrupo “Plantain”, Caro Castas et al (1964), citados por
Kilmer et al (1968), consideran que los niveles adecuados y deficientes de K son
3,96 y 12,76 % respectivamente.
Las necesidades de cobre son muy pocas en las plantas de banano, y sólo
se conoce el caso de deficiencia de las turberas de Niecky en Costa de Marfil,
descrito por Moity (1961) y Lassoudière (1973), pero sin valores de contenido de
Cu en las hojas. Díaz et al (1976), encontraron que las concentraciones de cobre
en los limbos oscilaban entre 11 y 24 mg/kg con un valor medio de 16,7 mg/kg.
Las bajas concentraciones de este elemento en limbos y nervios ocasionan
problemas en los resultados de los análisis cúpricos; entonces Marchal y Prével
(1971), surgirieron que los órganos conductores son más ricos y por lo tanto más
sensibles.
La United Fruit Co. menciona como niveles críticos tentativos los siguientes,
N: 2,4; P: 0,15; K: 3,0-3,5; Ca: 0,44; Mg: 0,22; S: 0,18 %, respectivamente. Con
relación a los micronutrimentos, Zn: 16; B: 11; Mo: 1,5; Fe: 60; Cu: 5 y Mn: 60
mg/kg, respectivamente.
CUADRO 8.15.
*Fuente
1 Rodríguez –Gómez, (1981).
2 Ramírez et al, (1978).
3 Prével, (1962).
4 Osborne y Hewitt, (1962).
5 Murray, (1960).
6 Lacoeuilhe y Prével, (1971 a,b).
7 García et al, (1978).
8 Marchal et al, (1972).
9 Díaz et al, (1976).
10 Marchall y Prével, (1971).
11 Jaramillo y Garita, (1981).
12 Lahav, (1974).
13 Jambulingan et al, (1975).
14 López, (1983).
15 Segars, (1984).
98
100 0
90 10
80 20 ZONA DE
EQUILIBRIO
70 30
60 ** 40
**
%K 50 ** 50 % Ca
40 60
30 70
20 80
10 90
0 100
100 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0
% Mg
Zona Este
* Zona Oeste
CUADRO 8.16.
Ubicación de la K Ca Mg K Ca Mg Sumatoria K Ca Mg
Finca
% Miliequivalentes* % relativo
3.1 0.64 0.3 79.3 31.9 24.7 135.9 58.3 23.5 18.2
3.0 0.61 0.28 76.7 30.4 23.0 130.2 58.9 23.4 17.7
3.0 0.65 0.33 76.7 32.4 27.1 136.2 56.3 23.8 19.9
3.1 0.62 0.32 79.3 30.9 26.3 136.5 58.1 22.6 19.3
3.2 0.60 0.32 81.8 29.9 26.3 138.1 59.3 21.7 19.1
Zona Este 3.0 0.67 0.32 76.7 33.4 26.3 136.5 56.2 24.5 19.3
3.5 0.53 0.30 89.5 26.4 24.7 140.6 63.6 18.8 17.5
3.2 0.81 0.37 81.8 40.4 30.4 152.7 53.6 26.5 19.9
2.7 0.61 0.29 69.0 30.4 23.8 123.3 56.0 24.7 19.3
3.1 0.73 0.34 79.3 36.4 28.0 143.7 55.2 25.4 19.5
3.8 0.47 0.26 97.2 23.4 21.4 142.0 68.4 16.5 15.0
4.0 0.52 0.31 102.3 26.0 25.5 153.7 66.5 16.9 16.6
3.8 0.42 0.26 97.2 21.0 21.4 139.5 69.7 15.0 15.3
4.1 0.45 0.31 104.9 22.5 25.5 152.8 68.6 14.7 16.7
3.8 0.42 0.31 97.2 21.0 25.5 143.6 67.7 14.6 17.7
4.7 0.57 0.28 120.2 28.4 23.0 171.7 70.0 16.6 13.4
Zona Oeste 4.0 0.42 0.28 102.3 21.0 23.0 146.3 69.9 14.3 15.7
4.3 0.49 0.29 110.0 24.4 23.8 158.3 69.5 15.4 15.1
4.3 0.41 0.26 110.0 20.4 21.4 151.8 72.4 13.5 14.1
4.1 0.47 0.30 104.9 23.4 24.7 153.0 68.6 15.3 16.1
meq K = % K / 0.039; meq Ca = % Ca /0.020; meq Mg = % Mg /0.012
Fuente: López y Espinoza, (1995).
CUADRO 8.17.
100
N P K Ca Mg Fe Mn Cu Zn
% Ppm
Muy pobre 3,05 0,16 1,61 0,71 0,31 109 180 12 42
Pobre 2,89 0,15 2,05 0,72 0,30 205 246 10 34
Mediano 2,69 0,15 2,59 0,66 0,30 134 242 16 30
Bueno 2,66 0,16 3,05 0,61 0,25 110 236 28 34
Muy bueno 2,58 0,17 3,35 0,60 0,25 94 243 11 26
*m.s. Materia seca. Muestras tomadas en diciembre 1974.
