Ensayo académico: Educación humanista.

INTRODUCCIÓN

Ha transcurrido el primer mes en el que se ha analizado a gran detalle una

fabulosa obra literaria “Educación humanista” de Martín López-Calva, Una nueva

visión de la educación desde la aportación de Bernard Lonergan y Edgar Morín.

Literatura de gran importancia, que podría servir como referencia para analizar

nuestro modelo educativo actual y nuestro quehacer educativo en las aulas de

nuestra comunidad. Libro de gran aportación académica, se encuentra dividido en

dos tomos, es por ello que a continuación en las siguientes líneas, se redactará un

ensayo en el que se hace referencia al capítulo I.

En este ensayo que se presenta, aborda el sentir y pensar de la escritora,

después de haberse empapado de una lectura tan compleja, fascinante e

interesante. En él se ha profundizado cada línea, cada espacio dedicado a una

reflexión relacionada al ámbito educativo, espacio dónde ella se desenvuelve de

manera profesional, como maestra de una escuela primaria que se encuentra en una

comisaría de Tekax.

Nuestra época actual, nos obliga a que los profesionales de la educación,

estemos actualizados, informados e inmersos en casi todos los aspectos de la

sociedad, que de manera constante seamos lectores, autodidactas, personas

analíticas y reflexivas, que nuestra práctica docente contribuya de manera

significativa.

En el libro “Educación humanista” de Martin López Calva, se aborda

cuestiones relacionadas a la educación, la humanización, el diálogo, lo complejo,

 Ensayo académico: Educación humanista.

complejidad, organización, transformación, etc. En base a eso es que se hace un

análisis crítico acerca de los aspectos ya mencionados.

Algo que llama mi atención es lo que a continuación se enuncia.

“Parece haber claridad en que nos encontramos en una etapa de transición y

que el modelo de organización del planeta, el tan llevado y traído “orden mundial”

parece estar agotado. Se necesita entonces un cambio de orientación en la

humanidad, una verdadera transformación”.

Como menciona López-Calva 1 en su libro, en el que señala que algunos

autores lo han llamado “nuevo renacimiento”, otros hablan de un “verdadero cambio

de época” (Gorostiaga, 1995). Considero que a más de 20 años que el autor lo

menciona, concuerda con nuestra actualidad, es necesario que haya un cambio, una

nueva orientación en la humanidad.

DESARROLLO

Como profesional en el ámbito educativo considero que los tiempos han

cambiado, nos encontramos en un mundo, en el que las nuevas generaciones de

estudiantes, nos exigen estar más preparados, en un mundo globalizado, donde la

tecnología, la televisión, los móviles, sobrepasan por encima de los libros, los

valores, el respeto, la educación, etc. Es por ello que, creo firmemente que

debemos crear ideas humanistas, mediante un diálogo y una comunicación

constante, debemos generar una conciencia en nuestros alumnos, respecto a las

1
López-Calva (2009) p. 23.
 Ensayo académico: Educación humanista.

situaciones que vivimos hoy en día. Lopéz- Calva 2 señala lo siguiente: Cómo

menciona Ortega y Gasset. Debemos crear ideas humanistas a “la altura de

nuestros tiempos” y que pueda responder a los desafíos de estos tiempos,

concretos, con una visión de ser humano renovado, que sea dinámica y abierta.

En la actualidad, mi labor docente la realizo en una comunidad, que se

encuentra a más de dos horas de la ciudad, al sur de nuestro estado, esto me ha

permitido, revalorar y conocer las comunidades indígenas, que llevan la contraparte,

no están tan involucrados con las tecnologías, como el móvil, tabletas, el internet, sin

embargo, la televisión juega un papel muy importante para ellos, están gran parte

del día, frente a un televisor, sus padres se encuentran trabajando de 6am a 6pm,

en una empresa agrícola, entonces la gran mayoría de los infantes se queda al

cuidado de los abuelos, ahí es donde el docente juega un papel importante.

A nosotros como profesionales de la educación nos corresponde generar de

manera positiva una conciencia significativa, que favorezca a los desafíos que

enfrentamos, desde nuestras aulas hay que crear y construir posibilidades en las

que hagamos reflexionar a nuestros alumnos, respecto al mundo en el que

queremos o deseamos vivir, como menciona Morín 3 el no poder construir el mejor de

los mundos posibles, no impide que sea posible construir un mundo mejor.

No impide que nosotros no aportemos es granito de arena, esto puedo relacionarlo a

la idea que tienen, o que tenían los alumnos de la comisaría donde trabajo, en la

que la única aspiración, era pensar que después de la secundaria, ellos irían a

2
López-Calva (2009) p. 30
3
Morín (2006) p.137.
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trabajar a la empresa agrícola y ser como sus padres, como sus abuelos, estar como

jornaleros o recolectores de vegetales y cítricos, sin embargo, en estos casi dos

años en los que estoy inmersa dentro de este contexto, voy logrando que los

alumnos, comprendan que no es la única opción, que hay un gran abanico de

oportunidades, que ellos tienen que hacer esa diferencia, y hacerles sentir que entre

ellos está el futuro médico de la comunidad, los próximos maestros o el Director de

esta escuela, Director del Colegio de Bachilleres, o inclusive dueño de una empresa

agrícola, dueño de una empresa ganadera, y así ellos podrían contribuir a que en la

comunidad hayan los servicios que ellos merecen y necesitan, que la comunidad

puede crecer de manera positiva, que no haya carencias, que los que se

beneficiarán son sus familias y sus amigos.

