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Economía

SESIÓN 6
Una historia de amor y odio
Dentro de nuestra experiencia como consumidores venimos siendo testigos de los
esfuerzos de las empresas por captar nuestra atención, conseguir nuestra fidelidad y
lograr que de alguna forma seamos difusores del consumo de sus productos. Pues bien, en
estos escenarios es que estamos en presencia de la microeconomía, que dicho en palabras
sencillas es la parte de la economía que estudia la interacción entre dos protagonistas
principales: las empresas y las familias. En esta historia aparecen algunos actores
secundarios, uno de los más reconocidos atores secundarios en esta escena es El Estado,
considerado por algunos antagonista, considerado por otros un extra y por algunos otros
un héroe.

La relación entre empresas y familias no se da solamente en un rol de vendedores y


consumidores, en efecto las familias también resultan ser proveedores de las empresas,
ya que proporcionan a éstas fuerza de trabajo y las empresas las retribuyen con sueldos y
salarios.

En este tormentoso romance entre empresas y consumidores surgen triángulos amorosos


que le dan su sazón característica a muchos de las estrategias y es la interacción entre
empresas. No necesariamente la relación entre empresas debe considerarse una rivalidad
o una guerra. Ya que las relaciones entre las empresas no necesariamente nos darán un
resultado de ganador-perdedor, veamos el caso de Gastón Acurio, él tiene un restaurante
(Astrid y Gastón) pero en televisión se viene dedicando a promocionar a otros
restaurantes ¿Y a qué llevó todo esto? Pues a darle a Gastón a ganar mucho más de lo que
conseguiría si se dedicara solo a cocinar y vender su comida.

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El objetivo de Gastón al promocionar otros restaurantes en su programa no es
promocionar su imagen como un experto en comida, como buen chef entendió que la
tajada de pastel que representa el mercado, sería más grande si hace un pastel más
grande. Y se dedicó a promocionar la comida peruana en general, llevándola a un
posicionamiento único. Si recuerdas sus programas los protagonistas de cada episodio no
son los restaurantes que visita, sino los platos y busca el mejor Ají de Gallina de barrio y
luego va con otros chefs reconocidos para que preparen una versión de este plato con
alguna peculiaridad, ni siquiera él se promociona como el cocinero. Lo cual es una jugada
muy inteligente de su parte y es para nosotros una cátedra de cómo hacer crecer una
industria.

Hasta este momento hemos visto la relación de Gastón con los competidores (a los que
convierte en complementadores) pero existe un grueso de empresas con las que tiene una
alta interacción y también ha ayudado a despegar con fuerza, los proveedores. Los
proveedores de Gastón son campesinos o empresas agroindustriales que han sido
revaloradas tanto en los procesos que puedan seguir para la elaboración de sus productos
como por el precio que pueden tener los productos que logren la calidad que se espera.

En toda esta aventura culinaria las familias también han salido muy beneficiadas, tanto en
el rol de consumidores como en el rol de proveedores de mano de obra. Como
consumidores Gastón ha tocado un componente importante de la competencia perfecta,
la simetría de información. Y cuando hablamos de ser proveedores de mano de obra, nos
referimos al mercado laboral. La valiosa gestión de Gastón no solo permite generar más
puestos de trabajo y lograr un crecimiento en función al mérito por parte de los chef que
promociona en su programa, sino que le ha dado un gran valor a la labor del chef. Hace
unos 10 ó 15 años, un joven que les dijera a sus padres que quería ser chef
probablemente se habría visto con un par de maletas esperándolo para que empiece a
hacerse cargo de su vida sin el apoyo de sus padres. Hoy en día los estudios para chef

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reciben mucho apoyo y esto lo podemos ver en el crecimiento de la oferta de institutos de
esta especialidad.