Fuente: Rodríguez - Gómez (1980).
A resultados semejantes llegó Arias (1984), para el N con respecto al K,
mientras que la concentración de P en la hoja también disminuyó al aumentar el
contenido de K.
Bayona (1983), dice que el análisis foliar es una buena guía para la
fertilización de bananos; los niveles de N en la hoja fueron variantes, pero los de K
dieron una correlación altamente significativa.
Liberación
Lixiviación
Suelo
Suel Nutrientes
o inmovilizados
CUADRO 8.18.
La cantidad de N inmovilizado por la planta total varía desde 450 hasta 142
kg por hectárea por año, ello de acuerdo con el clon, y el tonelaje de producción
esperado. El P inmovilizado varía de 37 a 17 kg por los mismos motivos que el N.
La inmovilización de K varía mucho con el país, clon y tonelaje; los volúmenes
reportados en Antillas Inglesas son de 1750 kg por hectárea por año y en Islas
Canarias de 1300 kg, siendo valores muy altos, comparados con 767 Kg para
Costa Rica, 778 Kg en varios países y 800 Kg para el Caribe.
Con respecto al Ca, las inmovilizaciones son muy altas en las Antillas
Inglesas con 300 kg/ha/año, seguido de Islas Canarias con 230 kg; el plátano en
Colombia con 233 kg, que al parecer inmoviliza mucho Ca con relación a su
productividad. Un promedio de 130 a 150 kg/ha/año de Ca parece ser un volumen
normal para la mayoría de los países bananeros.
CUADRO 8.19.
Del Cuadro 8.10 se concluye que las extracciones calculadas por Tavares y
Falquez (1997), para una producción anual de 60 toneladas, es de 101,97 kg de
N, 12,14 kg de P, 242,53 Kg de K, 3,44 kg de Ca, 13,81 kg de Mg y 5,24 kg de S.
Si se usan los resultados de los análisis químicos del suelo, donde se llevó
a cabo el estudio por Tavares y Falquez (1997), se encuentra que la disponibilidad
de elementos asimilables en kg en el suelo a una profundidad de 30 cm es de: P:
7,40, K: 1098,20, Ca: 3511,20, Mg: 825,20, Fe: 901,00, Cu: 34,80, Zn: 0,40 y Mn:
79,40. Del análisis de resultados se puede concluir, que el suelo aporta en exceso
todos los elementos requeridos por la planta para obtener cosechas
económicamente rentables. No se considera aporte del suelo en N, pero la
atmósfera puede aportar según diversos autores entre 40 y 60 kg/ha/año, fijados
por microorganismos y plantas, que en su ciclaje los hacen disponibles; no
obstante lo anterior bajo condiciones normales de cultivo, las plantaciones
muestran “Hambre” y deficiencias nutricionales, por lo cual es necesario fertilizar.
CUADRO 8.20.
y F10 Fm F C
Estado de Desarrollo
y´ F10´ Fm´ F´ C´
RETORNO
Años 1 2
Semanas 0
0 10 22 34 46 58 70 82 94 104
Días 50 100 150 200 250 300 350 400 450 500 550 600 650 700 750
Fases
Y F10 Fm F C
Planta 33 % 67 % 100 %
Madre Y² F10² Fm² F² C²
Retorno 1 67 % 33% 50 % 50 % 33 % 67% 100 %
Y³ F10³ Fm³ F³ C³
Retorno 2 67 % 33% 50 % 50 % 33 % 67% 100 %
Y4 F10 4
Fm4
Y-F10
F10-Fm
Fm-F
F-C
CUADRO 8.21.
108
La relación K/N para los ciclos A es de 2,11 y para los ciclos B de 2,17 por
lo que se mantiene la relación nutricional no obstante la diferencia en cantidades.
Las relaciones K/N para los ciclos A 1 son semejantes a las de los B, por lo
que se puede usar la misma fórmula en cantidades diferentes.
CUADRO 8.22.
N 689.24 350.00 50.00 587.27 987.27 101.97 248.03 350.00 637.27 29.13
P 57.16 39.60 50.00 45.02 134.62 12.14 37.86 50.00 84.62 24.28
K 1482.90 532.00 650.00 1240.37 2422.27 242.53 407.47 650.00 1772.27 37.31
Ca 268.20 2270.00 261.76 2531.76 6.44 248 11) 254.00 2277.32
Mg 202.21 2007.00 188.40 2195.50 13.81 62.12 76.00 2119.57
1) Necesidades totales de una población, Cuadro 8.21.
2) Aporte de un suelo, zona este, Costa Rica (López y espinoza, 1995).
