La equivalencia de estos dos criterios para la interferencia constructiva de los rayos X por un

cristal se deduce de la relación entre los vectores de la red recíproca y las familias de los
planos de red directa. Supongamos que los vectores de onda incidentes y dispersos, k y k ',
satisfacen la condición de Laue de que K = k'-k sea un vector de red recíproca. Debido a que
las ondas incidentes y dispersas tienen la misma longitud de onda, k’ y k tienen las mismas
magnitudes. Se sigue entonces que k’ y k forman el mismo ángulo 𝜃 con el plano
perpendicular a K. Por lo tanto, la dispersión se puede ver como la reflexión de Bragg, con
ángulo de Bragg 𝜃, de la familia de planos de red directa perpendicular a la red recíproca
vector K.