Ahora me doy cuenta que con el paso del tiempo, a alguno le he tocado el

corazón, ya que en el día menos esperado escuchas a una alumna decir, “Cuando

yo sea grande quiero ser una maestra como la maestra Dianela”, y no puedes evitar

interrumpir la conversación y responderle, que no, que ella “será mucho mejor”, eso

es algo que te llena de satisfacción, que te inspira a ser mejor, que te mueve para

dar lo mejor de ti, es algo que impulsa a prepararte y construir junto con ellos más

estrategias que favorezcan el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Lo anterior lo puedo relacionar con dos párrafos del texto de López-Calva 4

en el que se menciona lo siguiente: “Ante esta tendencia parece ser que nos

encontramos claramente frente al desafío de lograr a través del diálogo y del debate

de las inteligencias, la cooperación que sume voluntades y genere compromisos

4
López-Calva (2009) p. 24.
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hacia la tarea colectiva”. Sin duda alguna es a través del diálogo en el que podemos

mover esos corazones e inspirarlos.

El segundo que me pareció sumamente acertado de López- calva 5 “Así como

hay en la crisis una tendencia positiva y constructiva, una posibilidad abierta para la

toma de decisiones humanizantes y generadoras de un mundo mejor, una potencial

fuerza de transformación a partir de decisiones inteligentes, responsables, que se

centran en el plano de la humanidad y no en la de los simples intereses personales o

grupales inmediato”. Intereses que propicien un bienestar común, que no solo

involucre al bienestar de las familias, sino también a la naturaleza, la sociedad, y

que vaya más allá, que trascienda, definitivamente que se tomen decisiones

inteligentes, decisiones humanizantes y generadoras de un mundo mejor, acorde a

una época actual.

Sin duda alguna, todo esto me hace pensar en dos términos “lo complejo y la

complejidad” que abarca en nuestro sistema educativo, en el modelo, el curriculum,

en las teorías, en las estrategias y formas de enseñanza.

Lépez Calva 6 menciona “Introducir la complejidad en la educación es el primer

vector para conseguir esa conversión profunda que reforme la dinámica de crisis y

contribuya a crear una nueva época a partir de un nuevo humanismo”. El segundo

vector necesario a partir de la complejización de la educación será el de la

orientación de la educación para formar personas capaces de vivir la complejidad y

de comprometerse a aportar elementos de humanización en el mundo complejo que

5
López-Calva (2009) p. 26.
6
López- Calva (2009) p. 34
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les toca vivir”. Efectivamente, concuerdo con las dos afirmaciones de López Calva,

introducir el humanismo, a nuestra época, a partir de un nuevo humanismo, los

docentes debemos estar centrados en esa línea, es de admirar a aquellos

profesionales de la educación que lo propicien, es necesaria una orientación

constate, en este mundo tan complejo.

La literatura menciona una pregunta que provoca ruido en mí, ¿Cómo

complejizar la educación desde la transformación de la perspectiva que implica

entender el hecho educativo como un proceso complejo y no como una actividad

simple? A esto, puedo responder lo siguiente: Considero que lo primero, es hacer un

análisis exhaustivo, minucioso, de la complejidad de la educación, conocer el

mundo en el que estamos inmersos, conocer el contexto, las situaciones, investigar,

innovar, los medios, los contenidos, los fines de la educación, conocer a lo más

importante de nuestro quehacer educativo, “los estudiantes”.

SÍ, el ámbito educativo es tan complejo, entonces nosotros debemos crear

las condiciones de enseñanza, que favorezcan de manera significativa el bienestar

de la sociedad, por ello la educación no se trata de una actividad o suma simple

de elementos, sino de una articulación sistémica que afronte las situaciones que se

nos presenten, ser flexibles, hacer ajustes cuando sea necesario o cambiar de

dirección, los docentes todos los días aprendemos algo nuevo y tenemos que

comenzar de nuevo a innovar y reinventarnos.

 Ensayo académico: Educación humanista.

CONCLUSIÓN

Ante un mundo globalizado y pensando en nuestra época actual, mi quehacer

educativo debe renovarse cada día, considero que debo propiciar en mi aula una

educación más humanista, más flexible, en la que los sentimientos, emociones y

felicidad de mis alumnos sea el punto fundamental.

Este capítulo de libro ha causado en mí un momento de análisis y reflexión,

ha provocado en mí, un sentimiento de alegría y reafirmo con esto, que la profesión

que elegí, fue la correcta, que aún tengo mucho por aportar en el salón de clases, y

por ende en la comunidad en la que laboro.

Recalco que nuestra época actual, nos obliga a que los profesionales de la

educación, a que estemos actualizados, informados e inmersos en casi todos los

aspectos de la sociedad, que de manera constante seamos lectores, autodidactas,

personas analíticas y reflexivas, que nuestra práctica docente n verdad sea un

agente para el cambio positivo.

Enfatizo que nuestro motor y centro de nuestro quehacer educativo, son por

siempre y para siempre “los alumnos”.