3) Recomendación promedio para Costa Rica.
4) Aporte promedio de la atmósfera.
5) Contenido total de la población menos extracción d ela cosecha.
6) Suma de aportes.
7) Extracción de 60 toneladas de fruta, Cuadro 8.6 (Tavares y Falquez, 1997).
8) Pérdidas calculadas con una eficiencia de: N: 70,87%, P: 75,72%, K: 62,69% (Aporte fertilización-extracción cosecha).
9) Balance disponibilidad = ganancias menos pérdidas.
10) Coeficiente de asimilación = extracción cosecha/aporte fertilización x 10.
Las pérdidas pueden darse por evaporación, tal es el caso del N, que en
suelos faltos de humedad, con fuentes como la urea, las pérdidas pueden llegar
hasta un 20%. Tal y como lo comprobó el autor en suelos del Valle de la Estrella
en Costa Rica, con aplicaciones de urea, donde se captaron las pérdidas de NH 4
en recipientes cerrados puestos sobre el suelo, con toallas de papel adheridas y
mojadas con H2SO4.
Otros elementos se pueden perder por erosión, en suelos inundados y
descubiertos, con lluvias fuertes después de la fertilización. Sin embargo, las
mayores pérdidas se dan por lixiviación en suelos de alta conductividad, pobres en
arcillas y materia orgánica, y bajo regímenes de alta precipitación, siendo el caso
del trópico húmedo. Varios autores han estudiado las pérdidas de elementos en
plantaciones de banano con resultados diversos.
Flores (1994), citado por los mismos autores, encontró una alta correlación
entre la precipitación y la pérdida de nutrimentos en suelos dedicados al cultivo de
banano, en la Zona Atlántica de Costa Rica. El catión que más se lixivió fue el Ca:
248 kg, seguido del Mg: 62,12 kg.
Bertsch (1995), estima las pérdidas para N, entre 30 y 50%; para P; entre
50 y 70% y para K, entre 20 y 40% (ver eficiencia de la fertilización)
Del (Curadro 8.22) es posible concluir que las pérdidas por diferentes
causas llegan a un 70.87% de N, 75.82% de P y un 62.69% de K, ello como
consecuencia de la necesidad de aplicar 350 kg. de N, 50 kg de P, y 650 kg de K
por hectárea por año, para mantener la productividad.
Del análisis del Cuadro 8.22, es posible concluir que si bien el balance de
disponibilidad es suficiente para cubrir las necesidades de la plantación durante 48
semanas sin agregar fertilizante, ello no es cierto, y pasadas 12 semanas es
posible encontrar deficiencias de los elementos mayores, por lo que se hace
necesario fertilizar.
FERTILIZACIÓN
La atmósfera.
Fertilizantes y enmiendas
Del Cuadro 8.5 se concluye, que del total de 237,80 toneladas de biomasa
generada por una hectárea de banano, con 1900 plantas en un ciclo de 404 días,
176,43 toneladas quedan como remanente en el campo pero en realidad sólo
27,93 toneladas de hojas llegan al suelo, junto con la porción más joven del
pseudotallo, que aporta 18,11 toneladas. Por lo tanto la mayoría de remanentes
orgánicos quedan inmovilizados y disponibles para la planta de sucesión.
orgánica que los suelos sin fertilización mineral, a pesar de que el crecimiento
vegetal haya sido aumentado por las adiciones.
Fertilización Química
Bertsch (1986), citada por los mismos autores dan los siguientes valores
para la interpretación de suelos para banano:
CUADRO 8.29.
Valor
Nutrientes Deficiente Nivel Crítico Óptimo
Ca [cmol (+)/L] 0,3 2,2 4,0-36
Mg [cmol (+)/L] 0,12 0,8 2,0-18
K [cmol (+)/L] 0,03 0,2 0,4-3
P (mg/L) 2 12 20-80
Mn (mg/L) 0,7 5 10-100
Zn (mg/L) 0,4 3 6-36
Cu (mg/L) 0,1 1 3-20
Fe (mg/L) 1 10 20-80
Fuente: Bertsch, (1986). Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE).
Ca y Mg extraídos con KCI 1 N, relación 1:10
K, P, Mn, Zn, Cu y Fe extraídos con NaHCO3 (Olsen Modificado), relación 1:10.
[cmol (+)/L] ó kg. = meq/100 ml ó g.
(mg/L) = µg/ml ó g%.
Fertilización Nitrogenada
nitrógeno en la hoja (Figura 8.18); esta última correlación puede invertirse con la
aplicación de altas cantidades de potasio (Arias, 1984).
4000 4000
3500 - 3500 -
3000 - 3000 -
2500 - 2500 -
Producción
Cajas/ha/año
2000 - 2000 -
43
.
