FIN DE LAPOBREZA

POR: LUISA MARTINEZ

INTRODUCCION:

Acabar con la pobreza en todas sus formas sigue siendo hoy en día uno de los más
grandes desafíos a los que se enfrenta la humanidad. Muchos temas se combinan; desde
la corrupción hasta el cambia climático, el comunismo y el extremismo, creando así
condiciones para que la pobreza extrema siga siendo ese flagelo que con tanta urgencia
hay que acabar. Todo lo anterior señala la necesidad de analizar de manera técnica la
magnitud del problema y las soluciones que pueden ser más efectivas para atender esta
dificultad.

Para lograr erradicar la pobreza hay que trabajar en varios sectores que resulten eficaces
para poco a poco darle fin a este fenómeno; si bien por el Departamento nacional de
planeación DPN, considera que la cantidad de personas que viven en la extrema pobreza
disminuyo en los años 1190 y 2015 pero aun demasiadas luchan por satisfacer sus
necesidades más básicas.

Por ello, si en una sociedad hay muchos pobres, toda la sociedad es pobre y
subdesarrollada.

DESARROLLO:

Sin duda la pobreza es relativa y se mide de diferentes formas. Cualquier definición de

pobreza exige el análisis previo de la situación socioeconómica general de cada área o
región, y de los patrones culturales que expresan el estilo de vida dominante en ella. Por
ejemplo para un habitante de un país desarrollado ser pobre tal vez signifique no tener
automóvil, casa de verano, etcétera, mientras que en un país no desarrollado, en vías de
desarrollo o subdesarrollado, signifique no tener que comer, vestir o con que curarse. Sin
embargo, en sus respectivas sociedades, ambos son pobres, porque pertenecen al escalón
más bajo de la distribución del ingreso.

Para resumir, nada menos que el 80% de la población mundial vive en la pobreza. Las
cifras de personas que carecen de lo básico para sobrevivir con un mínimo que garantice
un nivel elemental de salud son altas, como por ejemplo: más de 1,200 millones de seres
humanos no tienen acceso a agua potable; 1,000 millones carecen de vivienda estimable;
existen 840 millones de personas mal nutridas, de los cuales 200 millones son niños
menores de cinco años, y 2,000 millones de personas padecen anemia por falta de hierro;
880 millones de personas no tienen acceso a servicios básicos de salud; y 2,000 millones
de personas carecen de acceso a medicamentos esenciales. Cabe destacar que la falta de
salud no es ni causa ni efecto de la pobreza, es un componente más de la misma, un
hecho sustancial a ella y un parámetro que, quizás como ningún otro, ayuda a
identificarla.

La pobreza extrema es el origen de gran parte de la problemática en materia de

desarrollo. Se trata de un mal que afecta a más de setecientos millones de personas en
todo el mundo y cuyas consecuencias resultan fatales: mortalidad de la población,
desnutrición, trabajo infantil, dificultad o imposibilidad de acceso a agua potable y a unos
servicios sanitarios mínimos, problemas de gestión de residuos, con las problemáticas de
salud e higiene derivadas de estas, es que, la pobreza va más allá de la falta de unos
ingresos mínimos para contar con cierta calidad de vida, se trata de un problema de
derechos humanos, razón por la cual debe ser priorizado en los diferentes proyectos de
cooperación.