Finalmente, El Estado. Cumple un rol variado dependiendo del enfoque que se le dé. Para
algunos es un antagonista porque el cobro de impuestos altos y las restricciones que
puede plantear son una piedra en el zapato para muchos empresarios. Este enfoque
puede ser incomprendido porque la idea de cobrar impuesto es poder financiar obras de
infraestructura y seguridad interna y externa para el país. Claro, en teoría. Pero esto no es
ajeno por completo en la práctica. Ya que la casuística de buenos y malos gobiernos es
muy amplia y no es materia de discusión de este curso. Pero si hay algo que podríamos
afirmar a ciencia cierta es que el sector privado siempre ha tenido un funcionamiento más
eficiente que el público (sobre todo porque las cadenas de mando no son tan complejas y
se pueden tomar decisiones con mayor celeridad), razón por la que algunos pueden
considerarlo como un extra.

Hoy por hoy, El Estado se ha convertido incluso en un coprotagonista para algunos. Las ya
famosas Asociaciones Público Privadas (APP) han permitido sincerar las necesidades de los
sectores productivos en cuanto a obras de infraestructura y permiten que El Estado pueda
realizar obras con impacto más efectivo en el crecimiento de las actividades productivas.
Incluso en temas de ejecución de obra se ve la transferencia de la eficiencia del sector
privado al público.

Cuando decimos que El Estado puede ser considerado por algunos como un héroe es
porque otro rol que El Estado cumple en esta historia es el de regulador. Algunas
perspectivas dan un enfoque de las empresas como agentes que buscan aprovecharse de
los consumidores, quienes son vistos en este mismo enfoque como víctimas del insaciable
hambre de las empresas. Por otro lado hay enfoques que consideran que el mercado tiene
su propia regulación en base al equilibrio que buscan los mercados en la puja de oferta y
demanda. Lo cierto es que el consumidor no es un agente indefenso, una de sus
principales armas es la información, salvo en escenarios extremos donde los monopolios

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tengan el poder absoluto. Pero aun así, no sería inteligente por parte del monopolio
ejercer políticas abusivas, ya veremos las razones.

Finalmente una buena gestión empresarial puede llevar a beneficiar incluso al Estado, más
allá de la recaudación de impuestos y retomando el caso de Gastón, su trabajo le ha dado
un gran impulso a la Marca Perú (junto con otras buenas gestiones) y ha permitido una
mayor apertura de los mercados extranjeros de nuestros productos.

Afilen sus lápices y saquen sus cuadernos de dibujo

Como dijimos al comienzo de este curso, estudiar economía es como estudiar dibujo. Ya
que en ambos casos hablamos de reflejar la realidad. Si queremos entender lo que son los
modelos económicos imaginemos que estamos en círculo alrededor de un caballo y todos
queremos dibujarlo. Al final de la clase encontraremos un dibujo distinto por cada
alumno, ya que ninguno ha estado en el lugar del otro como para ver exactamente lo
mismo que el otro.

En este momento más que entrar en detalle sobre cuáles son los modelos económicos,
entendamos cómo es que se concibe un modelo económico para poder discutir con las
reglas del juego claras un tema que puede resultar muy polémico.

En primer lugar, los supuestos. Los supuestos son la base de todo modelo como
mencionáramos en la clase anterior, un supuesto básico en las leyes de oferta y demanda
es el célebre CETERIS PARIBUS, las palabras mágicas que restringen al campo de acción y
por ende la validez del enunciado. Recordando un poco la clase anterior, CETERIS PARIBUS
nos deja claro que no debe haber ningún cambio en ninguna de las otras variables para
que las leyes mencionadas tengan validez, de lo contrario la ley de la demanda estaría
equivocada al comparar las ventas de helados en un barrio un día de semana con las
ventas en la playa un caluroso y concurrido día de verano.