N.S
0.7
r=
r=
1500 - 1500 -
1000 1000
- -
500 - 500 -
-
-
160 180 200 390 483 575 0 2.43 2.55 2.65
kg/ha de N % de la hoja
CUADRO 8.23.
País Clon N P K
Australia (NSW) Williams 180 40-100 300-600
Australia (N. Territory) Williams 100 100 630
Australia (Qld.) Mons Mari 280-370 70-200 400-1.300
Islas Canarias Dwarf Cavendish 400-560 100-300 400-700
Islas del Caribe Valery, Poyo 160-300 35-50 500
Honduras Valery 350 26 672
Panamá Valery 336 97 672
India Robusta 300 150 600
India (Assam) Dwarf Cavendish 600 140 280
Israel (Coastal Plain) Williams 400 90 1200
Israel (Jordan Valley) Williams 400 40 -1
Costa de Marfil (Azaguiene) Enano 110 - 190
Costa de Marfil (Nieky) Enano 180 - 310
Jamaica Valery 225 65 470
Taiwan Fairyman 400 50 750
Costa Rica Valery – Gran Enano
hoja de N desde 2,40 a 2,65 %, nivel considerado como bueno. El mismo autor
encontró en Palmar, Costa Rica, que el N dio incrementos significativos en la
cosecha; también recomienda la aplicación entre 275 y 350 kg N/ha/año para
mantener cosechas altas.
El autor ha usado durante muchos años con buen éxito 336 kg/ha/año de N,
en 13 aplicaciones por año. United Fruit Co. recomienda, 106 g por planta de urea,
cada dos meses hasta los ocho meses después de la siembra.
Fertilización Potásica
ensayos llevados a cabo por Standard Fruit Co y United Fruit eran bajos en K, y
hasta llegó a decirse que la fertilización con el macro nutrimento no era necesaria.
No fue sino hasta la década 1960, en que se tuvo una clara consciencia de la
fertilización potásica para la obtención de altas cosechas. Así Bhangoo et al
(1962), en ensayos sobre fertilización potásica en Honduras para el “Robusta”,
probaron con 180 kg de K 2O/ha/año y encontraron altos rendimientos, aumento
de peso del racimo, del promedio en el número de manos y buena salida
comercial del fruto. A iguales resultados llegaron Manica et al (1978) para la
fertilización potásica de los bananos en Brasil con la misma dosis.
Máximo producción
2594
2587
Máximo económico
2500
Producción 2400
2300
Producción
2200
2100
4000 4000
3500 - 3500 -
3000 - 3000 -
2500 - 2500 -
Producción
Cajas/ha/año
2000 - 2000 -
43
.
N.S
0.7
r=
1500 - r= 1500 -
1000 1000
- -
500 - 500 -
-
-
160 180 200 390 483 575 0 2.43 2.55 2.65
kg/ha de N % de la hoja
CUADRO 8.24. A
Efectos del Potasio sobre los Racimos y Características de los Frutos (Once Meses
Después de la Plantación).
Tratamiento K2O en la Peso del Número No. Longitud circunferencia Longitud / Peso de Volúmen Densidad Peso Peso Pulpa/
(g K 2O/planta: hoja racimo de de del fruto del fruto circunferencia los frutos de los pulpa cáscara cáscara
aplicación al (%) (kg) manos frutos (cm) (cm) (media) individuales frutos por fruto por fruto
suelo) (g) (cm3) (g) (g)
0 3,64 11 8 106 15,97 10,25 1,58 94,00 113,67 0,83 63,27 30,62 2,07
180 3,98 14 8 112 18,87 11,25 170 106,52 128,52 0,83 71,20 35,32 2,02
270 4,30 15 8 116 20,23 11,85 1,70 114,10 136,90 0,83 76,87 37,47 2,06
360 4,53 15 9 122 20,95 12,30 1,70 118,32 141,25 0,85 79,35 39,00 2,04
Significativo Si NS Si Si Si Si Si Si NS Si Si NS
S.E.(Error sta.) 0,41 0,18 0,57 0,14 0,06 0,005 0,65 0,44 0,032 0,42 0,44 0,029
CD (P< 0.05) 1,42 1,97 0,48 0,21 0,017 2,25 1,52 - 1,47 1,52 -
CUADRO 8.24. B
(Cont.). Efectos del Potasio Sobre la Calidad del Fruto (100 Días Después de la
Floración).
Tratamiento K2O en la Sólidos Acides Sólidos Azúcares reductor Azúcares no reductor Almidón
(g K 2O/planta: aplicación solubles (ácido solubles (%) (%) (%)
suelo) hoja totales cítrico) totales/
ácido cáscara pulpa cáscara pulpa cáscara pulpa
0 3,64 19,73 0,28 70 4,80 13,73 0,92 4,11 5,13 3,87
180 3,98 19,95 0,26 76 4,93 14,70 0,95 4,43 4,91 3,51
270 4,30 20,17 0,26 79 5,28 16,05 1,03 5,20 4,70 2,90
360 4,53 20,29 0,25 80 5,34 16,61 1,07 6,00 4,32 2,72
Fetilización Fosfórica
Fertilización Magnésica
López (1983), considera que para la Zona Atlántica de Costa Rica, 2000
kg/ha año de Dolomita son suficientes para satifascer las necesidades de Ca y Mg
de la planta de banano.
*
Comunicación personal Dr. Charles Segars D. Agrícola Ganadera Cariari S.A.
123
Fertilización Cálcica
Encalado
Los suelos de las zonas tropicales dedicados al cultivo del banano en Costa
Rica tienen propiedades que van de ácidas a ligeramente ácidas y altos
contenidos de Al intercambiable, debido a la utilización de fertilizantes
nitrogenados de reacción ácida; sin embargo no son considerados con problemas
graves de acidez (Jiménez y Segura, 1999). Además que los contenidos de Ca y
Mg tienden a ser bajos; y si se manejan de forma inadecuada o intensiva el
124
La acidez del suelo puede ser contrarrestada por medio del encalado, ésta
es una enmienda con aplicaciones masivas de sales básicas, siendo la más
utilizada el Ca, en forma de carbonato de calcio o dolomita (carbonato de calcio y
magnesio) (Berstch, 1995).
1. Corregir el pH, o sea, ocupar los lugares vacíos del complejo de cambio,
entrando en el lugar de los iones de hidrógeno u oxidrilos.
2. Neutralizar el aluminio y el manganeso tóxicos.
3. Flocular el suelo contribuyendo a una mejor agregación.
4. Ser nutriente vegetal.
Por otro lado Bertsch (1995), dice que el único objetivo que se persigue con
la aplicación de CaCO3 es la neutralización de la acidez intercambiable (del Al y
del H intercambiable), por medio de la transformación del ácido carbónico en CO 2
(que se volatiliza) y agua. Agrega que esto no sucede al aplicar CaSO 4, ya que en
este caso el ácido sigue presente y el pH no se modifica, quedando de esta
manera un medio muy favorable para volver a solubilizar el Al.
Para facilitar el trabajo se elaboró una fórmula modificada que combina los
criterios prácticos de las dos anteriores, se incluye el porcentaje de saturación de
acidez y el factor f como se notará a continuación:
Dice Primavesi (1982), que “el encalado hace ricos a los padres y pobres a
los hijos”. Agrega asimismo que el encalado no es una técnica sino un juego de
azar.
Eficiencia de la Fertilización
NITROGENO
Se lixivia:
En suelos con muy buen drenaje, y con la tabla de agua muy profunda.
Se volatiliza:
En suelos secos.
Se desnitrifica:
Cuando está presente como NO3, en suelos con mala aireación (condiciones
reducidas anaeróbicas), en los suelos total o parcialmente inundados y en los
volcánicos.
128
Se fija:
Se inmoviliza:
FÓSFORO
Se fija y precipita:
Se inmoviliza:
POTASIO
Se lixivia:
Se fija:
Formas de Aplicación
Fertilización Manual
CUADRO 8.25.
Fertilización Mecánica
Fertilización Aérea
Fertilización Líquida
Fertirriego
Generalidades
Cabe recalcar que este sistema es el más apropiado para fertirriego, ya que
permite mantener una zona delimitada de suelo húmeda y llena de nutrimentos a
disposición de las raíces, alcanzando de esta manera su mayor eficiencia.
Además, es un sistema muy preciso que permite suministrar a los cultivos
proporciones muy ajustadas a las necesidades reales (Bertsch y Rojas, sf).
Bombas inyectoras
Los fertilizantes líquidos son más fáciles de manejar, ya que evitan los
problemas de disolución, taponeos de las boquillas, tienen un precio menor que
sus equivalentes en fertilizante granulado, debido que demandan menos energía
para su producción; además que poseen características físicas y químicas bien
definidas, lo cual ayuda a que el control de calidad sea más sencillo (Agüero,
1994; citado por Bertsch y Rojas, sf).
Por otro lado, los fertilizantes que serán utilizados en el fertirriego deben
poseer ciertas características, tales como:
Alta compatibilidad.
Baja volatilidad.
Baja toxicidad.
Alta pureza.
Bajo precio.
Pérdidas: las que pueden ocurrir con frecuencia son las pérdidas de amonio,
esto sucede cuando se dan aumentos de temperatura o pH, por lo tanto las
sales de amonio no deben mezclarse con sustancias que produzcan pH
básicos.
AMONIO ANHIDRO 1
AMONIO AQUA: 20-0-0 2
SOL UREA : 23-0-0 3 ? Ø FITOTOXICO BAJO CIERTAS CONDICIONES
SOL NITRATO DE AMONIO: AN20, 20-0-0 4 ?