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Los límites de los modelos estarán planteados por los supuestos y estos muchas veces se
basan en la realidad del momento en que fueron concebidos. Muchos de estos supuestos
pueden pasar inadvertidos, porque el momento político, tecnológico o histórico que pudo
haber sido el marco de la concepción del modelo simplemente ya no tienen vigencia.
Llevándolo a un caso extremo, un gobierno que fije los precios del mercado estaría
comportándose como los reyes feudales de la edad media, donde no se vivía un entorno
de libre mercado y competencia. Incluso si un país quisiera adoptar esta política se
enfrentaría a un mundo regido por estas leyes, permitiendo a sus pobladores o
empresarios migrar si no están conformes con esto. Tendría que llegar al extremo de
cerrar la entrada a mercados extranjeros aislando la economía y desarrollo tecnológico,
cultural y social del país.

En segundo lugar, la construcción de modelo económico requiere de observación. Ya


vimos que es necesario delimitar dónde y cuándo se está planteando el modelo. Como
toda ciencia que quiere establecer leyes, la economía requiere de observación.
Comparemos un poco con las ciencias fácticas (basadas en hechos irrefutables, como la
física y la química) la observación es más sencilla en estas disciplinas porque la
experimentación bajo las mismas condiciones es más viable. Si se quiere determinar la
aceleración de la gravedad, el mismo experimento de caída de un objeto puede (y debe)
repetirse cientos de veces teniendo en cuenta el peso, pesando el mismo objeto en cada
repetición, la toma del tiempo y la medida de la altura de la caída en cada repetición y
generar la documentación de los datos obtenidos en las diferentes repeticiones.

En el caso de las ciencias sociales esto no es tan fácil, porque el laboratorio de observación
es la sociedad misma y es imposible literalmente lograr a voluntad que las condiciones
que se dieron en una observación se repitan de forma idéntica al momento de una
segunda observación. Tendríamos que criar a más de una sociedad aislada de toda
influencia externa para poder verificar si nuestras observaciones pueden determinar las
mismas leyes y verdades en las diferentes repeticiones. Por eso las ciencias sociales se

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basan mucho en el registro histórico de datos que podrían determinar una interrelación
entre las variables. Una película donde se hizo algo similar a esto es THE TRUMAN SHOW
con Jim Carrey, donde se crea todo un estudio de televisión imitando una ciudad donde
todos son actores confabulados para que solo el protagonista viva su vida. En el desenlace
de la película el director le confiesa a Truman que creó para él mundo donde pudiera vivir
feliz y les recomiendo que vean la película para que vean el resto y los factores que no
consideró el director.

En tercer lugar, determinar las variables que intervienen. En todo modelo económico
encontraremos variables de dos tipos, endógenas (sobre las que se tiene control) y
exógenas (sobre las que no se tiene control). No podemos determinar cuánto vamos a
vender ni cuánto vamos a ganar, pero sí podemos determinar cuánto vamos a producir y
cuánto nos va a costar, la estrategia de promoción y venta y podemos escoger el precio
que le pondremos a los productos (fuera de que tenga buenos resultados o no, el
empresario es finalmente quien toma la decisión del precio que le pondrá a su producto).
Si bien no podemos determinar cuánto ganaremos, podremos estimar cuánto podríamos
ganar si hacemos una correcta correlación entre nuestras variables.

Finalmente el modelo económico busca establecer la relación que existe entre las
variables, algunos modelos son más enfáticos en la parte cuantitativa que otros, pero lo
cierto que es que cualitativamente siempre se establecerá una correlación entre dos o
más variables con supuestos que restrinjan la validez de esta ley. El campo de acción de
los modelos económicos es muy versátil, desde la determinación de las razones por las
que un empleado puede tener un mejor desempeño en el trabajo hasta las razones que
pueden llevar a un consumidor a preferir o no nuestro producto. Como cereza del helado,
un buen modelo económico determinará indicadores que permitan hacer una evaluación
constante de la validez de sus afirmaciones.

¡ADAM SMITH SE EQUIVOCO!

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Decía el actor que interpretó a John Nash en la película UNA MENTE BRILLANTE o A
BEAUTFUL MIND, les sugiero que vean la película ya que hablaremos mucho sobre ella en
clase. Que tengan una buena semana.

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