SOL UREA -NITRATO DE AMONIO DN 32, 32-0-0 5 ? ? GENERACION DE CALOR
SOL UREA -AMONIO; 33-0-0 6
SOL DI -AN: 18-0-0 7 ? ? ? COMPATIBLE
SOL SULFATO DE AMONIO: 8 ? ?
SOL FOSFATO DE AMONIO: 8-24-0 9 ? COMPATIBLE CON CIERTAS LIMITACIONES
SOL POLYFOSFATO DE AMONIO: 10-34-0 10 ?
SOL POLYSULFITO DE AMONIO; APS 20-0-40(S) 11 ? ? ? INCOMPATIBLE
SOL AQUA SULFURO 12 ? ?
SOL TIOSULFATO DE AMONIO; AMTHIO 12-0-0-26 (S) 13 ?
N- PHURIC 28/27; 28-0-0-9 (S) (UREA SULFURICA) 14 ? ? ? ? ?
N- PHURIC 15/49; 15-0-0-16 (S) (UREA SULFURICA) 15 ? ? ? ? ?
N- PHURIC 10/55; 10-0-0-18 (S) (UREA SULFURICA) 16 ? ? ? ? ?
SOL NITRATO DE AMONIO Y CALCIO: 17-0-0-8(Ca) 17 ?
HIERRO NITROSYL: 11-0-0-7 (Fe) 18 ? ? ? ? ?
ENQUIK 19 ? ? ? ? ?
ENSONE 20 Ø Ø Ø Ø Ø Ø Ø Ø ? ? ? ? ?
UNOCAL PLUS 21 Ø Ø Ø Ø
PROPEL 22 ? ? ? ?
SURPHTAC II 23 ? ? ? ? ? ?
ACIDO NITRICO 24 ? ? ? ? ? ? ?
ACIDO FOSFORICO (BLANCO) 25 ? ? ? ? ? ?
ACIDO FOSFORICO (VERDE) 26 ? ? ? ? ? ?
ACIDO SULFURICO 27 ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ?
AGUA 28 ? ?
UREA: 46-0-0 29 ? ?
NITRATO DE AMONIO: 34-0-0 30 Ø ?
FOSFATO MONO AMONICO: MAP 12-61-0 31
FOSFATO DIAMONICO: DAP 21-53-0 32
NITRATO DE CALCIO: 15.5-0-0-19 (Ca) 33
CLORURO DE POTASIO:0-0-60 34
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34
SOL TIOSULFATO DE AMONIO; AMTHIO 12-0-0-26 (S)
CLORURO DE POTASIO:0-0-60
ACIDO FOSFORICO (VERDE)
ACIDO SULFURICO
AMONIO ANHIDRO
ACIDO NITRICO
UNOCAL PLUS
UREA: 46-0-0
SURPHTAC II
ENSONE
PROPEL
ENQUIK
AGUA
ACIDO SULFURICO
UREA : 46-0-0
CUADRO 8.26.
Realizar un análisis del agua para verificar el contenido de sales como Ca, Mg,
carbonatos, entre otros.
Fertilización Foliar
Bertsch (1995), dice que los tiempos de absorción son los siguientes:
141
CUADRO 8.27.
las mezclas, mientras que otros no produjeron efectos detrimentales sobre ellas.
Se detectaron cambios importantes en pH, debido a la adición de algunos de los
fertilizantes foliares. El nitrato de potasio, la urea y el Humiforme N-6 no causaron
efectos detrimentales sobre el pH de la mezcla. No se observaron incrementos en
la fitotoxicidad de las mezclas fungicidas al adicionar los fertilizantes foliares. Las
variaciones en pH provocadas por algunos de los fertilizantes foliares podrían
afectar los fungicidas, por lo que se sugiere estudiar más detalladamente su efecto
sobre la actividad de los fungicidas antes mencionados, así como la respuesta
del cultivo a la fertilización foliar.
Fertilización al Pseudotallo
Fraccionamiento de la Fertilización
Tipos de Fertilizante
Fórmulas Físicas
cemento con buenos resultados. Estas mezclas son muy inestables, porque la
mayoría de los componentes son hidroscópicos, haciendo que las partículas se
aglutinen, lo que hace difícil su manejo. El almacenamiento debe ser por corto
tiempo, y el producto podría ser irritante a la piel del aplicador.
N: 540, P2O5: 143, K2O: 378, MgO: 36, S: 250 y CaO: 156.
CUADRO 8.28.
Fórmulas Químicas
Fórmulas Líquidas
Los productos concentrados líquidos son más económicos que los sólidos
y su manejo es simple.
Debido a las grandes pérdidas de elementos por lixiviación en los suelos del
trópico húmedo; se fabrican compuestos químicos recubiertos con materiales de
lenta descomposición, tales como azufre, plásticos, entre otros, que hacen la
liberación de los elementos lenta. Entre ellos se encuentran la urea recubierta con
azufre, que según Jaramillo y Basan (1976), citados por López y Espinoza (1995),
encontraron que cuando se aplicaba urea recubierta en comparación con urea
natural, había un incremento en la cosecha de un 18% en suelos de la Zona
Atlántica de Costa Rica. Además, López (1993), encontró que la aplicación de
urea recubierta en suelos livianos, permite reducir la dosis al 75% para obtener
resultados similares.
Estos fertilizantes son de muy fácil aplicación, pero sus precios son aún
muy altos, por lo tanto debe de investigarse mucho más con estos productos,
sobre todo en las condiciones climáticas del trópico húmedo.
Fertilización Orgánica
sigue siendo una fuente de energía y renovación para los suelos (Tisdale y
Nelson, 1982; citados por Saavedra, 1996).
La Materia Orgánica
La materia orgánica puede definirse como la fracción del suelo, que incluye
residuos vegetales y animales en diferentes estados de descomposición,
sustancias producidas por los habitantes del suelo, también tejidos y células de
estos organismos. Se conoce como fracción orgánica porque un volumen de suelo
unitario, multiplicado por cien, contiene una fracción orgánica, una fracción mineral
y un volumen porcentual del suelo que es ocupado por fases gaseosas y líquidas,
dentro del sistema (Kass, 1996).
La flora edáfica, los hongos, los actinomicetos, las bacterias y las algas
constituyen los microorganismos del suelo que aportan un porcentaje importante
de material orgánico una vez muertos, pero su principal función es degradar la
materia orgánica, mediante procesos de humidificación y mineralización. La
mineralización es una descomposición rápida de los residuos orgánicos, que los
convierte en compuestos minerales que poseen una formación química más
simple, tales como: dióxido de carbono (CO 2) que es un gas, agua (H 2O),
amoníaco (NH3), fosfatos (PO43-), sulfatos (SO42-), compuestos potásicos y otros;
es decir, es una transformación de la forma orgánica a la inorgánica, consecuencia
de la actividad de los micororganismos (Porta et al, 1994). La humidificación se da
a través de la actividad de los microorganismos, que al tomar los residuos
orgánicos los transforman en estructuras complejas conocidas con el nombre de
humus.
Humus
150
Sustancias Húmicas
El humus puede ser clasificado desde diversos puntos de vista, por sus
características micro y macromorfológicas, y por la forma como se distribuye y
mezcla con el suelo bajo condiciones ecológicas. Los compuestos húmicos se
clasifican según su composición química y propiedades físicas en huminas, ácidos
húmicos (pardos o grises), fúlvicos e himatomelánicos (Nuñez, 1985). Debido a
que las técnicas de extracción no han permitido aislar una sustancia húmica pura,
de forma empírica se han establecido tres fracciones: ácidos húmicos, ácidos
fúlvicos y huminas (Porta et al, 1994). El mismo autor menciona que el concepto
de materia orgánica que se adopta como equivalente a componentes orgánicos
incluye: materia orgánica no humificada (biomasa vegetal y animal senescente y
biomasa microbiana), humus (sustancias no húmicas tales como materiales
orgánicos sencillos, azúcares y aminoácidos, y materiales orgánicos de elevado
peso molecular como polisacáridos y proteínas) y sustancias húmicas (humus en
el sentido estricto).
(Schnitzar y Khan 1978; citados por Porta et al, 1994); la mayoría de estos
compuestos son fácilmente biodegradables y tienen una corta vida en los suelos.
Acidos Húmicos
Prat (1963), dice que los ácidos húmicos tienen efecto sobre las células
vegetales, ya que modifican la permeabilidad de las membranas celulares, y
permiten la penetración de los nutrientes quelatándolos en forma asimilable por las
plantas.
Poseen un alto valor secuestrante de cationes del suelo (Fe, Zn, Mn, Cu, Ca,
K), los desbloquean de sus formas insolubles y los ponen en forma disponible
para las plantas.
154
Desdoblan las formas insolubles de fósforo y permiten que este elemento sea
asimilado más rápidamente.
Acidos Fúlvicos
Huminas
Las huminas son componentes del humus del suelo que están formadas por
polímeros de alto peso molecular y uniones orgánicas de color oscuro. Son las
que confieren el color oscuro a los suelos, especialmente en los horizontes
superficiales; además son muy resistentes al ataque microbiano lo que les da gran
estabilidad, y por ende se acumulan en los suelos. Las huminas producen
sustancias orgánicas por condensación, pero también se pueden producir por
transformación de sustancias no húmicas del suelo como los ácidos orgánicos y
otros (Nuñez, 1985).
Como todas son parte del humus, el predominio de una u otra depende del
pH del suelo, condiciones anaeróbicas o aeróbicas, contenido de nitrógeno en los
residuos orgánicos y la actividad de microorganismos.
Efectos Físicos
menciona que hay mayor retención de agua por medio de los coloides orgánicos,
los cuales son altamente hidrófilos.
Efectos Químicos
Efectos Biológicos
Compost
158
Temperatura
entre 60 y 70°C (Cuadro 8.30) (FAO, 1983); temperaturas por encima de 71°C por
períodos prolongados son indeseables, ya que restringen el número de
microorganismos, además pueden solubilizar las proteínas hidro-solubles,
provocar alteraciones químicas y desprender amonio (IIRR-AVRDC, 1997).
Humedad
Aireación
Tamaño de partículas
Relación C/N
Cuadro 8.30.
Parámetros Valor
pH
Cuadro 8.31.
Cuadro 8.32.
Producto Cantidad en kg
Banano, raquis y otros desechos 50000
Roca fosfórica 500
Tierra 500
Excremento de ganado vacuno 1000
Carbonato de calcio 500
Gramíneas 500
Aserrín quemado 1000
Cama de:
Volumen:
37 m de largo
58 ton banano verde
1.20 m de ancho
17.4 ton banano maduro
1.40 m de alto
Cubierta de plástico
Tierra+cal+ceniza+roca fosfórica 5 cms
Excretas animales
10 cms
Bambú
Piso de Concreto
Aireación: Manguera o bambú cada 1.5 m.
Bokashi
Cuadro 8.33.
Rango
Análisis Unidad
Minímos a máximos
Nitrógeno % 1.24 a 1.39
Fósforo % 0.07 a 0.14
Potasio % 1.32 a 2.20
Calcio % 0.21 a 0.30
Magnesio % 0.11 a 0.20
Azufre % 0.07 a 0.09
Hierro Mg/kg 1221 a 2690
Cobre Mg/kg 6 a 14
Zinc Mg/kg 15 a 22
Manganeso Mg/kg 78 a 61
Boro Mg/kg 11 a 18
PH 6.11 a 9.71
Humedad % 68.2 a 80.7
Materia Orgánica % 68.7 a 88.0
C/N % 32.2 a 37.0
Fuente: Campos y Valverde, (1998).
164
Elaboración de Bokashi
Cuadro 8.34.
Producto Cantidad
Banano, raquis y residuos de cosecha 3 toneladas
Aserrín 40 sacos
Tierra 10 sacos
Estiércol 8 sacos
EM 16 litros (1 parte de EM por 1000 de agua)
165
* Se obtiene 3 toneladas de desechos triturados por un contenedor (960 cajas) de fruta exportada.
La tierra y el estiércol, aunque mejoran el Bokashi, no son absolutamente
necesarios.
Las camas se voltean a los 8 y 16 días, para ser aplicado al campo después
de dos semanas. (Ver Foto 8.15).
Vermicompost
Cuadro 8.35.
Rango
Análisis Unidad
Minímos a máximos
Nitrógeno % 1.36 a 1.83
Fósforo % 0.29 a 0.41
Potasio % 0.55 a 1.38
Calcio % 0.56 a 0.66
Magnesio % 0.30 a 0.45
Azufre % 0.12 a 0.31
Hierro mg/kg 13801 a 28000
Cobre mg/kg 44 a 85
Zinc mg/kg 49 a 94
Manganeso mg/kg 259 a 567
Boro mg/kg 38 a 52
PH 5.41 a 9.02
Humedad % 19.2 a 42.3
Materia Orgánica % 14.6 a 25.3
C/N % 6.23 a 8.5
Fuente: Campos y Valverde, (1998).
166
Alrededor de un 70 a 75% del sustrato que se utiliza como alimento para las
lombrices es convertido en abono orgánico (Fundación Hogares Juveniles
Campesinos, 1995b).
Elaboración de Vermicompost
CUADRO 8.36
Gallinaza
Según Ramírez (1980), citado por Corrales et al, (1990), en los años
cincuenta y sesenta el uso de abonos orgánicos, como excretas de gallinas,
declinó por los bajos costos de los fertilizantes químicos. Sin embargo, en los
últimos años ha recobrado su importancia por el aumento de los precios de los
fertilizantes sintéticos y por los movimientos ecologistas, orgánicos y sostenibles.
Cuadro 8.37.
Abonos Verdes
los nutrientes presentes en la materia orgánica, para que sean aprovechados por
las raíces de las plantas (Suquilanda, 1995).
Las plantas para abonos verdes no deben crecer mucho, ya que si aumenta
demasiado la relación C/N, imposibilita la acción de los microorganismos para la
utilización del nitrógeno del suelo (Rodríguez, 1989). Este tipo de abonos son una
fuente económica y conveniente de materia orgánica para reponer nutrimentos,
mejorar la estructura, reducir al mínimo la escorrentía y la erosión del suelo (FAO,
1990).